español

Somos los mentores de nuestros hijos

TRANSCRIPT

Yo llevo casi 40 años trabajando con niños pequeños en el margen de edad de 0 a 3 años, mi especialidad es desarrollo motor más que nada y he trabajado con niños con incapacidades en su desarrollo y con niños que se están desarrollando normalmente también, y a pesar de que llevo tantos años en ese campo me apasionan los niños, pienso que los niños son los recursos más grandes que tenemos entre nosotros y debemos invertir en ellos así que yo doy gracias a Dios por recursos como ese que están dándole la capacidad a los padres, las herramientas para hacer un trabajo excelente en la crianza de sus niños específicamente en esa edad de los 0 a los 3 años, así que por favor aprovechen esos recursos ¿no? no pierdan esa oportunidad.

Y a través de mi carrera he visto cómo el factor principal para que un niño logre su mayor potencial son los padres a cargo de ese niño, no hay secretos, si un niño está progresando, aprendiendo bien es porque hay alguien que está invirtiendo sus recursos en cuidar ese niño, en darle lo que necesita para que llegue a un nuevo nivel y pueda en el futuro aceptar otras oportunidades y retos. Así que les animo a que esa sea la actitud de todos nosotros, a invertir en los niños no importa en qué sea; muchos de nosotros no tenemos niños pero tenemos sobrinos, otros en el trabajo, hagamos todo lo que podamos por invertir en la vida de esos niños.

Así que profesionalmente pues cuando yo tuve a nuestra primera hija hace 32 años yo sabía bastante acerca del desarrollo pero cuando uno tiene un hijo uno se da cuenta, aún como profesional me di cuenta que sabía muy poco y que en realidad el aprendizaje real estaba comenzando con tener a nuestra primera hija. Y bueno yo me percaté de que yo sabía muy poco y me di cuenta que ese niño tenía la capacidad de volcar nuestra vida patas arriba, un cambio dramático y todos los que han sido padres, que están empezando esa carrera saben a qué me refiero, uno cambia sus prioridades. Cosas que uno jamás pensaba que iba a hacer comienza a hacerlas, sentimientos que uno jamás había tenido florecen en el corazón, es una experiencia maravillosa.

Es una criaturita, un ser tan pequeño que te cambia la vida pero que a la misma vez tú tienes la responsabilidad de cambiar en la vida de esa persona, de ayudarlo a crecer, a desarrollarse, pero en ese proceso las personas más cambiadas y más requetecambiadas somos nosotros los padres y yo doy gracias a Dios por eso, por esa bendición de la maternidad.

Como padres se nos confía un pequeño ser que está hecho a la imagen y semejanza de Dios, es un ser que lleva nuestro ADN biológico, de sus padres pero nunca olviden que también tiene el ADN de su padre celestial, esa criaturita, y nuestra mayor encomienda en la vida como padres es nutrir a ese niño para que llegue a ser, para que se llegue a cumplir el destino y el propósito de Dios en esa vida plenamente, que no se desperdicie nada, ningún don que un niño pueda tener, porque los estamos ayudando a seguir adelante.

Como cada papá y cada mamá, yo sé que ustedes son como nosotros también, como padre y madre, desean que sus hijos tengan éxito en todos. A uno se le rompe el corazón cuando el chiquito de uno no puede lograr algo, así somos nosotros los padres, y una de las peticiones más importantes que nosotros podemos presentarle al Señor es que Él nos dé toda la sabiduría que necesitamos para guiar a nuestros hijos en todas las áreas, no solamente en lo educativo sino en lo espiritual, en lo emocional, en todas las áreas. Nosotros somos los mayordomos de los recursos que ese niño tiene y tenemos que sacarle el mayor recurso, el mayor provecho para que florezca en todo el esplendor que Dios tiene intención que ese niño crezca.

En el hogar como padres nosotros somos los primeros evangelistas de esa criaturita, el hogar es donde nuestros hijos ven a las Escrituras y los principios bíblicos hacerse una realidad, y es en el hogar donde nosotros tenemos que tener tanto cuidado de que no haya una desconexión entre lo que nosotros aparentemente creemos en lo espiritual de la Palabra de Dios y cómo vivimos nuestra vida, no debe haber desconexión, debe haber una fluidez absoluta. Ese niño debe crecer en un hogar donde a cada momento salga de la boca de sus padres principios bíblicos que lo guíen y que lo mismo sea domingo en la Iglesia que lunes o martes y que el resto de la semana, esa es nuestra encomienda, que cada niño que esté en nuestros hogares los niños crezcan amando al Señor desde pequeños.

Yo creo que es nuestra responsabilidad ser mayordomos de todos los recursos que ese niño trae consigo en todas las áreas pero especialmente en lo espiritual, nunca lo olvidemos. Cuando nosotros criamos no podemos estar improvisando estrategias según nos sintamos o según vengan las circunstancias, los criamos de esta manera si nos sentimos así o dependiendo de tal o cual circunstancia, no debe ser así, nosotros en nuestra paternidad no podemos estar improvisando.

El tiempo va a volar y se lo digo por experiencia, ya yo tengo la perspectiva de ser abuela, así que nuestro nido como dicen por ahí popularmente está vacío, no se ha vaciado, mas bien se ha llenado de más gracias a Dios pero no están con nosotros en la casa, y nuestra responsabilidad es aprovechar cada momento porque el tiempo es tan corto y vuela tan rápido, y muchas veces en nuestra cultura norteamericana ya los niños a los 18 años van a la universidad, ya no están en casa así que nosotros tenemos que aprovechar cada minuto que ese niño está bajo nuestro techo, esa niña está bajo nuestro techo para inculcarle el amor al Señor, para enseñarle en todas las áreas de la vida.

Cuando nosotros comenzamos un gran proyecto o una gran obra como es la paternidad nosotros tenemos que definir desde el principio qué queremos lograr. Cada papá, cada persona que trabaja con niños se debe preguntar ¿cuál es mi meta, cuál es mi visión del futuro de ese niño o de esa niña? esa es una pregunta que debemos estar repasando en nuestra mente y contestándola con acciones concretas no solamente con buenos deseos y sueños, sino poniendo todo de nuestra parte para que ese sueño que nosotros tenemos acerca de la vida de ese niño que debe ser el mismo sueño que Dios tiene, se haga una realidad, esa debe ser nuestra encomienda para cada niño.

Y me temo que como padres nosotros tenemos la tendencia a subestimar la capacidad de nuestros niños pequeños para entender conceptos bíblicos. Cuando es un tiempo tan fructífero, la tierra está fértil tenemos que enseñarles a nuestros niños conceptos bíblicos, guiarlos, mostrárselos, el Evangelio tiene que hacerse real en nuestro hogar, en el ámbito del hogar primero y luego en otras áreas por lo mismo.

Y un ejemplo de cómo un niño pequeño puede entender conceptos bíblicos profundos llegó por cortesía de mi yerno. Desde que nuestro nieto Caleb tenía un año de edad Miguel, así se llama su papá, comenzó a entrenarlo en los conceptos de sabiduría, prudencia y dominio propio y usted dirá: ¿qué, un niño chiquito aprendiendo acerca de sabiduría, prudencia y dominio propio? y pues así mismo es, yo misma me sorprendí de esa enseñanza que él estaba dando.

Y lo que pasaba es que cada vez que el comportamiento de Caleb era menos que deseable Miguel lo convocaba a que lo acompañara a otra habitación y cerraba la puerta ¿para qué? para darle privacidad a él, para poder corregirlo él solo con el niño para que no se avergonzara, y a cada conversación cuando Caleb violaba una regla o algo comenzaba con esta pregunta: Caleb ¿qué tú eres? esa pregunta era así a lo que Caleb invariablemente respondía: soy un niño sabio, prudente y con dominio propio, y entonces su padre fácilmente lo dirigía en una conversación apropiada para su edad y su conocimiento, claro, donde le hacía entender cuáles eran las expectativas en términos de su comportamiento, qué regla había él violado, y lo llevaba a examinarse a sí mismo para ver cuál era su responsabilidad en cuanto a eso que él había violado.

Un proceso muy interesante que todavía sigue funcionando, y claro, les aclaro, su comportamiento no es perfecto como todo niño, es un niño después de todo, sin embargo lo que yo he visto que ha quedado de ese proceso que comenzó tan temprano es que Caleb tiene una transparencia con sus padres, él va a donde ellos, cuando le preguntan algo él dice: sí yo hice eso y asume su responsabilidad, y está poniendo todo de su parte para aprender y discernir lo que es bueno y lo que es malo, lo que honra a Dios y lo que deshonra a Dios, y eso es un proceso maravilloso, y yo doy gracias a Dios porque a Miguel se le ocurrió tal estrategia que él ha sacado lo mejor que había en la mente y en el espíritu de Caleb para ponerlo por obra y es algo que todavía sigue dando fruto.

Aunque nosotros como padres muchas veces no admitimos esto porque es difícil de admitir, muchas veces nosotros actuamos como si los niños fueran una interrupción, pero los niños no son una interrupción que tenemos que resolver para entonces hacer las cosas que verdaderamente son importantes en la vida, los niños nunca son una interrupción, podemos estar ocupados o haciendo otras cosas pero los niños nunca son una interrupción y ellos son el ministerio más importante del momento.

Yo te pido que ores para que Dios te dé la sabiduría y el entendimiento para ver la sabiduría en eso, cuando lo tedioso de la vida, cuando las ocupaciones, cuando el cansancio, cuando la misma acción repetida que ya dices: pero yo ya estoy cansado, en el cuidado de tus hijos, especialmente si tienes más de uno que se hace más complicado todavía, en ese momento reconoce la belleza de ese momento y disfrútala porque muy pronto no va a estar, muy pronto vas a decir: ay ojalá fueran chiquitos otra vez, pero los niños crecen, así que pídele a Dios eso activamente, que Dios te dé los ojos para reconocer la belleza de esos momentos y sacarles el máximo provecho.

Todos sabemos que criar hijos no es fácil ¿no? requiere paciencia, requiere determinación, intencionalidad continua en medio de un mar de miles de responsabilidades porque todos tenemos muchas cosas que hacer, y en medio de eso nosotros tenemos que renovarnos en paciencia, en enfoque para seguir haciendo la tarea que Dios nos ha dado.

Yo recuerdo lo difícil que era para mí sacar tiempo para leerle a nuestras hijas, a veces ellas tenían un libro favorito y ellas en vez de leerlo una sola vez querían leerlo dos y tres veces, o sea una vez tras otra. Les confieso que eso mi enojaba y a veces me salía la tentación de demostrar mi enojo y pensar: ¡qué injusto, cómo se les ocurre después que una mujer ha trabajado todo el día, que ha hecho esto y esto, y ahora tú quieres que yo te lea ese libro otra vez! y a pesar que tenía la tentación de que me saliera el monstruito que todos llevamos adentro supe, porque sabía lo importante que era eso, podía entonces complacerlas ¿y saben lo que ha pasado? pues uno que ellas son amantes de los libros y otra, son memorias que nosotras hemos podido atesorar hasta el día de hoy así que vale la pena, porque esos momentos nos ayudan a establecer bases para muchas cosas en el futuro incluyendo el vínculo del amor que se hace más fuerte.

Nunca es demasiado temprano para empezar a leerles a nuestros hijos. Si usted todavía no tiene o está esperando bebé o está pensando en encargar bebé empiece hasta a comprar libros, rompecabezas, cositas que ellos más adelante, que usted las va a tener ahí ya listas, nunca es suficientemente temprano, de hecho hay programas ahora, especialmente en los cuidados intensivos donde ya se les insta a las mamás a leerles a sus hijos desde que están adentro o en otros casos cuando han nacido prematuros, así que nunca es muy temprano para buscar los materiales apropiados y leerles a nuestros niños.

Y aquí solamente un pequeño aparte que pude expandirlo en la mañana pero no hay tiempo ahora, tengamos cuidado con los aparatitos móviles que están en donde quiera, los jueguitos, todo lo que está en esos aparatitos no es apropiado para los niños pequeños y a la larga puede hacerles daño, eso simplemente como cautela, ya hay muchos estudios acerca de eso y está comprobado que es dañino para ellos así que si usted puede ser portavoz de ese mensaje se lo agradezco infinitamente.

Como padres Dios nos ha confiado la tarea de ser los mayordomos y los promotores de todo el potencial en nuestros hijos, y como sus mentores principales nosotros tenemos que darnos a la tarea de varias cosas y la primera es conocerlos personalmente. Nuestros niños no son una extensión de nosotros, son individuos: cuando nacen ya tienen características únicas, intereses únicos, son individuos así que es bien importante que nosotros nos demos a la tarea de descubrir qué les gusta, qué les disgusta, qué intereses tienen y ayudarlos a construir sobre esos intereses que ya ellos tienen, porque nosotros que cada, si nosotros tenemos más de un hijo veremos que cada uno es diferente totalmente uno del otro, cada uno tiene sus propias cualidades y su propio temperamento y es importante que nosotros nos tomemos el tiempo de conocerlos así personalmente.

Otra tarea que nos corresponde como los mentores de nuestros hijos es ser intencionales en proporcionarles el ambiente que los atraiga a explorar y a aprender más, esa es nuestra responsabilidad, y recuerden que cada uno de ustedes es el factor más importante en ese ambiente y usted va a ser el que le va a modelar en diferentes áreas, cómo comunicarse, cómo resolver problemas, cómo correr, todo, nosotros vamos a ser los que les vamos a modelar todo eso y a que se les cree el ambiente que ellos deseen imitar lo que nosotros les estamos enseñando.

También nosotros tenemos que compartir con nuestros hijos la alegría de la exploración y el descubrimiento. Todos nosotros si estamos aprendiendo algo nuevo, explorando algo nuevo ¿verdad que no es lo mismo hacerlo solo que acompañado? cuando estamos acompañados tiene un sabor diferente, hay una alegría diferente y como padres nosotros tenemos que estar ahí, en inglés es la palabra cheerleader, animadores, el que está ahí aplaudiendo y motivando al niño, animándolo a que siga explorando más.

Una vez, un ejemplo rápido, mi hija una vez vió un pajarito en el patio que se estaba muriendo bien pequeñito que se cayó del nido y ella me buscó para que yo la ayudara a sanar el pajarito, y eso, ella aprendió tanto con ese proceso, de hecho no creo que fue por eso necesariamente pero años después escogió la enfermería así que era algo que ya estaba dentro de ella, y ella me enlistó para montar una sala de emergencias para el pajarito. El pajarito murió unas horas después pero eso nos ayudó a ella y a mí a que ella supiera que yo la apoyaba en sus intereses y tuvimos unas conversaciones maravillosas acerca de filosofía y de las cosas espirituales porque yo me tomé el tiempo de acompañarla en ese descubrimiento y en esa exploración, y esas oportunidades se dan diariamente, el asunto es no pensar que estamos tan ocupados que no podemos aprovechar esas oportunidades.

Y el último, otro recurso que nosotros debemos aprovechar de estar ahí para nuestros hijos en la mentoría para ellos es compartir el gozo de dominar una destreza, en inglés se llama mastery, compartir el gozo de dominar una destreza. Los niños pequeños cuando se les mete algo en la cabeza, por ejemplo que quiero dominar el caminar eso practican, practican, practican, qué maravilloso que nosotros estemos ahí acompañándolos en ese proceso y aplaudiéndoles también porque otra vez eso va a motivarles a ellos aún más a querer dominar cosas aún más complejas.

Así que estas cuatro áreas, primero que son las que nosotros como padres o cualquier persona que tiene niños a su cuidado, especialmente niños pequeños, son conocerlos como seres únicos, como los individuos que son, proveerles un ambiente espiritual emocional que les facilite que ellos imiten la comunicación y el modelaje que nosotros estamos ofreciéndoles, acompañarlos activamente en su gozo de explorar y descubrir y en su gozo de dominar, esas cuatro. Si nosotros hacemos esas cuatro cosas con los niños que están a nuestro alrededor vamos a producir gran fruto.

Lo primero es que esas experiencias van a ser escritas en el libro de memorias de nuestros hijos, van a estar ahí por siempre, segundo, te van a posicionar a ti como un recurso importante en la vida de ese niño y más adelante te van a volver a buscar para que tú estés acompañándolos en ese proceso, tercer fruto es que van a solidificar el lazo de amor, el amor inquebrantable, lo van a hacer todavía más real, y cuarto, cuando nosotros hacemos todas esas cosas que he dicho les vamos a proporcionar un fundamento sólido que los va a llevar a ellos a intentar cosas nuevas y a facilitarles el éxito en oportunidades y retos en el futuro. Qué maravilloso que nosotros podamos simplemente con tomar el tiempo y hacer las cosas que yo he dicho, podamos obtener ese gran fruto por nuestra inversión en la vida de nuestros hijos.

Jonathan Edwards, si pueden pasar ya los músicos, gracias, ya están aquí, Jonathan Edwards fue un famoso predicador de los 1800s y él oraba lo siguiente, escuchen esta oración, es una frase muy sencilla, dice: “Señor, estampa la eternidad en mis ojos” o sea que tú como padre, como persona que eres influencia sobre niños, niños pequeños, niños de cualquier edad, que tú veas la eternidad y el propósito que Dios ha puesto en cada niño que está a tu alrededor y que todos seamos hallados fieles de haber invertido todo lo que tenemos, poner todo lo que podemos en la vida de ese niño para que llegue a cumplirse el potencial de Dios en ese niño para la gloria de Dios, esa debe ser nuestra oración. Así que si quieren me acompañan en una oración final para darle cierre a nuestro servicio.

Gracias Padre, te doy gracias por la vida de los niños, por el tesoro que son, te doy gracias por la maternidad, te doy gracias por la oportunidad de influenciar a niños en los diferentes ambientes en los que nosotros nos movemos. Padre, así como decía Jonathan Edwards, enséñanos a nosotros a ver la eternidad en cada niño, dános la sabiduría, el entendimiento, la fuerza para ministrar a sus vidas Señor con todo el ánimo, con toda la pasión sabiendo Señor que eso no va a ser en vano, que va a haber gran fruto, que la eternidad y el propósito, el destino que Tú has puesto en cada niño bajo nuestro cuidado va a florecer, se va a cumplir Tu propósito para su vida y que todo va a ser para que Tus propósitos sean cumplidos y para que sea todo para Tu gloria Señor.

Ayúdanos Señor, enséñanos, enséñanos a ministrar a los niños en todas las áreas, Señor bendice su intelecto, bendice su conocimiento, sus emociones, su espíritu, Señor que nosotros nunca subestimemos a un niño sino que todo lo contrario Señor, invirtamos, hagamos una parte, un alto e invirtamos en la vida de ese niño Señor, ayúdanos a ministrar con poder y sabiduría en sus vidas Señor, gracias Padre en el Nombre de Jesús hemos orado Padre, amén, gracias Padre.

Hay que odiar lo que Dios odia

TRANSCRIPT

Libro de Apocalipsis capítulo 1, vamos a leer hoy juntos la primera carta en el libro de Apocalipsis de Jesucristo directo a las iglesias locales del día de Juan, el Apóstol. El Señor habló directamente a ciertas iglesias, mensajes proféticos. Y vamos a comenzar hoy con la Primera Carta que el Señor en el libro de Apocalipsis habló a la iglesia de Éfeso.

Pero primero solo quisiera decir que el libro de Apocalipsis es algo importante para nosotros hoy en día, porque yo creo que estamos viviendo los últimos días. Yo no sé si es nuestra generación o la próxima pero como dice la palabra, el tiempo es corto. Y es importante los cristianos estar despiertos como hemos hablado antes. El libro de Apocalipsis fue escrito del Apóstol Juan cuando él estaba en exilio en una isla, la isla de Patmos.

Ahora, estar en una isla suena como una vacación para nosotros. Pero yo te aseguro no fue Punta Cana, ni Roatán ni no sé qué, ni Luquillo o Hawái. No, no, él estaba en castigo exiliado por la palabra de Dios. Imagínate, ¿has visto la película Cast Away? Ese hombre que vivía en esa isla así, más así que vacaciones. Pero ahí él estaba en el espíritu y el Señor le reveló un mensaje, pero fue más que un mensaje, fue una visión del mundo espiritual. Y él pudo ver lo que estaba detrás de la realidad física, y él pudo ver la realidad espiritual.

El Señor usó símbolos en una visión profética, se llama literatura apocalíptica porque usa muchas figuras para comunicar realidades espirituales que un ser humano muchas veces no tiene la capacidad de entender. Por eso muchos dragones y otras cosas son símbolos que representa otra cosa. Pero el Señor le habló y le reveló lo que estaba detrás y comenzó con la visión de la cosa más importante que está en el ambiente espiritual y eso es el Señor Jesucristo mismo, más importante que cualquier ángel, cualquier demonio, cualquier nación o mensaje, es la revelación de Jesucristo mismo a la iglesia. Amén.

Y comenzó con esa visión, porque Juan conocía bien a Jesús, era un Apóstol íntimo, allegado a Jesús. Pero ahora él ve que el Cristo que vive ahora es un Cristo muy diferente a lo que él conoció antes. Él conoció antes el Cristo humano, un Jesús humano como nosotros, que se cansaba, que vivía como un ser humano, divino, Dios, pero también humano, pero el Cristo que él vio ahora, antes de su revelación es el Cristo exaltado y glorificado, el Cristo que ya venció la muerte, el diablo y el pecado y está a la diestra del Padre reinando por los siglos de los siglos. Ese Cristo se reveló a Juan. Así que comenzamos con la visión que él tuvo en capítulo 1, versículo 9.

“…Yo Juan, vuestro hermano y coparticipe vuestro en la tribulación, en el reino, en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios, y el testimonio de Jesucristo, y yo estaba en el espíritu en el día del Señor y oí detrás de mí una gran voz como de trompeta que decía, ‘Yo soy el alfa y la omega, el principio y el último, escribe en un libro lo que ves, envíalo a las 7 iglesias que están en Asia a Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y la Odisea.’ Y yo me volví para ver la voz que hablaba conmigo y vuelto vi 7 candeleros de oro y en medio de los 7 candeleros a uno semejante el Hijo del hombre, vestido de una ropa que llegaba hasta los pies y ceñido por el pecho con un cinto de oro y su cabeza y sus cabellos eran blancos como blanca lana, como nieve; sus ojos como llama de fuego y sus pies semejantes al bronce bruñido refulgente como en un horno, y su voz como estruendo de muchas aguas. Tenía en su diestra 7 estrellas, de su boca salía una espada aguda de dos filos y su rostro era como el sol cuando resplandece en su fuerza.

Y cuando le vi caí como muerto a sus pies y él puso su diestra sobre mí diciéndome ‘No temas, yo soy el primero y el último y el que vivo y estuve muerto, más he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y el hades, escribe las cosas que has visto y las que son y las que han de ser después de estas, el misterio de las 7 estrellas que has visto en mi diestra y de los 7 candeleros de oro. Las 7 estrellas son los ángeles de las 7 iglesias y los 7 candeleros que has visto son las 7 iglesias.”

Así que esta carta, esta revelación y esas cartas fueron escritas a ciertas iglesias locales específicas e históricas que existían en el área que se llama Asia Menor, moderna Turquía, ahí el mapa. Y si tuviéramos para verlo hay una isla al lado de Éfeso que se llama Patmos. Así que yo creo que Juan estaba mirando la costa de Turquía y él estaba pensando en estas iglesias allá, y él vio en el espíritu lo que Dios estaba haciendo y lo que él iba a hacer. Y ahí vino la revelación de los mensajes para estas iglesias.

Las iglesias son candeleros de oro. En el espíritu el Señor usaba esa imagen para comunicar lo que es una iglesia de verdad, es un candelero de oro. Si puedes poner la foto de un candelero de oro se usaban en el templo, se llama en el hebreo menora, para brillar en el templo como un símbolo de la presencia de Jehová entre su pueblo, y un símbolo de las oraciones del pueblo constante delante de Dios.

El sacerdote era muy cuidadoso de nunca dejar que la luz se apague, siempre tenía que estar brillando delante de Dios en el candelero la luz de la llama del fuego, de la adoración de su pueblo en su presencia. Así que para Cristo, para Dios, la iglesia es un candelero. Si te fijas hay ciertas ramas, son 7, simbolizan algo en la Biblia que también tiene ramas, que también ardía pero no se consumía, puedes pensar en la Biblia. Algo con ramas que quemaba sin ser quemado, la zarza ardiente, ahí Jehová, la gloria shekina de Jehová apareció a Moisés en la zarza ardiente.

Así que el candelero representa la zarza de la presencia de Dios entre su pueblo, y ahora sabemos que si el candelero es la iglesia, entonces nosotros somos la zarza. Dios es el fuego y nosotros somos la zarza que no se consume pero se quema con la gloria shekina de Jehová. La razón de existir una iglesia es llevar la llama de la presencia de Dios en el mundo y no funciona una luz moderna. ¿Cómo funciona una luz moderna? Lo tienes que enchufar a electricidad. Una luz antigua, ese candelero, solo funciona si tiene aceite, sin aceite no hay luz, sin luz el candelero es inútil. El candelero solo funciona si hay aceite. Que es el aceite para nosotros? El aceite es la presencia del Espíritu Santo entre nosotros. Una iglesia sin el espíritu no tiene luz, no tiene vida, deja de ser una iglesia. Vamos a hablar de eso más tarde. Pero gracias a Dios podemos celebrar que una iglesia genuina tiene el privilegio de ser una zarza que arde con el fuego divino, porque el aceite del Espíritu Santo nos mantiene prendidos con esta llama. Esa sí es una iglesia en el espíritu.

Y las estrellas. Jesús tenía las estrellas en la mano. Podemos ver la foto de estrellas en la mano derecha, bajo su dominio y control. Y la Biblia dice que cada estrella es un ángel de cada iglesia. Hay interpretaciones diferentes, algunos creen que cada ángel es un ángel literal, que cada iglesia en el ambiente espiritual tiene un ángel que guerrea por nosotros. Qué lindo! Yo creo que el nuestro es un ángel guerrero y medio loco y multiétnico, pero cada iglesia tiene su ángel.

Pero pienso en eso, cómo es que él escribe mensajes a ángeles para llevar el mensaje. No entiendo eso mucho. Es interesante. Pero él está en una isla y en el libro de Daniel ángeles llevan mensajes proféticos a Daniel, y puede ser algo parecido que el mensaje va a ser llevado a las iglesias en el espíritu por los ángeles.

Hay otros que creen que la palabra en griego angelos significa mensajero y que son líderes humanos, que son pastores de la iglesia, que cada estrella representa un pastor sobre la iglesia, que es un mensajero del Evangelio para su gente y que las cartas son dirigidas a estos pastores que están en la diestra de Jesús bajo su domino. Qué lindo! Esa es otra interpretación linda.

El lunes yo creía que eran ángeles literales, el martes decidí que no, son pastores. Después el miércoles decidí que son ángeles, así que yo no sé qué voy a creer mañana pero son una de estas 2 cosas, ángeles de las iglesia que están recibiendo este mensaje y así Dios está ahí enviando mensajes a las iglesias.

Y este es el mensaje a la iglesia de Éfeso. Yo tomo cada mensaje profético, no solamente para ellos sino para nosotros también. Cada carta tiene principios de cómo ser una iglesia vencedora y usa esta palabra, al que venciere le daré tal cosa. Así que cada carta, cada mensaje es que Jesús quiere que las iglesias sean iglesias vencedoras porque estamos en una lucha. Hay muchas fuerzas que quieren derrotar la iglesia y para vencer la oposición espiritual que tenemos, tenemos que tomar a pecho lo que Dios nos dice en estas cartas. Debemos leer estas cartas para nosotros.

La Biblia dice que si leemos estos mensajes y los tomamos seremos bendecidos. Así que al solo leerlo con un corazón abierto vamos a ser bendecidos. Así que vamos a leer en Apocalipsis 2, la primera carta a Éfeso y primero déjame orar.

Padre, te pido en el en el nombre de Jesús que cada palabra que leemos, Señor, lo saboreamos como una palabra directa de ti y para nosotros. Gracias Jesús que tu reinas en el ambiente espiritual, que tu andas en medio de los candeleros y que tu pones el aceite y que tu cuidas los candeleros y nos estás hablando hoy. Tu pueblo te está escuchando, en el en el nombre de Jesús.

Apocalipsis 2, “Escribe al ángel de la iglesia en Éfeso, el que tiene las 7 estrellas en su diestra, el que anda en medio de los 7 candeleros de oro dice esto, ‘Yo conozco tus obras y tu arduo trabajo y paciencia y que no puedes soportar a los malos y has probado a los que se dicen ser Apóstoles y no lo son, y los has hallado mentirosos, y has sufrido, y has tenido paciencia, y has trabajado arduamente por amor de mi nombre y no has desmayado, pero tengo contra ti que has dejado tu primer amor. Recuerda, por tanto, de dónde has caído y arrepiéntete y has las primeras obras pues si no vendré pronto a ti y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido. Pero tienes esto, que aborreces las obras de los nicolaítas las cuales yo también aborrezco. El que tiene oído oiga lo que el espíritu dice a las iglesias, al que venciere le daré a comer del árbol de vida el cual está en medio del paraíso de Dios.”

Señor, que comamos como iglesia de ese árbol en el en el nombre de Jesús. El Señor está llamando y escribiendo a Éfeso como una iglesia guerrera. Tenía que ser, porque Éfeso no era una ciudad fácil, era el centro de idolatría de una diosa que se llamada Diana. Cuando Pablo predicó ahí primero había los hijos de Esgueva, había mucha lucha espiritual, gente quemaba sus rollos de los magos y todas las cosas de la magia que tenía. Y había un evento en un centro comercial grande, un auditorio grande porque había un hombre que su trabajo era hacer ídolos, él era un artesano que estaba temiendo que iba a perder dinero, porque todo el mundo enamorado de Jesús va a dejar a nuestra diosita. Así que él dijo, ‘Esto es peligroso,” y la gente se juntaba en el teatro, en un gran auditorio y todo el mundo gritando por 3 horas, ‘grande es Diana de los efesios,’ un espíritu demoníaco en esta ciudad. Y esa iglesia estaba allí en medio del malo, tenía que ser una iglesia luchadora, una iglesia guerrera, una iglesia vencedora, sabe lo que es fajarse para Cristo.

Yo escuché esta palabra con mucho cuidado, fajarse. That means work really hard. Sudar para Cristo, ser una luchadora, no venir para sentarse y estar cómodo, si no he llegado a poner manos a las obras. Yo no he venido para calentar una banca, yo le doy gracias a Dios porque León de Judá es una iglesia guerrera y yo estoy orgulloso de eso.

Ahora, puede haber personas que han llegado heridas, que necesitan tiempo de descansar en un pasto delicado y estar al lado de las aguas de reposo y sanarse. Gracias a Dios, hazlo si tienes que hacerlo, pero todos los que estamos aquí sabemos que no estamos para descansar siempre y no trabajar. Descansamos y trabajamos, las dos cosas porque Dios nos ha llamado para ser una iglesia fuerte, guerrera, que suda para la obra del Señor, una iglesia dedicada ferozmente a la verdad de la Biblia, una iglesia que no aguanta un predicador falso. Yo espero, me da un poquito de miedo si meto la pata.

Pero las iglesias de Éfeso probaban a los Apóstoles falsos que llegaban y había Apóstoles impresionantes que daban un gran show. Había algunos Apóstoles que antes eran magos, había uno que se llamaba Simón, el mago, y él vio el poder del Espíritu Santo a través de Felipe. Él dice, ‘guau, yo quiero eso, yo quiero hacer los trucos con el Espíritu Santo. Dame eso. ¿Cuánto cuesta?’ Y Pedro le dijo, ‘Mira, te puedes quedar con tu dinero, hijo del diablo, porque tu no vas a ser un mago cristiano,’ pero él puede ser que llegó a ser. Había muchos que combinaban el espiritismo con el cristianismo y hacía señales milagrosas. Era difícil discernir lo verdadero de lo falso, pero los efesios sabían que hay que probar los espíritus.

Jesús lo dice ‘guardaos de los falso profetas que vienen a vosotros vestidos de ovejas pero por dentro son lobos rapaces, por sus frutos los conoceréis.’ Mira los frutas, mira la manipulación, el control, doble vida. Hay que tener mucho cuidado porque hoy en día más que nunca en el internet cualquiera se puede presentar como el Apóstol de no sé dónde. Cuidado. Porque por internet es difícil discernir los frutos. Cuidado, hay que discernir los espíritus y buscar no una persona, un ministerio perfecto porque no lo son, no hay, no hay persona perfecta, te aseguro. Solo hay que preguntar a mi esposa y tu sabrás que no hay ningún pastor perfecto.

Pero lo que sí no hay otra opción, tiene que ser auténtico, sincero, no un engaño. El Apóstol Pablo dice así, ‘nuestra exhortación no procedió de error ni de impureza ni fue por engaño, al contrario, si hablamos es porque Dios nos aprobó y nos confió el Evangelio, no procuramos agradar a los hombres sino a Dios que prueba nuestros corazones.’ Esto es lo que buscamos, autenticidad, no perfección, pero sinceridad.

Pero fíjate, alguien puede ser sincero y estar equivocado. Hay muchos líderes de sectas que enseñan falsedades sinceramente. Así que es más que buscar sinceridad sino evaluar según la palabra de Dios el contenido del mensaje. Hay muchos mensajes, hay que escuchar y estudiar y estudiar para saber si lo que estoy escuchando cuadra con lo que dice la palabra de Dios.

La iglesia de Éfeso era una iglesia vencedora porque sabía probar los espíritus y rechazaba lo falso. Eran personas esforzadas que no se cansaban, personas que sufrían por ser cristianos. Jesús nos advirtió muy fuertemente, si me odian a mí te van a odiar a ti, porque el discípulo no es mejor que su líder. Si llamaban a Jesús Belcebú ¿qué van a decir de nosotros? Si llaman a Jesús un demonio, van a decir cosas más feas de ti y de mí por ser cristianos.

Si queremos ser amados por el mundo no podemos ser una iglesia vencedora. Ahora nuestra iglesia es interesante porque los políticos nos aman, cada 5 días uno está tropezando con algún político aquí. Vienen gobernadores, él tuvo su culto aquí, ha venido la senadora Warren cuando hablábamos de la salud viene el alcalde y nuestra fe es si viene un político lo honramos y damos lugar, no decimos que vamos a votar por él o por ella, pero lo honramos como un siervo civil y le damos su lugar de cualquier partido, de cualquier lado.

Pero después muchos de esos mismos políticos que nos aman, nos respetan con muchas cosas que hacemos en la sociedad, muchos el próximo día tienen que decir que no están de acuerdo con muchas cosas que nosotros creemos, ellos tienen que decir ‘pero no aprobamos ciertas creencias que tienen.’ Menos mal, si somos una iglesia que los políticos están de acuerdo con todo lo que creemos, ¿qué creemos? No vamos a quedar bien con todo el mundo y no debemos tratar de quedar bien con todo el mundo.

Pero si nos odian, que nos odien por ser fieles y no por ser malos. Ese es el problema. Muchas veces nos odian por ser malos no por ser fieles. Pero así va a ser. Esta iglesia era una iglesia fiel, una iglesia que no había perdido el escándalo de la cruz. Si vamos a ser una iglesia vencedera tenemos siempre que ser una iglesia escandalosa en cierto sentido, que nuestra creencia ofenda porque está diciendo que el pecado es el pecado. Una iglesia vencedora, una iglesia fiel que cumplía su deber, pero una iglesia hace más que luchar.

Una iglesia vencedora no puede ser solamente una iglesia guerrera, también tiene que ser la novia de Cristo. No es solamente cumplir con nuestro deber y sudar y luchar, es también amar a Jesús sobre todas las cosas con un amor entrañable y apasionado. Jesús dijo, ‘pero tengo esto contra ti, que has dejado tu primer amor. Recuerda, por tanto, de dónde has caída, arrepiéntete y has las primeras cosas pues si no te arrepientes pronto vendré a ti y quitaré tu candelabro de su lugar.’

Hermanos, es posible ser fiel y desenamorarse, desencantarse, perder el amor por Jesús, ¿es posible? Hay una parábola interesante, la parábola linda del hijo pródigo. Sabemos la historia del hijo que pide todos los bienes de su papá y él sale y malgasta todo y después él vuelve y dice, ‘mira, en la casa de mi padre los siervos viven bien, yo vuelvo a la casa de mi padre y le voy a pedir que me reciba como uno de sus siervos.’¿Se acuerdan de la historia?

Él viene con su discurso todo memorizado y él llega a la casa y el padre viene corriendo y le abraza y el hijo comienza con su discurso, y él dice, ‘Papá, he pecado contra los cielos y contra ti, ya no soy digno de ser llamado tu hijo, recíbeme como uno de tus…’ y el papá dice, ‘No, no, no, tu no eres un siervo, tu eres mi hijo, y vamos a poner el anillo y la túnica hermosa y vamos a matar el becerro gordo y vamos a festejar porque tu eres mi hijo y te amo.’

Pero había otro hijo, ¿te acuerdas? El hijo bueno, el hijo bien portadito, que se quedaba en la casa trabajando, fajándose. Este hijo viene a la casa y escucha el sonido de la música y dice, ¿qué está pasando? Ellos le dicen, ‘bueno, tu hijo malo regresó a la casa y a este sinvergüenza se le dio una fiesta y todo bien…’ y el hijo bueno se enoja. El padre, porque el padre es amoroso, sale de la casa y él le ruega que entre en la casa para festejar. Y el hijo bueno dice, ‘Mira, todos estos años yo he luchado, yo he trabajado y nunca he desobedecido ninguno de tus mandamientos, he cumplido con todo y nunca me has dado ni un cabrito para festejar con mis amigos.’ ¿Cómo es que él mira a su papá? Lo mira no como papi sino como un dueño de esclavos, como un jefe y no un jefe bueno, un jefe malo que obliga mucho y no le da nada. El padre le dice, ‘Mi hijito, siempre estás conmigo y todo lo que tengo es tuyo, tu no entiendes. ¿Has olvidado cuando tu fuiste un bebé y estábamos juntos y jugábamos en el campo juntos? Y tu siempre querías estar conmigo y pasar tiempo conmigo en el campo y jugar y escuchando historias al lado del fuego en la noche, y ahora solo trabajas pero no me amas.’ Eso no es cristianismo.

Una iglesia vencedora no solamente sirve a Cristo, sino ama a Cristo y disfruta a Cristo. Yo quiero, Dios quiere que seamos una iglesia enamorada de Jesús, llena de aceite, llena de fuego para él. Es posible que el candelero sea quitado de su lugar. Eso es fuerte. Una iglesia puede dejar de ser iglesia en el espíritu. Tal vez el edificio sigue, tal vez la organización sigue, tal vez hay hermanos salvas en la iglesia, pero una iglesia que ha dejado de estar enamorada de Cristo puede perder su lugar como iglesia delante del Señor en el ambiente espiritual, puede llegar a ser un candelero lindo que brilla, pero que ya no funciona, que se apaga la luz porque ya no hay aceite.

Esto pasa. De hecho, yo creo que esto le ha pasado a la mayoría de las iglesias que han existido en la historia. Casi toda iglesia cristiana comenzó en avivamiento, comenzó con personas orando y luchando y predicando y sufriendo para el Evangelio, pero después de los años llegó a ser una organización y perdió la vida y dejó de ser un organismo delante del Señor, perdió el aceite, perdió la luz y dejó de ser una iglesia funcional en la presencia del Señor.

Que esto nunca sea el caso con nosotros, que nunca perdamos el aceite del Espíritu Santo entre nosotros y el fuego del amor por él. ¿Cómo podemos asegurarnos de eso? gracias a Dios Jesús le da consejos a ellos. Él dice, ‘recuerda por tanto, de dónde has caído.’ Recuerda, recuerda los días al principio, recuerda tu primer amor, tu luna de miel con Cristo. Yo pasé un tiempo pensando en mis primeros meses como cristiano. Yo, un joven de 16 años fanático para Jesús. Mis papás estaban seguros que yo ya estaba en una secta porque yo me había vuelto loco de remate. Porque yo era en fuego para Cristo. Recuerda el asombro, el gozo de conocer a Cristo la primera vez.

Yo recuerdo salir afuera y ver los árboles y los cielos y pensar, ¿quién puso todo en HD? Los colores son más lindos, el aire es más fresco. Pero no fue el mundo que había cambiado, fui yo. La palabra… yo pude leer la palabra y ver cosas maravillosas en la palabra, la entendí y pensé guau… Y llegué a ser adicto a la palabra de Dios, lo comía como dulce, como popcorn, como cotton candy, llorando, memorizando la palabra de Dios.

Yo recuerdo caminatas largas con el Señor en la noche mirando las estrellas y hablándole día y noche. Yo hablaba en lenguas tanto que mi familia pensarme enviarme al psicólogo de niños. Mi mamá me lo dijo, literalmente, no lo digas a tu papá porque te envía al psicólogo de niños. Y no hay nada malo de hecho pero… mi hermana me preguntó un día, “Gregory, ¿qué hacía en el baño? Tu estabas en la ducha y estabas hablando esa palabrería. Todos te escuchamos.” Se me había olvidado porque era una conversación constante con Jesús.

Yo recuerdo mis amigos locos para Jesús, más locos que yo. Nuestro héroe era Charles Finney, un revivalist y leíamos y queríamos… vamos a hacer avivamiento en todas partes porque sabemos mejor que los demás, porque tenemos 16 años. Pero había un gozo, evangelizábamos como locos. Hablábamos a cualquier humano, animal, objeto, le hablábamos de Jesús. Así era, ¿te acuerdas?

Un día, yo recuerdo, había una nevada hermosa, fresca, y decidimos ir a nuestra escuela secundaria y poner mensajes en la nieve. Y caminábamos y hacíamos la palabra en grande, gigantesco, Arrepiéntete, Sálvate, Jesús vive, y grande y después el próximo día… me sentí como Gedeón, el próximo día qué hizo, quién quemó el ídolo. Todo el mundo mirando por las ventanas y era grande. Se ve. Loco para Cristo.

Recuerda de dónde has caído. Recuerda esa locura de ser un nuevo creyente. El amor alocado para él. Visita lugares, piensa en eso, escucha la música de antes. Hay que pensar en eso. Arrepiéntete y haz las primeras obras.

Para arrepentirse esto sí es un regalo de Dios, arrepentirse no es malo, es bueno. Es un regalo que Dios nos da que significa, no importa qué ha pasado o lo malo, o cómo yo he metido la pata, siempre puedo arrepentirme y cambiar otra vez. Gracias a Dios por las segundas oportunidades que nos da.

Arrepentirse es algo lindo, hermoso, cambiar y comenzar de nuevo con Cristo. Arrepiéntete y haz las primeras obras. Ahora mi plan entonces, en la primera nevada ir a la escuela de mi hija, que está en segundo grado y… tal vez no esto, ¿entonces qué? Si no voy a repetir exactamente qué hizo, yo recomiendo que pases tiempo con nuevos creyentes ahora. Yo lo hago como medicina para mi alma. Me encanta estar con nuevos creyentes nivel 1, nivel 2, en discipulado. Me encanta estar con personas saliendo de las adicciones, la persona homeless que hacemos estudios bíblicos con ellos, porque buscan de Dios con gratitud. Un nuevo creyente es agradecido porque sabe que ha sido perdonado mucho. No importa qué, todos hemos sido perdonados mucho, pero olvidamos cuánto Dios nos ha perdonado. Olvidamos de la gracia.

Piense en los nuevos creyentes en la Biblia, el demoníaco gadareno ¿te acuerdas de él? Tenía una legión de demonios. Jesús echó fuera a los demonios y después él estaba vestido y bien. Y después Jesús se iba y el hombre como un niño le ruega, ‘no, yo quiero meterme en la barca contigo, Jesús.’ Jesús dice, ‘No, tu tienes que volver a la casa para predicar.’ Dice, ‘No, no quiero, no me gusta, no me caen bien, yo quiero estar contigo. Yo te amo a ti.’ Piensa en la mujer pecaminosa que era famosa por su vida mala en la calle, pero Jesús la perdonó, le echó fuera 7 demonios. Llegó a ser María Magdalena.

Piense en alguien como ella que escuchó que Jesús estaba en la casa de un fariseo, ¿te acuerdas del momento? Y a ella no le molestaba entrar en la casa del fariseo, buscar a Jesús ahí en el comedor, echarse a los pies y besar sus pies, llorando tanto que hizo toda la cosa fea y decidió ¿cómo voy a secar mis lágrimas? Voy a usar mis cabellos, agradecida porque el que ha sido perdonado mucho ama mucho.

Alabad a Jehová porque su misericordia son nuevas cada mañana. Dale gracias al Señor porque su misericordia es buena. Yo te animo como una práctica, y dice, volver a tus primeras prácticas, no tratamos de sentir algo, tratamos de hacer algo diferente y los sentimientos siguen. So, la práctica de darle gracias al Señor.

Yo te animo apartar media hora para dar gracias a Dios por todo, por el árbol, por el aire, por el oxigeno, por la persona a tu lado, por tu familia, por tu jefe, porque por lo menos tienes trabajo, por todo lo que Dios te ha dado, por Jesús, por la Biblia, por tu iglesia, por tus hermanos, gracias Señor. Gracias.

Si tu tomas aún 5 minutos para hacer esto va a comenzar a fluir el aceite y la llama del amor por Cristo va a volver a ti. Hacer las primeras cosas. Los nuevos creyentes tienen hambre para estar en la presencia de Dios y escuchar la palabra, como María que sentaba a los pies de Jesús. Sabemos qué pasó, su hermana Marta se enoja, ‘Jesús, dile que me ayude con la comida.’ ‘Marta, Marta – porque ella le está regañando a Jesús – por qué estás afanada y preocupada por tantas cosas, pocas cosas son necesarias. María ha escogido lo mejor.’

Tenemos que tener ese hambre para estar en la presencia de Dios otra vez. Hace dos años atrás yo prediqué de Salmo 1, bienaventurado el hombre que no se sienta en sillas de escarnecedores ni en camino de perversidad ha andado, etc… Si no en la ley de Jehová estás su delicia y en su ley medita de día y de noche.

Y yo me puse a pensar de verdad tengo delicia en la palabra de Dios, como una comida rica. Y yo pensé, bueno, me gusta la Biblia, yo amo la Biblia, estudio la Biblia, predico la Biblia, fui al seminario, todo eso, pero eso no es delicia, y yo decidí, mira, sabes lo que voy a hacer? Voy a buscar reactivar el gusto. Tu coges el gusto por una comida comiéndola. Y yo decidí sacar mi teléfono mágico y uno puede tener un app que se llama el Bible app. ¿Has escuchado de eso? búscate alguien, un joven, un niño de 6 años y te lo pone en tu teléfono en 5 segundos.

Y después tu puedes escuchar cualquier versión de la Biblia escrito en mil años, está ahí, en cualquier idioma, inglés, español, swahili, francés, alemán, lo que quieras. Y si tu quieres lo puedes escuchar. Y yo decidí, yo mato tanto tiempo en el carro por qué no escuchar la palabra siempre y escuchar, escuchar, escuchar y comenzó a crecer en mí otra vez el gusto que si yo no lo tenía era como hambre, yo necesito, casi como una droga buena, necesito mi dosis de la palabra porque era como miel para el alma.

Hay que hacer la práctica para reactivar el gusto. Haz las primeras obras y así renovamos el amor que tenemos y evangelizar. También y ahí eso es muy importante nuevos creyentes tienen tristeza por su pecado. Yo, nuevo cristiano, 16 años decidí escribir todos mis pecados en hojas, me costó mucho. Solamente había vivido 16 años pero llené muchas hojas y después de escribir todo, me metí en el baño y las quemé. Y otra vez, ¿qué estás haciendo ahí? Hay humo, ¿qué estás haciendo? Pobre familia, pobres papás, confesando mi pecado.

Hay que aborrecer lo que Dios aborrece. No podemos minimizar el pecado y a la misma vez amar a Jesús porque esto es amar lo que él odia. Hay que odiar lo que Dios odia. Mira lo que dice, ‘pero tienes esto, que aborreces las obras de los nicolaítas, las cuales yo también aborrezco.’ Nicolaítas, una secta que existía en esa época. Hay muchas opiniones diferentes, no está completamente seguro de lo que eran y qué creían, pero parece que ellos mezclaban cristianismo con prácticas inmorales, o sea, inmoralidad sexual, idolatría, diciendo que tu puedes tener tus ídolos y también adorar a Cristo, tu puedes practicar la inmoralidad sexual y todavía amar a Cristo. Y la Biblia dice que hay que aborrecer ciertas obras si queremos amar a Cristo, hay que rechazar ciertas cosas.

No es odiar a personas, gracias a Dios porque habrá algún pecador aquí en esta iglesia, ¿tenemos algunos? Uno o dos. Gracias a Dios, somos un lugar que Jesús dijo, no son los sanos que necesitan el médico, sino los enfermos. No he venido para llamar a los justos sino yo llamo a pecadores al arrepentimiento. Él llama a personas pecadoras, gracias a Dios. Califico. Yo le doy gracias a Dios que nuestra iglesia es un lugar donde tu puedes llegar tal como estás. En la mañana tu vas a ver mucha gente, y ahora en la tarde también, personas que vienen de la calle, que tu ves viviendo en la esquina, que son homeless, que todavía tienen sus adicciones, que todavía están dormitando en el culto, pero están en la casa de Dios buscando la vida de Cristo. Que siempre seamos una iglesia para pecadores.

Pero no hacemos nada bien, si cambiamos la definición de pecado y decimos que está bien, que el pecado no es pecado. Hay que odiar lo que Dios odia. Cada generación va a tener su lucha y si queremos ser una iglesia prendida con la llama del fuego, hay que ser firmes en lo que la Biblia llama pecado. Amamos al pecador.

No son los nicolaítas que odiamos, son las obras de los nicolaítas quienes son, las obras, no las personas. Muchas iglesias en sus celos por la justicia odian personas, ellos hablan como si persona y pecado están aquí abajo, debemos venir con amor, con gracias, tolerar la persona pero nunca tolerar prácticas que no son de la palabra. La iglesia está para sanar no para que las personas sigamos en nuestro pecado. Si toleramos el mal sofocamos la llama del fuego de amor de un Dios santo. Por el lamento de la maldad se enfría el amor de la mayoría. No queremos amor frío.

Ahora todo esto termina, hermanos, con una invitación. Primero una advertencia y después una invitación. La advertencia: el que tiene oído que oiga lo que el espíritu dice a las iglesias. Hermanos, es posible oír sin escuchar. No sé si esto funciona en español. El niño escucha las palabras pero te está escuchando el significado. Si nosotros queremos ser una iglesia vencedora que siempre tengamos oídos para oír la voz del buen pastor que nos está hablando y corazones tiernos. Tierra fértil para la palabra de Dios entrar.

Y termina con una invitación, el amar a Jesús es comer del árbol de vida en el paraíso de Dios. Al que venciere le daré el derecho de comer de ese árbol. ¿Qué es comer del árbol de la vida? Es gustar intimidad con Cristo, eso es como comida para tu espíritu y para tu alma. Nosotros si dejamos de amarlo estamos dando hambre al corazón.

La palabra dice, gustad y ved que es bueno Jehová. Hermanos, yo quiero y yo oro que siempre seamos una iglesia que come bien de Dios. Jesús dijo, yo soy el pan de vida, el que viene a mí nunca tendrá hambre, el que en mí cree no tendrá sed jamás. Que seamos una iglesia llena de la comida, de la intimidad con nuestro Cristo. Adereza mesa delante de mí, en presencia de mis angustiadores, unges mi cabeza con aceite, mi copa está rebozando. Este aceite está rebozando del candelero de León de Judá.

Pero ¿sabes qué? Yo predico esto no porque nosotros hemos dejado nuestro primer amor, yo no creo que este es el caso, pero siempre hay que avivarlo. Se habló antes, creo que Sara mencionó, la parábola o el evento cuando Jesús cambió el agua en vino. Después de la fiesta de las bodas el jefe de la boda, probando el vino rico dice, mira, pero tu has guardado el mejor vino para último. León de Judá, el mejor vino está por venir si nosotros lo queremos. La mejor comida.

Yo quiero que estemos más enamorados de Cristo ahora que hace 15 años atrás, y que en 5 años estemos aún más enamorados de él, que seamos como jóvenes enamorados de nuestro salvador, la novia de crsito, lo mejor está por venir.

Señor, danos ese aceite para llenar nuestro candelero. Pongámonos de pie y Padre, en el en el nombre de Jesús confesamos que muchas veces, Señor, hemos dejado enfriar el amor por ti, Señor. Yo te pido en el en el nombre de Jesús que nunca se apague la llama del fuego del amor por ti, que seamos fieles, Señor, pero nunca como el hijo bueno de la parábola, Señor. Antes de ser tu siervo, Señor, somos tu hijo, somos tu novia, Señor, queremos ser una iglesia que toca tu corazón, Padre, una iglesia adoradora, una iglesia enamorada de Jesús, una iglesia prendida con el fuego del amor por ti, Señor. Oh, Jesús, que volvamos a hacer las primeras obras.

Padre, te pido que seamos más locos, aunque más maduros en cierto sentido pero más locos que nunca por ti, Señor. Oh, Jesús que seamos una iglesia vencedora.

¿Por qué vamos a respirar frente al Jordán?

TRANSCRIPT

En esta mañana mientras oraba en el servicio de la mañana una de las cosas que dije en oración fue que muchos no vienen, su mañana se levantan y no tienen un propósito que van a hacer durante el día, se levantan a ver qué pasa. Nosotros los creyentes, estamos desde el sábado esperando el servicio del domingo, estamos ansiando dentro de toda nuestra vida tan complicada y compleja estamos esperando ese domingo para venir aquí.

Nos levantamos el domingo con un propósito, venir a la casa de Dios, adorarle y a bendecirle. Como de costumbre cuando venía de camino para acá con Vivian y mi hijo Isaías, Vivian me indica en el camino, “No uses la ruta corta, usa la ruta larga,” y paramos en el banco para sacar dinero. Una de las cosas que yo usualmente hago cuando estaciono en un shopping center, casi nunca estaciono frente al banco pero es domingo, 8.30 de la mañana, el parking está casi vacío o sea estacioné frente a la puerta del banco. Vivian se baja a sacar el dinero del ATM y yo sé porque al lado del banco hay un negocio, no sé qué tipo de negocio, pero me llama la atención este muchacho joven que está moviendo las puertas del negocio como para entrar y yo me pregunto y digo en mi mente, pero él debería leer el horario de cuándo abre ese negocio, pero él insistía con su puerta.

Mientras él hace eso con sus dos manos lleva una de sus manos a su espalda, tenía una camisa deportiva, y cuando se levanta para rascarse la espalda parece le veo que tiene un arma. So yo en ese momento pensé, no puedo salir del carro porque alarmaría a Vivian, más tengo a Isaías Jr. a mi lado y tampoco lo quiero alarmar. Tampoco le puedo decir nada a Vivian porque ella adentro del banco. Y eso es como en las películas que los segundos se convierten en minutos porque tu no sabes cómo la persona va a reaccionar.

Pero pensé, Vivian está en el banco y no está viendo lo que yo sé. So yo hice una oración bien breve en mi mente en el carro y dije, “Señor, en esta mañana yo salí para la iglesia a predicar tu palabra, Vivian salió para la iglesia para cantarte y adorarte, Isaías Jr. salió para la iglesia para adorarte.” Cuando Vivian viene saliendo del banco el muchacho va hacia el banco y ambos se cruzan como si el individuo no se percatara de que Vivian estaba ahí.

So cuando Vivian se monta en nuestro vehículo yo me aseguré estar saliendo del parqueo entonces le cuento a Vivian lo que ha pasado. Y aunque no es parte del sermón en esta tarde me llamó la atención porque cuando yo vi esa escena esta mañana pensé, este individuo se levantó esta mañana sin propósito y cuando no hay propósito en nuestra vida el enemigo nos da un propósito.

Vayamos al libro de Josué, capítulo 4. El tema en esta tarde será qué significan estas piedras. Comenzando por el verso 1 del libro de Josué lee así la palabra del Señor en esta tarde:

“Cuando toda la gente hubo acabado de pasar el Jordán Jehová habló a Josué diciendo, “tomad del pueblo 12 hombres, uno de cada tribu, y mandadles diciendo, tomad de aquí del medio del Jordán, del lugar donde están firmes los pies de los sacerdotes 12 piedras las cuales pasaréis con vosotros y levantadlas en el lugar donde habéis de pasar la noche.” Entonces Josué llamó a los 12 hombres a los cuales él había designado de entre los hijos de Israel, uno de cada tribu, y les dijo Josué, “Pasad delante del arca de Jehová, vuestro Dios, a la mitad del Jordán y a cada uno de vosotros tome una piedra sobre su hombro conforme el número de las tribus de Israel para que esto sea señal entre vosotros, y cuando vuestros hijos preguntaren a sus padres mañana diciendo, ¿qué significan estas piedras? les responderéis que las aguas del Jordán fueron divididas delante del arca del pacto de Jehová. Cuando ella pasó el Jordán las aguas se dividieron y estas piedras servirán de monumento conmemorativo a los hijos de Israel para siempre.”

Dios bendiga su palabra en esta tarde. En el trasfondo histórico de este pasaje que comienza en el capítulo 3 se hace énfasis que los israelitas después de estar 40 años en el desierto, anhelando llegar a esa tierra prometida, habían llegado pero llevaban tres días del otro lado del río Jordán esperando la orden para poder cruzar.

Y yo pensaba de qué manera yo puedo ilustrar la desesperación por algo prometido que todos podamos entender en el siglo XXI. Y pensé en mi propia experiencia siendo el mayor de 3 hijos fui el primero que tuve la bendición, el privilegio de saber de boca de mis padres que Santa Claus no existía. So, teniendo dos hermanos menores yo me desesperaba ir de compras con mis papás, cuando compraban juguetes, saber lo que se compró. Mis dos hermanos estaban esperando que llegara el 25 para levantarse por la mañana y ver a Santa Claus, yo estaba esperando por 20 días, 15 días, 8 días, que llegar el 25 de diciembre para yo poder ver y usar mi regalo.

Y de hecho algo jocoso a hora pero no jocoso en aquel entonces, mi último regalo, ya tenía yo como 14, 15 años, fue una bicicleta 26 pulgadas. Yo estaba, hermanos, ustedes no tienen idea, iba a tener mi bicicleta nueva de 10 cambios en el barrio. Ese diciembre 25 en la mañana cuando me entregaron mi bicicleta yo la cogí, me voy en mi bicicleta a correr inaugurándola y en Puerto Rico las alcantarillas es en línea y la goma de la bicicleta es finita. ¿Qué ustedes creen que pasó? Mi primer viaje en bicicleta, se metió la goma por la alcantarillado, yo me viré, volé y se partió el cuerpo de la bicicleta. Esperé mi promesa por casi 20 días y no me duró una hora. Después de explicarle a mi papá cómo pasó ese problema él me dijo, “Eso no puede ser. Tu le diste con un martillo a la bicicleta, ¿el primer día?”

Ahora ustedes entienden 40 años en el desierto, eran esclavos, no tenían mentalidad de nación ni de pueblo, están 40 años trabajando en esos aspectos sociales y personales, 12 tribus que ahora se encuentran frente a la tierra prometida pero el obstáculo no es nada menos que el río Jordán. Encima de eso, tu te imaginas si fuéramos parte de ese grupo, estar caminando por esa área 40 años y llegamos frente a la orilla del río Jordán y Josué nos dice, “Tenemos que esperar.” Pero allá está la tierra prometida. Tenemos que esperar porque nadando no se puede pasar.

Muchos pensarán de esos que estaban ahí en ese momento, que eran niños cuando el milagro del Mar Rojo, pensarán, bueno a lo mejor Dios va a decir que levantemos los brazos a Josué como lo hicimos a Moisés y de esa manera Dios va a enviar un viento que va a dividir las aguas. Es posible. Pero Dios tenía un plan mejor. yo pienso que la angustia de este pueblo hubiera crecido día a día. ¿Cómo tu le explicas a los hijos, niños pequeños, que dirían, pero papá, mamá, esa no es la tierra prometida? Tenemos que esperar. ¿Tenemos que esperar?

Me imagino que la gente que trabajaba a Josué entendería eso de esperar, pero qué tal el pueblo, el hombre común, la mujer común, ¿por qué tenemos que esperar? ¿Qué es lo que ahora a Dios se le ha ocurrido que tenemos que esperar? Generalmente a nosotros los seres humanos no nos gusta esperar, nos gustan respuestas rápidas, saber lo que vamos a hacer, y tiene que ser como queremos que sea.

Cuando Josué le dice al pueblo ya que pueden caminar, antes que diera esa orden, él les manda a los sacerdotes que tomen al arca del pacto. El arca del pacto no existía cuando ellos cruzaron el Mar Rojo, pero ahora tienen arca del pacto. Y esa arca del pacto que contiene la presencia de Dios es cargada por estos sacerdotes y al momento que ellos van a entrar al agua del río Jordán el río Jordán se divide.

Para aquellos niños que cruzaron el Mar Rojo pensarían, guau, otra vez Dios está haciendo algo idéntico al Mar Rojo, pero esta vez va a ser diferente. Mientras están ellos manteniendo ese arca del pacto ellos pudieron haber estado pensando en esos 3 días, nos sacó de Egipto, ya no somos esclavos, tenemos un líder en Josué que sustituyó a Moisés. Ahora comenzamos a marchar y dice que todo el pueblo pasó en tierra seca hasta el otro lado.

Si ustedes se acuerdan de la historia del Mar Rojo desde que salió la última persona que entraron los carros de faraón, el Mar Rojo se cerró y nadie de los egipcios que entró al Mar Rojo sobrevivió. Pero en este caso según el pasaje bíblico ya habían salido del Río Jordán y todavía estaban los sacerdotes con el arca parados sin moverse. Cuando yo veo esta historia tan antigua y pienso en mí historia, en tu historia, cuántas veces en nuestro caminar, en nuestro diario vivir, como individuos, con nuestras familias, con nuestras comodidades en nuestros trabajos, en nuestros pueblos y ciudades, nos enfrentamos a la misma situación, que tenemos un río Jordán en el cual no podemos proseguir y estamos esperando que Dios nos de la respuesta de la noche a la mañana para poder cruzar ese río Jordán.

Y en este caso a diferencia del pueblo judío que solamente esperó 3 días, pero realmente esperaron 40 años, so esperar 3 días frente al río Jordán no era tan problemático como estar 40 años dando vueltas en el desierto. ¿Qué es lo que pensamos cuando estamos frente a nuestro Jordán y no sabemos qué hacer?

Algunos dirán, ¿dónde está Dios? Quizás no tengo mucha unción en mi oración, quizás Dios está ocupado y no escucha lo que estoy pidiendo, quizás tengo que ayunar más. Nadie se da cuenta de que yo estoy parado y no puedo avanzar. Estoy esperando que Dios venga y me ayude a cruzar porque lo que estoy viendo, mi río Jordán puede ser una tormenta de la vida, puede ser una problemática en la familia, puede ser problemas en el trabajo, puede ser tu misma persona que tiene problemas, y no sabes qué hacer, esperando una respuesta.

En esta mañana te voy a decir que no tienes que esperar una respuesta porque el Dios que te llamó a ti ya está dentro del río Jordán esperando a que tu des un paso en fe. Este es un río de 125 millas de largo o más, y a veces nuestros problemas yo a veces creo que nuestros problemas nosotros humanamente nos quitamos los espejuelos y nos ponemos unas lupas, entonces el problema se ve bien grande. Tan y tan grande que el río Jordán de nuestra vida nos hace olvidar como le hizo olvidar a los judíos que el Dios que dividió el Mar Rojo, el Dios que proveyó maná y codornices en el desierto, el Dios que permitió que saliese agua de la roca, el Dios que antes de cruzar el Mar Rojo se manifestaba en una teofanía de una nube durante el día y una columna de fuego en la noche.

Hermana, hermano, amigo, amiga, cuando te enfrentas al río Jordán no mires al río Jordán, no te fijes en la magnitud del problema, no analices cuán grande o dificultoso es esa situación o cuán profunda es, pon tus ojos en el Señor del arca que está parado sin moverse en medio del rio Jordán.

Yo me imagino que no todo el mundo entendería, son miles de personas, ¿qué estaba pasando? Bueno, yo no soy sacerdote, no soy de la tribu de Levi, soy de la tribu de Benjamín pero soy de los más alejados so yo no sé qué está pasando, yo sé que cuando yo pasé por el río Jordán en seco había unos hombres que tenían una caja encima de unas varas sin moverse y en esa caja había poder. Cuando el Mar Rojo se divide que le aguantan los brazos a Moisés y viene el viento y todo se divide, es diferente a cuando los sacerdotes entran al agua cargando la presencia de Dios ahora. Imagínate esto, ya no tenemos a Moisés para levantar los brazos, ya no tenemos el arca del pacto para pararnos en el medio del río Jordán, pero Dios ha hecho un programa mejor.

él ha diseñado un sistema muy superior y es que ahora en el siglo XXI no necesitamos a Moisés, no necesitamos el arca del pacto porque tu cuerpo, hermano, es recipiente de la presencia de Dios. Somos el nuevo arca en esta tierra. So, cuando estoy frente a ese Jordán aunque yo no sepa nadar, yo no tengo que saber nadar, no tengo que ir a la WMCA a coger una clase de first response, para nada, porque cuando yo entré a ese río, que yo ponga mi primer pie, se va a dividir no porque soy yo es por lo que está dentro de mí. La naturaleza reconoce que lo que está dentro de mí le dijo hace mucho tiempo, ‘sepárate y aquí viene mi gente, retírate que aquí vienen mis hijos, aléjate.’

Pero tenemos que dar el paso. ¿Qué es lo primero que hace el pueblo cuando pasa el río Jordán? Y pensaba cómo yo puedo aplicar esto al siglo XXI para que entendamos. Qué hacemos ahora nosotros cuando alcanzamos algo, cuando nuestros hijos ganan un juego de baseball o balón cesto o soccer, cuando alcanzamos un premio en nuestros trabajos o cuando nos graduamos de la universidad o cuando nos promueven. Muchos salimos a comer, otros hacemos una fiesta, ¿qué hizo el pueblo? El pueblo hizo lo que su líder le dijo que hiciera. Y su líder hizo lo que su Dios le dijo que hiciera que fue coger 12 piedras del mismo sitio en que estaban parados los sacerdotes y esas piedras iban a servir como una señal, como un memorial de eventos que pasan en nuestras vidas para recordarnos cuando vea esa piedra significa que en algún momento de mi vida, de mi largo caminar, en mi viaje con el Señor algo pasó que Dios intervino en mi favor o en el favor de mi familia y esa piedra me va a hacer recordar que si Dios no hubiera estado vivo nos hubieran tragado los enemigos.

Es importante es que las piedras eran para recordar lo que Dios había hecho. Y en esta tarde yo quiero que tu pienses y analices en tu vida individual, en tu vida de familia, en tu vida de comunidad, cuántos eventos tenemos que son piedras que nos recuerdan lo que Dios ha hecho por nuestras vidas. En este país tenemos algunos monumentos que sabemos lo que significan, la tumba del soldado desconocido en Washington, el memorial del Presidente Lincoln, el monumento de Washington. No estoy haciendo propaganda para que vayan a Washington pero están todos en Washington. Tenemos el Memorial Day y sabemos lo que significa y la iglesia tiene la Santa Cena y sabe lo que significa.

Estos monumentos que están en este país se han enseñado a las generaciones a través de los años, décadas y siglos, la gente crece en este país conociendo y sabiendo la historia de estos monumentos. Dios quiere hacer lo mismo con este monumento de nuestras vidas. Si a nosotros nos preguntasen, ¿qué significa esta piedra en tu vida? Lo cual es una pregunta bien importante, la respuesta será más valiosa.

Yo tengo varias piedras en mi vida, como dije en la mañana, una de mis piedras es noviembre 8 del 2010, el accidente de mi hijo. So cuando yo miro esa piedra, yo no miro de una manera que es una tragedia, yo miro que fue un evento que el hombre quiso o planificó dentro de una vida diabólica, crear un evento que fuera tragedia, un evento que atara sentimentalmente y emocionalmente a una familia, de una manera que en vez de recordar cuán misericordioso, cuán magnífico fue el Señor, recordásemos todo lo negativo para mantener una actitud en nuestras vidas depresiva, una actitud de no agradecimiento, porque lo primero que podemos decir es ¿por qué a mí? ¿Por qué a mi familia? Si yo te sirvo, yo te predico, te cantamos. Esa es la autoestima de por qué a mí? Yo soy superior, yo soy todo escogido, tu escogida.

Hermana, hermano, eso nos pasa a todos. Cuando vienen los eventos trágicos o de momento o eventos que no entendemos recordamos todo lo negativo pero lo que debemos hacer de ahora en adelante, cuando en nuestra vida vengan esos eventos negativos, cuando se levanten esos ríos de Jordán, recuerda que aunque se levante como se levante el enemigo, como se refleje el enemigo, sea a través de emociones, sentimientos o cosas físicas, recuerda que de ese evento nuestro deber es hacerlo una piedra, pero una piedra de bendición, una piedra de victoria, una piedra para contarles a las demás generaciones, decirles sí hubo un accidente muy lamentable, pero Dios puso su mano y hoy día está vivo.

Yo también tengo otra piedra, 1948, mi tío un alcohólico jugador empedernido conoce al Señor y ese conocer del Señor cambió todas las generaciones de la familia Rivera. So, esa piedra del 48 yo no recuerdo el alcoholismo, yo no recuerdo que estaba vagabundo en las calles, yo recuerdo que la luz del Señor vino a esa vida y cambió el transcurso de la historia así como cuando estábamos frente al Jordán y entró el arca del pacto y cambió el curso de la historia.

Ahora los judíos podían decir, mi historia antes de cruzar el Río Jordán y ahora la nueva historia después que cruzo el río Jordán. Es bien importante pero bien importante que el Dios de Israel, nuestro todopoderoso Dios esté en el centro de nuestras vidas para que entonces esté en el centro de nuestros hogares. Una vez que Dios está en medio de nuestro Jordán Dios no se mueve.

¿Cuántos dicen otra vez amén por esto? Él no se mueve hasta que lleguemos y alcancemos nuestro lugar, nuestra posición en la tierra prometida. No importa cuánto tarde ese viaje, no importa si el viaje toma años, Aleluya! Nuestro Jesús en el centro del Jordán no se va a mover hasta que tu llegues a tu meta.

Escribía anoche, decía, hermano descanse y también hermano haga este ejercicio, respire, respire. ¿Por qué vamos a respirar frente al Jordán? Porque Dios está parado dentro de ese Jordán y él está conteniendo la braveza, la furia y el ímpetu de esa tormenta. Nosotros solamente sentimos los vientos, no estamos sufriendo el acoso intenso del enemigo aunque lo parezca. Y es bueno saber que aunque yo sea débil, aunque yo no sea perfecto, aunque tengamos deficiencias mi Dios, el todopoderoso, que controla el cielo y el universo, él no ha mandado a un ángel, él, él, él está parado para que tu marches, para que tu camines y cuando salgas al otro lado cuéntale a otros de esa piedra, cuéntale a otros de ese evento, comparte.

Eso fue tan increíble que cuando ellos están para cruzar Josué dice en el verso 10 al pueblo, porque eso es lo bueno de Josué, es algo impetuoso, es algo milagroso pero también Josué les recuerda a ellos que es algo real, no solamente un sueño. Les dice a ellos:

“…En esto conoceréis que el Dios viviente está en medio de vosotros y que él echará de delante de vosotros al cananeo, al eteo, al ebeo, al fariseo, al jerseo, – a todos los eseos, así es más rápido.”

En otras palabras, a los enemigos, como quiera que se llamen. En esto conoceréis que el Dios viviente está en medio de vosotros. Ahora yo diría, en esto conoceréis que nuestro Dios está dentro de nosotros con su Espíritu Santo. No dejes que nada te intimide.

Descansemos sabiendo que aunque nuestras luchas de la vida, nuestras preocupaciones aún continuarán después de haber cruzado nuestro Jordán, podemos descansar en lo absoluto, que no importa, hermanos, que nosotros no tenemos la nube o la columna de fuego, o el arca del pacto, el Dios que se personificaba a través de la nube o la comuna de fuego o el arca del pacto, ahora habita dentro de nosotros el Espíritu Santo.

Cuando yo veo este tipo de efecto dentro del pueblo judío pienso en ese Dios que es un Dios de la providencia, no solamente que provee pero que protege. Un Dios demasiado misericordioso para proteger y proveer, ¿qué significan estas piedras? en el verso 21 del capítulo 4 Josué les dice a los judíos, ya han pasado el río Jordán, y se dirigió a los israelitas y dijo:

“… en el futuro cuando sus hijos les pregunten por qué estas piedras están aquí ustedes les responderán porque el pueblo de Israel cruzó el río Jordán en seco. El Señor, el Dios de ustedes, hizo lo mismo que había hecho con el Mar Rojo cuando lo mantuvo seco hasta que todos nosotros cruzamos. Esto sucedió para que todas las naciones de la tierra supieran que el Señor es poderoso y para que ustedes aprendieran a temerle para siempre.”

Cuando nos pregunten de su evento compártelo, compártelo, que otros vean que nuestro Dios no se quedó en la Biblia, que nuestro Dios no se quedó en el pasado. Esto también nos enseña que sí tenemos un pasado, que vamos a enseñar pero que también tenemos un futuro que mirar y preparar.

Los eventos en los cuales Dios ha intervenido no deben ser olvidados, no deben ser escondidos, no deben ser ignorados bajo ninguna circunstancia. Nuestro deber es compartir mientras vivamos y contarles a otros la historia de ese evento en el cual Dios estuvo parado en nuestro Jordán. Hay algo que también me llamó la atención acerca de tomar las piedras y contar la historia. Y en Deuteronomio hay un pasaje pensando cuando estamos educando a nuestros hijos o a nuestros familiares o a nuestros vecinos, o compañeros de trabajo, es nuestra función, es nuestro deber compartir mientras sea posible la verdad del Evangelio. Y los eventos de nuestra vida ayudan a poder compartir de una manera no acosadora, en un ambiente de trabajo.

Yo tengo por costumbre si alguien en mi trabajo o cuando trabajaba abre una puerta y me hace una pregunta, yo aprovecho esa puerta y comparto ya que la persona abrió la puerta pues yo… eso yo busco, que me abran una puerta y uno hace el resto. Dios le dice a Israel en Deuteronomio:

“Grávate en el corazón estas palabras que hoy te mando; segundo, incúlcaselas a tus hijos continuamente, háblales de ellas cuando estés en tu casa y cuando vayas por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes, átalas a tu mano como un signo, llévalas en tu frente como una marca, escríbelas en los postes de tu casa y en los portones de tu ciudad.”

Grávate, incúlcale, hable, átalas, es un signo, escríbela, hermano, hermana, has tu trabajo con las piedras. una generación de nuestra gente que no escuche el mensaje de la palabra es una generación perdida, una generación que no va a escuchar de Dios, es nuestro deber mantener el conocimiento de Dios en nuestras generaciones porque el mundo no va a enseñarte a dar de Dios, al contrario, es lo menos que quieren.

Vamos a ponernos de pie y hacer un ejercicio en esta mañana. Piensen ahora, hermanos, los que están en el balcón y los que están aquí, estamos frente al río Jordán y tu sabes cuál es tu río Jordán. Todos tenemos un río Jordán y muchos viven frente al río Jordán en la orilla y no sabes qué hacer con ese río Jordán. Es tanto el estrés, la impaciencia que proviene de no saber qué hacer con la problemática que a veces nos ahoga, a veces nuestra voz no se escucha, eso nos roba la paz, no podemos dormir, no tenemos felicidad. El enemigo se ve demasiado grande y poderoso, pensamos que no tenemos alternativas, que no hay soluciones, pero en esta mañana yo te digo a ti como Josué le dijo al pueblo, en tu río Jordán ya Jesús está en el centro de ese río.

Por un momento no te enfoques en la problemática, olvídate de la problemática no la vas a resolver. Vamos a trabajar primero con que Jesús esté dentro de tu corazón. Si Jesús está dentro de tu corazón tu hogar tiene que tener en el centro la presencia de Jesús. Si tu hogar tiene a Jesús en ese centro Aleluya! Si Jesús está en el hogar no importa cuántos ríos de Jordán se van a levantar porque Jesús está en el centro de ese hogar.

Si Jesús está en el centro del hogar y venimos el domingo a la iglesia, o el miércoles, gente que tiene a Jesús en el centro de sus vidas, la iglesia, congregación León de Judá, tiene a Jesús en el centro del río Jordán. Si nuestra iglesia tiene a Jesús en el centro del río Jordán, Boston, here we come, porque tenemos el centro que es Jesús.

¿Quién nos va a parar? Si el centro de nuestra vida es el Señor de todo esto. Se pueden sentar. Yo preparé 8 páginas pero no se asusten. Como dije en la mañana, yo quiero que… iglesia, los tiempos están difíciles, iglesia, los tiempos están difíciles, y no se van a poner mejores, pero nosotros, la iglesia, la que tiene la palabra de Dios para el siglo XXI somos hombres y mujeres parados en la brecha o en las trincheras frente a la orilla del río Jordán. Dios está buscando 12 hombres que tomen la piedra, hay que meterse al agua a coger las piedras para traerlas y hacer un monumento para que entonces el pueblo comience a caminar en fe. En esta hora mi reto para ustedes es, Dios está buscando gente que regrese al río y coja las piedras y levante un monumento de bendición, levante un monumento de victoria, levante un monumento para su gloria y para su honra aunque otros lo estén negando, aunque otros estén apostatando, aunque otros no crean, usted coja su piedra y levante un monumento para las próximas generaciones.

Cuántos lo van a hacer en esta tarde? ¿Qué significan estas piedras? que Dios es un Dios de providencia. ¿Qué significan estas piedras? que hay que enseñarle a las próximas generaciones, no podemos parar de enseñar. ¿Qué significan estas piedras? que convicción es más importante que conveniencia.

Yo dije en la mañana que en Puerto Rico había un ministerio, que puede que exista en otros países también, pero en Puerto Rico de unas películas que eran como de horror, una era El Infierno Ardiente y se reunía un sinnúmero de personas inconversas y se ponía la película y salía el diablo y todas esas cosas y la gente cogía miedo, lloraba y se convertía, porque la conveniencia de no ir al infierno. Pero el sacrificio de la cruz no fue una conveniencia. Jesús tenía la convicción de que al morir por nuestros pecados nos iba a dar la salvación eterna en base a una convicción permanente.

So, mi convicción no es escapar del infierno, es por agradecimiento de que yo estaba perdido y Jesús murió por mí en la cruz del calvario. So, recuerden en esta tarde qué significa la piedra que tu tienes, que Dios tiene providencia, que la palabra tiene que seguir siendo enseñada, que convicción es más importante que conveniencia, y por último, que la iglesia tiene pasado pero tenemos futuro. Y aunque yo no lo vea yo sé que mi Redentor vive y en algún momento él me ha de levantar y él regresará por su iglesia, lo niegue quien lo niegue, Jesús vuelve por su iglesia, al sonar de la trompeta. Dios les bendiga, Dios les guarde.

Vamos a ponernos de pie. En esta tarde al salir de esta iglesia, de este templo y vayamos a nuestros hogares y estemos meditando en la semana, recuerda esto, cuando tu te enfrentes a tu Jordán no vas a estar en la iglesia, tu vas a estar solo o sola, pero eso no importa. Dile al que está al lado ‘eso no importa’ porque Jesús está en el medio del Jordán y él no se va a mover. Dios les bendiga.

Sermón 27 de agosto 2016: Despierta y ve

Transcripción

El tema de esta mañana es “Despierta y ve” y hay cuatro cosas que quisiera compartir con ustedes que necesitamos despertar y ver, lo primero que quisiera hablar en esta mañana es que tenemos que despertar y ver que somos la Iglesia. En este día quiero hablarle un poco sobre una historia que es bastante conocida y por causa del tiempo no voy a leer todo el capítulo pero voy a estar hablando sobre el Libro de Jonás capítulo 1.

Muchos de nosotros conocemos la historia de Jonás, Jonás era un profeta, un profeta es alguien que escucha y obedece la Voz de Dios. El trabajo del profeta es conocer el corazón de Dios y ayudar a otros a entenderlo, el profeta vive y depende de los deseos de Dios. Cuando encontramos a Jonás en el capítulo 1 es importante conocer que Jonás no era un creyente nuevo, él no estaba tratando de ver qué era él en el Cuerpo de Cristo, en ese tiempo no conocían a Cristo, sino en la Iglesia, él conocía el propósito de su vida, él conocía su identidad, ya él había estado activo un tiempo, él venía y funcionaba con su relación con Dios como profeta.

Así como Jonás la Iglesia no es una institución nueva, nosotros conocemos nuestra identidad, somos la novia de Cristo, nos sometemos y obedecemos a nuestro esposo, somos el Cuerpo que físicamente realiza y demuestra los pensamientos de la Cabeza que es Cristo, nosotras también tenemos que conocer el corazón de Dios. La Iglesia vive y funciona, y depende de cada palabra que sale de la boca de Dios, Jesús es nuestra fundación. Cuando saben que Jesús es nuestra fundación estamos fundadas sobre la roca, y Jesús es el que nos dió Su sacrificio para que podamos vivir como Iglesia dependiendo de la Gracia de Dios, esa es la Iglesia, vivimos de la Palabra de Dios y dependemos de Su Gracia, y con mucho gozo aceptamos los cambios que la Gracia trae a nuestra vida.

La Gracia de Dios nos permite ser como Cristo, transforma nuestra imagen así como cuando Jesús transformó Su imagen para estar con nosotros, vivimos de acuerdo a la Voluntad de Dios por Su Gracia así como Jesús vivió de acuerdo a la Voluntad de Dios cuando estuvo aquí en la Tierra y después la Gracia nos torna en instrumentos para la transformación de otros así como cuando Cristo se apareció para decirle a los discípulos: Vayan y transformen a otros.

Pero en algún lugar de nuestra vida cristiana, y no estoy hablando en particular a las mujeres de León de Judá, hablo con ustedes de ustedes pero no solamente de ustedes porque nosotras somos partes del Cuerpo de Cristo y hay una gran preocupación por el Cuerpo de Cristo, porque en el Cuerpo de Cristo hay personas que se han enamorado tanto de la gracia, de lo lindo que hace la gracia para nosotras, nos da una nueva imagen y nos pone tan bonitas que nos quedamos en el espejo mirando y diciendo: wow, mira lo que hizo en mí, y nos hemos enamorado tanto de lo que la gracia hace por nosotras que el yo comienza a distraernos y comenzamos a tornarnos en personas que no están dispuestas a salir y a decirle a otros de la gracia que hemos recibido.

Cuando creemos en el poder de la gracia y comenzamos a pensar que la gracia es aplicada a nuestra vida selectivamente comenzamos a perder el poder activo y efectivo que hay en ser la Iglesia porque hemos sido llamadas a ser una Iglesia activa y efectiva llena de poder y yendo a través del mundo, y diciéndole a todos que Cristo vive, que Cristo cambia y que Cristo viene otra vez, ese es el poder que se encuentra en la Iglesia de Cristo.

Pero así como la obsesión de America con la cirugía plástica y con mantenernos todas súper jóvenes nos hacemos adictas de la gracia para que nos mantenga frescas y no queremos meternos en nada que nos vaya a desgastar o algo que cueste algún esfuerzo porque no queremos sudar para nada, pero la gracia no vino para que no sudaras, así como Jonás la Iglesia de hoy ha decidido correr de la seguridad de las cosas que conocemos.

La Biblia dice en Romanos 8:28 que esto es lo que conocemos, nos concentramos tanto en decir que oh, todo obra para bien para los que aman a Dios y han sido llamados de acuerdo a Su propósito, siempre decimos esa parte pero el verso comienza diciendo que: esto es lo que conocemos. Tenemos que estar fundados en lo que conocemos que somos pero mucha gente ha decidido correr hacia la incertidumbre de un mundo desconocido, aún la Iglesia ha comenzado a tornarse a una jornada donde la salvación está cerca pero las demandas están lejos.

Eso es lo que Jonás estaba tratando de hacer, él no quería correr de Dios, él quería mantener a su Dios pero quería alejarse de lo que Dios le pedía porque lo que Dios demandaba de él era algo que lo iba a hacer sudar, era algo que él no quería hacer, era algo que él no esperaba. ¿Sabías tú que había un tiempo en la historia donde la gente sabía que la Iglesia era el lugar donde si tenían dificultades y problemas podían venir? Si tú te encontrabas enfermo la gente no pensaba en los hospitales, pensaba en la Iglesia.

La Iglesia era un lugar de refugio, la Iglesia era el lugar que Cristo dijo que íbamos a ser, era la casa de oración y en la Iglesia habían guerreros que activaban efectivamente el Poder de Dios, allí existía la gente que sabía cómo comenzar conversaciones con Dios que terminaban con la manifestación del increíble Poder que hay en nuestro Jesús, la misericordia y la Gracia de Dios era como una fuente que se abría con las oraciones de los santos pero ¿qué ha sucedido? que hoy en día la Iglesia si tú miras está siendo criticada, está siendo atacada, no es un lugar presentado como un lugar donde podemos ir para hacerla nuestro refugio.

Yo creo que podemos echarle la culpa a muchas diferentes cosas pero es importante que entendamos que nosotras como el Cuerpo de Cristo hemos permitido que muchos de nuestros propios deseos entren a lo que es la Iglesia, hemos permitido que nuestro yo se ponga entre lo que es la Iglesia de verdad y lo que el mundo está viendo, y lo que sucede cuando la Tierra se pone entre medio del sol que es Jesús y la luna que es la Iglesia que se supone que tiene que dar luz en medio de las tinieblas. Cuando el yo que es la Tierra y mis deseos carnales se pone entre medio del sol y la luna, ahí es donde se causa un eclipse lunar donde hay obscuridad en todo lugar, por eso nosotras tenemos que asegurarnos que estamos fundadas sobre lo que en verdad somos, somos la luna y no reflejamos nuestra propia luz.

La luna refleja la luz de Cristo, la luz del sol es lo que vemos en la luna y no podemos permitir que el yo se meta en medio de ello. Jonás estaba reflejando la luz hasta que llegó algo que no parecía ya gustarle más, y lo segundo que creo que tenemos que despertar y ver es que tenemos que despertar y ver que nuestras prioridades tienen que cambiar, primero tenemos que despertar y ver que somos la Iglesia.

Lo lindo es ver que aunque haya un eclipse lunar el sol todavía es el sol, la luna todavía es la luna, la tierra todavía es la tierra, nuestro propósito todavía está, simplemente tenemos que ubicarnos donde tenemos que estar y podemos comenzar a hacer eso si despertamos y vemos que nuestras prioridades tienen que cambiar.

Fue el Dios de la tormenta que vino a demostrarle a Jonás que su fe estaba inestable y que sus prioridades estaban desordenadas. En algún momento en la vida de Jonás el profeta que vivía al servicio de Dios a lo mejor sin darse cuenta, Jonás terminó poniéndose a sí mismo como prioridad, los deseos de él comenzaron a ser más importantes que los deseos de Dios, pero desde el principio de la fundación del mundo Dios creó una separación entre el cielo y la tierra.

Hay un debate teológico muy grande sobre lo que sucedió en el verso 1 y el verso 2 del Génesis porque la Biblia dice que Dios creó todo en orden y de repente todo estaba desmoronado como decimos los puertorriqueños, estaba vacío, estaba sin forma, y no sé exactamente la respuesta, yo no vine a decirte que tengo la respuesta porque no la tengo y a lo mejor no lo vamos a saber hasta que lleguemos al cielo, y la verdad que eso no me importa tanto, lo que me importa es que suena a que hubo una tormenta que intercambió las cosas, vino y sacó las cosas de su lugar, las desordenó y cuando las cosas están desornenadas o pasa una tormenta después tú las ves y están como que casi no se pueden reconocer.

En el Génesis dice que la oscuridad que se suponía que habitara en la profundidad de la mar ahora está en la superficie de la mar, en otras palabras esas cosas estaban al revés. Dios había creado algo perfecto y bello pero ahora está al revés así como estaba Jonás, así como estamos algunas de nosotras que estamos al revés que casi ni nos reconocemos a nosotras mismas, no podemos ni siquiera señalar exactamente el punto donde las cosas comenzaron a cambiar, pero sabemos que no estamos alineadas ¿y cómo lo sabemos? porque no estamos siendo la luna que refleja la luz del sol, no estamos en un lugar donde la gente me puede mirar como miraban a Ana y decir: esa luz me está dejando saber que yo puedo brillar también.

Los sentimientos personales de Jonás hacia Nínive tuvieron mas prioridad que los deseos de Dios para esa ciudad pero eso es fácil, si no te gusta lo que quiere Dios pues vete para otro lugar y eso es lo que dijo Jonás, en ese tiempo ese era el fin del mundo, él quería irse ya para donde Dios no me pueda ni tocar decía él, pero si tú eres como yo, a mí me encanta viajar, y yo he ido a cruceros anteriormente, y cuando uno tiene que ir a un crucero tú comienzas a empacar tu maleta ¿verdad? y yo por lo menos necesito 15 pares de zapatos cuando voy a un crucero, y yo empiezo a empacar, pero cuando tú empacas, estás guardando toda tu ropa y haciendo tú no te puedes llevar el clóset completo, tú no te puedes llevar todos tus productos de belleza porque hoy en día necesitas 20 para hacer una cara normal (risas), y no te puedes llevar todos los lujos que tú tienes en casa, todas tus cosas preferidas no te las puedes llevar contigo.

Entonces tú comienzas a guardar tus cosas y cuando terminas ves: yo no puedo cerrar esta maleta y no me puedo llevar siete maletas, so yo empiezo a comparar las cosas y mirar a ver qué es lo más importante, y tú dices: mira yo pensé que podía llevarme esto y yo puedo vivir sin esto una semana así que yo la cambio y pongo otra cosa, así que cuando la maleta llega a la barca ya ha pasado por un proceso de escoger por prioridades y decir que lo que tú te estás llevando eso es lo más importante para el viaje que tú tienes.

Me imagino que todos los marineros en la barca que estaban con Jonás hicieron ese mismo proceso y dijeron: esto es lo más importante que va en la barca conmigo; pero cuando se levanta la tormenta y los vientos comienzan a soplar, y tú estás en medio de la barca los vientos comienzan a cambiar tus prioridades, porque la verdad es que la única manera de ayudar a la barca a sobrevivir es comenzar a echar las cosas que tú pusistes en la barca que dijistes que eran tan importantes, de repente te das cuenta que no necesitas tacos para nadar, que esa camisetita tan linda que tú tenías tú la intercambias rápido por ese bálsamo anaranjado que ni te pega con el pelo ni con nada tú rápido lo cambias, porque en el momento donde llega la tormenta uno comienza a evaluar y la cosa es que nosotras tenemos que saber que hemos estado cargando con pesos que no son tan importantes, hemos dado prioridades a cosas que no nos ayudan a actuar como lo que somos, la Iglesia de Cristo.

Por un momento en el tiempo Jonás creía que había encontrado su descanso en esa barca pero yo quiero que tú sepas en esta mañana que aún si te sientes calmadita con todas tus posesiones Dios siempre tiene un plan para que nosotras podamos llegar a las prioridades que nosotras tenemos para nuestras vidas y muy a menudo eso incluye una tormenta. Algunas de nosotras tenemos que evaluar y echar a la mar cosas que no debemos estar cargando.

Algunas nos hemos estado quejando de las tormentas en nuestras vidas pero Dios las envió para que tú te hagas una pregunta, la pregunta es: ¿cuánto en verdad yo necesito esto? ¿necesito esto para cumplir mi propósito o el valor de esto me va a hacer que si me aferro me hundo? Nuestras prioridades tienen que cambiar Iglesia, tenemos que concentrarnos en los valores que la Palabra dice que nos define como la Iglesia, tenemos que despertar y ver: somos la Iglesia de Cristo, tenemos que estar orgullosas de saber que somos la Iglesia de Cristo, tenemos que despertar y ver que nuestras prioridades tienen que cambiar.

Y por tercero despertar y ver que nuestro Dios es el Dios de la tormenta. Muy a menudo la Biblia nos enseña que el enemigo viene a robar, matar y destruir, y la tormenta cuando viene lo que hace es un desorden y trae desorden, trae muerte y destruye, y nosotras rápido le echamos la culpa al enemigo, le echamos la culpa al diablo por todo, el pobre diablo a veces me da pena (risas), porque él dice: yo ni pasé por allí y todo el mundo echándole la culpa al diablo.

Hoy tú necesitas saber que ese Dios lindo al que tú le estabas cantando que estaba entronado Él no solamente habla autoridad a tu vida pero los vientos y la mar también lo tienen que escuchar y Él es el Dios de la tormenta, y Él usa la tormenta para mostrar Su Poder y control sobre todas las cosas, las cosas a nuestra vista parecen estar fuera de control, pero Dios siempre está en control, Él es el que muestra Su Poder y autoridad.

En Génesis cuando se habla de que la Tierra estaba desordenada lo que me impactó a mí sobre el versículo 2 es que aunque no conocemos qué fue lo que causó el desorden y puede ser que mucha gente, mucha gente dice que puede ser el demonio y eso pero yo creo que Dios es el que tiene el control sobre todas las cosas, porque dice que aunque la oscuridad estaba sobre la faz de la mar, aún cuando las cosas estaban al revés el Espíritu de Dios se movía sobre las aguas porque los vientos pueden venir, las olas pueden atacarte y pueden mover todas las cosas pero tu Dios es un Dios inmovible, a tu Dios nada lo puede mover si Él no se quiere mover.

La verdad es que Dios es el Dios de la tormenta, por eso en las buenas yo le doy gloria y cuando vienen las malas yo le doy gloria porque Él es el Dios de la tormenta, así como es el Dios de los días soleados, en medio de esa tormenta Él las permite para mostrarnos verdades sobre nosotros mismos. Si la tormenta no llegara no conoceríamos cuáles son las cosas inmovibles y cuáles son las cosas que rápidamente se mueve, no sabemos cuáles son las cosas que pueden ser manipuladas por una tormenta y cuáles son las cosas eternas en nosotros, sin una tormenta no vas a saber si estás sobre la arena o sobre una roca, pero gracias a Dios por esas tormentas que no vienen para ahogarnos, vienen para dejarnos saber que hay un Dios misericordioso que está pendiente de cada una de nosotras y Él está dispuesto a rescatarnos y a hacernos darnos cuenta de la condición en la que estamos de verdad.

Dios en las Escrituras ha establecido que hay propósitos en la tormenta, con Noé Él reveló que Él puede usar una tormenta para separar la justicia del pecado. En Pedro Él pudo revelar que la realidad de la fe de Pedro, porque Pedro creía que ya había madurado todo lo que tenía que madurar en la fe, pero Dios le quiso enseñar a Pedro que sólo se necesita un poco de fe para que Dios sea glorificado. Jesús usó una tormenta para revelar la paz que trasciende todo entendimiento y con Pablo Él causó una tormenta para revelar su fidelidad, porque Pablo era un creyente en medio de muchos incrédulos y cuando él hablaba la Palabra de Dios nadie estaba escuchando pero cuando Dios envió una tormenta, todo el mundo quería saber de Pablo y todos salieron de ese lugar salvos.

Con Jonás Dios envió la tormenta para mostrarnos y revelar que Dios puede retornar la fe a aquéllos que la han perdido. Esta historia no es para que critiquemos a Jonás, esta historia es para que veamos el buen pastor, que cuando queramos irnos del redil Dios usa hasta a las tormentas para retornarnos al lugar donde tenemos que estar, donde Él nos cuida, donde Él nos sana, donde Él nos llena de gozo, Él nos llena de Su paz porque Él es el buen pastor, tenemos que despertar y ver que Dios es el Dios de la tormenta. ¿Cuántos pueden darle gloria a Dios por la tormenta presente que está en tu vida?

Y por último tenemos que despertar y ver que este mundo está desesperadamente pidiendo oración. Yo sé que dices: oh, no, no eso no es aquí en América porque la gente ya no quiere orar, están sacando la oración de todos los lugares, ¿sabías tú que tus buenas y malas decisiones afectan a otros?

Somos llamados a ser salvavidas, pescadores de hombres, entonces cuando nosotras caminamos fuera de la Voluntad de Dios y del llamado de Dios no solamente estamos poniendo nuestra vida en riesgo, estamos poniendo la vida de otros en riesgo porque somos llamados para ir y salvar a otros.

Jonás cuando se paró en esa barca puso sus pies sobre la barca, en ese momento fue cuando él puso en acción esa tormenta, pero esa tormenta no lo iba a afectar a él solamente, iba a afectar a todos los que estaban con él en esa barca, por eso tenemos que tener cuidado cuando tomamos decisiones basadas en nuestras emociones.

Los marineros en ese lugar tenían temor de esa tormenta, ellos no eran marineros nuevos, ellos sabían lo que era ser un marinero en medio de una tormenta y tenían experiencia de qué hacer en medio de una tormenta, pero aún en medio de esa tormenta ellos pudieron discernir que esa tormenta no era una tormenta normal, hay algo diferente en esa tormenta, hay algo como que la matemática no está resultando bien, por eso ellos comenzaron a clamar a sus dioses y a orar, y cuando nadie respondía ellos dicen: esto no es normal y la culpa es de alguien aquí.

Ellos sabían que eso no tenía nada que ver con lo que estaba pasando afuera, tenía que ver con todo lo que estaba pasando dentro de la barca y comenzaron a decir: ¿quién tiene la culpa? Y cuando encontraron a Jonás estaba dormido no con el mismo sueño que tuvo Jesús porque Jesús dormía con la paz de que todo estaba bien, Jonás estaba dormido porque se tomó una pastillita para no saber qué es lo que estaba pasando con el mundo alrededor, y yo entiendo que necesitamos nuestros doctores y medicaciones pero hoy yo vengo a hablar en contra del espíritu de la depresión y de médicos que siguen haciendo a personas adictos para que se duerman a través de la vida, y Dios no te llamó a dormir a través de esta vida, Él quiere que estés despierta porque tiene vida y vida en abundancia para ti mujer.

Jonás quería olvidarse de su mundo y cuando los marineros lo encontraron, oh wow lo que dijeron debiera chocar a cada uno de nuestros corazones. Las preguntas que le hicieron las escucho el día de hoy, suenan diferente, es más, suenan como acusaciones; por eso nos miran y nos critican como Iglesia, pero nosotros tenemos que entender que la razón por la que están mirándonos y echándonos críticas es porque saben que tenemos las respuestas y no hay nada más frustrante que ver a algo que ha sido llamado a ser luz escondiéndose debajo de la mesa, tenemos un templo precioso pero no es para esconder la luz aquí, y ya ustedes vagan por todas estas luces bellas para que alumbren, pero hay un mundo de oscuridad que necesita que tú vayas y lo alumbres.

Y cuando el capitán le dice: ¿cómo es que tú puedes dormir? ¿cómo es que tú no te das cuenta lo que está sucediendo alrededor? Todo este terrorismo, toda esta violencia, todas esas cosas que están sucediendo ¿qué puedes hacer tú, qué puedo hacer yo? La Biblia dice que el amor es la respuesta, el amor de Dios nunca falla contra el terrorismo, el terrorismo no es más grande que el amor de Dios, la violencia no es más grande que el amor de Dios, tenemos la respuesta.

Y el capitán dice: ¿cómo es que tú puedes dormir? y el inconverso le da la respuesta a la Iglesia de cómo nosotros podemos sobrellevar esto, le dice: levántate y clama a tu Dios, despierta y clama a tu Dios, despierta mujer y clama a tu Dios. Yo ví un anuncio que decía que las mujeres iban a orar, es tiempo de despertar y clamar a nuestro Dios, los políticos no encuentran la respuesta, el mundo no encuentra la respuesta porque la respuesta está en que nosotras clamemos a nuestro Dios.

Dice: puede ser que si tú clamas Dios toma nota de nosotros y no perecemos. Toda esa violencia es un mundo tratando de llorar y decir: si tú clamas puede ser que Dios me rescate a mí también, porque nadie quiere morir, todos queremos vivir, pero si tú clamas puede ser que tu Dios tenga misericordia de otros.

La Iglesia es la mejor institución que hay en la faz de la Tierra, nosotros vivimos en contra del pecado, nosotros servimos al Dios que es el único que puede deshacerse del pecado pero no nos podemos volver un gigante durmiente, tenemos que levantarnos, ¿cómo podemos dormir en este tiempo? Es tiempo de despertar y ver que tenemos que clamar a Dios que tiene todas las respuestas para los tiempos en los que vivimos.

Después le dice: ¿quién es responsable por hacer todo este problema para nosotros? Y le preguntas a la Iglesia y la Iglesia te señala a tantos diferentes puntos en la historia y la gente, y que si esto, que si lo otro pero yo creo que es tiempo que la Iglesia tome ese dedo y se lo torne así (apuntándose a sí misma), ¿en qué hemos sido responsables, qué es lo que hemos hecho para dejar de hacerlo? Tenemos que dejar de hacer ciertas cosas para que el sol sea sol y nosotras seamos la luna.

Le preguntaron ¿de qué parentela tú eres? ¿saben por qué? porque a veces nos tenemos que enfrentar con una pregunta ¿de dónde tú eres? para que nos recordemos quiénes somos. Yo sé que Dios escogió que el capitán le haga esas preguntas a Jonás para que nosotras en este día podamos tener la iluminación de que Él es el que estaba preguntando a través del capitán estas cosas y las preguntas no las hizo porque las respuesta no las sabían, las preguntas nacieron porque Jonás se olvidó y decidió dormirse en un tiempo donde Dios quería salvar.

Hazte la pregunta: tu Dios ¿todavía está buscando restaurar y salvar? Tu Dios ¿quiere usarte a ti para restaurar y salvar? Tenemos que despertar y ver que somos la Iglesia de Cristo, pedirle a Dios que nos ayude a cambiar nuestras prioridades, entender que Dios es el Dios de mi tormenta y despertar, y ver que el mundo desesperadamente está pidiendo la oración.

Hay gente que dice que el avivamiento que ha sido prometido por muchos años a Nueva Inglaterra que nunca va a suceder aquí, porque la gente especialmente la gente de Boston son muy intelectuales, ustedes son demasiado intelectuales, ustedes tratan de entender a Dios con tanto detalle que se lo pierden, las escuelas I believes comenzaron con la fundación de Dios pero al tratar de entenderlo al final dijeron: parece que no hay Dios y ya la gente ha comenzado a decir que en Su avivamiento no va a pasar por aquí, porque ustedes no parecen gente que van a causar un avivamiento.

Y mientras alguien muy inteligente en su inteligencia y en su astucia me estaba tratando de explicar por qué Dios no va a traer un avivamiento a Nueva Inglaterra mientras él hablaba yo me empecé a emocionar, y él me estaba mirando y yo decía: oh my God, oh my God, y él me decía: es que como, tú sabes, tengo tanta mucha más inteligencia que tú, déjame ponerlo en palabras que tú puedas entender, entre más él decía yo: ay, no podía yo enojarme con su ignorancia, porque él no conocía lo que estaba pasando en mí, mientras él decía esas palabras yo recordaba que Él siempre se aparece en los lugares que menos esperamos, y yo decía: wow Él está confirmando que Dios en verdad va a cumplir Sus promesas, y yo lo espero; pero para que el avivamiento llegue tenemos que despertar, tenemos que despertar y ver, el avivamiento no sucede con sonámbulos.

Dios en esta mañana Dios me envió simplemente para ser tu alarma, y aquéllas que no les gusta la alarma (sonido de golpear la alarma) pero Dios quiere despertarnos y ver, nos hemos metido tanto en lo que no queremos hacer y en lo que las tormentas nos han causado que nos hemos perdido el enfoque real, y yo sé que vine en un día en que el corazón está un poco pesado, pero creo que esta Palabra es muy apropiada porque el dolor no puede quitarte el enfoque de lo que Dios ha querido hacer, de lo que la hermana Ana fue fiel en hacer.

Nosotras somos llamadas para ser la luz y tenemos que despertar a esa luz para que alumbremos donde quiera, para que Dios pueda lograr en cada una de nosotras que nos convirtamos en esa luz que salva a otras, porque la gracia no es sola para mí, la gracia llega a mí para que yo dé gratuitamente lo que yo he recibido. ¿Cuántas en esta mañana están listas para abrir sus ojos?

Ahí donde tú estás cierra tus ojos. Si en esta mañana, yo voy a orar por estos cuatro grupos y tú puedes, si tú no te has sentido como la Iglesia de Cristo, si tú nunca has conocido y has aceptado a Cristo como tu Señor y Salvador yo te voy a invitar a que vengas adelante en esta mañana, yo voy a orar contigo. Si mientras estaba hablando más temprano tú te diste cuenta que tus prioridades no están en su lugar, que hay ciertas maletas que tú tienes que echar del barco, no es fácil hacerlo, no es fácil decirle adiós a las cosas que tú pensabas que eran importantes, pero si esa eres tú queremos orar por tu vida en esta mañana, si tú eres aquélla que has estado echándole la culpa al diablo por la tormenta que Dios ha traído para traer tu atención a cosas importantes yo quiero orar contigo.

Y si tú eres esa persona que se ha dado de cuenta que el mundo sí quiere escuchar de Cristo, porque la mentira más grande que el enemigo tiene ahora es que la gente no quiere escuchar de Dios, por eso cuando llega la tormenta lo primero que hacen es: claman, claman, claman, en verdad ese vacío nunca se va, existe en cada creación, las huellas digitales de Dios están en cada una de nosotras, pero también están a través del mundo y esas huellas dejan un vacío si tú no tienes a Dios, que Dios nos dé la gracia para alcanzar a aquéllos que niegan querer conocer a Dios, esas son las oraciones que haremos en esta mañana, si esa eres tú, ven rápido al altar a orar.

Yo no sé si hay, quiénes son las ministras de la casa que nos ayuden a ministrar a las mujeres mientras vienen pero, mi oración es que entre todas las cosas que hemos aprendido hoy, este es el primer capítulo de una serie que estoy escribiendo sobre: la oración camina (prayer walks) porque creo que la gente que cree en Dios debe hablar con Él, y en la Iglesia uno de los errores ha sido que la gente se ha creído que la oración es opcional, pero nosotras dependemos de nuestras conversaciones con Dios, y esas oraciones nos van a ayudar a activar el poder efectivo de la oración, y por eso la oración es muy importante, no la tomemos en poco.

Si habrá alguien en esta mañana vamos a orar, si no hacemos una oración general. Levanta tus manos donde estás: Señor yo te doy gracias por estas mujeres, Señor Tú nos conoces y así como Jonás Tú nos persigues. Señor desde aquí hasta el asiento donde están o hasta donde se han ido sus mentes, la distancia Tú la puedes medir y tú las puedes alcanzar en cada lugar donde ellas están, Tú conoces sus necesidades, Tú conoces el destino que Tú tienes para cada una de estas mujeres.

Señor te damos gracias por no rendirte de cada una de nosotras, te damos gracias porque nuestros caprichos nos pueden desviar pero no nos pueden robar el destino que Tú tienes para cada una de nosotras porque Tú nos retornas a Tu Voluntad, Tú nos persigues Señor con Tus propósitos.

Yo te pido que en esta mañana estas mujeres puedan despertar y ver que Tú has querido llamar su atención, Tú las estás llamando a clamar a Tu Nombre porque hay un mundo que está recibiendo tormentas a causa de las decisiones que hemos tomado. Señor no podemos olvidarnos del Dios de la tormenta en estos tiempos, Señor que podamos despertar y clamar, y no solamente clamar por nuestra salvación pero Señor, que todos aquéllos que están atemorizados por lo que está sucediendo a nuestro alrededor puedan encontrar la salvación a través de estos pasos en este lugar, úsalas Señor para Tu gloria, Señor úsalas para que este lugar esté repleto de almas nuevas, Señor que dos cultos no sean suficientes, Señor que vengan como multitudes a Tu Casa conociendo que esta es la casa de oración, aquí hay poder, aquí hay respuestas, aquí hay sanidad, aquí hay libertad, está aquí y está en ellas mientras ellas caminan este mundo, ayúdalas a resistir la tentación de huír y mantenerse firmes Señor en Tu Palabra, gracias Padre, te bendecimos en el Nombre de Jesús, te bendecimos por estas mujeres Señor y te damos gracias.

Despierta y ve

TRANSCRIPT

El tema de esta mañana es “Despierta y ve” y hay cuatro cosas que quisiera compartir con ustedes que necesitamos despertar y ver, lo primero que quisiera hablar en esta mañana es que tenemos que despertar y ver que somos la Iglesia. En este día quiero hablarle un poco sobre una historia que es bastante conocida y por causa del tiempo no voy a leer todo el capítulo pero voy a estar hablando sobre el Libro de Jonás capítulo 1.

Muchos de nosotros conocemos la historia de Jonás, Jonás era un profeta, un profeta es alguien que escucha y obedece la Voz de Dios. El trabajo del profeta es conocer el corazón de Dios y ayudar a otros a entenderlo, el profeta vive y depende de los deseos de Dios. Cuando encontramos a Jonás en el capítulo 1 es importante conocer que Jonás no era un creyente nuevo, él no estaba tratando de ver qué era él en el Cuerpo de Cristo, en ese tiempo no conocían a Cristo, sino en la Iglesia, él conocía el propósito de su vida, él conocía su identidad, ya él había estado activo un tiempo, él venía y funcionaba con su relación con Dios como profeta.

Así como Jonás la Iglesia no es una institución nueva, nosotros conocemos nuestra identidad, somos la novia de Cristo, nos sometemos y obedecemos a nuestro esposo, somos el Cuerpo que físicamente realiza y demuestra los pensamientos de la Cabeza que es Cristo, nosotras también tenemos que conocer el corazón de Dios. La Iglesia vive y funciona, y depende de cada palabra que sale de la boca de Dios, Jesús es nuestra fundación. Cuando saben que Jesús es nuestra fundación estamos fundadas sobre la roca, y Jesús es el que nos dió Su sacrificio para que podamos vivir como Iglesia dependiendo de la Gracia de Dios, esa es la Iglesia, vivimos de la Palabra de Dios y dependemos de Su Gracia, y con mucho gozo aceptamos los cambios que la Gracia trae a nuestra vida.

La Gracia de Dios nos permite ser como Cristo, transforma nuestra imagen así como cuando Jesús transformó Su imagen para estar con nosotros, vivimos de acuerdo a la Voluntad de Dios por Su Gracia así como Jesús vivió de acuerdo a la Voluntad de Dios cuando estuvo aquí en la Tierra y después la Gracia nos torna en instrumentos para la transformación de otros así como cuando Cristo se apareció para decirle a los discípulos: Vayan y transformen a otros.

Pero en algún lugar de nuestra vida cristiana, y no estoy hablando en particular a las mujeres de León de Judá, hablo con ustedes de ustedes pero no solamente de ustedes porque nosotras somos partes del Cuerpo de Cristo y hay una gran preocupación por el Cuerpo de Cristo, porque en el Cuerpo de Cristo hay personas que se han enamorado tanto de la gracia, de lo lindo que hace la gracia para nosotras, nos da una nueva imagen y nos pone tan bonitas que nos quedamos en el espejo mirando y diciendo: wow, mira lo que hizo en mí, y nos hemos enamorado tanto de lo que la gracia hace por nosotras que el yo comienza a distraernos y comenzamos a tornarnos en personas que no están dispuestas a salir y a decirle a otros de la gracia que hemos recibido.

Cuando creemos en el poder de la gracia y comenzamos a pensar que la gracia es aplicada a nuestra vida selectivamente comenzamos a perder el poder activo y efectivo que hay en ser la Iglesia porque hemos sido llamadas a ser una Iglesia activa y efectiva llena de poder y yendo a través del mundo, y diciéndole a todos que Cristo vive, que Cristo cambia y que Cristo viene otra vez, ese es el poder que se encuentra en la Iglesia de Cristo.

Pero así como la obsesión de America con la cirugía plástica y con mantenernos todas súper jóvenes nos hacemos adictas de la gracia para que nos mantenga frescas y no queremos meternos en nada que nos vaya a desgastar o algo que cueste algún esfuerzo porque no queremos sudar para nada, pero la gracia no vino para que no sudaras, así como Jonás la Iglesia de hoy ha decidido correr de la seguridad de las cosas que conocemos.

La Biblia dice en Romanos 8:28 que esto es lo que conocemos, nos concentramos tanto en decir que oh, todo obra para bien para los que aman a Dios y han sido llamados de acuerdo a Su propósito, siempre decimos esa parte pero el verso comienza diciendo que: esto es lo que conocemos. Tenemos que estar fundados en lo que conocemos que somos pero mucha gente ha decidido correr hacia la incertidumbre de un mundo desconocido, aún la Iglesia ha comenzado a tornarse a una jornada donde la salvación está cerca pero las demandas están lejos.

Eso es lo que Jonás estaba tratando de hacer, él no quería correr de Dios, él quería mantener a su Dios pero quería alejarse de lo que Dios le pedía porque lo que Dios demandaba de él era algo que lo iba a hacer sudar, era algo que él no quería hacer, era algo que él no esperaba. ¿Sabías tú que había un tiempo en la historia donde la gente sabía que la Iglesia era el lugar donde si tenían dificultades y problemas podían venir? Si tú te encontrabas enfermo la gente no pensaba en los hospitales, pensaba en la Iglesia.

La Iglesia era un lugar de refugio, la Iglesia era el lugar que Cristo dijo que íbamos a ser, era la casa de oración y en la Iglesia habían guerreros que activaban efectivamente el Poder de Dios, allí existía la gente que sabía cómo comenzar conversaciones con Dios que terminaban con la manifestación del increíble Poder que hay en nuestro Jesús, la misericordia y la Gracia de Dios era como una fuente que se abría con las oraciones de los santos pero ¿qué ha sucedido? que hoy en día la Iglesia si tú miras está siendo criticada, está siendo atacada, no es un lugar presentado como un lugar donde podemos ir para hacerla nuestro refugio.

Yo creo que podemos echarle la culpa a muchas diferentes cosas pero es importante que entendamos que nosotras como el Cuerpo de Cristo hemos permitido que muchos de nuestros propios deseos entren a lo que es la Iglesia, hemos permitido que nuestro yo se ponga entre lo que es la Iglesia de verdad y lo que el mundo está viendo, y lo que sucede cuando la Tierra se pone entre medio del sol que es Jesús y la luna que es la Iglesia que se supone que tiene que dar luz en medio de las tinieblas. Cuando el yo que es la Tierra y mis deseos carnales se pone entre medio del sol y la luna, ahí es donde se causa un eclipse lunar donde hay obscuridad en todo lugar, por eso nosotras tenemos que asegurarnos que estamos fundadas sobre lo que en verdad somos, somos la luna y no reflejamos nuestra propia luz.

La luna refleja la luz de Cristo, la luz del sol es lo que vemos en la luna y no podemos permitir que el yo se meta en medio de ello. Jonás estaba reflejando la luz hasta que llegó algo que no parecía ya gustarle más, y lo segundo que creo que tenemos que despertar y ver es que tenemos que despertar y ver que nuestras prioridades tienen que cambiar, primero tenemos que despertar y ver que somos la Iglesia.

Lo lindo es ver que aunque haya un eclipse lunar el sol todavía es el sol, la luna todavía es la luna, la tierra todavía es la tierra, nuestro propósito todavía está, simplemente tenemos que ubicarnos donde tenemos que estar y podemos comenzar a hacer eso si despertamos y vemos que nuestras prioridades tienen que cambiar.

Fue el Dios de la tormenta que vino a demostrarle a Jonás que su fe estaba inestable y que sus prioridades estaban desordenadas. En algún momento en la vida de Jonás el profeta que vivía al servicio de Dios a lo mejor sin darse cuenta, Jonás terminó poniéndose a sí mismo como prioridad, los deseos de él comenzaron a ser más importantes que los deseos de Dios, pero desde el principio de la fundación del mundo Dios creó una separación entre el cielo y la tierra.

Hay un debate teológico muy grande sobre lo que sucedió en el verso 1 y el verso 2 del Génesis porque la Biblia dice que Dios creó todo en orden y de repente todo estaba desmoronado como decimos los puertorriqueños, estaba vacío, estaba sin forma, y no sé exactamente la respuesta, yo no vine a decirte que tengo la respuesta porque no la tengo y a lo mejor no lo vamos a saber hasta que lleguemos al cielo, y la verdad que eso no me importa tanto, lo que me importa es que suena a que hubo una tormenta que intercambió las cosas, vino y sacó las cosas de su lugar, las desordenó y cuando las cosas están desornenadas o pasa una tormenta después tú las ves y están como que casi no se pueden reconocer.

En el Génesis dice que la oscuridad que se suponía que habitara en la profundidad de la mar ahora está en la superficie de la mar, en otras palabras esas cosas estaban al revés. Dios había creado algo perfecto y bello pero ahora está al revés así como estaba Jonás, así como estamos algunas de nosotras que estamos al revés que casi ni nos reconocemos a nosotras mismas, no podemos ni siquiera señalar exactamente el punto donde las cosas comenzaron a cambiar, pero sabemos que no estamos alineadas ¿y cómo lo sabemos? porque no estamos siendo la luna que refleja la luz del sol, no estamos en un lugar donde la gente me puede mirar como miraban a Ana y decir: esa luz me está dejando saber que yo puedo brillar también.

Los sentimientos personales de Jonás hacia Nínive tuvieron mas prioridad que los deseos de Dios para esa ciudad pero eso es fácil, si no te gusta lo que quiere Dios pues vete para otro lugar y eso es lo que dijo Jonás, en ese tiempo ese era el fin del mundo, él quería irse ya para donde Dios no me pueda ni tocar decía él, pero si tú eres como yo, a mí me encanta viajar, y yo he ido a cruceros anteriormente, y cuando uno tiene que ir a un crucero tú comienzas a empacar tu maleta ¿verdad? y yo por lo menos necesito 15 pares de zapatos cuando voy a un crucero, y yo empiezo a empacar, pero cuando tú empacas, estás guardando toda tu ropa y haciendo tú no te puedes llevar el clóset completo, tú no te puedes llevar todos tus productos de belleza porque hoy en día necesitas 20 para hacer una cara normal (risas), y no te puedes llevar todos los lujos que tú tienes en casa, todas tus cosas preferidas no te las puedes llevar contigo.

Entonces tú comienzas a guardar tus cosas y cuando terminas ves: yo no puedo cerrar esta maleta y no me puedo llevar siete maletas, so yo empiezo a comparar las cosas y mirar a ver qué es lo más importante, y tú dices: mira yo pensé que podía llevarme esto y yo puedo vivir sin esto una semana así que yo la cambio y pongo otra cosa, así que cuando la maleta llega a la barca ya ha pasado por un proceso de escoger por prioridades y decir que lo que tú te estás llevando eso es lo más importante para el viaje que tú tienes.

Me imagino que todos los marineros en la barca que estaban con Jonás hicieron ese mismo proceso y dijeron: esto es lo más importante que va en la barca conmigo; pero cuando se levanta la tormenta y los vientos comienzan a soplar, y tú estás en medio de la barca los vientos comienzan a cambiar tus prioridades, porque la verdad es que la única manera de ayudar a la barca a sobrevivir es comenzar a echar las cosas que tú pusistes en la barca que dijistes que eran tan importantes, de repente te das cuenta que no necesitas tacos para nadar, que esa camisetita tan linda que tú tenías tú la intercambias rápido por ese bálsamo anaranjado que ni te pega con el pelo ni con nada tú rápido lo cambias, porque en el momento donde llega la tormenta uno comienza a evaluar y la cosa es que nosotras tenemos que saber que hemos estado cargando con pesos que no son tan importantes, hemos dado prioridades a cosas que no nos ayudan a actuar como lo que somos, la Iglesia de Cristo.

Por un momento en el tiempo Jonás creía que había encontrado su descanso en esa barca pero yo quiero que tú sepas en esta mañana que aún si te sientes calmadita con todas tus posesiones Dios siempre tiene un plan para que nosotras podamos llegar a las prioridades que nosotras tenemos para nuestras vidas y muy a menudo eso incluye una tormenta. Algunas de nosotras tenemos que evaluar y echar a la mar cosas que no debemos estar cargando.

Algunas nos hemos estado quejando de las tormentas en nuestras vidas pero Dios las envió para que tú te hagas una pregunta, la pregunta es: ¿cuánto en verdad yo necesito esto? ¿necesito esto para cumplir mi propósito o el valor de esto me va a hacer que si me aferro me hundo? Nuestras prioridades tienen que cambiar Iglesia, tenemos que concentrarnos en los valores que la Palabra dice que nos define como la Iglesia, tenemos que despertar y ver: somos la Iglesia de Cristo, tenemos que estar orgullosas de saber que somos la Iglesia de Cristo, tenemos que despertar y ver que nuestras prioridades tienen que cambiar.

Y por tercero despertar y ver que nuestro Dios es el Dios de la tormenta. Muy a menudo la Biblia nos enseña que el enemigo viene a robar, matar y destruir, y la tormenta cuando viene lo que hace es un desorden y trae desorden, trae muerte y destruye, y nosotras rápido le echamos la culpa al enemigo, le echamos la culpa al diablo por todo, el pobre diablo a veces me da pena (risas), porque él dice: yo ni pasé por allí y todo el mundo echándole la culpa al diablo.

Hoy tú necesitas saber que ese Dios lindo al que tú le estabas cantando que estaba entronado Él no solamente habla autoridad a tu vida pero los vientos y la mar también lo tienen que escuchar y Él es el Dios de la tormenta, y Él usa la tormenta para mostrar Su Poder y control sobre todas las cosas, las cosas a nuestra vista parecen estar fuera de control, pero Dios siempre está en control, Él es el que muestra Su Poder y autoridad.

En Génesis cuando se habla de que la Tierra estaba desordenada lo que me impactó a mí sobre el versículo 2 es que aunque no conocemos qué fue lo que causó el desorden y puede ser que mucha gente, mucha gente dice que puede ser el demonio y eso pero yo creo que Dios es el que tiene el control sobre todas las cosas, porque dice que aunque la oscuridad estaba sobre la faz de la mar, aún cuando las cosas estaban al revés el Espíritu de Dios se movía sobre las aguas porque los vientos pueden venir, las olas pueden atacarte y pueden mover todas las cosas pero tu Dios es un Dios inmovible, a tu Dios nada lo puede mover si Él no se quiere mover.

La verdad es que Dios es el Dios de la tormenta, por eso en las buenas yo le doy gloria y cuando vienen las malas yo le doy gloria porque Él es el Dios de la tormenta, así como es el Dios de los días soleados, en medio de esa tormenta Él las permite para mostrarnos verdades sobre nosotros mismos. Si la tormenta no llegara no conoceríamos cuáles son las cosas inmovibles y cuáles son las cosas que rápidamente se mueve, no sabemos cuáles son las cosas que pueden ser manipuladas por una tormenta y cuáles son las cosas eternas en nosotros, sin una tormenta no vas a saber si estás sobre la arena o sobre una roca, pero gracias a Dios por esas tormentas que no vienen para ahogarnos, vienen para dejarnos saber que hay un Dios misericordioso que está pendiente de cada una de nosotras y Él está dispuesto a rescatarnos y a hacernos darnos cuenta de la condición en la que estamos de verdad.

Dios en las Escrituras ha establecido que hay propósitos en la tormenta, con Noé Él reveló que Él puede usar una tormenta para separar la justicia del pecado. En Pedro Él pudo revelar que la realidad de la fe de Pedro, porque Pedro creía que ya había madurado todo lo que tenía que madurar en la fe, pero Dios le quiso enseñar a Pedro que sólo se necesita un poco de fe para que Dios sea glorificado. Jesús usó una tormenta para revelar la paz que trasciende todo entendimiento y con Pablo Él causó una tormenta para revelar su fidelidad, porque Pablo era un creyente en medio de muchos incrédulos y cuando él hablaba la Palabra de Dios nadie estaba escuchando pero cuando Dios envió una tormenta, todo el mundo quería saber de Pablo y todos salieron de ese lugar salvos.

Con Jonás Dios envió la tormenta para mostrarnos y revelar que Dios puede retornar la fe a aquéllos que la han perdido. Esta historia no es para que critiquemos a Jonás, esta historia es para que veamos el buen pastor, que cuando queramos irnos del redil Dios usa hasta a las tormentas para retornarnos al lugar donde tenemos que estar, donde Él nos cuida, donde Él nos sana, donde Él nos llena de gozo, Él nos llena de Su paz porque Él es el buen pastor, tenemos que despertar y ver que Dios es el Dios de la tormenta. ¿Cuántos pueden darle gloria a Dios por la tormenta presente que está en tu vida?

Y por último tenemos que despertar y ver que este mundo está desesperadamente pidiendo oración. Yo sé que dices: oh, no, no eso no es aquí en América porque la gente ya no quiere orar, están sacando la oración de todos los lugares, ¿sabías tú que tus buenas y malas decisiones afectan a otros?

Somos llamados a ser salvavidas, pescadores de hombres, entonces cuando nosotras caminamos fuera de la Voluntad de Dios y del llamado de Dios no solamente estamos poniendo nuestra vida en riesgo, estamos poniendo la vida de otros en riesgo porque somos llamados para ir y salvar a otros.

Jonás cuando se paró en esa barca puso sus pies sobre la barca, en ese momento fue cuando él puso en acción esa tormenta, pero esa tormenta no lo iba a afectar a él solamente, iba a afectar a todos los que estaban con él en esa barca, por eso tenemos que tener cuidado cuando tomamos decisiones basadas en nuestras emociones.

Los marineros en ese lugar tenían temor de esa tormenta, ellos no eran marineros nuevos, ellos sabían lo que era ser un marinero en medio de una tormenta y tenían experiencia de qué hacer en medio de una tormenta, pero aún en medio de esa tormenta ellos pudieron discernir que esa tormenta no era una tormenta normal, hay algo diferente en esa tormenta, hay algo como que la matemática no está resultando bien, por eso ellos comenzaron a clamar a sus dioses y a orar, y cuando nadie respondía ellos dicen: esto no es normal y la culpa es de alguien aquí.

Ellos sabían que eso no tenía nada que ver con lo que estaba pasando afuera, tenía que ver con todo lo que estaba pasando dentro de la barca y comenzaron a decir: ¿quién tiene la culpa? Y cuando encontraron a Jonás estaba dormido no con el mismo sueño que tuvo Jesús porque Jesús dormía con la paz de que todo estaba bien, Jonás estaba dormido porque se tomó una pastillita para no saber qué es lo que estaba pasando con el mundo alrededor, y yo entiendo que necesitamos nuestros doctores y medicaciones pero hoy yo vengo a hablar en contra del espíritu de la depresión y de médicos que siguen haciendo a personas adictos para que se duerman a través de la vida, y Dios no te llamó a dormir a través de esta vida, Él quiere que estés despierta porque tiene vida y vida en abundancia para ti mujer.

Jonás quería olvidarse de su mundo y cuando los marineros lo encontraron, oh wow lo que dijeron debiera chocar a cada uno de nuestros corazones. Las preguntas que le hicieron las escucho el día de hoy, suenan diferente, es más, suenan como acusaciones; por eso nos miran y nos critican como Iglesia, pero nosotros tenemos que entender que la razón por la que están mirándonos y echándonos críticas es porque saben que tenemos las respuestas y no hay nada más frustrante que ver a algo que ha sido llamado a ser luz escondiéndose debajo de la mesa, tenemos un templo precioso pero no es para esconder la luz aquí, y ya ustedes vagan por todas estas luces bellas para que alumbren, pero hay un mundo de oscuridad que necesita que tú vayas y lo alumbres.

Y cuando el capitán le dice: ¿cómo es que tú puedes dormir? ¿cómo es que tú no te das cuenta lo que está sucediendo alrededor? Todo este terrorismo, toda esta violencia, todas esas cosas que están sucediendo ¿qué puedes hacer tú, qué puedo hacer yo? La Biblia dice que el amor es la respuesta, el amor de Dios nunca falla contra el terrorismo, el terrorismo no es más grande que el amor de Dios, la violencia no es más grande que el amor de Dios, tenemos la respuesta.

Y el capitán dice: ¿cómo es que tú puedes dormir? y el inconverso le da la respuesta a la Iglesia de cómo nosotros podemos sobrellevar esto, le dice: levántate y clama a tu Dios, despierta y clama a tu Dios, despierta mujer y clama a tu Dios. Yo ví un anuncio que decía que las mujeres iban a orar, es tiempo de despertar y clamar a nuestro Dios, los políticos no encuentran la respuesta, el mundo no encuentra la respuesta porque la respuesta está en que nosotras clamemos a nuestro Dios.

Dice: puede ser que si tú clamas Dios toma nota de nosotros y no perecemos. Toda esa violencia es un mundo tratando de llorar y decir: si tú clamas puede ser que Dios me rescate a mí también, porque nadie quiere morir, todos queremos vivir, pero si tú clamas puede ser que tu Dios tenga misericordia de otros.

La Iglesia es la mejor institución que hay en la faz de la Tierra, nosotros vivimos en contra del pecado, nosotros servimos al Dios que es el único que puede deshacerse del pecado pero no nos podemos volver un gigante durmiente, tenemos que levantarnos, ¿cómo podemos dormir en este tiempo? Es tiempo de despertar y ver que tenemos que clamar a Dios que tiene todas las respuestas para los tiempos en los que vivimos.

Después le dice: ¿quién es responsable por hacer todo este problema para nosotros? Y le preguntas a la Iglesia y la Iglesia te señala a tantos diferentes puntos en la historia y la gente, y que si esto, que si lo otro pero yo creo que es tiempo que la Iglesia tome ese dedo y se lo torne así (apuntándose a sí misma), ¿en qué hemos sido responsables, qué es lo que hemos hecho para dejar de hacerlo? Tenemos que dejar de hacer ciertas cosas para que el sol sea sol y nosotras seamos la luna.

Le preguntaron ¿de qué parentela tú eres? ¿saben por qué? porque a veces nos tenemos que enfrentar con una pregunta ¿de dónde tú eres? para que nos recordemos quiénes somos. Yo sé que Dios escogió que el capitán le haga esas preguntas a Jonás para que nosotras en este día podamos tener la iluminación de que Él es el que estaba preguntando a través del capitán estas cosas y las preguntas no las hizo porque las respuesta no las sabían, las preguntas nacieron porque Jonás se olvidó y decidió dormirse en un tiempo donde Dios quería salvar.

Hazte la pregunta: tu Dios ¿todavía está buscando restaurar y salvar? Tu Dios ¿quiere usarte a ti para restaurar y salvar? Tenemos que despertar y ver que somos la Iglesia de Cristo, pedirle a Dios que nos ayude a cambiar nuestras prioridades, entender que Dios es el Dios de mi tormenta y despertar, y ver que el mundo desesperadamente está pidiendo la oración.

Hay gente que dice que el avivamiento que ha sido prometido por muchos años a Nueva Inglaterra que nunca va a suceder aquí, porque la gente especialmente la gente de Boston son muy intelectuales, ustedes son demasiado intelectuales, ustedes tratan de entender a Dios con tanto detalle que se lo pierden, las escuelas I believes comenzaron con la fundación de Dios pero al tratar de entenderlo al final dijeron: parece que no hay Dios y ya la gente ha comenzado a decir que en Su avivamiento no va a pasar por aquí, porque ustedes no parecen gente que van a causar un avivamiento.

Y mientras alguien muy inteligente en su inteligencia y en su astucia me estaba tratando de explicar por qué Dios no va a traer un avivamiento a Nueva Inglaterra mientras él hablaba yo me empecé a emocionar, y él me estaba mirando y yo decía: oh my God, oh my God, y él me decía: es que como, tú sabes, tengo tanta mucha más inteligencia que tú, déjame ponerlo en palabras que tú puedas entender, entre más él decía yo: ay, no podía yo enojarme con su ignorancia, porque él no conocía lo que estaba pasando en mí, mientras él decía esas palabras yo recordaba que Él siempre se aparece en los lugares que menos esperamos, y yo decía: wow Él está confirmando que Dios en verdad va a cumplir Sus promesas, y yo lo espero; pero para que el avivamiento llegue tenemos que despertar, tenemos que despertar y ver, el avivamiento no sucede con sonámbulos.

Dios en esta mañana Dios me envió simplemente para ser tu alarma, y aquéllas que no les gusta la alarma (sonido de golpear la alarma) pero Dios quiere despertarnos y ver, nos hemos metido tanto en lo que no queremos hacer y en lo que las tormentas nos han causado que nos hemos perdido el enfoque real, y yo sé que vine en un día en que el corazón está un poco pesado, pero creo que esta Palabra es muy apropiada porque el dolor no puede quitarte el enfoque de lo que Dios ha querido hacer, de lo que la hermana Ana fue fiel en hacer.

Nosotras somos llamadas para ser la luz y tenemos que despertar a esa luz para que alumbremos donde quiera, para que Dios pueda lograr en cada una de nosotras que nos convirtamos en esa luz que salva a otras, porque la gracia no es sola para mí, la gracia llega a mí para que yo dé gratuitamente lo que yo he recibido. ¿Cuántas en esta mañana están listas para abrir sus ojos?

Ahí donde tú estás cierra tus ojos. Si en esta mañana, yo voy a orar por estos cuatro grupos y tú puedes, si tú no te has sentido como la Iglesia de Cristo, si tú nunca has conocido y has aceptado a Cristo como tu Señor y Salvador yo te voy a invitar a que vengas adelante en esta mañana, yo voy a orar contigo. Si mientras estaba hablando más temprano tú te diste cuenta que tus prioridades no están en su lugar, que hay ciertas maletas que tú tienes que echar del barco, no es fácil hacerlo, no es fácil decirle adiós a las cosas que tú pensabas que eran importantes, pero si esa eres tú queremos orar por tu vida en esta mañana, si tú eres aquélla que has estado echándole la culpa al diablo por la tormenta que Dios ha traído para traer tu atención a cosas importantes yo quiero orar contigo.

Y si tú eres esa persona que se ha dado de cuenta que el mundo sí quiere escuchar de Cristo, porque la mentira más grande que el enemigo tiene ahora es que la gente no quiere escuchar de Dios, por eso cuando llega la tormenta lo primero que hacen es: claman, claman, claman, en verdad ese vacío nunca se va, existe en cada creación, las huellas digitales de Dios están en cada una de nosotras, pero también están a través del mundo y esas huellas dejan un vacío si tú no tienes a Dios, que Dios nos dé la gracia para alcanzar a aquéllos que niegan querer conocer a Dios, esas son las oraciones que haremos en esta mañana, si esa eres tú, ven rápido al altar a orar.

Yo no sé si hay, quiénes son las ministras de la casa que nos ayuden a ministrar a las mujeres mientras vienen pero, mi oración es que entre todas las cosas que hemos aprendido hoy, este es el primer capítulo de una serie que estoy escribiendo sobre: la oración camina (prayer walks) porque creo que la gente que cree en Dios debe hablar con Él, y en la Iglesia uno de los errores ha sido que la gente se ha creído que la oración es opcional, pero nosotras dependemos de nuestras conversaciones con Dios, y esas oraciones nos van a ayudar a activar el poder efectivo de la oración, y por eso la oración es muy importante, no la tomemos en poco.

Si habrá alguien en esta mañana vamos a orar, si no hacemos una oración general. Levanta tus manos donde estás: Señor yo te doy gracias por estas mujeres, Señor Tú nos conoces y así como Jonás Tú nos persigues. Señor desde aquí hasta el asiento donde están o hasta donde se han ido sus mentes, la distancia Tú la puedes medir y tú las puedes alcanzar en cada lugar donde ellas están, Tú conoces sus necesidades, Tú conoces el destino que Tú tienes para cada una de estas mujeres.

Señor te damos gracias por no rendirte de cada una de nosotras, te damos gracias porque nuestros caprichos nos pueden desviar pero no nos pueden robar el destino que Tú tienes para cada una de nosotras porque Tú nos retornas a Tu Voluntad, Tú nos persigues Señor con Tus propósitos.

Yo te pido que en esta mañana estas mujeres puedan despertar y ver que Tú has querido llamar su atención, Tú las estás llamando a clamar a Tu Nombre porque hay un mundo que está recibiendo tormentas a causa de las decisiones que hemos tomado. Señor no podemos olvidarnos del Dios de la tormenta en estos tiempos, Señor que podamos despertar y clamar, y no solamente clamar por nuestra salvación pero Señor, que todos aquéllos que están atemorizados por lo que está sucediendo a nuestro alrededor puedan encontrar la salvación a través de estos pasos en este lugar, úsalas Señor para Tu gloria, Señor úsalas para que este lugar esté repleto de almas nuevas, Señor que dos cultos no sean suficientes, Señor que vengan como multitudes a Tu Casa conociendo que esta es la casa de oración, aquí hay poder, aquí hay respuestas, aquí hay sanidad, aquí hay libertad, está aquí y está en ellas mientras ellas caminan este mundo, ayúdalas a resistir la tentación de huír y mantenerse firmes Señor en Tu Palabra, gracias Padre, te bendecimos en el Nombre de Jesús, te bendecimos por estas mujeres Señor y te damos gracias.

Tenemos que salir de nuestra zona de comfort

TRANSCRIPT

Quiero afirmar las declaraciones que hemos hecho en oración y esa apelación que hemos hecho al Señor aquí en esta tarde desesperada y atrevida, puedo decirlo así. En algún momento en mi oración me salió la mujer cirofenicia y sentí afirmar el espíritu de esa mujer, y recordar lo que hay detrás de ese texto de la Escritura que se encuentra en Marcos capítulo 7 en el versículo 24, y animarnos a todos nosotros a ser atrevidos delante de Dios.

El Señor dice que vengamos confiadamente ante el Trono de la gracia; a veces hay que venir al Señor desesperadamente, hay que venir al Señor como un último y primer recurso, hay que venir a Dios como vinieron esos seres que vemos en la Escritura registrados como: “¡Señor, hijo de David ten misericordia de mí!” y la gente le decía: cállate que el Señor no tiene eso en agenda, pero Bartimeo gritaba más duro todavía hasta que el Señor se detuvo, lo trajo a Su Presencia y lo sanó, y él se fue cargando su sábana que usaba de seguridad como tienen a veces los homeless, sus bultos y sus cosas allí, la sábana que usaba un ciego o un mendigo para sentarse es como la casa, y esa sábana que lo había sostenido a él ahora él se la lleva encima como declaración del Dios que lo ha liberado para que pueda ver, él dejó su manto de seguridad, lo dejó para venir ante el Señor y recibir sanidad de Dios, y a veces nosotros tenemos que ser así.

Tenemos que salirnos de nuestra zona de comfort y eso es lo que hemos hecho esta tarde. Uno puede orar de muchas maneras, hemos orado por Ana en diferentes maneras pero, cuando una Congregación dice: ¿sabes qué? vamos a comprometer nuestra imagen y vamos a arriesgarlo todo, y entonces salga pato gallareta, como dice Marcos capítulo 6 versículo 24 y dejar entonces que el Señor sea quien haga lo demás. Yo creo que a veces es la única manera en que Dios, esos seres desesperados que vemos en la Escritura que se acercaron al Señor fuera de tiempo, no era su derecho estar ahí, no estaba en la agenda del Señor inclusive, Dios ni siquiera les da una Palabra a veces de afirmación o de sanidad pero ellos se la arrebatan a Dios porque son seres desesperados.

La mujer con el flujo de sangre se acerca a Jesucristo, se mete entre la multitud, viola la ley judaica porque no se suponía que una mujer en ese estado de menstruación continua hiciera impura a la gente cuando la tocaba pero ella se metió en la multitud, tocó el borde de Su manto y se fue de allí con su sanidad, y con una Palabra de afirmación y de bendición de parte del Señor, y Dios no ha cambiado Su corazón, Él actúa siempre de la misma manera, y Él honra y responde al mismo tipo de conducta.

Cuando los hijos de Dios venimos y decimos: ¿sabes qué? no tengo nada que perder así que voy a tirarme a los pies del Señor, y argumentamos con Dios por amor y por respeto no por irrespeto, pero a veces yo creo que hasta forzamos la Mano de Dios y a Dios le gusta, ¿a qué padre no le gusta que su hijita de un año venga y le robe un pedazo de carne de la boca? le gusta porque dice: wow mi hijita tiene fuerza, se está aguerreando, me ama, me tiene confianza, yo creo que a Dios a veces le gusta que nosotros lo apretemos un poco, lo molestemos un poco.

El Señor dijo que la mujer que se acercó ante el juez injusto clamó y le tocó la puerta hasta que él dijo: ya estoy harto de esta mujer, la voy a bendecir para que me deje tranquilo, y él lo estaba haciendo como una ilustración de Dios que quiere que toquemos a Su puerta continuamente y que seamos insistentes, que nos atrevamos a venir delante de Él, que oremos dice a tiempo y a destiempo, que clamemos y prediquemos, que hagamos las cosas no como están en la agenda, que nos salgamos de lo común, de lo predecible, de lo formal y a veces hasta de lo decente, y que le creamos a Dios por un milagro ¿sabe?

Por eso es que hay que tenerle cuidado a veces al mucho orden, yo soy una persona de orden, me gusta el orden pero a veces hay que hacer desorden, hay que rebelarse contra el orden y el formalismo y para recordar que Dios es un Dios que Su Espíritu es como un viento, se mueve por donde le da la gana, es impredecible y nosotros tenemos que practicar eso para mantener nuestra fe activa. Yo le doy gracias a Dios por ustedes pentecostales locos que a veces me, la verdad que a veces me molestan pero yo digo: Señor esa píldora me la tengo que tomar y me mantienen a mí responsable delante de Dios, no dejen de molestar ¿sabe? yo les necesito, la Iglesia les necesita, alguna vez nos jalaremos los moños pero en ese proceso encontraremos el balance preciso de Dios, necesitamos gente aguerrida, gente agresiva, si perdemos ese fuego vamos a perder algo muy especial así que necesitamos, esta Iglesia necesita ese fuego continuamente.

Y esta mujer que fue retratada aquí en la Escritura venía del área de Siria, Fenicia era una región por eso le llaman cirofenicia, venía del área de Siria y de Fenicia, no era una judía, no era evangélica, no era ni siquiera católica, era pagana, venía de una región donde el Evangelio no había llegado, ella no era miembro de la familia de Dios por así decirlo pero había oído de Jesucristo, y había oído de que Él era compasivo y misericordioso, y que había poder, que el Poder de Dios estaba en Él; su teología puede que estuviera allí un poco imperfecta y alocada pero lo esencial ella lo sabía, que Jesús era el Hijo de Dios, que Jesús tenía poder, que Jesús era misericordioso y que Él escuchaba a los que clamaban a Él, y que ella podía permitirse el lujo de argumentar un poco con Él y de argumentar con Él para que Él le respondiera su necesidad.

Y nosotros sabemos que ese mismo Jesús está escuchando nuestras oraciones y que no podemos dejar de orar al primer silencio, y el primer día que pasa sin nosotros recibir lo que estamos pidiéndole al Señor, tenemos que insistir, tenemos que persistir, tenemos que clamar, tenemos que orar día y noche hasta que el Señor responda a nuestras peticiones. Una y otra vez vemos esa verdad explayada a través de las páginas de la Escritura: Dios honra a la persona desesperada, Dios honra a la persona que se atreve, Dios honra a la persona que se mete entre la multitud y hace un esfuerzo extra. A Dios no le complace la gente que se deja derrotar muy rápido, a Dios no le complace la gente cómoda, a Dios no le complace la gente que no está dispuesta a levantarse su mano, levantarse de una silla en un momento dado, a ponerse en ridículo o caminar esa segunda milla para recibir algo del Señor.

A Dios le gusta cuando creemos lo suficiente como para arriesgar nuestra imagen pública, arriesgar nuestra privacidad, arriesgar lo que la gente piense de nosotros y simplemente ir en confianza ante el Padre celestial y ser obedientes, y hacer lo que Él nos dice que tenemos que hacer, y esta mujer es este tipo de individuo y por eso la Escritura la honra con el retrato que se hace de ella.

Dice en el versículo 24 de Marcos 7 que Jesús se levantó del lugar donde estaba y se fue a la región de Tiro y de Sidón de donde era esta mujer en esas áreas generales, “y entrando en una casa no quería que nadie lo supiese pero no pudo esconderse.” Usted ve aquí, esto es interesante que nos hace pensar un poquito en la complejidad del misterio de la Voluntad absoluta de Dios y cómo los seres humanos podemos inclusive cambiar aparentemente los planes de Dios, cómo podemos afectar los planes de Dios, esto es un misterio, pero aparentemente la gente aguerrida y atrevida, insistente, desesperada puede cambiar la agenda del cielo.

El Señor quería pasar desapercibido, quizá estaba cansado, quién sabe, quizá no era el tiempo para que esa región reciba el Evangelio, quizá no estaban en ese momento en la agenda de Él, Él quería un tiempo de discreción, muchas veces Él quería esconderse y quería que la gente no supiera todavía que Él era el Hijo de Dios, es un misterio también, Dios tenía Su agenda con ese hombre Dios y tenía que venir un momento para que hubiera una declaración pública de que Él es y era el Hijo de Dios y el mesías que había de venir, y a veces Él se escondía y a veces le decía a la gente: no les digan este milagro que Yo hice porque Él no quería que la gente entonces lo metiera y adelantara la agenda porque Dios tiene una agenda, aún cuando Dios tiene un plan con un hombre, una mujer, históricamente Él también tiene que hacer otras cosas en el plano externo para que todas las cosas coincidan y el Señor tenía una agenda personal acerca de la revelación de Su Gloria y de Su mesianismo, y yo creo que por esa razón son alguno de Sus misterios.

Y yo creo que por esa razón, alguno de Sus misterios Él fue a este lugar, era un área pagana y Él no quería que se supiera que estaba allí pero dice que no pudo esconderse porque Su reputación lo precedía; había gente que entendía que Él era misericordioso y no era como los demás fariseos y los demás religiosos de su tiempo que se creían que eran más de lo que eran y no admitían contacto con la gente humilde y sencilla, no se salían de su agenda, y la gente venía y afluía a donde Él estaba, entonces no pudo esconderse porque habían los ojos de una madre desesperada, una madre que amaba y que estaba desesperada por la condición de su hija.

Entonces dice: “No pudo esconderse porque una mujer” no pudo esconderse porque una mujer. Gloria a Dios por las mujeres, gloria a Dios por las mujeres de fe, gloria a Dios por las mujeres ungidas, gloria a Dios porque aún hubo un tiempo de la historia en que las mujeres no contaban para nada y no se suponía que terciaran en el diálogo entre el hombre y Dios, mujeres desesperadas cambiaron la cultura, cambiaron la agenda, “porque una mujer”.

Hermano lo único que distingue ante el corazón y la Presencia de Dios es la fe, el corazón no el género, no si tú eres hombre o mujer, si eres rico o eres pobre, si eres religioso o no, es la sinceridad de tu corazón, es tu fe en Dios, es tu humildad para venir delante de Él. Dios dice que no hace acepción de personas.

Muchas mujeres, mucha gente humilde, muchas personas que no estaban en la agenda se hicieron presentes y Dios los atiende y los escucha. No importa cuántos años tú tienes en el Evangelio, no importa que tú seas una persona de autoridad o no que conozca la Biblia o no, lo único que Dios quiere saber es cuán fuerte es tu fe en Él y cuán grande es tu corazón para con Él, cuánto tú lo amas y cuánto tú le crees a Su Palabra.

Ahí recordamos la mujer con el flujo de sangre de nuevo que se parece mucho a esta mujer cirofenicia, la mujer con el flujo de sangre no estaba en la agenda de Jesús tampoco. El Señor iba en ese momento caminando hacia la casa de Jairo ustedes recordarán, Jairo era un hombre principal en su comunidad y le había pedido al Señor que bendijera a su hija, y el Señor iba camino hacia la casa de Jairo, en su mente no estaba una mujer con un flujo de sangre, eso no estaba en Su agenda. Y dice la Biblia que mientras el Señor iba en dirección a la casa de Jairo a sanar a la hija de Jairo que es lo que se esperaría, la gente importante siempre tiene los oídos de personas importantes y se esperaría que el Señor como que fuera a la casa de un hombre principal, importante, piadoso, conocido en su comunidad, y dice que el Señor iba a la casa de Jairo “pero una mujer” así es como dice, “pero una mujer que había padecido de flujo de sangre durante doce años” y que había gastado todo su dinero en los médicos, y que en vez de irle mejor le iba peor, “se acercó por detrás y tocó el borde de su manto”.

Esta mujer cambió la agenda, se metió, no estaba en el programa, en un sentido no merecía, no había hecho nada para merecer el toque milagroso del Señor pero su corazón se interpuso en la agenda y se inyectó en un lugar donde no debía estar, “porque una mujer cuya hija tenía un espíritu inmundo” su hija estaba endemoniada y no había ningún poder en la Tierra donde ella habitaba que pudiera sanar a su hija.

La Biblia nos dice que el Señor es Señor sobre todas las dimensiones de la realidad, Señor sobre las tormentas y sobre las manifestaciones naturales, Señor sobre la enfermedad, Señor sobre la muerte, Señor sobre cualquier limitación física, Señor del cielo y de la tierra, los demonios tiemblan ante la Presencia de Dios. No le tema a los demonios ¿sabe? no le tema a los demonios porque el Señor es más poderoso que cualquier demonio, clame al Señor, asegúrese de que su vida esté bien con Dios y entonces reprenda en el Nombre de Jesús con toda autoridad, su hija tenía un espíritu inmundo.

“Luego que oyó de Él” eso es tan revelador, porque esta mujer quién sabe dónde estaba, no era miembro de la tribu de Israel, no sabía de Jesús pero oyó de Él, ¿cómo oyó de Él? ¿alguna vecina que dijo: mira hay por ahí un hombre que tiene un poder de Dios que nunca se ha visto antes y que sana a los enfermos, y que se cree que es el Hijo de Dios, el salvador de Israel, lo oyó en un pozo mientras recogía agua, dos o tres mujeres comentando acerca de ello? pero el caso es que esta mujer oyó hablar de Jesús y eso hizo toda la diferencia, eso la capacitó para ir en búsqueda de la respuesta y la solución que ella necesitaba.

¡Qué importante es que la gente oiga de Jesús de parte nuestra! siembre la Palabra, siembre el mensaje del Evangelio, no se apure lo que pasa inmediatamente, su parte, nuestra parte es predicar la Palabra y dejarle saber a la gente que Cristo tiene solución, que Cristo tiene poder, que Cristo es el Hijo de Dios, que necesitamos de Él para la solución a nuestros problemas y para nuestro destino eterno.

Esta mujer oyó, uno no sabe cuándo una persona en un momento va a hacer uso de haber escuchado de Jesús en una forma genérica y general. A veces nosotros le hemos hablado a gente y aparentemente no hubo ninguna reacción ni ningún resultado pero ¿sabe qué? a veces en algún momento dado de su vida Dios activa esa Palabra y esa persona entonces va en búsqueda del Señor. Esa Palabra que usted dió así en forma general otra persona viene y añade a ella, y la copa se derrama y esa persona viene a Cristo, decide venir a la Iglesia un domingo, decide entregar su vida al Señor porque oyó hablar de Él y por eso es que nosotros tenemos que sembrar la semilla simplemente y dejar el resultado al Señor como dice ese maravilloso himno.

Ella había oído de Jesucristo y estoy seguro que, de nuevo, su fe era una fe muy imperfecta. Ella no tenía el ciento por ciento claro de quién era Jesús; yo no creo que si le hubieran preguntado quién era Jesucristo ella hubiera dicho: bueno es el Hijo de Dios, Dios hombre, Dios perfecto, Dios hombre despojado de Su gloria, venido al mundo, tomado forma de bebé, nacido de María y José o de María y el Espíritu Santo, y lleno de poder y de gracia para redimir a la humanidad de sus pecados y va a ser crucificado y va a dar justicia a la humanidad por Su muerte, y resucitará al tercer día, ella no podía recitar ese credo apostólico, ella no tenía, ella lo único que tenía era una fe bruta que era como una piedra afilada, era un nudo que tenía en su corazón de fe y de desesperación, de necesidad.

Es lo que yo digo que muchas veces es lo que Dios necesita y tenemos que pedirle al Señor que nos ayude, que nos arme de ese nivel de energía, y por eso dice que: “vino y se postró a sus pies”, toda respuesta a una oración tiene que estar precedida por una entrega, tiene que estar precedida Quiero como afirmar las declaraciones que hemos hecho en oración y esa apelación que hemos hecho al Señor aquí en esta tarde desesperada y atrevida, puedo decirlo así, me recordó la conducta de la mujer cirofenicia, en algún momento en mi oración me salió la mujer cirofenicia y sentí afirmar el espíritu de esa mujer, y recordar lo que hay detrás de ese texto de la Escritura que se encuentra en Marcos capítulo 7 en el versículo 24, y animarnos a todos nosotros a ser atrevidos delante de Dios, el atrevimiento, lo que llama la Palabra el denuedo, el Señor dice que vengamos confiadamente ante el Trono de la gracia; a veces hay que venir al Señor desesperadamente, hay que venir al Señor como un último y primer recurso, hay que venir a Dios como vinieron esos seres que vemos en la Escritura registrados como: “¡Señor, hijo de David ten misericordia de mí!” y la gente le decía: cállate que el Señor no tiene eso en agenda, pero Bartimeo gritaba más duro todavía hasta que el Señor se detuvo, lo trajo a Su Presencia y lo sanó, y él se fue cargando su sábana que usaba de seguridad como tienen a veces los homeless, sus bultos y sus cosas allí, la sábana que usaba un ciego o un mendigo para sentarse es como la casa, y esa sábana que lo había sostenido a él ahora él se la lleva encima como declaración del Dios que lo ha liberado para que pueda ver, él dejó su manto de seguridad, lo dejó para venir ante el Señor y recibir sanidad de Dios, y a veces nosotros tenemos que ser así.

Tenemos que salirnos de nuestra zona de comfort y eso es lo que hemos hecho esta tarde. Uno puede orar de muchas maneras, hemos orado por Ana en diferentes maneras pero, cuando una Congregación dice: ¿sabes qué? vamos a comprometer nuestra imagen y vamos a arriesgarlo todo, y entonces salga pato gallareta, como dice Marcos capítulo 6 versículo 24 y dejar entonces que el Señor sea quien haga lo demás. Yo creo que a veces es la única manera en que Dios, esos seres desesperados que vemos en la Escritura que se acercaron al Señor fuera de tiempo, no era su derecho estar ahí, no estaba en la agenda del Señor inclusive, Dios ni siquiera les da una Palabra a veces de afirmación o de sanidad pero ellos se la arrebatan a Dios porque son seres desesperados.

La mujer con el flujo de sangre se acerca a Jesucristo, se mete entre la multitud, viola la ley judaica porque no se suponía que una mujer en ese estado de menstruación continua hiciera impura a la gente cuando la tocaba pero ella se metió en la multitud, tocó el borde de Su manto y se fue de allí con su sanidad, y con una Palabra de afirmación y de bendición de parte del Señor, y Dios no ha cambiado Su corazón, Él actúa siempre de la misma manera, y Él honra y responde al mismo tipo de conducta.

Cuando los hijos de Dios venimos y decimos: ¿sabes qué? no tengo nada que perder así que voy a tirarme a los pies del Señor, y argumentamos con Dios por amor y por respeto no por irrespeto, pero a veces yo creo que hasta forzamos la Mano de Dios y a Dios le gusta, ¿a qué padre no le gusta que su hijita de un año venga y le robe un pedazo de carne de la boca? le gusta porque dice: wow mi hijita tiene fuerza, se está aguerreando, me ama, me tiene confianza, yo creo que a Dios a veces le gusta que nosotros lo apretemos un poco, lo molestemos un poco.

El Señor dijo que la mujer que se acercó ante el juez injusto clamó y le tocó la puerta hasta que él dijo: ya estoy harto de esta mujer, la voy a bendecir para que me deje tranquilo, y él lo estaba haciendo como una ilustración de Dios que quiere que toquemos a Su puerta continuamente y que seamos insistentes, que nos atrevamos a venir delante de Él, que oremos dice a tiempo y a destiempo, que clamemos y prediquemos, que hagamos las cosas no como están en la agenda, que nos salgamos de lo común, de lo predecible, de lo formal y a veces hasta de lo decente, y que le creamos a Dios por un milagro ¿sabe?

Por eso es que hay que tenerle cuidado a veces al mucho orden, yo soy una persona de orden, me gusta el orden pero a veces hay que hacer desorden, hay que rebelarse contra el orden y el formalismo y para recordar que Dios es un Dios que Su Espíritu es como un viento, se mueve por donde le da la gana, es impredecible y nosotros tenemos que practicar eso para mantener nuestra fe activa. Yo le doy gracias a Dios por ustedes pentecostales locos que a veces me, la verdad que a veces me molestan pero yo digo: Señor esa píldora me la tengo que tomar y me mantienen a mí responsable delante de Dios, no dejen de molestar ¿sabe? yo les necesito, la Iglesia les necesita, alguna vez nos jalaremos los moños pero en ese proceso encontraremos el balance preciso de Dios, necesitamos gente aguerrida, gente agresiva, si perdemos ese fuego vamos a perder algo muy especial así que necesitamos, esta Iglesia necesita ese fuego continuamente.

Y esta mujer que fue retratada aquí en la Escritura venía del área de Siria, Fenicia era una región por eso le llaman cirofenicia, venía del área de Siria y de Fenicia, no era una judía, no era evangélica, no era ni siquiera católica, era pagana, venía de una región donde el Evangelio no había llegado, ella no era miembro de la familia de Dios por así decirlo pero había oído de Jesucristo, y había oído de que Él era compasivo y misericordioso, y que había poder, que el Poder de Dios estaba en Él; su teología puede que estuviera allí un poco imperfecta y alocada pero lo esencial ella lo sabía, que Jesús era el Hijo de Dios, que Jesús tenía poder, que Jesús era misericordioso y que Él escuchaba a los que clamaban a Él, y que ella podía permitirse el lujo de argumentar un poco con Él y de argumentar con Él para que Él le respondiera su necesidad.

Y nosotros sabemos que ese mismo Jesús está escuchando nuestras oraciones y que no podemos dejar de orar al primer silencio, y el primer día que pasa sin nosotros recibir lo que estamos pidiéndole al Señor, tenemos que insistir, tenemos que persistir, tenemos que clamar, tenemos que orar día y noche hasta que el Señor responda a nuestras peticiones. Una y otra vez vemos esa verdad explayada a través de las páginas de la Escritura: Dios honra a la persona desesperada, Dios honra a la persona que se atreve, Dios honra a la persona que se mete entre la multitud y hace un esfuerzo extra. A Dios no le complace la gente que se deja derrotar muy rápido, a Dios no le complace la gente cómoda, a Dios no le complace la gente que no está dispuesta a levantarse su mano, levantarse de una silla en un momento dado, a ponerse en ridículo o caminar esa segunda milla para recibir algo del Señor.

A Dios le gusta cuando creemos lo suficiente como para arriesgar nuestra imagen pública, arriesgar nuestra privacidad, arriesgar lo que la gente piense de nosotros y simplemente ir en confianza ante el Padre celestial y ser obedientes, y hacer lo que Él nos dice que tenemos que hacer, y esta mujer es este tipo de individuo y por eso la Escritura la honra con el retrato que se hace de ella.

Dice en el versículo 24 de Marcos 7 que Jesús se levantó del lugar donde estaba y se fue a la región de Tiro y de Sidón de donde era esta mujer en esas áreas generales, “y entrando en una casa no quería que nadie lo supiese pero no pudo esconderse.” Usted ve aquí, esto es interesante que nos hace pensar un poquito en la complejidad del misterio de la Voluntad absoluta de Dios y cómo los seres humanos podemos inclusive cambiar aparentemente los planes de Dios, cómo podemos afectar los planes de Dios, esto es un misterio, pero aparentemente la gente aguerrida y atrevida, insistente, desesperada puede cambiar la agenda del cielo.

El Señor quería pasar desapercibido, quizá estaba cansado, quién sabe, quizá no era el tiempo para que esa región reciba el Evangelio, quizá no estaban en ese momento en la agenda de Él, Él quería un tiempo de discreción, muchas veces Él quería esconderese y quería que la gente no supiera todavía que Él era el Hijo de Dios, es un misterio también, Dios tenía Su agenda con ese hombre Dios y tenía que venir un momento para que hubiera una declaración pública de que Él es y era el Hijo de Dios y el mesías que había de venir, y a veces Él se escondía y a veces le decía a la gente: no les digan este milagro que Yo hice porque Él no quería que la gente entonces lo metiera y adelantara la agenda porque Dios tiene una agenda, aún cuando Dios tiene un plan con un hombre, una mujer, históricamente Él también tiene que hacer otras cosas en el plano externo para que todas las cosas coincidan y el Señor tenía una agenda personal acerca de la revelación de Su Gloria y de Su mesianismo, y yo creo que por esa razón son alguno de Sus misterios.

Y yo creo que por esa razón, alguno de Sus misterios Él fue a este lugar, era un área pagana y Él no quería que se supiera que estaba allí pero dice que no pudo esconderse porque Su reputación lo precedía; había gente que entendía que Él era misericordioso y no era como los demás fariseos y los demás religiosos de su tiempo que se creían que eran más de lo que eran y no admitían contacto con la gente humilde y sencilla, no se salían de su agenda, y la gente venía y afluía a donde Él estaba, entonces no pudo esconderse porque habían los ojos de una madre desesperada, una madre que amaba y que estaba desesperada por la condición de su hija.

Entonces dice: “No pudo esconderse porque una mujer” no pudo esconderse porque una mujer. Gloria a Dios por las mujeres, gloria a Dios por las mujeres de fe, gloria a Dios por las mujeres ungidas, gloria a Dios porque aún hubo un tiempo de la historia en que las mujeres no contaban para nada y no se suponía que terciaran en el diálogo entre el hombre y Dios, mujeres desesperadas cambiaron la cultura, cambiaron la agenda, “porque una mujer”.

Hermano lo único que distingue ante el corazón y la Presencia de Dios es la fe, el corazón no el género, no si tú eres hombre o mujer, si eres rico o eres pobre, si eres religioso o no, es la sinceridad de tu corazón, es tu fe en Dios, es tu humildad para venir delante de Él. Dios dice que no hace acepción de personas.

Muchas mujeres, mucha gente humilde, muchas personas que no estaban en la agenda se hicieron presentes y Dios los atiende y los escucha. No importa cuántos años tú tienes en el Evangelio, no importa que tú seas una persona de autoridad o no que conozca la Biblia o no, lo único que Dios quiere saber es cuán fuerte es tu fe en Él y cuán grande es tu corazón para con Él, cuánto tú lo amas y cuánto tú le crees a Su Palabra.

Ahí recordamos la mujer con el flujo de sangre de nuevo que se parece mucho a esta mujer cirofenicia, la mujer con el flujo de sangre no estaba en la agenda de Jesús tampoco. El Señor iba en ese momento caminando hacia la casa de Jairo ustedes recordarán, Jairo era un hombre principal en su comunidad y le había pedido al Señor que bendijera a su hija, y el Señor iba camino hacia la casa de Jairo, en su mente no estaba una mujer con un flujo de sangre, eso no estaba en Su agenda. Y dice la Biblia que mientras el Señor iba en dirección a la casa de Jairo a sanar a la hija de Jairo que es lo que se esperaría, la gente importante siempre tiene los oídos de personas importantes y se esperaría que el Señor como que fuera a la casa de un hombre principal, importante, piadoso, conocido en su comunidad, y dice que el Señor iba a la casa de Jairo “pero una mujer” así es como dice, “pero una mujer que había padecido de flujo de sangre durante doce años” y que había gastado todo su dinero en los médicos, y que en vez de irle mejor le iba peor, “se acercó por detrás y tocó el borde de su manto”.

Esta mujer cambió la agenda, se metió, no estaba en el programa, en un sentido no merecía, no había hecho nada para merecer el toque milagroso del Señor pero su corazón se interpuso en la agenda y se inyectó en un lugar donde no debía estar, “porque una mujer cuya hija tenía un espíritu inmundo” su hija estaba endemoniada y no había ningún poder en la Tierra donde ella habitaba que pudiera sanar a su hija.

La Biblia nos dice que el Señor es Señor sobre todas las dimensiones de la realidad, Señor sobre las tormentas y sobre las manifestaciones naturales, Señor sobre la enfermedad, Señor sobre la muerte, Señor sobre cualquier limitación física, Señor del cielo y de la tierra, los demonios tiemblan ante la Presencia de Dios. No le tema a los demonios ¿sabe? no le tema a los demonios porque el Señor es más poderoso que cualquier demonio, clame al Señor, asegúrese de que su vida esté bien con Dios y entonces reprenda en el Nombre de Jesús con toda autoridad, su hija tenía un espíritu inmundo.

“Luego que oyó de Él” eso es tan revelador, porque esta mujer quién sabe dónde estaba, no era miembro de la tribu de Israel, no sabía de Jesús pero oyó de Él, ¿cómo oyó de Él? ¿alguna vecina que dijo: mira hay por ahí un hombre que tiene un poder de Dios que nunca se ha visto antes y que sana a los enfermos, y que se cree que es el Hijo de Dios, el salvador de Israel, lo oyó en un pozo mientras recogía agua, dos o tres mujeres comentando acerca de ello? pero el caso es que esta mujer oyó hablar de Jesús y eso hizo toda la diferencia, eso la capacitó para ir en búsqueda de la respuesta y la solución que ella necesitaba.

¡Qué importante es que la gente oiga de Jesús de parte nuestra! siembre la Palabra, siembre el mensaje del Evangelio, no se apure lo que pasa inmediatamente, su parte, nuestra parte es predicar la Palabra y dejarle saber a la gente que Cristo tiene solución, que Cristo tiene poder, que Cristo es el Hijo de Dios, que necesitamos de Él para la solución a nuestros problemas y para nuestro destino eterno.

Esta mujer oyó, uno no sabe cuándo una persona en un momento va a hacer uso de haber escuchado de Jesús en una forma genérica y general. A veces nosotros le hemos hablado a gente y aparentemente no hubo ninguna reacción ni ningún resultado pero ¿sabe qué? a veces en algún momento dado de su vida Dios activa esa Palabra y esa persona entonces va en búsqueda del Señor. Esa Palabra que usted dió así en forma general otra persona viene y añade a ella, y la copa se derrama y esa persona viene a Cristo, decide venir a la Iglesia un domingo, decide entregar su vida al Señor porque oyó hablar de Él y por eso es que nosotros tenemos que sembrar la semilla simplemente y dejar el resultado al Señor como dice ese maravilloso himno.

Ella había oído de Jesucristo y estoy seguro que, de nuevo, su fe era una fe muy imperfecta. Ella no tenía el ciento por ciento claro de quién era Jesús; yo no creo que si le hubieran preguntado quién era Jesucristo ella hubiera dicho: bueno es el Hijo de Dios, Dios hombre, Dios perfecto, Dios hombre despojado de Su gloria, venido al mundo, tomado forma de bebé, nacido de María y José o de María y el Espíritu Santo, y lleno de poder y de gracia para redimir a la humanidad de sus pecados y va a ser crucificado y va a dar justicia a la humanidad por Su muerte, y resucitará al tercer día, ella no podía recitar ese credo apostólico, ella no tenía, ella lo único que tenía era una fe bruta que era como una piedra afilada, era un nudo que tenía en su corazón de fe y de desesperación, de necesidad.

Es lo que yo digo que muchas veces es lo que Dios necesita y tenemos que pedirle al Señor que nos ayude, que nos arme de ese nivel de energía, y por eso dice que: “vino y se postró a sus pies”, toda respuesta a una oración tiene que estar precedida por una entrega, tiene que estar precedidad por una postura de adoración al Señor. Cuando ella se postró delante de Él eso era un gesto muy significativo, eso quería decir que ella reconocía de alguna manera general el Señorío de Cristo, se estaba postrando ante un Rey, se estaba postrando ante un ser superior a ella, se estaba postrando como un adorador se postra ante una deidad para reconocer su divinidad, se estaba postrando y su vida, su voluntad, estaba entregándose a Él, quizá ella misma no entendía las implicaciones de lo que estaba haciendo y estaba también humillándose y rogándole al Señor que hiciera algo, y estas son las actitudes y los elementos que componen una buena oración delante de Dios y que componen una buena actitud que el Señor se agrada y honra, adoración, entrega, intensidad, reconocimiento del Señorío de Cristo, humildad, abandono a Su Voluntad, clamor, urgencia.

Tenemos que pedirle al Señor: ayúdame a llevar mi oración al punto del rojo vivo porque yo creo que las oraciones genéricas al Señor lo dejan frío, las oraciones que Dios honra son las oraciones al fuego vivo, las oraciones al blanco de tan caliente que están. Cuando estábamos aquí antes de este tiempo de oración yo les había dicho a los hermanos hace ya una semana y media más o menos el Señor puso en mi corazón que vamos a hacer un clamor a favor de Ana Andújar y vamos a ponerlo todo sobre la mesa, y regamos la voz entre la gente que la conoce a ella, son gente de oración, y vamos a ayunar y orar por ella un día, dos días, una semana, lo que sea pero tomemos un tiempo de oración, acumulemos.

Mi deseo era que durante ese tiempo podamos acumular energía. ¿Sabe que ese tipo de imagen y de razonamiento es bíblico? Hay veces que uno tiene que, como un lanzador de una honda, yo me imagino que cuando David le iba a tirar esa piedra a Goliat él se aseguró de darle cincuenta vueltas a la honda y cogió impulso ¿no? como un lanzador de esos, y cuando lanzó la piedra la lanzó con fuerza a la frente del gigante, y así yo creo que tienen que ser nuestras oraciones.

Muchas veces tenemos que, las primeras oraciones son simplemente ensayos, nosotros vamos a pedirle al Señor por algo grande, será mejor que nos preparemos e insistamos, porque hay una parte casi física en los procesos de los milagros: la repetición, la intensidad, la fe, la expresión verbal física, la postura del cuerpo, estos son elementos que forman parte de la oración que Dios contesta, y esta mujer se postró, se tiró delante del Señor.

Al Señor le gusta oír gritos, al Señor le gusta ver lágrimas, al Señor le gusta oler malos olores de sudor porque la gente está trabajando, al Señor le gusta cuando la gente se le pega y lo toca como la mujer del flujo de sangre, al Señor le gusta cuando nosotros usamos el cuerpo y clamamos a Él, y esta mujer se tiró. Nunca abandonemos esa dimensión de la vida pentecostal, seamos un pueblo de levantar manos, de arrodillarnos, tirarnos a los pies, saltar, danzar, decir: amén, gloria a Dios, salirnos de nuestros asientos, Dios honra eso hermanos y hay que practicar estas cosas, de nuevo, en una forma adecuada pero sí hay que hacerlo, y dice que se postró, se tiró a sus pies, su necesidad había llegado hasta ese punto, su premura, su urgencia, su sentido de desesperación.

Todo le había fallado y ella se tiró ante ese ser que ella no entendía bien pero que sabía que tenía poder. Dice que la mujer era griega y cirofenicia de nación, Marcos pone eso ahí porque era importante que se supiera que ella no tenía derecho por ciudadanía, por cultura, por religión no era parte de la agenda en un sentido, ella era una aberración, algo inoportuno, pero dentro de ella ella cargaba la visa y el pasaporte que le daba derecho, y ahí el que tiene oñídos para oír oiga.

Dios es muy raro en la forma, los hombres tienen sus agendas y sus cosas pero a veces Dios dice: ¿Sabes qué? ahora hay un indulto total y Yo voy a responder a la premura y a la urgencia de este ser humano. “Y era griega y cirofenicia de nación” y dice: “y le rogaba que echase fuera de su hija al demonio” ¿por qué usa esa expresión? porque quiere enfatizar el derecho de que estaba repitiendo, no dice: “le rogó” porque si hubiera dicho “le rogó” quiere decir que lo hizo una vez y luego se calló, no, yo creo que esto fue un diálogo que se tomó tiempo.

Ahí lo que hacen es que nos resumen lo que pasó pero yo creo que ella argumentó con el Señor un tiempo, le rogó una y otra vez, esto fue un diálogo que ella argumentó y dijo: no yo no me voy de aquí hasta que Tú me bendigas. ¿Ustedes saben esa historia de Eliseo y Elías que Dios le había dicho a Eliseo? Dios tenía ya a Eliseo escogido para ser el heredero de la unción y el ministerio de Elías, y ya Dios se iba a llevar a Elías con Él para el cielo, y Eliseo se pegó a Elías porque Él quería la bendición y Elías le dijo dos o tres veces: mira déjame tranquilo, ya me tengo que ir, ya esto terminó aquí, porque es que a veces Dios se hace el remolón como dicen los mexicanos para probarnos y para provocar en nosotros una reacción de fe.

Dios usa a veces muchas maneras como para incitar en nosotros una postura aguerrida. A Dios le gusta eso no me pregunte por qué, pero a Él le gusta así como juguetear con nosotros y ponernos a esperar porque es que Él quiere que nuestro clamor llegue a ese punto de hervor, y también yo creo que porque Sus bendiciones valen tanto que a Él no le gusta darlas demasiado barato, la persona que se da por vencida demasiado rápido no merece las bendiciones del Señor, y Dios a veces se vende caro porque a veces dice: mira, tengo que hacerlo porque si no me dan el valor tengo que dármelo a Mí mismo.

A Dios le gusta cuando nosotros reconocemos que lo que queremos es lo suficientemente importante para incomodarnos y para insistir. Y ella le rogaba y le insistía, hermanos la insistencia en la oración es tan importante. Yo les digo que hay oraciones en mi vida que yo las estoy recitando desde que yo tenía 10 u 11 años y todavía se las traigo al Señor ¿sabe? y me moriré orando las mismas cosas porque hasta que yo no las vea contestadas no tengo permiso para dejar de orar en esa manera, hay que clamar al Señor hasta que veamos la respuesta y si Él no quiere eso es problema de Él, mi parte es orar y clamar, y hacer lo que Él me dice que haga, buscad y hallaréis, tocad y se os abrirá dice la Palabra del Señor, tenemos que clamar delante de Dios, tenemos que ser un pueblo aguerrido e insistente como para a veces rayar en ser irrespetuoso delante del Señor, a Dios le gusta eso hermanos.

“Le rogaba que echase fuera de su hija al demonio, pero Jesús le dijo: Deja primero que se sacien los hijos porque no está bien tomar el pan de los hijos y echarlo a los perrillos” wow. Hermanos yo me hubiera ido pa’ mi casa inmediatamente, me hubiera dicho dos o tres cosas feas y olvídate que este hombre es un sinvergüenza y yo no quiero saber de él, mira cómo me insulta, pero ¿sabe? de nuevo lo que Jesús estaba haciendo era probando la fe de ella, y Dios sabía que este evento iba a estar registrado y que en el siglo XXI, en el año 2016 en un día de agosto una Congregación de locos latinos iba a estar predicando acerca de esa mujer y que iba a estar recibiendo inspiración de ese momento, y yo creo que el Señor estaba como elaborando un drama que Él sabía que iba a ir mucho más allá de esta mujer, y que iba a trascender la historia, y que incontables generaciones iban a obtener inspiración y bendición de ese encuentro entre esta mujer y Jesús.

Porque muchas veces estos dramas que se dieron entre un hombre y una mujer, entre Jesús, o que están registrados en las páginas de la Escritura no estaban allí solamente para el beneficio de los que inmediatamente iban a escuchar o leer esas narrativas, era para generaciones después de ellos, eran dramas, narrativas, parábolas vivientes que iban a registrarse para que el pueblo de Dios se alimentara de ellas a través de los siglos hasta que Cristo viniera, que encontraran alimento para el camino arduo que iban a tener que seguir durante siglos hasta que el plan de Dios se cumpliera completamente en la historia.

Es decir que yo creo que el Señor dirigido por el Espíritu Santo estaba allí estableciendo una serie de paradigmas espirituales, de prototipos espirituales para que el pueblo de Dios los entendiera y fuera iluminado e instruído espiritualmente en su caminar. Entonces cuando Él le da esta negativa insultante a esta mujer Él lo está haciendo para beneficio de todos los que van a leer y es que aunque parezca que una persona está despreciablemente lejos de la Voluntad del Señor y de los caminos del Señor el amor de Dios es tan grande que puede sobrepasar estas cosas, y bendecir, y sanar, y ministrar, y responder a su clamor.

Y ciertamente esta mujer venía de una mujer pagana, ciertamente esta mujer era impura delante de los ojos de Dios porque lo único que nos hace puros y aceptables es la sangre de Jesús y la Palabra de Su Espíritu, en un sentido sí, como lo es todo ser humano no importa cuán honesto y honrado, y trabajador sea, si no tiene a Cristo en su corazón es un perrillo, peor que un perrillo, es un perro, porque sin Cristo somos inmundos delante de la santidad perfecta de Dios, lo único que nos hace aceptos delante de Dios y acceder a Su Presencia es la sangre y el sacrificio de Cristo en la cruz del calvario, eso es lo que nos pasa de la condición de perrillos a la condición de hijos, eso es lo que cambia nuestro estado interior, nuestra naturaleza interior, eso es lo que nos hace aceptos de la Gracia poderosa y sanadora de Dios a través de Cristo Jesús.

Entonces Él estaba diciendo: mira, ¿cuáles son los hijos? supuestamente son los que conocen la Escritura, son los que pertenecen al linaje de Abraham, y Él le dice: no está bien tomar el pan que pertenece a los hijos y echárselo a los que no lo merecen, y en ese sentido Él estaba ahí haciendo acopio de una cantidad de verdades de la Escritura, el pueblo de Israel había sido escogido por Dios pero ¿sabe qué? el Señor, es claro que Él quiere más de lo que está diciendo aquí porque Él mismo había dicho que Él había venido a bendecir a toda la humanidad sin importar si fueran judíos o no judíos, Él sabía que Su Evangelio, Su Palabra, Su obra salvífica iba a alcanzar a todas las naciones así que Él estaba teasing her, estaba jugueteando con ella, quería ver qué iba a hacer ella con esa curva que Él le estaba tirando allí, y Él quería probar su fe y quería saber si ella era verdaderamente merecedora de esa bendición que ella estaba pidiendo, y si ella tenía suficiente carga espiritual en ella para ir más allá de lo convencional y de lo formal acerca de la religión.

Gracias a Dios esta mujer dice: “Y ella le respondió y le dijo:” y yo creo que esta respuesta fue iluminada por el Espíritu Santo, esta fue una respuesta tan genial y una respuesta tan fuera de lo común, y tan como de un abogado entrenado en las leyes de la argumentación que tenía que venir de Dios, una mujer humilde iletrada como ella yo creo que no se le podía ocurrir una respuesta tan extraordinaria como la que ella le dió al Señor, “respondió ella y le dijo: si Señor, pero aún los perrillos que están debajo de la mesa comen de las migajas de los hijos” gloria al Señor.

Ella tomó el mismo argumento que el Señor le estaba tirando y se lo volteó, y le dijo: aquí te va, coge esa mientras te viene la otra. Le dijo: bueno Señor estas diciendo que somos perrillos, okay te lo acepto pero ¿sabes qué? que en el mundo aún los perritos que están debajo de la mesa se van debajo de la mesa y cuando les tiran algo o se cae algo ellos comen eso, eso es lo que yo quiero. No me des chicken cordon bleu ni filete mignon, dame un pedacito de pan aunque sea porque una migaja de Tu Mano vale todo lo que yo necesito, una palabra mínima de parte del Señor es suficiente para llenar toda necesidad.

No se necesitan grandes declaraciones de parte de Dios, un movimiento mínimo de parte del Señor en nuestra dirección es suficiente para cambiar el curso del universo hermanos. Dice ese coro que cantamos: una mirada de fe es lo que puede salvar al pecador, muchas veces lo que se necesita es un movimiento ínfimo del corazón y el poder de Dios es suficiente. La mujer del flujo de sangre solamente tocó el borde del manto, uno de los flequitos que se salían del manto judío de Jesús, ella tocó el hilito extremado de uno de los extremos, de los extremos del manto de Jesús y eso la sanó completamente, lo que los médicos no habían podido hacer, frenó y congeló el flujo de su sangre, y ella le dice: Señor aún los perrillos debajo de la mesa comen.

Vamos a pedirle al Señor que nos dé siempre las palabras correctas para orar porque aún para venir delante de la Presencia de Dios tenemos que venir como abogados, tenemos que encontrar el argumento preciso y correcto. Hay veces que Dios pone en nosotros una palabra y uno dice: pero ¿de dónde me salió eso? y esa expresión te la puso el Espíritu Santo porque esa es la llave que va a abrir el corazón de Dios y que va a traer la bendición que tú necesitas.

Hay veces que Dios es tan generoso con nosotros que nos da el argumento que Él quiere oír para que se desate Su Poder a nuestro favor, así de grandes son los misterios del Señor. Cuando Dios ponga a veces en tu corazón una expresión úsala, porque esa expresión puede ser el conducto que va a abrir el corazón del Señor y va a hacer lo que tu vida necesita que se haga. Yo creo mucho en esos argumentos y por eso tengo que pedirle: Señor prepara mi oración.

Y por eso es que esta tarde comencé a decirle algo y se me fue el hilo, pero mientras estábamos allí en el tiempo de alabanza mi corazón estaba en una sola cosa: Señor prepara mi corazón para el tiempo de oración que vamos a hacer, prepara mi corazón, prepara la estrategia, ayúdanos a configurar la logística, la forma en que Tú quieres que clamemos a Ti y la manera, y la secuencia, y el lenguaje, y la soltura espiritual porque yo creo que es así, Dios es un ser estratégico y Él piensa de esa manera, y la oración es más compleja de lo que uno piensa, el lenguaje, la logística de la oración, los misterios de la ciencia de Dios son tan profundos, y nosotros tenemos que pedirle al Señor: Señor danos sabiduría para poder entender todos los cubículos y los recintos, y los diferentes niveles de Tu misterio y de Tu ciencia.

Ella usó el argumento, usó la misma palabra del Señor para ponerlo contra la espada y la pared. Los movimientos del Espíritu son judiciales, el diablo sabe y Dios ciertamente lo sabe, el mundo del Espíritu se mueve conforme a principios judiciales, y el hombre tiene justicia y ley porque el mundo del Espíritu tiene justicia y ley, y nosotros simplemente imitamos lo que en nuestro espíritu se nos ha sido revelado, en nuestra genética, por eso hay leyes, hay gobiernos y hay sistemas judiciales, porque el mundo del Espíritu es legal y judicial en su manera, y por eso es que nosotros tenemos que entender cuando oramos, tenemos que también pedirle al Señor: Señor danos entendimiento de cómo los misterios de la oración.

Y esta mujer tropezó con uno de ellos, y es que nosotros tenemos que usar la Palabra de Dios para amarrar a Dios y lo digo con todo respeto, no estoy diciendo que pongamos el santo boca abajo, pero estoy diciendo que no hay mejor manera de orar que en la Palabra del Señor. Cuando usted le dice: Señor Tu Palabra dice que, Señor Tú has declarado en Tu Palabra que, Señor Tú has prometido que, esos argumentos legales tienen poder ante el corazón de Dios, por eso es que tenemos que conocer la Palabra, tenemos que estudiar la Palabra.

Un joven me preguntaba al final del servicio esta mañana: Pastor yo quiero sabiduría, estaba hablando acerca del sermón que se predicó esta mañana, yo quiero sabiduría de parte de Dios y yo le dije: mira la mejor manera que yo conozco de tener sabiduría es compenetrándote con la Palabra de Dios, estúdiala, hónrala, dedícate a ella, búscala como se buscan el oro y la plata, visualízala como algo vivo y real, como una entidad que encarna el Poder y la vida de Dios, cómetela todos los días, métela dentro de ti y esa Palabra te va a dar sabiduría, y Dios te va a dar entonces ojos para ver, y todo lo que tú vivas entonces tú lo vas a poder aprovechar, interpretar, y eso entonces va a crear en ti una energía de sabiduría y de verdad. Una de las maneras apreciando y valorando como el oro y la plata la Palabra de Dios, y esa Palabra entonces nos permite venir ante el Trono de Dios, nos permite usar el lenguaje adecuado, la Palabra misma brota de nuestros labios y cuando oramos, cuando predicamos, cuando razonamos la Palabra de Dios está razonando a través de nosotros, y entonces no nos sorprendamos de que vengan milagros y obras maravillosas en nuestras vidas porque es la Palabra de Dios honrándose a sí misma a través de nosotros.

Entonces esta mujer dijo: Señor te voy a tomar Tu palabra, si yo soy un perrillo amén, pero Tú sabes bien que los perrillos tienen derecho a comer de las migajas, y entonces el Señor le dijo, estoy casi seguro que el Señor se rió cuando ella le dijo eso, el Señor dijo: me pillaste, me agarraste, te saliste con la tuya ¿qué puedo decir Yo a eso? Él se divirtió, se deleitó, a Él le agradó esa respuesta atrevida de esta mujer, y el Señor le dijo: “Por esta palabra” aleluya, “por esta palabra” es la palabra, es el argumento, es esa expresión precisa que el Espíritu ha puesto en ti, es el momento, eso es lo que desata el poder y la gloria, y el afecto de Dios en nuestras vidas, es la oración humilde y sencilla propiciada por el Espíritu Santo, Él le dijo: por esta palabra que tú me acabas de dar el demonio ha salido, ha salido.

Qué interesante, Él dice: por esta palabra que tú me acabas de dar el demonio ha salido de tu hija, eso es un misterio, era una palabra preñada, era una palabra llena del poder y de la gracia de Dios. En nosotros está el poder ya de Dios para hacer cosas increíbles, para separar las aguas del mar, para hacer llover donde no hay lluvia, para hacer detenerse la lluvia donde hay lluvia, para abrir puertas que nadie puede abrir y cerrar puertas que nadie puede cerrar, para derribar muros, para resolver problemas, para traer consejo a nuestra vida, para traer soluciones que no parecen humanamente posibles, para darnos gracia ante autoridades, para hacer obras mayores que las que Jesús mismo hizo porque Él lo ha prometido así y Él ha dado permiso para que así sea, obras mayores haréis porque Él está duplicando el poder que antes Yo tenía aquí en la Tierra, ahora soy Yo y Dios a tu favor, y tú también orando.

La palabra de esta mujer, su palabra de fe liberó a su hija en reacción y en acción con Jesucristo, por esta palabra vete, el demonio ya salió. Ya esa niña sabe Dios a cuántas millas de distancia cuando esta mujer dió esa palabra experimentó un cambio, su mente quedó clara, sus movimientos físicos volvieron bajo su control, su voluntad recuperó la facultad para moverse y su hija fue sanada completamente, y aquí tenemos la confirmación, dice que cuando ella volvió a su casa halló exactamente como el Señor le había dicho, el demonio había salido y encontró a su hija acostada descansando en su cama, gloria al Señor, amén, amén.

Me imagino que por primera vez en quizás muchos meses esta niña, esta jovencita pudo dormir tranquila y estaba tan agotada por su crisis y por el tiempo que había pasado tan duro que simplemente se tiró a dormir y durmió, y cuando se despertó estaba descansada, sanada, libre, y las cosas nunca volvieron a ser las mismas en ese hogar.

Hermanos vamos a creerle a Dios, vamos a clamar delante del Señor, vamos a vivir vidas atrevidas y aguerridas delante del Señor porque tenemos un Dios que es el mismo ayer, hoy y por los siglos. Ese Cristo que está retratado ahí en esa narración es el mismo Jesús a quien tú le sirves hoy ¿sabes? es el mismo Jesús que quiere ver ese mismo tipo de fe y que honra también ese tipo de fe en nuestras vidas también, vamos a servir así.

Bajemos nuestras cabezas un momento y no se mueva de su asiento si usted puede, y deje que esa Palabra se meta en su corazón, vamos a tener silencio un momento en este lugar, y vamos a mirar a ese Jesús que está aquí en este lugar también y que nos está invitando a hacer un pacto con Él, el Señor no honra la oración de nadie que no esté dispuesto a postrarse delante de Él, que no esté dispuesto a ponerse incómodo, que no esté dispuesto a hacer una expresión física y visible de su respeto y su reverencia, y su entrega a la Voluntad del Señor.

Tú puedes ser como esa mujer cirofenicia, quizás viniste aquí a la Iglesia pero no conoces a Jesús, eres cirofenicio, no eres parte de la familia de Jesús, pero un gesto de acercamiento, un gesto de entrega a Jesús, un gesto público, un gesto visible, y si tú no has hecho ese gesto de entrega al Señor yo quiero invitarte en esta tarde a que entregues tu vida a Jesucristo y que no te vayas de aquí siendo cirofenicio, que te vayas de aquí siendo miembro de la familia de Cristo Jesús habiendo invitado al Señor a entrar a tu corazón y a ser parte central de tu vida.

por una postura de adoración al Señor. Cuando ella se postró delante de Él eso era un gesto muy significativo, eso quería decir que ella reconocía de alguna manera general el Señorío de Cristo, se estaba postrando ante un Rey, se estaba postrando ante un ser superior a ella, se estaba postrando como un adorador se postra ante una deidad para reconocer su divinidad, se estaba postrando y su vida, su voluntad, estaba entregándose a Él, quizá ella misma no entendía las implicaciones de lo que estaba haciendo y estaba también humillándose y rogándole al Señor que hiciera algo, y estas son las actitudes y los elementos que componen una buena oración delante de Dios y que componen una buena actitud que el Señor se agrada y honra, adoración, entrega, intensidad, reconocimiento del Señorío de Cristo, humildad, abandono a Su Voluntad, clamor, urgencia.

Tenemos que pedirle al Señor: ayúdame a llevar mi oración al punto del rojo vivo porque yo creo que las oraciones genéricas al Señor lo dejan frío, las oraciones que Dios honra son las oraciones al fuego vivo, las oraciones al blanco de tan caliente que están. Cuando estábamos aquí antes de este tiempo de oración yo les había dicho a los hermanos hace ya una semana y media más o menos el Señor puso en mi corazón que vamos a hacer un clamor a favor de Ana Andújar y vamos a ponerlo todo sobre la mesa, y regamos la voz entre la gente que la conoce a ella, son gente de oración, y vamos a ayunar y orar por ella un día, dos días, una semana, lo que sea pero tomemos un tiempo de oración, acumulemos.

Mi deseo era que durante ese tiempo podamos acumular energía. ¿Sabe que ese tipo de imagen y de razonamiento es bíblico? Hay veces que uno tiene que, como un lanzador de una honda, yo me imagino que cuando David le iba a tirar esa piedra a Goliat él se aseguró de darle cincuenta vueltas a la honda y cogió impulso ¿no? como un lanzador de esos, y cuando lanzó la piedra la lanzó con fuerza a la frente del gigante, y así yo creo que tienen que ser nuestras oraciones.

Muchas veces tenemos que, las primeras oraciones son simplemente ensayos, nosotros vamos a pedirle al Señor por algo grande, será mejor que nos preparemos e insistamos, porque hay una parte casi física en los procesos de los milagros: la repetición, la intensidad, la fe, la expresión verbal física, la postura del cuerpo, estos son elementos que forman parte de la oración que Dios contesta, y esta mujer se postró, se tiró delante del Señor.

Al Señor le gusta oír gritos, al Señor le gusta ver lágrimas, al Señor le gusta oler malos olores de sudor porque la gente está trabajando, al Señor le gusta cuando la gente se le pega y lo toca como la mujer del flujo de sangre, al Señor le gusta cuando nosotros usamos el cuerpo y clamamos a Él, y esta mujer se tiró. Nunca abandonemos esa dimensión de la vida pentecostal, seamos un pueblo de levantar manos, de arrodillarnos, tirarnos a los pies, saltar, danzar, decir: amén, gloria a Dios, salirnos de nuestros asientos, Dios honra eso hermanos y hay que practicar estas cosas, de nuevo, en una forma adecuada pero sí hay que hacerlo, y dice que se postró, se tiró a sus pies, su necesidad había llegado hasta ese punto, su premura, su urgencia, su sentido de desesperación.

Todo le había fallado y ella se tiró ante ese ser que ella no entendía bien pero que sabía que tenía poder. Dice que la mujer era griega y cirofenicia de nación, Marcos pone eso ahí porque era importante que se supiera que ella no tenía derecho por ciudadanía, por cultura, por religión no era parte de la agenda en un sentido, ella era una aberración, algo inoportuno, pero dentro de ella ella cargaba la visa y el pasaporte que le daba derecho, y ahí el que tiene oñídos para oír oiga.

Dios es muy raro en la forma, los hombres tienen sus agendas y sus cosas pero a veces Dios dice: ¿Sabes qué? ahora hay un indulto total y Yo voy a responder a la premura y a la urgencia de este ser humano. “Y era griega y cirofenicia de nación” y dice: “y le rogaba que echase fuera de su hija al demonio” ¿por qué usa esa expresión? porque quiere enfatizar el derecho de que estaba repitiendo, no dice: “le rogó” porque si hubiera dicho “le rogó” quiere decir que lo hizo una vez y luego se calló, no, yo creo que esto fue un diálogo que se tomó tiempo.

Ahí lo que hacen es que nos resumen lo que pasó pero yo creo que ella argumentó con el Señor un tiempo, le rogó una y otra vez, esto fue un diálogo que ella argumentó y dijo: no yo no me voy de aquí hasta que Tú me bendigas. ¿Ustedes saben esa historia de Eliseo y Elías que Dios le había dicho a Eliseo? Dios tenía ya a Eliseo escogido para ser el heredero de la unción y el ministerio de Elías, y ya Dios se iba a llevar a Elías con Él para el cielo, y Eliseo se pegó a Elías porque Él quería la bendición y Elías le dijo dos o tres veces: mira déjame tranquilo, ya me tengo que ir, ya esto terminó aquí, porque es que a veces Dios se hace el remolón como dicen los mexicanos para probarnos y para provocar en nosotros una reacción de fe.

Dios usa a veces muchas maneras como para incitar en nosotros una postura aguerrida. A Dios le gusta eso no me pregunte por qué, pero a Él le gusta así como juguetear con nosotros y ponernos a esperar porque es que Él quiere que nuestro clamor llegue a ese punto de hervor, y también yo creo que porque Sus bendiciones valen tanto que a Él no le gusta darlas demasiado barato, la persona que se da por vencida demasiado rápido no merece las bendiciones del Señor, y Dios a veces se vende caro porque a veces dice: mira, tengo que hacerlo porque si no me dan el valor tengo que dármelo a Mí mismo.

A Dios le gusta cuando nosotros reconocemos que lo que queremos es lo suficientemente importante para incomodarnos y para insistir. Y ella le rogaba y le insistía, hermanos la insistencia en la oración es tan importante. Yo les digo que hay oraciones en mi vida que yo las estoy recitando desde que yo tenía 10 u 11 años y todavía se las traigo al Señor ¿sabe? y me moriré orando las mismas cosas porque hasta que yo no las vea contestadas no tengo permiso para dejar de orar en esa manera, hay que clamar al Señor hasta que veamos la respuesta y si Él no quiere eso es problema de Él, mi parte es orar y clamar, y hacer lo que Él me dice que haga, buscad y hallaréis, tocad y se os abrirá dice la Palabra del Señor, tenemos que clamar delante de Dios, tenemos que ser un pueblo aguerrido e insistente como para a veces rayar en ser irrespetuoso delante del Señor, a Dios le gusta eso hermanos.

“Le rogaba que echase fuera de su hija al demonio, pero Jesús le dijo: Deja primero que se sacien los hijos porque no está bien tomar el pan de los hijos y echarlo a los perrillos” wow. Hermanos yo me hubiera ido pa’ mi casa inmediatamente, me hubiera dicho dos o tres cosas feas y olvídate que este hombre es un sinvergüenza y yo no quiero saber de él, mira cómo me insulta, pero ¿sabe? de nuevo lo que Jesús estaba haciendo era probando la fe de ella, y Dios sabía que este evento iba a estar registrado y que en el siglo XXI, en el año 2016 en un día de agosto una Congregación de locos latinos iba a estar predicando acerca de esa mujer y que iba a estar recibiendo inspiración de ese momento, y yo creo que el Señor estaba como elaborando un drama que Él sabía que iba a ir mucho más allá de esta mujer, y que iba a trascender la historia, y que incontables generaciones iban a obtener inspiración y bendición de ese encuentro entre esta mujer y Jesús.

Porque muchas veces estos dramas que se dieron entre un hombre y una mujer, entre Jesús, o que están registrados en las páginas de la Escritura no estaban allí solamente para el beneficio de los que inmediatamente iban a escuchar o leer esas narrativas, era para generaciones después de ellos, eran dramas, narrativas, parábolas vivientes que iban a registrarse para que el pueblo de Dios se alimentara de ellas a través de los siglos hasta que Cristo viniera, que encontraran alimento para el camino arduo que iban a tener que seguir durante siglos hasta que el plan de Dios se cumpliera completamente en la historia.

Es decir que yo creo que el Señor dirigido por el Espíritu Santo estaba allí estableciendo una serie de paradigmas espirituales, de prototipos espirituales para que el pueblo de Dios los entendiera y fuera iluminado e instruído espiritualmente en su caminar. Entonces cuando Él le da esta negativa insultante a esta mujer Él lo está haciendo para beneficio de todos los que van a leer y es que aunque parezca que una persona está despreciablemente lejos de la Voluntad del Señor y de los caminos del Señor el amor de Dios es tan grande que puede sobrepasar estas cosas, y bendecir, y sanar, y ministrar, y responder a su clamor.

Y ciertamente esta mujer venía de una mujer pagana, ciertamente esta mujer era impura delante de los ojos de Dios porque lo único que nos hace puros y aceptables es la sangre de Jesús y la Palabra de Su Espíritu, en un sentido sí, como lo es todo ser humano no importa cuán honesto y honrado, y trabajador sea, si no tiene a Cristo en su corazón es un perrillo, peor que un perrillo, es un perro, porque sin Cristo somos inmundos delante de la santidad perfecta de Dios, lo único que nos hace aceptos delante de Dios y acceder a Su Presencia es la sangre y el sacrificio de Cristo en la cruz del calvario, eso es lo que nos pasa de la condición de perrillos a la condición de hijos, eso es lo que cambia nuestro estado interior, nuestra naturaleza interior, eso es lo que nos hace aceptos de la Gracia poderosa y sanadora de Dios a través de Cristo Jesús.

Entonces Él estaba diciendo: mira, ¿cuáles son los hijos? supuestamente son los que conocen la Escritura, son los que pertenecen al linaje de Abraham, y Él le dice: no está bien tomar el pan que pertenece a los hijos y echárselo a los que no lo merecen, y en ese sentido Él estaba ahí haciendo acopio de una cantidad de verdades de la Escritura, el pueblo de Israel había sido escogido por Dios pero ¿sabe qué? el Señor, es claro que Él quiere más de lo que está diciendo aquí porque Él mismo había dicho que Él había venido a bendecir a toda la humanidad sin importar si fueran judíos o no judíos, Él sabía que Su Evangelio, Su Palabra, Su obra salvífica iba a alcanzar a todas las naciones así que Él estaba teasing her, estaba jugueteando con ella, quería ver qué iba a hacer ella con esa curva que Él le estaba tirando allí, y Él quería probar su fe y quería saber si ella era verdaderamente merecedora de esa bendición que ella estaba pidiendo, y si ella tenía suficiente carga espiritual en ella para ir más allá de lo convencional y de lo formal acerca de la religión.

Gracias a Dios esta mujer dice: “Y ella le respondió y le dijo:” y yo creo que esta respuesta fue iluminada por el Espíritu Santo, esta fue una respuesta tan genial y una respuesta tan fuera de lo común, y tan como de un abogado entrenado en las leyes de la argumentación que tenía que venir de Dios, una mujer humilde iletrada como ella yo creo que no se le podía ocurrir una respuesta tan extraordinaria como la que ella le dió al Señor, “respondió ella y le dijo: si Señor, pero aún los perrillos que están debajo de la mesa comen de las migajas de los hijos” gloria al Señor.

Ella tomó el mismo argumento que el Señor le estaba tirando y se lo volteó, y le dijo: aquí te va, coge esa mientras te viene la otra. Le dijo: bueno Señor estas diciendo que somos perrillos, okay te lo acepto pero ¿sabes qué? que en el mundo aún los perritos que están debajo de la mesa se van debajo de la mesa y cuando les tiran algo o se cae algo ellos comen eso, eso es lo que yo quiero. No me des chicken cordon bleu ni filete mignon, dame un pedacito de pan aunque sea porque una migaja de Tu Mano vale todo lo que yo necesito, una palabra mínima de parte del Señor es suficiente para llenar toda necesidad.

No se necesitan grandes declaraciones de parte de Dios, un movimiento mínimo de parte del Señor en nuestra dirección es suficiente para cambiar el curso del universo hermanos. Dice ese coro que cantamos: una mirada de fe es lo que puede salvar al pecador, muchas veces lo que se necesita es un movimiento ínfimo del corazón y el poder de Dios es suficiente. La mujer del flujo de sangre solamente tocó el borde del manto, uno de los flequitos que se salían del manto judío de Jesús, ella tocó el hilito extremado de uno de los extremos, de los extremos del manto de Jesús y eso la sanó completamente, lo que los médicos no habían podido hacer, frenó y congeló el flujo de su sangre, y ella le dice: Señor aún los perrillos debajo de la mesa comen.

Vamos a pedirle al Señor que nos dé siempre las palabras correctas para orar porque aún para venir delante de la Presencia de Dios tenemos que venir como abogados, tenemos que encontrar el argumento preciso y correcto. Hay veces que Dios pone en nosotros una palabra y uno dice: pero ¿de dónde me salió eso? y esa expresión te la puso el Espíritu Santo porque esa es la llave que va a abrir el corazón de Dios y que va a traer la bendición que tú necesitas.

Hay veces que Dios es tan generoso con nosotros que nos da el argumento que Él quiere oír para que se desate Su Poder a nuestro favor, así de grandes son los misterios del Señor. Cuando Dios ponga a veces en tu corazón una expresión úsala, porque esa expresión puede ser el conducto que va a abrir el corazón del Señor y va a hacer lo que tu vida necesita que se haga. Yo creo mucho en esos argumentos y por eso tengo que pedirle: Señor prepara mi oración.

Y por eso es que esta tarde comencé a decirle algo y se me fue el hilo, pero mientras estábamos allí en el tiempo de alabanza mi corazón estaba en una sola cosa: Señor prepara mi corazón para el tiempo de oración que vamos a hacer, prepara mi corazón, prepara la estrategia, ayúdanos a configurar la logística, la forma en que Tú quieres que clamemos a Ti y la manera, y la secuencia, y el lenguaje, y la soltura espiritual porque yo creo que es así, Dios es un ser estratégico y Él piensa de esa manera, y la oración es más compleja de lo que uno piensa, el lenguaje, la logística de la oración, los misterios de la ciencia de Dios son tan profundos, y nosotros tenemos que pedirle al Señor: Señor danos sabiduría para poder entender todos los cubículos y los recintos, y los diferentes niveles de Tu misterio y de Tu ciencia.

Ella usó el argumento, usó la misma palabra del Señor para ponerlo contra la espada y la pared. Los movimientos del Espíritu son judiciales, el diablo sabe y Dios ciertamente lo sabe, el mundo del Espíritu se mueve conforme a principios judiciales, y el hombre tiene justicia y ley porque el mundo del Espíritu tiene justicia y ley, y nosotros simplemente imitamos lo que en nuestro espíritu se nos ha sido revelado, en nuestra genética, por eso hay leyes, hay gobiernos y hay sistemas judiciales, porque el mundo del Espíritu es legal y judicial en su manera, y por eso es que nosotros tenemos que entender cuando oramos, tenemos que también pedirle al Señor: Señor danos entendimiento de cómo los misterios de la oración.

Y esta mujer tropezó con uno de ellos, y es que nosotros tenemos que usar la Palabra de Dios para amarrar a Dios y lo digo con todo respeto, no estoy diciendo que pongamos el santo boca abajo, pero estoy diciendo que no hay mejor manera de orar que en la Palabra del Señor. Cuando usted le dice: Señor Tu Palabra dice que, Señor Tú has declarado en Tu Palabra que, Señor Tú has prometido que, esos argumentos legales tienen poder ante el corazón de Dios, por eso es que tenemos que conocer la Palabra, tenemos que estudiar la Palabra.

Un joven me preguntaba al final del servicio esta mañana: Pastor yo quiero sabiduría, estaba hablando acerca del sermón que se predicó esta mañana, yo quiero sabiduría de parte de Dios y yo le dije: mira la mejor manera que yo conozco de tener sabiduría es compenetrándote con la Palabra de Dios, estúdiala, hónrala, dedícate a ella, búscala como se buscan el oro y la plata, visualízala como algo vivo y real, como una entidad que encarna el Poder y la vida de Dios, cómetela todos los días, métela dentro de ti y esa Palabra te va a dar sabiduría, y Dios te va a dar entonces ojos para ver, y todo lo que tú vivas entonces tú lo vas a poder aprovechar, interpretar, y eso entonces va a crear en ti una energía de sabiduría y de verdad. Una de las maneras apreciando y valorando como el oro y la plata la Palabra de Dios, y esa Palabra entonces nos permite venir ante el Trono de Dios, nos permite usar el lenguaje adecuado, la Palabra misma brota de nuestros labios y cuando oramos, cuando predicamos, cuando razonamos la Palabra de Dios está razonando a través de nosotros, y entonces no nos sorprendamos de que vengan milagros y obras maravillosas en nuestras vidas porque es la Palabra de Dios honrándose a sí misma a través de nosotros.

Entonces esta mujer dijo: Señor te voy a tomar Tu palabra, si yo soy un perrillo amén, pero Tú sabes bien que los perrillos tienen derecho a comer de las migajas, y entonces el Señor le dijo, estoy casi seguro que el Señor se rió cuando ella le dijo eso, el Señor dijo: me pillaste, me agarraste, te saliste con la tuya ¿qué puedo decir Yo a eso? Él se divirtió, se deleitó, a Él le agradó esa respuesta atrevida de esta mujer, y el Señor le dijo: “Por esta palabra” aleluya, “por esta palabra” es la palabra, es el argumento, es esa expresión precisa que el Espíritu ha puesto en ti, es el momento, eso es lo que desata el poder y la gloria, y el afecto de Dios en nuestras vidas, es la oración humilde y sencilla propiciada por el Espíritu Santo, Él le dijo: por esta palabra que tú me acabas de dar el demonio ha salido, ha salido.

Qué interesante, Él dice: por esta palabra que tú me acabas de dar el demonio ha salido de tu hija, eso es un misterio, era una palabra preñada, era una palabra llena del poder y de la gracia de Dios. En nosotros está el poder ya de Dios para hacer cosas increíbles, para separar las aguas del mar, para hacer llover donde no hay lluvia, para hacer detenerse la lluvia donde hay lluvia, para abrir puertas que nadie puede abrir y cerrar puertas que nadie puede cerrar, para derribar muros, para resolver problemas, para traer consejo a nuestra vida, para traer soluciones que no parecen humanamente posibles, para darnos gracia ante autoridades, para hacer obras mayores que las que Jesús mismo hizo porque Él lo ha prometido así y Él ha dado permiso para que así sea, obras mayores haréis porque Él está duplicando el poder que antes Yo tenía aquí en la Tierra, ahora soy Yo y Dios a tu favor, y tú también orando.

La palabra de esta mujer, su palabra de fe liberó a su hija en reacción y en acción con Jesucristo, por esta palabra vete, el demonio ya salió. Ya esa niña sabe Dios a cuántas millas de distancia cuando esta mujer dió esa palabra experimentó un cambio, su mente quedó clara, sus movimientos físicos volvieron bajo su control, su voluntad recuperó la facultad para moverse y su hija fue sanada completamente, y aquí tenemos la confirmación, dice que cuando ella volvió a su casa halló exactamente como el Señor le había dicho, el demonio había salido y encontró a su hija acostada descansando en su cama, gloria al Señor, amén, amén.

Me imagino que por primera vez en quizás muchos meses esta niña, esta jovencita pudo dormir tranquila y estaba tan agotada por su crisis y por el tiempo que había pasado tan duro que simplemente se tiró a dormir y durmió, y cuando se despertó estaba descansada, sanada, libre, y las cosas nunca volvieron a ser las mismas en ese hogar.

Hermanos vamos a creerle a Dios, vamos a clamar delante del Señor, vamos a vivir vidas atrevidas y aguerridas delante del Señor porque tenemos un Dios que es el mismo ayer, hoy y por los siglos. Ese Cristo que está retratado ahí en esa narración es el mismo Jesús a quien tú le sirves hoy ¿sabes? es el mismo Jesús que quiere ver ese mismo tipo de fe y que honra también ese tipo de fe en nuestras vidas también, vamos a servir así.

Bajemos nuestras cabezas un momento y no se mueva de su asiento si usted puede, y deje que esa Palabra se meta en su corazón, vamos a tener silencio un momento en este lugar, y vamos a mirar a ese Jesús que está aquí en este lugar también y que nos está invitando a hacer un pacto con Él, el Señor no honra la oración de nadie que no esté dispuesto a postrarse delante de Él, que no esté dispuesto a ponerse incómodo, que no esté dispuesto a hacer una expresión física y visible de su respeto y su reverencia, y su entrega a la Voluntad del Señor.

Tú puedes ser como esa mujer cirofenicia, quizás viniste aquí a la Iglesia pero no conoces a Jesús, eres cirofenicio, no eres parte de la familia de Jesús, pero un gesto de acercamiento, un gesto de entrega a Jesús, un gesto público, un gesto visible, y si tú no has hecho ese gesto de entrega al Señor yo quiero invitarte en esta tarde a que entregues tu vida a Jesucristo y que no te vayas de aquí siendo cirofenicio, que te vayas de aquí siendo miembro de la familia de Cristo Jesús habiendo invitado al Señor a entrar a tu corazón y a ser parte central de tu vida.

La transferencia del conocimiento antiguo de una generación a la otra

TRANSCRIPT

Les invito a ir a la epístola de Tito, al pastor Tito del Apóstol Pablo. Es una epístola muy nutritiva y muy sólida. Tiene una enseñanza muy especial y fue escrita a un pastor por el Apóstol Pablo, una iglesia que él había ayudado a fundar y Tito había sido asignado a esa comunidad para pastorearla.

Era casi como levantando una obra prácticamente, y era una comunidad un poco difícil, esa área parece que era conocida como un área un poquito problemática y de hecho tenía mala reputación. Y Pablo sintió la necesidad de hablarle a Tito acerca de cómo él debía bregar con esta comunidad un poquito problemática. Y es importante saber eso a la luz de lo que él está aconsejándole a Tito que predique, que hable, que enseñe, cómo él debe comportarse, porque lo está haciendo en el contexto de una comunidad difícil, una comunidad problemática, una comunidad de un carácter un poquito espinoso. Y por ejemplo, si usted va antes de comenzar el capítulo 2, versículo 1, en el versículo 12 Pablo habla acerca de esta comunidad, dice:

“…Uno de ellos, su propio profeta dijo, los cretenses – porque esta era la región de Creta y entonces allí se encontraba esta comunidad en la cual estaba pastoreando Tito y Pablo dice, – mira, aún uno de su propia gente dijo acerca de ellos, siempre mentirosos, malas bestias, glotones, ociosos…”

¿A usted le han llamado alguna vez una mala bestia? Yo espero que no. pero es una buena forma de insultar a alguien, mala bestia, glotones, ociosos. Qué recomendación más terrible. Y dice, este testimonio es verdadero, eso no es falso, es verdad, son así. Y dice:

“… por tanto repréndelos duramente para que sean sanos en la fe…”

Sabe que hay un lugar también en el trabajo pastoral para reprender a la gente. Así que si yo les reprendo alguna vez sepa que estoy en la autoridad de la palabra. La gente cree que los pastores son solamente para pasarle la mano por la cabeza. Hay veces que hay que confrontar también, eso es parte del trabajo pastoral. Cuántos dicen amén, Aleluya! Gloria a Dios.

Gracias a Dios que yo soy todo lo contrario, un manojo de dulzura y bendición. Nadie tiene nada que decir acerca de mí. Pero dice, “repréndelos duramente para que sean sanos en la fe.”

¿Qué es lo que hace la palabra? Cuando uno predica la palabra del Señor hay veces que la palabra puede ser confrontativa, puede ser desagradable, como que hinca a uno pero parte de eso es porque es una medicina también que nos sana. A veces cuando nos aplican una medicina pica y hasta duele pero es sanadora y genera vida.

Entonces, Pablo dice, usa la palabra para esta gente hay que formarles su carácter verdaderamente cristiano. Entonces yo creo que esto que está diciendo Pablo tiene que entenderse a la luz de ese contexto negativo, de ese carácter áspero, carnal que tiene esta comunidad que está siendo poco a poco formada para llegar a ser una comunidad que refleje el carácter cristiano.

Así que aquí en el capítulo 2 él entra en una enseñanza correctiva. Él le dice a Tito, mira concéntrate en esto, predica esto, forma este tipo de sensibilidad de carácter en ellos, que tu enseñanza sea de este tipo para contrarrestar esas actitudes negativas que ellos tienen. Los pastores tenemos que enseñar conforme a lo que discernimos que necesita nuestro pueblo. Tenemos que darle la comida que ellos necesitan y el pastor escoge cada domingo, cada tiempo que interviene según uno va discerniendo las necesidades del pueblo de Dios. Y entonces Pablo dice, estas son las cosas que tu tienes que hablar y enseñar.

Yo creo que en nuestro tiempo que vivimos, en este contexto social en que la iglesia se mueve y que cuando la gente viene a la iglesia, viene también con necesidad de ser formados. Yo siento que nuestro llamado como pastores, como predicadores, debe ser eso, de forjan en nuestro pueblo una cierta sensibilidad, una cierta forma de ser, un carácter. Yo creo que esa es la parte más importante de la vida cristiana, dejar que Dios y el Espíritu Santo y la palabra de Dios vaya formando nuestro carácter, nuestra personalidad, nuestra forma de ser, de actuar y de comportarnos.

Entonces, Pablo dice, bueno, este es el diagnóstico, esto es lo que esta gente padece, estas son sus fallas. Entonces dice:

“…Pero tu… – está hablando de lo que él acaba de tocar en su introducción – Tito, pastor que eres, debes hacer esto, de esta manera tu debes enseñar, predicar y comportarte. “Pero tu habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina.”

Saben hermanos que hoy en día sobre los pastores y sobre las iglesias hay una presión tremenda de cambiar la doctrina o de reprimir y callar ciertos temas y ciertas enseñanzas que la gente considera ofensiva, que la cultura predominante considera contraria a sus apetitos, a sus deseos, a sus preferencias y a lo que ella considera moral, ético, etc.

Nuestra cultura ha cambiado en una forma extraordinaria, todo está siendo cuestionado en nuestros tiempos, desde la sexualidad, las relaciones humanas, la política, la moralidad, es un tiempo de gran cambio. Y hay una presión muy grande sobre la iglesia y sobre las iglesias y sobre los pastores para que solo prediquen acerca de ciertas cosas y que no prediquen de otras cosas, que la gente pueda venir y entrar a la iglesia y sentirse cómoda, que no se les dañe el almuerzo cuando salgan de la iglesia, que no se vayan confrontados, molestos e inquietos. No, la gente viene a que los anestesien. Mucha gente viene a la iglesia para que me digan algo bonito, que me consuelen, me den ánimo, me digan que yo valgo, que Dios me ama, y todo es muy necesario y muy importante. La iglesia no debe ser un lugar donde se vaya rengueando porque el pastor los ha estado azotando todo el tiempo mientras predica. No. yo creo que tiene que haber el otro lado. Pero muchas veces hay que…

Cuando yo predico tengo que sacar mi enseñanza de la palabra de Dios, no de las costumbres del mundo, no de los tiempos, sino qué dice la palabra del Señor. Y nosotros también tenemos que venir a la iglesia a ser enseñados, a ser instruidos, a ser formados y aún cuando el pastor diga algo que no nos gusta, nosotros tenemos que meditar en ello porque se supone que este hombre que está aquí predicando tiene las mejores intensiones. Yo solo puedo predicar lo que mi consciencia me dice y lo que yo siento que la palabra del Señor está diciendo. Y si usted no está de acuerdo por lo menos deme el beneficio de la duda de que yo estoy haciendo todo lo posible por predicar lo que la Biblia llama esa sana doctrina. En otras palabras, no las enseñanzas sutiles, exóticas, sofisticadas y a veces herejes, sino esa comida buena, casera, sólida, probada por el tiempo que resiste el escrutinio del Espíritu Santo y que cuando Dios la examina dice, la apruebo, pongo mi sello de aprobación sobre esa enseñanza.

La iglesia como nunca necesita sana doctrina. En estos tiempos sobre todo yo creo que la gente no necesita tantas enseñanzas teológicamente sofisticadas, aunque eso es bueno de vez en cuando, pero lo que necesita es comida sólida, espinaca y proteína porque los tiempos son díficiles.

“…habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina – y entonces él le da unos ejemplos y usted verá que Pablo incluye una cantidad muy diversa de cualidades de carácter que Tito debe enfatizar en su enseñanza, muchas diferentes cualidades. Vamos a ver una diversidad de cosas y características que él debe aconsejarles a los miembros de su congregación que adquieran y que manifiesten.

Pero antes de entrar en eso veo como que el resumen de todo, la coherencia en toda esta diversidad de cosas es acerca del carácter cristiano. Hay un carácter, hay una personalidad, una actitud que debe caracterizar a los hijos de Dios. Y yo creo que el énfasis que él pone en todas estas diferentes cualidades es acerca de sobriedad, dignidad, seriedad, disciplina, un comportamiento como recogido yo podría decir. Ese es el énfasis, hay otras cualidades en otros pasajes de la escritura la Biblia señala, pero en este caso lo que está señalándose es esas cualidades como de seriedad, de integridad, un comportamiento sobrio, un comportamiento céntrico, centralizados.

Entonces, una vida sobria, digna, disciplinada, seria. Y entonces dice, a los ancianos, y aquí yo creo que se está refiriendo no a los ancianos, por ejemplo como los pastores que son ancianos espiritualmente hablando, sino más bien a las personas más avanzadas de edad, a las personas que están entradas en edad. Y yo creo que aquí no tenemos que ir demasiado lejos, de una persona que tenga 80 años, 85, 90 años. Yo creo que puede referirse también a las personas más adultas en la congregación. Pero dice, a los ancianos, porque recuerden en esos tiempos la ancianidad era muy venerada, los ancianos en una comunidad eran como las personas a las cuales uno miraba para un ejemplo, eran las personas que eran los modelos dignos de respeto, reverencia, veneración.

Entonces dice, en una congregación enséñales a los ancianos, a las personas más avanzadas de edad que sean sobrios, serios y prudentes. Esas 3 cosas que yo creo que son características que todos debemos comenzar a desarrollar y veremos más adelante que cuando él habla acerca de los jóvenes y de las mujeres jóvenes en edad de casarse o casadas, también está sugiriendo ese perfil espiritual muy similar. Pero él dice unas 6 características acerca de los ancianos – las primeras yo creo que son parte como de una totalidad – sobrios, serios y prudentes y después habla de que sean sanos en la fe, amor y paciencia.

Pero tomemos un momentito estas 3 cualidades. Yo no creo tener tiempo para discutirlas todas pero espero que al final usted se vaya como con un sedimento de enseñanza que usted pueda meditar aunque no logre agotar todo este pasaje. La primera cualidad dice que sean sobrios. Esa cualidad en el griego original ‘nefalios’ se refiere específicamente a que no sean… es lo contrario de una persona que está sujeta al vino, que está adicta al vino, al alcohol, que sea abstemio, que sea sobrio, pero yo creo que va mucho más allá que simplemente la dependencia del licor. Y la idea es que sean personas que tengan sujetos sus apetitos y sus impulsos. Yo creo que según un hombre o una mujer de Dios va creciendo y desarrollándose en madurez, debe ser una persona que está en control de sus apetitos. Creo que eso es algo que va poco a poco uno desarrollando con el paso de los años pero uno va sometiendo poco a poco la carne, las dependencias, los apetitos a la doctrina, la enseñanza del Señor.

Yo creo que también la palabra sobriedad se refiere a una persona que no está como a la merced de las circunstancias, siempre con grandes entusiasmos o con grandes aversiones a los demás. Es una persona que sus fluctuaciones no son de aquí para allá sino más bien que se mueve en una manera muy intermedia, que sean sobrios, que sean comedidos y que sean disciplinados en sus emociones.

Yo creo que es una de las cosas que tenemos que apuntar cada día en nuestra vida, estar más y más en control de nuestras emociones y de nuestros apetitos y pedirle al Señor cada día que nos haga más conocedores de nosotros mismos para saber de qué pie cojeamos literalmente para que entonces el Señor pueda someter esas cosas a su disciplina.

Que sean sobrios, que sean serios. Esa es una palabra muy interesante, la palabra ‘semnos’ que de hecho ¿cuántos estuvieron en el servicio de este miércoles pasado? Yo sé que algunos de ustedes estuvieron acá y sino pídale perdón al Señor ahora mismo. Yo le perdono ciertamente. El Apóstol Pablo en la epístola a los filipenses habla también de una serie de cualidades. Cuando él dice, por lo demás, hermanos, todo lo verdadero, todo lo justo, todo lo honesto, esa palabra honesto es la misma palabra que Pablo usa aquí para serios. Yo decía que en filipenses esa palabra que se traduce al español ‘honestos’, no es exactamente lo que quiere decir el griego original.

La palabra semnos se refiere más bien como tener una cierta dignidad, algo honorable, una forma de caminar con cierta dignidad. Y se refiere a esa cualidad que debe tener una persona, un hombre, una mujer de Dios, una experiencia en los caminos del Señor, que deben distinguirse por un comportamiento digno, un comportamiento honorable, digno de respeto. Entonces es esa idea de que los siervos de Dios no somos gente chabacana que estamos siempre por allí palmeando a la gente en la espalda y diciendo chistes a diestra y a siniestra. No es tampoco que seamos seriotes, pero tiene que haber cierto comportamiento, cierta dignidad según uno va entrando en madurez en el Señor uno debe comportarse en una manera seria y sobria y digna.

La otra palabra es prudentes, ‘sofron’ o ‘sofronein’ que quiere decir que tengan dominio propio, que tengan control. Es la misma palabra que Pablo usa cuando dice, porque Dios no nos ha dado espíritu de cobardía sino de poder, de amor y la palabra sofronein, dominio propio, pero también quiere decir una mente sobria, una mente sana. Que sean prudentes.

¿Usted sabe lo que quiere decir la palabra prudente? Una persona que piensa las cosas, que habla cuando tiene que hablar, que tiene la palabra correcta, que se comporta en una forma discreta. Y como ustedes pueden ver estas tres palabras sobrio, serio, prudente, hacen como una fotografía, un perfil de un hombre maduro en el Señor y también esto se puede aplicar a una mujer. Tenemos que tener ese carácter recogido, ese comportamiento sobrio, digno de una persona que ha sido tratada por el Espíritu Santo y que piensa las cosas antes de hacerlas, que no se deja llevar por las emociones y por los apetitos sino que está controlado por la palabra de Dios.

Todo lo contrario de lo que es el perfil de esa gente cuando entra a la iglesia, los cretenses, bestias, glotones, ociosos, mentirosos. Esto es todo lo contrario. Y ciertamente los hijos de Dios según vamos creciendo en la fe tenemos que ir pidiéndole al Señor, “Señor, haznos cada día más y más que nos comportemos con esa dignidad, con ese carácter que inspira reverencia y respeto de parte de los demás.”

Entonces, sobrios, serios, prudentes. Dice que sean sanos en la fe, en el amor y en la paciencia. En otras palabras, que sean sanos quiere decir que sean como balanceados, tratados, saludables en esas 3 áreas, en la fe, evidentemente que tengan una fe sólida, que sean gente de una doctrina sólida, que también sean personas que saben cómo atravesar las pruebas, las dificultades de la vida, sanos en la fe, en el amor. Un hombre maduro en el Señor, una mujer madura en el Señor tiene que reflejar ese carácter amoroso, mientras más viejos nos pongamos debemos ser todo lo contrario de sangrigordos. ¿Usted ha visto la caricatura del viejo sangrigordo, peleón, difícil, excéntrico? El cristiano debe ser todo lo contrario. Según van pasando los años deben hacerse más amorosos, más tiernos, más tolerantes de los demás, que la gente quiera estar con ellos en vez de todo lo contrario.

En el amor y en la paciencia, esa palabra paciencia es ‘jupomone’ quiere decir en la fortaleza, en la resistencia, cuando vienen las pruebas y las dificultades. Está hablando acerca de los hombres, pero de nuevo yo digo que estas cosas ciertamente pueden también ser aplicables a todos nosotros, pero que los ancianos de la congregación, la gente madura de la iglesia, estas deben ser algunas de las cualidades de su carácter.

“Las ancianas asimismo sean reverentes en su porte.” Esa es una idea muy bonita. Yo escribí aquí Catestemate ieroprepeis y quiere decir… es interesantísimo porque Pablo escribió estas cosas en el griego original, que sean de un porte conveniente a una persona santa, que se conduzcan, que caminen, que la gente cuando las vea, su perfil, su comportamiento sea conveniente a una persona que camina en santidad, lo cual es interesante con esta palabra de semnos, serios. Él está aplicando ese mismo tipo de cualidades a una mujer madura en los caminos del Señor también.

Yo creo que empalmando eso con lo que prediqué el miércoles pasado acerca de todo lo honorable que también decimos todo lo honesto, pensemos en estas cosas. Es una cualidad del hijo de Dios según Dios va tratando con nosotros, yo creo que ciertamente los siervos del Señor, siervas del Señor, deben adquirir ese porte. No quiere decir que no nos riamos, no quiere decir que no tengamos un buen sentido del humor, pero sí tiene que haber como esa característica de cierta reverencia en el caminar, en comportarnos, cierta forma.

Piense en un rey o una reina, la reina Isabel, por ejemplo, en Inglaterra cómo ella cuando saluda, cuando va en un carro y hay multitud alrededor ella hace así con la mano, bien suavecito, mucha reverencia. No tan, “Hey, cómo están ustedes?” eso es aquí en Estados Unidos, aquí es todo lo contrario. Aquí se supone que el presidente esté con todo el mundo, que se tome una cerveza con una persona de la televisión, que diga chistes. La sensibilidad antigua es una de que la persona que camina en ciertos niveles debe comportarse con cierta dignidad que refleje. Somos reyes y sacerdotes, ¿no dice así la palabra del Señor? Dígase usted mismo, soy una reina, soy un sacerdote y compórtese de esa manera entonces, vamos a ver qué es lo que está pasando aquí.

Las ancianas asimismo sean reverentes en su porte. Lo peor que puede haber por allí es una anciana con una minifalda y unas medias con redecilla pretendiendo que tiene 25 años. Yo creo que uno tiene que entrar en su edad y lo mismo para un hombre por igual, con una gran cadenota aquí a los 80 años, actuando como si fuera un teenager. No, tiene que ser reverente, tiene que comportarse en cierta manera. Le pedimos al Señor que nos ayude a envejecer con elegancia, con dignidad. Pero no es que nos vamos a echar a morir, hermana, entiéndase, póngase su pintalabios y su taquito, no se preocupe, mientras Dios le permita hacerlo hágalo, eso es bueno. Pero sea reverente en su porte.

No calumniadoras. Óigame, una vieja chismosa eso es lo peor del mundo, hermanos. Y un viejo también, un anciano, no, no, tenemos que ser… las calumnias, el chisme, la murmuración, esas son cosas que no convienen a un hijo de Dios, a una hija de Dios. Tenemos que reprender eso, sacarlo completamente de la iglesia. Nuestro hablar tiene que ser sazonado con sal, dice la palabra. Si quiere echarle un poquito de azúcar y canela también, mejor todavía.

El hijo de Dios tiene que hablar en una forma comedida, que sus palabras sean palabras de peso, no estar calumniando a la gente diciendo mal de la gente. Las personas deben confiar en un hijo de Dios porque sabe que no le van a estar metiendo un cuchillo por detrás.

No calumniadoras, no esclavas del vino. Imagínese una anciana toda borracha, caminando por ahí así, eso es la muerte misma. Las ancianas deben ser sobrias. Pero de nuevo no es solamente la idea de la bebida, yo creo que cualquier tipo de… ahí se está refiriendo a ese dominio propio, ese control que debemos tener. Si su adicción es la Coca Cola, pues hermana, pídale al Señor que le ayude a tomar menos Coca Cola, lo que sea, pero que estemos en control de nuestros apetitos, estemos en control de nuestras emociones.

Pidámosle al Señor ese dominio propio que conviene a un hijo, una hija de Dios. ¿Están conmigo todavía o están aburridos? Porque esta no es una enseñanza sofisticada, esto es arroz con frijoles y carne guisada. Es comida casera pero muy saludable.

No calumniadora, no esclavas del vino, maestras del bien. Caladidas calos. Dígalo 100 veces bien rápido. Quiere decir que sean buenas instructoras del bien. Por algo se debe distinguir una sierva de Dios porque de su boca salgan palabras de enseñanza, de sabiduría. Y es interesante que entonces él aplica esto al rol que deben jugar las ancianas, las mujeres más maduras en instruir a las mujeres más jóvenes de la iglesia.

Yo sé que ahora todas las hermanas están diciendo, “Ah, eso me aplica a mí, yo soy la mujer joven y que me enseñen las ancianas.” Porque aquí no hay ancianas. Dice, que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos.

Yo voy a entrar en algo que puede ser un poquito controversial para las mujeres liberadas de nuestra iglesia, y profesionales y modernas de nuestro tiempo. Pero a mí me impactó esta idea de las mujeres más experimentadas, discipular a las mujeres más jóvenes. Eso era una costumbre que se podía entender muy bien en los tiempos antiguos, pero hoy en día yo creo que se ha perdido esa costumbre de que las jóvenes busquen, porque eso tiene que ser mutuo, modelos, mentoras que las ayuden a aprender el rol de una mujer madura, cristiana en el espíritu.

Y yo quiero aplicar eso porque en realidad eso fue lo que más me cautivó de este pasaje, porque yo creo que en nuestros tiempos se ha perdido algo que a través de la historia de la humanidad ha sido una cualidad muy importante y es la transferencia de la cultura, la transferencia del conocimiento antiguo de una generación a la otra. Hoy en día eso es todo lo contrario, donde la juventud… usted ve, por ejemplo, a mi me causa mucha dificultad esta idea de iglesias de jóvenes adultos, como se da tanto en Estados Unidos en este tiempo, iglesias donde usted no ve una sola persona mayor sino que todo el mundo de 20 a 30 años, por allí, y eso es todo. Y yo creo que eso es contrario a la palabra del Señor.

Yo lo que creo más bien es esa transferencia donde los viejos instruyen a los jóvenes y reciben energía de ellos y los jóvenes bendicen a los ancianos con su vitalidad, con su fuerza y aprenden de ellos y mutuamente se tratan uno al otro, se trabaja el uno al otro. El diablo ha querido dividir las generaciones en nuestro tiempo y usted ve que hoy en día el mundo está prácticamente en muchas áreas gobernado por la juventud. Por ejemplo el mundo de la tecnología, el mundo de la música, el mundo del cine y los medios de comunicación mucho de eso está gobernado por gente entre los 20, 30 años, son los que codifican las computadoras, los que tienen el aspecto de la música, toda esa gente es joven. Hoy se glorifica mucho la juventud, la ancianidad no tanto. Y yocreo que eso es lo que está en parte causando muchos de los serios problemas que tenemos en nuestra cultura.

Pablo le dice a Timoteo, enséñales a las ancianas a que instruyan y mentoreen a las mujeres más jóvenes y eso quiere decir que las mujeres más jóvenes deben dejarse mentorear y proyectar una actitud de querer ser enseñados. Porque muchas veces los adultos y los ancianos queremos enseñar a los jóvenes pero uno ve esa barrera, no me toquen, no te metas en mi vida, bajo un falso sentido de independencia y como que tienes que respetar mi espacio. Usted ve a los niños de 10 años diciéndole a su papá, “Respeta mi espacio.” Y los padres muchas veces se dejan intimidar de eso.

Yo creo que lo que Dios quiere es una sana compenetración que los adultos que han tenido experiencia han sido tratados por la vida, vayan enseñando. Y esto fue lo que más me cautivó de este pasaje y sobre eso quiero detenerme. Quizás no tenga tanto tiempo para desempacar todo lo que estoy diciéndoles aquí, pero dice que “enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos, a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus maridos.”

Yo sé que si yo hubiera estado hablando de mi propia carne ahora me estarían tirando guineos, tomates, lechugas aquí, porque esto es tan contrario a la cultura en la cual vivimos. Muchas mujeres que yo, cuidar mi casa, que respetar a mi marido, a sujetarme a él, olvídese. Le can encima cualquiera que se atreva. Por eso que lo que yo creo que dice aquí, que enseñe la sana doctrina, en otras palabras la iglesia tiene que enseñar lo que es para la sanidad de las culturas y de las naciones. Cuando eso se pierde, cuando nos pastores nos dejamos intimidar y no predicamos estas cosas porque tenemos miedo de lo que la gente vaya a pensar, hemos perdido el consejo sano de la palabra. Estamos robándole a nuestras congregaciones.

Yo creo que hay un perfil de un hombre y una mujer, ya estoy hablando de la juventud y del carácter, del comportamiento de un hombre y una mujer cristiana que no tiene nada que ver con el siglo XXI o el siglo XX o el siglo XXV o lo que sea, esto es algo milenial y eterno.

Pablo le dice, a las mujeres mayores enséñele a las mujeres más jóvenes de la congregación, discipúlenlas, mentoréenlas en que amen a sus maridos y a sus hijos. Como digo, no tengo tanto tiempo para entrar en cada una de estas cosas, pero déjenme decirles algo, yo creo que una de las cosas que se ha perdido en este tiempo con la fluctuación de la cultura y los cambios de los roles y las libertades que la cultura moderna se toma para la formación de la gente, ya inclusive en muchas iglesias este tipo de cosas no se puede predicar porque en una forma muy sutil lo que dice la palabra del Señor ha sido sustituido por otro tipo de entendimiento al cual se ha llegado poco a poco en una manera muy silenciosa y todo el mundo ha entrado en un acuerdo. Estas cosas no las vamos a predicar y si las predicamos, las predicamos de paso y corriendo y yendo al otro versículo donde hay terreno seguro. Y se dejan de predicar cosas que son tan importantes.

Hermanos, en este tiempo en que la sexualidad humana está en tanto flujo y en tanto cambio como nunca en la historia, las familias cristianas tienen que poner un gran énfasis en instruir a sus hijos en lo que es un comportamiento de un hombre y de una mujer. Ahora no voy a hablar tanto acerca del carácter mismo, pero más bien lo que es ser una buena esposa, lo que es ser un buen esposo, lo que es ser un hombre varonil y lo que es ser una mujer femenina porque esto es bien importante.

Yo sé que estoy metiéndome en aguas muy profundas. Ayer yo estaba en una tienda y mientras estaba caminando por los anaqueles de la tienda vi una mujer como de unos 40, 35 años, norteamericana. Se veía, yo estoy seguro que era bastante bien educada, con una niñita que tenía como unos 10, 11 años y cuando yo la vi me impactó y Meche dice que yo soy muy pendenciero, porque siempre estoy mirando el drama humano. Entonces, me impactó que cuando la vi, la niña estaba vestida con unos pantalones atléticos, una gorrita deportiva y un tee shirt deportivo y yo miré porque parecía hembrita pero francamente no estaba seguro. La vi de espalda y podría haber sido una niñita o un niñito. Y observé a la madre también… de paso, yo puede que me esté haciendo un mundo de imaginaciones aquí pero creo que soy bastante buen observador que Dios me da cierto grado de discernimiento y me siento bastante seguro en decir lo que estoy diciendo y sino de todas maneras ella ni siquiera sabe que estamos hablando de ella.

El caso fue que yo la observé cuidadosamente y entonces la vi de lado y era una niñita, una jovencita porque ya tenía su anatomía, estaba desarrollándose hasta cierto punto. Pero lo que me cautivó es que aparte de eso su comportamiento era muy difícil detectar si era un varón o una hembra. Y yo creo que ya estaba reflejando algunas características… era como andrógina más bien, podría ser varón, podría ser hembra y la mamá estaba de lo más tranquila. Y yo me preguntaba, ¿Cómo se sentirá esta madre? Yo sospecho que ella estaba…

Estamos en una etapa que hoy en día los niños inclusive, yo supe hace poco que se les está enseñando… Me decía Juan Carlos en Colombia y aquí en Estados Unidos hay partes, donde se les está enseñando a los niños, no decidas lo que tu eres todavía, porque tu no eres ni varón, ni hembra, eso es algo que se va decidiendo poco a poco y que la cultura te enseña. Se está hablando mucho acerca de eso y cada día más y más en esta cultura aquí en Estados Unidos yo veo más y más personas que usted las mira y usted no sabe si son hombres o mujeres. Estoy en lo correcto o no? ¿Cuántos de ustedes han tenido esa experiencia?

Y usted observa a veces y usted no sabe si es un hombre o si es una mujer. Meche y yo estábamos de viaje y otra niñita, tenía como 12, 13, 14 años pero de nuevo yo la estudié y la examiné cuidadosamente pero yo no sabía, no podía decir en ciertos momento, o era una niña y era mujercita, Meche me asegura que era mujer, o era una jovencita con serias fluctuaciones en términos de su identidad femenina o un varón, eso fue lo que yo pensé, con serias dificultades con respecto a su masculinidad.

Pero hoy en día más y más en el mundo en que vivimos la sexualidad humana está bajo un cuestionamiento como nunca antes en toda la historia. Y nosotros – lo que yo quiero decir es lo siguiente – como iglesia de Jesucristo, como padres, madres, ustedes madres y padres jóvenes y los que van a tener hijos en el futuro, no tenga temor de enseñar a sus hijos o a sus hijas a ser varoniles o femeninos. Yo sí creo que hay una forma de ser hombre y de ser mujer. Me perdonan pero eso hay que enseñarlo continuamente. Y desde que nuestros hijos nacen tenemos que enseñarles.

Porque hay una virilidad biológica que es anatómica y que es química, hormonal, pero encima de eso hay también lo que es virilidad, lo que es ese carácter masculino, lo que es esa actitud femenina, y yo creo que eso es importante para la salud del ser humano. Esto de que los varoncitos estén jugando con muñecas, yo hasta cierto punto bueno, pero yo creo que los varoncitos deben jugar todavía con action heroes y hay que enseñarles a hacer cosas, porque estamos en un tiempo peligroso. Hoy en día uno como que tiene que inclinar la cosa en la dirección contraria porque es tanta la fuerza en la otra dirección que en nuestros hogares, nosotros tenemos que enseñarle a nuestros hijos lo que es ser un hombre, lo que es ser una mujer, a nuestras hijas, hermanas, yo creo que nuestras hijas hay que enseñarles cómo atender una casa.

Yo creo que en todo lo posible uno debe ejercer…. Yo sé que eso es diferente, cada uno es diferente. Abigaíl desde chiquita sabía que quería tener hijos y quería aprender a cocinar y todo eso. a Sonia le tomó más tiempo, ya está entrando en esa etapa ahora. Sonia ha sido como más de orientación intelectual, profesional, pero también ya está aprendiendo a atender una casa mientras mira hacia casarse dentro de poco. Y yo creo que es importante en todo lo posible que las madres discipulen a sus hijas en que vayan mirando hacia el futuro cuando esas hijas van a tener un hogar.

Yo creo que hoy en día en este mundo moderno en que vivimos, los jóvenes entran en que 50 y 50, tu sacas la basura hoy, yo la saco mañana. Tu lavas los platos hoy, yo los lavo mañana. Y y o creo que tiene que haber evidentemente una mutualidad. Aquí está Meche que no me deja mentir. ¿Meche, yo lavo platos en la casa? Claro que sí. Si tengo que lavar, si tengo que trapear, yo creo en todo eso. Me curo en salud para que usted entienda lo que estoy diciendo, hermanas.

Esta idea de que las mujeres son las que hacen todo en la casa y el hombre llega y se sienta a ver la televisión mientras la mujer llega del trabajo y también se pone a cocinar y a lavar los platos y a hacerlo todo, se acuesta a las 2 de la mañana mientras él está roncando desde las 9 de la noche, yo no creo en eso. pero sí yo creo que hay algo muy especial que a las jovencitas nosotros tenemos que irles enseñando, porque yo veo hoy en día estos jóvenes que uno no ve en ellos a los 13, 14, 17 años, la capacidad de enamorar a una mujer. ¿Cómo se enamora a una joven? ¿Cómo se le habla, cómo se trata a una mujer? Cuando tengan que entrar en un hogar a criar hijos, a educarlos, ¿dónde van a aprender estas cosas si no hay una mentoría, si los padres no enseñamos a nuestros hijos a ser varoniles?

Yo creo que en lo que es una relación entre un hombre y una mujer, el varón tiene cierta agresividad natural que es necesaria, siempre y cuando esté controlada. Yo creo que parte del problema del homosexual es que no ha aprendido a ponerse en contacto con esa parte agresiva, varonil con respecto a la mujer. Y si logra muchas veces encontrar esa voz, es mucho más fácil bregar con esa situación.

Pero yo sí creo que uno debe en todo lo posible a nuestros hijos, la iglesia de Jesucristo tiene que educar a nuestros jóvenes a ser amas de casa, a lo que es cuidar de un hogar, lo que es respetar a un esposo, sujetarse al liderazgo de un esposo, mientras que también el varón debe ser educado a proteger a su esposa, a su familia, a no ser opresivo, a no ser controlador, dañino, a no ser violento con sus seres queridos, todo lo contrario, ser una figura de Cristo en el hogar, pero sí también de saber que hay un liderazgo.

Yo creo en el liderazgo del hombre y creo que hay algo bello cuando la mujer respeta a su marido y también cuando el hombre no abusa de ese derecho y sirve a su mujer como Cristo dice sirvió a la iglesia. Entonces esa es una danza maravillosa donde la mujer respeta a su marido y el marido se desborda amando a su mujer. Eso es precioso.

Y yo creo que eso se debe predicar, hermanos, si la iglesia de Jesucristo se queda callada acerca de esas cosas porque no es políticamente correcto, porque es contrario a la cultura, estamos robándole a nuestro pueblo la necesidad de escuchar estas cosas. Eso es lo que se llaman sana doctrina, hermanos, y eso es lo que esta sociedad necesita en este tiempo y que nosotros los padres en las iglesias que estemos educando a nuestros hijos, estemos disciplinándolos, discipulándolos, enseñándoles.

Mujeres de Dios, saquen tiempo para educar. Madres, eduquen a sus hijas a ser femeninas, prepárenlas para el matrimonio, porque muchas veces esas parejas que son 50 por ciento, 50 por ciento, van a tener serios problemas y es lo que estamos teniendo hoy en día con el matrimonio y con tantas cosas. Yo creo que debe ser simplemente donde cada uno se desvive el uno por el otro.

Eso es algo que si más nada enseño, hermanos, es este perfil que yo veo aquí. A las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos, a ser prudentes, de nuevo esa palabra de prudencia, castas, puras, mujeres que se comporten bien, que se vistan como mujeres casadas, que se comporten en una forma recogida y sobria, que sean cuidadosas de su casa, que atiendan que su casa no esté manga por hombro, con los pantalones tirados en el piso. Arreglen su casa, cuiden su casa, que sean buenas, que sean mansas, que sean sencillas, sujetas a sus maridos para que la palabra de Dios no sea blasfemada.

En otras palabras, porque muchas veces como Cristo nos hizo libres somos iguales, pues entonces eso muchas veces trae desprestigio y muchos hombres que podrían ser atraídos al Evangelio entonces se escandalizan por ese comportamiento de esa mujer que ahora está encontrando su libertad y su igualdad en Cristo y entonces se escandalizan ellos y no vienen a la iglesia. Yo he visto muchas veces maridos que no vienen a la iglesia no porque sean difíciles, sino porque su esposa no les da ejemplo.

Hay otros que son obstinados simplemente y aunque la mujer se les tirara en el piso seguirían siendo obstinados. Pero muchas veces la mujer tiene que ser sabia. Hermana, usted reciba esto hasta donde usted pueda y aplíqueselo como usted pueda. Yo creo que lee la palabra del Señor y eso tiene su aplicabilidad.

Exhorta asimismo a los jóvenes a que sean prudentes, aquí hay para todo el mundo, a los jóvenes que sean prudentes. Ancianos, ancianas, las mujeres casadas jóvenes, y a los jóvenes. Yo creo que también es importante eso, hay algo bello cuando hay una juventud que se comporta en una manera respetuosa. Yo le doy gracias al Señor, los jóvenes adultos es algo que yo veo algo muy lindo en estos jóvenes adultos, este ministerio de jóvenes adultos y es que Dios está levantando ese grupo de una manera muy linda y si hay alguno de ellos aquí quiero animarlos. Veo una características que yo creo que son características muy sólidas, muy bíblicas en el sentido de gente que quiere ayudar a su iglesia.

Hace poco oí que ellos dicen, mira, nosotros estamos gastando cuando venimos aire acondicionado cuando nos reunimos y otras cosas. Vamos a comenzar a ofrendar para ayudar a nuestra iglesia en sus gastos también. Hay cierta obediencia, cierta sujeción, cierta capacidad para ser enseñados, cierta mansedumbre, que yo veo ciertas cualidades que Dios está bendiciendo y yo espero que se mantenga así en esa manera, porque es algo lindo cuando hay una juventud que se deja enseñar, que respeta a sus adultos, que ama a sus adultos, que expresa ese deseo de tener contacto, de tener intimidad, de tener compañerismo. Eso es bien importante.

Esa es la manera en que la familia cristiana va a prosperar. Es una familia inter generacional, los ancianos ya experimentados y tratados por el Espíritu Santo tienen ciertas cualidades, instruyen a los que van a pasar por diferentes estaciones en la vida, los mentorean, los discipulan. Esas personas más jóvenes se dejan enseñar, se dejan instruir, respetan, aman. Esa es la gloria de Dios en la tierra. Hay bendición. El espíritu de Dios se mueve entonces en una manera muy bella.

Y a los pastores nos dice, presentándote tu en todo como ejemplo de buenas obras. Es cierto, nosotros tenemos que dar ejemplo, tenemos que comportarnos. Predicar la moralidad en calzoncillos, ¿cómo puede uno predicar? No es que seamos perfectos pero sí tenemos que ser ejemplo y tenemos que comportarnos en una manera que respalde lo que nosotros estamos predicando.

En la enseñanza mostrando integridad y seriedad, palabra sana e irreprochable de modo que el diablo se avergüence y no tenga nada malo que decir de vosotros. Y eso es lo que yo he querido hacer en esta mañana, hermanos, dar una enseñanza como dice la palabra, que sea sana, que sea como una pomada que uno pone en una herida que está resentida y que aquiete el ardor y que traiga paz al corazón y que sane al pueblo de Dios, porque el pueblo de Dios necesita esa sanidad. Mostar integridad en lo que uno predica. Es decir, no es lo que a la gente le guste oír sino que es predicar lo que el Señor dicta.

Esta mañana antes de yo subirme aquí yo le he pedido, Señor, ayúdame a predicar tu palabra, lo que tu quieres que yo predique, no lo que la gente quiera oír, no lo que yo quiera que la gente oiga para que digan, oh, qué bueno es el pastor, sino palabra que venga del Espíritu Santo para el pueblo de Dios.

Aprendamos a apreciar y a agradecer cuando nos predican la palabra del Señor, aunque no nos guste, aunque nos inquiete un poco pero para eso venimos a la casa del Señor, para ser inquietados. Quiera Dios crear en nosotros ese carácter de un pueblo tratado por el Espíritu Santo. Amén.

Vamos a pedirle al Señor que como iglesia podamos ser ese pueblo del cual Dios se agrade, que podamos tener familias saludables y educar a nuestros hijos en el temor del Señor. Padre, abrimos nuestros corazones a tu palabra, abrimos nuestras almas, Señor, a tu enseñanza, comienza con nosotros, Padre, presentamos a nuestros hijos, las generaciones que están por delante, que nuestra iglesia sea un lugar hospitalario para una espiritualidad sana y que este púlpito siempre pueda ser un lugar donde se predique una palabra de integridad, una palabra que esté respaldada por una vida y que nuestros hombres y mujeres, nuestra juventud, nuestros matrimonios, puedan reflejar esa salud y esa sanidad que conviene a la casa de Dios.

Entregamos esta palabra a ti y te pedimos que nos ayudes a vivirla, Señor, cada día para gloria de tu nombre, en el en el nombre de Jesús. Amén y amén.

Vivir una vida esperando al amo

TRANSCRIPT

Yo les animo a abrir sus Biblias a Primera de Pedro, capítulo 1, casi al final del Nuevo Testamento, versículo 13. Eso yo sentí del Señor como asignado a predicar de eso. No es parte de una serie que estoy haciendo pero sentí al Señor guiarme a través de varias circunstancias a hablar de este texto que vamos a reflexionar juntos. Comenzando en versículo 13, la palabra de Dios dice:

“… Por tanto ceñid los lomos de vuestro entendimiento, – vamos a tomar tiempo de hablar de eso – sed sobrios y esperad por completo la gracia que os traerá cuando Jesucristo sea manifestado. Como hijos obedientes no os conforméis a los deseos que antes teníais cuando en vuestra ignorancia, sino como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir. Porque escrito está sed santos, porque yo soy santo. Y si invocáis por padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación, sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres no con cosas corruptibles como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación ya destinado desde antes de la fundación del mundo pero manifestado en los postreros tiempos por amor de vosotros.”

Vamos a orar. Padre, en el en el nombre de Jesús gracias que tu nos llamas, Señor, a ser alertas, a estar despiertos en ti. Señor, que hay un mensaje que tu, el buen pastor, tienes para nosotros en este día. Yo te pido que fluya una revelación a mí y a tu pueblo, Señor, que escuchemos lo que tu quieres decirnos porque te estamos escuchando, en el en el nombre de Jesús, amén y amén.

Este texto yo creo trata del enfoque que Dios quiere que nosotros tengamos como cristianos. Yo creo que hoy en día es más difícil que nunca seguir enfocados en las cosas de Dios porque el enemigo está tirando con todo en estos días. Solo tienes que ver las noticias. Yo ahora casi no dejo a mis hijos ver las noticias porque cada semana hay algo terrible, algo que hubiera sido impensable en un tiempo atrás. Y ahora es algo de todas las semanas, violencia sin freno, inmoralidad que está llegando a ser aceptada como algo normal, común y corriente, obligado por ley muchas veces, hermanos. Estamos viviendo en los últimos días y es tiempo para cristianos estar despiertos y estar enfocados en las cosas de Dios.

Porque como la palabra dice, por el aumento del pecado se enfriará el amor de muchos. Hay presión sobre la iglesia a ponernos dormiditos, a enfriarnos y Dios no quiere que esto pase con nosotros, pero va a requerir un esfuerzo porque hay un fluir en esta generación, en la otra dirección y Dios quiere que nosotros nos pongamos firmes y de esto se trata este texto.

Comienza con una frase que yo quiero enfatizar en este tiempo, en versículo 13 dice, “por tanto ceñid los lomos de vuestro entendimiento.” ¿Cuántos aquí entienden qué significa ceñir los lomos de la cabeza? Eso es algo raro. Es lindo porque en la traducción que nosotros usamos en español es muy precisa, usa español antiguo pero sigue el lenguaje original muy preciso, y en el original esto es lo que dice, y la mayoría de las traducciones lo cambian un poquito para que sea más comprensible, “ceñid los lomos” significa que tu te amarras el cinturón pero has esto con la cabeza, buckle the belt of your brain. ¿Qué significa eso? en los días antiguos la gente no andaba con pantalón, andaba con vestimenta larga, como una túnica. Si alguien trata de caminar en esto tal vez te caes sobre la cara.

¿Cuántas novias tratando de subir la escalera? Es un poquito complicadito porque es mucha tela. Así que lo que hacían en esa época era tomar toda esa tela, jalarla para arriba y después ponerse algo, ceñir los lomos para sacar el cinturón para que los pies estén libres para moverse. O sea, que te pongas listo para la acción, listo para servicio, listo para hacer lo que tienes que hacer. En inglés sería, you roll up your sleeve to get to work. Q estés alerta, listo, cuidados, fiel, desvelado, atento, listo, presto, preparado, dispuesto, precavido – no sé qué significan la mitad de estas palabras pero las uso – cauteloso, circunspecto, prestar atención, ponerse las pilas porque camarón que se duerme se lo lleva la corriente.

Como me enseñó la hermana Leonora anoche, póngase el delantal porque vamos a cocinar. Allá vamos. En inglés hay una frase que diría un coach, put your game face on, la cara de concentración. ¿Algunos han visto eso? ¿Cuántos jugadores tenemos? Déjenme ver algunos game faces. Ahí veo. Vamos a enseñar algunos, tengo unas fotos de game faces, caras de concentración.

El Señor, esto es lo que Pedro está diciendo, póngase esa cara para jugar futbol. Keep your eye on the ball, como dice. Ahí lo mejor, la cara de concentración. Oremos para que sea liberado de su persecución injusta. [Está mostrando fotos]

El Señor nos llama como creyente a ser como él. Amárrate los lomos de la cabeza, del entendimiento para que esté despierto, enfocado, alerta porque los días son malos y tenemos que estar enfocados y despiertos.

Yo creo que Pedro al decir eso a la gente estaba haciendo referencia a una conversación que había tenido con Cristo cuando Jesús había enseñado… y vamos a leer eso en Lucas, capítulo 12. Yo creo que Pedro está sacando esta exhortación de la enseñanza de Jesús en Lucas 12:35. Póngase esa cara de concentración porque los días son cortos y es tiempo de estar enfocado en las cosas de Dios.

“…Estén ceñidos vuestros lomos – es de ahí que Pedro lo sacó. Jesús lo dijo primero – estén ceñidos vuestros lomos y vuestras lámparas encendidas y vosotros sed semejantes a hombres que aguardan a que su Señor regrese de las bodas.”

Así que tu eres como un siervo a cargo de la casa, tienes que cuidar la casa. Tu amo, el jefe, se va a una boda, no sabemos la hora de regreso y el siervo tiene que mantenerse despierto, con los lomos ceñidos, listo para trabajar, para cuando toque la puerta dice, aló, aquí estoy. Que no esté dormido ahí en el sofá con una cerveza y unos chips y la televisión prendida. Disculpe. Y caer del sofá, ¿Qué haces aquí a esta hora? No, no, listo, listo para el amo. Y mira lo que Jesús dice en versículo 36:

“… y vosotros sed semejantes a hombres que aguardan a que su señor regrese de las bodas para que cuando llegue y llame le abran enseguida. Bienaventurados aquellos siervos a los cuales su señor cuando venga halle velando. De cierto os digo que se ceñirá y hará que se sienten a la mesa y vendrá a servirles.

Quiero tomar un momento con eso. Jesús dice que cuando el jefe llega si él encuentra a su siervo despierto y atento el jefe se va a ceñir los lomos y servir a él para dar un break a su siervo. Imagínate. Eso casi parece algo blasfemo que Dios, el jefe, Cristo, se sirve a su pueblo cuando llegue. Es una maravilla.

Dice además, “ y aunque venga la segunda vigilia, y aunque venga la tercera vigilia, si los hallare así, bienaventurados son aquellos siervos. Pero sabed esto, que si supiese el padre de familia a qué hora el ladrón había de venir, velaría ciertamente y no dejaría minar su casa. – Entiendo que el pastor Samuel hablaba de eso una semana atrás. – Vosotros pues también estad preparados porque a la hora que no penséis el Hijo del Hombre vendrá.”

Póngase las pilas. Pon la cara de listo, la cara de concentración. Versículo 41, ahora Pedro se lanza con sus preguntas, siempre hablando cuando no se debe.

“Entonces, Pedro le dijo, Señor, ¿dices estas parábola a nosotros o también a todos? Y dijo el Señor, ¿Quién es el mayordomo fiel y prudente líder, alguien con responsabilidad, quién es el mayordomo fiel y prudente al cual el Señor pondrá sobre su casa para que a tiempo les de su ración? Bienaventurado aquel siervo al cual cuando su Señor venga le halle haciendo así. En verdad os digo que le pondrá sobre todos sus bienes, más si aquel siervo dijere en su corazón, mi Señor tarda en venir y comenzare a golpear a los criados, a las criadas y a comer y bebe y a embriagarse, vendrá el Señor de aquel siervo el día que éste no espera y a la hora que no sabe y le castigará duramente y le pondrá con los infieles.”

Preparémonos… Pedro, yo creo después de hacer esta pregunta le quedó bien gravado, okay, me voy a amarrar el cinturón. Esto es para mí también. Él recibió esta palabra. Tenemos que estar listos. Pedro sabe lo que es ponerse dormido cuando no se debe. ¿Se acuerda de la historia? En el huerto de Getsemaní, Jesús le pide un favor a Pedro, dice, “Por favor acompáñame un poquito, yo necesito mis amigos.” Jesús orando, Padre, si es posible que pase de mí esta copa, ¿te acuerdas? Sangrando, con dolor en su alma, y vuelve y encuentra a Pedro durmiendo, roncando en el sofá.

Pedro, no pudiste aún estar despierto conmigo una sola hora. Yo me imagino que Pedro nunca va a olvidar ese rostro despierto y dice, sí, sí, estoy contigo, déjame cortar la oreja y no sé qué. Después termina negándolo, un loco como nosotros, gracias a Dios. Él sabe lo que es ponerse dormido cuando no se debe y está hablando con el pueblo. No te duermas ahora. Dios necesita su gente, su iglesia. Despierta. Velad y orad para que no caigas en tentación, porque las tentaciones son fuertes, hermanos, y están cayendo muchas iglesias enteras, aceptando pecado como si fuera normal.

No es tiempo para la iglesia estar dormida. Tenemos que estar más atentos que nunca, más cuidadosos que nunca. Tenemos que ponernos esa cara y orar enfocadamente. ¿Cómo lo vamos a hacer? Pedro nos da consejos y es de esto que yo quisiera hablarles más hoy. Dice en versículo 13, “sed sobrios,” así que yo creo que esto habla de alcohol y drogas literal, no embriagarse. Cuando estás embriagado no estás enfocado, es el opuesto de enfocado. Pero creo que hay otras cosas que nos pueden intoxicar, distraer en la vida. Las ansiedades de la vida te pueden embriagar, los placeres de la vida. No hay nada malo de disfrutar una buena comida, un buen show, tiempo con tu familia, pero no embriagarse del entretenimiento para estar dull y no atento a las cosas del espíritu.

Sed sobrios, sed atentos y esperar por completo en la gracia que se os traerá cuando Jesucristo sea manifestado. Espera completamente enfocadamente en qué va a pasar cuando Jesús venga. Ahora, yo creo que normalmente no es bueno vivir en el futuro y debemos vivir en el momento y concentrarnos en lo que estamos haciendo pero para cristianos si nosotros enfocamos en aquel día cuando venga nuestro jefe, nuestro Señor, y si nos enfocamos en esto nos va a dar poder para vivir este día a la luz de aquel día, nos va a dar otra perspectiva, otro poder, porque estoy pensando en ese día, yo vivo hoy para que esté listo para aquel día.

Pienso en eso, mi muchacho hace karate. Es feroz, es un tigre, me ataca, es terrible. Y ellos a veces rompen tablas y lo que tiene que hacer es mirar… si tu pegas a la tabla te rompes la mano, tu tienes que pegar en un punto detrás de la tabla. Tu tienes que mirar qué viene después de la tabla y pegar en ese punto y tu te pegas a través de la tabla. You punch through the board because you are looking at a point beyond it. Así es con los cristianos.

Hay un video que una amiga me enseñó de YouTube que yo no soy tan fanático de YouTube pero ese video fue de Dios para yo verlo hoy. Yo quiero que lo vean porque da el ejemplo de cómo nosotros tenemos que fijarnos en un punto más allá para poder luchar en el momento. Está en inglés, me perdonan por eso, pero todos ustedes son más gringos que yo. Lo van a leer y van a entender lo que es.

Video.

Isn’t that great? Gracias Señor, tenemos que poner los ojos fijos en ese punto después porque nos va a doler a veces luchar las luchas que tenemos que luchar, va a haber obstáculos. El Apóstol Pedro escribía a personas bajo persecución fuerte por ser creyentes y ellos tenían que enfrentarse con el dolor, con el temor y ver que hay algo más allá, y vale la pena luchar porque hay un punto en el otro lado de esa tabla y voy a empujar a través del dolor, empujar a través de la prueba, porque al otro lado yo gano.

Pero qué importa para nosotros? Lo importante para nosotros es tener ese punto fijo, no se ve, es al otro lado de la lucha, el otro lado de la prueba, no se ve la meta claramente, lo tenemos que imaginar pero ahí dirigirnos a ese momento. Y ese es el momento que el Apóstol Pedro nos enseña a través del Espíritu Santo, dice “esperad por completo la gracia que se os traerá cuando Jesucristo sea manifestado.”

Tenemos que poner la mente fija en la venida de Cristo. Tenemos que pensar que nuestro Dios vuelve y vuelve pronto. Y tenemos que visualizar ese momento. Nos ayuda el lenguaje, yo creo, que se usa en este texto, no dice la gracia que os traerá cuando Jesucristo viene, aunque sabemos que Jesucristo viene. Dice, cuando Jesús sea manifestado, porque Jesús está invisible para nosotros ahora, físicamente. Mis hijos me preguntan dónde está Jesús. Y decimos, bueno, en tu corazón. No vemos a Jesús ahora mismo porque él no está aquí en persona físicamente. Físicamente él entró a los cielos y está sentado a la diestra del Padre reinando y desde los cielos envió al Espíritu Santo que entra en nosotros y ese espíritu entra en nosotros y así decimos, Jesús está en mi corazón. Porque Jesús desde allá está en mí a través de su Espíritu Santo, gracias a Dios.

Yo no podría haber inventado eso. Está en la Biblia y es verdad porque lo hemos vivido. Pero Jesús no se ve ahora mismo, está en cierto sentido escondido. Lo esperamos que él venga en persona y un día la Biblia dice que todo ojo lo verá pero todavía no, está al otro lado y nosotros tenemos que saber que un día él va a ser manifestado del otro lado. Como si hubiera que abrir una cortina grande y desde los cielos él va a aparecer y lo vamos a ver.

Dice en Segunda Tesalonicenses 1:6 “vendrá un tiempo cuando se manifieste el Señor Jesús desde el cielo con los ángeles de su poder en llama de fuego.” Desde los cielos Jesús va a aparecer, va a ser manifestado. ¿Dónde están los cielos? Una pregunta filosófica. Cuando decimos Jesús está en los cielos. Mis hijos me preguntan a veces en el pasado, ¿está en la luna¿ ¿está en Júpiter? Si tomamos una nave espacial vamos y encontramos, ahí los cielos. No sabemos que los cielos no es un lugar geográfico, es un ambiente, un estado espiritual, es una dimensión de realidad invisible.

Como dice en el libro de Efesios hay heavenly realms, lugares celestiales. Hay un ambiente, un universo paralelo a este universo. ¿Cuántos han visto demasiadas películas de ciencia ficción? Universo paralelo, invisible que se llama lugares celestiales. Eso no debe ser difícil para nosotros. Andamos siempre pendiente a ondas invisibles que pasan por el aire y entrar a cositas que cargamos, que controlan nuestras vidas. Y todo es invisible pero sabemos cuando estamos conectados.

Hay un ambiente invisible, espiritual, habitado por primero que todo, el Rey de Reyes y Señor de Señores, sentado en su trono, al lado del Padre, reinando. Seres celestiales, ángeles que ni podemos imaginar, se los describe en la Biblia como criaturas increíbles, demonios habitan ese ambiente.

Nosotros como cristianos habitamos este ambiente pero también estamos sentados en lugares celestiales con autoridad en el ambiente espiritual. Nos movemos en ambos mundos como agentes del reino de Dios porque los dos mundos se conectan, pero un día Jesús que está al otro lado, que envió su Espíritu Santo a esta dimensión para conectarnos con aquel ambiente espiritual va a ser manifestado y va a entra aquí como si hubiera una cortina grande y que es unzipped y ahí Jesús revelado a nosotros.

La venida de Jesús no es él llegando desde la luna, es él ya está aquí reinando pero será revelado que él ya está y vamos a verlo. Y ¿cómo va a ser? Nosotros no sabemos precisamente cómo va a ser la venida del Señor pero hay algunos detalles en la Biblia que nos hablan de eso. Cuando Jesús fue llevado él habló con los Apóstoles después de ser resucitado. Él les habla y dice que todavía el Reino de Dios viene a través de ustedes, tienen que predicar en Jerusalén, Judea, Samaria, fines de la tierra y yo estaré con ustedes siempre, voy a enviar la promesa del Padre, el Espíritu Santo y después él comienza a levitar y sube y la Biblia dice que una nube lo escondió. Dice que habiendo dicho esas cosas viendo ellos fue alzado y lo recibió una nube que lo ocultó de sus ojos.

Y después los Apóstoles mirando, guau, una nube, Jesús escondido en la nube y después unos ángeles al lado. Yo creo esto literalmente, yo creo que pasó. Ángeles que dicen, ¿qué están mirando? Como él se fue, él vuelve un día. Y Jesús lo dijo. Le preguntan, ¿de verdad tu eres el Cristo, el Hijo de Dios? Él dice, bueno, tu lo has dicho, yo soy y verás al Hijo del hombre sentado a la diestra del poder de Dios y viniendo en las nubes del cielo.

Me he encontrado pensando mucho en las nubes en estos días. Tal vez no sé por qué pero estoy fascinado con esta idea de Jesús viniendo en las nubes. Él hizo referencia a una profecía en Daniel, capítulo 7, se los recomiendo, que Dios profetizó eso, que el mundo espiritual se conecta con el mundo terrenal, parece que por alguna razón se forman nubes sobrenaturales.

En el Antiguo Testamento qué pasó cuando Moisés subió al monte Sinaí, ¿qué pasó a él arriba? Una nube cubrió la montaña y relámpagos y truenos… Jesús dice que también sabemos cuando en el tabernáculo había una columna de nubes y fuego en la noche, como si fuera un portal entre los cielos y la tierra, un lugar de conexión entre las dos cosas.

Jesús dice que así va a ser cuando yo vuelva. Él hizo la profecía muy clara en esa predicción, cuando él dice, inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, la luna no dará su resplandor, las estrellas caerán del cielo y las potencias de los cielos serán conmovidas, entonces aparecerá la señal del Hijo del hombre en el cielo y todas las tribus de la tierra harán lamentación cuando vean al Hijo del hombre venir sobre las nubes del cielo con poder y gran gloria.

Jesús va a llegar. Yo tengo una teoría, es mi opinión personal, no está en la Biblia, no lo tienes que creer, solo lo voy a compartir y no les cobro extra, como dice el pastor, esto es gratis. Tu sabes cuando hay una nevera o algo frío en un día de mucho calor y humedad, se abre la puerta de la nevera y tu ves el aire frío, hay una condensación en el aire o al revés, en el frío estás respirando y tu ves el aire como si fuera humo. Me hago la pregunta si sería que el aire celestial cuando se interactúa con el aire terrenal hay alguna reacción química y nubes sobrenaturales se producen. Así lo pienso, porque yo creo que debemos tomar tiempo y perder tiempo usando nuestra imaginación de cómo serán los cielos y cómo será la venida del Señor, porque así nosotros quebrantamos la mente en eso, pensando cómo será y estoy fijo en ese momento pensándolo. Nubes. Jesús va a llegar.

Pedro él vio esto en vida. Jesús un día invitó a Pedro y dos otros amigos que subir al monte de transfiguración y allí el rostro de Jesús cambió, a brillar como el sol, su túnica blanca más blanqueada de lo que se puede hacer en este mundo, como un relámpago, y había una nube de gloria que los envolvió y una voz que dijo, “Este es mi Hijo amado, escúchalo a él, obedécelo a él.” Pedro había visto la nube. Él había visto un poquito del otro lado. Él dice, yo quiero que te fijes en ese momento de la revelación de Jesucristo, de la aparición de él, la manifestación de él y que tu empujes a través del dolor de esta vida para llegar ahí, porque cuando venga Jesús él va a traer con él gracia para ti.

Cuántos aquí son salvos? Cuántos aquí son completamente salvos? Todavía no, hermanos. Tu salvación es real. La Biblia dice que ahora somos hijos de Dios, no hay nadie ni nada que me puede quitar eso, somos hijos de Dios. Pero la Biblia dice, pero lo que seré todavía no se ha visto. No he llegado a la meta porque cuando Jesús venga mi salvación será completa.

Dice, y esto es la gracia que viene de ahí, que cuando hay esa nube, Jesús en la nube, yo voy a ser entrado en la nube con él y la nube me va a envolver y seré transformado. Como dice, yo creo que el pastor Sam hablaba de eso, porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, con trompeta de Dios descenderá del cielo y entonces los muertos en Cristo resucitarán primero. No se preocupe si está muerto ya, porque no estás muerto, estás durmiendo y hay una alarma que va a sonar y no te preocupes, you’re not going to sleep through that alarm, you will wake up when you have to, porque la muerte para el cristiano es un sueño hasta ese momento.

Y luego nosotros, los que vivimos porque algunos vamos a estar vivos cuando todo esto suceda. Los que vivimos, los que hayamos quedado seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire y así estaremos siempre con el Señor. Y hoy aquí os digo un misterio, no todos moriremos pero todos seremos transformados en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta porque se tocará la trompeta, los muertos serán resucitados, incorruptibles y nosotros seremos transformados.

Hermanos, tu eres una hija de Dios, un hijo de Dios pero aún no se ha manifestado lo que hemos de ser, pero sabemos que cuando él se manifieste seremos semejantes a él porque lo veremos tal como es. Jesús será manifestado pero tu y yo también seremos manifestados. Porque tu te ves como un tipo normal ahora, más o menos, una persona más o menos normal, común y corriente, pero no eres. Porque se ha puesto en ti la semilla sobrenatural del Evangelio y hay algo eterno que vive en ti que está brotando, cambiando tu vida. Esta vida es una semilla que no se puede apagar y un día cuando se encuentra con ese aire fértil de las nubes sobrenaturales, cuando se abra la división entre aquel mundo y este mundo, entramos ahí y se va a quitar la máscara y lo que somos de verdad será manifestado. Y esa semilla será brotada en vida.

Tu no eres un tipo normal, eres Superman, eres Wonder Woman en Cristo, un ser glorioso, un ser que va brillar, vamos a ver cara a cara, vamos a brillar, la gloria de Jehová se nos va a pegar y nos va a transformar y vamos a ser como Jesús después de ser levantado. No vas a ser un diosito, porque no, solo hay un Dios, esto es suficiente, pero sí vamos a ser hermanos de Cristo. Él fue la primicia de los que murieron, la primicia de la resurrección pero esto nos espera a todos nosotros.

Esa es la gracia que nos traerá en aquel día. Y por esto cuando estamos tentados, cuando estamos bajo persecución y tenemos que empujar no mires al problema o la tentación, mira a la gloria detrás y decir, yo pertenezco a la gloria y por esto yo puedo sufrir lo que tengo que sufrir ahora porque hay una gloria que me espera después.

Hermanos, esto es el mensaje de fijarnos, dice, tengo por cierto que las reflexiones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse. Y Dios nos llama a ser santos porque él es santo en este texto, de resistir la tentación porque somos hechos para otro mundo.

En el libro de Colosenses el Apóstol Pablo dice que porque tu…. ponga su mente en cosas celestiales, ponga su corazón en las cosas de arriba aunque esté escondida porque tu ya moriste cuando aceptaste a Cristo y tu vida está escondida en Cristo, pero cuando Cristo es manifestado tu también serás manifestado con él en gloria. Por esto pon a morir y mata todo pecado, toda inmoralidad sexual, toda mentira, toda falsedad, todo chisme, toda malicia, todo enojo, porque nosotros somos hechos para otro mundo. Sed santo porque él es santo y tu pertenece a esta santidad de Jehová y ese es tu destino. Tu tienes un destino glorioso. No vivas como vivías cuando andaban en ignorancia. No os conforméis a los patrones de este mundo sino seáis transformados por la renovación de su mente, renovación viendo la gloria que te espera.

Este mensaje, sed santo, porque yo soy santo, viene de un contexto muy especial, viene de un libro que se llama Levítico, que yo prediqué mucho en el culto en inglés, así que Levítico era una época cuando Dios habitaba entre su pueblo en gloria visible. Había un tabernáculo y vamos a poner una pintura de eso, un tabernáculo entre el pueblo de Israel en el desierto y la gloria shekina, y las nubes sobrenaturales habitaban sobre el tabernáculo. Y Dios dijo, si yo voy a vivir en tu vecindario, tu tienes que ser santo porque yo soy santo y sino ese fuego no te transforma, ese fuego te consume, porque eso tienes que ofrendar sacrificios, sangre, por esto tiene que seguir leyes.

Y había muchas leyes, leyes de comidas, leyes de vestimenta, leyes de sacrificio, y yo creo que cada ley, cada regla era para recordarles, yo no soy una persona normal, yo soy para la gloria. Cada vez que decidieron no comer esto y comer aquello porque Dios había puesto la ley, ellos recordaban, yo soy un pueblo especial, yo soy una persona marcada para otro mundo, por esto vivo como un extranjero en este mundo. Nunca vamos a ser aceptados en este mundo. Si la iglesia quiere ser amada por el mundo dejamos de ser iglesia. Así que ellos aprendían, yo tengo que vivir con los ojos sobre la gloria. Cada regla…

Jesús dijo, todas estas reglas ya se cumplen en mí. Jesús es el sacrificio. Él dice que no es lo que entra en tu boca que te contamina sino lo que sale de tu boca. La santidad no es por fuera, la santidad es por dentro. Él dice que ahora yo quiero que vivas una vida santa en tu manera de pensar, en tu manera de hablar, aún en tus sentimientos pero es la misma motivación, porque tu eres hecho para la gloria.

Pon la mirada en ese momento. Yo creo que esta visitación del shekina de Jehová en esa época, esa gloria visible, era una muestra de la gloria que se va a mostrar cuando Jesús venga. Ponga los ojos en eso y diga yo soy hecho para esa gloria. Porque este tabernáculo es demasiado pequeño. Un día todo este mundo va a ser una nueva tierra y un nuevo cielo y los reinos de este mundo serán los reinos de nuestro Dios porque la gloria, el conocimiento de la gloria de Jehová va a cubrir el mundo como las aguas del mar cubren el mar.

Jesús viene. Y esa gloria es lo que me motiva a ser santo, a cambiar mi vida, no porque tengo que hacerlo, aunque sí, el Señor es un juez, él es Padre pero es un juez que no hace excepción de personas, y él viene, pero es porque cuando venga Jesús yo quiero estar listo para recibirlos. Yo quiero decir, ya vamos a esas nubes, yo me meto, porque la sangre de Cristo me ha limpiado y te estoy esperando y en esa nube voy a ser transformado gracias al Señor.

Hermanos, van a llegar momentos de sufrimiento, si queremos vivir una vida entregada y santa. También va a llegar tentaciones que nos van a adormecer si no tenemos cuidado. Dios nos llama a poner la cara de concentración que vimos en esas fotos y ser como este niñito que dio un puño a través del dolor porque él vio un punto detrás de la tabla.

Hermanos, ese es el punto. La manifestación de Jesús que ya está con nosotros pero está escondido en este momento y nosotros también seremos manifiestos con él en gloria. Amén. Decidamos que seamos un pueblo con los lomos de la mente ceñidos, hermanos.

Pongámonos de pie. Vamos a orar. Padre, en el en el nombre de Jesús, Señor como pueblo queremos vivir una vida esperando al amo, esperando a nuestro Señor. Padre, yo te pido en el nombre de Jesús que León de Judá nunca se ponga dormidita, sino que seamos, Señor, con los lomos ceñidos, que estemos con el delantal puesto. Padre, con los tenis puestos, despiertos y listos para lo que tu tienes para nosotros. Padre, ponemos los ojos sobre ti. Sabemos, Señor, que nosotros, nuestros ojos verán al Hijo del hombre en su gloria llegando con las nubes, prepáranos para aquel día. Ayúdanos, Señor, a ser un pueblo santo porque tu eres santo. Límpianos con la sangre, ayúdanos a vivir una vida diferente, que la gente pueda ver que somos un pueblo particular, un pueblo especial, Señor. Danos ese ojo feroz para estar concentrados en la gracia que se nos traerá cuando Jesús sea manifestado.

El valle de nuestros perturbaciones

TRANSCRIPT

La palabra para hoy se encuentra en Josué Capítulo 7: Pero los hijos de Israel cometieron una prevaricación en cuanto al anatema; porque Acán hijo de Carmi, hijo de Zabdi, hijo de Zera, de la tribu de Judá, tomó del anatema; y la ira de Jehová se encendió contra los hijos de Israel;

2 Después Josué envió hombres desde Jericó a Ai, que estaba junto a Bet-avén hacia el oriente de Bet-el; y les habló diciendo: Subid y reconoced la tierra. Y ellos subieron y reconocieron a Ai.

3 Y volviendo a Josué, le dijeron: No suba todo el pueblo, sino suban como dos mil o tres mil hombres, y tomarán a Ai; no fatigues a todo el pueblo yendo allí, porque son pocos.

4 Y subieron allá del pueblo como tres mil hombres, los cuales huyeron delante de los de Ai.

5 Y los de Ai mataron de ellos a unos treinta y seis hombres, y los siguieron desde la puerta hasta Sebarim, y los derrotaron en la bajada; por lo cual el corazón del pueblo desfalleció y vino a ser como agua.

6 Entonces Josué rompió sus vestidos, y se postró en tierra sobre su rostro delante del arca de Jehová hasta caer la tarde, él y los ancianos de Israel; y echaron polvo sobre sus cabezas.

7 Y Josué dijo: !!Ah, Señor Jehová! ¿Por qué hiciste pasar a este pueblo el Jordán, para entregarnos en las manos de los amorreos, para que nos destruyan? !!Ojalá nos hubiéramos quedado al otro lado del Jordán!

8 !!Ay, Señor! ¿qué diré, ya que Israel ha vuelto la espalda delante de sus enemigos?

9 Porque los cananeos y todos los moradores de la tierra oirán, y nos rodearán, y borrarán nuestro nombre de sobre la tierra; y entonces, ¿qué harás tú a tu grande nombre?

10 Y Jehová dijo a Josué: Levántate; ¿por qué te postras así sobre tu rostro?

11 Israel ha pecado, y aun han quebrantado mi pacto que yo les mandé; y también han tomado del anatema, y hasta han hurtado, han mentido, y aun lo han guardado entre sus enseres.

12 Por esto los hijos de Israel no podrán hacer frente a sus enemigos, sino que delante de sus enemigos volverán la espalda, por cuanto han venido a ser anatema; ni estaré más con vosotros, si no destruyereis el anatema de en medio de vosotros.” Palabra poderosa del Señor.

Mis hermanos, si yo fuera a dar un tema en el mensaje de hoy diría que ese tema se llamaría tal vez el valle de nuestras perturbaciones, el valle de nuestros sufrimientos.

Dice la Biblia que eso ocurre en un momento un poco después de que el pueblo de Israel había ganado una batalla, dice la Biblia de que el pueblo de Israel había ganado a Jericó, las murallas del pueblo de Jericó se cayeron frente al pueblo de Dios, Dios ganó la batalla. Este personaje del capítulo 7 llamado Acán que vamos a entender un poquito más adelante estaba en la batalla cuando las murallas de Jericó se cayeron y la Palabra del Señor dice en el capítulo 7 versículo 16 que: “Josué levantándose de mañana hizo acercar a Israel por tribus, y fue tomada la tribu de Jehová”Dios dió una orden, llama el pueblo, llama las tribus, llama las familias y vas a encontrar que hay anatemas en el medio de Mi pueblo, hay pecado oculto en el medio de mi pueblo.

Y lo que Dios quería era sacar el anatema para que la victoria fuera completa. Mis hermanos, muchas veces jugamos con el pecado, muchas veces jugamos con situaciones en nuestra vida que nos alejan de Dios y no sabemos por qué perdemos la batalla, y no sabemos por qué perdemos la guerra, y no sabemos por qué oramos, y no vemos la respuesta a nuestra oración, no entendemos por qué ayunamos y no vemos la respuesta a nuestro clamor, y preguntamos a Dios: Dios ¿por qué no nos oyes? y decimos a Dios: Dios ¿por qué no nos atiendes? y a veces cuestionamos por qué Dios no hace milagros como hacía en los siglos anteriores, por qué la obra de Dios no es tan poderosa como era en los siglos anteriores.

Mis hermanos: esta Palabra nos dice que cuando hay pecado oculto en el pueblo de Dios no puede haber victoria. Esta Palabra nos aclara que tenemos que sacar el anatema de en medio de nosotros para que el pueblo de Dios salga victorioso en la batalla.

Dice la Palabra que Josué hizo acercar a la tribu de Judá y fue tomada la familia de Zera y haciendo de nuevo acercar la familia de Zera por los varones fue tomada la familia de Zabdi, hizo acercar la casa por los varones y fue tomado Acán hijo de Carmi, hijo de Zera de la tribu de Judá, entonces Josué le dijo a Acán: Acán, tú estás en problemas ahora, descubrimos tus pecados. “Hijo mío da gloria a Jehová el Dios de Israel, y dale alabanza, y declárame ahora lo que haz hecho, y no me lo encubras dice Josué a Acán.

“0 Y Acán respondió a Josué diciendo: Verdaderamente yo he pecado contra Jehová el Dios de Israel, y así y así he hecho.

21 Pues vi entre los despojos” vió algo interesante, “un manto babilónico muy bueno” diga conmigo: muy bueno ¿sabe por qué? el pecado no es feo, el pecado es muy bueno, y la razón porque pecamos ¿por qué es? porque es muy bueno, el diablo nunca le va a presentar a usted algo feo con cachos, viene bonito con flores, elegante, promesas. Y Acán dice: “Pues ví entre los despojos un manto babilónico muy bueno y doscientos siclos de plata,” había plata también, “y un lingote de oro de peso de cincuenta siclos, lo cual codicié y tomé; y he aquí que está escondido bajo tierra en medio de mi tienda, y el dinero debajo de ello.” Acán en ese momento dijo: yo estoy en problemas, como quien dice “me cacharon” ¿verdad? me descubrieron.

“22 Josué entonces envió mensajeros, los cuales fueron corriendo a la tienda; y he aquí estaba escondido en su tienda, y el dinero debajo de ello.

23 Y tomándolo de en medio de la tienda, lo trajeron a Josué y a todos los hijos de Israel, y lo pusieron delante de Jehová.” Ahí estaba el resultado del pecado de Acán delante de los ojos de Jehová.

“24 Entonces Josué, y todo Israel con él, tomaron a Acán hijo de Zera, el dinero, el manto, el lingote de oro, sus hijos, sus hijas, sus bueyes, sus asnos, sus ovejas, su tienda y todo cuanto tenía, y lo llevaron todo al valle de Acor.” Ese nombre del valle de Acor significa valle de nuestros dolores, el valle de Acor significa el lugar a donde todos nuestros sueños son deshechos, el lugar donde todas nuestras expectativas son destruidas resultado de una decisión equivocada.

“25 Y le dijo Josué: ¿Por qué nos has turbado? Túrbete Jehová en este día. Y todos los israelitas los apedrearon, y los quemaron después de apedrearlos.

26 Y levantaron sobre él un gran montón de piedras, que permanece hasta hoy. Y Jehová se volvió del ardor de su ira. Y por esto aquel lugar se llama el Valle de Acor, hasta hoy.”

Mis hermanos: Dios había prometido a Israel que nunca perdería una batalla, que saldría victorioso siempre y que bajo el gobierno de Josué nada de malo pasaría, que nunca perdería pero el pacto fue quebrantado con el pecado de Acán. Imagina que este evento ocurre un poco antes del enfrentamiento de una ciudad pequeña y un poco después del enfrentamiento de una ciudad grande, era un balance. Yo te doy algo aquí y Dios te dió algo aquí, y Dios quiere alargar tus tiendas, quiere darte algo más y la condición era clara, la condición era que no debían tocar nada y en Josué capítulo 2 versículo 24 dice: “Caminando ellos llegaron al monte y estuvieron allí tres días hasta que volvieron los que los perseguían y los que los persiguieron buscaron por todo el camino y no los hallaron; entonces volvieron los hombres, descendieron del monte y pasaron, y vinieron a Josué hijo de Num, y contaron todas las cosas que les habían acontecido, y dijeron a Josué: Jehová ha entregado toda la tierra en nuestras manos y también todos los moradores de país desmayan delante de nosotros.”

Había una promesa de victoria, ustedes ganarán siempre, en el capítulo 6 usted verá cómo Dios lleva al pueblo a la victoria, versículo 7 17 al 19: “Y será la ciudad Jericó anatema a Jehová con todas las cosas que están en ella” había una palabra: no toquen nada, no toquen nada. Ustedes caminarán por esta tierra pero no toquen nada, ganarán la batalla pero no se contaminen con las cosas de este mundo, ustedes serán victoriosos pero no anden según el consejo del mundo, Yo estaré con ustedes pero cuidado con el anatema, cuidado con el pecado.

El valle de Acor es el valle de nuestras perturbaciones. La vida de Acán se desarrolla en una atmósfera de victoria. Él había acabado de vivir una victoria, había acabado de ver cómo Dios libraba a su pueblo, había acabado de ver cómo Dios hizo caer las murallas de Jericó. Él había acabado de ver cómo las aguas del Jordán se dividían en el capítulo 4 versículo 23 y entraba con sus familias a pasar al otro lado, también participó según el capítulo 6 versículo 20 de cuando Dios destruyó al pueblo de Jericó y las murallas fueron destruidas.

Queridos hermanos apenas decisiones equivocadas, Acán es un ejemplo de las pasiones y de la concupiscencia de un cristiano, es el prototipo de un cristiano que no ha muerto a sus pasiones desordenadas todavía y que sigue viviendo entre el mundo y el Reino de Dios. Acán es el prototipo de una persona que vive con un pie en el mundo y un pie en el Reino de Dios, que no se ha convertido de verdad, que viene a la Iglesia, el cristiano que viene a los servicios y levanta sus manos, que a veces entrega una ofrenda a la Iglesia, que canta los coros y cree que la Iglesia tiene música bonita pero nunca hizo un compromiso verdadero con el Señor porque aún tiene la vida comprometida con este mundo.

Mis hermanos: hagamos muestra de que los apetitos de este mundo, los apetitos de la carne, las decisiones que tomamos traen consecuencias y resultados eternos que pueden afectar toda nuestra vida y las generaciones siguientes, Acán nos muestra que ese es un camino peligroso.

Santiago capítulo 1 versículos del 13 al 15, quisiera que me acompañara en este pasaje de la Biblia. Santiago nos muestra que hay posibilidades de que vivamos este apetito de bienes materiales, Santiago nos habla de un deseo de concupiscencia que también está relacionado a un deseo sexual de la carne.

En el versículo 13 al 15 nos dice la Palabra del Señor: “Cuando alguno es tentado no diga que es tentado de parte de Dios porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni Él tienta a nadie, siendo que cada uno es tentado cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido”.

Entonces la concupiscencia dice la Palabra después de haber concebido da a luz al pecado y el pecado consumado da a luz a la muerte. Santiago nos dice en esta Palabra hermanos que comienza primero con un deseo, mire lo que pasó con Acán. Acán vió primero, los ojos, los deseos, después ¿qué hizo Acán? lo tomé, lo codicié y Santiago nos dice que primero la concupiscencia o sea, el deseo, y esta concupiscencia va a generar en el cristiano un deseo de cometer un pecado.

Yo escuché una vez un hermano me dijo: Pastor ese pecado yo lo planeé porque yo leí un versículo que decía que Dios borra las iniquidades, yo planeé pecar porque sabía que Dios era bueno, imagínate, sabía que Dios era bueno. Yo sé que Dios es bueno y la Palabra de Dios nos dice en Primera de Juan capítulo 1 versículo 9, vamos a leer: “Si confesamos nuestros pecados Él es fiel y justo para perdonarnos esos pecados y limpiarnos de toda maldad.”

¿Entendemos ese versículo? entendemos esa Palabra, entendemos que Dios perdona pero déjame decirte, mientras cometes pecado y mientras te involucras con las pasiones de esta tierra tú pierdes las guerras que Dios quiere que tú las ganes.

Dice Santiago que cometes con la mirada, después con el deseo y después de eso hay un embarazo, dice la Palabra del Señor que hay un embarazo: concibe y da a luz, o sea, el pecado un día va a nacer si tú sigues codiciando y jugando con el pecado, un día el pecado dará a luz y se llamará pecado lópez, pecado hernández, pecado da silva, lo que sea, ¿verdad? un niño llamado pecado un día va a nacer en tu vida. En el momento en que ese pecado nazca en tu vida consecuentemente perderás la batalla que Dios te dijo que tú la ganarías.

Acán fue desobediente por cuanto hizo todo lo contrario de lo que Dios le había ordenado, Acán fue desobediente por cuanto menospreció la autoridad directa de Dios, Dios dijo: no toquen nada, Acán fue codicioso e idólatra por el afán de la riqueza. Acán vió la oportunidad de enriquecerse; wow, Acán dijo: “este manto está bueno”, imagínate cuando yo camine la gente dirá: mira aquél que va con ese manto, mira el manto que trae sobre su cuerpo, y Acán vió la plata, vió el dinero, vió todo eso.

Acán fue cobarde hermanos por cuanto él ocultó su pecado delante del Señor, Acán fue mentiroso por la misma razón, Acán fue homicida ¿por qué fue homicida? porque Dios le había prometido a él que nunca serían derrotados.

La Biblia dice hermanos del texto que leimos en el capítulo 7 que ellos fueron a una batalla en una ciudad pequeña Ai, era una ciudad pequeña, y cuando los espías regresaron de ver la ciudad de Ai los espías dijeron a Josué: Josué la ciudad es pequeña, tranquilo Josué vamos a ganar esto así (chasquea los dedos), no mandes todo el ejército solamente dos mil o tres mil hombres y ahí nos los comeremos vivos, nos los comeremos como papas, así dijeron a Josué.

Y dice que Josué envió algunos hombres solamente, manda solamente unos tres mil hombres y ganaremos la ciudad, pero eso no pasó, eso no pasó. Dice la Palabra del Señor que los hombres de ahí los derrotaron, mataron como más de 30 de los hijos de Israel, los destruyeron en la bajada, los siguieron, los persiguieron y llegaron a Israel como temblando un grupito de hombres ¿sabes por qué? porque en el valle de Acor, en el valle donde aprendemos a abandonar la voluntad de Dios, ponga atención, en el valle aprendemos que al abandonar la voluntad de Dios para vivir a nuestra propia voluntad pasamos por desesperación, por vergüenza y por derrota.

Yo quiero repetir para que tú pongas esto en tu mente: el valle de Acor nos enseña que abandonar la voluntad de Dios para vivir nuestra propia voluntad es pasarnos por desesperación, por vergüenza y por derrota.

Aleluya, y a veces hermanos no nos enteramos del dolor que causamos al corazón de Dios ¿verdad? cuando pecamos y cuando guardamos pecados, cuando escondemos el anatema, no nos enteramos del dolor que causamos al corazón de Dios.

En tercer lugar el valle de Acor nos enseña que nuestros pecados no son solamente nuestros, afectan a todos los que viven a nuestro alrededor. El pecado tuyo no afecta solamente tu vida, afecta a toda tu familia, afecta a tu Iglesia, afecta a tu pueblo, puede afectar a todos los que viven a tu alrededor. Nuestra decisión de hoy podrá afectarnos por toda una vida, por toda una vida, ese anatema, ese pecado oculto que uno guarda enterrado en el fondo del corazón así como hizo Acán.

Volvamos a mirar Santiago capítulo 1 a partir del versículo 12, miremos otra vez ese versículo para que usted no se olvide, del 12 al 15: “Bienaventurado el varón que soporta la tentación porque cuando haya resistido la prueba recibirá la corona de vida” mira, cuando resiste recibirá la corona de vida; es interesante ¿no? lo que Dios ha prometido a los que le aman.

“Cuando alguno es tentado no diga que es tentado de parte de Dios porque Dios no puede ser tentado por el mal y ni Él tienta a nadie, siendo que cada uno es tentado cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido, entonces la concupiscencia después de haber concebido y dado a luz al pecado, y el pecado siendo consumado da a luz la muerte” y está hablando de una muerte espiritual en nuestra vida cuando el pecado está oculto.

En cuarto lugar mis hermanos el valle de Acor es el lugar de derrotas fáciles. ¿Cuántas veces en tu vida pensaste que: no, yo puedo conseguir esto, yo puedo lograr esto en mi vida, no, tranquilo, yo estudié para este curso, yo hice esto, yo me preparé para esta entrevista de empleo, yo me preparé para comprar esta casa, yo me preparé porque tenía los recursos? Señor ¿por qué no pasa, Señor por qué no acontece en mi vida?

Dios quiere que hagamos un análisis de nuestro corazón, déjenme decirles hermanos: no subestimen a nuestro enemigo, el diablo está activo en la Tierra, no piensen que el diablo no nos mira, él nos mira. El diablo no nos derrota porque ve la sangre de Jesús en nosotros pero si abrimos la puerta a través del pecado seremos derrotados fácilmente, fácilmente.

El valle de Acor es el lugar donde sentimos los resentimientos más profundos que nunca fueron confesados, eso pasó en la vida de Acán. Versículo 16 al versículo 20 dice la Palabra del Señor que Josué llama a Acán y le dice: Acán hijo mío, adora a Dios, dale alabanza, confiesa tu pecado si hiciste esto.

Yo estaba esta mañana pensando en los sentimientos que tuvo este hombre en el momento en que se dió cuenta que todo un pueblo se había dado cuenta de que la derrota del pueblo de Israel estaba relacionada a su pecado ¿qué había sentido Acán en ese momento? ¿cuántos sentimientos de que: Señor si yo hubiera pensado antes tomaría decisiones diferentes? Señor: si hubiera entendido antes yo lo haría de esta manera ¿verdad que sí? sólo se puede hacer frente al enemigo cuando hay santidad en el campamento de Dios.

Estamos orando este año por Evangelismo ¿verdad? queremos ganar el mundo para Jesús, queremos ganar la ciudad para Jesús, queremos llenar el salón de esta Iglesia con almas para el Señor Jesucristo pero déjame decirte: ¿será que verdaderamente estamos listos? ¿será que verdaderamente no está pasando ese crecimiento de nuestra Iglesia y en nuestras vidas porque hay un anatema escondido en el pueblo de Dios? necesitamos hacer un análisis profundo en nuestros corazones y en nuestras vidas.

Si queremos transformar esta generación, esta ciudad, este país es necesario que vivamos una vida de santidad absoluta mis hermanos, absoluta. Venir a la Iglesia es poco, cantar coros es nada, déjeme decirle como dijo Isaías en el capítulo 49: “Hasta ganar mi ciudad entera para el Señor es poco” hasta ganar mi estado entero para el Señor es poco, y la Palabra dice “porque te di como luz a los gentiles para que vayas hasta los últimos confines de la tierra” el desafío no es solamente el vecino, la ciudad, el estado, el desafío es el mundo y Dios quiere entregarnos en nuestras manos, pero no podemos ser derrotados en la bajada si hay pecado oculto en el medio del pueblo de Dios.

En quinto lugar ¿qué debemos de hacer después de haber entrado en el valle de Acor, qué debemos hacer? La Biblia dice que David cometió muchos errores delante de Dios. El rey David fue un rey que yo, a mí no me gustaría imitarlo de verdad, David no es el prototipo de padre, de esposo, de líder para mí. David cometió muchas equivocaciones, es verdad, aún este hombre logró ser llamado el segundo hombre en el corazón del Señor, pero déjeme decirle. En el Salmo 51 dice la Palabra de Dios que David miró a su alrededor y vió su pecado, y dice: mi pecado está siempre delante de mis ojos.

¿Verdad? yo me imagino que cuando David vió a este niño resultar de su pecado con la mujer de Orías decidió salir corriendo por el palacio, ahí un niño tranquilo bonito, corriendo y David orando y diciendo: mi pecado está delante de mí, David sabía que su corazón se había corrompido delante del Señor.

El Salmo 51 mis amados hermanos nada más es lo que David derramando su alma delante del Señor Todopoderoso “ten piedad de mí oh Dios conforme a Tu misericordia” David reconoce el pecado en su vida, “conforme a la multitud de Tus piedades borra mis rebeliones”, David reconoce: “lávame de mi maldad y límpiame de mi pecado porque reconozco que mis rebeliones y mi pecado están siempre delante de mí, contra Ti, contra Ti solo he pecado y he hecho lo malo delante de Tus ojos” “para que seas reconocido justo en Tu Palabra y tenido por puro en Tu juicio”.

En el otro Salmo, el Salmo 32 David hace otra oración, David declara que su pecado había creado en él hasta una enfermedad. En el Salmo 32 dice: “Bienaventurado aquél cuya transgresión ha sido perdonada” “bienaventurado el hombre a quien Jehová no culpa de iniquidad y en cuyo espíritu no hay engaño”. En el versículo 3 dice David: “Mientras callé envejecieron mis huesos” wow, David está diciendo que su enfermedad de huesos era resultado de su pecado.

Mientras callé, mientras detuve mi pecado sólo para mí mis huesos se envejecieron, mis dolores se aceleraron. El pecado acelera la enfermedad porque el pecado trabaja en la mente y en la consciencia y David sabía de que el pecado le trajo consecuencias tremendas y si usted lee la carta de Segunda de Samuel a partir del capítulo 10 y el capítulo 11 verá cómo el pecado entró en la casa de David, cómo el pecado entró en su familia, cómo la sangre y la espada entró en el pueblo de Israel como resultado del pecado de un hombre.

Ah mis hermanos: tienes que saber que Dios desea que tú seas victorioso en el lugar donde un día caíste, en el lugar donde un día fuiste derrotado, Dios quiere que tú seas victorioso en ese lugar. Dios quiere llevarte de vuelta a la ciudad de Ai para que ganes la batalla, para que veas a los enemigos y que ha entregado tus enemigos en tus manos, la salud que tú deseas en tus manos, la victoria que tú esperas en tus manos, Dios la tiene lista para ti, pero hoy es el día, hoy es el día en que Dios nos llama a la responsabilidad, una responsabilidad que sea radical; la vida con Dios tiene que ser radical.

No confunda radical con pentecostal, radical, comienza a odiar el pecado, comienza a rechazar el pecado, comienza a decir: no al pecado, comienza a decir no a esta pantalla del computador cuando usted abre y el pecado está ahí, diga: no. Es necesario que Dios revele todo lo que está oculto en su campamento para que pueda cesar, parar la actividad del anatema en el medio del pueblo de Dios, aprenda a tratar el pecado como pecado.

Para que yo sea victorioso tengo que asumir o tomar muchas veces actitudes radicales con relación al pecado en la situación que estoy viviendo, rompa de una con el pecado, rompa hoy con el pecado, no juegue con el pecado. Que Dios revele tu pecado como reveló a Josué el anatema en el medio del pueblo de Dios, resista a los pecados que usted está acostumbrado a practicar, y a veces hay pecados que son tan costumbreros ¿verdad? que no los sentimos, que no los vemos como pecado.

Pensamos que pecado es solamente adulterar, robar, matar, pero quizás una mentira pequeña, una mentira y para Dios es el mismo pecado, para Dios tiene el mismo efecto.

Salve su propia vida, Romanos capítulo 5 versículos 20 y 21 dice: “Pero la ley se introdujo para que el pecado abundase” mas cuando el pecado abundó la gracia de Dios, la gracia de Dios. Dios quiere transformar toda desgracia de pecado en superabundancia y gracia de Él en mi vida y en tu vida.

Proverbios capítulo 28 versículo 13 ese es uno de mis versículos preferidos en la Biblia que dice: “El que encubre sus pecados no prosperará, mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia de Dios”. Dice la Biblia que no prospera el que encubre el pecado, no prospera, pero aquél que los confiesa y se aparta, y deja alcanza misericordia.

¿Cuántos pecados tú crees que quizás pueden ser motivo de tu derrota tal vez, quizás de muchas cosas que tú estás buscando lograr delante del Señor, logras pensar en algo en tu vida, viene algo a tu mente? ¿y podrías repetir conmigo Proverbios 28 versículo 13 a una sola voz? Proverbios 28 versículo 13: “El que encubre sus pecados no prosperará, mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia”, hay una bendición hermanos.

La Biblia dice en Primera de Juan en el capítulo 2, dice la Biblia que tenemos un abogado y Juan dice que escribe esta carta ¿sabe para qué? para que no pequemos, dice: hijitos, estas cosas os escribo para que no pequéis, imagínate, fue escrito para que no pequemos, “y si alguno hubiere pecado abogado tenemos para con el Padre a Jesucristo el justo”, Dios es tu abogado, Jesucristo es nuestro abogado, más arriba en el versículo 9 del capítulo 1 dice: “Si confesamos nuestros pecados Él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad” solamente nuestro Dios tiene la capacidad de purificarnos de nuestra maldad.

¿Hay pecado en tu vida? Dice la Biblia en el capítulo 1 de Primera de Juan versículo 7 que: “si andamos en luz como Él está en luz tenemos comunión unos con otros y la sangre de Jesucristo Su Hijo nos limpia de todo pecado” la sangre de Jesucristo nos limpia de todo pecado.

¿Quién aquí no es pecador? Quién no es pecador levante la mano, bueno si levantó la mano acabó de cometer un pecado ¿verdad? todos somos pecadores, todos. Dice la Biblia que no hay un justo, pero dice la Palabra que si andamos en la luz, si andamos en la luz ¿qué es la luz? Jesucristo es nuestra luz, si andamos en la luz dice la Biblia que la sangre de Jesús, el Hijo de Dios nos limpia de todo pecado. Si decimos que no tenemos pecado nos engañamos a nosotros mismos y la verdad no está en nosotros dice la Palabra de Dios, todos tenemos pecado, pero ya estamos confesados todos, todos nuestros pecados son confesados, Dios sabe todo.

Yo no quiero que usted me los confiese a mí ni a ninguno de los Pastores de la Iglesia, al Señor, llame el pecado por su nombre, diga: Señor yo he pecado, yo he encubierto situaciones de mi vida que nadie sabe, esta Iglesia no sabe, mi familia no sabe. Yo he cometido Señor prevaricación en cuanto el anatema y necesito, necesito que Tú me libres del pecado. ¿Hay alguien en esta mañana que dice: Señor, soy yo? Yo soy el primero que estoy aquí delante diciendo: Señor necesito a cada día de Tu Gracia, a cada día de Tu Poder para que yo no peque y para que yo viva en santidad.

¿Cuántos somos que hoy decimos: Señor ayúdame a vivir en santidad para que yo no peque? Yo no voy a pedir que tú vengas adelante, que tú levantes tu mano o algo así, pero quizás tú entiendes que hay pecados ocultos en tu vida encubiertos, pecados que nadie ve y están en tu área oculta que nadie ve pero déjame decirte: el área oculta Dios ve, yo lo veo, tu hermano lo ve pero Dios lo ve también.

Si tú quieres hoy, deseas hoy confesarlos hazlo y di: Señor yo necesito Tu perdón, yo quiero ganar la batalla, quiero ganar la guerra. Yo he sido derrotado en las bajadas Señor, en muchas pequeñas, pero hoy vengo delante de Ti porque yo sé que Tú eres el único que puede perdonarme.

¿Por qué importa la Segunda Venida de Cristo?

TRANSCRIPT

Primera de Tesalonicenses, capítulo 4, mis hermanos, comenzando con el versículo 13. El viernes en la noche en el santuario original despedimos al hermano Gustavo Ortiz, hemos despedido a varios hermanos y hermanas, algunos ancianos, otros jóvenes, hasta bebés hemos velado en ese santuario. El Pastor Gregory abrió el servicio fúnebre leyendo este mismo texto. Declara la palabra de Dios:

“…Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza, porque si creemos que Jesús murió y resucitó así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él, por lo cual os decimos esto, en palabra del Señor que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor no precederemos a los que durmieron, porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios descenderá del cielo y los muertos en Cristo resucitará primero, luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire. Y así estaremos siempre con el Señor, por tanto alentaos los unos a los otros con estas palabra.”

El capítulo 5 sigue, “Pero acerca de los tiempos y de las ocasiones no tenéis necesidad hermanos de que yo os escriba porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche, que cuando digan, paz y seguridad entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina, como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán. Más vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas para que aquel día os sorprenda como ladrón porque todos vosotros sois hijos de luz e hijos del día. No somos de la noche ni de las tinieblas.”

¿Por qué nos importa en el siglo XXI, en el año 2016, por qué es importante que prediquemos, que creamos, que a cada rato nos recordemos que Cristo viene? Creen en el rapto. Y acaso qué sabemos, qué deberíamos saber y qué no se sabe acerca del rapto, acerca de la segunda venida de Cristo.

La tercera pregunta que vamos a indagar en esta mañana es a la luz de esta doctrina, a la luz de la venida de Cristo, ¿cómo pues viviremos? ¿Cómo se espera que nosotros esperemos a Jesús? ¿Por qué nos importa el rapto? ¿Por qué aún hoy nos importa la segunda venida?

Saben, mis hermanos, es raro, en verdad no me acuerdo la última vez que oí aparte de unos contextos muy específicos, muy pentecostales, usted se puede imaginar. Pero aparte de ese contexto no me acuerdo de la última vez que oí un mensaje dedicado al rapto, dedicado a la segunda venida de Cristo. Yo no creo que eso es un accidente. Es raro que se oigan mensajes estos días acerca del rapto.

¿Por qué? Bueno, primero, como el tema de la prosperidad, el rapto y la segunda venida de Cristo es una de esas verdades bíblicas que han sido abusadas y maltratadas, e incluso algunos han llegado a anunciar fechas finales para el rapto. O sea, a las 10 de la noche, el día 24 de julio, en medio de la barbacoa en mi casa celebraremos el rapto. Y dejando a algunos decepcionados cuando el rapto no llega en ese momento, y han hecho que la iglesia evangélica en sí se vea ridícula.

Y también, hey, han pasado más de 2000 años entonces dónde está el rapto? Esa pregunta no es única original al siglo XXI, 20 siglos atrás, en el primer siglo aún en ese entonces estaban preguntando, ¿y dónde está el rapto? El Apóstol Pedro escribe en Segunda de Pedro, capítulo 3, “sabiendo primero esto, que en los postreros días vendrán burladores – ¿habrán burladores en nuestra comunidad – andando según sus propias concupiscencias y diciendo, ¿dónde está la promesa de su advenimiento? Porque desde el día en que los padres durmieron todas las cosas permanecen así, como desde el principio de la creación.”

O sea, como no ha acontecido en 2000 años, este sentir, esta actitud no es única al mundo. Muchos en la iglesia, es más, en el secreto de sus corazones, muchos predicadores nos hemos enfriado y atemorizado. Yo mismo luché francamente, se lo confieso al Señor y a ustedes, luché con el Espíritu Santo antes de traer esta palabra. No era la palabra que yo tenía en mente para esta congregación en esta mañana. Tenía algo mucho más seguro, un mensaje acerca de diezmos y ofrendas. Esa se la tengo guardada.

Pero fíjate, qué pasa. Hagamos este experimento. Quita de un momento, imagínate que la doctrina del Evangelio de Jesucristo es una casa, quitemos la viga de la doctrina del rapto, imagínese de la casa del Evangelio de Jesucristo que podamos quitar una de las vigas de esa doctrina, que eso sea la segunda venida de Cristo. ¿Con qué nos deja? Nos deja, primero, con una iglesia, que primero que se enfoca solo en este mundo. ¿Qué pasa cuando dejamos por alto este mensaje? ¿Cuál es el impacto? ¿Por qué nos importa? Porque nos deja con una iglesia, primero, que se enfoca solo en este mundo, solo en lo de aquí y lo de ahora. No quiero tomar al pobre hermano Joe Losting de punto a cada rato, pero él está acostumbrado a esto.

Uno de los libros que más ha vendido el título es, “Your best life now.” “Tu mejor vida ahora.” Yo creo que el Señor nos prospera ahora, pero yo no creo que mi mejor vida es aquí y ahora. Y si es así el Evangelio es indistinguible de incontables programas de auto mejoramiento, indistinguible… para eso tenemos un programa de 12 pasos o yogo o budismo o lo que sea, es un programa más.

Segundo, sin la doctrina de la segunda venida nos deja una iglesia sin un sentido de una responsabilidad, accountability, sin un sentido de una responsabilidad a Dios, sin un sano temor nacido de la realidad que un día lo veremos, sin la realidad que un día le rendiremos cuentas al Señor. No hay nada que nos anime a una pureza personal interna.

¿Por qué importa lo que pienso? ¿Por qué importa lo que hago con mi corazón si nadie me va a juzgar a ese nivel? No hay nada que llame a pastores y predicadores a respetar la doctrina bíblica. ¿Qué importa lo que predique siempre y cuando le caiga bien a la gente y que vengan y que diezmen? No hay un sentido de responsabilidad a Dios.

Tercero, una iglesia sin esta doctrina es una iglesia con un Evangelio endeble. ¿Para qué? ¿Por qué recibir a Cristo como tu salvador? Bueno, para que vivas una vida mejor, para que te vaya mejor, para que se incrementen tus notas en la universidad o se mejore un poco la relación con tu cónyuge, pero eso lo puedo sacar de este programa o de este otro libro. ¿Qué importa el Evangelio?

Cuarto, nosotros comenzamos a creer eso también en nuestro secreto. Nosotros comenzamos a compartir la depresión y el desespero de este mundo. Nos olvidamos de la razón de nuestro gozo. Nos olvidamos de la fuente de nuestra esperanza, como abre aquí Pablo, “tampoco queremos, hermanos, que ignoréis acerca de lo que duerme para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza.”

Y nosotros hemos llegado al punto en que la iglesia y el mundo son prácticamente indistinguibles en su aspecto y su relación con Dios. Y creo que mucho de eso tiene que ver con el adormecer y el ignorar esta doctrina, porque su parte Pablo, y de hecho la iglesia, por siglos creía en el rapto hasta sus huesos. En este pasaje léalo como usted leería un periódico, léelo en castellano, léelo en portugués, léalo en su idioma, léalo en el griego original y usted verá que Pablo es incontrovertiblemente claro en como él describe este evento. Él lo describe como un hecho, no una teoría como tantos más para él, era un hecho, era una cita, era una fecha.

Cristo viene por su iglesia. Punto. Y luego él escribe, “por tanto alentaos los unos a los otros con estas palabras,” se espera no solo que creamos esta doctrina sino que nos recordemos a cada rato que Cristo viene, animarnos con esas palabras, clavarlas a nuestros corazones y hacerlas nuestra esperanza. Eso es lo que se espera.

Pablo aquí está siendo insistente, mis hermanos, compartan a cada rato esta palabra los unos a los otros, aliéntense, animen a los que están quebrantados y entristecidos. Si no encuentra otra cosa que decir, a esa vida quebrantada, que esa vida sin esperanza, dile por lo menos, Cristo vive, te conoce y viene por ti. Aliéntense los unos a otros con estas palabras. Es una de las doctrinas más consistentes y coherentes de las escrituras.

Es increíble lo mucho que se habla de esto en la palabra y lo consistente que es la doctrina de la segunda venida de Cristo por toda la palabra. Nace de Jesús mismo, por ejemplo, como Pablo dice, “por lo cual os decimos, esto en palabra del Señor,” lo creemos porque Jesús lo predicó y lo prometió en cada uno de los Evangelios, como nosotros vamos a explorar ahorita. Igual, los profetas del Antiguo Testamento, Daniel, Jeremías, Isaías, Amos, etc. todos señalaron a este día.

Hechos, capítulo 1, el certificado de nacimiento de la iglesia. Ángeles les anunciaron a los discípulos que acababan de ver a Cristo ascender al cielo, que de esa misma manera Cristo volvería por ellos. Les dice, “varones galileos, por qué estáis mirando al cielo? Se nos fue nuestro héroe, nuestro Mesías, lo vimos desaparecer entre las nubes. ¿Por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo.”

Pablo, por cierto, Pedro, especialmente en su segunda carta y en Apocalipsis Jesús promete, “he aquí, vengo pronto y mi galardón conmigo,” es más, las escrituras concluye con estas palabras, “el que da testimonio de estas cosas ciertamente vengo en breve, amén. Sí, ven Señor Jesús.”

El último suspiro de la palabra del Señor es ven Señor Jesús. Y hasta el siglo XXI la segundo venida de Cristo era una de las verdades incontrovertibles de la doctrina de la iglesia. ¿Ustedes han oído de la celebración del advenimiento? La iglesia católica, la iglesia anglicana celebran el advenimiento, no tan solo en nacimiento de Jesús, su primera venida, la encarnación en el tiempo de la Navidad, pero muchos no conocen esto. A la vez el advenimiento celebraba la promesa de la segunda venida de Cristo. Los cristianos de antaño concluían el año diciendo, ven Señor Jesús. Qué lindo, al llegar la medianoche y al anunciar un nuevo año, nuestros hermanos y hermanas de antaño invitaban que el Señor regresara.

Satanás nos ha robado este tesoro. Y es tiempo de reclamárselo. Es tiempo de volverlo al pueblo de Dios. ¿Qué sabemos y qué no se sabe acerca del rapto? En esta carta de Pablo a los tesalonicenses aprendemos por lo menos 5 principios claves acerca de la segunda venida.

Primero, comenzando con el versículo 14, sabemos que los muertos en Cristo resucitarán, despertarán primero. Uno los primeros principios claves acerca de esta doctrina. Este es un recordatorio de esta doctrina para muchos de nosotros que no lo hemos oído un buen tiempo. Escribe Pablo, “porque si creemos que Jesús murió y resucitó así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él,” o sea, vendrán de algún lugar, “por lo cual os decimos esto en palabra del Señor, que nosotros que vivimos que habremos quedado hasta la venida del Señor no precederemos a los que durmieron.”

O sea, la resurrección de Jesús de entre los muertos es el precedente para nuestra propia resurrección. Es la esperanza que nosotros también seremos levantados entre los muertos. Pablo explica que los muertos en Cristo, como mi hermano Gustavo, como mi mamá, como mi papá, como nuestros seres queridos, como cada funeral de cada creyente que usted ha asistido, duerme. Mami duerme. Papi duerme. Nosotros lloramos porque los extrañamos pero en este momento hay una separación por el momento entre sus espíritus y sus cuerpos. Por ahora sus espíritus están en la presencia del Señor, en el paraíso como Jesús le prometió al ladrón en la cruz.

Ahora, no voy a entrar en detalles si era el cielo u otro lugar, lo que importa es que estamos con el Señor. A mí no me importa si estoy en el sótano de la casa estatal si Jesús está ahí. Yo puedo pasar una eternidad en el baño, siempre y cuando él esté ahí. Estar con el Señor es lo que importa. Sus cuerpos inertes mientras tanto duermen esperando otro cuerpo, un cuerpo, como declara la palabra en otro lugar, incorruptible.

A la venida del Señor los que duermen recibirán el gran despertador eterno, porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios descenderá del cielo y los muertos en Cristo son los primeros en despertar.

Segundo principio, entonces nosotros, o seas, los que aún vivimos nos reuniremos con Jesús y con ellos en las nubes. Nosotros que los sobrevivimos, que llegamos a vivir hasta el momento de ese despertamiento, nos reuniremos con ellos en las nubes.

Versículo 17, “luego nosotros, los que vivimos, los que hayamos quedado seremos arrebatados – diga arrebatado – juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire y así estaremos siempre con el Señor.”

Un nuevo capítulo comienza. Nuestra eternidad comienza en ese momento. La palabra que aquí es traducida arrebatar, también puede ser traducida como agarrar, arrancar como arrancar de raíces, o sacar a alguien a la fuerza salvándole su vida. Ven, muchacho cabeza duro, ven. Todavía estoy en fila para el pastelito. Ven, muchacho. Agarrarlo en ese momento. También se usaba en este contexto, reclamando algo o alguien para uno, eso es mío, ese es mi mulito. Este es mi hijo. Esta es mi hija. Esta es mi iglesia. En latín esta palabra es traducida raptus. La palabra que se usa para arrebatar aquí se traduce raptus y de ahí sacamos la palabra rapto.

Y cómo será eso? tal vez el que mejor lo explica es el mismo Jesús. Él describe en Mateo 24, “entonces estarán dos en el campo, el uno será agarrado, tomado, y el otro será dejado; dos mujeres estarán moliendo en un molino, la una será tomada y la otra será dejada.”

¿Cómo dejaste la telenovela anoche? Bueno, fíjate, en ese momento… ¿Y dónde se fue Josefa, dónde se fue? Tomada. “Por eso velad pues porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor pero sabed esto, que si el padre de familia supiese a qué hora el ladrón habría de venir velaría y no dejaría minar a su casa.”

Interesantemente Pedro escribe “pero el día del Señor vendrá como un ladrón.” Pablo usa también precisamente la misma ilustración que Jesús – hay una consistencia increíble en la palabra – “Pero acerca de los tiempos y de las ocasiones, versículo 1, capítulo 5, no tenéis necesidad hermanos de que os escriba porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche.”

Ese es el tercer principio, no sabemos el día. No sabemos la hora y esa es la idea. Esa es precisamente la idea. Como ladrón en la noche, es lo que la palabra una y otra vez dice. Ningún ladrón deja una nota en su puerta avisando, “mañana a las 3 de la tarde me voy a subir a la ventana del sótano de su casa y le voy a llevar hasta el perro.” Ningún ladrón hace eso. Allí estaríamos esperando tal vez con un guardia al lado o la pala de la escoba esperándolo, bienvenido! Pero no anuncian. No sabemos el día, no sabemos la hora.

Es el secreto mejor guardado del universo. Yo creo que esa fecha está escrita en un papel con tinta invisible encerrado en una caja fuerte al lado del trono del Padre y solo él conoce la combinación. Dijo Jesús en Marcos, capítulo 13, “porque de aquel día y de la hora nadie sabe, ni aún los ángeles que están en el cielo.“ Ni el Hijo sabe esa hora, sino el Padre. Lo más que sabemos es que puede acontecer en cualquier instante, que sería mejor que veláramos.

Por cierto, mis hermanos, las iglesias atraen ladrones como moscas a un asado. Por eso usamos cámaras y atalayas como Luis Campo y Frances Devaris, por qué? Sabemos cuándo llegará alguien para… sabe que una vez nos llevaron hasta las cámaras. Velando. No es chiste, es cierto.

Cuarto principio, por qué velar. Porque las cosas se pondrán peor, antes se pondrán mejor. Esto sí sabemos, esto sí nos advierte que las cosas se pondrán peor before they get better. Dice la palabra, sigue Pablo en Primera de Tesalonicenses, capítulo 5, versículo 3, “que cuando digan paz y seguridad entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina como los dolores a la mujer encinta y no escaparán.”

Paz y seguridad. Tengo suficiente edad para recordar que 20 años atrás al derrumbarse la Unión Soviética se esperaba un mundo de paz y seguridad, el fin de las guerras. Pero nunca nos hemos sentido menos seguros que ahora, nunca nos ha faltado más la paz. La muerte nos puede sorprender en el día de hoy dondequiera aún en unas vacaciones en Francia. Francia, who would have ever thought? Orlando, Disney, y te puedes pegar la muerte. Dondequiera.

A veces yo temo pensar cómo será ser un joven de 12, 13, 14 años criándose en este ambiente. Cómo procesar 50 murieron acá, 80 murieron acá, 120 murieron acá. En la ciudad de Somerville tenemos una bandera que desciende a mitad en símbolo de duelo en momentos de desastre y se me ocurrió la semana pasada al ver esa bandera a la mitad que ni siquiera sé cuál desastre estaban ellos velando. Cuál de las tantas? Baton Rouge, Dallas, Minneapolis, cuál? Nice, Turkey, Munich? Esa bandera por semanas se ha mantenido semana tras semana a mitad anunciando un desastre más, un duelo más. Ese es el mundo de 2016.

¿Cuándo es la última vez que usted se ha sentido allá afuera totalmente seguro o en paz? Y por eso el Señor nos recuerda, “oiréis de guerras y rumores de guerra – Mateo 24 – mirad que no os turbéis, pueblo de Dios, porque es necesario que todo esto acontezca pero aún no es el fin.” Y eso nos trae al quinto principio que exploramos acerca de la venida del Señor.

No os turbéis. Veamos lo que veamos, los que esperan a Jesús y anhelan su venida son hijos de luz. Ustedes oigan, nación contra nación, pueblo contra pueblo, cuando ustedes oigan de desastres y guerras y rumores de guerra, acuérdate, respira hondo, primeramente sobre ti declaro, yo soy hijo de Dios, cubierto por la sangre de Cristo, mi Mesías me advirtió. Vea la cuna de sus hijos, pon manos sobre ellos dondequiera, eres hijo de luz, en esta casa estamos cubiertos por la sangre de Cristo. Si es ya un adulto, ya tiene su familia, tiene su hogar, tiene sus hijos, saque su celular, en el tiempo de intercesión, mira esas fotos de ellos, de sus nietos y en el en el nombre de Jesús, Señor, los cubro con la sangre del cordero, los cubro, son hijos de luz. No nos turbaremos. No somos de este mundo.

En vez de turbarnos nos emociona porque sabemos que nuestra redención se aproxima. Sino como hijos de luz velamos y seamos sobrios. Sigue el versículo 6, “… por tanto no durmamos como los demás – este es otro tipo de sueño, esto es un sueño de falta de velar. El sueño de la iglesia en muchas maneras es no buscar, anhelar la venida del Hijo, eso es un tipo de sueño. El no anhelar, la iglesia al no anunciar la venida de Jesús, la iglesia no anhelar la venida de Jesús es un tipo de la iglesia durmiendo y la palabra nos dice, “no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios pues los que duermen de noche duermen, y los que se embriagan de noche se embriagan, pero nosotros que somos del día seamos sobrios y habiéndonos vestido con la coraza de fe y del amor y con la esperanza de la salvación como yelmo.”

Armémonos con la palabra del Señor. Armémonos con esta fe. Armémonos con el amor. ¿Qué es lo que Pablo está diciendo aquí? en vez de turbarte cuando oiga estas cosas, haga esto tu instinto. Ah, gracias por recordarme Señor, tu vienes, tu vienes pronto. La próxima vez que CNN te mande un anuncio de un desastre más, o veas otra demostración o vea a los políticos quitándose los cantos y una falta de liderazgo… un desierto de liderazgo en este país, recuérdate, Samuel, that’s right, es cierto, Cristo viene. E importa cómo vivimos. Si es así cómo velamos? ¿Cómo debemos vivir a la luz de la venida de Cristo?

Concluimos este mensaje con por lo menos 3 maneras en que Pablo y las escrituras sugiere que nosotros vivamos si es que estamos velando por la venida de Cristo ¿qué debes hacer? ¿Cómo deberíamos vivir?

Primero, vivir en santidad. Vivir para agradar a Dios. Vivir para complacer a Dios. Haga eso su obsesión. Primera de Tesalonicenses, capítulo 4, versículo 1, “Que sigan progresando en el modo de vivir que agrada a Dios,” y luego en versículo 3, “la voluntad de Dios es que sean santificados.” Esa es la traducción de la Nueva Versión internacional.

Me emociona lo que escribe el Apóstol Pedro en Segunda de Pedro, y esto es usando la traducción de Dios habla hoy, en Segunda de Pedro, capítulo 3, versículo 11, él escribe, “puesto que todo va a ser destruido de esa manera, ¿con cuánta santidad y devoción deben vivir ustedes? Esperen la llegada del día de Dios y hagan lo posible para apresurarla.”

Interesante. Nosotros tal vez no conozcamos el día ni la hora pero aquí implica Pedro que la iglesia de una forma misteriosamente tiene la capacidad de apresurar la venida del Señor, viviendo en santidad, dedicándonos a santidad. Ciertamente en Primera de Tesalonicenses Pablo escribe al principio en el contexto de cuidarnos de la fornicación e impureza sexual, eso lo vemos en versículo 3 y 5, pero también nos exhorta en el versículo 6 “que ninguno agravie ni engañe en nada,” dice ahí, en nada, o sea, estafar, mentir, apoderarte de, salir con la suya a su hermano. “Porque el Señor es vengador de todo esto, como ya os hemos dicho y testificado.”

Vivir sabiendo, un día de estos… la idea de Apocalipsis de la iglesia sin mancha, sin arrugas, purificándose, preparándose para el día en que nosotros veamos a Jesús ojo a ojo, cara a cara y rindiéndole cuentas de cómo nos tratamos los unos a los otros, y a la luz de eso esta segunda sugerencia, cómo velamos.

Amémonos los unos a los otros. Primeramente, vivamos en santidad, traducción, respete a Dios, respete su palabra, viva para agradarlo. Sal de tu zona de confort para complacer a tu Dios, número 1. Número 2, ama tu hermano, ama a tu hermana, amémonos los unos a los otros.

Versículo 9, “pero acerca del amor fraternal no tenéis necesidad de que os escriba porque vosotros mismo habéis aprendido de Dios que os améis unos a otros.” Como dice Pablo, debe ser obvio, ¿verdad? Pero él no está hablando de un sentir amor como una emoción, esto se trata de vivir esperando la venida del Señor. El amor es nuestra misión en la vida, es una obsesión. No es algo que sentimos, es algo que usted se ha dedicado a hacer. Yo me voy a dedicar, mientras esté yo sobre esta tierra, mientras yo tenga la oportunidad de expandir el Reino de Dios me ocuparé de amar activamente, notablemente, con palabras, con hechos, con generosidad. Me conocerán por uno que amaba, que ama. Es una obsesión.

¿Cómo puedo ser luz e izar a aquellos alrededor de mí? Piensen entonces, hermanos, en círculos concéntricos, primero su familia, su esposa, su cónyuge, ámalos. ¿Cuál es el lenguaje de amor de su esposa? ¿Cuál es el lenguaje de amor de sus hijos? ¿Cómo puedes ser tu un representante del amor de Jesucristo, una conducta del amor de Jesucristo a ellos? De ahí el círculo expande ya a la iglesia, a tus hermanos, a tus pastores, ¿cómo puedo amar más? En vez de ser meramente un receptor, alguien con grandes necesidades, ¿Cómo puedo yo amar a aquellos que están a mi alrededor?

Y eso se expande, hermanos, ya al trabajo, ya a su vecindario. Entre poco, ya la ciudad entera se convierte… el que no ha experimentado esto está perdiendo su vida. Esto es como un hilo que uno lo jala y jala y cuando uno se da cuenta tiene una mano de misericordia que comienza amando, simplemente amando a esos niños, amando a esos jóvenes, se convierten en lazos de amor que comenzó meramente orando, corazones quebrantados por ellos. Y uno los ama y los ama y Dios te da más, y Dios te da más, y Dios te bendice más y por más que usted ama, y por más que usted sirve más Dios te da la capacidad para amar, más Dios expande tu horizonte. Jurc, comenzando con 40 jóvenes en 1999 y ahora llegando casi a 2000 y nuevas escuelas públicas. ¿Pero cuál es el secreto? Son misioneros que enviamos allí para amar esas escuelas. El Señor expande.

Agencia Alfa, hermanos, el secreto de estos ministerios es el amor, entonces el rey dirá a los de su derecha, venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo porque tuve hambre y me diste de comer, tuve sed y me disteis de beber, fui forastero y me recogisteis, estuve desnudo y me cubristeis, enfermo y me visitasteis, en la cárcel y vinisteis a mí. Nunca te cansarás de amar.

Y por último, no nos aferremos a este mundo, mis hermanos. Primera de Tesalonicenses, capítulo 11 y aquí lo leeré en la Biblia Latinoamericana. “Y a qué tengáis por vuestra ambición el llevar una vida tranquila – en inglés se traduce, live a quiet life – y os ocupéis en vuestros propios asuntos – en inglés, mind your own business – y trabajéis con vuestras manos tal como os hemos mandado, a fin de que os conduzcáis honradamente para con los de afuera y no tengáis necesidad de nada.”

Ahora, esto parece una contradicción. Una vida tranquila no parece una ambición, ¿verdad? Y ese es el punto, mientras estemos sobre esta tierra, hermanos, no te afanes, no pierdas tiempo por si te reconocieron o si te dieron el aumento o si se hicieron tu amigo, o si se recordaron de ti antes de partir de este mundo. Si eso ocurre, amén, pero ama la tranquilidad, lo que Dios ya te ha dada, los que Dios ya te ha confiado. Aprovecha mejor este tiempo amándolos y lo radical es esto, si usted dice, “Sabe, yo no soy de este mundo, mis tesoros están en otro lugar,” y usted se dedica a eso, a vivir tranquilamente lo que Dios dio Dios quitó, bendito sea el nombre del Señor. Si hoy tenemos tortillas y huevos, amén, si mañana pasteles y mondongo amén, si el próximo día tenemos que llamar a los chinos, amén. Cada día Dios provee. Ser diligente, ser confiable.

Sabe lo que te conviertes en ese momento? Te conviertes en un imán. La gente aunque no conocen a Cristo se acercarán a ti. Quieren estar alrededor de este tipo que siempre lo ven tranquilo, este bombazo explotó por ahí, esta otra cosa explota por allá, pero tu siempre tienes una palabra de amor, tus ojos se parecen a los ojos de Cristo y si a nadie más pueden confiarle esa tarea te lo pueden confiar a ti porque te conocen como alguien sobrio, serio, confiable, una persona de integridad y quieren estar cerca de ti.

Y te preguntarán, pero ven acá, David, why are you different? Y le puedes responder, “Mira, si vivo estoy bien, si duermo estoy bien, al fin del día yo gano, al fin de mis historia estoy con Jesús para siempre.” Eso es imborrable. Isis no puede borrar eso. Ningún político puede borrar eso. La cuenta de valores no puede borrar eso. El Boston Globe no puede borrar eso. Me puedes matar, me pueden partir en mil pedazos, más pronto estoy con el Señor. O sea, no me pueden quitar esta vida, esta esperanza.

¿Qué acontece con una vida que vive así? Una mente que hace eso su enfoque, alguien que sale a su trabajo sea con su mochila o sea con sus herramientas o sea con sus cachivaches, para subir al tren, mira los cielos por un momento antes de comenzar el día, mira a los cielos buscando la señal del Hijo del hombre, te espero Señor. Yo tengo mi agenda para este día pero tienes todo el permiso de venir a buscarme en este día, Señor.

Ven Señor Jesús. Bajen sus rostros. Si esto tiene sentido para ti, te acuerdas del día que entregaste tu vida al Señor y le pediste, “Señor, cúbreme con tu sangre.” Hoy en el en el nombre de Jesús te recuerdo de por qué lo hiciste y qué es lo que esperamos y qué es lo que está en juego. Ahora en tu espíritu tal vez como no lo has hecho en un buen tiempo, mira al Señor y dile, ven, ven Señor. Ven Señor.

Yo te espero como siempre te espero todos los días, espero tu presencia, espero que me guardes, espero que me prosperes, espero que me protejas, espero que me sanes, espero que me acompañes, espero que me des sabiduría cuando me vea turbado, me de la paz, Señor, cuando me vea retado. Tu sabes lo que quiero decir, Señor, te invito Jesús en la forma que te de la gana en este día, ven, ven a mí. Ven Señor. Ven Señor. Esta iglesia dice, ven. En este momento en Boston te necesitamos más que nunca, en este país, en este mundo, ven Señor.

Dios tiene un destino mejor para tu vida

TRANSCRIPT

Quiero comenzar leyendo Primero de Crónicas capítulo 4 los versículos 9 y 10, dice así la Palabra del Señor: “Y Jabes” noten ese “y”, “Y Jabes fue más ilustre” esa palabra me cautivó cuando yo lei por primera vez esa oración, fui y la busqué en el hebreo original, “Y Jabes fue más ilustre que sus hermanos, al cual su madre llamó Jabes” tenía otros hermanos pero dice que Jabes era más ilustre que ellos; su madre le puso Jabes ¿por qué le puso eso? “por cuanto lo di a luz en dolor” dolor, otra palabra clave para entender este relato.

El versículo 10 dice entonces: “E invocó Jabes al Dios de Israel diciendo: oh si me dieras bendición y ensancharas mi territorio, y si Tu mano estuviera conmigo y me libraras del mal para que no me dañe” y qué lindo al final esa última notita que dice: “y le otorgó Dios lo que él pidió” qué bueno tener esa notita ahí ¿verdad que sí? porque sabemos que tuvo éxito esa oración que Jabes presentó delante del Señor.

Y una de las razones yo le decía al grupo en inglés esta mañana que yo escogí este pasaje es porque combina muy bien con lo que yo prediqué el domingo antepasado sobre Isaías 54, algunos recordarán porque yo sé que ustedes recuerdan todo lo que yo predico y lo que predico aquí arriba, que en Isaías 54 hay un llamado de parte de Dios a Israel en la forma de una mujer estéril que nunca ha dado a luz hijos y que está abrumada por su sentido de pérdida y de esterilidad, y Dios le dice a esa mujer estéril que cante, que eleve canción, como que celebre preventivamente por avance de la bendición que viene a su vida, y le dice: alaba, canta, celebra, dice porque más son los hijos de la estéril que los de la casada, y entonces Dios le dice a esa mujer: ensancha el sitio de tu tienda, alarga tus cortinas, extiende tus cortinas y alarga las cuerdas de tu tienda, una tienda de campaña es lo que está diciendo ¿no? escoge un lugar más amplio, pon ahí una tienda más grande con cortinas más anchas y entonces coge cuerdas más anchas para esas cortinas más grandes y también estacas más fuertes, más grandes para esa tienda que va a necesitar.

Y yo hablaba entonces ¿no? de ensanchar nuestra capacidad para creer que Dios va a hacer cosas grandes en nuestra vida para tomar acción y poner cortinas en ese espacio nuevo de fe que Dios nos da y de creer que Dios tiene algo, un destino. ¿Cuántos creen que Dios tiene un destino mejor para tu vida, amén? tu vida no ha terminado todavía.

Yo hablaba con alguien esta mañana, ah sí con un señor por el cual oré esta mañana y yo tuve una breve conversación con él, y me decía acerca de, se ve en su rostro y en su forma los estragos de una vida que ha sido golpeada por el mundo y por la tragedia. Personas que yo veo continuamente cuando paso por allí por la Olvan Street con Massachussets Avenue en estos rostros de individuos que están aprisionados por las drogas, homeless que no tienen vivienda, pobreza, tantas cosas terribles, y ví en su rostro y me acerqué a orar por él aunque le había pedido a alguien más que orara por él, y él me decía acerca de sus luchas, sus tribulaciones en la vida, los demonios dice que me están mordiendo el calcañar continuamente, me están persiguiendo y me dijo Pastor ore por mí que, y mis luchas.

Y comencé a hablarle, comencé a decirle del buen propósito de Dios para su vida y le dije: pero ¿qué edad tú tienes? y me dijo: 45 años, bueno mira tú estás apenas a la mitad de tu vida a lo máximo, tienes todavía una vida por delante y Dios puede hacer grandes cosas para ti en el tiempo que te queda por delante, cree que Dios tiene buenos propósitos para ti.

Y Dios en ese pasaje de Isaías 54 le está diciendo a esta mujer: hey, ensancha el sitio de tu tienda, cree por grandes cosas, comienza a emprender cosas grandes porque te extenderás dice a la derecha y a la izquierda y tus hijos heredarán las naciones, y levantarán las ciudades destruidas, eso es lo que Dios tiene para tu vida, pero hay principios que tienen que ser puestos en práctica y Jabes es otro símbolo. Yo lo que quiero es reforzar estas verdades que compartí con ustedes hace un par de domingos con otro pasaje que muestra esta misma dinámica en una manera diferente y al hacer esto quiero fortalecer en ti la consciencia de estos principios para tú poder vivir una vida fructífera, una vida que vaya de crecimiento en crecimiento, de mejor en mejor, de bendición en bendición, nuestros jóvenes que están aquí algunos de ellos que están apenas comenzando su vida profesional o que todavía no se han casado pero están pensando en casarse en algún momento o que están en la universidad, en la escuela y otras de ustedes hermanas que no han podido estudiar porque nunca han tenido la oportunidad, varones que han tenido experiencias negativas en su vida y no han podido llegar a donde Dios.

Usted sabe que Dios le quiere llevar y Dios quiere que tú extiendas el sitio de tu tienda y que alargues tus cortinas, y que uses los principios del Reino de Dios para que puedas llegar a esos niveles de grandeza a los cuales Dios te quiere llevar, y Jabes ilustra todas estas verdades por eso es que yo quiero discutirlas con todos ustedes.

Una de las cosas que me impacta de Jabes es que el comienzo de su vida es tremendamente negativo. Jabes nace bajo un signo de dolor y sufrimiento, su parto mismo, su nacimiento biológico fue acompañado de trauma, su mamá lo tuvo en dolor. Yo no sé si alguna hermana aquí ha tenido un parto peligroso.

Nuestra hija ustedes saben hace un año y medio tuvo un parto prematuro y para una mujer es bien amenazante me imagino un parto donde el bebé nace de cesárea o hay diferentes dificultades, el caso fue que Jabes parece que su nacimiento su mamá casi se muere, fue bien doloroso, bien traumatizante, él nació con una señal ya como negativa sobre su vida y entonces su mamá impresionada con este parto tan traumático quiso como memorializar su sufrimiento y le puso el nombre de dolor.

El nombre de Jabes, se nos sugiere, está relacionado con la palabra oseb y es como una inversión de la palabra en el hebreo original pero todos los estudiosos de la Escritura saben y la misma Escritura aquí nos dice que el nombre de él estaba relacionado con la palabra dolor, por eso es que su mamá dice: “por cuanto lo di en dolor lo voy a llamar Jabes”, era un juego de palabras pero incorporado en el nombre suyo estaba la palabra dolor.

Entonces es como abrumado en un sentido y se le ata un bloque de 40 libras a su cuello que él tiene que llevar todos los días, y cada vez que la gente le dice Jabes le está recordando su naturaleza adolorida y trágica, y esta mujer no entendió porque no tenía entendimiento espiritual. Los hebreos y otras religiones saben que a veces los nombres que les damos a nuestros hijos son con intencionalidad, pensar bien y las etiquetas que ponemos sobre nuestros hijos son bien importantes.

E inclusive los nombres implícitos que nosotros adoptamos sobre nosotros mismos. ¿Cómo tú te ves a ti mismo? porque a veces nosotros nos ponemos nombres a nosotros mismos sin ponernos un nombre específico pero como que nos ponemos una identidad y es como que estamos asumiendo: no, yo nací para sufrir, el mundo es trágico, yo no espero nada bueno.

Muchas veces nosotros sin darnos cuenta y a veces porque hemos tenido experiencias traumáticas, yo he hablado con personas en el lugar de la consejería acerca de cómo un evento, una violación por ejemplo a los 7, 8, 9 años sexual la marca, entonces de ahí en adelante su vida lleva como el signo de esta violación y entonces como que a veces empieza a odiar a los hombres o adopta una identidad: no, yo soy lesbiana por ejemplo, porque hubo una violación en el pasado y les estoy hablando no de teoría hermanos, les estoy hablando de cosas reales que yo experimento en el lugar de la consejería muchas veces; un padre abusivo o una madre que abandonó el hogar, o que murió prematuramente pero el hijo pequeñito lo identificó como un abandono y entonces luego adopta una actitud negativa acerca del mundo: no valgo, no soy amado y eso te sigue en un sentido, adoptas una actitud, una disposición y eso te sigue todos los días de tu vida.

Y una de las cosas que nosotros tenemos que hacer como creyentes continuamente es examinar la programación que está dentro de nosotros, examinar la manera en que nos percibimos a nosotros mismos y los nombres que nos hemos asignado a nosotros mismos, y también las palabras que les decimos a nuestros hijos hermanos, hablémosles cosas buenas, digámosles que han nacido para tener éxito, cantemos alrededor de ellos, dediquémosles tiempo y amor, y tiempo de calidad, sentémonos con ellos para leerles buenos libros porque nosotros creemos que van a ser intelectuales y gente educada, y valoricémoslos porque al decir estas cosas estamos diciendo bendición sobre ellos, digámosles que los amamos y que son amados, y que Dios tiene buenos propósitos para ellos porque eso va a ser una programación positiva que les va a preparar para creer que Dios tiene buenos propósitos para ellos.

Esta mujer en su ignorancia le pone un nombre que es doloroso a su hijo y que lo sigue el resto de su vida. Y parece que este nombre llevó a Jabes a una serie de experiencias dolorosas, lo que yo entreleo en este pasaje es que la profecía negativa de esta madre sí llegó a determinar el tipo de vida que este joven o este hombre había vivido, y entonces llega un momento en que Jabes harto de esta situación profiere una oración que vamos a analizar dentro de un momento.

Pero hay algo que yo quiero hacer antes de eso para que ustedes vean también la interacción que hay entre el sufrimiento, el dolor, las experiencias negativas de la vida y cómo nosotros podemos usar eso como un trampolín, como un punto de partida para cosas mejores.

El relato de Jabes comienza diciendo algo bien interesante, dice: “Y Jabes fue más ilustre que sus hermanos” y yo le decía que ese “y” que está ahí, porque la Biblia tiene intencionalidad en todo, ese y implica algo y es lo siguiente: si usted lee, estos dos versículos están insertados en uno de los trechos más aburridos de toda la Biblia, está en medio de una cantidad de listas de que fulanito, usted sabe cómo es la historia, fulanito engendró a sultano, y fulano engendró a fulano y a sultano, y este engendró a los otros, es como simplemente un relato periódico bien aburrido con diferentes genealogías, es como una lista de certificados de nacimiento.

Y en esa lista así como mecánica irrumpe este relato que personifica y aisla para nuestra consideración uno de esos personajes. Jabes hubiera podido ser simplemente uno de los demás, “Azur, padre de Tecoa, tuvo dos mujeres: Hela y Naara. Naara le dio a luz a Ajuzam, a Hefer, a Temeni y a Ajastari. Estos fueron los hijos de Naara. Los hijos de Hela fueron: Zeret, Zojar y Etnán, y Jabes pudiera haber sido uno así, engendró a Jabes y sigue adelante pero no, el Espíritu Santo se detuvo cuando llegó a Jabes porque Jabes había sido el sujeto de algo muy particular y muy espiritual, y Dios quería que nosotros supiéramos lo que había pasado allí, había algo en Jabes que lo sacaba del montón y lo aislaba, y dice que Jabes fue más ilustre que sus hermanos al cual su madre llamó Jabes.

A mí me impresionó la palabra ilustre y la busqué en el hebreo original, y en el hebreo original es la palabra cabad, o sea Jabes fue más cabad que sus demás hermanos, y la palabra cabad en el hebreo original sugiere sustancia y peso, peso sobre todo. Usted puede ver cómo peso puede dar lugar a ilustre.

Dice que había algo en Jabes, Jabes fue algo especial. Jabes fue más sustancioso que sus hermanos, Jabes tenía algo especial que lo apartaba del montón y que yo creo que fue lo que lo llevó a pronunciar esta oración tan bendecida y tan llena de significado que lo ayudó a salir de su destino terrible en el cual él vivía.

Y uno se pone a pensar ¿qué fue lo que hizo a Jabes más ilustre que le dió esa capacidad para proferir esa oración? yo creo que paradójicamente fue el dolor en el cual él había vivido. Esas experiencias tristes y negativas que él había tenido lo capacitaron a él para tener como un acceso singular a los principios espirituales y a orarle al Señor en esa manera.

¿Y por qué digo esto yo hermanos? es porque, hermanos: muchos de nosotros hemos experimentado dolor en nuestras vidas y yo creo que muchas veces Dios usa el dolor, y el dolor todo depende de cómo tú te relacionas con las tragedias de tu vida y los dolores en tu vida, si tú crees que tu dolor que tú pasaste en tu pasado cualquiera que fuera: abuso sexual, una relación que te llevó a un aborto, un amor que no fue correspondido y que te marcó, la falta de amor de una madre, todos, todos tenemos dolores de diferentes tipos, todos, todos, y depende de tú cómo te relaciones con ese dolor.

El dolor puede hacer dos cosas: destruirte, deformar, convertirte en una figura trágica y resentida, que tú te constituyas como en una víctima simplemente procesando y repitiendo el resentimiento de ese momento y de esos eventos de tu vida, y entonces lo que puede hacer es que te neutraliza, te sirve como una piedra de tropiezo que vas a arrastrar toda tu vida y tú puedes vivir lamentando y ensayando, y reviviendo ese dolor incluyendo la culpa de cosas que tú hiciste en el pasado que estaban mal pero que en algún momento vas a tener que procesarlas y dejarlas atrás, y seguir hacia adelante, y abrazar el futuro, el dolor puede victimizarte o destruirte o tú puedes decidir en el Nombre del Señor convertirlo en un aliado para seguir adelante y para crecer espiritualmente, todo depende de la narrativa que tú adoptes acerca de ese dolor en tu vida.

Si tú como hijo de Dios crees que en el mundo no hay coincidencias para los que a Dios aman, la Biblia dice que para los hijos de Dios todas las cosas ayudan a bien, todo, todas las tragedias, y si tú decides creer que Dios tenía un propósito; Dios no estaba durmiendo cuando te pasaron esas cosas y entonces como que se despertó cuando tú aceptaste a Cristo como Señor y Salvador, Él sabía desde la eternidad dónde tú ibas a estar, es decir que el Señor ha permitido muchas cosas de nuestras vidas para misteriosamente bendecirnos.

¿Sabes que el dolor de tu sufrimiento, de tu padecimiento te puede convertir en una persona por ejemplo más generosa? Yo he aprendido que cuando uno ha pasado por ciertos dolores uno tiene más compasión hacia los que se duelen, cuando uno ha fracasado a veces en la vida en ciertas cosas, cuando uno ha cometido ciertos errores uno tiene más compasión.

Una persona que fue adicta a drogas por ejemplo y que Dios lo sacó de allí sabe lo que sufre una persona adicta a las drogas ¿cierto? Una persona a quien Dios ha sacado digamos de la homosexualidad y todavía lucha a veces con ciertas tendencias entiende lo que están pasando otros en vez de decir: no, estos son unos perversos, no, son unos sexuales, y no, ¿no? no; muchas veces cuando nosotros pasamos por esas situaciones eso nos capacita para condolernos con otros e inclusive nos quebranta para ser más humildes delante de Dios.

El Apóstol Pablo por ejemplo tenía un aguijón que no identifica, dice que era un mensajero del diablo que lo abofeteaba continuamente, y dice que tres veces vino ante el Padre: Señor líbrame de esto, y tres veces el Señor le dijo: Bástate Mi Gracia, porque el Poder de Dios se perfecciona en la debilidad. Y Dios quería que Pablo peleara contra ese demonio en su vida para que las grandes revelaciones que Dios le había dado no lo enorgullecieran y lo hicieran arrogante.

Muchas veces cuando hemos tenido una vida perfectamente bien, todo bien, todo éxito nos convertimos en gente dura y no tenemos compasión con los demás, y decimos: bueno yo lo hice ¿por qué no lo puede hacer él también? y yo creo que a veces Dios permite las pruebas en nuestra vida para hacernos más como Cristo ¿sabe? Yo veo siempre que todas las cosas que el mundo nos dispara nosotros podemos convertirlas en oro.

Claro, yo voy a seguir pidiendo: Dios líbrame, provéeme, bendíceme, pero cuando el mal venga a mi vida yo lo voy a convertir en un aliado y le voy a decir: Señor ¿qué Tú me estás enseñando a través de esto y cómo puedo yo usar ese dolor para seguir adelante y para ser mejor?

Y yo creo que paradójicamente ese sufrimiento que Jabes padeció cuando era niño lo convirtió en un hombre más profundo, pensativo, apreciativo de las cosas espirituales y yo creo que eso fue lo que llevó a ser más ilustre que sus hermanos y que atrajo la atención de Dios, y lo preparó para emitir esa gran y hermosa oración que tenemos aquí.

Entonces él fue más ilustre, más profundo, más sustancioso que sus hermanos y a pesar de ese signo triste y doloroso que lo seguía toda su vida él tuvo un momento de gran revelación y emitió su amargura en un instante, yo creo que la oración de Jabes debe haber sido algo que duró un instante, yo creo que fue como un brote de su interior, y yo quiero examinar esos elementos que constituyen esa oración que él dió porque aquí también hay algunos principios que son bien importantes.

Dice la Biblia que: “Jabes invocó al Dios de Israel diciendo” y aquí vemos cuatro cosas que yo quiero señalar rápidamente, cuatro elementos yo diría de una vida exitosa y que tenemos siempre que tener en mente cuando oramos al Señor y tenemos que poner en práctica siempre, dice: “Oh” en realidad son 5 porque el “oh” es como un elemento aparte, él dice: “oh, si me dieras bendición” pidió bendición y vamos a hablar un poquito acerca de eso, “si ensancharas mi territorio” es la tercera, bendición y ensanchamiento de su territorio, “si Tu mano” yo veo aquí en “Tu mano” un cuarto elemento, “estuviera conmigo”, y entonces el quinto elemento “y me libraras de mal para que no me dañe” esas cinco cosas voy a tratar de resumirlas rápidamente.

Ese “oh” yo siempre lo he aislado rápidamente, yo veo en este oh pasión y también veo visualización. Cuando usted dice “oh” es como un “oh” de imaginación, es visualizar algo, es soñar en algo ¿no? es como que usted se está viendo de momento en una playa allá muy bonita o en un lugar de descanso, él está mirando su situación pero está contemplando un territorio nuevo y diferente, está tomando tiempo para ver algo y la Biblia señala muchas veces eso de ver.

Por ejemplo usted lee en el Libro de Hebreos en el capítulo 11 el gran señalamiento de los hombres y mujeres de la fe, y dice que algunos de ellos se sostuvieron como viendo una ciudad invisible, estaban alucinando, y vivieron la vida aquí en la Tierra como peregrinos y extranjeros, fueron aserrados, crucificados, pero como que veían y en un pasaje dice: “viéndola y saludándola” de tan clara que la veían.

Dice que Jesús por la bendición puesta delante de Él padeció una cantidad de sufrimientos porque Él podía ver toda la salvación que iba a venir a través de Su cruz, Él vió millones de vidas, un universo entero restituido y restablecido por Su sangre derramada en la cruz y por eso se sometió a todos estos sufrimientos.

Muchas veces es el ver el destino bueno que Dios tiene delante de nosotros lo que nos permite. ¿Qué mantiene a un estudiante de cuatro años de universidad de estudios en exámenes y malas noches? es la idea de recibir ese bendito diploma final cuando vaya allí con su batita de graduando, su libreta y lo que sea y le dicen: felicitaciones, tienes tu doctorado, tu licenciatura o lo que sea, eso es lo que nos mantiene muchas veces, es poder ver las cosas y Jabes visualizó: Señor si Tú me dieras esto y lo otro.

Entonces yo los animo a todos primeramente a soñar y a creer en grandes cosas y verlas, toma tiempo para visualizar las bendiciones de Dios en tu vida, ten sueños preñados, piensa en lo que tú quieres y visualízalo. Si tú quieres aprender un instrumento, si quieres graduarte de la universidad, si quieres comprar una casa, si quieres tener hijos bendecidos visualízalos en el espíritu. Cuando tú ores descríbeselos al Señor con lujo de detalles, ve esa bendición y pídele a Dios que te permita casi saborearla, ejercita tu capacidad creativa para ver las bendiciones del Señor y entonces métele gasolina, créelas con poder, apasiónate acerca de tus peticiones.

No le digas al Señor: ay ya Señor, bendíceme, haz esto y lo otro. Yo creo que a veces el Señor no nos bendice porque no somos lo suficientemente apasionados y aguerridos en nuestras peticiones y Dios a veces espera a que lleguemos a ese punto de hervor, al rojo vivo.

Cuando tú le pides a Dios es como Ana que quería un hijo y amargada fue al altar alli en el templo, y estaba tan metida en su oración que el sacerdote pensaba que estaba borracha, yo me imagino cómo ella estaba quizá en voz baja gesticulando y él la vió desde lejos y dijo: esta mujer está borracha en el santuario, se acercó a ella y le dijo: mujer digiere tu vino, como quien dice: no vengas aquí a la casa de Dios borracha y a beber.

Yo creo que así es como tenemos que desear las cosas y tenemos que pedirle al Señor: Señor dame pasión. Yo le estaba diciendo a los hermanos esta mañana que yo muchas veces en mi vida de oración le he estado pidiendo al Señor cosas ¿y sabe qué? si Dios no te contesta la primera vez sigue pidiendo, sigue pidiendo, y sigue como la viuda ante el juez injusto, sigue presentando tus peticiones como cuando te cepillas los dientes cada día dile: Señor te recuerdo esto, te recuerdo lo otro.

Hay oraciones que yo se las traigo al Señor semana tras semana, día tras día por años, ahora mismo por ejemplo hay peticiones que están delante de Dios por nuestra familia y otras cosas, y yo todos los días le digo: Señor, sorpréndenos con Tu bendición. Y yo cada vez que oro es como que añado una piedrecita a un montón hasta que el Señor me diga: ya, voy a responderle a este hombre, ya, me tienes harto (risas).

Y es así, en nuestra vida de oración tenemos que estarle trayendo nuestras peticiones y aumentando la pasión por dentro, aumentando la urgencia, y un día el Señor va a decir: Okay, ya.

Yo les decía que han habido veces en mi vida de oración que yo he sabido que he sabido que llegó mi oración al templo de Dios, que ya esa copa llegó a su momento en que va a rebosar porque llegaste a ese punto de definición, y ese “oh” a mí siempre me cautiva ese hecho, me recuerda de eso ¿no? veamos nuestras peticiones, presentémoslas con cuidado delante del Señor y cultivemos un sentido de urgencia y de necesidad, a Dios le encanta la gente desesperada.

Bartimeo, a riesgo de quedarme atorado en una sola cosa, Bartimeo: “Jesús hijo de David ten misericordia de mí” y la gente: no Bartimeo cállate que el Señor está ocupado, Jesús hijo de David ten misericordia de mí una y otra vez, el Señor no le contesta la primera vez, la segunda vez y en un momento se detiene y dice: Tráiganmelo acá, y le dice: ¿Qué es lo que tú quieres? Señor quiero ver, pues hágase conforme a tu necesidad, Bartimeo salió de allí cargando su lecho.

A Dios le gusta la gente desesperada: la mujer con el flujo de sangre, los hombres que rompieron el techo y bajaron al paralítico en medio de una sesión de enseñanza del Señor, ¿usted se imagina eso? el Señor ahí enseñando y de momento comienzan a caer pajitas del techo y se abre un hueco y entra el sol, y dos hombres allí: agárralo que va para abajo, no lo dejes caer, y el Señor dice que viendo la fe de ellos se conmovió y lo sanó no viendo la fe del hombre, pobre no tenía mucho que hacer excepto que lo bajaran, le pidieron permiso para hacerlo, pero el Señor vió la fe desesperada de ellos y dijo: Les tengo que responder.

El Señor ama a la gente así, la mujer con el flujo de sangre, la cirofenicia, you name them they are all over the place, gente desesperada que llegó a un punto de hervor y pasión. Jabes estaba harto de su vida y dijo: “Oh Señor”. Muy importante la pasión, la visualización, la insistencia.

Y entonces le pidió cuatro cosas más al Señor. Lo primero que le pidió: “si me dieras bendición” la palabra bendición fue como un resúmen de todo lo que él quería, oh Señor si Tú me dieras una Palabra que cubriera mi vida, si Tu bendición estuviera conmigo, si Tu buena palabra de shalom, de paz cayera sobre mi vida y me persiguiera.

Y yo pienso hermanos eso, pienso por ejemplo en el Salmo 23 donde el Salmista dice: “Ciertamente el bien y la misericordia de Jehová me seguirán todos los días de mi vida” ese bien y esa misericordia de Jehová que te sigue es la bendición que Jabes le pidió al Señor, y sabe que nosotros tenemos que entender eso, que si nosotros estamos en la Voluntad de Dios la bendición de Dios debe estar con nosotros hermanos.

Yo quiero que tú visualices tu vida como una vida que Dios se complace en bendecirla, si tú crees que Dios te ha llamado a bendición tú vas a vivir en bendición. Quizás vas a tener problemas y dificultades pero al final Dios siempre te dará victoria y saldrás mejor, y más fuerte de todas las situaciones que tú confrontes en tu vida porque todo va a resultar para bien, vas a pasar por un tiempo difícil pero Dios lo va a convertir en oro y vas a salir más fuerte, y también van a venir tiempos de refrigerio y de descanso en tu vida.

Pero recuerda que la bendición de Dios es la herencia de los hijos de Dios, y yo veo por ejemplo en el Salmo 3, porque muchos de nosotros no podemos creer estas cosas: ¡ah! esto es predicación de prosperidad y de una vez cerramos la mente a ello ¿no? el Salmo 1 como comienzan los Salmos: “Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos ni estuvo en camino de pecadores, ni en silla de escarnecedores se ha sentado sino que en la ley de Jehová está su delicia y en su ley medita de día y de noche” es la descripción de un hombre o de una mujer que camina en los caminos del Señor, porque eso es otra cosa: si tú estás viviendo como un perdido, un perverso, un sinvergüenza no esperes la bendición de Dios ¿no? ¡ah! soy cristiano.

El cristianismo no es un talismán que tú te lo pones, no, tienes que vivir en tu identidad de creyente. Ahora cuando tú amas a Dios, cuando tú eres ilustre como Jabes que tenía un corazón, un carácter formado por el crisol de la formación de Dios en su vida tú puedes ir delante de Dios y pedirle cosas grandes, y Dios te concede porque caminas.

Dice: “Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas que da su fruto en su tiempo, su hoja no cae y todo lo que hace prosperará” eso no lo digo yo tratando de sacarles dinero a ustedes eso lo dice el Señor, “y todo lo que hace prosperará.” Yo no sé ustedes hermanos pero todo lo que yo hago me bendice, me prospera y se toma más tiempo del que yo quiero pero lo puedo decir en mi vida y lo digo con temor y temblor, y con gratitud delante del Señor, yo no creo que he sido derrotado en una sola gran cosa que el Señor me diera para Su gloria, Dios ha sido fabulosamente generoso conmigo desde mi niñez en Alma Rosa por allá en República Dominicana y yo he vivido como un rey no por mí, sino por la misericordia y la bondad de Dios con Sus hijos.

Y por eso cuando yo les hablo a ustedes del Dios que levanta a Sus hijos yo les hablo de una profunda convicción porque he vivido eso y lo he visto en tantos de mis hermanos también, la bendición cuando tú agradas, cuando tu corazón es agradable a Dios Dios no se cansa de bendecirte, eso está en todas las páginas de la Biblia. Todo lo que hace prosperará y esa fue la bendición que Jabes le pidió al Señor.

En Deuteronomio 28 Dios le dice a Su pueblo que si caminan en Sus caminos, búsquelo ahí un momentito, esto es oro lo que les estoy dando así que no me mire el reloj, esto es importante porque si usted se va con eso y usted puede vivir en esta verdad yo le aseguro que usted va a vivir como un rey, dice en Deuteronomio 28: “Acontecerá que si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios para guardar y poner por obra todos Sus mandamientos que Yo te prescribo hoy también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra” le está diciendo eso a Israel, y a nosotros, “y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán.”

¿Sabes que las bendiciones de Dios te persiguen como un sabueso cuando tú estás en los caminos del Señor? ¿dónde está fulanito? y ahí van las bendiciones de Dios, ciertamente el bien y la misericordia me seguirán, es que te siguen, te persiguen, tú te quieres escapar de ellas pero te buscan y te encuentran y Dios te bendice aunque no quieras, te alcanzarán si oyeres la voz, “bendito serás tú en la ciudad, bendito en el campo, bendito el fruto de tu vientre, el fruto de tu tierra, tus bestias, tus vacas” ahí puso todo lo que se le ocurrió, “bendita será tu canasta, tu artesa de amasar” tu atm, tu computadora, “bendito serás en tu entrar y en tu salir”.

Léase Deuteronomio 28 y márquelo, esa es su herencia, esa es la herencia de los hijos del Señor, y también hay uno allí para las naciones que no caminan con Él. ¿Por qué está este mundo como está actualmente? porque las naciones se han olvidado del Señor más que nunca, se han apartado de Dios, es triste decirlo pero es así. Pero cuando una nación, un pueblo, una Iglesia, un hombre, una mujer, un matrimonio, un hogar se dedican a bendecir al Señor, servirlo, honrar Sus mandamientos la bendición de Dios lo persigue, espera esa bendición.

Si tú estás en Cristo, si estás haciendo la obra de Dios, si estás caminando, te estás purificando, estás organizando tus caminos aunque no sean perfectos la bendición del Señor estará contigo no importa que seas una madre soltera, un estudiante apenas comenzando la vida, un inmigrante indocumentado Dios bendice a Sus hijos aunque faraón no quiera bendecirlos, Dios los bendice, los prospera, les abre caminos.

Los hijos de Dios caminamos con esa bendición y eso lo que Jabes le pidió: Señor si Tu bendición estuviera conmigo, asegúrate de que tú seas un imán para la bendición del Señor. Lo segundo es que les dice: si ensancharas mi territorio, ahí la palabra ensanchar quiere decir expandir. Lo que le dice el Señor a esta mujer estéril en Isaías 54: Ensancha el sitio de tu tienda porque te vas a extender a la derecha y a la izquierda, y vas a conquistar naciones, y tus hijos van a restaurar las ciudades destruidas y desoladas, la consigna para los hijos de Dios es ensanchamiento, es crecimiento, es expansión.

Cuando Jabes le pide eso al Señor le está diciendo: Señor, prospérame, ancha mi espacio, yo quiero tener más influencia en el mundo, yo quiero tener más territorio en el cual moverme, aumenta mis dones, aumenta mi reputación, promuéveme para cosas mayores. Hermano: ¿le estás tú pidiendo al Señor que te promueva, que te lleve a un lugar más alto? yo creo que muchos cristianos no somos bendecidos más porque no ambicionamos más en el Señor.

Ah ya yo tengo mi apartamentito aquí rentado y está muy bonito, bueno ¿y qué, no te gustaría que Dios te diera una casa por ejemplo? ¿por qué no? amén está bien si tú quieres vivir en un apartamento, okay te graduaste de escuela superior pero ¿no te gustaría quizás tener un grado universitario, no? okay tus hijos se graduaron de high school y son buenos muchachos pero ¿no te gustaría que ellos estudiaran y fueran más?

La idea es: hermanos, vamos a pedirle al Señor que ensanche nuestro territorio, crean que Dios puede llevarlos a otro nivel. Hombres que nunca estudiaron, le decía a un hermano esta misma mañana que lo aplaudo y él conoce quién es, acaba de completar 40 días de oración y me lo dijo en un contexto muy apropiado porque me trajo una palabra que me bendijo y yo este hombre, así como me encanta ver esos varones de pelo en pecho buscando de Dios que a veces creen que solamente es para afeminados la Iglesia, a mí me encanta ver hombres masculinos enamorados de Cristo y buscando sacrificarse, y crecer en los caminos del Señor, y lo veo y yo digo: este hombre él quiere herencia en los caminos de Dios, no se está contentando simplemente con venir a calentar un banco, él quiere negocio con Dios, quiere revelación, quiere autoridad en el Reino de Dios, no hay nada de malo con eso ¿sabe? claro si usted lo quiere usar para la gloria de Dios.

Hay que ser ambiciosos en el Señor. Yo les decía acerca de todos estos pasajes en la Escritura que nos enseñan que hay que creerle a Dios para mayores cosas, hay que atreverse a pedir bendiciones, crea que hay ambiciones que Dios le va a promover y viva como que Dios tiene cosas mayores, prepárese para reinar en otras palabras.

Si usted supiera que un día le van a entregar la autoridad sobre una nación ¿usted no estaría educándose y preparándose, y adquiriendo conocimientos y autoridad, y carácter para ser un hombre de estado, una mujer de estado? claro que sí. Si usted supiera que Dios tiene grandes cosas ¿usted no estaría estudiando, leyendo, esforzándose, preparándose, poniéndole leña a ese fuego para que Dios ponga un fuego grande.

Yo acá estoy estudiando idiomas, estoy estudiando música, estoy leyendo todo lo que me viene a la mano, todo mi tiempo yo lo invierto en enriquecer mi persona porque yo quiero que Dios tenga más para hacer más a través de mí. Viva su vida con propósito, ensanche el territorio de su vida, viva como que Dios tiene grandes cosas y ambiciones, viva como una persona que va a ser promovida a niveles más amplios de influencia; si ensancharas mi territorio, ensancha el sitio de mi tienda, las cortinas de mi tienda sean extendidas, alarga las cortinas de tu tienda. Vive de esa manera y cree que Dios tiene grande promoción para tu vida.

Ensancha mi territorio, bendíceme, y tercero: “Que Tu mano esté conmigo” si Tu Mano caminara conmigo. ¿Qué quiere decir la Mano de Dios? para mí la Mano de Dios es el Poder de Dios. Cuando yo veo mano en mi mente veo la Mano poderosa de Dios interviniendo y así lo ve la Escritura.

Cuando Dios saca a los hebreos de Egipto después de esa gran lucha con faraón ¿cómo los sacó dice? con mano fuerte y brazo extendido, es decir el Poder de Dios, si Tu Mano estuviera conmigo para pelear conmigo e intervenir a mi favor, se refiere al Poder, a la unción de Dios que requerimos para emprender cosas, el respaldo y la autoridad divina, necesitamos que Dios nos acompañe en nuestras empresas y proyectos, que Su Poder esté con nosotros en todo.

Los hijos de Dios tenemos que ser gente con apetito de poder, eso es lo que yo creo que caracteriza a la mentalidad pentecostal, es el Poder de Dios, la visitación del Poder de Dios. La persona con actitud pentecostal sabe que necesita los dones del Espíritu Santo, necesita la unción del Espíritu Santo, necesita el bautismo del Espíritu Santo porque no es con espada ni con ejércitos sino con el santo Espíritu de Dios, necesitamos dunamis, necesitamos exusia, Poder de Dios, autoridad de Dios, poder sobrenatural, sabiduría divina, revelación, autoridad cuando hablamos.

Pablo oraba a su gente y decía: oren para que yo pueda hablar la Palabra de Dios con poder, con denuedo y tú tienes que pedirle al Señor: Señor ponme el motor de un tanque de guerra dentro de mí, quítame ese motorcito de volkswagen y ponme un motor de tanque de guerra por dentro para que nosotros podamos movernos con ese Poder de Dios, y ese poder viene a través del bautismo del Espíritu Santo, la oración, la santificación, el servicio al Señor, la actitud de guerra, tú tienes el Poder de Dios contigo. Si tú eres un hijo de Dios el poder va contigo, emprende cosas creyendo que ese poder va contigo.

Busca la llenura del Espíritu Santo, consagra tu vida y muévete en esa autoridad sobrenatural, en esa expectativa. No es solamente con buenas intenciones venir a la Iglesia los domingos, allí una cosita pasar por agua, dos minutos allí y ya estás cansado, no, vive una vida de guerrero, vive una vida de buscar esa llenura del Espíritu Santo porque necesitas el Poder de Dios, la Mano de Dios en todo lo que emprendas, no vayas afuera sin contar con ese Poder de Dios ¿no? no solicites a un trabajo, no comiences a un año escolar, no tomes un exámen sin antes decir: Señor dame Tu sabiduría, dame Tu llenura, dame Tu autoridad, tenemos que vivir en esa manera.

Y lo último y voy a pedirle a Omar que pase por acá un momentito, lo último que Jabes le pide, entonces en eso: “Oh”, pasión, creatividad, la mano del Señor, la expansión de tu territorio, y lo último que dice: Oh Señor, caramba, si Tú me libraras del mal además de todas estas cosas que te estoy pidiendo.

Mire qué específico que fue Jabes, le pidió cosas primero bien positivas, bien bonitas pero entonces pensó en algo también: mi vida ha sido marcada por el dolor, el sufrimiento, los ataques del diablo, la negatividad, la tragedia, la depresión, oh Señor si Tú me libraras del mal para que no me haga daño.

Y yo decía que la vez pasada que hablábamos de Isaías 54 les hablaba de las estacas que son como elementos de defensa, y les decía que muchas veces las bendiciones de Dios viene pero a veces cuando nuestra vida es anchada, cuando alcanzamos más espacio, cuando Dios nos bendice por ejemplo con un mejor trabajo o con hijos ¿qué pasa? las demandas son mayores sobre nuestra vida y los peligros también.

¿Cuántas iglesias después de alcanzar cierto tamaño, cierta prominencia se vienen abajo por un escándalo, una situación terrible, algo que sucedió, una división, con las bendiciones viene también. Yo les decía el domingo antepasado que por ejemplo en este ministerio en inglés que estamos comenzando van a venir y comienzan a venir personas con ciertos status y cierta educación. Nosotros los latinos tenemos nuestra malignidad entiéndame bien.

Una de las cosas: yo me siento muy cómodo ya predicando entre mis hermanos hispanos porque somos hispanos, nos conocemos y está bien, ahora cuando se ancha la cosa y vienen otras culturas, y vienen personas de cierto nivel educativo y tengo que elegir mis palabras muy cuidadosamente aquí con lo que estoy diciendo, es un camino minado, pero cuando la vida de una Iglesia se pone más compleja porque Dios la ha bendecido y le ha dado una voz más abarcadora en eso vienen también elementos de más cuidado, viene gente que hay que hablarle entonces con más respeto y más cuidado porque se sienten que son de más fuerza y más autoridad, tienen una capacidad crítica mayor, están acostumbrados a ejercer autoridad en el mundo y cuando viene un pastorcito aquí latino a hablarle las cosas se sienten ofendidos a veces, yo les estoy hablando aquí con mi alma en la mano.

Yo les decía que eso puede pasar en una Iglesia cuando Dios la bendice, necesita fortalecer estacas. Yo le decía al Señor: Señor, fortalece mi corazón y hazlo como el corazón de un león para que yo no me deje intimidar por nadie que pase por esa puerta, y ese púlpito yo lo considero una embajada del Reino de Dios.

¿Sabe que las embajadas son un territorio? es inviolable. La embajada de Estados Unidos en Rusia es territorio de Estados Unidos. Para mí este púlpito no tiene nada que ver con el siglo XXI ni con la cultura de Boston, esta ciudad tan ilustre y tan intelectualmente desarrollada no tiene nada que ver con los avances ni con toda la sofisticación de la cultura moderna, este púlpito áspero como es pertenece al siglo primero, es más, hasta antes, a la antigüedad del Antiguo Testamento, y ninguna influencia de este mundo.

Yo tengo que fortalecer mi corazón para no convertirme en una persona políticamente correcta que sólo diga aquéllas cosas que me dan permiso para decir la gente allá afuera ni ustedes hermanos ¿saben? Yo les voy a hablar a ustedes en maneras que muchos de ustedes salgan de aquí echando pestes de mí y molestos pero que yo espero que el Señor les bendiga al final y bajen la cabeza. El rol de un Pastor es predicar la Verdad de Dios como mejor puede y no estar pensando en quién está sentado dónde sino si es la Palabra del Señor tiene que anunciarla con Poder.

Yo creo que muchas veces los Pastores cuando Dios nos bendice y nos promueve, y nos da un público mucho más selecto comenzamos a cortar una cantidad de cosas que no suenan bien ante ese público selecto y ahí comienza entonces la maldición a manifestarse, y ese es el peligro, esa es la seducción demoníaca que entra a una Iglesia y dice: ¿sabes qué? yo te puedo dar más gente así, yo podría darte una Iglesia de gente que den $10.000 a la semana de diezmo, gloria a Dios si quieren venir, amén, sí yo te puedo dar gente que son profesores de la universidad y gente, pero el mensaje bájalo un poquito, no seas tan áspero, no seas tan abrupto.

Es como le dijo Satanás a Jesús: yo te puedo dar este mundo si Tú postrado me adorares y esa seducción viene, vendrá a tu vida en diferentes maneras. Dios te dará una promoción en tu trabajo, el jefe te dirá: mira ahora eres manager de toda esta compañía o de este grupo de 100 personas pero tienes que trabajarme los domingos, en las noches, no hay horas, tu alma me pertenece a mí, te voy a pagar $150.000 al año pero tu familia y todo eso en segundo lugar, y usted va a tener que decidir si usted va a venderle su alma al diablo por esos $150.000 o si hay otras cosas más importantes, si usted quiere tener tiempo con sus hijos, con su esposa, con la Palabra de Dios, descansar un poco, tener un tiempo de refrigerio.

Es decir esa es la protección que uno necesita, las estacas, la guerra espiritual. Si Dios te bendice con Su Mano con un territorio ensanchado, con Su bendición persiguiéndote pídele también que cubra tus espaldas y que te libre de los ataques del enemigo que vendrán, eso se llama guerra espiritual; Oh Señor si me libraras del mal para que no me haga daño.

En el hebreo original la idea es del dolor, lea la traducción en inglés por ejemplo, si me libraras del dolor, en otras palabras Jabes se estaba recordando del dolor de su vida. Mira Señor: si Tú ya me quitaras a este mono de la espalda que me ha estado atacando para que no me haga más daño, pero la Escritura lo pone en términos del mal.

Estamos en un tiempo de la historia en que el mal como nunca ha sido soltado sobre la humanidad, el mal en muchas diferentes formas: experimentaciones de todo tipo, cosas genéticas, guerras, terrorismo, divisiones, seducción intelectual, pornografía y una cantidad de cosas, el internet con todas sus cosas buenísimas y todos sus peligros horribles que hay, rebeldía de los hijos contra los padres, divorcios, drogadicción, violencia en las calles, desorientación humana, todas esas cosas son viruses que se han desatado sobre el hombre en el siglo XXI como nunca antes en la historia de la humanidad y sobre las naciones también.

Quién pensaría: esa gente que fue asesinada en Francia, esta gente está caminando por esas calles celebrando el 14 de julio, un gran día de fiesta para la nación francesa, me imagino que andaban con su cesto de picnic anticipando un tiempo precioso en la playa, en esa ciudad hermosa y un camión de 20 toneladas, un monstruo mecánico lleno de maquinarias de refrigeración para hacerlo más pesado y dañino sube a la acera y comienza simplemente a abrumar, a destruir, ruedas sobre carne como si fueran pedazos de carne y vuelan los cuerpos por donde quiera: niñitos, ancianos, hombres, mujeres bien elegantes, el mal, ciego, el mal rebosando muerte y destrucción, el mal neutral sin odio, simplemente, ese camión no odia, el que estaba adentro odiaba pero el mal, el mal es ciego, el mal te puede visitar en cualquier momento. Yo creo que como nunca antes en la historia los hijos de Dios tenemos que cubrirnos con la sangre del Hijo de Dios cada vez que salimos a la calle.

Hermano: son tiempos para como nunca ejercer guerra espiritual en nuestras vidas, orar desesperadamente por nuestros hijos, ahora nuestros hijos entran a la escuela y usted no sabe con qué porquería los van a programar esos maestros. Esos sistemas hoy en día educativos desgraciadamente hacen mucho bien, no estoy hablando en general pero wow, con cuánta malicia están programando a nuestros niños y no nos dejan ni siquiera a nosotros con qué los van a educar a nuestros hijos, uno como padre va a la escuela y le dicen: lo sentimos mucho, lo despiden; ni siquiera dicen lo sentimos mucho le dicen: váyase de aquí, el perverso es usted por no querer que le enseñen perversión, imagínese el mundo en que vivimos, y nosotros tenemos que cubrir a nuestros hijos con la sangre de Jesús como nunca antes.

Nuestros matrimonios: usted abre el internet hoy en día y usted no sabe si le va a salir la foto de una mujer allí desnuda o un acto perverso que lo va a agarrar y lo va a convertir en un adicto a la pornografía como le ha pasado a tanta gente, usted respira el aire y usted no sabe lo que está ingiriendo hermano. Caminamos en un mundo dañado y como nunca tenemos que pedirle: Señor líbrame del mal para que no me haga daño.

Estos son tiempos en que tenemos que vivir la vida cristiana con extremada seriedad, yo creo que el tiempo de jugar a la Iglesia ya pasó hermano, usted o se declara un siervo, una sierva de Dios o mejor quédese en la casa porque los peligros son demasiado grandes, estamos en guerra, son tiempos para consagración, son tiempos para pedirle: Señor ten misericordia de mí, purifícame, santifícame para que el mal no tenga dónde meterse en mi vida y hacer daño, guárdanos de la violencia.

El terrorismo será peor cada vez hermanos, no quiero meterle miedo, pero usted cada vez que vaya a la Boylston Street o al Boston Common o a una reunión pública usted no sabe lo que puede pasar, asegúrese de usted estar bien con Cristo. Si tú te vas en ese momento ¿te vas al cielo? ¿has dejado una herencia en tus hijos, la Palabra de Dios metida en ellos?

Es tiempo de caminar ya seriamente, los tiempos son malos, se necesita gente clara. Por eso el rol de los Pastores es meterle sentido de urgencia a la gente, están viviendo como conejillos inocentes caminando en una selva de bestias salvajes queriendo destruir, la gente sale a la vida sin la protección que necesitan para ellos ni el poder que sólo Cristo puede traer a la vida de los hombres y las mujeres, líbranos del mal Señor, guárdanos, ayúdanos a vivir en el Poder de Tu Espíritu y aprender cómo hacer guerra contra los demonios que quieren hacer daño, que quieren hacer estragos en nuestras vidas.

Jabes pidió buenas cosas y Dios se las concedió. Dios le dijo: Jabes, tu corazón me agrada, tu actitud me agrada, tu oración me agrada, sea hecho como tú me pediste, el destino de Jabes fue cambiado completamente. Yo me lo imagino ¿no? me hubiera gustado ver el resto de la historia, un día le voy a pedir al Señor el video ya de Jabes, voy a tener muchos años para verlo todo, y yo creo que Jabes cambió, su destino fue poco a poco canalizado y dirigido, y todo lo que él le pidió al Señor, bendición, ensanchamiento de territorio, la poderosa Mano de Dios defendiéndolo y guiándolo, y protección del mal, todo le fue concedido, yo creo que ese es el drama de tu vida también, de mi vida, esa es la herencia de los hijos de Dios.

Los dones deben usarse con un corazón pastoral

TRANSCRIPT

Quiero invitarlos a ir conmigo a Primera de Corintios en el capítulo 14, es un tema interesante que quiero tratar con ustedes. A la luz de nuestro deseo de ser una iglesia efectiva en alcanzar almas y retenerlas y ser una iglesia que cuando la gente entra y adora con nosotros se sienta acogida, se sienta bien, se sienta en armonía, se sienta que están en un lugar seguro, un lugar donde pueden experimentar la paz del Señor. Porque de nada nos sirve que la gente venga y no encuentre el espacio que necesita para sus necesidades, cuando vienen a veces afanados, tristes, ansiosos, cuando vienen confundidos, cuando vienen heridos de fuera, cuando vienen con alguna situación que les aqueja, es importante que estén en un lugar donde puedan encontrar ese descanso y esa armonía que están buscando del Señor.

Y por eso es tan importante. El evangelismo incluye no solamente traer a la gente a la iglesia, sino también ofrecerles ese ambiente seguro, ese ambiente de paz, ese ambiente donde puedan permanecer y estar a gusto. El Apóstol Pablo era no solamente un teólogo, escribió muchísimo pasajes de la escritura, dos terceras partes del Nuevo Testamento lo escribió él, pero también era un plantador de iglesias, era un evangelista, y era pastor también porque tenía un corazón pastoral y le escribió a los pastores y a las congregaciones que él ayudó a plantar, acerco de cómo debían conducirse, cómo debían regular su vida diaria, su vida cotidiana como congregaciones. Y escribió principios porque en esos tiempos no tenían lo que nosotros tenemos, esta escritura ya escrita, ya codificada, ya bien ordenada. No sabían cómo conducirse porque apenas estaba comenzando el crecimiento del Evangelio. Era el primer siglo y todavía todo estaba por establecerse.

Y entonces él escribió cartas que luego fueron ensambladas y reunidas en lo que hoy llamamos la Biblia, pero en ese tiempo eran simplemente los consejos de un pastor escribiéndole a sus congregaciones que él había ayudado a plantar, a veces contestando preguntas que le hacían. Pablo, tenemos este problema en la iglesia, ¿qué hacemos? Tenemos tal situación, está causando división, ¿qué hacemos? Y él también preventivamente escribía muchos principios que luego evidentemente el Espíritu Santo lo estaba dirigiendo a hacer esas cosas, pero luego esos principios habían de ser colectados en este documento que se llama la Biblia, que nos ayuda a gobernarnos y a dirigir nuestra vida congregacional.

Eso a manera de preludio. Déjenme ir con ustedes rápidamente, el versículo 20. Primera de Corintios, capítulo 14, versículo 20. Dice allí y nos dice a nosotros:

“Hermanos de la congregación León de Judá, no seáis niños en el modo de pensar sino sed niños más bien en la malicia. – hay gente que es muy adulta en la malicia y muy niños en el amor y en la gracia. – dice, no sed niños en el modo de pensar, es decir en su conducta, en su forma de ver las cosas, en su forma de razonar, sino si van a ser niños sean niños en la malicia, pero maduros en el modo de pensar, porque en la ley está escrito en otras lenguas y con otros labios hablaré a este pueblo y ni aún así me oirán, dice el Señor.

Es un pasaje del Antiguo Testamento que él está citando, eso de otras lenguas y otros labios hablaré al pueblo de isarael. Entonces él dice, “Así que la profecía son por señal no a los incrédulos sino a los creyentes, aquí él está refiriendo.” Aquí él se está refiriendo a los diferentes dones del Espíritu Santo de los cuales él ya ha hablado en el capítulo 12 de esta misma carta, dones de lengua, profecía, dones de ciencias, sabiduría, sanidad, señales y prodigios, todos estos diferentes dones e incluye también las lenguas.

Él está tratando de enseñar cuáles son los propósitos de cada uno de estos dones dentro de la vida de una congregación. “Si por ejemplo, toda la iglesia se reúne en un solo lugar, como estamos nosotros en esta mañana, y todos hablan en lenguas y entran indoctos o incrédulos – ¿a qué se refiere? A gente… indocto quiere decir que no están instruidos y no son conocedores de la palabra de Dios ni de los principios de la vida cristiana. Son completamente no instruidos en la vida cristiana.

“… si entran indoctos o incrédulos – puede que entre también gente que no conoce a Dios y simplemente son totalmente foráneos a los principios del Evangelio – si entra ese tipo de gente a la iglesia y los ven a ustedes hablando en lenguas, todo el mundo a la misma vez y haciendo ruido sin sentido, como puede pasar a veces… yo no sé si usted alguna vez ha ido a una congregación donde es un sal para fuera, todo el mundo está allí teniendo su pequeña fiesta y todo el mundo está hablando y está moviéndose y gritando y todo eso, y es una cacofonía.

Y entonces si entra alguien en ese momento que es un indocto, es un incrédulo, es una persona tímida, es una persona que no entiende lo que está pasando, “¿no dirán que están locos?” lo está diciendo en una forma como que tengan cuidado, la idea es que nosotros no queremos que la gente venga y piensen que somos una cantidad de locos. Gracias a Dios que eso lo dijo el Apóstol Pablo y no yo porque si lo digo yo, dirían el pastor está dañando el espíritu, están constriñendo el espíritu, pero lo dice el gran Apóstol Pablo que conocía de todos los dones.

“¿No dirán que están locos? Pero si todos profetizan y entra algún incrédulo o indocto por todos es convencido, por todos es juzgados.”

Ahora cuando dice, pero si todos profetizan, usted verá más adelante que él dice, si profetizan pero tiene que ser uno por uno. Vamos a saltar eso un momentito para que usted pueda ver, porque no se está contradiciendo. Mire el principio que él establece en el versículo 31, dice:

“Porque podéis profetizar todos uno por uno para todos aprendan y todos sean exhortados.” Pero alguien dirá, ah, pero pastor cuando yo quiero profetizar es que no me puedo aguantar, la boca se me salen las palabras, uno no puede controlar a Dios, uno no puede controlar el espíritu. Y él dice, “Y los espíritus de los profetas están sujetos a los profetas.” En otras palabras, tu sí puedes controlar. No me digas que te salió la palabra o que algo pasó.

Puede que cuando una persona no tiene experiencia en una ocasión cuando por primera vez experimenta una llenura del espíritu, como no tiene sabiduría puede que en ese momento no tenga control, pero lo que Pablo está sugiriendo es que cuando usted ya tiene cierta experiencia en los asuntos del espíritu, usted sí tiene control, usted puede esperar para hablar, usted puede meditar cuál es el momento más apropiado, usted puede saber si está en un ambiente donde lo que usted diga va a provocar escándalo y confusión o va a ser de bendición. Todas esas cosas la persona que está profetizando debe considerarlas.

No es cuestión de que ay, el espíritu me dijo que esa persona va a tener un accidente cuando salga de aquí y se va a matar él y sus hijos así que se lo voy a decir inmediatamente en público. Hermano, así dice el Señor, cuando salgas de la iglesia te vas a encontrar un camión y te va a arrollar y va… Señor reprenda al diablo! Hay que tener cuidado con esas cosas. Hay que meditar, hay que pensar, hay que sopesar lo que uno está diciendo y entonces uno puede…

Es decir que siempre miren ese principio aquí de orden que él está tratando de establecer. Entonces, dice, “Pero si todos profetizan y entra algún incrédulo o indocto por todos es convencido, por todos es juzgados, lo oculto de su corazón se hace manifiesto y así postrándose sobre el rostro adorará a Dios, declarando que verdaderamente Dios está entre vosotros.”

“¿Qué hay pues, hermanos? – Qué lindo este pasaje. – Cuando os reunís, como en una reunión de esta mañana, cada uno de vosotros tiene salmo, tiene doctrina, tiene lengua, tiene revelación tiene interpretación, hágase todo para edificación.”

Ahora, note algo aquí también. A veces yo me adelanto un poquito al orden del sermón porque no quiero perder la oportunidad cuando llegue el momento del texto. Una cosa que hay que aclarar es que Pablo le está escribiendo a una iglesia, – por eso se llama iglesia primitiva, eran los comienzos mismos de la iglesia. En realidad no había tal como iglesias todavía. el concepto de iglesia como esta que existe aquí, como una sinagoga. Lo que los judíos tenían eran sinagogas, ellos entendían eso. La iglesia fue como una extensión quizás del concepto de una sinagoga o de un templo greco romano.

Pero, ¿cómo se reunían los primeros cristianos en las primeras décadas del Evangelio? ¿Dónde se reunían? En las casas. No había templos, no había santuarios. Recuerden, no había Biblia, un libro del Antiguo Testamento costaba el salario de todo un año de un obrero. No había nada escrito, no había textos que pudieran guiar la adoración en esos tiempos. No había ni siquiera pastores en muchos casos porque todavía ese concepto no se había desarrollado, ese género de un pastor que dirigiera. Poco a poco vemos que según va la iglesia avanzando esas cosas… la iglesia se va institucionalizando, va estableciendo un orden, protocolos, una forma de adorar.

No había ciertamente un piano eléctrico como este tan bien tocado por el hermano Omar Medina o diferentes instrumentos. No había un orden de servicios. No había coros. Entonces los hermanos se reunían y era… Dios le hablaba al pueblo y si había 10 hermanos, 15 hermanos reunidos en una casa uno tenía una palabra de edificación, “hermanos, tuve un sueño, el Señor creo que me habló acerca de esto, esto y lo otro.” Había testimonios, había salmo, uno tenía un himno. Yo quiero cantar algo para adorar el Señor.

El servicio era algo bien informal y gloria a Dios, dirigido por el Espíritu Santo. Yo creo que a veces nos hemos ido al otro extremo, donde hay iglesias que tienen tanto orden que es una camisa de fuerza más bien que limita al Espíritu Santo. Porque los extremos siempre son malos. En esos tiempos estos hermanos bien sencillos se reunían para adorar al Señor, y uno adoraba una cosa, otro decía otra, uno cantaba un himno, otro hablaba una palabra profética y así salían edificados y bendecidos de su reunión.

Ahora, hoy en día, las reuniones de la iglesia son públicas, son grandes congregaciones como la nuestra y no son gente de un solo pueblito metido en una montaña, son gente que vienen de todos los países de la tierra, son personas de diferentes nacionalidades, diferente culturas, diferentes niveles socio económicos, diferentes niveles de educación, inclusive diferentes trasfondos religiosos y diferentes trasfondos denominacionales. Algunos vienen de trasfondos presbiterianos.

Por ejemplo, ayer la hermana Delia, estuvimos en una reunión con ella y ella me hablaba de que ella asistía antes a una iglesia presbiteriana, antes de venir a León de Judá. Y en la iglesia presbiteriana usted sabe que todo es bien ordenado, gloria a Dios, lo decimos con mucho respeto, hay liturgia, hay repeticiones, hay cosas bien simbólicas. Y ella viene de ese trasfondo y entonces entró en una iglesia como la nuestra que es una iglesia más pentecostal, carismática, pero hay iglesias que todavía son más pentecostales o más ‘avivadas’ o cómo se llame, más espontáneas o lo que sea. Y aquí en nuestra iglesia hay gente que viene de todos esos trasfondos.

¿hay alguien que venga de un trasfondo metodista o que haya asistido por un tiempo a una iglesia metodista? Aquí tenemos a alguien, por ejemplo. ¿De un trasfondo bautista? Tenemos bautistas por acá. ¿Presbiterianos por casualidad alguien? Guau! es decir, que yo estoy seguro de que si yo pregunto va a haber alguien… ¿Cuántos asistieron a la iglesia católica alguna vez en su vida? Todos los que están aquí. Entonces, tenemos gente de diferentes trasfondos y hemos bebido esa leche y venimos y aunque entramos en la unidad de la iglesia León de Judá pero todavía tenemos algunos principios que recordamos de nuestros pasados y como que quisiéramos encontrar ese lugar perfecto donde… un poquito de allá, un poquito de acá, y un poquito de todo.

Pero recuerde que si hay un poquito de todo, eso quiere decir que no puede haber de todos para todos. Tiene que haber una selección de cosas, por eso a veces no vamos a poder ser agradados en todo lo que nosotros esperamos en un servicio. Pero en esos tiempos no, todos eran judíos, convertidos, o todos eran griegos o eran de un pueblito, de una montaña por allá y entonces podía haber esa mayor libertad, pero en un ambiente público como este, donde no solamente nos están viendo a nosotros aquí unos a otros, nos están mirando a través del internet, en España, en Italia, en Buenos Aires, en Guatemala, imagínese, es todavía más público este tipo de servicio, una pantalla de 2 dimensiones solamente, que no es lo mismo que ver a la persona en 3 dimensiones como los vemos aquí.

Entonces, todas estas cosas son… él está hablando de esos ambientes que son bien homogéneos. Ahora, si tiene lengua, revelación, hágase todo para edificación, versículo 26. Digan todos conmigo, edificación. ¿Qué quiere decir edificación? Quiere decir para fortalecimiento de las personas, de su fe, para bendición de ellos, para instrucción de ellos, para que conozcan más de la palabra de Dios, para que se sientan más seguros en su fe, para que reciban algo que sea de provecho para sus vidas. Es decir, para que sean edificados más, como una construcción que va subiendo poco a poco.

Cada vez que venimos a la iglesia venimos para eso, para ser edificados entre otras cosas, también evidentemente para adorar a Dios, primeramente, pero también para salir más fuertes que cuando entramos. Y ese debe ser el principio número 1 que debe gobernar todo lo que se da dentro de la iglesia. Cuando tu hagas algo en la iglesia, y me incluyo a mí mismo, todos nos tenemos que preguntar ¿lo que yo estoy haciendo en este momento está resultando en edificación para los que son objeto de lo que estoy haciendo o los que están presenciando y viendo y observando lo que yo estoy haciendo?

Yo creo que si nosotros nos hiciéramos esa pregunta pastoralmente, ¿Cuántos saben que cada uno de nosotros somos pastores unos de los otros? Es como cuando Caín le pregunta a Dios, ¿seré yo acaso guarda de mi hermano? Sí, en la iglesia cada uno de nosotros es guarda de su hermano. Somos pastores unos de los otros. Nosotros tenemos que cuidarnos unos a otros y atendernos unos a otros y tener cuenta de qué está sintiendo mi hermano cuando yo estoy haciendo algo. A veces puede ser algo supuestamente en el espíritu, puede que sí, que sea en el espíritu, pero yo me tengo que preguntar en ese momento cuando yo estoy haciendo algo en el espíritu para glorificar a Dios, que yo creo, estoy convencido de que es bueno y es importante, cómo está afectando eso a mi hermano, a mi hermana? ¿Está siendo de edificación? ¿Está siendo de bendición? ¿o está siendo piedra de tropiezo o de escándalo o de extrañeza? ¿Le está quitando el gusto de estar en ese momento en la adoración?

Y eso tenemos que hacer la pregunta tanto acerca de un individuo a quién le estamos ministrando quizás al frente, o en términos de toda la congregación que nos está viendo, o quizás en términos de los que nos están viendo a través del internet. Ahora, entiéndame, que todo tiene su límite. No es que nosotros vivamos continuamente solamente haciendo las cosas que son universalmente aceptables para todo el mundo, porque entonces no se haría nada. Pero sí hay que tener un cierto grado de cuidado acerca de que ningún hombre es una isla, como dice por ahí un dicho bien famoso. Somos un continente, somos todos parte uno de los otros. Somos un cuerpo y entonces cuando yo estoy en mi tiempo de adoración y estoy metido en la presencia del Señor, yo tengo que reservar un poco de lucidez mental para observarme a mí mismo o como otros me ven y para tratar de preguntarme cómo está afectando lo que yo estoy haciendo el sentir y el estado espiritual de los demás.

Pregunto, ¿están conmigo hasta aquí o los he perdido en algún momento? ¿Me están siguiendo? Porque estas cosas yo sé que son un poquito delicadas. Y les voy a decir por qué después estamos predicando esto, pero me he adelantado y decidido coger el arroz y los frijoles y mezclarlo todo de una vez aquí.

Entonces, dice, “si habla uno en alguna lengua extraña sea esto por 2 ó a los más 3…” Lengua extraña, ¿qué quiere decir? una lengua que otros no pueden conocer, que otros no interpretan, es una lengua espiritual, está hablando a veces… si yo hablase lenguas humanas y angélicas, dice el Apóstol Pablo, una lengua que otros no entienden.

Si yo hablo en lengua extraña, sea esto por 2 ó a lo más 3 y – digan todos – por turno, quiere decir eso en secuencia, uno primero, otro después. Y eso también hay matices que se pueden añadir. “… y uno interprete – eso es algo también… hoy en día no se usa tanto en las congregaciones pentecostales esta idea de interpretación y muchos de estos términos requerirían un sermón completo solamente en ellos. Pero la idea es que si alguien por ejemplo, se levanta, digamos no como ahora, porque ahora yo estoy predicando y quién sabe puede que en un momento dado y a veces se puede dar pero es muy contado el número de ocasiones en que cuando un pastor está predicando alguien se ponga de pie y sea legítimo dar una profecía porque de nuevo dice por turnos.

Pero puede que haya una ocasión que así sea. Lo que Pablo se refiere es que cuando hay lenguas, cuando está hablándose en lenguas, en una manera como que detiene el curso de las cosas y comanda la atención de todo el mundo a esa persona que está hablando en lenguas, que tiene que haber interpretación de esa lengua.

Ahora, eso no quiere decir que si usted está en tiempo de adoración y Laura está en su cima de adoración, usted pueda estar tranquilo hablando en lenguas, suave, adorando al Señor, de manera que no interrumpa a su hermano, su hermana, usted puede hacer eso. y lo pueden hacer muchos a la misma vez, puede haber un murmullo muy lindo, o puede haber en ocasiones, por ejemplo, lo que se llama cántico nuevo. Qué lindo cuando una congregación adora el cántico nuevo y a veces están adorando en lenguas diferentes y alguno está cantando, otro está hablando en lenguas bajito. En ese caso lo que se oye más bien es como una unanimidad, un murmullo que nadie en particular está en ese momento tomando la atención. En ese caso sí yo creo que se puede hablar en lenguas hasta un poquito más alto.

Lo que Pablo está diciendo es que cuando hay como un discurso en lenguas se habla así específicamente o una persona está hablando lo suficientemente alto como para que todos lo escuchen, en ese caso, debe asumirse que tiene que haber interpretación. Y esa persona que está hablando en lenguas muchas veces debe pedirle, dice el Apóstol Pablo, al Señor la interpretación. Por qué? Porque es importante que sepan lo que se está diciendo.

Dice aquí, y uno interpreta y si no hay intérprete calle en la iglesia y hable para sí mismo. Quiere decir en una forma más baja y para Dios. Asimismo los profetas hablen dos o tres y los demás juzguen. Qué quiere decir juzguen? Quiere decir determinen la validez, la legitimidad y el carácter bíblico de lo que esa persona está diciendo. Porque si alguien dice, he aquí, hijos míos, así dice el Señor, el pastor Miranda tiene que irse de la iglesia porque ya llegó su tiempo.

Yo voy a juzgar inmediatamente si esa persona está diciendo la verdad o no. hay cosas, hijo mío, así te dice el Señor, te tienes que casar con fulanito porque es vaso escogido por Dios para ti desde la fundación de los tiempos. Hay que tener cuidado con esas cosa. Hay que juzgar la legitimidad, hay que determinar si lo que esa persona está diciendo…

No hay nada de malo con que si una persona le dice, mire, el Señor me dijo que te vas a morir a los 35 años, usted le diga, hermano, déjame orar, voy a pensarlo bien, voy a meditarlos y si es de Dios yo le voy a creer. Hay que juzgar, hay que determinar la validez, la legitimidad de lo que la persona… eso no quiere decir que usted sea incrédulo. Es que hoy en día hay tanta… de cada 100 profecías yo creo que 3 ó 4 ó 5 muchas veces son del Señor y si eso le escandaliza a usted, lo lamento pero esa es la experiencia que yo he visto. No todo lo que sale de la boca de la gente, sobre todo en estos tiempos en que vivimos, es verdaderamente del Señor. Ofendí a alguien? No veo que nadie se paró de su asiento, así que parece que estoy bien hasta aquí.

Sí, hay que juzgar, hay que determinar lo que es de Dios y lo que no es de Dios. Yo digo que a veces las profecías son como en aquellos tiempos, como en los años 60, 70, yo no estaba nacido todavía pero me dicen que los meteorólogos decían en los años 60 cuando no había radares y no había todas estas maquinarias que hoy en día hay, mañana va a llover y hacía un sol quemaba a la gente. Se piensa que mañana va a haber sol y la gente hacía su fiesta afuera y le caía un chumbazo de agua. Hoy en día los meteorólogos son mucho más precisos que en aquellos tiempos.

Yo creo que hoy en día, no es porque Dios no hable claro, es porque muchas veces no hay nivel de revelación que había en otros tiempos por diferentes razones. Pero hay que tener cuidado porque la verdad es que cuando uno ve cuál es el resultado muchas veces de la palabra profética uno dice, guau, verdaderamente no hay la exactitud y es que hay que ser claro, o sí o no, no se puede tapar el sol con un dedo. Nosotros queremos ver la manifestación de Dios y a veces queremos tanto que oscurecemos el hecho de que no hay…

Dios no necesita excusas. Yo no tengo que maquillar a Dios. Él es perfecto. Yo no tengo que defenderlo. Si hay palabra, gloria a Dios, si no la hay, amén, él es Dios y sigue siendo Dios. Y hay que tener cuidado con estas cosas por eso hay que juzgar.

Aún en esos tiempos, estamos hablando del primer siglo y ya Pablo en esas décadas solamente de experiencia pastoral, ya había visto todo lo que se ve hoy en día en las iglesias, porque él escribió esto precisamente para dirigirse a los excesos y los abusos que ya existían en el primer siglo, hace 2000 años, ya estas cosas existían y también existen en este tiempo por eso es que los pastores y los instructores de la palabra de Dios que Dios ha puesto a presidir en las iglesias tenemos que ejercer ese mismo tipo de integridad y de orden en la conducta de las cosas de Dios.

Asimismo los profetas hablen dos o tres, los demás juzguen y si algo le fuera revelado a otro que estuviera sentado, calle el primero porque podéis profetizar todos uno por uno para que todos aprendan y todos sean exhortados. Y los espíritus de los profetas están sujetos a los profetas. Es decir, no me diga nadie, no, Pablo, es que no me puedo aguantar, usted sí se puede aguantar. El espíritu que Dios ha puesto en usted está… Dios le da a usted el dominio, el control para que usted lo dirija.

Pues Dios no es Dios de confusión, sino de paz. Podríamos seguir leyendo esto pero yo estoy predicando este sermón en el contexto de ser una iglesia efectiva en retener y alcanzar y evangelizar a otros, también de mantener la armonía y la paz entre nosotros mismos, porque si hay disgustos, si hay insatisfacción, si hay desazón en el pueblo de Dios ese ambiente va a afectar la bendición y va a afectar a la gente que viene y que se mantiene en una congregación.

Aquí hay varios principios que quiero señalar rápidamente, aparte de los que ya he señalado. 1. Los dones del Espíritu Santo son reales, son verdaderos y deben ser usados tanto en la adoración privada como dentro de la iglesia. Yo amo los dones del Espíritu Santo y yo jamás volvería atrás a otros tiempos en la vida de esta congregación donde no había lugar para la manifestación de los dones, como nosotros tenemos durante muchos diferentes tiempos en la vida de nuestra iglesia.

Yo me considero pentecostal, me considero carismático, considero que nuestra iglesia es una iglesia abierta a los dones del Espíritu Santo. Es una iglesia pentecostal. Mire mi Biblia que pesa como 7 libras, Biblia de estudio pentecostal. Esa Biblia ojalá que el Señor me la metan en mi tumba cuando yo me muera, quiero guardarla. Me gusta esa idea de que su interpretación de ciertos pasajes y los comentarios que hace es pentecostal. Yo creo en los dones y los dones deben ser usados.

Yo animo a mis hermanos a aprender más de los dones. Como dice el Apóstol Pablo en Primera de Corintios 12, hermanos míos, no quiero que ignoréis acerca de los dones del espíritu. Es importante. Así que no estoy diciendo que no, al contrario, lo que quiero es proveer una plataforma adecuada para que los dones se puedan seguir manifestando con libertad. Yo estimo tanto los dones que quiero asegurarme de que tengan el adorno y el fundamento adecuado para que puedan seguir siendo usados.

Lo otro viene de una conversación que tuvimos entre algunos de los pastores esta semana, en la reunión de staff pastoral, donde hablamos acerca de eso y… nos preocupamos un poquito acerca de los tiempos de ministración cuando pasa la gente al frente para asegurarnos de que a veces hermanos bien intencionados cuando ministran, que lo hagan en una forma adecuada a los demás, que no haya mal uso de los dones o de la palabra profética.

Yo voy a hablar más adelante acerca de eso. Pero esa conversación que tuve con los pastores me motivó a decir, voy a tomar un sermón para hablar un poquito más acerca de eso y para establecer el orden, lo que la iglesia cree. Porque muchas iglesias no se toman tiempo para hacer esto que Pablo hizo aquí en Primera de Corintios, capítulo 14.

Esas dos cosas, ser efectivos, entretener a la gente y traerlos cuando son extraños y no conocen de la palabra y también asegurarnos de que haya orden en los momentos donde el espíritu se manifiesta y donde hay ministración.

Entonces los dones existen. Un principio importante que ya lo dije, los dones existen para la edificación del pueblo de Dios y como una señal de su poder y su presencia en medio de la congregación. Por eso Pablo habla de que cuando una persona es sanada o cuando recibe una palabra atinada proféticamente, guau… cuánta gente ha venido a la iglesia y me ha dicho, pastor, esa persona parece que estaba leyendo mi correo porque me dijo una cosa que fue absolutamente cierto y eso me tocó, me impactó. Y es de bendición. En otras ocasiones están como en otra parte de la galaxia hablándole a la persona y no dieron pero para nada. Depende, pero en muchas ocasiones sí el ejercicio de los dones puede bendecir a una persona que llegue de súbito a la iglesia. Existen para la edificación.

Otro principio, los dones poseen importancia y valor en la medida en que resultan para la bendición y edificación de los que están presentes en una reunión del pueblo de Dios. Si un don bendice, edifica, fortalece, sana, ayuda, promueve el crecimiento de alguien o de la congregación, es definitivamente de gran provecho.

Ahora, si el ejercer un don resulta en confusión, en escándalo, en descrédito para el Evangelio, entonces ese don se convierte en una piedra de tropiezo más bien y no tanto en una bendición. Los dones deben usarse con un corazón pastoral, ya lo dije eso, es decir, teniendo en cuenta a la persona a quien se le está ministrando o a los que están alrededor y teniendo cuidado de no escandalizar, herir, confundir, producir incomodidad o conflicto en las personas que están alrededor de nosotros.

Yo recuerdo hace años fui a la graduación en Gordon College y era un momento… sabe cómo son estos evangélicos anglosajones, bien solemnes, era una graduación bien todo en orden, bien solemne y había un hermano, no voy a decir de qué cultura era, pero venía de un trasfondo evidentemente pentecostal, y cada vez que el predicador decía algo, él salía con una expresión pentecostal, amén, Aleluya! Gloria a Dios, era el único que estaba haciendo eso y él resaltaba como un asío en una pierna y mientras iba procediendo el servicio, la predicación, más incómoda se ponía la gente. Usted veía a la gente mirándose unos a otros, él estaba teniendo una fiesta bien grande consigo mismo, él pensaba que estaba tocando le borde del manto de Dios en el santuario celestial, pero aquí abajo, esta gente que no estaba acostumbrada y en este ambiente donde no se permitía esas cosas o no se acostumbraba, él desafinaba como si estuviera en otra clave completamente diferente.

Yo creo que en parte él quería afirmar su cultura de dónde venía y también su cultura pentecostal. Bueno, esto es importante, al Señor le gusta, así que lo voy a hacer y los demás que les de un ataque al corazón, a mí qué me importa. Y yo dije, aquí usted tiene un caso donde esta persona no está discerniendo el espíritu, no está teniendo un corazón pastoral. Él está feliz con lo que está haciendo, él cree que está agradando al Señor, pero no está teniendo cuidado de sus hermanos alrededor, no está ejerciendo ese espíritu de Jesucristo que es tan importante cuando nosotros ministramos en el espíritu. Me siguen?

Deben usarse con un corazón pastoral. De nada sirve que una persona ejerza un don si está provocando conflicto en la iglesia o escándalo o incomodidad de algún tipo o provocando confusión en personas que muchas veces no tienen experiencia en el uso de los dones. Una iglesia como la nuestra donde ahora mismo yo puedo decirles que hay por lo menos 20 personas que son relativamente nuevas a la iglesia, o muy nuevos en el Evangelio, o están apenas todavía explorando la idea de entregar su vida a Jesucristo, o son visitantes, o vienen de un trasfondo…

Ahora mismo hay dos jóvenes que están visitando, uno a un miembro de mi familia y otro que… jóvenes que están en el servicio en inglés, que son completamente indoctos en las cosas del Evangelio. Gloria a Dios que están aquí en esta mañana. Pero vienen de un trasfondo muy intelectual, muy académico y yo estoy seguro que lo que ellos han visto es la ridiculización muchas veces de los dones entre los pentecostales y ahora vienen y gloria a Dios que están acá, y ellos no tienen criterio para poder juzgar ciertas libertades que nosotros, que tenemos experiencia en el Evangelio, nos tomamos.

Mire hermano, si alguien coge ahora mismo y se guinda de una de las paredes de esta iglesia, yo me quedo tranquilito y sigo adorando al Señor, a mi no me quita, pero yo como pastor, sé que hay muchos otros que sí se inquietan con eso y se sienten como que es una falta de respeto a su sensibilidad. Entonces uno tiene que tener cuidado con esas cosas. Ahora, si todos estamos… es como cuando la gente está borracha, usted ha visto 6 u 8 borrachos hablando, dicen tonterías y todos se entienden, se ríen de los chistes, el que está sin beber los ve y dice, esta es una partida de locos, pero ellos están felices y se hacen sentido y disfrutan de su tiempo y afirman su amistad como nunca, porque están todos borrachos.

Y así pasa, en una iglesia donde todo el mundo cree lo mismo y están todos con la misma costumbre, mire ahí pasa cualquier cosa, un sal para afuera y todo el mundo está feliz. El Señor está aquí, se van edificados, fortalecidos, arreglándose el moño que se les cayó, etc. sudando como caballos, pero en un ambiente diverso es muy diferente la cosa. Entonces, uno tiene que juzgar la madurez, la experiencia de la gente, la cultura, eso es bíblico, eso no es uno simplemente siendo un cobarde evangélico de 4 por 4, es siendo bíblico lo que dice el Apóstol.

De nada sirve que uno ejerza un don si está provocando conflicto, desazón o escándalo en algún tipo de persona que no tienen experiencia en el uso de los dones. En congregación León de Judá nosotros queremos dar espacio para la manifestación de los dones del Espíritu Santo, de la exuberancia del espíritu, pero a la misma vez queremos promover armonía congregacional, queremos evitar conflicto, escándalo, confusión para las personas que no tienen experiencia o madurez, o profundidad en esta dimensión.

Yo no estoy diciendo necesariamente que esa gente esté incorrecta. Simplemente estoy diciendo que como son más débiles o tienen menos experiencia o quizás están correctos, debemos tener cuidado con ellos. Sabe que hay una cosa, que el hecho de que tu tengas razón no quiere decir que tu tienes libertad. Piense en eso. Váyase a su casa y mastique eso un poquito.

Muchas veces el principio del amor es superior al principio de razón. Por ejemplo, Pablo habla en un caso de aquellos que no les importaba comer comida que hubiera sido sacrificada a los ídolos previamente. En los tiempos greco romanos se mataba una vaca, se sacrificaba a Júpiter y después lo metían a la carnicería para vender a $4.99 la libra y entonces los evangélicos, los cristianos decían, yo no puedo comer de esa comida, ha sido sacrificada a Satanás. Si me la como me va a coger un demonio, o lo que sea. Y había otros cristianos que eran bien maduros y bien seguros y decían, deme esa pechuga para acá, yo me la voy a comer en el nombre del Señor y esos ídolos ahora mismo quedan cancelados en el en el nombre de Jesús. Me voy a guisar ese pollo y me voy a comer hasta el hueso mismo, gloria a Dios. Aleluya! Y otros pensaban, si me como eso me va a coger un demonio.

Entonces cuando se reunían para la santa cena, para comer todos juntos los que tenían mucha libertad y madurez se pegaban su buen pedazo de carne sacrificado a los ídolos, porque ellos sabían que los ídolos no eran nada. Y el otro hermanito que pensaba que sabía que había sacrificado a los ídolos decía, guau, este hombre, cómo se atreve a comerse eso? no cree en Dios, no tiene reverencia, no tiene santidad y juzgaba al otro y pecaba. Entonces ese hermanito libre, maduro, que sabe que los ídolos no son nada estaba siendo piedra de tropiezo para el otro, aunque tenía razón. El otro es el que está equivocado porque los ídolos no son nada, conforme a tu fe te será hecho y si tu fe te da para ciertas cosas, gloria a Dios. Pero el otro no tiene esa madurez. Así que tu tienes que…

Pablo dice, entonces, somete tu madurez y tu convicción a la del hermanito más débil y no lo provoques a juzgar mal. Yo espero que alguien esté entrando en bendición ahora mismo. Gloria a Dios. Le estoy dando oro aquí, caramba. No todo lo que tiene razón es legítimo necesariamente en el contexto del cuerpo.

Sabe lo que es una célula cancerosa? Una célula cancerosa es una célula que dice, yo voy a seguir creciendo a cómo de lugar, no me importan las otras células. Yo tengo que crecer y quiero ser grande y fuerte y quiero multiplicarme. Y esa célula no tiene consciencia de que pertenece a un cuerpo completo y comienza a multiplicarse y crea un tumor que hace daño a un órgano y mata a la persona, porque no pensó que estaba, por así decirlo, en el cuerpo.

El hecho de que existimos en el cuerpo uno con los otros, tiene una serie de ramificaciones y de consecuencias muy grandes que están por encima de simplemente yo tener razón y yo quiero hacer lo que Dios me dice que haga o lo que yo pienso que Dios me dice que haga.

Entonces, amamos los dones pero queremos que sean manifestados en una forma ordenada. León de Judá es una congregación muy diversa, con personas de diferentes trasfondos cristianos y mucha gente nueva en la fe, o que están apenas explorando la fe y de diferentes trasfondos culturales y educacionales, por lo tanto tenemos que ejercer mucha cautela y disciplina para asegurarnos que el uso de los dones no provoque confusión y conflicto.

Pablo era un ardiente defensor de los dones, por eso escribió Primera de Corintios 12, léalo para que usted vea. Por eso enseñó acerca de ello y declaró que no quería que ignoráramos acerca de los dones pero a la misma vez se esforzó por establecer un orden y dar buenas guías y barreras de seguridad para el ejercicio de los dones, estableciendo un orden, estableciendo una lógica espiritual en el uso de los dones.

Hay que conocer la palabra para entender dónde están los linderos que gobiernan el uso de los dones, porque existimos en términos de un cuerpo. Y muchas veces, esto es importante, yo digo que muchas veces el orden colectivo produce cierto grado de empobrecimiento que si no existiéramos en conjunto uno con los otros sería muy bonito poder tenerlo, pero como existimos en términos de una sociedad, una colectividad, entonces a veces hay que empobrecer las cosas para que pueda haber el orden que se necesita.

Por ejemplo, son las 3 de la mañana y yo estoy parado en la Highland Ave. esquina Lowell en Summerville, a 3 cuadras de mi casa, y no hay un carro por ninguna parte, no hay ni un caballo, no hay una cucaracha moviéndose a las 3 de la mañana en esa esquina, pero hay un sign que dice “No se dobla a la derecha en rojo,” y la luz está roja y yo miro alrededor no veo un policía, no veo a nadie, pero hay una ley, porque sí puede que yo no vea a nadie pero y si viene un carro de momento con las luces apagadas y yo doblo y me choca y alguien resulta dañado o muere un niño o lo que sea. Qué hago yo? Yo tengo que pararme allí, perder 2 minutos de mi vida, esperando que la bendita luz cambie cuando no hay nadie alrededor y estoy desperdiciando tiempo, pero es lo que exige el orden de la sociedad y de la cultura.

Porque a las 3 de la tarde puede que haya un choque, o a las 2 de la mañana o 3, si yo no estoy viendo porque me tomé un par de traguitos por allí y no veo ese carro que vino, mis reflejos no están suficientemente rápidos, o cruza un perro que no vi, puede haber un accidente, entonces no. tenemos que… aunque no sea urgente y absolutamente necesario el orden exige que yo me mantenga allí.

Y así pasa con el ejercicio de los dones. Yo creo que sí sería mejor que todo el mundo pudiera saltar a la hora que quisiera. Ahora mismo el hermano Miguel se pone de pie y comienza a saltar en la silla, gloria a Dios. Aleluya! Padre, te adoro. Y yo estoy pensando aquí, esa silla nos costó $45 dólares. Suyen que está detrás de él está diciendo, no me deja ver al pastor y qué es lo que hace este loco saltando acá. Pierde la bendición. La otra hermana por allá, está diciendo, yo contribuí $10 dólares para esa silla y mira lo que este le está haciendo. Pierde la bendición.

Para el orden de conjunto tiene que haber ciertas cosas. Quizás el hermano va a tener que suprimir un poquito su libertad pero en el contexto de la iglesia completa él hacer eso, en un sentido está glorificando a Dios. Qué lindo es cuando uno se exime de hacer ciertas cosas que uno quisiera hacer por amor a los demás. Eso glorifica al Señor también muchísimo. Y a veces nosotros tenemos que empobrecer un poquito nuestra propia libertad para que haya la armonía necesaria en el cuerpo de Jesucristo. Por eso es que se necesita tanto el amor.

El mayor principio de todo es el amor. Y Pablo lo dijo en Primera de Corintios 12, yo digo que todo lo que usted tiene que saber acerca de los dones está en Primera de Corintios 12, 13 y 14. Si yo hablase lenguas humanas y angélicas y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, címbalo que retiñe. Y si tuviese todo los dones del mundo, profecías hasta el extremo y no lo hace eso con amor, nada soy, de nada me sirve porque el amor es el principio imperativo, es el principio número 1 y todo lo que hacemos nosotros tenemos que hacerlo en el contexto del amor de los hermanos y de los demás.

Y el Señor sabe allá arriba. Mira si tu sentiste que Dios te dijo, tírate a los pies de aquel hermano y bésale los zapatos ahora, y tu dices, pero si yo hago eso este hombre va a pensar que yo estoy loco, que estoy haciendo un acercamiento raro a él. Y tu te eximes. Tu vas a pensar, no, estoy ofendiendo a Dios. No. el Señor sabe. Tu vives en un contexto diferente, un contexto extraño. No creas que simplemente porque tu tuviste un impulso, no, mídelo primeramente. ¿Cómo va a recibirlo el hermano? ¿Cómo lo va a ver la persona que te ve ahí besando los zapatos del hermano? Qué va a pensar?

Entonces uno tiene que tener cuidado y si por alguna manera Dios quería que lo hiciera y no lo hiciste, ¿tu crees que el Señor va a estar allí listo para tirarte un rayo como Júpiter? Le voy a partir la cabeza porque no hizo lo que yo dije. No. el Señor sabe.

Yo le digo a veces a los hermanos, yo prefiero que no haga eso ahora. No, pastor, pero Dios me dijo que lo hiciera y usted está… No, te preocupes, yo y Dios nos arreglamos. Sinceramente, porque Dios le ha dado a los pastores a veces una carga de mantener el orden. Dios usted cree que está allí porque el pastor erró un poquito el blanco o le va a condenar entonces, una enfermedad o lo que sea, porque no hizo… Eso no es así. Dios es un Dios mucho más amplio, más lógico, más… él delega.

Ahora yo siempre digo, Señor, tu conoces mi corazón. Si es algo que yo estoy impidiendo que tu gloria se manifieste corrígeme, háblame, enséñame, yo estoy deseoso de hacer tu voluntad. Y yo creo que Dios y yo estamos bien al final del día. Yo creo que uno siempre está aprendiendo y está creciendo pero yo sirvo al Señor en ese sentido con tranquilidad. No me preocupo. Yo sé que Dios es un Dios que entiende nuestras debilidades y nuestras limitaciones.

Los dones no son un fin en sí mismos sino que dependen del contexto en que se usan y la forma en que se usan para expresar su verdadero valor. La iglesia tiene que mantener un balance entre la libertad en el uso de los dones y la responsabilidad pastoral de mantener el orden, evitar el conflicto y la confusión mientras se desarrolla el servicio.

En particular hay 2 tiempos en que es más cuidadoso esto, en los tiempos de adoración y en los tiempos de ministración. Son los tiempos de mucho tráfico y ahí son momento en que tiene que haber mucha disciplina y orden y supervisión pastoral y sujeción de los hermanos a la autoridad pastoral. Es importante tener en cuenta el orden en esos tiempos y el poner atención a la naturaleza pública de lo que se está dando.

A veces hay que establecer protocolos que no son ideales para permitir la libertad en el espíritu, pero que hacen posible ese orden bíblico del cual estamos hablando. Y siempre habrá una tensión entre la absoluta libertad y el control absoluto. Ambos tienen que limitarse hasta cierto punto para que haya un balance adecuado.

Yo creo que eso tiene que dar, por ejemplo, hay hermanos que les gusta pasar, y a mí me encanta que pasen al frente durante la adoración. Eso es bello, eso es lindo, eso es bíblico, eso es espiritual, a mí me inspira cuando veo hermanos que pasan al frente en tiempo de ministración y están ahí listos para adorar, para orar. Yo creo que la danza es bonita también, es linda, es hermosa pero también según el nivel público y atrayente del gesto uno tiene que tener cuidado.

Una persona se para aquí al frente y simplemente, Padre, estoy aquí trayéndote mi carga. Eso es mínimo el nivel de atención que comanda. Ahora si una persona está saltando o está haciendo otras cosas más… gloria a Dios. Aleluya! Santo es el Señor. Ya es otro nivel, entonces tiene que tener más cuidado cómo se hacen las cosas. Si tu te mueves, si estás danzando, todas estas cosas si estás aquí al frente en el medio, todo el mundo te ve. Yo le digo a los hermanos, mira, si tu quieres expresar fusión y entusiasmo y exuberancia espiritual yo no tengo ningún problema, veta una esquina. Hermanos, cuántos creen que Dios te puede ver debajo de ese balcón o aquí al frente? Sí o no?

Esto no es para meterle miedo a nadie. Esto es para que usted simplemente se sienta libre. Entonces, en la medida en que uno está comandando la atención del público, en esa medida uno tiene que decir, guau, ¿estoy yo siendo de bendición? Por ejemplo, cuando una persona ve a través de la internet, esa gente no está donde nosotros estamos, o cuando un incrédulo viene no tiene el amor que nosotros tenemos a la iglesia.

Yo amo a la iglesia aún cuando tiene sus locuras y sus cosas, yo la amo. Otros no tienen ese afecto para la iglesia, solo ven… Estaba ayer viendo por casualidad una de esas cosas, me vino un YouTube un grabación dice, “Ministers gone mad” y es una colección de alguien que estoy seguro no ama a la iglesia, de las locuras que hacen los pentecostales cuando están en su servicio.

Había un hermano pastor gateando por todas partes de la iglesia, había otro aullando como un lobo, una cantidad de cosas y yo como soy miembro de la iglesia de Jesucristo veo eso y siento ternura para con mis hermanos. Yo amo al pueblo de Dios que está disp8esto a aullar por Dios. Debemos comenzar un aúlla por Dios, es un buen lema. Yo los amo, pero imagínese uno de esos ateos furibundo, esa gente tan cínica con el Evangelio viendo esas cosas, se ríen, hacen el ridículo. Es como hacer el amor ante una cámara pública. El amor se hace en intimidad, tu con tu esposa en tu cámara. Y yo creo que muchas veces en este ambiente público en que uno vive de la iglesia, uno hace cosas que son íntimas a la iglesia. La iglesia entiende estas cosas pero cuando hay un público a veces que no le importa ni sabe ni quiere ni ama, lo que ven es una partida de locos haciendo cosas y para mí eso rebaja la dignidad del Evangelio.

Nosotros tenemos que ser respetuosos con esas cosas. Cuando le ministramos a la gente… a mí me gusta, yo amo el hecho de que hay libertad, de que hermanos vienen y orar por otros y yo no veo ningún problema en que alguien se acerque si Dios le mueve a una persona y con todo respeto se pare calladamente y con respeto, sabiendo que no es lo mismo que tu ser pastor.

Por ejemplo, yo tengo relación con hermanas que me conocen hace muchos años, si yo me acerco y le pongo la mano en el hombro cuidadosamente, con respeto, ellas se sienten tranquilas, pero si viene un hombre que no conocen y les impone las manos se sienten incómodas porque quién es esa persona. Él quizás está muy tranquilo y muy inocente pero hay que tener cuidado. Si una hermana le ministra a otra hermana hay que tener cuidado con lo que tu le dices. Hermana, tu no puedes dar a luz porque pecaste hace 10 años y ese aborto que te hiciste ahora te impide… Ten cuidado con lo que tu dices. Hay que tener mucho cuidado. Mientras más arriesgada la profecía, más cuidado debes tener.

Yo creo que no es lo mismo un pastor ministrando o una hermana amada que tu bien conoces que está orando por ti, que una perfecta extraña. Entonces uno tiene que tener cuidado con las libertades, imponer manos… yo veo a veces personas que lo que les falta es que le metan una llave inglesa para que la gente se caiga al piso. Yo no tengo que probarle mi unción a nadie, si se van a caer eso es cosa de Dios. Yo no tengo que ayudar a Dios.

Si tu no conoces no impongas manos. Sé respetuoso. Yo mismo me acerco a la gente y trato de decir, hermana, que conozcan mi voz y que sepan quién es. A veces están metidos que los asusto si hablo muy fuertemente, con cautela, corazón pastoral, sabiendo tus límites, poniéndote a tono con la otra persona a quien tu le estás ministrando y diciendo, quién es esa persona? Qué está sintiendo? Qué desea?

Hay veces que una persona lo que quiere es pararse aquí al frente y estar presente ante su Dios y estar tranquila con Dios, no quiere que le impongan manos, no quiere que la abracen, no quiere que la besuqueen, no quiere que le arreglen el pelo, simplemente estar tranquilos con Dios.

A veces hay que darle tiempo a la gente también. A veces la gente pasa y enseguida le caemos encima. No, déjalo que… cójalo suave, chico. Dale un ratito que esté con Dios y entonces acércate. Corazón pastoral. Ponerse a tono con las necesidades de las personas.

Yo no creo que estoy diciendo nada que no sea bíblico hasta aquí, hermanos. Y lo que buscamos es que haya lugar para la manifestación bella, armoniosa, atractiva, ministrante de los dones del Espíritu Santo. Queremos una iglesia madura, como dice Pablo, en los principios de la palabra de Dios, que matice una cosa con la otra, que compagine un tema con el otro y que pueda haber armonía y un lugar adecuado para que los dones se manifiesten. Eso es lo que deseamos y que el Señor nos ayude a ser una iglesia del espíritu, una iglesia de los dones del espíritu, pero también una iglesia de amor y de armonía espiritual.

Les bendigo en el nombre del Señor. Ore conmigo. Padre, Señor, damos gracias por tu palabra, damos gracias por el consejo del espíritu, damos gracias porque tu eres un Dios generoso, un Dios bueno, un Dios que te apiadas de nosotros y que conoce nuestras debilidades y pedimos que esta iglesia siempre tenga espacio para todo lo que tu quieres hacer. No queremos jamás limitarte y decimos, Padre, que habrá cosas a veces extrañas también, que tu vas a hacer y no entenderemos pero si es de ti te daremos la gloria y nos sujetaremos también, Señor. Líbranos de contristar tu espíritu, líbranos de limitar lo que tu quieres hacer.

Enséñanos tu el balance, Padre. Guíanos cada día a ser una iglesia donde la libertad en el espíritu se manifieste en todo momento y en formas efectivas y poderosas. Que nadie resulte dañado en alguna manera, Señor, de esta enseñanza que ha sido presentada en este día. Gracias por el consejo de tu palabra. Bendigo a tu pueblo, Señor, allá arriba, aquí debajo, sus vecindarios, sus hogares, sus familias, sus matrimonios, sus estudios, sus apartamentos donde viven, sus amistades, sus sueños, temores, ansiedades, los bendigo en el en el nombre de Jesús. Y arrojo toda bendición espiritual sobre tu pueblo, Señor, en este día. Recíbela ahora en el en el nombre poderoso de Jesús y regresa a tu hogar, a tu casa con la seguridad de que Cristo va contigo todos los días hasta el fin del mundo. Te bendigo en el en el nombre de Jesús amén, amén. Dios les bendiga, mis hermanos.

Vivir conforme a una visión

TRANSCRIPT

Quiero hablarles acerca de una vida visionaria, una vida emprendedora, una vida que concibe grandes cosas para el Señor y que hace lo que tiene que hacer para realizar esa visión, una vida de visión que es algo que se habla tanto hoy en día, acerca de vivir conforme a una visión.

Y nuestra iglesia es una iglesia visionaria y por eso hacemos las cosas que hacemos, por eso estamos siempre cambiando algo por aquí, por allá, emprendiendo nuevos proyectos porque el Señor nos quiere invirtiendo en su reino y emprendiendo cosas nuevas y audaces.

En el capítulo 54 del libro de Isaías, el Señor le dice a Israel y nos dice a nosotros también por extensión:

“Regocíjate, oh estéril, la que no daba a luz, levanta canción y da voces de júbilo, la que nunca estuvo de parto. Porque más son los hijos de la desamparada que los de la casada, ha dicho Jehová. – y aquí entra el Señor para con nosotros también en el desarrollo de ese llamado que él hace primeramente, y dice, – Ensancha el sitio de tu tienda – y eso te lo está diciendo a ti y me lo está diciendo a mí y se lo está diciendo a congregación León de Judá, – ensancha el sitio de tu tienda.

De paso, al continuar leyendo, tienda en este caso quiere decir una tienda de campaña, la tienda que usan los beduinos, que usan las tribus nómadas o que usan los boy scouts, esta idea de una tienda donde la gente mora pero que es una cosa móvil, una tienda de campaña. Y le está hablando a un pueblo que conocía muy bien lo que era vivir en el desierto y lo que era morar así en tiendas de campaña.

Entonces está usando esa ilustración para fortalecer su llamado a lo que le está diciendo, que levante canción, que espere grandes cosas de Dios, etc. entonces, dice:

“Ensancha el sitio de tu tienda y las cortinas de tus habitaciones sean extendidas, no seas escasa, alarga tus cuerdas y refuerza tus estacas, porque te extenderás a la mano derecha y la mano izquierda y tu descendencia heredará naciones y habitará las ciudades asoladas.”

Amén. Gloria al Señor. ¿Cuántos creen esa promesa en esta mañana? Eso es para ti, mi hermano, es para mí, es para congregación León de Judá. Dios nos llama a vivir una vida emprendedora. Dios nos llama a concebir grandes visiones, a no vivir vidas conformistas, no vivir vidas mediocres. Si alguien en esta tierra no tiene excusa para vivir una vida mediocre y acomodada, convencional, es el cristiano, porque nosotros tenemos un Dios grande y poderoso que espera de nosotros una vida de excelencia que lo glorifique a él, una vida a la altura del poder que él ha puesto en nuestras manos.

Si nosotros vivimos una vida pequeña, convencional, conservadora estamos deshonrando el gran Dios que nos ha llamado y que ha depositado un poder tan grande dentro de nosotros. Y por eso el llamado de Dios siempre para uno, como individuo, para una iglesia, para un ministerio, es esperar grandes cosas de Dios y vivir como que Dios tiene grandes cosas para ti.

Y en el comienzo de este capítulo el Señor dice regocíjate e interesantemente le está hablando figurativamente a una mujer estéril, una mujer que nunca ha concebido, nunca ha tenido hijos, nunca ha dado a luz. Y hay como una contradicción desde el comienzo mismo en este pasaje. Hay un llamado sorprendente. Regocíjate, uno puede entender eso, oh, sí, Dios nos está llamando a regocijarnos, pero oh, estéril. Guau, una mujer estéril en aquellos tiempos era una persona que era considerada como que fracasó en su femineidad.

Gracias a Dios, yo espero que si alguien está aquí, si hay una hermana que no ha concebido por la razón que sea, jamás se sienta como que es un fracaso, porque hay muchas formas de ser fructífero. Amén. Y también que sigamos esperando, si tu quieres tener hijos, sigue esperando en el Señor también y pon tu fe en el Señor pero ninguna mujer es un fracaso simplemente porque no pueda tener hijos. Reprenda ese pensamiento si está en usted.

Pero sí en aquellos tiempos, en aquella cultura, en esa sociedad judaica del Medio Oriente una mujer que no podía dar a luz era una mujer atribulada, era una mujer considerada un fracaso, era una mujer que se consideraba que era estéril, no solamente en su matriz sino en su vida entera, porque la realización de una mujer en ese tiempo era ser madre.

Y entonces el Señor le está hablando a Israel que es una nación que cuando Isaías le extiende este mensaje, es una nación que ha estado cautiva, el Señor había enjuiciado a Israel por su gran pecado, su idolatría, los había exiliado, los había enviado a Babilonia, estaban cautivos, era una nación que apenas estaba comenzando a ponerse de pie. Israel había sido estéril también y por eso después el Señor le habla de que no temas, no serás confundida, tu marido es tu hacedor.

Dice en el versículo 6, “porque como mujer abandonada y triste de espíritu te llamó Jehová, por un breve momento te abandoné pero te recogeré con grandes misericordias.”

Le está hablando a una nación fracasada, una nación caída, una nación derrotada, una nación que su Dios la ha enjuiciado, la ha castigado ya ahora se siente como que está apartada de la bondad de Dios. No hay esperanza para ella. Imagínese estar uno cautivo, llevado a otra tierra, la tierra de uno desierta, desolada completamente.

De paso, no es la única vez que Israel ha pasado por esa situación. Cuando Cristo vino a la tierra y fue crucificado poco tiempo después de su resurrección Israel fue tomada por Roma, después de rebelarse contra el poderío de Roma y Jerusalén fue destruida completamente, los judíos fueron desterrados de su tierra, se prohibió que judíos vivieran en Jerusalén y durante casi 2000 años Israel estuvo desperdigado.

Usted ha oído hablar del judío errante. En todas las naciones había judíos que habían sido desterrados de su tierra. Israel no era nación ni siquiera, dejó de ser nación. Jerusalén dejó de ser poblada por hebreos. Había unos cuantos siempre, un remanente pequeñito que se mantenía, pero no era nación y uno diría, ¿cuándo se ha visto en la tierra que después de 2000 años una nación vuelva a resucitar? Algo impensado y sin embargo así sucedió. Dice que en un día, era la promesa del Señor y en 1948 Israel volvió a ser nación. Y desde entonces los judíos han estado regresando a su tierra natal.

Y yo digo, el Dios que hizo ese gran milagro es el Dios que puede reavivar a su iglesia en el siglo XXI también, aquí en Norteamérica, en Europa, en otras partes del mundo. Por eso nosotros no podemos poner nada más allá del poder de Dios. Si en tu vida ha habido esterilidad por alguna razón, si en tu vida ha habido fracaso, si en tu vida ha habido tiempos de gran sequía nunca pongas por encima del Señor la posibilidad de que Dios pueda ponerte a florecer por primera vez o que pueda volver a traer esos tiempos de prosperidad y de bendición a tu vida.

Nunca te dejes vencer por una condición de pobreza, de fracaso. Si algo fracasó en tu vida ahí hay una raicita de vida que quedó dentro de la tierra. La mata por fuera quizás cayó pero por dentro está la vida de Dios que va a brotar de nuevo. En Dios siempre hay posibilidades. No podemos perder las esperanzas. Quizás tu nunca hayas dado a luz pero tu puedes dar a luz.

Y sabe una de las cosas principales para uno dar a luz en el mundo y en la vida, sobre todo después de tiempos de fracasos y esterilidad, una de las cosas más importantes es hacer lo que dice aquí, cantar, regocijarse en el Señor como algo activo, adoptar una política por así decirlo de gozo espiritual, gozo en el Señor, regocijarnos en el Señor.

Yo hablaba con la congregación de los miércoles, el grupo que viene los miércoles el llamado de Pablo en filipenses capítulo 4, regocijaos en el Señor. Otra vez os digo, regocijaos, vuestra gentileza sea conocida de todos los hombres. En la Biblia hay continuos llamamientos al gozo como un arma poderosa para la bendición, para la prosperidad, para el éxito, para el progreso.

Una de las cosas que más mata el poder y el mover de Dios en nuestras vidas es una actitud pesimista. Es una actitud de queja, una actitud de silencio con respecto a las cosas buenas. Cuando nosotros nos entrenamos y nos acostumbramos a hablar positivamente y a sentir positivamente una postura militante de vida, cuando entendemos que gozarnos en el Señor no es un resultado, gozarnos en el Señor no es como algo que surge como resultado de que tiene los biles pagados, de que te dieron un aumento en el trabajo, de que finalmente la persona que tu amabas se va a casar contigo, o que las cosas están bien. Regocijarse para el cristiano es una postura que nosotros adoptamos, es una ética espiritual, es algo que abrazamos como una actitud que rompe muros y que destruye las obras del diablo en nuestra vida.

Y muchas veces nosotros tenemos que cantar aunque no sintamos el deseo de cantar. Uno puede… si nosotros tenemos una actitud pesimista por dentro, si somos negativo por dentro como cristianos tenemos que primero decidir cambiar esa actitud y entonces comenzar a entrenarnos. Quizás tu no puedas cambiar tus emociones primero, pero tu puedes comenzar a hablar positivamente.

Yo digo siempre, nosotros reímos en nuestra familia, mi mamá, Toñita, cuando le decían, “Doña Toña, ¿cómo se siente hoy?” “Bien,” aunque a veces estuvo en unos tiempos terribles en su vida, padeciendo de terribles dolores del nervio trigémino. Hay personas aquí que saben lo que es ese dolor y sin embargo Toña nunca perdió su gozo en el Señor. Ella hablaba positivamente, siempre tenía una sonrisa. A veces sonreír le costaba pero se sonreía. Hablar le costaba pero decía una palabra de consej a alguien.

Para tu recibir bendición tienes que comenzar desarrollando y cultivando un espíritu positivo en tu vida. Aprende a hablar positivamente. Aprende a confesar. Yo he aprendido en mi vida que aunque algo malo esté pasando yo voy a encontrar esa vetita de oro en el medio de las dificultades y voy a buscar algo por lo cual darle gracias a Dios en mi vida.

Cosas como la gratitud es importante. Exprésale gracias al Señor por las cosas que pasan en tu vida. Amén. No solamente mire las cosas malas, mira las cosas buenas en medio de las cosas malas y dale gracias a Dios por eso. Busca algo bueno por lo cual darle gracias a siempre. Canta. Yo creo que la adoración es importante también. Llenar nuestros hogares de alabanza, de adoración, sacar tiempo en el día para adorar al Señor, para confesar cosas buenas, eso es importante también. Gratitud, adoración, confesión positiva, hablar cosas buenas en tu vida y tener un buen consejo para llenar tu vida de cosas buenas.

Todas estas cosas liberan la posibilidad de que Dios pueda hacer algo en tu vida. Por eso yo creo que este pasaje que habla de construir, de edificar, comienza con un llamado a cantar y a celebrar las cosas buenas que Dios va a hacer en tu vida. Si Dios no ha hecho cosas buenas en tu vida últimamente comienza anticiparla y a decir que Dios las va a hacer. Yo vivo mi vida siempre esperando cosas nuevas y bellas que Dios va a hacer.

Este tiempo que nosotros estamos viviendo como congregación yo creo que es uno de los mejores tiempos que hemos tenido y yo no puedo esperar a ver qué es lo que va a psar en un año, dos años en esta iglesia, porque yo creo que Dios tiene buenas cosas y hay que hablarlas, hay que declararlas, hay que celebrarlas.

Esta mañana cuando estábamos aquí arriba después del tiempo de adoración Dios me ha estado hablando de reposar en el Señor y estar quieto en el Señor. Esta mañana no sé por qué, quizás fue porque se me perdieron los lentes esta mañana y los he buscado por todas partes y eso me sacó de quicio un poquito. Cuando uno es obsesivo, compulsivo peus siempre está… y había una voz dentro que me decía, “Descansa, reposa en el Señor, estate tranquilo.” Y después cuando subí aquí en este momento me invadió ese espíritu de que reposar en Dios y adoptar una actitud positiva es una de las cosas que nosotros tenemos que hacer como congregación. El afán nos mata muchas veces, el estar siempre en esgrima con el diablo. A veces el Señor quiere simplemente, baja las manos y espera en mí y confía en mí, y remite tu causa al Señor y dejar que él haga, que él obre en nuestras vidas. Eso es tan importante.

“En quietud será, dice la palabra, vuestra fortaleza, en quietud y reposo vuestra salvación. Tu guardarás en perfecta paz aquel cuyo pensamiento en ti persevera.” Tantos pasajes que nos hablan de eso.

Entonces, esa idea de cantar al Señor, de regocijarnos en el Señor, de levantar voces de júbilo… sabe usted que muchas mujeres que no pueden dar a luz cuando se relajan entonces pueden dar a luz. Eso es un fenómeno médico. Yo he conocido mujeres que no podían dar a luz y que adoptaron un niño, una pareja no podían dar a luz, adoptaron un niño y como ya esta mujer tenía un hijo, como que ya su afán de dar a luz bajó y entonces pueden dar a luz. Los médicos saben, los obstetras saben que una de las cosas que una mujer tiene que hacer es relajarse para poder dar a luz. Si está en tensión y en guerra es contraproducente.

Y yo creo que como cristianos usemos el regocijo, el gozo en el Señor como una manera de atraer cosas buenas. Dios le gusta estar donde está la alabanza, donde está el gozo, donde está la celebración de su bondad.

Entonces, lo primero, tu quieres vivir una vida poderosa, positiva, regocíjate en el Señor y adopta el regocijo como un arma espiritual. Lo segundo que el Señor le dice aquí en el versículo 2 es lo que yo llamo una fórmula para la victoria y para el éxito en la vida. Hay 4 cosas que yo veo aquí, las voy a decir lo más pronto posible.

Dice ensancha el sitio de tu tienda, 2. Extiende las cortinas de tus habitaciones, 3. Alarga tus cuerdas, 4. Refuerza tus estacas. Son 4 elemento todos unidos a esta idea. Dios usa una ilustración de una tienda de campaña que tiene que ser reemplazada con otra. ¿Y cuáles son los elementos que componen una tienda de campaña? Hay 4, el sitio, las cortinas, las cuerdas y las estacas.

Y cada uno de ellos es un elemento que nosotros tenemos que tener en consideración cuando queremos construir algo, cuando queremos emprender algo en nuestra vida, cuando queremos cambiar nuestra situación, puede ser en un ministerio también cuando se quiere ir a otro nivel. En lo que sea yo creo que estos son principios para la construcción en toda la vida.

Primero, ya lo dije es esto de tener una expectativa positiva, adorar al Señor, alabarlo, confesar positivamente, cultivar una actitud de expectativa de las bendiciones de Dios. Ensanchar el sitio, es algo como que uno a veces no piensa que en la construcción una de las cosas más importantes es el lote, por así decirlo, el terreno, el solar donde se va a construir. La gente piensa solamente en el edificio que va encima pero si usted ha estado en construcción en algún momento de su vida como yo lo he estado durante todos estos años de construcción acá, o si usted observa, una de las cosas que más tiempo toma es simplemente la planificación.

Los arquitectos se toman meses para diseñar un edificio y para ir a través de todo el proceso de conseguir permisos y todas estas cosas y luego, cuando ya se tiene toda la documentación entonces hay que tomar el lugar donde se va a construir y hay que prepararlo. Lo primero que hay que hacer es limpiar el lugar, si hay algo encima, destruirlo, aplanarlos todo. Este edificio, antes de nosotros construir nos pasamos meses llenándolo de grandes cantidades de cemento reforzado para que fuera la base de las columnas y las vigas y todo lo demás. Nos tomamos meses haciendo solamente la parte del lote, del solar.

Y para mí el solar, el sitio, es la mente, la sensibilidad, la imaginación, la creatividad. Es el lugar donde Dios va a poner las visiones que tu quieres concebir en tu vida. Y si tu quieres vivir una vida creativa, poderosa, lo primero que tienes que hacer es entrenar tu mente a creer grandes cosas para el Señor. Tu tienes que ensanchar tu capacidad para visualizar, imaginar, creer, esperar.

¿Dónde es que Dios planta los grandes proyectos? En el alma, en la mente. Muchos de nosotros no hacemos grandes cosas porque no soñamos grandes cosas. Yo les animo a imaginar, a fantasear en la forma positiva de la palabra, involucrarse en soñar despierto, verse en grandes espacios, verse haciendo cosas grandes, ver a sus hijos ya graduados, estudiando, casados, haciendo cosas buenas en la sociedad, ver tu vida progresando, verte a ti misma mujer, si eres un ama de casa, concibiendo un proyecto nuevo en tu vida.

Hablaba con una hermana esta mañana animándola, hey, está viniendo al servicio de las 9 de la mañana y quiere mejorar su comprensión del inglés. Qué buena oportunidad ahora para tu aprender el idioma bien. Lee libros, ve la televisión en inglés más, estudia, es decir, esta idea de que nosotros tenemos que visualizarnos, vernos haciendo grandes cosas en el Señor.

Y tenemos que pedirle al Señor que ensanche nuestra capacidad para esperar cosas grandes de Dios. Y nuestra imaginación tenemos que cultivarla. Él dice, “ensancha el sitio de tu tienda,” antes de que comiences a construir primero preparar el lugar, hazlo lo suficientemente grande. Muchos de nosotros no soñamos lo suficiente o nuestros sueños son pequeñitos porque es lo que nos hemos acostumbrado.

Concibe visiones que te den miedo. Concibe visiones que te aterroricen cuando tu las contemples. Y creo que Dios puede llevarte a grandes cosas. Yo hablaba con una joven que me decía lo contenta que ella estaba porque está haciendo una maestría en trabajos sociales, como trabajadora social. Yo le decía, “Qué bueno, te felicito,” me regocijaba con ella, celebraba eso. y decía, “Mira, un día piensa que Dios te puede dar un doctorado en ciencias sociales, en trabajo social. Dios te puede llevar a ser una profesora en una universidad,” y yo veía su sonrisa y veía su mirada que se llenaba de expectativa. Claro que sí, tu puedes hacer eso.

Tu puedes esperar grandes cosas de Dios. Nuestro problema muchas veces es que no soñamos lo suficiente y no le pedimos al Señor lo suficiente. Y lo primero que tenemos que hacer es eso, Señor, dame una mente que no ponga nada por encima de ti. Cuando nosotros vinimos aquí a Boston, yo pensaba que era simplemente para servir a la comunidad latina. Yo les prometo que esa era mi única percepción, era una iglesia hispana, íbamos a servir a hispanos.

Y desde que llegamos aquí el Señor comenzó a anchar las cosas. Es más, mi visión era tan pequeña que el primer edificio que nosotros compramos, el santuario aquel, mi capacidad en ese tiempo, mi fe, no me daba más que para creer que lo que nosotros necesitábamos era una caja. La caja del primer piso, entrar allí, poner unas sillas y a la buena de Dios tener una iglesia y eso era todo. Yo lo confieso, me da vergüenza decirlo.

El Señor ha ido anchando, gloria a Dios, mi visión para a veces agonía de ustedes que tienen que seguirme con las visiones que Dios me da. Pero Dios ha ido ensanchando mi capacidad para creerle en grande, por grandes cosas. Y desde que yo llegué allí el Señor comenzó a hablarme enseguida. Los arquitectos nos obligaron, “Mira, Roberto, tu puedes coger este primer piso, por qué no rompemos la mitad del techo y ponemos dos balcones arriba y hacemos una plataforma más grande y hacemos esto y hacemos lo otro. Ellos mismos me comenzaron a aconsejar y así fue que comenzamos a ampliar ese edificio y comenzamos a hacer otras cosas.

El Señor comenzó a llamarnos al trabajo social, a meternos en la ciudad, a trabajar en cosas sociales, a hablarle a la ciudad, a invitar gente de afuera a venir, a concebir la posibilidad de que nosotros podíamos ministrar no solamente a hispanos sino a norteamericanos. Comenzamos el servicio en inglés porque vimos que nosotros podíamos hablarle también a otro sector de la ciudad.

El Señor comenzó a ensanchar el sitio y a enseñarme que uno puede creer grandes cosas. Y si estamos ahora haciendo este proyecto de cambiar los servicios, yo sé que eso es incómodo para ustedes, mis hermanos, yo les aseguro que es incómodo para mí también y me inspira un poco de temor muchas veces pero yo nunca dejaré que el temor me limite en emprender cosas grandes para Dios.

Así que no se preocupe por esa parte, el temor es algo con lo cual yo vivo y yo simplemente me tomo 2 aspirinas al final del día y sigo adelante. No permita que el temor le impida emprender cosas grandes para Dios.

Pero nosotros tenemos que anchar nuestras expectativas y Dios nos ha dado mucho más de lo que pensamos. Pídale al Señor que te ilumine para creer grandes cosas que él puede hacer en tu vida y no dejes que tu viudez del pasado, tu esterilidad del pasado te aguante. Cree que Dios puede hacer grandes cosas a través de ti y no le pongas límite al Señor. Ensancha el sitio, ensancha la base, la plataforma de tu creencia y de tu expectativa.

Entonces, el Señor le dice, “y las cortinas de tus habitaciones sean extendidas,” entonces esta tienda de campaña ya tiene su espacio más grande y ahora si hay un espacio más grande las cortinas tienen que ser más largas. Una tienda de campaña, piense en eso, la tela, el cuero que compone la base de la tienda de campaña, consíguete cortinas más grandes porque tu tienda va a ser más grande.

Ahora, hay un contraste entre el sitio, que es algo como abstracto, una base, un punto de partida, algo imaginativo, ahora dice, consíguete las cortinas y consíguete cortinas más grandes. Aquí yo veo que uno tiene que pasar en algún momento de la visión a la acción, a lo concreto. Okay, ya tu soñaste, visionaste, oraste, consultaste, pero ahora tienes que salir de tu asiento y comenzar a trabajar, comenzar a perseguir… mucha gente sueña, sueña, pero no hace nada. Llevan años diciendo, yo quiero hacer esto, quiero comprarme la casa, quiero aprender inglés, quiero prepararme para un mejor trabajo, pero no hacen absolutamente nada.

Y una de las cosas más difíciles es pasar de la concepción a la acción. Esa mujer o ese varón que quiere estudiar en la universidad, ha sido toda su vida obrero y gloria a Dios por eso, pero siente que Dios lo está llamando a otro nivel, quiere ir a la universidad. Mira, si Dios ha puesto eso en tu corazón vas a tener que comenzar a tocar puertas. Un día vas a tener que coger medio día de trabajo y eso es lo difícil, cuando tu tienes que comenzar a hacer cosas específicas y salir de lo abstracto.

Vas a tener que decir, el miércoles yo le voy a pedir a mi jefe medio día de trabajo y voy a ir a Bunker Hill Community College y voy a ir allí, yo no sé a dónde voy a ir, porque todas esas cosas nos frenan. La idea de dónde voy, qué hago, qué digo, con quién hablo, voy a hacer el ridículo, no sé a dónde ir. No, simplemente tu tienes que reservar ese día, esto es extender las cortinas, tienes que coger esa mañana, ir al lugar, pedirle y preguntarle a alguien en la planta física, ¿dónde está la oficina de admisiones? Ir allí y con tu inglés medio matado decirle, “Yo quiero solicitar a la universidad qué tengo que hacer…” Quizás te sorprendas, vas a encontrar una persona simpática que va a ver que tu estás tratando de hacer algo positivo y te va a decir, “No, lo que usted tiene que hacer es esto, yo le ayudo.” Y cuando tu vienes a ver poco a poco se va armando tu proyecto.

Pero tienes que comenzar en algún. Lo más difícil es eso. Es ir de lo conceptual a lo concreto y ha sido así con todos estos proyectos de construcción. Cada vez que yo he tenido que comenzar algo, me viene como un sentido de temor y de ¿será esto posible? Este proyecto de los dos servicios, usted sabe todas las consideraciones que ha habido que tener en cuenta, todo lo que hemos hablado tanto con líderes, con los pastores de la iglesia, diferentes grupos, tantas cosas, obstáculos en la mente de uno y todavía hay cosas que uno no entiende de este proyecto, cómo va a resultar, valdrá la pena, estoy yo desestabilizando la congregación. Son preguntas que todo líder se debe hacer. No es que yo sea obsesivo, compulsivo o loco, todo el mundo se pregunta, Señor, ¿será posible?

Pero uno tiene que comenzar. Hemos comenzado, poco a poco, gradualmente hablando con gente, consultando y poco a poco el proyecto se va armando solo. Muchas veces lo que tienes que hacer es comenzar y comenzar pequeñito y cuando tu comienzas en lo pequeñito Dios te va poniendo en lo mayor y tu vas aprendiendo. El proyecto mismo en la medida que tu lo vas emprendiendo te va enseñando nuevas cosas y Dios te va abriendo caminos, pero tienes que comenzar a poner las cortinas. Tienes que hacer esfuerzos pequeños.

Dios siempre te pregunta, como les he dicho antes, qué tienes a la mano. Y lo que tu tienes a la mano va a ser el punto de partida para cosas mayores. Lo que Moisés tenía en su mano era una vara y una mano y el Señor le dijo, con eso has dos señales, una mano que se convertía leprosa y luego estaba sana de nuevo, una vara que la tiraba en el piso y se convertía en una serpiente y la tomaba otra vez y se convertía en una vara de nuevo. Señales que Dios le dio para comenzar el proceso.

Lo que tienes que hacer es abrir camino poco a poco y Dios te irá enseñando entonces lo que tienes que hacer y obrar en el Señor, dejar que Dios haga la obra. Hablaba con Minelia, mi hermana que le decía acerca de… ella ha estado sufriendo por mucho tiempo de este problema del trigémino y durante meses la vida de Minelia se estaba yendo por un dolor que es uno de los dolores terrible de la anatomía humana, el nervio trigémino, ojo, nariz, oído. Es un nervio que ese dolor es como un corrientaso continuo que tienes, uno de los dolores más terribles.

Pero los médicos le decían, el médico especialista que ella tenía, “No, no debes hacerlo todavía porque eso es peligroso, es arriesgado, esto y lo otro,” le metían mucho miedo de que no podía, no era posible. Y yo que conozco lo que ese dolor por mi madre que pasó por ello, yo le decía, “Minelia, aquí yo estoy, quiero ayudarte.” La llamé, hice una investigación, le sugerí un especialista en Boston y ella se lanzó con todo tipo de temores. “Mira, no vas a perder nada, ve, habla con él, lo peor que te puede pasar es que te diga lo que ya tu sabes y simplemente te diga, no, no debes, y que confirme lo que el otro médico te ha dicho.”

Pero ella se lanzó y fue allí y tuvo una consulta y el médico le dijo, “Tu puedes hacerlo,” y para gloria del Señor Minelia es una mujer renovada completamente. Esa operación fue un éxito total para gloria del Señor e inmediatamente pasó de terribles dolores a ningún dolor. Pero tuvo que atreverse, tuvo que lanzarse.

La Biblia dice que el que mira mucho las nubes nunca siembra. Es así, si tu vas a ir un día de campo y comienzas, oh, y qué si llueve y yo entonces toda esta comida la pierdo y esto y lo otro, nunca vas a sembrar. Uno tiene que atreverse en el nombre del Señor. Ensancha el sitio de tu tienda, alarga tus cuerdas, es decir, despiértate, levántate, emprende la tarea.

En tercer lugar, dice aquí alarga las cuerdas. Claro ahora tiene una tienda más grande con un espacio grande, unas cortinas grandes, ¿qué otra cosa tiene que hacer? La parte estructural. Las cuerdas son como las columnas en un edificio y las vigas. Este edificio está soportado, la belleza que usted ve por debajo y por todas partes tiene vigas de acero, fundaciones de acero, columnas de acero. Ese balcón es todo acero y encima están las carpetas, las alfombras, todo lo demás, el adorno. Pero hay una estructura.

Nuestro cuerpo es carne y por fuera tiene una cierta belleza, más o menos para muchos, pero adentro… usted ha visto alguna vez unos dibujos anatómicos, lo feo que es el ser humano cuando se le quita la piel, lo que hay es un esqueleto, hay un sistema nervioso, una cantidad de cablería, venas por dondequiera, intestinos, estómago, todo. Si usted piensa en lo que compone a esa mujer que usted tanto ama y de la cual está tan enamorado, nunca se va a casar con ella. Eso es así, porque todo es estructura. Nosotros somos estructura. Somos sistemas y entonces Dios toma esos sistemas y los cubre con una cosa bella, pero dentro hay una anatomía y así debe ser con la vida del ser humano también. Todo en el universo requiere una estructura.

Y por eso es que Dios habla, no solamente de las cortinas sino ahora entra a una parte estructural y piensa en las cuerdas que van a agarrar. Las cuerdas en una tienda de campaña son esos cordones que van a atar esa cortina a la tierra y van a impedir que venga el viento o la brisa y comience a moverla por dondequiera, imagínese si no hubiera esas cuerdas. Las cuerdas son la estructura.

Y yo creo que asimismo en nuestra vida y en nuestros proyectos que emprendemos tiene que haber estructura. Y esa es una de las cosas más difíciles para nosotros aprender como latinos que somos, voy a hablar ahora entre latinos, por ejemplo, la cultura latina es una cultura, así como la cultura africana yo creo también, es una cultura muy espontánea. Nosotros nos reímos de todo, nos gozamos con todo, todo es amistad, usted va a nuestras oficinas de gobierno y ahí está todo el mundo hablando por teléfono y llega fulanito que es amigo de la que trabaja en la maquinita, “Ah, no, ven tu primero,” y lo ponen por encima de la línea, un desastre muchas veces.

La gente se va antes… Ahora eso ha cambiado un poco pero antes en nuestros países la gente se va a las 12 y regresaba a las 2 de la tarde, después de dormir una siesta, darse un baño, comer una comida con arroz, habichuelas, carne y todo, ¿quién va a trabajar, quién va a producir nada? Después de una siesta como esa y una comida tan fuerte, ya el resto del día estaba perdido. Nuestras culturas son culturas que muchas veces carecen de estructura, carecen de gobierno, carecen de sistemas, carecen de protocolos. Nosotros no planificamos, hermanos, hay que decirlo, claro que hay excepciones, yo entiendo eso muy bien.

Pero mire los países de nuestro continente, son países que no funcionan y… piense en México, un país con tantos recursos y perdone si hay algún mexicano aquí, no estoy hablando de… yo amo a México muchísimo, pero un país tan rico, con tantos recursos, con una geografía tan grande y sin embargo tanta pobreza, tanta miseria, tanto mal funcionamiento.

Venezuela ahora mismo qué triste decirlo, un país con petróleo como pocos países del mundo, con una fortuna increíble, es un caso de una neurosis nacional terrible. Piense en África, esos países que tienen tantos recursos minerales, tantos recursos naturales, sin embargo son naciones que viven en la miseria y que la corrupción se lo lleva todo. Guatemala, El Salvador, Honduras y como digo mi propio país República Dominicana. Mire Puerto Rico, parte de Estados Unidos y ahora mismo hay que sacarlo de la bancarrota.

¿Cuál es el problema con nuestras naciones y nuestras sociedades? Es que no hemos aprendido a funcionar conforme a estructuras, conforme a principios, conforme a protocolos, sistemas. Nosotros funcionamos por impulso. No nos moriremos de ansiedad nunca, es como los dominicanos, nosotros aunque estemos muriéndonos de hambre pero para una buena cerveza y un merengue siempre hay tiempo y siempre hay dinero. Eso es así. ¿Sí o no?

El gringo se muere de úlceras y de ansiedad, nosotros no, nosotros viviremos hasta los 100 años pero pobres y pasándolo mal en otras maneras. Nos gozamos pero somos como animales silvestres, corriendo por el campo libremente pero no servimos ni para carga, ni para montarlo ni para nada. Es así, porque carecemos de estructura, disciplina, protocolo, sistema, planificación, gobierno, hábitos que van por encima de nuestros impulsos.

Muchas veces si nos sentimos que queremos hacerlo, lo hacemos, sino, no. yo le digo a la gente uno de los grandes principios para el éxito es dominar lo aburrido. Si tu aprendes a dominar lo aburrido y lo haces de todas maneras tu eres un gigante y vas a ir lejos. Nuestros jóvenes, aprenden a sentarse y a leer, si tiene que quedarse sentados 2 horas, 3 horas, lee. Hay muchos jóvenes que usted le dice, si tu quieres estudiar e ir a la universidad y sacar buenas notas vas a tener que pasar 3, 4 horas leyendo todos los días y estudiando y eso como ponerle la cruz a un vampiro. ¿Qué? ¿4 horas? Ellos creen que don 10 minutos de leer ya van a…

El blanco, por así decirlo, no es que son más inteligentes que nosotros, es que son más disciplinados. Yo he ido a las grandes universidades de esta tierra y les digo la verdad, la mayoría de la gente que llega a Harvard, a Princeton, a Yale a todos esos sitios, no es que son genios, ni son brillantes, es que tienen una capacidad increíble para trabajar, para leer, para disciplinarse, para pasar una noche sin dormir haciendo el trabajo. Lo que te enseñan esas grandes universidades es disciplina, persistencia, dominar tus impulsos y tus emociones y ser puntilloso, ser sistemático en las cosas, ser analítico.

Y nosotros tenemos que aprender esa parte de nuestra vida, tenemos que aprender a dominar lo pequeño, a dominar lo aburrido, a dominar lo que no nos gusta y vivir por principios, no por sentimientos o por temores o por apetitos. No. el hombre, la mujer, que llegar a grandes cosas es que ha aprendido a disciplinarse y a vivir por principios. Se levanta a cierta hora, si sabe que por la mañana tiene que levantarse a las 5, pues acuéstate a las 10 de la noche, deja la novela, deja la película, deja el bembeteo en el teléfono, acuéstate y levántate temprano y aprovecha esos minutos de la mañana. Hay que disciplinarse, hermanos.

En tu trabajo sé persistente, hazte imprescindible, esas 8 horas de trabajo dale 9 a tu jefe, enseña excelencia en lo que haces, estructura, las cuerdas que sostendrán tu vida tienen que ser poderosas también. Hay una parte que tu tienes que hacer que Dios no la va a hacer. El problema es que muchas veces, Señor, dame esto, dame el trabajo, dame el aumento de sueldo, pero no hacen nada de tu parte. Y Dios dice, bambalán, como dice Miguel. Sinvergüenza, ponte a trabajar y en tu trabajo yo voy a bendecir y te voy a llevar hacia adelante. Hay una parte que tu tienes que hacer. Disciplina, estructura, organización, principios, sistemas, la parte estructural, la estructura que va a sostener tu proyecto, tu visión.

Y finalmente, dice, “y refuerza tus estacas.” Piense en una persona que consigue una tela mucho más grande, una cortina bien grande, en un espacio bien grande para poner una nueva tienda de campaña, va y compra en Home Depot las cuerdas más fuertes, más gruesas posibles, y entonces deja las estaquitas chiquititas que tenía la tienda cuando era bien pequeña originalmente y con eso amarra todo lo demás. Usted cree que por más grande que sean esas cuerdas y las estacas no están fuertemente metidas y no son estacas mucho más grandes esa tienda cuando venga todo el viento… porque imagínese ahora esa tienda es mucho más grande. Hay más tela que empujar y cuando el viento viene y se mete dentro de esa tienda o empuja por afuera, hay más espacio, más tela, más cosas que puede mover o desde adentro o hacia adentro. Entonces, necesita unas estacas bien fuertes que sostengan las cuerdas.

Por eso es que yo creo que este pasaje no es simplemente una ilustración. Yo he encontrado allí principios para la vida que son muy poderosos. Ahora, ¿a qué equivalen las estacas en términos de vida? Yo diría que las estacas me hablan a mí acerca de defensa, protección, de cosas que van a garantizar la duración del proyecto, la parte defensiva, la parte protectiva, la protección de un proyecto.

Sabes que cuando Dios te bendice y Dios te prospera y te ponen, por ejemplo, en un lugar de más responsabilidad, o de más influencia, entonces el viento de la vida comienza a soplar más fuertemente contra ti. ¿Para cuántas personas, por ejemplo, el que le den un aumento de trabajo ha significado el desplome de su matrimonio? Porque comenzó a trabajar más, porque demandaban más horas, ahora es el supervisor, ahora tiene que trabajar mucho más, llega a la casa de mal humor, tenso, su fin de semana tiene que pasarlo enviando correos electrónicos, contestando… y se olvida de su casa, se olvida de su esposa, se olvida de sus hijos, y cuando viene a ver esa bendición de ese nuevo trabajo, esas cuerdas más grandes y esas cortinas más grandes vienen a ser de maldición para su vida. Pierde su matrimonio, pierde su salud, se pone neurótico porque no reforzó las estacas.

¿Cuáles son las estacas? Las estacas en nuestra vida son la oración, la integridad, el carácter las relaciones humanas, el dominio propio, el dominio del yo. Cuando Dios te bendice el enemigo va a querer hacer daño en tu vida y van a venir retos como consecuencia de la bendición. Toda bendición tiene su lado negativo y peligroso, siniestro, toda bendición. Los ministerios Dios los pone a crecer muchas veces, Dios nos da iglesias crecientes, más grandes, con más prominencia en la ciudad pero también vienen más tensiones.

Usted cree, por ejemplo, el servicio en inglés, si ese servicio que yo creo que sí, que va a crecer, van a venir mucha gente secular, van a venir personas profesionales que están acostumbrados a mandar y a querer que todo sea por votación y que todo se haga de una manera como se hace en el mundo, van a venir gente con malas costumbres seculares y sociales, y va a haber mucha más presión para mí como pastor principal, y para todo el liderazgo de la iglesia a comenzar a comerciar con el reino y comenzar a predicar un Evangelio más cómodo, que sea más conveniente para esa gente, más culta y más educada y más secularizada.

Y viene la tentación a bajar el nivel de la predicación, a no hablar de cosas que ofendan a la gente. Hay más prominencia, sí que las noticias, cualquier cosas que se dice desde el púlpito se expande, se da a conocer, y entonces uno comienza a ser más conservador y a tener más cuidado con lo que dice. Es peligrosísimo, por eso es que muchas veces hay que tener cuidado con uno desear más grandes cosas. Hay más peligros.

Entonces uno tiene que reforzar las estacas. Uno tiene que decidir, Señor, yo primero te voy a honrar a ti contra viento y marea, no importa quién venga, el Presidente Obama puede venir y sentarse ahí y si tu me diste un sermón que yo tengo que predicar y lo ofende, so be it, que así sea, yo voy a predicar la palabra del Señor. No importa quién venga. No vamos a cambiar nuestras costumbres, nuestro mensaje, y nuestra fe en Dios ni en la palabra del Evangelio.

Porque esa es la tentación del diablo. El diablo quiere seducirte, te da el mundo, como le dijo a Jesucristo, “Yo te puedo dar todo, si tu simplemente me adoras.” Cuando Dios te bendice asegúrate de que tu veas el lado oscuro y que tu te prepares para la bendición. Si Dios te da un matrimonio, cuídalo, bendice, si Dios te da a tus hijos atiéndelos, si Dios te da un ministerio, comienza a fortalecer tu carácter, tu integridad, tu caminar con el Señor. Mira a ver cuáles son las áreas débiles en tu vida, ira, sensibilidad extremada a la crítica, heridas del pasado. Ahora vas a necesitar ser más cauteloso. Tus estacas tienen que ser más grandes e ir más profundo en la tierra. Si vas a estudiar asegúrate de sacar tiempo para el Señor, asegúrate de poner todos tus estudios y tus esfuerzos en el Señor.

Si vas a abrir un negocio no dejes de darle tu diezmo al Señor. No dejes de orar por tu trabajo, estudia buenos libros, cuida tu cuerpo, descansa, cuida tu matrimonio. Estacas. Cosas que protegen la bendición que estás recibiendo del Señor.

Yo espero que esto te sea de bendición para tu vida. Celebra lo que Dios va a hacer, gratitud, expectativa, confesión positiva, anchar tu visión y esperar grandes cosas del Señor. Lanzarte a realizar los sueños y en el camino Dios te va a encontrar y te va a abrir nuevos caminos. Tu cuerda, vive una vida de disciplina, principios, protocolos, preparación, dominio propio, persistencia, atención al detalle.

Y finalmente, no olvides la protección de las estacas. La oración, la perfección del yo, superarte a ti mismo en muchas diferentes áreas de tu vida, proteger lo que Dios te ha dado, con guerra espiritual, oración, integridad, carácter.

Si tu haces estas cosas yo te garantizo una vida poderosa, una vida de gran bendición, de gran éxito y de cosas buenas y nuevas que irán manifestándose en tu vida. Recibe esta palabra ahora mismo.

Baja tu cabeza y di Señor, yo voy a vivir esa vida poderosa. Yo voy a vivir esa vida emprendedora, yo voy a poner atención a los principios de la buena siembra, del buen cultivo, de creerte a ti. Tu me has hecho un instrumento en este mundo, tu me has hecho un canal de energía, de bendición, un ejemplo, me has hecho una ciudad que otros mirarán para ver mi progreso y mi comportamiento y yo quiero ser lo más que yo pueda ser para inspiración a otros y para gloria del Señor.

Y quiero dar una oportunidad también por último, si alguien en esta tarde ha venido y Dios le ha hablado en alguna forma a través de la adoración, a través de la predicación, a través del tiempo de intercesión que hemos tenido aquí adelante, o algo que Dios ha hecho en tu vida, y tu sientes que quieres entregar tu vida al Señor porque después de todo ese es el principio de todo éxito, tener a Cristo en nuestro corazón, tener esa electricidad que le va a dar vida y energía a todo lo demás.

Y si todavía tu no has entregado tu vida a Jesús y quieres en esta tarde iniciar un caminar con Cristo como tu respaldo y tu recurso número 1, te invito a aceptar a Jesús como Señor y salvador y a hacerlo en la manera en que lo prescribe la palabra del Señor, que es confesándolo con tu boca, confesándolo delante de los hombres, invitándolo a ser tu Señor y tu salvador. Y qué mejor manera que aquí entre tus hermanos, en la familia de Dios en este lugar sagrado y seguro donde tu puedes hacer tu pacto con el Señor en esta tarde e invitarlo a ser tu salvador y tu Señor.

¿Habrá alguien que quiera dar ese paso esta tarde? Y si no lo ha hecho antes te invito ahora a levantar tu mano dondequiera que tu estés y queremos orar por ti y ponerte en las manos de Jesús para que te vayas de aquí bien, bien preparado para emprender esa vida poderosa, esa vida creativa.

Si hay alguien que quiera hacerlo en esta tarde abrimos este momento para eso. Hacemos este espacio. Levanta tu mano o simplemente pasa aquí adelante y me encantaría orar por ti en este momento. Gracias Señor, esperamos en tu te damos gracias Jesús por lo que estás haciendo y por lo que vas a hacer. Amén.

Si no hay nadie… vamos a poner nuestra vida en las manos del Señor ahora. Yo les deseo un buen fin de semana en el Señor, que disfruten de su tiempo, descansen, tengan buenos tiempos y vamos a vivir esas vidas fructíferas, esas vidas creativas y emprendedoras en un Cristo que quiere que tengamos éxito en todas las cosas que emprendamos.

Padre, te adoramos, te bendecimos. Gracias porque tu eres el Dios de triunfos, eres el Dios de montañas que escalamos, eres el Dios de horizontes sin fin, eres el Dios que nos sorprende con cosechas mucho mayores de las que esperábamos. Eres el Dios que ha puesto todo el poder del universo dentro de nosotros, tenemos el espíritu excelente de Cristo Jesús.

Pedimos que nos ayudes a ver las posibilidades que encerramos dentro de nosotros con Cristo de poder. Bendigo a tu pueblo en este fin de semana, Señor, bendigo nuestra nación. Danos un tiempo especial en estos próximos días y todo lo haremos para gloria y honra de tu nombre, en el en el nombre de Jesús oramos y el pueblo de Dios dice Amén.

Tenaces en la tensión

TRANSCRIPT

Quiero hablarles acerca del tema de este sermón que lo voy a titular “Tenaces en la tensión”, vamos a leer en Josué 3:14 hasta el capítulo 4 versículo 7. Algo que yo siempre estoy animando a los jovenes que hagan en el servicio que tenemos al otro lado es que nunca permita que el sermón sea como un monólogo en el que Dios te habla a ti pasivamente, tiene que ser un diálogo en el cual tú tomas notas e interactúas con el Espíritu del Señor, porque de esa manera tú vas a recordar las cosas que Dios puso en tu corazón cuando estábamos escuchándolo, así que ¿están listos? vamos a hacerlo, adelante.

Gracias por el compañerismo de los santos Dios, nos comprometemos a escuchar de parte Tuya, pedimos que abras nuestros ojos para verte más claramente hoy, corazones y mentes para ser sensibles a Ti, primeramente queremos honrarte a Ti como Padre, y queremos honrar también a los padres que están en medio de nosotros Señor, en Tu Nombre oramos Señor, amén, amén.

Quiero decirles: yo llegué a Boston para entrar a la escuela de leyes, la escuela de leyes era un sueño mío, quería haber hecho eso hace mucho tiempo ya así que cuando me aceptaron en la universidad de North Eastern me sentía con gran expectativa, yo sabía que tenía que venir de Florida hasta Boston.

Mi primer semestre en la escuela de leyes fue terriblemente retante y difícil, una de las cosas sobre la escuela de leyes es que te sumerge en un programa de aprendizaje muy intensivo porque tienen que enseñarte muchas cosas y enseñarte mucho para que tú puedas estudiar mucho esforzadamente, así que mi primer semestre en la escuela de leyes lo estaba haciendo excelentemente bien, estaba trabajando duramente todas mis clases pero había una clase que simplemente no podía comprender, se llamaba procedimientos civiles, y procedimientos civiles se trata de cómo traer un reclamo legal frente a una corte, y por alguna razón que no me explico simplemente no me entraba en la cabeza ese tema de procedimientos civiles.

Y el profesor me decía continuamente no se preocupen, cuando llegue el momento del exámen al final del curso todo va a estar bien, y ahí estoy yo sentada frente a la computadora lista para presionar el botón que dice okay comienza el exámen, y yo estoy diciéndole: ¡Señor no puedo entender nada todavía, ayúdame a comprender! así que abrí el exámen y comencé a leer la narrativa de la historia de la que trataba el exámen y traté de identificar los temas y las preguntas que constituían el meollo del exámen, y cuatro horas después de iniciar el exámen no sé qué fue lo que dije, lo que escribí pero terminé, yo tenía mi maleta ahí en una esquina del salón para irme de regreso a mi casa a la Florida porque quería salirme de todo eso.

Una de las cosas acerca de esa universidad North Eastern es que ellos no dan notas simplemente es una forma de ellos parecer bien cool, bien modernos en su forma educativa, pero en lugar de darte una nota, te dan como un párrafo donde el profesor dice qué tal te fue en el exámen lo cual es excelente cuando te va bien pero si no te ha ido bien en el exámen no es tan atractiva esa idea y como es una narrativa que tiene que escribir el profesor pues se toma tiempo para añadir las notas.

Así que fue más o menos por ahí a mitad de febrero cuando finalmente recibí las notas de mi exámen, y nunca lo voy a olvidar, estaba parada ahí en la esquina de Harrison Avenue con Rich Street, era un viernes en la noche y yo venía a trabajar con los estudiantes de escuela intermedia en el programa de I Wanna, y aquí voy yo recibiendo un texto de una amiga que me dice que finalmente llegaron las notas así que me metí en el internet en mi teléfono tratando de descubrir qué había pasado, ví todas mis notas y las narrativas todas: excelente, bien, buen análisis, buen trabajo, excepto la bendita clase de procedimientos civiles, y acababa yo de recibir simplemente, me habían pasado ahí raspando lo cual es el equivalente de una ¡D! yo nunca en mi vida había recibido ni siquiera una D, ni siquiera una C que es más o menos pasando ahí un poco mejor, me llamaban insuficiente en ese texto, me llamaban inadecuada mi performance.

Inmediatamente yo comencé a llorar porque aquí estoy yo, no tenía familia en Boston, he estado aquí por seis meses y me sentía como una huérfana, me quería ir a la seguridad de mi casa en Florida, quería dejar la escuela de leyes, olvidarme de mis sueños así que ¿qué hice? llamé a mi papá, porque ¿a quién llama uno en una situación así? Y le estaba diciendo a mi papá: papá me acaban de llamar marginal, inadecuada, insuficiente y mi papá ni siquiera entendía lo que le estaba diciendo.

Y mis padres siempre tienen esta costumbre de que cuando yo hablo con ellos siempre me ponen en el teléfono audible ¿no? en el speaker phone, y entonces mi mamá hace poco me dijo el lado de ellos de la historia, y ella me dice que mientras él me escuchaba en el teléfono le decía a ella bajito: ¡tenemos que decirle algo a ella!

Entonces nunca olvidaré en ese momento que mi papá me dice: definitivamente no vas a abandonar la escuela de leyes, no vienes a Florida, a la casa y de hecho tienes una asignación allá en la Iglesia a la cual tienes que atender ¿no es la hora de que estés allá en la Iglesia? “qué tú estás haciendo papi” (risas), no podía creer que mi papá me estuviera diciendo tal cosa.

Pero he aquí lo que tengo que decirles, que cuando estamos en esos puntos de tensión y la realidad es que siempre nos vamos a encontrar en algún tipo de tensión en nuestra vida entre las promesas de Dios y la realización de esas promesas, Dios ha declarado muchas cosas sobre tu vida, sobre la vida de tu familia pero no necesariamente quiere decir que tú vas a recibir esas cosas en los próximos 30 minutos.

Pero aquí está la idea que quiero explayar y exponer con ustedes: la invitación no es una invitación a vivir tensos todo el tiempo, es una invitación a ser tenaces, persistentes, mantenerse ahí en la lucha y cuando usted es tenaz lo que usted hace es que se mantiene en el ring, se mantiene en la pelea. Tú no dejarás entonces que la tensión te derrote sino que en ese caso lo que haces es que la tensión te fortalezca, te afirme, te discipline.

En la historia que leímos yo encuentro por lo menos tres principios de los cuales yo quiero hablar con ustedes, lo interesante yo encuentro de esta historia en particular es que encontramos a los israelitas en el borde mismo del río Jordán, han estado deambulando en el desierto durante cuarenta años, eran como ese siervo del cual cantábamos ahí en ese canto anterior, y aquí se encontraban ellos finalmente frente al río Jordán, Moisés les había dicho que eran el pueblo de Dios y Dios los enviaba a poseer la tierra.

Ahora lo que me impacta acerca de la palabra poseer en el idioma original, en el griego, es que esa palabra involucra dos cosas: desposeer para poseer, lo que yo encuentro aquí es que a fin de poder poseer las cosas de Dios tenemos que despojarnos de algo que requiere antes despojarse de él y eso quiere decir que para ellos poder entrar en posesión de la tierra, lo primero que tenían que hacer de alguna manera es desposeer ese río que se erigía algo así como como un obstáculo delante de ellos, y aquí está el primer principio del cual quería hablarles: manténte firme cuando te encuentres en la tensión.

Y quiero hablarle a los padres por un momento, quiero hablarles acerca del rol que tienen como padres. La historia al comienzo vemos esto, los sacerdotes que llevaban el arca y que estaban ahí en frente del pueblo de Dios. Y así en las estructuras de nuestra familia normalmente los padres se supone que jueguen ese papel sacerdotal, desempeñan ese rol de establecer la estabilidad, de establecer el tema, la temática, la dirección del hogar, había una razón, una lógica detrás del hecho de que en ese momento de que yo cuando estaba en ese momento de crisis yo llamé a mi papá, no necesariamente a mi mamá, yo necesitaba escuchar esa voz de mi sacerdote, así que lo que vemos aquí en esta historia ¿no? es que vemos a los sacerdotes cargando delante el pueblo el arca del pacto, esa arca como sabemos tenía dentro de ella los diez mandamientos, tenía la vara de Aarón que había florecido en el desierto, era un recordatorio para ellos no solamente de la Presencia de Dios que caminaba con ellos sino del Poder de Dios que habitaba en medio de ellos.

Y como padres ustedes desempeñan ese papel, ustedes cargan el arca del pacto de Dios, y no solamente eso sino que ustedes la cargan y en un sentido sostienen la Presencia de Dios en el centro, en el medio de su familia, y eso está bien. Ahora no solamente juegan ustedes ese papel de liderazgo sino que esto involucra ciertas responsabilidades y aquí dice en el texto que los pies, las plantas de los pies de los sacerdotes tocaron por un momento la superficie del agua del río y a mí me encanta esa imagen porque son los pies de nuestros padres los que nos guían, nos orientan.

Y veo ahí como un paréntesis en el versículo 15 si lo pueden poner, dice que las orillas del río Jordán se desbordan durante la primavera, durante el tiempo de la cosecha. Ese paréntesis no está allí simplemente como un pensamiento secular secundario porque en la primavera el río Jordán se hincha muchísimo más o menos de 3 a 10 piez debe ser, y entonces se hace como de 90 a 100 pies de ancho, mucho más que lo normal, he aquí tú y tu familia están al borde mismo de realizar y cumplir tus promesas, pero en frente de ti ves una frontera, una barrera que es insuperable en un sentido.

Pero aquí vemos cuál es el rol del sacerdote, el sacerdote casi como que pone la punta de sus pies en el agua, pisa el agua y cuando parecía imposible que algo sucediera, esto me hace imaginar todos los ríos inaccesibles insuperables que ustedes tienen que continuamente estar pisando para resolver un problema. Tienes que ir por ejemplo a esa investigación antes que tu hijo entre a estudiar en esa escuela, tienes que investigar el equipo de soccer en el cual va a jugar tu hijo para asegurarte de que sea una buena experiencia y un buen lugar para él, tienes dos hijos cada uno en una escuela diferente para llevarlos de aquí para allá, Arnold Dios te bendiga, eres un hermoso padre y un ejemplo de eso.

Uno tiene que estar siempre como pisando el río y haciendo cosas imposibles para ellos, y eso es parte de tu responsabilidad como padre, es parte de ese honor que nosotros hoy celebramos como padres. Así que no solamente tenían estos sacerdotes la responsabilidad de pisar con los pies la superficie del agua del río Jordán sino que miren a ver, observemos la reacción que ellos tuvieron.

Dice que los sacerdotes portando el arca se pararon firmemente en el medio del río que ahora estaba dividido, estaban en terreno seco, ahora ¿cómo fue eso posible? de eso se trata la fe de un padre, la fe de un padre que ve que las cosas parecen imposibles pero que también sabe que a través de Cristo Jesús todas las cosas son posibles.

Así que ahí los veo a ustedes parados en el mismo medio del río Jordán y ese era mi padre cuando lo llamé en medio de ese momento de crisis, ¡no, no vas a venir a casa, te vas a quedar en Boston, ve y sirve! esa es la fe de un padre, ese es el tipo de reacción que nosotros queremos que nuestros padres siempre ejemplifiquen, que ustedes se mantengan firmes a favor de nosotros y nosotros hoy estamos honrando las mil maneras en las que ustedes se han mantenido firmes a través de su paternidad.

De hecho también hay otro grupo de personas que queremos honrar en esta tarde, queremos honrar a los graduandos que se han graduado de diferentes cursos. ¿Saben ustedes? la graduación es algo que es algo verdaderamente como familiar porque no eres solamente tú que te estás graduando sino también tus padres que han contribuido a esa graduación, tus hermanos, tu hermana que tuvieron que soportarte en ese proceso, y nosotros estamos en esa época de graduaciones por donde quiera ¿saben ustedes? debido al hecho de que sus padres se mantuvieron ahí en esa tensión fue que ustedes pudieron pasar a la tierra prometida.

Así que el segundo principio que vemos explayado en esta historia, en la primera vemos eso ¿no? mantenerse parado ahí en la tensión firme, pero también tenemos que halar de esa tensión, así que en Josué capítulo 4 versículo 3 dice: “Tomen doce piedras del medio del río Jordán que está seco ahora”. Lo que me encanta, lo bello de esta imagen es que podemos observar los papeles, los diferentes roles que juega el pueblo en esta situación.

Los sacerdotes firmes en su posición, ahora los otros líderes lo que hicieron fue que extrajeron esas piedras del río mismo, del fondo del río, y quiero decirles graduandos, los que se gradúan que esto fue lo que han hecho en esta época de graduaciones. Una graduación es un momento simbólico en tu vida, es un momento en que tú pasas al otro lado en el sentido en que es una nueva era, una nueva época en la cual estás entrando.

Y cuando dicen tu nombre y tú caminas, llegas allí hasta la plataforma y te dan ese diploma, literalmente lo que has hecho es que has pasado a la otra orilla y entonces ese potencial que está dentro de ti ahora ha sido como desatado, es un nuevo comienzo, pero ¿sabes? es un nuevo comienzo también que vendrá con responsabilidades nuevas, así que Josué les dice: saquen esas piedras del río, las amontonen y hagan como una especie de columna con las piedras, y saben ustedes que esas columnas en nuestras vidas vienen de esos lugares donde nuestros padres se han mantenido parados.

Nunca debemos perder vista de ese hecho. Cuando uno pasa al otro lado la Biblia te dice llévate algo para que recuerdes eso que pasaste, extrae, saca algo de esa tensión donde habitaste.

Yo pienso que muchas veces nosotros permitimos que esos momentos de tensión mas bien como que nos rompan, nos separen de nosotros mismos porque eso nos estira demasiado, nos estresa, nos hace sentir como ansiosos y conflictuados, pero aquí Josué nos recuerda: no dejes que la tensión como que te rompa en dos ¿no? te separe en ti mismo sino mas bien hala algo de la tensión misma para tu beneficio.

Y vemos que en el versículo 6 se nos hace una pregunta muy poderosa, dice que cuando tus hijos te pregunten en el futuro ¿qué significan estas piedras para ti? Yo creo que esa es una pregunta muy poderosa porque cuando nos vemos caminando a través de estos momentos en la vida de tensión y de reto, cuando experimentamos esos momentos en que parece imposible una victoria, cuando yo era jovencita odiaba la geometría, pensaba que nunca la iba a pasar pero la pasé. Hoy en día yo no le puedo decir nada de esos paralelogramos y de esas cosas que estudié pero la pasé, vencí, cuando uno está metido en el lío uno piensa que es imposible salir de él.

Así que cuando tú tomes esas piedras del medio del río eso te dará la oportunidad de compartir con otros lo que esa piedra te recuerda del proceso que acabas de vivir. ¿Qué significado espiritual tiene ese momento que viviste ahora que te encuentras en el otro lado?

Y esto nos trae al último y tercer principio que quiero compartir con ustedes: establece recordatorios, establece recordatorios. Nosotros somos olvidadizos, por eso es que en el iPhone tienes una cosita que se llama recordatorios para que no se te olviden las cosas, y así mismo era esa gente en ese tiempo, también necesitaban recordatorios.

Así que él les dice a ellos en Josué 4:19, dice que ellos llegaron al Jordán el día 10 del mes primero y acamparon en Gilgal, Gilgal es un nombre muy interesante porque es como un juego de palabras, y viene de la palabra Galal, ustedes saben eso muy bien, que quiere decir como que tú estás rodando, haciendo rodar algo de ti mismo para ponerlo sobre otra persona. Así que cuando el Señor los saca del río Jordán quiere que recuerden que Yo los saqué rodando de ese río donde se encontraban, todos tus temores, ansiedades, tú confiaste en Mí así que por esa razón yo te saqué al otro lado, amén, praise the Lord, así que esa palabra Gilgal literalmente quiere decir compromiso.

Así que vemos en el Salmo 37 versículo 5 confía tu sendero al Señor y Él hara, es un recordatorio del compromiso de Dios con ellos y el compromiso de ellos con su Dios, y esto es exactamente lo que ha pasado con nuestra familia como resultado del hecho de que nuestros padres se han mantenido en la tensión, se trata de un padre que ha comprometido su sendero con el Señor, y como ha comprometido su sendero al Señor, como él rodó con sus cargas y las echó de un lado sus temores acerca de lo imposible, eso quiere decir: que tú pudiste padre pasar al otro lado.

Y ahora me refiero a los graduandos, igualmente eso es lo que les ha sucedido a ustedes también, ustedes también han tenido como en un sentido que entregar sus cargas al Señor para pasar al otro lado. Quizás un día usted también pensó: hey yo no me voy a poder graduar pero lo hiciste y es por esa dependencia del Señor, ese compromiso con Dios.

Y ahí dice en el versículo 24 en el capítulo 4 dice el Señor: Yo quiero que ustedes establezcan estas columnas para que todos los pueblos conozcan la mano del Señor como poderosa y para que teman la mano de Jehová todos los días.

Yo creo que lo hermoso, lo bello de mantenernos en la tensión, ser tenaces en la tensión es que según nosotros caminamos conforme a los caminos del Señor su Mano nos ha protegido en toda la trayectoria, así que en esa tensión que experimentamos entre las promesas de Dios y su realización debemos ser tenaces, mantenernos, tenemos que aferrarnos a las formas de Dios y tenemos que recordar las victorias que ya hemos tenido cuando nos hemos mantenido en la tensión, así que hoy nosotros honramos a esos padres que se han mantenido firmes.

Y no importa cuál sea su situación familiar, no importa que quizás usted no ha tenido una imagen firme de un padre en su vida pero no importa, fueron los sacerdotes los que se han mantenido firmes y nosotros tenemos un sacerdote, sumo sacerdote que ha estado manteniéndose firme delante de Dios y Él se mantendrá firme mientras tú pasas por la tensión.

Así que mientras en nuestra vida nosotros pasamos de un lugar a otro lugar, a otro lugar siempre va a haber tensión pero tenemos que mantenernos firmes en esa tensión, tenemos que halar cosas de esa tensión y entonces tenemos que establecer recordatorios, memoriales de lo que fue esa tensión. La tensión no es que tú te mantengas ahí tenso, estresado sino a que seas tenaz, firme, mantenerte en la tensión.

Así que si tú te has graduado de alguna cosa no importa de que sea, escuela superior, universidad, algún programa técnico, una clase de economía doméstica, lo que sea, belleza yo quiero invitarte a que vengas con tu familia, pasa aquí adelante, si tú te has graduado de algo, si tú has tenido una victoria estos últimos días de alguna cosa de la cual te has graduado te invitamos a pasar aquí adelante.

Algo que queremos hacer por ustedes esta semana, tenemos una piedrita memorial para cada uno de los graduandos (aplausos), y hay algo que quiero recordarles acerca de esas piedras memoriales: Dios te ha atravesado a través de esta experiencia para algo mayor, algo grande. Hubo gente que se mantuvo en la brecha por ti, el Señor se mantuvo firme a tu favor y Él te sacó al otro lado, y Él hizo eso solamente para desbloquear un nuevo nivel de potencialidad en ti, así que por medio de esa piedra yo quiero que tú recuerdes que Dios te atravesó, Dios te sacó de ahí y la tierra prometida está delante de ti.

Vamos a ponernos de pie, vamos a orar por nuestros hermanos ¿amén? yo creo que hemos recibido una buena Palabra nutritiva y bendecimos a estos hermanos, amén, amén, vamos a extender nuestras manos hacia estos graduandos también, Padre te damos gracias por este día de los padres Señor, te honramos como nuestro Dios, nuestro Padre, te honramos Jesús como nuestro sumo sacerdote y te damos las gracias por mantenerte firme a nuestro favor, gracias por mantenerte allí en medio de la tensión, bendice Señor a cada uno de estos graduandos, gracias por la victoria que celebramos la cual está en Cristo y solamente en Él, y celebramos el hecho de que esa tierra prometida está delante de nosotros.

Gracias Señor por Tu fidelidad, bendecimos a cada padre en esta casa en esta mañana, los honramos por la manera en que ellos se han mantenido firmes, doble porción de Tu fuerza, de Tu sabiduría en sus vidas, te damos gracias por todas estas cosas Señor y oramos en Tu Nombre, amén, amén, gloria a Dios, amén, gracias.

Bienaventurado aquél cuya transgresión ha sido perdonada

TRANSCRIPT

Vamos al Libro de los Salmos capítulo 32. Hoy quiero compartir con ustedes un Salmo que tiene mucho potencial de acercarnos un poquito más a Dios. La semana que viene nosotros vamos a estar celebrando el día de los padres aquí en Estados Unidos y quizás muchos ya se están preparando comprando cositas para papá, cosas así, pero yo creo que siempre es bueno tener en perspectiva que nuestro Padre celestial también necesita ser celebrado y reconocido en nuestras vidas y nuestras presencias, y hoy yo quiero hablar acerca de un Salmo donde el Rey David tiene un diálogo con Dios muy interesante que yo creo que nos muestra un poquito en cuanto a la relación muy íntima que él tenía con Dios.

Yo quiero que leamos ese Salmo, Salmos capítulo 32, ustedes pueden leerlo si lo buscan en su Biblia, pero dice la Palabra de Dios: “Bienaventurado aquél cuya transgresión ha sido perdonada y cubierto su pecado. Bienaventurado el hombre a quien Jehová no culpa de iniquidad y en cuyo espíritu no hay engaño; Mientras que ayer se envejecieron mis huesos en mi gemir todo el día porque de día y de noche se agravó sobre mí Tu mano, se volvió mi verdor en sequedades de verano; Mi pecado te declaré y no encubrí mi iniquidad. Dije: confesaré mis transgresiones a Jehová y Tú perdonaste la maldad de mi pecado, por eso orará a Ti todo santo en el tiempo en que puedes ser hallado. Ciertamente en la inundación de muchas aguas, no llegarán estas a él; Tú eres mi refugio, me guardas de la angustia, con cánticos de liberación me rodearás; Te haré entender y te enseñaré el camino en que debes andar, sobre ti fijaré mis ojos;”

“No seáis como el caballo o como el mulo sin entendimiento que han de ser sujetados con cabestro y con freno porque si no no se acercan a ti; Muchos dolores habrán para el impío mas el que espera en Jehová le rodea la misericordia, alegraos en Jehová y gozaos justos, y cantad con júbilo todos vosotros los rectos de corazón.”

Es un Salmo muy bonito, muy profundo que tiene un trasfondo muy interesante, y antes de que entremos a fondo en lo que yo creo que Dios tiene para nosotros en este día a través de este Salmo vamos a hablar acerca del Libro de los Salmos en general.

Muchos de nosotros sabemos que el Libro de los Salmos es una colección de 150 poemas escritos por diferentes personas que expresan una variedad de emociones, es uno de los Libros más sentimentales de la Biblia donde uno encuentra temas de amor y adoración para con Dios, tristeza por el pecado, dependencia de Dios ante las diferentes circunstancias de la vida, también vemos el tema de la batalla entre el temor y el confiar en Dios, y el caminar en Dios en medio de un camino oscuro.

El Libro de los Salmos es un Libro donde por años, siglos los cristianos han ido ahí en busca de esperanza, en busca de aliento. En general cuando uno se siente mal, cuando uno se siente abrumado por el pecado, por los problemas de la vida uno como que va al Libro de los Salmos para buscar una palabra de esperanza, una palabra de aliento, y es muy interesante quizás darse cuenta de que los Salmos conectan tanto con nosotros porque fueron escritos por personas que estaban en medio de situaciones donde la única esperanza que ellos tenían era clamarle a Dios y a veces cuando nosotros nos encontramos en situaciones así recurrimos a los Salmos porque tienen ese mismo efecto de darnos esa esperanza, ese aliento que nos anima a seguir un día más sabiendo que nuestra historia no termina como en medio de la situación que estemos sino que nosotros sabemos cómo termina.

Ah, este Salmo en particular, el Salmo 32 es considerado uno de siete salmos penitenciales, y generalmente el término penitencial se relaciona con salmos que se prestan, que son himnos donde los miembros de una congregación o donde la persona individual está confesando sus pecados y se está permitiendo apelar al carácter misericordioso de Dios para experimentar Su misericordia.

Sin embargo cuando uno mira el Salmo 32 en específico uno se da cuenta que más que un Salmo penitencial donde el salmista está pidiendo perdón por sus pecados, donde el salmista está quebrantado, adolorido, el salmista está mas bien dándole gracias a Dios por haber perdonado su pecado, es un salmo que a pesar que se considera como uno de penitencia donde uno va para pedir perdón por mi culpa, por mi pecado, todo esto, este salmo es diferente porque es un himno de acción de gracias donde el Rey David está agradeciéndole a Dios por haberle perdonado.

Nosotros vemos un ejemplo en este salmo de cómo los salmistas compartían sus más profundas penas y su sentir con Dios directamente sin necesidad de ningún intermediario. El Salmo 32 es un testimonio del gozo que uno recibe al experimentar el perdón de Dios sabiendo que uno no merece ser perdonado, que es por gracia que uno es perdonado. Es un diálogo litúrgico entre el Rey David y Dios, un diálogo que comenzó a solas y luego se manifestó en la presencia de otras personas que estaban junto con el Rey David, y es una invitación a confesarnos para con Dios de manera que también podamos experimentar este gozo exhuberante que el Rey David experimentó al haber sido perdonado, y el Salmo 32 también nos enseña de que si venimos a Dios con corazones de confesión Él nos escucha y Él nos perdona.

Algo muy interesante acerca de este salmo es que muchas personas que estudian la Biblia lo conectan con el Salmo 51 y es un salmo que vamos a leer más adelante, y el Salmo 51 es un salmo que el Rey David escribió inmediatamente después de ser confrontado por el profeta Natán luego de haber pecado con Betzabé, todos conocen la historia un poquito que el Rey David se enamoró de una mujer que vió bañándose en una piscina y entonces el quiso acostarse con ella, se acostó con ella y ella quedó encinta, entonces como para tratar de cubrir su pecado él manipuló una estrategia de batalla y puso al esposo de esta mujer en la línea de combate para que a él lo mataran, entonces a él lo mataron y todo y entonces esto como que pasó sin que nadie se diera cuenta pero él sí sabía lo que había hecho, entonces el Salmo 32 es como una respuesta a lo que pasó en el Salmo 51.

Y mira lo que dice en el Salmo 51 versículo 13, estos son los versos que David escribió como prometiéndole a Dios que si Él lo perdonaba esto es lo que él iba a hacer, entonces en el Salmo 51 a partir del versículo 13 David le dijo al Señor: “Si me perdonas entonces enseñaré a los transgresores Tus caminos y los pecadores se convertirán a Ti; Líbrame de homicidios oh Dios, Dios de mi salvación, cantará mi lengua Tu justicia; Señor abre mis labios y publicará mi boca Tu alabanza”.

David estaba diciéndole a Dios: Señor si Tú me perdonas por esto que yo he hecho yo me estoy comprometiendo delante de Ti que yo voy a hablar acerca de Tus bondades, voy a hablar acerca de Tu misericordia infinita, voy a escribir salmos y alabanzas a Ti, entonces el Salmo 32 es un resultado de esta oración que él hizo.

Pero para que ustedes tengan una idea un poquito más clara del vocabulario que se está manejando en estos dos salmos yo quiero que leamos el Salmo 51 también para que ustedes vean la diferencia de tono en los dos salmos. En el primer Salmo, el 51 David está pidiendo perdón y en el Salmo 32 él está dándole gracias a Dios, mira lo que dice el Salmo 51, él le dice: “Ten piedad de mí oh Dios conforme a Tu misericordia, conforme a la multitud de Tus piedades, borra mis rebeliones, lávame más y más de mi maldad porque yo reconozco mis rebeliones y mi pecado está siempre delante de Dios”, este era un pecado que lo estaba atormentando a él, a pesar de que la mayoría de la gente no se había enterado de lo que él había hecho él sí lo tenía presente.

Y él le dice: “Contra Ti, contra Ti sólo he pecado y he hecho lo malo delante de Tus ojos, para que seas reconocido justo en Tu Palabra y tenido por puro en Tu juicio, he aquí en maldad he sido formado y en pecado me concibió mi madre, he aquí Tú amas la verdad en lo íntimo y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría. Purifícame con isopo y seré limpio, lávame y seré más blanco que la nieve, hazme oír gozo y alegría y se recrearán los huesos que has abatido; Esconde Tu rostro de mis pecados y borra todas mis maldades, crea en mi oh Dios un corazón limpio y renueva un espíritu recto dentro de mí; No me eches de delante de Ti y no quites de mi Tu santo espíritu. Vuélveme el gozo de Tu salvación y espíritu noble me sustente; Entonces enseñaré a los transgresores Tus caminos y los pecadores se convertirán a Ti; Líbrame de homicidios oh Dios, Dios de mi salvación, cantará mi lengua Tu justicia; Señor abre mis labios y publicará mi boca Tu alabanza porque no quieres sacrificio que yo lo daría, no quieres holocausto.”

“Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado y al corazón contrito y humillado no despreciarás Tú oh Dios”. Estas palabras encierran el corazón del Rey David, un corazón de una persona que estaba arrepentida finalmente en vista de lo que él había hecho, pero él estaba arrepentido, quizás pensó que el Señor no lo perdonaría pero aún así se postró delante de Dios y le abrió su corazón porque Dios lo conoce todo, pero él simplemente quería hablar con Dios como de hijo a padre, y él resolvió no quedarse abrumado por el pesar de su pecado sino que luego de experimentar el gozo del perdón de Dios entonces comenzó a darle gracias a Dios y ahí es que entonces nosotros comenzamos a ver lo que pasó con el Salmo 32.

Mira lo que dice el versículo 1 del Salmo 32, dice: “Bienaventurado aquél cuya transgresión ha sido perdonada y cubierto su pecado” ¿ven cómo cambia el tema? En el primer Salmo 51 él está clamando por piedad y por misericordia, está pidiendo: Señor perdóname, Señor ten misericordia de mí, pero una vez ya experimentó el perdón de Dios ya no hay más razón para que él se sienta menospreciado por Dios sino que ahora él está diciendo: “Bienaventurado aquél cuya transgresión ha sido perdonada y cubierto su pecado” “bienaventurado el hombre a quien Jehová no culpa de iniquidad y en cuyo espíritu no hay engaño” un espíritu que es transparente.

“Mientras callé se envejecieron mis huesos en mi gemir todo el día porque de día y de noche se agravó sobre mí Tu mano y se volvió mi verdor en sequedades de verano”. Los versos 1 y 2 del Salmo 32 establecen el tema y resaltan la razón por la cual David se siente bienaventurado.

La palabra bienaventurado significa feliz, extremadamente feliz, una proclamación exhuberante de aquéllos que experimentan el perdón de Dios, la palabra bienaventurado también se traduce como bendecido, entonces en el Salmo 32 está diciendo que la razón por la que él se considera un hombre bendecido es porque él ha sido perdonado por Dios y la razón de su felicidad interior se encontraba en esto.

Él se sentía bendecido porque sus pecados habían sido perdonados y es muy interesante ver aquí que la bienaventuranza o la bendición en la vida del Rey David no estaba necesariamente asociada con el bienestar material sino mas bien con la certeza de que su vida estaba bajo el cuidado y la protección de Dios.

Yo creo que por esto es que quizás las personas pobres a pesar de que quizás no tengan muchas comodidades en la vida también pueden experimentar la bendición genuina de Dios, se pueden sentir bienaventurados y bendecidos porque la verdadera bienaventuranza no se encuentra en cosas materiales.

Hoy en día si uno se pone a mirar en facebook, twitter, internet o hasta hablando por la gente uno se da cuenta que las únicas razones por las que se sienten bendecidos es por cosas materiales. Uno siempre dice que uno está bendecido cuando a uno le dan una beca para la universidad o cuando uno consigue un apartamento o le dan un aumento en el trabajo, cuando uno tiene una familia maravillosa, buena salud, buenos hijos, un ministerio vibrante en la Iglesia, y uno basa como que la bendición en esas cosas que se ven, pero yo creo que la bendición de la que está hablando el Rey David aquí va mucho más allá de eso.

El Rey David era el Rey de una nación, tenía a su disposición lo que quisiera: dinero, lugares, todo ¿qué no tenía él? es como, él no tenía necesidad de nada. Sin embargo en este Salmo lo que él está diciendo es que la razón por la que él se sentía bienaventurado y bendecido es porque él había experimentado el perdón de Dios. Es muy interesante ver cómo una persona que tiene tantas cosas se puede sentir vacío porque su gozo, su plenitud no se encuentra en estas cosas materiales que pueden pasar.

El problema con esto es que cuando nosotros basamos nuestra felicidad, nuestro sentir de ser bendecidos en este tipo de cosas materiales son cosas que no necesariamente nos guían a Dios.

Cuando nuestras necesidades están cubiertas uno en realidad no tiene necesidad de Dios. Por lo general uno viene a Dios cuando uno está en medio de un problema, uno siempre viene a Dios para pedirle cosas: Señor guíame, Señor ayúdame, Señor bendíceme y cuando le estamos diciendo que nos bendiga no tenemos en mente que nos perdone, queremos que nos bendiga dándonos algo que quizás nos va a acomodar un poquito.

Yo no estoy diciendo que los bienes materiales son malos, para nada, yo pienso que sí, que una casa, un carro, un trabajo, estudio, todas esas cosas son bendiciones de Dios pero el significado más profundo de la bendición de Dios no se queda ahí, es más profundo, va mucho más allá de eso, y es por esto que quizás la gente que no tiene una casa, no tiene un carro, no tienen cosas se sienten profundamente agradecidos con Dios porque se sienten bendecidos de saber que Dios está con ellos y que su felicidad no depende de estas cosas.

En el Nuevo Testamento en la Biblia hay 112 referencias en cuanto a las palabras bendecir, bendición, bendecido y lo interesante es que ninguna de estas citas bíblicas habla en cuanto a la prosperidad material. Yo voy a leer unos pasajes rápido ustedes no los tienen que buscar, pero solamente para que ustedes vean más o menos de qué se trata esto.

En Mateo en el pasaje de las bienaventuranzas Jesús está diciéndole a todas las personas que estaban presentes: Bienaventurado, se supone que la palabra bienaventurado significa bendecido, “Bienaventurados los pobres en espíritu, bienaventurados los que lloran, bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, bienaventurados sois cuando por Mi causa os vituperen” no hay ninguna referencia a posesiones materiales.

Mira lo que dice Lucas: “Bienaventurados los que oyen la Palabra de Dios y la guardan”, ¿okay? así es que uno es bendecido. En Romanos 4 el apóstol Pablo dice: “Bienaventurados aquéllos cuyas iniquidades son perdonadas y cuyos pecados son cubiertos”. Pablo está citando en el Nuevo Testamento el pasaje del Salmo 32 que nosotros acabamos de leer y vamos a hablar de eso un poquito más adelante, mira lo que dice Santiago: “Bienaventurado el varón que soporta la tentación” y en Apocalipsis habla de que: “Bienaventurados de aquí en adelante los muertos que mueren en el Señor”, “Bienaventurados los que son llamados a la cena de las bodas del Cordero”.

En ninguno de estos pasajes en el Antiguo o en el Nuevo Testamento hay un indicio de que la bendición está necesariamente conectada con prosperidad material ni con circunstancias perfectas en la vida, al contrario, uno ve que aquí el Señor está diciendo que bienaventurados, dichosos, felices son estas personas que sufren por causa del Evangelio, son las personas que se aferran al Señor en cualquier circunstancia. Ser bendecido se refiere a aquéllas personas que reciben el favor y la gracia de Dios a pesar de las circunstancias de su vida.

En el caso de David su gozo no se encontraba en saber que él había sido perdonado por Dios aún cuando él no se lo merecía y quizás, yo pienso que nosotros debemos desarrollar un entendimiento de que las bendiciones materiales son buenas pero son temporales, son cosas que se quedan aquí.

La Biblia nos dice que en medio de estas circunstancias, las circunstancias difíciles de la vida sí podemos ser bendecidos y los pobres pueden experimentar estas cosas. Una familia saludable, la prosperidad material y buena salud son regalos maravillosos por los cuales podemos agradecer a Dios y debemos agradecer a Dios por estas cosas pero estas no son las bendiciones principales de Dios, Dios quiere que nosotros nos deleitemos en el conocimiento de que hemos sido perdonados.

En el verso 1: “Bienaventurado aquél cuya transgresión ha sido perdonada y cubierto su pecado”. La realidad es que todas estas cosas que nos rodean, un buen trabajo, una casa, un carro esas cosas en cualquier momento pueden cambiar. Usted puede tener el mejor trabajo del mundo pero si su salud desfallece usted deja de trabajar.

¿Cuántos de nosotros conocemos personas que en alguna temporada de su vida estaban bien, tenían todas sus cosas cubiertas? Quizás muchos de nosotros antes de venir a este país gozábamos de buenos títulos donde nos encontrábamos y al venir aquí nos encontramos de repente limpiando pisos o lavando baños, haciendo cosas que no tienen nada que ver con lo que uno hacía en el país de uno, eso no significa que uno no es bendecido porque la bendición de Dios no se contiene en un trabajo ni en una condición social, la bendición de Dios se queda con uno donde quiera que uno vaya independientemente de lo que uno esté haciendo, entonces tenemos que basar nuestras cosas en eso.

Ahora, David dice: “Bienaventurado aquél cuya transgresión ha sido perdonada” ¿qué significa la palabra transgresión? La palabra transgresión es un sinónimo de rebelión y pecado, entonces él está diciendo: Bienaventurado aquél cuya rebelión, cuyo pecado ha sido perdonado.

Una definición de transgresión dice que es una violación de un precepto, de una ley o de un estatuto, es una transgresión que uno hace intencionalmente rompiendo la ley, que fue lo que él hizo; él sabía que lo que él iba a hacer con esta mujer no estaba bien. Él sabía que tratando de arreglar la situación mandando a matar al esposo de esta mujer él sabía que eso era aún peor y aún así lo hizo, ¿y cuál fue el resultado? que no tuvo paz en su corazón hasta que confesó sus pecados y experimentó el poder de Dios.

El Salmo 32 como dije antes es un Salmo al cual el Apóstol Pablo en el Nuevo Testamento hace referencia. Cuando el Apóstol Pablo en Romanos capítulo 4 dice: “Bienaventurados aquéllos cuyas iniquidades son perdonadas y cuyos pecados son cubiertos” él está citando este Salmo 32, y él está hablando del Antiguo Testamento resaltando que el Rey David era un ejemplo de una persona que había sido justificada por medio de la fe y no por medio de las obras; él está diciendo: el perdón de Dios no se gana por las cosas buenas que uno haga.

David, él no trató de hacer el bien y decir: okay ¿cómo yo voy a arreglar esta situación? voy a dar dinero a los pobres, voy a ayudar a la familia del Señor que maté, voy a hacer esto, no, él no se fue con eso, él simplemente le pidió perdón a Dios y la justificación se encuentra en eso no en las obras que uno puede hacer, porque si no las personas que tuvieran más dinero podrían cubrir sus pecados repartiendo dinero, haciendo obras caritativas, haciendo todo tiempo de bien, pero no se trata de eso, se trata de simplemente uno venir humillado delante de la Presencia de Dios.

Pablo nos recuerda de que nosotros también podemos tener esta experiencia de experimentar el perdón de Dios si nos humillamos. Ahora, sabiendo de que las verdaderas bendiciones se encuentran en el perdón de Dios, de que Dios quiere perdonar a cada uno de nosotros nuestra tarea es mantener esto en mente y recordarlo.

Desde el Antiguo Testamento Dios se ha dado a conocer para con Sus hijos como un Dios que quiere perdonarlos porque Él sabe que nosotros vamos a seguir fallando, mientras estemos aquí en la Tierra vamos a seguir fallando, con nuestras palabras, con nuestros hechos, vamos a fallar, Dios está consciente de eso pero Él quiere perdonarnos.

Mira lo que Él le dijo a Moisés cuando le estaba entregando ¿ustedes se acuerdan cuando Dios le dió los diez mandamientos a la gente, verdad? las tablas, que Moisés bajó y entonces encontró un desastre en el pueblo, rompió las tablas y entonces subió otra vez unas nuevas leyes para el pueblo como una segunda chance, mira lo que dijo Moisés en cuanto al carácter de Dios en ese entonces, él dijo en Éxodo: “Jehová, Jehová, fuerte, misericordioso y piadoso, tardo para la ira y grande en misericordia y verdad, que guarda misericordia a millares, que perdona la iniquidad, la rebelión y el pecado” este era el carácter de Dios, así era como Moisés conocía a Dios, así es como Dios se daba a conocer para con todas las personas en Israel y así es como Dios se quiere dar a conocer para con nosotros. Más que como un Dios que nos quiere dar bendiciones materiales Él quiere que nosotros lo reconozcamos como un Dios que es grande en misericordia.

David se consideró bendecido porque él sabía que el Señor le había perdonado y el perdón de Dios no es algo que nosotros debemos tomar a la ligera pero yo creo que nosotros sí lo tomamos a la ligera, nosotros no meditamos en la grandeza del perdón de Dios y cuando nosotros no meditamos en la grandeza del perdón de Dios en nuestra vida nuestro caminar con Dios se convierte en una gracia barata que es una gracia que nosotros damos por sentada y simplemente hacemos lo que hacemos porque sabemos que Dios nos perdona y ya, no estamos compungidos por el perdón de Dios.

Nos hemos acostumbrado al hecho de que hemos sido perdonados y es como si ni siquiera debiéramos agradecerle a Dios por esto, por esto es que se nos hace fácil caer en chismes, una mentirita blanca, robarse los lapiceros de la oficina, hay como cosas leves que uno hace a diario porque uno simplemente se siente perdonado por Dios y no es algo como que tan grande, y solamente le agradecemos a Dios cuando Dios nos da cosas materiales, pero ¿cuándo fue la última vez que usted se sentó en su casa a darle gracias a Dios no por un aumento, no por una ropa, no por su salud sino por el hecho de que Dios lo ha perdonado? Es muy fácil darle gracias a Dios cuando Dios nos saca de un problema pero es bien difícil recordar de dónde Dios nos ha sacado espiritualmente.

A veces nosotros creemos que el hecho de que un día hicimos la oración de fe y nos convertimos, nos perdonamos es suficiente y ya, no hay que pensar más en eso pero yo pienso de que Dios sí quiere que nosotros mantengamos en mente de que Él nos perdonó, sí, salvos por Su gracia pero es una cosa constante porque a diario nosotros fallamos.

Yo quiero leer un pasaje en Lucas capítulo 7 versículo 36 que ilustra un poco la actitud de dos personajes en cuanto al perdón de Dios en sus vidas. Si pueden ir conmigo al Libro de Lucas capítulo 7 versículo 33, yo voy a tratar de ilustrar lo que estoy tratando de decir con esta historia, okay mira lo que dice aquí, esta es la historia de una pecadora que ungió los pies de Jesús.

Dice: “Uno de los fariseos rogó a Jesús que comiese con él” lo invitó a su casa, los fariseos eran los líderes religiosos, y le dice: “y habiendo entrado en casa del fariseo se sentó a la mesa, entonces una mujer de la ciudad que era pecadora al saber que Jesús estaba en la mesa en casa del fariseo trajo un frasco de alabastro con perfume, y estando detrás de Él a Sus pies llorando comenzó a regar con lágrimas Sus pies y los enjugaba con sus cabellos, y besaba Sus pies, y los ungía con este perfume; Cuando vió esto el fariseo que le había convidado dijo para sí: este si fuera profeta conocería quién y qué clase de mujer es la que le toca, que es pecadora.”

“Entonces respondiendo Jesús le dijo: Simón, una cosa tengo que decirte, y él dijo: ¡oh! di maestro; Un acreedor tenía dos deudores, el uno le debía quinientos denarios y el otro cincuenta, y no teniendo ellos con qué pagar perdonó a ambos, di pues cuál de ellos le amará más.”

“Respondiendo Simón dijo: pienso que aquél a quien le perdonó más; Y Él le dijo: rectamente has juzgado, y vuelto a la mujer dijo a Simón: ¿ves a esta mujer? Entré a tu casa y tú no me diste agua para mis pies, mas esta ha regado mis pies con lágrimas y los ha enjugado con sus cabellos. No me diste beso mas esta desde que entré no ha dejado de besar mis pies, no me ungiste mi cabeza con aceite mas esta ha ungido con perfume mis pies, por lo cual te digo que sus muchos pecados le son perdonados porque amó mucho, mas aquél a quien se le perdona poco, poco ama. Y a ella le dijo: tus pecados te son perdonados.”

Esta historia para mí es una ilustración de un corazón agradecido que reconoce que ha sido perdonado y quiere expresar su gratitud para con Dios. Para esta mujer el saber que ella podía ir delante de Jesús y besar sus pies a ella no le importó quizás gastar todos sus ahorros en este frasco de alabastro, besar los pies de Dios, ungirlos con sus lágrimas, pero sin embargo el fariseo que conocía la Escritura, que andaba recto delante de Dios al ver a Jesús como que no se emocionaba, como que nada le pasaba porque ya él estaba salvo, ya él ni siquiera pensaba en sus pecados y yo pienso que muchos nos comportamos así a veces; mientras más tiempo pasamos en el Evangelio pensamos que ya lo sabemos todo, sí, Dios nos salva, Dios nos ama, que esto que lo otro y ya no tenemos la necesidad de postrarnos ante los pies de Jesucristo.

Por eso es que usted generalmente gente nueva en el Evangelio que son la gente que más se quebranta, la gente que más viene porque para ellos está fresco en su mente: wow Dios me perdonó mis pecados, esto es algo grande, esto es algo que no se puede tomar a la ligera, esto es algo que no se puede dar por sentado y son la gente que está dispuesta a ir y buscar ese momento de intimidad con Dios, y esto es lo que Jesús les está diciendo a estas personas en este cuadro. Ahora, cuando uno se da cuenta de qué tan pecadores somos y de cuánto Dios nos ha perdonado no tenemos otra opción que simplemente postrarnos ante el Señor y darle gracias por habernos perdonado.

Vamos a volver a nuestro pasaje en el Salmo 32, mira lo que dice el versículo 2: “Bienaventurado aquél cuya transgresión ha sido perdonada y cubierto su pecado, bienaventurado el hombre a quien Jehová no culpa de iniquidad y en cuyo espíritu no hay engaño.” La palabra engaño aquí se refiere a aquéllas personas que tratan de engañar a Dios encubriendo sus pecados y al mismo tiempo se engañan a ellos mismos, y engañan a las personas a su alrededor, son personas que se neutralizan en cuanto a darse cuenta de que ellos viven en pecado y ya ni siquiera les afecta eso, y ellos viven una vida donde se engañan ellos mismos.

David trató de engañarse a sí mismo al no confesar sus pecados para delante de Dios, la gente no sabía lo que David había hecho pero él sabía y Dios sí sabía, y es muy interesante de que David sabiendo que Dios es omnisciente, que Dios todo lo sabe aún así sintió la necesidad de confesar sus pecados.

Él pudo haber dicho: bueno Dios sabe que yo hice esto pero Él conoce mi corazón, Él sabe que yo estoy arrepentido, sigo adelante y no ha pasado nada, pero no, él no experimentó la paz y el perdón de Dios hasta que él confesó con su boca lo que él había hecho.

Mira lo que él dijo en el versículo 3: “Mientras callé se envejecieron mis huesos en mi gemir todo el día.” Aquí nosotros vemos la pérdida de vitalidad en la fuerza, la pérdida de la paz interior que David tenía y quizás esa era una de las formas que el Señor estaba tratando de usar para que David entonces volviera en sí y dijera: es que yo tengo que confesar mis pecados.

Hay personas que piensan que a veces Dios permite que lleguen pruebas a nuestras vidas porque estamos muy cómodos, porque no estamos pasando suficiente tiempo en oración entonces el Señor dice: Muy bien déjame mandarte otra cosa para que tú te acuerdes que tú tienes que depender de mí y no de tus propias fuerzas, de tus propios logros.

Mira lo que dice el versículo 5: “Mi pecado te declaré” en otras palabras, reconocí ¿verdad? reconocí mi pecado, “y no encubrí mi iniquidad, dije: confesaré mis maldades a Jehová y Tú perdonaste la maldad de mi pecado”. Nosotros somos bendecidos cuando nosotros confesamos nuestros pecados y decidimos andar en integridad delante de Dios y delante de los hombres.

Nosotros somos bendecidos cuando rehusamos vivir engañándonos a nosotros mismos ¿y a qué yo me refiero con engañándonos a nosotros mismos? Cada uno de nosotros sabe con qué lucha, todos nosotros tenemos luchas diferentes. Quizás para unos es: me gusta el chisme porque me entretiene y yo no estoy hiriendo a nadie con eso, usted tiene un problema con la mentira o la avaricia, o el orgullo, son cosas leves que quizás uno ve muy normal pero más que esas cosas quizás hay otros pecados más oscuros que usted tiene en su vida y usted sabe cuáles son.

¿Cómo uno vive engañándose a uno mismo cuando uno falla en reconocer esos pecados y traerlos delante de Dios en confesión y en arrepentimiento? A menudo nos es fácil rodearnos de personas que se gozan en nuestros logros, de personas que nos apoyan en todo, de personas que quizás cuando uno les comparte las luchas que uno tiene tratan de tapar el sol con un dedo y te dicen: mira no te preocupes por eso, it’s not that big of a deal, pero yo pienso que nosotros debemos rodearnos con personas que más que se gocen con nuestros logros y nuestras cosas hagan las preguntas difíciles y nos digan: ¿cómo está tu relación con Dios? ¿cuándo fue la última vez que te postraste delante de Dios y le diste gracias porque te perdonó, o cuándo fue la última vez que te postraste delante de Dios para pedirle perdón por tus pecados?

Ese tipo de preguntas nadie las hace. Por lo general uno: ¡ay, te dieron un carro, una promoción! ¡ay ¿cuándo damos una vuelta, cuándo vamos para tu casa? pero pocas veces la gente dice: okay ¿cuándo vamos para tu casa y vamos a ir a orar por ti? vamos a ir a bendecir tu casa, son cosas que nosotros tenemos que pensar.

David reconoció su pecado y Dios le perdonó la iniquidad de su pecado. El versículo 1 cuando él habla de que se confiesa: “La confesión significa afirmar nuestra intención de abandonar el pecado de manera que podamos seguir a Dios fielmente.” La confesión tiene que ver con el arrepentimiento, no es simplemente confesar el pecado simplemente por verbalizarlo y externalizarlo. Cuando uno confiesa el pecado uno necesita abandonar ese pecado.

Mira lo que dice la Biblia en Primera de Juan 1:19, dice: “Si confesamos nuestros pecados Él es fiel y justo para perdonarnos y limpiarnos de toda maldad” esto es en el Nuevo Testamento. Mira, vamos a ver los versículos 8, 9 y 10 de Primera de Juan, mira lo que dice Primera de Juan 8, 9 y 10: “Si decimos que no tenemos pecados nos engañamos a nosotros mismos y la verdad no está en nosotros, si confesamos nuestros pecados Él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad. SI decimos que no hemos pecado le hacemos a Él mentiroso y Su Palabra no está en nosotros.”

El confesar los pecados se supone que nos libere para nosotros disfrutar una comunión más íntima con Dios, una relación con Dios sin ningún tipo de vergüenza, no hay necesidad de sentirse avergonzados.

Algunos cristianos no entienden cómo funciona lo de la confesión de pecados, ellos se sienten culpables y confiesan sus pecados una y otra vez, una y otra vez y se les hace difícil aceptar el perdón de Dios en sus vidas. Algunos cristianos creen que Dios les perdona cuando confiesan pero que si ellos en algún momento mueren con un pecado sin haber sido confesado pues como que se van a perder, estas personas no entienden que Dios quiere perdonarnos, que Dios permitió que Su Hijo muriera en la cruz para Él poder ofrecernos ese perdón, Él utilizó a Dios en nuestro lugar para Él podernos ofrecer este perdón.

Nosotros no necesitamos confesar todos los pecados de nuestro pasado una y otra vez y no necesitamos temer que Dios nos va a rechazar si no mantenemos nuestras vidas perfectas delante de Él. Yo pienso que muchas personas no vienen a los caminos de Dios porque nosotros vendemos una imagen de que hay que ser perfecto para estar dentro de una Iglesia, de que uno no puede pecar, de que uno no puede fallar y eso es mentira. Lo que nos diferencia a nosotros de las personas pecadoras fuera de la Iglesia es que nosotros somos pecadores arrepentidos, igual que ellos, ellos son pecadores, nosotros somos pecadores, la diferencia es que nosotros nos hemos arrepentido y ellos quizás necesitan arrepentirse, y nosotros no podemos ser un obstáculo pretendiendo de que nuestras vidas son perfectas, de que no tenemos más necesidad de perdón. Nosotros tenemos que ser vulnerables y dejarle saber a la gente: yo soy tan pecador como tú, la diferencia entre tú y yo es que yo vengo delante de Dios y yo trato de pedirle perdón a Dios, y trato de cambiar, porque no es simplemente pedirle perdón de la boca para afuera.

La verdadera confesión involucra un compromiso a no seguir pecando. Cuando el Rey David se confesó y se arrepintió de este pecado él no lo volvió a hacer. Él dijo: yo mas nunca vuelvo a acostarme con una mujer que no sea mi esposa, esto que yo he hecho es grave, yo tengo que arrepentirme y salir de eso, y ese es el principio que nosotros debemos de seguir. Cuando confesamos cualquier pecado debemos de tratar de no volverlo a hacer sea lo que sea.

Cuando nosotros confesamos nuestros pecados nosotros estamos haciendo tres cosas, número uno: estamos acordando con Dios de que nos vamos a apartar de esas cosas, número dos: estamos asegurándonos de traer estas cosas delante de Dios y número tres: estamos reconociendo nuestra tendencia a pecar y nos vemos obligados a depender del poder de Dios.

Cuando uno confiesa los pecados con Dios uno no lo está reconociendo pero uno está diciendo: Señor ayúdame a no hacerlo otra vez, y tenemos que prestar atención a las cosas pequeñas porque quizás usted dice: yo no soy un hombre adúltero, yo no le soy infiel a mi esposa, yo no robo, yo no he matado a nadie, okay pero ¿qué tal esos comentarios que uno hace semana tras semana criticando a otras personas? eso es chisme, eso no agrada a Dios.

¿Cuándo fue la última vez que usted se arrepintió por estar hablando de una persona a sus espaldas? y si usted se arrepintió por hacer esas cosas ¿volvió usted a caer en lo mismo unos meses después o está tratando de no volver a caer en lo mismo? ¿cuándo fue la última vez que usted se arrepintió de tener esas conversaciones que no edifican?

El punto del arrepentimiento y la confesión de los pecados es que uno se de cuenta de lo que uno está haciendo mal y uno trate de cambiar, porque si uno no trata de cambiar de nada sirve que uno se arrepienta.

Mira lo que dice en el versículo 6: “Por esto orará a Ti todo santo en el tiempo en el que puedas ser hallado”, la palabra “por esto” nos muestra que es una lección para todo santo, todo cristiano en cuanto a la necesidad de ofrecer oraciones de confesionarios en el tiempo en el que Dios puede ser hallado, ¿cuándo Dios puede ser hallado? ahora, en cualquier momento uno puede venir delante de Dios y ofrecerle oraciones de arrepentimiento, esto fue lo que el Rey David estaba compartiendo.

Cuando el Rey David escribió el Salmo 32 él estaba en una audiencia con otras personas y él estaba declarando de que él se sentía bendecido, se sentía agradecido de que Dios lo había perdonado y él estaba animando a la gente a que confesaran sus pecados para con Dios, no necesariamente en una audiencia pública sino para con Dios y de que trataran de arrepentirse, y que cambiaran su forma de ser.

Yo creo que lo que nosotros podemos aprender del Rey David en este salmo es que David reconoció su pecado y su tendencia a hacer el mal. Él reconoció que el pecado era una rebelión contra Dios mismo porque él sabía que él no debía hacer ciertas cosas y sin embargo las hacía. Yo creo que por eso es que David es reconocido en la Biblia como el hombre más cercano al corazón de Dios porque a David no le temblaban los labios para confesar sus pecados delante de Dios, para postrarse delante de Dios.

David era un hombre fuerte que no necesitaba nada pero sin embargo cuando él estaba con Dios Él se humillaba y decía: yo soy Tu hijo, yo no soy nada y así es que son las cosas, él hablaba claro abiertamente con Dios, muchas veces nosotros decimos: ah pero es que Dios sabe, Dios sabe, sí, Dios sabe pero Él quiere hablar contigo.

Los que son padres quizás se pueden identificar con esto cuando usted sabe que su hijo ha hecho algo y usted como que espera a ver si su hijo le va a decir, y el hijo se hace el loco o se hace la loca y usted: ¿cuándo me va a decir, cuándo me va a decir? ¿cómo se siente usted cuando su hijo finalmente viene y le dice lo que él hizo, cuál es su impulso? Su primero impulso quizás no es castigarlo, es perdonarlo, pero quizás usted dice: bueno pero lo tengo que corregir porque hay consecuencias, y esto fue lo que hizo Dios con el Rey David. El niño que fue fruto de ese acto murió ¿okay? Dios lo perdonó pero su hijo murió, el pecado trae consecuencias.

Cuando uno se arrepiente Dios nos perdona y uno puede estar seguro que Dios nos perdona y es como quien dice: borrón y cuenta nueva, pero pueden haber consecuencias de lo que uno hace. Lo bueno del caminar en Cristo es que las consecuencias no las enfrentamos solos, las consecuencias nosotros las enfrentamos con Dios, y Él dice: Te voy a castigar pero Yo estaré contigo, eso fue lo que Dios le dijo a Moisés.

Cuando Dios estaba llamando a Moisés a salir Él no le dijo: Todo te va a ir bien, Él no le dijo todo te va a ir mal, Él le dijo: Yo estaré contigo, si las cosas te van bien Yo voy a estar contigo, si las cosas te van mal Yo voy a estar contigo.

Hoy nosotros vamos a celebrar la Santa Cena, la comunión y yo quiero que nosotros tomemos la Santa Cena hoy de una manera diferente. Yo quiero invitar a los ujieres a que se preparen y que repartamos los elementos de la Santa Cena y le voy a pedir al Pastor Samuel que nos ayude también, pero yo quiero que nosotros tomemos unos minutos ahí donde usted está en su asiento para pensar y reflexionar en las cosas que nosotros hemos hecho esta semana o quizás en los últimos meses que aún no hemos tomado el tiempo para traerlas delante de Dios.

Cuando nosotros tomamos la Santa Cena se supone que nosotros estamos reflexionando en lo que Dios ha hecho en nuestras vidas y yo quiero que hoy como el Rey David fue delante de Dios, se postró y confesó sus pecados que nosotros confesemos nuestros pecados también, en silencio ahí donde usted se encuentra, delante de Dios antes de tomar la Santa Cena, y yo les invito a que esto no sea algo que hacemos hoy y ya no lo volvamos a hacer, yo les invito a que ustedes hagan esto, traten de hacer esto semanalmente en su casa.

Cada uno de nosotros sabe con lo que lucha, nadie conoce su corazón mejor que usted y Dios pero es ese corazón al que Dios quiere acercarse en el silencio de su corazón, en el silencio de su casa, Él quiere que usted venga delante de Dios semana tras semana y le diga: Señor perdóname, ayúdame a cambiar las cosas que necesito cambiar, que nosotros podamos confesar nuestros pecados de manera que nosotros podamos decir como dijo David: bienaventurado, feliz aquél cuya transgresión ha sido perdonada y cubiertos sus pecados, que nosotros podamos experimentar ese gozo de que Dios nos perdona no importa lo que uno haga.

Quizás para David haber cometido adulterio y haber asesinado a un hombre era lo más grande y él decía: yo no tengo perdón de Dios, pero él se postró delante de Dios sin importar y le pidió perdón, y Dios lo perdonó, entonces hermanos: no hay pecado tan grande que Dios no quiera perdonarnos, Él simplemente quiere que nosotros vengamos delante de Él, abramos nuestro corazón, le pidamos perdón y le pidamos Su ayuda para cambiar lo que nosotros necesitamos cambiar.

Y si tú estás aquí el día de hoy y aún no has tenido un tiempo para hacer esa oración de fe para pedirle al Señor que entre a tu vida, que te perdone, que te ayude a cambiar para tú comenzar a vivir de una manera diferente y pasar del grupo de los pecadores no arrepentidos al grupo de los pecadores arrepentidos yo te invito a que tú hagas esa oración ahí en tu asiento, es algo entre tú y Dios, y si tú haces esa oración después tú puede encontrarme a mí o a cualquiera de los Pastores, a los ujieres, a cualquiera en esta Iglesia y decirle: yo quiero comenzar a vivir de una manera diferente, yo quiero comenzar una nueva vida con Cristo ¿cómo yo puedo comenzar a hacer eso? la vida cristiana es una vida que se vive en comunidad, no para juzgarnos los unos a los otros sino para ayudarnos a acercarnos a Dios cada día más.

Una jornada de fe

TRANSCRIPT

Hebreos capítulo 11 es un conocido pasaje acerca de la fe a la cual estamos siendo llamados. Déjenme comenzar diciendo algo del origen de este mensaje que compartí esta mañana con el ministerio en inglés, y quizás sobre todo quería compartirlo con ese grupo en particular, no el ministerio en inglés sino ese grupo de ese servicio en inglés, compartí ese sermón porque fue como la primera vez que explorábamos esta posibilidad de un servicio a las 9 de la mañana exclusivamente en inglés, y yo sentía del Señor que era como abriendo algo nuevo, algo diferente aunque hemos hecho ya cosas parecidas, y que era un momento de cierto peso, y quería marcarlo en el marco bíblico de fe y de entendimiento como Iglesia.

Y ayer en la tarde mientras le pedía al Señor sabiduría acerca de qué predicar que le hiciera justicia a ese momento me vino a la mente la imagen de Abraham cuando Dios lo llama y le dice que se vaya de su tierra y de su parentela a un lugar que Él le habría de mostrar, y me parece que ese es el momento en que esta Iglesia se encuentra y el proceso que esta Iglesia ha estado viviendo a través de los años, de lo cual esta etapa es parte y es una nueva manifestación de esas instrucciones que recibimos de vez en cuando de parte del Señor para hacer cambios y ajustes en nuestro ministerio.

Yo le he dicho al pueblo que esto no es de iniciativa mía en realidad, yo no creo que es de iniciativa mía cambiar ese servicio de las 9 a inglés y mover nuestro grupo en español a las 12 porque si fuera iniciativa mía tendría más dudas de las que ya tengo porque la fe es agónica, es así, pero siento que el Señor nos está llamando a una nueva etapa de fe, a un nuevo proceso de fe. Marylin God bless you, great to see you, Marilyn bendiciones.

Dios nos está llamando a una jornada mayor de fe, nos está declarando la nueva etapa que tenemos que vivir y ese cambio digo que no es un experimento para mí, no es como que yo estoy trasteando con el motor a ver si sale algo bueno, yo siento que estamos en la Presencia misma del Señor, que estamos siendo dirigidos por Dios a hacer algo heróico, heróico y arriesgado, y generoso, y desprendido también, porque nuestro pueblo latino está siendo llamado a desprenderse de algo que es muy bueno y muy agradable, venir a las 9 de la mañana los que les gusta venir a las 9 de la mañana por diferentes razones, y estamos como cediendo ese espacio, ese pedazo de real estate de la Iglesia para algo que no nos da a nosotros personalmente tanto provecho ni tanto disfrute al nivel emocional, y los estamos haciendo por puras razones clínicas ministeriales evangelísticas buscando los intereses del Reino de Dios, no lo estamos haciendo porque como que queremos mejorar un poquito las cosas o experimentar con algo que nos dé mejor resultado, sino que es una voz divina yo creo que estamos escuchando y que nos avanza, y que nos lleva más hacia adelante en lo que Dios quiere para esta Congregación y el destino que Dios tiene para ella.

El escritor de Hebreos en ese famoso pasaje de Hebreos 11 que habla acerca de la fe, lo que es la fe, habla acerca de lo que Abraham hizo y cómo Dios se acercó a Abraham, pero antes de ir a Hebreos 11 déjeme ir mejor hacia atrás y conectarnos con el momento original que se encuentra en Génesis capítulo 12 al comienzo de la carrera, de la jornada espiritual de Abram. En este momento Abraham todavía, la h todavía no ha sido añadida a su nombre por lo menos en español como está traducido porque todavía él no es ese padre de multitudes, su nombre no ha sido anchado todavía, es Abram, un beduíno común y corriente que Dios por alguna razón que sólo Él conoce decidió ensanchar su nombre y ensanchar su autoridad, y su alcance espiritual.

Pero dice en el capítulo 12 de Génesis que: “Jehová le había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre a la tierra que Yo te mostraré” y ayer pensando se me vino a la mente esa escena de Dios hablándole a Abraham y diciéndole: Deja lo que te es familiar, deja lo que te es cómodo. ¿Usted se imagina? se dice que los ancianos son muy apegados a sus costumbres y a su territorio familiar, no les gusta abandonar sus hábitos ni sus lugares comunes quizás porque están en una etapa frágil y no quieren aventurarse a cosas nuevas, pero a los 75 años de edad o quizás un poco antes Dios le dice a este hombre: Deja todo lo que te es familiar, deja todo lo que te es cómodo, deja todo lo que tú sientes que estás en control, ponlo a un lado y abandónalo, esa es la instrucción que Dios le da, y yo digo que ese momento es el momento esencial en toda jornada de fe y en toda vida que vive por fe.

Y por eso el escritor de Hebreos escoge este momento como uno de los grandes momentos de fe, porque toda movida de fe en la vida de un hombre o de una mujer de Dios involucra precisamente eso, involucra algo que te es familiar, que te es valioso, que te da comfort, que te da un sentido de seguridad y ponerlo a un lado para lanzarte a algo que Dios tiene para ti, y eso es amenazante, cuando tú te desvistes y te despojas de algo que tú amas porque te da tranquilidad, porque Dios te lo ha dicho.

Y ese es el proceso en el que muchos de nosotros estamos involucrados a lo largo de nuestra vida. Puede ser un joven que sale de su país para venir a estudiar a Estados Unidos porque siente que Dios lo está llamando en esa dirección. Puede ser alguien que decide comprar una casa y se aventura ¿cómo voy a pagar las mensualidades? y todo lo que eso implica, los muebles, puede ser una persona que se va a casar con otra persona y tiene que aventurarse a compartir su vida de aquí en adelante en una forma íntima con otro ser humano con toodo lo que eso implica, puede ser un estudiante que a mitad de camino en su carrera Dios lo está enviando en otra dirección y tiene que reponer un año de esos años que ya ha estado estudiando o cambiarlo todo completamente, muchas diferentes maneras en que a través de la vida Dios a veces nos cambia el mundo y nos dice: No, ese no es el camino, este es el camino que tienes que seguir y uno tiene que decidir: ¿voy a obedecer a Dios o me voy a quedar en el lugar que me es familiar y me es seguro?

¿Voy a apostar a Dios? o voy a decirle: mira Señor ¿sabes qué? ya a estas alturas del juego yo lo que quiero es retirarme, estar tranquilo, no me molestes con retos demasiado grandes. Yo creo que eso es lo que todos nosotros tenemos que decidir.

Ese momento en que Dios le dice a Abraham: Mira vete de tu tierra y de tu parentela, ese es el momento en que si tú vas a vivir una vida de fe vas a tener que vivir muchas veces a través de tu vida, y los que hemos vivido esos momentos sabemos que nosotros hemos orado y hemos examinado nuestras motivaciones, y hemos tomado tiempo para estar delante del Señor y examinarnos con honestidad, si hemos consultado con otra gente madura en la fe, si hemos consultado la Palabra de Dios, si hemos determinado que no lo estamos haciendo por alguna motivación individual, personal, y una vez que hemos pasado por todos esos puntos y esa voz todavía está allí diciéndonos: tienes que hacer esto, tienes que hacer lo otro, entonces lánzate en el Nombre del Señor y Dios te respaldará.

Y si te equivocaste Dios se asegurará de enderezar tu camino, y si no llegas al lugar donde tú pensabas que ibas a llegar llegarás a otro que va a ser mejor porque así es Dios cuando tú buscas Su gloria. Nunca dejes de vivir por fe, recuerda eso, si tú vas a ser creyente genuino, auténtico el distintivo de tu vida tendrá que ser vivir por fe y tener esos momentos que te van a dar terror cuando tú mires al abismo y veas lo que está allí que no puedes ver el fondo y te dicen: tírate, y ya tú lo vas a hacer en el Nombre del Señor porque dice la Palabra del Señor que tus pies no tropezarán en piedra, a sus ángeles mandará cerca de ti a que te guarden en todos tus caminos.

Cuando uno pone su fe y su confianza en el Señor y uno está seguro o más o menos seguro de que uno está haciendo las cosas para la gloria de Dios no tema, láncese en el Nombre del Señor, y esa es la vida que Dios bendice y que Dios honra en la cual el Señor es glorificado grandemente.

Yo digo que la fe es la medida esencial del Reino de Dios, la fe es la moneda con la cual se compra y se vende en el Reino de Dios. La Bibli dice que sin fe es imposible agradar a Dios, si tú quieres vivir por fe vas a tener que vivir por fe y no por vista.

El versículo 38 de Hebreos capítulo 10 dice: “Mas el justo vivirá por fe” el riel sobre el cual el justo se monta es fe, es creerle a Dios cuando todo dentro de ti te grita: no lo hagas, es poner en entredicho tu carne y escuchar una voz mas alta, un principio más alto que va más allá de tus emociones y de lo que tus instintos te dicen que hagas, eso es fe, proceder conforme al manual, proceder conforme a principios y no conforme a emociones.

Cuando tú entras en la carrera cristiana entiendes que Dios te está llamando a vivir conforme a unos principios mucho más altos que tu carne y tus emociones, tu sentido de seguridad, tu deseo de lo familiar, Dios te está llamando a vivir como uno se toma una pastilla, simplemente se la toma con agua y ni siquiera piensa en qué sabe, simplemente se la toma porque eso es lo que hay que hacer.

Y así nosotros estamos navegando como Iglesia en este tiempo, y así hemos navegado a través de todos los años que hemos existido como Congregación, siempre ha sido por fe para gloria del Señor y Dios nos ha hecho una Congregación que se mueve de esa manera, y que cuando creemos que ya todo está bien normal Dios nos dice: Espérate, nos mete una zancadilla y nos dice: Ahora te falta esto, comienza de nuevo.

Dios demanda tanto de Abraham que no solamente le dice: Vete de lo que es cómodo sino que le dice: A una tierra que Yo te voy mostrar, a la tierra que te mostraré; en otras palabras ni siquiera le dice a dónde va, le dice simplemente: Comienza a caminar y en el camino yo te diré dónde tienes que ir, y eso es algo que también si tú quieres vivir una vida de fe tienes que aprender.

Yo siempre pienso en las palabras del poeta español creo que fue Antonio Machado que dijo: caminante, no hay camino, se hace camino al andar; caminante, no hay camino, sólo estelas, en otras palabras el trazo que deja un bote cuando va, que deja atrás, sólo estelas en la mar, eso es todo. El camino en la vida cristiana se hace dando un paso delante del otro caminando por fe y tú no sabes muchas veces si vas a terminar en un callejón sin salida o si vas a caerte por un barranco, todo es posible y Dios no te garantiza totalmente una cosa ni la otra.

Fe no es estar seguro de todo sino a pesar de tu inseguridad seguir caminando en el Nombre del Señor y yo he aprendido que eso es uno de los modelos más importantes de tu vida si tú quieres crecer en el Señor, si Dios te dice algo hazlo, si no tienes todo claro delante de ti trata de buscar toda la luz que tú puedas y en el camino Dios te va a encontrar, y Él abrirá todo el camino delante de ti.

El escritor de Hebreos cientos y cientos, probablemente 1500 años después o algo así, meditando en cómo ilustrar lo que es la fe para ilustrar al pueblo de Dios escribe uno de los ejemplos más exaltados de fe. De paso, Abraham tuvo dos momentos grandes de fe, uno fue ese momento cuando salió a caminar en esa tierra que no conocía, y tuvo un segundo momento que fue cuando Dios le pidió que sacrificara a Isaac, yo hablé acerca de eso hace unas semanas atrás, y vimos que ahí también Dios le pidió que sacrificara lo que él más amaba que era ese hijo que él había tenido a los cien años de edad, que era hijo y nieto a la vez también, y a los cien años de edad Dios le dice: Ahora ese hijo que Yo te di sacrifícamelo, y Abram, ahora Abraham decide obedecer a Dios.

Lo interesante es que ya Abraham ha aprendido algunas lecciones fíjese, porque cuando Isaac le pregunta: pero papá, porque Abraham no le han informado acerca de lo que va a pasar, e Isaac le dice: tenemos la leña, tenemos el fuego ¿y dónde está el cordero? y Abraham no le dice: tú eres el cordero, le dice: Dios proveerá, de ahí viene la palabra Jehová Jiré, eso fue lo que él dijo en hebreo, Dios proveerá el cordero hijo mío.

Y dice el escritor de Hebreos que Abraham pensaba que Dios era poderoso para que si él terminaba matando a su hijo Dios lo podía resucitar, así que él había aprendido que aunque él no sabe lo que va a pasar, él no tiene totalmente claro el proceso el Señor será fiel y Dios se asegurará de que todo resulte para bien al final, y nosotros estamos así y hemos estado así a través de los años, siempre confiando que Dios tiene todas las piezas de este proceso que nosotros estamos viviendo como Congregación.

El escritor de Hebreos en el versículo 8 de Hebreos 11 dice: “Por la fe Abraham siendo llamado obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia, y salió sin saber a dónde iba; por la fe habitó en la tierra prometida como en tierra ajena morando en tiendas con Isaasc y Jacob, coherederos de la misma promesa” y yo les decía a los hermanos en esta mañana que a Dios le encantan las tiendas; tiendas no en el sentido de Marshall’s y no, no tengan ideas aquí, ah, yo sabía, por eso es que a mí me encantan tanto las tiendas, no, abandonen eso, ya yo las ví mirando maliciosamente a sus esposos diciendo: ¡tú ves, te lo dije! No son ese tipo de tiendas son tiendas de campaña.

Pero a Dios le gustan las tiendas ¿sabe por qué? porque la fe se lleva muy bien con las tiendas de campaña, porque las tiendas de campaña son fáciles de montar y desmontar, son muy portátiles, muy portables, y si usted camina en fe usted necesita estar listo para moverse en cualquier momento que Dios le diga. Si usted en el desierto se construye una casa de cuatro dormitorios y una piscina tiene problemas porque el desierto está hecho para simplemente moverse, por eso los beduinos viven en tiendas de campaña porque siempre se están moviendo de un lado para el otro, tienen que hacerlo.

Cuando Dios mandó al pueblo hacia Canaán los mandó a habitar en tiendas, y yo creo que les estaba dando una lección, una preparación en sus vidas para que aprendieran a vivir en fe, y el tabernáculo que Él les instruyó que construyeran no era el templo final que habrían de construir cuando entraran a Canaán, era una estructura que los sacerdotes y los levitas ensamblaban en un momentito, lo montaban y lo desmontaban como hicimos con el piano acá, el púlpito, fácil de mover, las columnas eran postes y las paredes y el techo eran pieles de animales, y los candelabros y las cosas que usaban eran fáciles de desmontar y meter en un receptáculo y llevarlo al próximo sitio al que Dios los tenía que llevar.

Y Dios les proveyó una columna de humo, una nube de humo y una columna de fuego para que los orientara en la noche y en el día, yo digo: wow ¿por qué no les dió un GPS? caramba, qué tacaño fue el Señor, Él sabía que iban a venir GPSes, les hubiera dado algo de alta tecnología pero no, les dió una humilde columna de humo y de fuego para que los orientara, para que aprendieran a discernir porque muchas veces Dios no nos da instrumentos perfectos para navegar porque Él quiere que ejercitemos nuestro discernimiento, Él quiere que ejercitemos nuestro sentido de dependencia de Él, Él quiere que indaguemos, que busquemos, que estemos atentos a Él, que nos hagamos frágiles, y por eso muchas veces Dios no te da la instrucción a todas las cosas que Él tiene para ti sino te las da pedacito a pedacito para que tú aprendas a confiar en Él.

¿Cómo desarrolla uno los instintos de la fe? es así, Dios te da pequeñas adivinanzas y en el proceso de tú adivinar Él te ejercita tu entendimiento y así es que Dios hace con nosotros, por eso es que Él nunca te va a dar ciento por ciento de las instrucciones y la dirección exacta donde Él te quiere llevar.

Yo he estado toda mi vida les digo, siguiendo una brújula muy imperfecta dentro de mí acerca de lo que Dios quiere y ustedes quiéranlo o no al tenerme como Pastor principal están implicados en ese viaje, en esa jornada espiritual personal porque, gracias hermana por afirmarme eso, por lo menos hay una persona que está escuchando el sermón aquí; porque desde niño yo he estado viviendo esa Voluntad de Dios y esa nube que me orienta y me dirige, y yo les compartí a los hermanos esta mañana, yo he sentido ese llamado del Señor a buscar algo, algo que está todavía delante de mí.

Y yo les decía a los hermanos que yo soy como esos pájaros que vuelan en el océano atlántico y que viajan grandes distancias por una brújula biológica que tienen que les indica, dice que los pájaros leen las estrellas, se orientan según las estrellas, no me pregunte cómo lo hacen, pero ellos pueden navegar instintivamente y orientarse, y viajan en un océano que no tiene ningún marcador simplemente orientándose y a veces puede ser magnética dicen algunos científicos, orientándose por las corrientes magnéticas de la Tierra, no les pregunte a ellos qué es lo que están siguiendo ni la física detrás de todo eso, ellos simplemente están obedeciendo a un reloj, un mecanismo biológico que Dios ha instalado en ellos pero se orientan muy bien y no se pierden, y regresan.

Los salmones van al sitio donde van a morir donde nacieron, donde nacieron a morir ¿y cómo llegan a ese lugar? no les pregunte, ellos tienen algo escrito dentro de ellos y van ahí dirigidos. Los hijos de Dios tenemos una brújula dentro de nosotros. Algunos tienen una bruja, otros tienen una brújula dentro de ellos (risas), yo prefiero tener una brújula en cualquier momento ¿sabe? pero Dios nos dirige.

Yo recuerdo desde niño tener ese sentido de dirección del Señor que fuera, y todavía soy como Abraham buscando una tierra que Dios me ha de enseñar en el camino. Algunos podrán pensar que esa tierra es ya León de Judá, a los sesenta años ya es donde Dios me quiere pero yo todavía siento que no, que todavía hay otra parte de ese camino, y todo lo que yo hago lo hago como un experimento parcial.

Y lo que sí he visto es que nuestra Congregación ha sido guiada en una forma de ir edificando más y más, y Dios va añadiendo diferentes piezas a esa estructura para algo que yo no entiendo bien pero, como les digo desde niño en República Dominicana yo he sido un viajero como Abraham y quizás muchos de ustedes pueden decir lo mismo, pero lo primero fue, Dios nos sacó de Alma Rosa allá en República Dominicana y nos trajo a Brooklyn, Nueva York, y yo creo que antes de eso soy viajero porque mi familia viene de África y de España, tengo sangre africana gloria a Dios y sangre española, porque las sangres de los pueblos están en nosotros y por eso el pueblo latino tiene algo muy especial que Dios quiere hacer porque es un pueblo también viajero, somos África, somos Asia, somos Europa, somos Amerindia, todas las razas del mundo están dentro de nosotros.

Ayer estaba en un lugar de una familia del ministerio en inglés y había una pareja, él es asiático y ella es centroamericana, y a pesar de que ella es centroamericana parecías perfectamente asiática, y era como si podría ser fácilmente de la raza que no voy a decir mucho acerca de ellos, eran exactamente ¿por qué? porque Latinoamérica tiene Asia, los asiáticos vinieron pasando por el estrecho de Bering, pasando por Norteamérica hasta llegar a Sudamérica, los mayas y los aztecas, son de sangre asiática, nosotros la tenemos y Dios nos ha hecho así gente migratoria.

Por eso es que yo creo que ese pueblo latino que Dios ha traído desde Centroamérica, Sudamérica, el Caribe, tiene algo que Dios quiere en este tiempo y que esta nación va a ser bendecida por un pueblo peregrino porque somos peregrinos y extranjeros, a Dios le encantan los peregrinos y extranjeros, hay algo que Dios está, la raza humana, la humanidad está buscando algo en este tiempo y los que los van a ayudar son los que son peregrinos como ellos en la fe, los que como Abraham están en búsqueda de una tierra que Dios les va a enseñar cuál es esa tierra.

Eso es lo que nosotros, y mucha gente aquí no nos quiere pero es que Dios es el dueño de la tierra y Él sabe cómo Él reparte su tierra y se la da a quien Él quiere, y nosotros no estamos para robarle tierra aquí a nadie sino para bendecir a esta nación que nos ha acogido, no queremos conquistar, queremos bendecir y queremos simplemente ganarnos nuestro pan y bendecir esta nación porque eso es lo que Dios quiere.

La crisis migratoria de todos esos pueblos que están migrando de Medio Oriente es un espectáculo, esos barcos desesperados donde se hunden muchos cientos de personas a la vez a veces, hay algo que Dios, la humanidad están en búsqueda, está emigrando hacia algo, son como pájaros que están emigrando a su destino, hay movimientos hoy en día por toda.

Y dice la Biblia, Daniel dice que en algún momento los hombres estarían viajando y habría una inquietud, y las distancias se acortarían, y estamos en ese tiempo ahora de la historia de la humanidad porque hay algo que está pasando, y Dios nos está llamando a ponernos a tono con eso a ser un pueblo peregrino, a ser un pueblo de tiendas de campaña, y Dios va a usar eso a gente que esté dispuesta a migrar así, a moverse de esa manera, gente que no ame la tierra, gente que no ame su casa, gente que esté dispuesta a dejarlo todo, y si Dios te dice: Déjalo todo, abandónalo todo porque Yo tengo algo para ti tú dices: amén Señor ¿a dónde quieres que yo vaya? enséñame el camino, esa es la gente que Dios va a usar, la gente que está dispuesta a desprenderse de lo que aman y que están dispuestos en un instante a ponerse a tono con el llamado de Dios en sus vidas.

Y por eso es que Dios nos ha llamado en este tiempo en que parecía: okay ya hemos invertido millones de dólares en edificar estos edificios y hemos invertido en muebles, y en tecnología, y en cantidad de cosas. Podríamos decir: okay Señor, ya, qué bueno llegamos, vamos a hacer tres tiendas y aquí nos quedamos como los discípulos en el monte de la transfiguración y el Señor les dice: No, no, no, abajo hay trabajo que hacer, no nos podemos dormir en nuestros laureles, donde está la gloria uno quiere quedarse a donde está la gloria pero Dios dice: no, tú eres un peregrino, tú eres un extranjero, tú estás llamado a vivir en proceso, a ir a la próxima etapa de gloria.

Dios siempre tiene más gloria para nosotros. ¿Cómo es que dice ese jueguito pentecostal, recuerdan? Después lo recuerdo pero nosotros decimos esas cosas, y a su gloria más gloria, ¿quién vive? Cristo y a Su gloria, más gloria, nosotros decimos eso pero no entendemos lo que estamos diciendo muchas veces, y muchas veces nosotros queremos agarrar la gloria que tenemos y el Señor nos dice: No, tienes que soltar esa para que Yo te dé más gloria, y eso nos amenaza. Es como esos juegos de la televisión que te dicen: okay te ganaste $500 ¿quieres arriesgar los $500 para ganarte el carro? y tú estás: oye ¿qué hago, los pierdo los $500, me gano el carro? y tú tienes la opción, y si estás dispuesto a arriesgar los $500 pues muy posiblemente te ganas el carro, la cosa es que Dios no te garantiza que te vas a ganar el carro, quizás lo vas a perder todo pero tienes que arriesgarte en el Nombre del Señor. La gloria te pide que tú te despojes.

Dios nos llama como Iglesia: nunca nos enamoremos de lo que tenemos hermanos y yo sé el sacrificio que se les está pidiendo a los hermanos que vienen al servicio de las 9 sobre todo, porque es como que todo este trabajo que estamos haciendo y qué bueno, hemos trabajado, hemos sangrado para tener este lugar ¿y ahora tenemos que soltar una mitad de eso y entonces meternos al servicio? Pero yo creo que cuando hacemos eso en obediencia al Señor Dios no se queda corto, nos bendice y nos da mucho más.

Pero es así, vete de tu tierra y de tu parentela, de lo que te es familiar, de lo que te es cómodo, entra en la nueva etapa de gloria que Dios quiere para tu vida y el Señor se encargará. Yo creo que si nosotros somos fieles al Señor en este momento de nuestro desarrollo como Congregación y obedecemos al Señor no teniendo ninguna garantía de éxito pero creyendo que al hacerlo estamos abriendo un espacio para que Dios nos use en una manera mayor y amplifique nuestro espacio como Congregación el Señor nos bendecirá y estaremos contentos de que lo habremos hecho, esa es la jornada de la fe.

Yo les decía que a través de toda mi vida ha sido así y ustedes están involucrados en un drama muy interesante porque es que mi vida, su vida, y yo me atrevo a decir estas cosas en esta etapa de mi vida, las he guardado muchos, muchos años y me siento tremendamente incómodo al hacerlo, le confieso, no me gusta hablar de mí mismo, no me gusta hablar de mis dramas personales y menos me gusta arriesgarme, ni arriesgar mi imagen ante un público y eso es lo que estoy haciendo en estos momentos al decirle que yo vivo décadas desde niño creyendo que Dios tiene algo para hacer a través de mi vida, y que Dios ha configurado esta Congregación y mi vida dentro de ella, y nos está llevando a través de un drama que todavía no entendemos cuál es el final de él, pero yo creo que va a ser para gloria de Dios.

¿Y sabe lo que me da miedo? que un día cuando yo me muriera mi ataúd esté enfrente de aquí y alguien esté diciendo: el Pastor Miranda siempre creyó que Dios lo llamó a algo y aunque no llegó, y ahí se queda la pesadilla, le soy honesto. Y por eso muchas veces yo he reprimido esa visión porque no me gusta hacerme frágil, no me gusta arriesgarme frente a la gente, pero por otra parte he sentido de parte de Dios que si no lo hago puedo estar reprimiendo la visión porque la Biblia dice: declara la visión y escríbela en tablas.

Y muchas veces hay que declarar la visión por fe para que la visión cobre vida, si tú no la declaras, no te arriesgas la visión se queda ahí estancada y yo la estoy declarando frente a ustedes, estoy declarando una intuición eso es todo, es una voz. Yo no creo que necesariamente Abraham escuchó la Voz de Dios desde el cielo físicamente hablándole y diciéndole: Abraham vete de tu tierra y de tu parentela, ¿quién sabe si fue un sueño que él tuvo? como el sueño que yo tuve de que Dios nos sacara de nuestra tierra y de nuestra parentela en Cambridge, fue un sueño, a los pentecostales nos gusta decir tuve una visión como para levantar la categoría, no fue una visión, para mí una visión es algo que tú ves en trance.

Fue un sueño y podría ser que comí demasiado arroz con habichuelas la noche anterior, nada me garantiza que fue una visión, una revelación de Dios, para mí fue algo tan real, tan vívido, con sentido que yo ví, creo que sí, Dios me mostró el rostro del León de la tribu de Judá sobre las azoteas del área financiera de Boston, esa área que ahora vemos desde el cuarto piso con una cantidad de arañas venenosas gigantes sobre esos edificios, rascacielos de Boston y la cara del León de la tribu de Judá que después yo entendí que era el León de Judá mirando y ejerciendo autoridad sobre esas entidades demoníacas, y mi mano desde abajo apuntando hacia el león diciendo tres veces: tú eres el Señor, tú eres el Señor, tú eres el Señor, y ese fue el origen de nuestra mudanza de Cambridge a Boston, dejando nuestra tierra y nuestra parentela para ir a edificar edificios y a bregar con escombros, y con un vecindario lleno de crímen y otras cosas, y hemos visto que Dios le puso una H a nuestro nombre como a Abraham porque nos ha ensanchado, nos cambió el nombre.

¿Qué usted prefiere, Iglesia Bautista Central o Congregación León de Judá? yo creo que ese segundo nombre es más digno, y eso fue parte también de la revelación de Dios, hay algo en ese nombre Congregación León de Judá, porque yo creo que en este tiempo de la historia que estamos viviendo; Cristo tiene muchos nombres a través de la historia y de la Biblia, hay decenas de nombres que le aplican a Él: El Cordero, la perla de gran precio, la Rosa de Sarón, muchísimos nombres.

Yo creo que en este momento de la historia el Nombre que le aplica a Jesús es el León de la tribu de Judá, ¿por qué? porque esta tierra se le ha dado a Satanás poder para moverse como nunca y tiene que haber un león que ruja y ahuyente el poder del enemigo. La Iglesia de Cristo en este tiempo de la historia tiene que ser un león o una leona, los tiempos del cordero eso era otro momento.

Cuando Cristo viene, viene como un guerrero y viene con Su manto cubierto de sangre, viene con una espada que sale de Su boca. El Cristo que Juan ve en Apocalipsis no es un Cristo ahí a medio cocer es un ser que aterra cuando se le mira, sale una espada de Su boca, es bronce bruñido, es terrible, tanto que a Juan se le derriten las piernas y se desmaya. Por eso es que a mí me molestan tanto estos evangélicos aquí en esta nación tan cobardes que quieren ganarse a la gente simplemente con un aullido de gatito cuando lo que Dios quiere es un rugido de león.

Yo creo que Dios nos cambió el nombre, nos cambió la identidad, nos cambió el ministerio, Dios nos anchó. Como le dijo a Abraham: Haré tu descendencia como la arena del mar que si se pueden contar se podrá contar tu descendencia, estaré contigo, los que te maldigan los maldeciré, los que peleen contra ti Yo pelearé contra ellos, Dios nos, nos atrevimos a irnos de nuestra tierra y de nuestra parentela.

Y yo he estado siempre yéndome de mi tierra y de mi parentela, hay tantas cosas, no voy a entrar en esos detalles, lo hice esta mañana, pero son momentos a través de mi vidas que Dios me ha llamado una y otra vez a dejar lo que me era cómodo y entrar en otra etapa de mi vida.

Yo voy a compartir algo que quizás no lo he compartido antes, cuando yo estaba en Princeton mi área de estudio, mi concentración era relaciones internacionales, política internacional, yo quería ser diplomático, quería entrar al departamento de estados de Estados Unidos, trabajar en el área diplomática, y por eso entré a un departamento, la escuel Woodrow Wilson que era una escuela dentro de la universidad y me estaba preparando para entrar en esa dirección, y a mitad de camino después de yo haber invertido mucho tiempo en esa área Dios me cambió el derrotero y a través de un profesor universitario que conocí, Alcadio Díaz Quiñonez, cambié y decidí, cuando entré a hacer mi doctorado cambié mi concentración y entré al área de literatura hispanoamericana, de lenguas romances, la dirección y gloria a Dios porque eso me preparó.

Yo siempre le digo a la gente que una de las mejores maneras de prepararse para el ministerio es estudiando literatura, porque en la literatura uno aprende a apreciar los personajes y ustedes son una partida de personajes interesantísimos cada uno de ustedes, conocer los personajes y analizarlos es una de las destrezas más importantes que uno tiene y ustedes son unos personajes muy interesantes, un día a mí me encantaría escribir un libro “Personajes de León de Judá”, los trataría de disimular completamente porque hay ahí unas revelaciones que son (risas) terribles.

Pero yo creo que el Señor estaba llevándome, siempre ha sido así. Cuando tú vives en fe, cuando tú vives en fe Dios siempre está cogiendo todas las piezas de tu tablero y cuando tú crees que ya las tienes todas bien ubicadas les da un manotazo y vuelan por el piso, y te dice: Ármalo otra vez, así es que hay que vivir en la vida cristiana.

Y hemos visto que una y otra vez cuando uno se lanza en fe hermanos buscando del Señor Dios nunca nos decepciona. Una de las últimas; los estoy aburriendo dénme un par de minutos más (risas), déjenme. ¿Sabe que Dios siempre habla a través de metáforas? y como Cristo dice: El que tenga oídos para oír, oiga, lo que pasa es que Dios nos habla y nosotros no lo vemos porque somos de vista corta y torpe.

Pero yo estoy convencido ya después de analizar ese proceso bastante tiempo ya que Dios me metió en una metáfora de fe a través de las pantallas estas, porque es que es así que Dios entrena a Sus siervos y a Sus hijos, y uno tiene que aprender a ver y a entender que en este tiempo en que estamos emprendiendo esta otra jornada de fe, de cambiar los arreglos de la Iglesia en términos de sus servicios, porque la verdad es que como les dije antes eso fue una agonía para mí personalmente, arriesgarme.

Desde la China hermanos, un chino llamado Sherlock, de dónde se les ocurre, el riesgo que uno se toma al hacer este tipo de cosas, pero Dios así es que nos entrena y yo les digo: yo le digo Señor no dejes que me rompa la cabeza delante de este pueblo y gracias al Señor, yo creo que el Señor me sacó con bien y que vamos a ver cosas más lindas todavía que vienen, esa otra pantalla, ya está aquí, lo que pasa es que hay una pieza que tenemos que instalar para ponerla, pero así es que Dios obra, Él nos pone a través de ejercicios de fe, es como entrenar un guerrero, entrenando un atleta.

¿Cómo se entrena un atleta? a través de esfuerzos, a través de formas artificiales de entrenar los músculos y así pues se prepara para las verdaderas batallas, y yo creo que esto era como parte, el carácter juguetón de Dios siempre está involucrado. Yo veo a Dios en tantas cosas a través de mi vida, escenas que no es que yo estoy proyectando proféticamente, es que yo creo que así es que Dios habla. Yo creo que Dios siempre te está guiñando el ojo tras bastidores, Él no se revela completamente pero te guiña el ojo de vez en cuando y yo creo que eso de las pantallas fue Dios guiñándome el ojo para mostrarme algo de que hay que lanzarse a veces por fe, hay que viajar grandes distancias para conseguir lo que Él quiere y que hay que tomar riesgos en el Nombre del Señor. Si tu corazón está limpio y puro lo estás haciendo para gloria de Él.

Si has orado, si has clamado, si has consultado, si te has examinado, si quieres la gloria de Dios, si quieres bendecir a otros, si estás haciendo algo que es contrario a lo que a ti te gustaría hacer en tu carne, si tú pones todas esas cosas juntas y te dicen: métete, sigue adelante porque así es la jornada de fe, así es como tú encuentras la Voluntad de Dios.

Mucha gente me pregunta: Pastor ¿cómo puedo yo saber la Voluntad de Dios? eso es como preguntarme ¿cuál es el origen del universo? es bien complejo, tiene muchas piezas pero algunas de ellas son así y el caminar de un hombre de Dios es bastante complejo, pero a la larga tú tienes que lanzarte al abismo. Llega un momento en que ya tú lo miraste por todas partes, lo examinaste, no hay nada que ver, entonces deja de estar pensando y tírate en el Nombre del Señor, y el Señor enviará todos Sus ángeles para que te guarden en todos tus caminos.

Yo le pido al Señor que en esta etapa, con esto ya termino, estamos en un tiempo de la historia en que la humanidad está en un proceso, tiene algo que ver definitivamente con los últimos tiempos, yo no voy a decir que Cristo va a venir mañana pero está cerca, está cerca y yo creo que la humanidad está buscando algo y que nosotros estamos viviendo un tiempo en que estamos aquí en Boston pero alrededor de nosotros están rugiendo y están manifestándose fuerzas en el resto de la humanidad que están conspirando para llevarlo todo a la cúspide, y que este es un momento que si no es el último de la humanidad es un momento increíblemente épico, de proporciones épicas, si no sabe lo que quiere decir búsquelo en el diccionario, de proporciones extraordinarias, un peso tremendo.

Cuando uno mira todo lo que está pasando en este tiempo en el mundo, como digo las grandes migraciones desde el Medio Oriente, el islam enfurecido y levantándose para juzgar a las naciones y mantenerlas en jaque mate, todas esas naciones que niegan lo sagrado que dicen que Dios está muerto pero ahora se levanta esta horda que dice que no, que Dios está vivo y lo van a imponer sea como sea con su violencia.

La guerra nuclear, el levantamiento de China, Corea del Norte con su amenaza de convertirse en una potencia nuclear, Irán por otra parte, Israel en dificultades con el movimiento palestino que no deja a las naciones tranquilas, esta nación que ha perdido su credibilidad en el mundo. Antes Estados Unidos era el elemento estabilizante en el mundo, ya no es así, ya Estados Unidos ha perdido su credibilidad, su prestigio porque se ha vendido al secularismo y a la experimentación y ha perdido su derrotero, ha perdido su claridad y está Estados Unidos mismo en crisis, una crisis de liderazgo terrible como nunca antes, una división de los diferentes grupos que la constituyen, una crisis de familia, de juventud, una crisis racial terrible, una epidemia de crímen y de violencia.

Chicago este fin de semana pasado 64 personas heridas y 11 muertos en un fin de semana solamente y se espera que este verano va a ser el verano más terrible en la historia de Chicago por toda la violencia de las gangas, esta nación tiene ahora mismo una de las tasas de violencia y crímen más terrible y más alto de todas las naciones civilizadas e industrializadas del mundo, terrible, algo está pasando en el mundo.

Y Dios requiere una Iglesia, una Iglesia que Él pueda usar para dar consejo a este mundo. Yo creo que los gobiernos del mundo van a venir a la Iglesia para buscar sabiduría, consejo, Dios está llevando el mundo a una crisis, el hombre racional secular autosuficiente está siendo humillado y se le está mostrando que él no tiene la solución a sus propios problemas. El hombre siempre ha creído que la próxima etapa de su desarrollo va a traer la solución a los males del mundo; el tiempo industrial, la revolución científica, la era del espacio, el descubrimiento de la energía atómica, todo ya vamos, ya llegamos, ya llegamos.

Antes de la primera y de la segunda guerra mundial la gente creía que la industrialización del mundo iba a traer todas, y que la época científica, y que ya la religión no era necesaria, vino la segunda guerra mundial y la primera con toda la destrucción de decenas de millones de personas y se fue abajo ese sueño vano de autosuficiencia del hombre. Todavía está el hombre insistiendo en que no necesita a Dios y Dios está humillándolo, humillándolo y está llegando ya a su extremo final.

Y la Iglesia de Cristo yo sé que tiene un papel heróico que jugar en los últimos tiempos, y Dios va a necesitar iglesias peregrinas, iglesias que se dejen guiar por Él, iglesias que escuchen de Él, iglesias con una tecnología milenaria, del espíritu, y del poder de Dios y la sabiduría de Dios para aconsejar a estas naciones que están siendo llevadas a un callejón sin salida, y nosotros queremos ser esa Iglesia, queremos ser parte de ese pueblo que Dios va a usar en los últimos tiempos, en este tiempo de la historia, pero se requiere que nosotros vivamos una espiritualidad fronteriza, una espiritualidad incómoda, una espiritualidad insomníaca creo que es así que se dice la palabra, de gente que no duerma bien porque están pensando en el Reino.

Si tú no duermes bien es porque generalmente, y estás con Dios muchas veces es porque estás pensando y maquinando, yo no duermo bien porque siempre ando maquinando acerca de las cosas del Reino de Dios, Dios quiere gente que como los soldados duerman livianamente porque están en guerra.

¿Cómo dividió el Señor Dios a los guerreros de Gedeón, los trescientos que quedaron de treinta mil al inicio, los que lamían el agua como perros creo que era? no, eso era ¿no? es decir esos que simplemente estaban mirando mientras, los que se arrodillaban no porque estaban metiendo la cabeza en el agua y tenían que estar mirando alrededor, los que lamían el agua así simplemente porque querían tener los ojos alrededor, eso fue lo que Dios escogió, no me confundas Lucy, está bien.

No ¿por qué? porque Dios escogió el corazón, Dios le dijo a Gedeón: Llévamelos al agua y Yo te los voy a probar. ¿Usted sabe que Dios antes de escoger los que van a estar en Su ejército Él los prueba, prueba su corazón para ver si están dispuestos a dejarlo todo? Dios no va a obrar a través de congregaciones cómodas, congregaciones que se vendan al mundo, congregaciones que miren la última doctrina de mercadeo para entonces orientar su predicación, que estén dispuestos a vender la cruz o los distintivos del Reino, o el escándalo de la crucifixión para agradar al mundo, Dios va a buscar aquéllos que digan: no, vamos a mantenernos firmes en lo que Dios dijo porque eso fue lo que Él dijo y lo vamos a obedecer hasta lo último, y si perecemos que perezcamos.

Esa es la Iglesia que Dios va a usar en este tiempo, ahora mismo están siendo probados, ahora mismo están siendo probados y solamente los que estén dispuestos a vender su vida y despreciarla hasta la muerte, y a obedecer los reclamos escandalosos de Dios sólo esos van a ser usados en la conquista, y yo les suplico a ustedes que me escuchan que vivan a ese nivel de autenticidad y de integridad.

Cuando usted me escuche aquí proponerles un nuevo proyecto entienda, no lo hago porque simplemente necesito estar ocupado en algo, porque soy inquieto de naturaleza, lo hago porque creo que estoy escuchando de parte del Señor y usted únase, viva esa vida, sea generoso con su dinero, con su tiempo y hermanos yo les digo la verdad yo no voy a cambiar, si usted se molesta con el modus operandi de esta Iglesia va a tener problemas porque esto no va a cambiar, se va a poner inclusive hasta más caliente, esta Iglesia necesita guerreros.

No estamos buscando evangélicos, estamos buscando guerreros, estamos buscando gente del Reino, estamos buscando peregrinos y extranjeros, estamos buscando gente de la tienda de campaña, gente que se mueve a un instante, gente que duerme un sueño liviano porque la guerra puede comenzar en cualquier momento y tienen que levantarse enseguida y duermen con sus armas al lado, gente generosa, gente que no ame el dinero, que no ame el aprecio de los demás, que no ame el prestigio, que no ame la comodidad, que no ame su profesión, que todo se lo hayan entregado a los pies del Señor y le digan: Padre haz lo que Tú quieras de ello, y esa es la gente que Dios va a bendecir, va a respaldar y va a inclusive prosperar como prosperó a los hebreos, ese es el llamado de Dios para nuestro tiempo.

Lo que estamos haciendo es mínimo sinceramente para lo que Dios ya, la manera en que Dios nos ha bendecido y lo que Él tiene todavía por delante, hay una tierra donde Dios nos quiere llevar, hay una tierra donde Dios nos quiere llevar y nos ha estado llevando a través de todas estas movidas de fe que hemos hecho, y como Abraham seguimos de camino.

¿Cuántas veces más tendremos que desmontar la tienda? no les puedo decir pero yo creo que cada vez que lo hagamos Dios nos va a bendecir, nos va a afirmar y nos va a mostrar que era de Él, nos va a vindicar en lo que estamos buscando.

Yo bendigo esta Iglesia y me abro al propósito de Dios, y decimos: Señor lo que Tú quieras, lo que Tú quieras de nosotros, ayúdanos solamente a vivir a la altura del llamado, ayúdanos a vivir al nivel de la grandeza que Tú tienes para nosotros. Póngase de pie y abra su corazón y su espíritu al llamado de Dios en este tiempo, diga amén a los propósitos del Señor, los planes de Dios.

Dile: Señor yo quiero ser un ave de presa, yo no quiero ser un pavo allí caminando con la cabeza para abajo, yo quiero ser un águila que surque las alturas con ojos que vean a millas de distancia y se lancen sobre la presa, y la agarren con sus garras, y sigan el vuelo, que habiten en los lugares altos. Dios quiere águilas en este tiempo, Dios quiere aves de presa para gloria Suya.

Pídele al Señor que afile tus instintos de guerrera, que afile tus instintos de ave guerrera, de guerrero, de cazador para el Reino de Dios, ese es el llamado, abrázalo ahora mismo. Dile: Señor hazme uno de Tus guerreros, hazme uno de los trescientos de Gedeón, haz esta Iglesia una de las trescientas que Tú vas a usar.

Éntranos en nuestro destino, te entregamos nuestra vida. Joven: entrégale tus sueños de grandeza y de realización propia al Señor, entrégale tu apetito por el dinero y la fama, y el prestigio, ama de casa entrégale tus hijos a Dios, entrégale tu matrimonio, entrégale tu cuerpo, tu mente, tu intelecto al Señor, yo lo pongo todo, es que no creo que ya tenga mucho que entregarle al Señor porque todo lo que yo creo que tengo está a Sus pies y si hay algo Padre, revélame algo para yo tirártelo también a los pies. Derramemos nuestra vida como una libación, agua derramada delante de los pies del Señor y vivamos a ese nivel.

Entrégale al Señor todo lo que tú amas acerca de ti mismo, todas las características de tu personalidad, todo lo que tú amas acerca de tu temperamento, tu personalidad, tus hábitos entrégaselo todo al Señor, dile: Padre lo que no te gusta, lo que no te agrada de mí yo te lo entrego, despójame de ello Padre aunque me duela pero yo necesito viajar livianamente y me despojo de todo peso que me limita en mi carrera de la fe para que mi matrimonio pueda ser un matrimonio liviano, bendecido, ágil, para que mi alabanza sea una alabanza despejada, para que mi compartir el Evangelio tenga la unción Tuya Padre, me despojo de todo lo que yo amo de mí mismo inclusive, te entrego todo lo que yo más amo de mi propio ser, lo pongo todo a Tus pies para que mi hogar sea un hogar donde Tú habites, y a través del cual Tú puedas hablar y en el cual Tú puedas morar, y que Tú puedas bendecir.

Esta Iglesia, Padre despójanos de todo peso que no seas agradable a Ti Señor, despójanos de ello para que podamos caminar livianamente y correr esta carrera, andar este peregrinaje Señor livianamente delante de Ti, ágilmente delante de Ti, te entregamos todo lo que somos, todo lo que tenemos, todo lo que amamos Padre, todo lo que consideramos nuestro nos despojamos de ello ahora mismo, todo sentido de propiedad, lo ponemos todo a Tus pies, sírvete de nosotros Señor y haz lo que te plazca con este pueblo.

Te prometemos vivir livianamente y agarrar las cosas livianamente, no apegarnos a nada de este mundo Señor para que Tu Nombre sea glorificado, sea Tu Nombre enaltecido y hágase Tu Voluntad en la Tierra y en la historia como se hace en el cielo, te entregamos nuestras vidas, te entregamos Congregación León de Judá para gloria y honra de Tu Nombre, gracias, amén Señor.

Una radiografía de los primeros cristianos - 4 elementos de la Iglesia efectiva

TRANSCRIPT

Quiero invitarles a ir a Libro de los Hechos en el capítulo 2, versículo 41 hasta el 47. Aquí tenemos una radiografía de los primeros cristianos a los comienzos mismos de la Iglesia después del Pentecostés y después del primer gran sermón evangelístico del apóstol Pedro, y sabemos que hubo una gran cosecha de almas en ese primer sermón que Dios, inspirando al apóstol Pedro le dió.

En el versículo 41 dice que: “Como resultado de ese sermón evangelístico los que recibieron su Palabra fueron bautizados y se añadieron ese día como tres mil personas, wow qué impacto más grande, 3.000 personas como consecuencia de un solo sermón público que se dió ahí en la calle prácticamente, hubo lenguas, bautismo del Espíritu Santo, estruendos, la gente se congregó de todas partes.

Yo siempre digo que la mayor arma evangelística es el mover del Espíritu Santo, cuando una Iglesia está llena del Espíritu Santo, cuando los dones de Dios están en manifestación el evangelismo se da casi sin esfuerzo, y esta gente se congregó, el Apóstol Pedro predicó un sermón poderoso y como 3000 personas creyeron al Señor y fueron bautizadas ese mismo día; wow, cómo habrá sido ese primer bautismo, wow, increíble.

Y aquí está el corazón de lo que yo quiero compartir con ustedes, aquí está en el versículo 42, dice: “Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con los otros, en el partimiento del pan y en las oraciones”, yo veo aquí cuatro características de una Iglesia poderosa, de una Iglesia que es efectiva en el Evangelismo.

En estas semanas hemos estado hablando acerca de cómo ser efectivos en Evangelismo y hemos estado viendo desde diferentes aspectos bíblicos todo lo que tiene que ver con Evangelismo, cuál es la actitud de una Iglesia evangelística, sus prácticas, cuáles son los elementos bíblicos que fundamentan el hacer y quehacer evangelístico, y aquí quiero que ustedes vean cuál es la apariencia y cuál es la constitución interna de una Iglesia que Dios usa para Evangelismo.

Y entonces los versículos que siguen, 43 al 47 vemos un poco más de cómo era esa vida de los primeros creyentes, no hay una Iglesia que ejemplifique más lo que debe ser la Iglesia de Jesucristo que esa Iglesia del primer siglo. Nosotros siempre vamos al Libro de los Hechos para ver porque ahí Dios se estaba moviendo en una forma muy pura, muy poderosa, esta gente había estado allí con Cristo, los apóstoles, los primeros discìpulos estaban penetrados por el mover del Espíritu Santo, los dones estaban en manifestación, Dios estaba iniciando y empujando hacia adelante Su Iglesia y por lo tanto, ese Libro de los Hechos está escrito para que veamos cómo era el mover de Dios en esa Iglesia virgen, en esa Iglesia que estaba siendo iniciada.

Dice que como consecuencia de eso que estaba sucediendo ahí en Jerusalén “sobrevino temor a toda persona” versículo 43, y muchas maravillas y señales eran hechas por los apóstoles, habían sanidades, liberación, manifestaciones del Poder de Dios, “y todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas” ya eso se ha dicho en el versículo 42 en una forma resumida, “tanto así que vendían sus propiedades y sus bienes, y los repartían a todos según la necesidad de cada uno, perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas comían juntos con alegría y sencillez de corazón, alabando a Dios y teniendo favor con todo el pueblo” y aquí está lo interesante, dice que: “y el Señor añadía cada dia a la Iglesia los que habían de ser salvos”.

¿Ve usted aquí la eficacia evangelística de ese tipo de Iglesia? Como consecuencia de todo lo que estaba pasando dentro de ellos y con ellos el Señor añadía cada día a los que habían de ser salvos. Aquí no se nos dice tanto de que ellos estuvieran mandando panfletos y haciendo campañas evangelísticas bien organizadas y que hubieran, no, la Iglesia era virgen, no tenía ni siquiera la estructura para hacer estas cosas, pero como consecuencia de su vida interna y de estar fluyendo conforme a los principios del Espíritu Santo espontáneamente traía a la gente y la gente era convertida cuando observaba la vida de estos creyentes.

Yo siempre he creído que el mayor instrumento evangelístico no es los evangelistas, las campañas, no es los recursos tecnológicos que nosotros adoptemos, aunque todas esas cosas son muy buenas, pero lo que más atrae a la gente es la vida de los hijos de Dios ¿amén? los hermanos que invitan a otros, la calidad de vida que la gente encuentra cuando viene a la Casa de Dios, cuando observan cómo se aman unos a otros, cuando observan la integridad de los hijos de Dios, cuando ven que aquí en la Iglesia las cosas se conducen en una manera diferente a como se conducen en el mundo.

Una de las cosas que más me gusta acerca de nuestra Congregación es esa diversidad tan grande que nosotros tenemos como Iglesia: tenemos centroamericanos de diferentes nacionalidades, tenemos centroamericanos, tenemos caribeños, tenemos sudamericanos, tenemos un ministerio en inglés que ahora mismo está teniendo su reunión en el otro edificio, tenemos jóvenes, adultos y ancianos, tenemos personas que vienen de distintos trasfondos denominacionales inclusive; tenemos gente que viene de trasfondos pentecostales bien conservadores, y tenemos evangélicos así más calladitos, más formales, y gloria a Dios aquí todos hacemos un sancocho de diferentes víveres y nos gozamos unos con los otros.

Y cuando la gente viene y ve esa diversidad que hay en nosotros y que nos amamos dice: wow Dios tiene que estar aquí porque allá afuera no hay esto, allá afuera lo que hay es división, cada grupo se reúne con su grupo y se me olvidó, veo aquí a Milton y a su esposa también, los brasileños también están acá con nosotros gloria a Dios, eso no se da en el mundo. Cuando la gente ve ese amor que tenemos unos con nosotros dice: wow verdaderamente yo quiero pertenecer a esta comunidad.

Yo digo que la apologética más grande de todas es la vida de la Iglesia y yo veo cuatro características de esa Iglesia que era tan efectiva en añadir cada día a la Iglesia los que habían de ser salvos junto con el mover del Espíritu Santo, y el versículo 42, por eso yo digo que es un retrato, dice que ellos: “perseveraban la doctrina” subraye aquí doctrina, número dos: “en la comunión unos con los otros” subraye comunión, “en el partimiento del pan” subraye ahí el partimiento del pan, y en cuarto lugar “las oraciones” déjeme desmontar rapidísimamente porque tengo que ir a las millas.

Número uno perserveraban en la doctrina de los Apóstoles, una Iglesia efectiva en Evangelismo tiene que ser una Iglesia bíblica ¿amén? tiene que ser una Iglesia que persevere en las enseñanzas de la Palabra de Dios. Si una Iglesia tiene doctrina falsa, doctrina conveniente que ha sido ajustada para que agrade a la gente esa Iglesia no va a tener efectividad evangelística.

Hoy en día en Estados Unidos hay muchas iglesias evangélicas que se llaman main light churches que han cambiado la doctrina en muchas diferentes maneras: celebrando la homosexualidad, poniendo la justicia social en frente de una espiritualidad sólida, bíblica, sana, han cambiado muchos diferentes aspectos de la enseñanza bíblica en otras áreas, liberalismo moral, sexual, cosas por el estilo, y esas iglesias en vez de atraer a la gente que es lo que se supone que suceda cuando se baja la doctrina se están muriendo, todo lo contrario, una detrás de la otra, son las iglesias que están dejando de crecer mientras que las iglesias bíblicas que insisten más en la Palabra de Dios y se mantienen en la doctrina son las iglesias que prosperan aquí y en cualquier parte del mundo.

Donde quiera que usted vea crecimiento evangelístico en este tiempo sea en África, sea en Asia, sea en Latinoamérica o sea aún en Estados Unidos o en Europa usted va a encontrar iglesias que están insistiendo en mantenerse pegadas a la Palabra del Señor.

“Perseveraban en la doctrina” gloria a Dios y por eso es que yo enfatizo tanto la importancia de que nuestra Iglesia se adhiera a la Palabra del Señor, por eso enfatizamos los discipulados, esta semana grabamos unas 180 personas de diferentes niveles de discipulado, el miércoles que hay 200 y pico de personas tomando diferentes clases que nosotros proveemos de instrucción bíblica, nuestros niños están siendo educados también y enfatizamos mucho la importancia de la Palabra de Dios porque sabemos que ahí está el fundamento.

A mí me encanta cuando nuestros niños por ejemplo en I Wanna se memorizan versículos de la Palabra del Señor porque eso está allí, está grabado en sus corazones, crecen y su sistema neurológico se va formando en la Palabra del Señor.

Cuando yo era niño asistía a la escuela dominical y yo creo que ahí fue que se grabó mi sensibilidad espiritual. Todavía recuerdo a la señorita Cora, una misionera canadiense, en ese tiempo todavía no había ninguna de estas ayudas tecnológicas, ella usaba aquéllas y ahí ya me estoy poniendo mi edad, usaba las pepitas esas que se ponen en los pizarrones, las figuritas de Daniel, de David matando al gigante, esas cosas se grabaron en mi corazón y se grabó el amor por la Palabra de Dios así que yo les animo a ser gente de la Palabra.

A mí me encanta esa gente que viene con su Biblia de 5 libras metida debajo del brazo caminando por la calle y dice: yo soy evangélico ¿y qué, no te gusta? esta Biblia casi se me está cayendo a pedazos pero yo la amo porque dice aquí: Biblia de estudio pentecostal y yo creo en los dones del Espíritu Santo, yo creo que las biblias deben ser grandes, pesadas y feitas para que sean verdaderamente ungidas, subrayadas, ese soy yo. Yo sé que hoy en día los jóvenes usan los ipads y los iphones, yo también los uso pero no hay nada como una buena Biblia desgastada para recordarte que la Palabra de Dios es importante.

Esta gente perseveraba, me gusta el uso del verbo perseverar, es un verbo sustancioso. Yo lo busqué en el diccionario y quiere decir mantenerse adherido a, denota pasión, insistencia, persistencia, intensidad ¿sabe por qué hermano? porque mantenerse en la doctrina cuesta, usted va a tener mil tentaciones a salirse de la doctrina, en su vida las hormonas lo van a empujar a salirse de la doctrina, su temperamento lo va a empujar a salirse de la sana doctrina, las dificultades del matrimonio lo van a empujar a salirse de la sana doctrina, la tentación entre los hermanos también; los Pastores sentimos la tentación de salirnos de la sana doctrina queriendo atraer a la gente a que se salven y de tajo voy a cambiar esto, no voy a decir esto, voy a decir lo otro.

Hay que perseverar, en otras palabras hay que decir: yo me voy a amarrar a la doctrina y de ahí no me voy a salir no importa lo que me quiera sacar de ella, hay que permanecer firme y si tú honras la doctrina de Dios Dios te va a honrar a ti también. Una Iglesia que honra la sana doctrina es una Iglesia que va a prosperar y va a ser bendecida.

Pensaba en lo que Pablo le dijo a Timoteo en Timoteo creo que es capítulo 3 rápidamente, Segunda de Timoteo 3 versículo 14 le dice Pablo a Timoteo: “Pero persiste” ahí está persevera, usted ve que donde está ese llamado a la doctrina es a perseverar, mantenerse, no alejarse de ella porque la tentación va a ser alejarse de ella.

De paso, me estoy atorando aquí, es que la Palabra del Señor es tan rica, tan buena que uno quiere salirse de ella pero no puede, hay muchos seminarios hoy en día que se salen de la sana doctrina. Nuestra hija Sonia se acaba de graduar de Yale en la escuela de management y cuando yo estaba ahí esperando la graduación y todo eso recordaba: Yale una de las más grandes universidades del mundo fue fundada en el siglo XVIII como consecuencia de que Harvard que había sido fundada para ser un seminario para la preparación de hombres para el ministerio se había hecho demasiado liberal y había abandonado la doctrina, entonces los primeros puritanos y los cristianos aquí en Estados Unidos fundaron a Yale como un sustituto y una alternativa para Harvard, que fuera más doctrinalmente sólida porque aún en las universidades se enseñaba mucho la Palabra del Señor, fundaron a Yale, con el tiempo Yale también se liberalizó y entonces fundaron a Princeton para que también fuera un lugar donde se predicara y se enseñara una enseñanza intelectual y espiritual bíblica y Princeton también con el tiempo salió de la sana doctrina.

Lo que hemos visto en Estados Unidos a través de los siglos es que muchas de estas universidades, Dartmouth, Boston University fueron fundadas por cristianos sólidos en la fe pero con el tiempo fueron deslizándose y abandonando la sana doctrina, y perdimos esos grandes recursos para el Reino de Dios. Nosotros los edificamos y los paganos los cogieron, y se adueñaron de ellos porque no fuimos vigilantes, no perseveramos, uno tiene que perseverar contra viento y marea en la sana doctrina.

Y por eso Pablo le dice a Timoteo: “Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste sabiendo de quién has aprendido, y que desde la niñez has sabido las sagradas Escrituras las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús”. Yo podría hacer un sermón sólo de ese pasaje bíblico que está allí pero no lo voy a hacer y denle gracias a Dios, pero en algún momento volveré a eso.

Pero estos cristianos perseveraban, permanecían, se atornillaban a la sana doctrina y por eso Dios los bendecía. En segundo lugar dice que ellos también estaban en la comunión unos con otros, la comunión unos con otros, es decir había koinonia, la palabra en griego es koinonia, la compenetración, koinonia es una palabra muy profunda, es intimidad, es compañerismo, es compartir, es compenetrarse unos con los otros, había comunión íntima unos con los otros, unanimidad, se reunían para actividades en conjunto para el Reino, había amor entre los creyentes.

¿Sabe que Dios envía la bendición donde hay comunión de los cristianos, donde hay armonía? ¿Qué dice el Salmo 133? “Mirad cuán bueno y cuán delicioso es habitar los hermanos juntos en armonía, y al final dice: “Porque allí envía Jehová bendición y vida eterna.” Nadie quiere venir a una Iglesia donde hay chismes, donde hay división, donde hay crítica, donde hay grupitos cada uno sentado por su lado, donde hay pugnas y donde hay simplemente falta de compañerismo, la gente quiere compañerismo, la calle está fría y una Iglesia donde hay gente que se ama, por eso yo les digo hermanos: ámense unos a otros.

Invite a la persona más distante de su propia etnicidad y sus propias costumbres porque es muy bonito si el dominicano invita al dominicano para que se coma un sancocho porque a todos les gusta un sancocho, pero dominicano: vete a la casa de un hermano salvadoreño y cómete unas pupusas que son tan ricas, si alguien me quiere invitar una pupusa yo con gusto, me dejan saber, aprende a comer los frijoles refritos que hacen los mexicanos o los guatemaltecos tan ricos que son, un hondureño con su salsita de crema de queso por encima unos maduritos, tan buenos que los hacen, aprenda a comer la comida de los otros, invítense unos a otros y disfrute, y aprenda a comer algo diferente a lo suyo, no todo es arroz con habichuela y carne hermano, hay tanta buena comida en el mundo, disfruten, invítense unos a otros, apréciense unos a otros porque como dice el Señor Jesucristo ¿de qué le sirve a uno dizque estar solamente con la gente que es igual a uno, qué mérito hay en eso? busca alguien diferente a ti y haz armonía, y haz compañerismo con ellos y el Señor será glorificado, y entonces eso se convierte en un acto espiritual, en una declaración de la unidad del pueblo de Dios.

Yo adoro la diversidad, me encanta probar diferentes comidas y sazones. ¿Cuántos aquí usan comino para cocinar o estos otros sabores de la India y del África? Aprenda a cocinar no todo es ajo y cebolla, y salsa de tomate (risas), sálgase de lo común y corriente, vaya a una tienda africana y cómprese algún tipo de sabor allí raro, gengibre, canela para cocinar, sí no solamente para los postres, es difícil pero aprenda.

Esa comunión que hay entre los hermanos es tan bella. Filipenses 2:3 y 4, Filipenses 2 el Apóstol Pablo, uno de los pasajes que a mí más me gusta, dice el Apóstol Pablo: “Completad mi gozo sintiendo lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa” eso es lo que Dios quiere de Su pueblo, y tenemos que cultivar eso, eso no se da por inercia, se da por intencionalidad.

“Nada hagáis por contienda o por vanagloria, antes bien con humildad estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo, no mirando cada uno por lo suyo propio sino cada cual también por lo de los otros” ahí usted tiene la receta para una Iglesia en comunión unos con los otros y esa Iglesia entonces es una Iglesia poderosísima. ¿Sabe cuál es la mayor apologética? Apologética quiere decir el mayor argumento a favor de la fe cristiana y de la deidad de Jesucristo es la comunión que tienen los cristianos unos con los otros.

Uno de los momentos conmovedores en el Ministerio de Jesucristo se encuentra en Juan capítulo 16 cuando Jesús a punto de ser crucificado ora por Sus discípulos, y le dice Cristo a Su Padre en esa famosa oración sacerdotal: “Mas no ruego solamente por estos” Juan 17:20 “Mas no ruego solamente por estos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos” los que han de venir después de ellos, “para que todos sean uno como Tú oh Padre en mí y yo en Ti, que también ellos sean uno en nosotros” ¿para qué? “para que el mundo crea que Tú me enviaste.”

¿Sabe que? de nuevo, uno de los mayores elementos del Evangelismo efectivo, de una Iglesia efectiva es eso, la unidad de la Iglesia, el amor de los hermanos unos con los otros, y no amor porque todos seamos lo mismo, la misma nacionalidad, el mismo nivel socioeconómico o el mismo color, las mismas costumbres, no, porque en nuestra diversidad aprendamos a amarnos y apreciarnos unos a otros, y esa unidad de la Iglesia es tremendamente efectiva, cuando la gente ve eso dice: wow, verdaderamente Jesucristo es quien Él dice que es, porque nadie puede hacer posible que haya este tipo de unidad.

Tenemos que cultivar la unidad, hacer esfuerzos por amarnos unos a otros, invitarnos unos a otros, perdonarnos unos a otros, proteger y mantener la unidad de la Iglesia. Por eso es que cuando yo veo que hay asomos de división en nuestra Congregación o cualquier tipo de cosa, cuando yo veo al diablo tratando de sembrar semilla dentro de nosotros enseguida se me paran las orejas y los ojos, no tengo tolerancia porque el diablo quiere dividir la Iglesia siempre y no podemos tolerar eso.

Cuando usted ve algo que es origen y elemento de división en la Iglesia o huya o confróntelo en el Nombre del Señor con amor pero no permita porque el enemigo quiere sembrar cizaña y dividir al pueblo de Dios, la comunión es muy importante para ser una Iglesia efectiva en Evangelismo.

Entonces tenemos perseverar en la doctrina, tener comunión unos con los otros, y hay un tercer elemento que está asociado porque esto es una progresión lógica con la comunión, dice que en el partimiento del pan, de nuevo 2:42, doctrina de los Apóstoles, comunión y en el partimiento del pan. ¿Qué hay de importancia, qué hay de significativo en el partimiento del pan?

Recuerde que esto era algo simbólico, no era tanto el pan ni partirlo siquiera, había mucho más en eso. Recuerde que el pan judío no era pan como el que nosotros tenemos así sliced bien suave que se dobla por donde quiera, era un pan un poco más duro que lo dividían y lo distribuían, era una señal también de compañerismo y amistad, el padre de la casa partía ese pan entero y tenía una cantidad de simbolismos, por eso el Señor antes de ser crucificado cuando se reunió para la llamada última cena Él tomó el pan dice, lo partió y se lo dió a Sus discípulos, y dijo: Cada vez que ustedes hagan esto de partir el pan en esa forma intencional en que Yo lo estoy haciendo háganlo en memoria de Mí, recuérdenme, que así como este pan es partido Mi cuerpo va a ser partido también en la cruz, me van a penetrar con una lanza, me van a azotar mis espaldas y van a abrir Mi piel, van a quebrarme como Yo estoy quebrando este pan, y cada vez que ustedes hagan ese acto recuérdenme a Mí siendo quebrado por la salvación de sus pecados.

Es decir que el partimiento del pan para los primeros cristianos era dos cosas: era social porque los cristianos se reunían en las casas para comer juntos, y por eso yo creo que es algo tan bonito que nos invitemos unos a otros, la hospitalidad es importante, que seamos generosos unos con otros en la comida para partir el pan, los cristianos se reunían en la comida en el llamado ágape para expresarse amor y cariño unos a los otros, y el Señor había animado, porque recuerde que estos primeros cristianos al apartarse de la fe cristiana y asociarse con el Mesías Jesucristo perdían a veces sus relaciones familiares, su familia como hoy en día los judíos, cuando un judío ortodoxo o judíos que toman en serio su fe se aparta de la fe judaica y se convierte al cristianismo hay muchos judíos todavía padres que guardan luto, quitan todo recordatorio de la vida de ese joven o de esa persona, es como si se murió, guardan luto y se rasgan los vestidos porque esa persona ya se apartó de la familia y lo rechazan completamente, y entonces estos nuevos cristianos necesitaban comunión, necesitaban una familia, entonces ellos se reunían en las casas para adorar, comían juntos, tenían vida social juntos, pero también recordaban el sacrificio de Cristo en la cruz del calvario.

Pero cuando la Biblia dice aquí que permanecían en el partimiento del pan había una serie de asociaciones alrededor de este acto, era expresarse amor unos a los otros, tener intimidad y comunión, pero también era recordar el sacrificio de Cristo, recordar la centralidad de Jesús, recordar la obra salvífica de la cruz y es algo que nosotros también tenemos que hacer continuamente, la centralidad de lo que Cristo ha hecho en la cruz del calvario que es lo que representa la Santa Cena, Su sangre derramada por nosotros en la cruz del calvario, Su cuerpo quebrantado por nosotros, eso es lo que nos da entrada al Reino de Dios.

Y yo no tengo problema con que hermanos se reunieran en sus casas en una forma muy deliberada quizás y que tuvieran una comida, y que recordaran, y oraran, y dijeran: ¿sabes qué Señor? esto que estamos haciendo lo dedicamos a Ti y recordamos la sangre, el cuerpo de Jesucristo en la cruz del calvario.

El centro de la vida cristiana es la Gracia de Dios derramándose sobre nosotros, la salvación no es por nada que nosotros podamos hacer sino porque Cristo se dió en la cruz del calvario, de que la salvación es gratuita. Yo espero que estés diciendo amén ahí aunque sea por dentro, la salvación es por gracia, es lo que Cristo hizo en la cruz del calvario, y estos cristianos partían el pan en obediencia a lo que el Señor les había mandado que hicieran. Es importante que la Iglesia tenga esos rituales significativos, la Santa Cena, la adoración, todas estas cosas que son importantes porque nos mantienen unidos y en ese acto de unirnos para recordar la sangre de Cristo y el sacrificio de Cristo en la cruz hay mucho poder, hay mucho significado.

Finalmente, estos cristianos persistían en las oraciones, el cuarto elemento de la Iglesia efectiva son las oraciones. Ahora, esa palabra oraciones también es muy significativa y en los versículos 46 y 47 se nos da una idea más amplia de lo que se da aquí en términos muy básicos, dice: “Perseverando unánimes cada día en el templo, partiendo el pan” como dice “en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón” dice: “alabando a Dios y teniendo favor con todo el pueblo” ese alabando a Dios se refiere también a esas oraciones porque la oración de esta gente, ellos no se reunían solamente para orar sino para alabar.

Cuando uno ve momentos allí en que estos cristianos, por ejemplo en Hechos capítulo 13 vemos un momento en que los discípulos se unen dice para ministrar al Señor y ahí el Espíritu Santo habló y dijo: “Apártenme a Pablo y a Silas para la obra para la cual Yo los tengo destinados” y allí hubo un momento de profecía, de partición de manos y allí Pablo y Silas salieron a predicar el Evangelio.

Las reuniones de los primeros cristianos se reunían para orar en un lugar y dice que el lugar tembló cuando estos cristianos oraron y clamaron al Señor. En otro momento cuando Pedro y Juan habían sido encarcelados los cristianos se unieron para orar para que el Señor los libertara y los sacara de la cárcel, y de hecho en medio de la reunión Pedro se aparece allí habiendo sido libertado por un ángel, los cristianos se reunían para todo, se reunían y esa palabra “las oraciones” se refiere a la vida congregacional, la vida de reunión y de oración.

Estos primeros cristianos tenían una vida muy básica de oración ¿no? no tenían biblias, no tenían instrumentos como los que nosotros tenemos no tenían pantallas LED, no, ellos se reunían y lo único que tenían era; de hecho ni siquiera tenían el Nuevo Testamento. Es más no tenían un pergamino con la Palabra de Dios, eso era algo que sólo los ricos tenían o un sacerdote. Hoy en día usted compra una Biblia por $1.50, aquéllo les valía el salario de un año, entonces ellos simplemente se reunían para orar, para cantar algo que algún hermanito.

Yo me recuerdo esos coritos tan lindos que cantaban hace 50 años la Iglesia y qué coritos más sabrosos y más ungidos, hoy en día tenemos cientos de coros y yo creo que muchos de ellos no se comparan con algunos de esos coros poderosos, no hay Dios tan grande como Tú, ese coro que se lleven todos pero que me dejen ese, son coritos que tenían testosterona, tenían proteína espiritual porque fueron creados por gente llena del Espíritu Santo, y estos cristianos se reunían así para adorar juntos así en forma bien básica pero oraban, clamaban al Señor.

Este viernes tuvimos una reunión de oración que hemos estado teniendo estos viernes. ¿Sabe que salimos a las 2 y pico de la mañana? Yo pensé que eran como las 12 francamente no había visto mi reloj pero eran las 2 de la mañana cuando salimos, el Señor se manifestó en esa reunión pequeña con tanto poder que casi podíamos tocar Su Presencia, ya cuando entró las 11 y media de la noche ya nos íbamos a ir y entonces fue cuando el Señor dejó el mejor vino para lo último, yo podía con mis ojos espirituales ver al Señor con Su vestido y con un cinto ceñido, no lo ví visualmente con mis ojos pero lo ví con mi espíritu y sentí Su Presencia allí, y entramos en un tiempo de adoración como de dos horas y pico alabando al Señor solamente porque sentimos que el Señor estaba allí y nos había visitado, Su Presencia estaba allí como casi corporal.

Y yo sé que allí logramos grandes cosas, tuvimos durante ese tiempo de oración un tiempo de guerra espiritual, de proclamar el Señorío de Cristo sobre la ciudad y sobre la región, proclamar el poder del Evangelio, derribar principados y potestades. Yo sé que aunque sea dos o tres demonios les cortamos la cabeza ahí el viernes en la noche ¿sabe?

Dios se movió, cuando la Iglesia de Cristo se une el Señor dice: Donde estén dos o tres en Mi Nombre allí Yo estoy, aleluya, y lo que ustedes aten en la tierra Yo lo ataré en el cielo, lo que ustedes desaten en el cielo Yo lo desataré. Si la Iglesia supiera el poder que tenemos cuando nos juntamos y decimos: está abierta la sesión como cuando una corte de justicia o un gobierno el director hace así con su martillo y ¡bum! dice: estamos en sesión para tratar los asuntos del Reino de Dios, y cuando la Iglesia de Cristo se reúne en sesión para orar, atar, desatar, declarar, liberar, declarar cosas en el mundo del Espíritu Dios honra desde Su Trono.

Si la Iglesia orara más, sj la Iglesia adorara más, si dedicáramos más tiempo a unirnos como pueblo de Dios el mundo cambiaría en un instante, se haría mucho más fácil el Evangelismo, la unción de Dios correría con más libertad, cuatro cosas sencillas pero muy poderosas para una Iglesia que quiere ser efectiva en el Evangelismo: perseverar en la doctrina, partir el pan unos con los otros, tener comunión íntima unos con los otros y en último lugar orar y adorar al Señor en espíritu y en verdad.

Hermano: entra eso ahí en tu corazón ahora mismo, recíbelo en el Nombre de Jesús, recíbelo en el Nombre de Jesús. Doctrina, comunión, compartir el pan, la cruz de Cristo y mantenernos en esa oración, en esa adoración que es tan importante. Quiera Dios que nuestra Iglesia, al yo señalar estas cosas, al predicarlas digo: Señor hazlas parte de mi vida, hazlas parte de mi Congregación, que nunca nos salgamos de allí Señor.

Ahora Padre: entra Tu Palabra hondo en nuestros corazones, la recibimos. Al predicarla Padre yo te pido que la hagas una realidad de León de Judá hasta que Cristo venga. Queremos ser una Iglesia efectiva y queremos que estas cualidades aniden y se hagan parte estructural de nuestra vida como Congregación, que así sea Padre, te damos gracias por lo que Cristo ha hecho en la cruz del calvario, en el Nombre de Jesús; y nosotros decimos: amén, les bendigo mis hermanos, la Gracia del Señor sea con ustedes en esta mañana.

¿Qué tipo de tierra eres?

TRANSCRIPT

Esa palabra del Señor nos manda a leer en Marcos, capítulo 4. Yo quiero preguntarte qué tipo de tierra tu eres. Ese es el tema de este sermón. ¿Qué tipo de tierra, de terreno eres? Esta parábola del sembrador nos inspira, nos llama a considerar el proceso de la evangelización. Dice aquí en el versículo 1:

“El Señor comenzó a enseñar junto al mar y se reunió alrededor de él mucha gente tanto que entrando en una barca se sentó en ella en el mar.”

¿Recuerdan esa barca de Pedro, el domingo pasado? Aquí está la barca de nuevo, o quizás fue en ese momento en que el Señor predicó este mensaje. La Biblia es muy bonita. Hace un ratito yo me sonreía porque es como si fuera la primera vez que veía un versículo que está en el capítulo 3, versículo 9 dice que el Señor les dijo que sus discípulos que le tuviesen siempre lista la barca a causa del gentío para que no le oprimieses. Un detalla interesante, Jesús y las barcas. Ese es un tema para un buen sermón, pero no quiero distraerlos.

Se sentó en la barca y estaba en tierra la gente junto al mar, “y el Señor les enseñaba por parábolas muchas cosas y les decía en su doctrina, ‘Oíd, he aquí el sembrador salió a sembrar y al sembrar aconteció que una parte cayó junto al camino – una parte ¿de qué? De la semilla que tiró. – y vinieron las aves del cielo y la comieron. Otra parte cayó en pedregales donde no tenía mucha tierra y brotó pronto porque no tenía profundidad de tierra, pero salido el sol se quemó y porque no tenía raíz – marque eso ahí en su Biblia – se secó.”

Tenemos dos tipos de semillas, una cae junto al camino, otra cae en pedregales. “Y una tercera porción de la semilla cayó entre espinos, versículo 7, y los espinos crecieron y la ahogaron, la abrumaron, y no llegó a dar fruto. Pero otra parte, la cuarta porción de la semilla, cayó en buena tierra y dio fruto pues brotó y creció y produjo a 30, a 60 y ciento por uno. Entonces les dijo el que tiene oídos para oír oiga.”

Eso te dice el Señor, si tu tienes oídos para oír en este momento escucha la palabra del Señor. Esta es una de las parábolas más famosas de Jesucristo. De hecho, que nosotros tenemos un cuadro que montamos hace unas cuantas semanas, al frente del santuario cuando usted sale, que representa esta parábola del sembrador. La puedo ver desde aquí ahora mismo. Y lo pusimos allí a la salida porque cuando usted sale por esa puerta usted regresa a su comunidad y yo quiero que ese cuadro sirva como un recordatorio de que cuando usted sale de aquí, usted sale a sembrar la semilla del Evangelio.

Nosotros salimos a servir al reino, salimos a compartir lo que nosotros de gracia hemos recibido. Entramos para ser alimentados y salimos para alimentar y para sembrar la palabra del Señor. Pero ciertamente esta parábola es una de las más conocidas de toda la historia. Y me gusta esta parábola por varias razones. Me gusta por su perspicacia. ¿Cuántos saben decir lo que quiere decir la palabra perspicacia? Es una palabra dominguera. Perspicacia quiere decir su capacidad profunda de análisis, su capacidad analítica atinada, incisiva podríamos decir, su perspicacia espiritual y psicológica, por su entendimiento de los procesos humanos y sobre todo del proceso espiritual de la evangelización.

Vemos aquí un entendimiento muy profundo de los procesos que inciden en la proclamación del Evangelio. Nos muestra la complejidad que involucra la predicación del Evangelio. La predicación del Evangelio es algo tremendamente complejo y hay muchos factores que afectan el destino de la palabra de Dios cuando sale de la boca de un predicador o una predicadora.

¿Cuántos saben de ustedes que Dios no es el único actor en el proceso de la evangelización? Esta parábola nos hace conscientes de que hay muchos diferentes actores, muchos diferentes elementos que afectan el proceso de la predicación. Por ejemplo, en esta parábola vemos que están involucrados, primero, el sembrador, también una semilla que juega un rol, el tipo de tierra en que cae la semilla también es importante. Hay espinos, hay piedras, hay pies que pisotean, hay pájaros que comen la semilla, hay un sol que afecta la semilla. Hay muchos diferentes factores.

Satanás está en el proceso porque más adelante el Señor explica él mismo… una de las pocas parábolas en que el Señor explica el significado de cada uno de los símbolos que él emplea. Qué bueno es tener a Jesús interpretando él mismo su palabra, ¿verdad? Uno quisiera tener ese privilegio siempre. Pero aquí el Señor mismo explica lo que él quiso decir con su parábola.

Y él dice que esos pájaros que salen en la primer tipo de semilla es Satanás que afecta el destino de la semilla. Y hay una serie de otros factores adicionales que determinan si el acto de tirar la semilla prospera y tiene éxito o no. entonces, una de las cosas primeras que esta parábola nos enseña es la complejidad, la diversidad de factores que afectan la proclamación del Evangelio.

No muestra el carácter dinámico y complejo del Evangelio y de su proclamación. Y en este tiempo en que nosotros estamos reflexionando continuamente sobre evangelismo, y estos sermones están diseñados para ser un compendio de enseñanza sobre diferentes aspectos, es como una sola presentación extendida con diferentes aspectos, que todo tiene que ver con una educación completa, más o menos, pero por lo menos abarcadora de los diferentes factores que afectan el evangelismo.

Entonces en este tiempo de reflexión una de las cosas que nosotros tenemos que entender es que no todo depende de nosotros solamente cuando proclamamos el Evangelio. Y yo le voy a decir por qué eso es tan importante. Pero esto me enseña a mí que nosotros somos como los sembradores, la iglesia, usted y yo, pero usted ve que no solamente es el sembrador sino que hay otros factores aquí que juegan un papel importante.

¿Y sabe cuál es uno de los factores más interesantes del destino de la predicación del Evangelio? La voluntad de Dios. ¿Y por qué yo digo esto? Porque hay gente con la cual Dios no tiene propósitos y que por alguna razón no están destinados a ser salvos y esto es tremendamente misterioso pero la palabra nos dice eso. Es decir, que hay personas que por más que nosotros nos esforcemos y hagamos todo lo que está de nuestra parte, no están destinados a ser salvos. Y Dios no tiene propósitos con ellos. Y la Biblia dice que a menos que Dios no active su llamado en la vida de una persona, esa persona permanece inerte.

Sabe que tiene que haber una intervención divina para que la gente venga al Evangelio. La palabra dice que nadie viene a Cristo si el Espíritu Santo no lo atrae a él. Y hay personas que Dios simplemente… no me pregunte por qué, pero si usted busca en Romanos, capítulo 9, usted va a ver allí algo acerca de eso. Todo el capítulo 9 de Romanos está diseñado para iluminar un poco ese aspecto.

Por ejemplo, el pueblo hebreo, ¿por qué le pueblo hebreo a pesar de haber recibido la revelación abrahámica, los pactos y todo eso, hoy en día todavía, dice la Biblia, que tiene como un velo que cubre su entendimiento? Imagínese eso, siglos y siglos han pasado desde que Cristo vino a la tierra, del linaje de Judá y todavía ese pueblo israelita judío permanece su entendimiento embotado, aunque es el pueblo de Dios y Dios lo tiene como en paréntesis. Mientras él completa su trabajo entre nosotros los gentiles, los no hebreos, ese pueblo está ahí como en suspensión animada espiritualmente.

Y usted le habla a los judíos acerca de Cristo y es como que están cerrados como los muros de Jericó. Y dice la Biblia que un día el Señor quitará el velo de ellos y entenderán y llorarán por Cristo como se llora por un hijo perdido. Pero mientras tanto el Señor los tienen en paréntesis, porque Dios es un Dios de orden y primero trabaja entre y nosotros y cuando se haya completado la plenitud de los gentiles, entonces el Señor tornará su mirada otra vez hacia los hebreos.

Hay gente inclusive que usted le predica el Evangelio y tienen el entendimiento embotado. Este mismo fin de semana leí un artículo en el New York Times escrito por una novelista judía, de paso, que es interesante, donde ella ha padecido de insomnio prácticamente toda su vida, un insomnio debilitante, una ansiedad y una depresión y ella ha buscado solución para su problema clínico en yamanes, en ese momento está visitando, cuando escribe el artículo, se ubica visitando a un yamán mexicano que se llama Rafael, buscando a ver si él tiene la solución, pero ella es incrédula. Y yo creo que ella está buscando más bien otro párrafo para su artículo que estaba escribiendo.

Pero es fascinante de todas maneras. Y ella habla de cómo a ella le es imposible creer. Su papá un científico judío norteamericano, ella con una educación privilegiada muy racional, no puede, por más que quiere, como que tiene un casco de metal que cubre su entendimiento y no puede creer.

Yo he tenido experiencias con personas así. Recuerdo alguien muy querido mío que en una cena me dijo, yo he tratado pero simplemente…. Me dio pena porque era como una admisión de derrota que esta persona me estaba diciendo, no puedo creer. Y hay personas así, es como que Dios no tiene con ellos un propósito y esto afecta muchas veces el destino de nuestra predicación.

Versículo 14, Romanos, 9, dice, “¿Qué pues diremos, que hay injusticia en Dios?” Porque usted puede decir, bueno, y ¿cómo es eso que una persona nace y Dios no tiene propósito con ella y entonces se pierden? ¿Qué culpas tienen ellos? Esos misterios que yo no puedo resolver, pero ahí están en la palabra. Dios es soberano. Dios hace lo que quiere.

“¿Qué pues diremos, que hay injusticia en Dios? De ninguna manera. Pues a Moisés dice, tendré misericordia del que yo tenga misericordia y me compadeceré del que a mí me de la gana, en otras palabras, del que yo me compadezca. Así que no depende del que quiere ni del que corre sino de Dios que tiene misericordia. Porque la escritura dice a faraón – está argumentando el escritor de Romanos – para esto mismo te he levantado, para mostrar en ti mi poder y para que mi nombre sea anunciado por toda la tierra. De manera que de quien quiere tiene misericordia y al que quiere endurecer endurece.”

Qué misterio. Por eso es que nosotros tenemos que tener mucho cuidado cómo oramos. En este tiempo aquí en esta nación sabe que ya yo no oro porque no salga Hilary o porque no salga Trump, yo estoy diciendo, Señor, simplemente cúmplase tu voluntad. ¿Por qué? Porque quizás Dios quiere que esto se ponga peor todavía en esta nación. Quizás Dios quiere que todavía faraón resista un poco más a Moisés antes de que venga la visitación del poder de Dios sobre esta nación.

Sabe usted que Dios a veces lleva las cosas hasta un punto oscuro, oscuro y que la gente se corrompa, la maldad de los hombres tiene que llegar, dice, a su cúspide antes de que Dios intervenga. Y a veces estamos nosotros orando, Señor, que se convierta este, otro. Sí, podemos pedir lluvia, porque nosotros queremos la visitación y a la postre Dios va a hacer su voluntad, pero yo no sé cuánto tiempo mientras esperamos y clamamos se tomará para que Dios intervenga.

¿Sabes qué? Yo duermo tranquilo. ¿Por qué? Porque yo sé que suba Hilary o suba Trump o suba quién sea, el Señor está en su trono, como decimos, está en control. Y él es quien está llevando las cosas a su lugar y a veces él hace que se levante el faraón para mostrar su gloria entonces. A veces él permite que una persona sufra y resista porque él tiene que madurar a esa persona antes de que finalmente baje la cabeza ante el Señor.

Tu quizás estás orando por tu hijo, Señor, conviértelo, conviértelo. Y debes seguir orando, pero quizás el Señor tiene todavía unos años más que se dé contra la cabeza y la pared antes de que venga a los caminos del Señor. Tu parte, sigue orando, sigue clamando al Señor y deja el resultado al Señor.

Hay gente a quien nosotros le proclamaremos el Evangelio, hay naciones, hay generaciones que nuestra parte simplemente es sembrar la semilla. A veces nosotros no sabemos qué propósito Dios tiene con la gente y cuánto tiempo se tomará. Pero yo sé una cosa, que Dios es fiel y que la palabra sí promete que el Señor viene pronto, que viene una cosecha de almas y nosotros tenemos que estar clamando al Señor, danos unción, danos entendimiento, danos poder para estar preparado cuando venga la visitación de tu poder.

Pero hay personas que tu vas a predicarles y no te preocupes, deja que el Señor haga la obra, él sabrá lo que él tiene en mano con esas personas. Se nos sugiere aquí que con algunas personas Dios tiene planes y propósitos y con otras no. y esto quizás explica por qué algunos terminan no salvados y otros sí. Esto es muy complejo y sugiero que usted no se atormente demasiado en ello. Lo importante como digo es predicar el Evangelio. De nada sirve que nos atormentemos, nos sintamos culpables pues hay una parte que solo le pertenece a los misterios del Señor.

¿Sabe por qué yo estoy enseñando todo esto? Porque muchas veces yo veo en esta nación ahora mismo un sector de la iglesia evangélica que está atormentado porque la gente acusa a la iglesia de ser farisaica, de no entender a las personas homosexuales y a los trasvestistas y a los trangénero, de que nos creemos mejor que nadie, y hay muchos cristianos atormentándose porque quieren que la iglesia sea popular, quieren que la iglesia sea aceptada. Les atormenta la crítica que la gente dirige hacia la iglesia y están continuamente experimentando y buscando a ver cómo quitar toda ofensa del Evangelio para que la gente deje de pensar que los cristianos somos malas personas.

Y usted ve que quitan la cruz, porque la cruz ofende a algunos. Campus Crusade un ministerio universitario cristiano cambió su nombre de Cruzada Estudiantil a Cru, porque cruzada ofende a los musulmanes y a otra gente entonces vamos a quitar la palabra cruzada. Otros quitan la palabra cristiana del nombre de la iglesia y ponen algo comunitario, iglesia de la comunidad. Otros llaman a la iglesia, iglesia de Gracia, porque gracia le gusta a la gente, nadie va a llamarle iglesia de condenación, claro. Pero gracia porque eso le va a enseñar a la gente que estos son buena gente, puede ir a esa iglesia.

Mire, usted le puede cambiar el nombre que usted quiera, usted puede esconder lo que usted quiera, las almas son salvadas cuando el Espíritu Santo toca el corazón y la gente reacciona positivamente a la obra de Dios. Nuestra parte no es cambiar el Evangelio, nuestra parte no es darle maquillaje y ponerle más desodorante al Evangelio, nuestra parte es predicar la palabra, ser fieles y dejar lo demás al Señor. Porque en última instancia el Señor es quien se encargará de hacer la obra, no nosotros.

Yo no sé qué planes Dios tiene con esta generación. Claro que sí, nosotros queremos ayudar en todo lo posible, mejorar nuestra forma de predicar el Evangelio, proveerle a la gente un ambiente correcto, predicar un Evangelio balanceado, todo lo demás, pero yo sé que en última instancia cuando todo se haya hecho, yo lo único que puedo hacer es descansar y dejar el resultado al Señor. No cambiemos el mensaje. No cambiemos la proclamación de la palabra porque hay procesos y Dios es quien tiene el control absoluto.

Y por eso el leer esta parábola me da paz, me permite predicar el Evangelio con soltura, sin afán, dejando el resultado al Señor. Mi parte, tu parte es proclamar la palabra en toda oportunidad y entonces descansa. No prediques el Evangelio con ansiedad, quieres que esa persona se convierta, y estás allí insistiendo y molestando y llamando por teléfono y entregando tratados y todo eso, no, predica la palabra y entonces deja que el Señor obre.

La gente quiere recibir el mensaje del Evangelio de personas que están confiados en su material. Si tu tienes un vendedor… sabe cuando yo voy a comprar algo lo que más me disgusta es cuando no he pasado por la puerta y ya yo veo que por allá se comienza a mover el vendedor para venir donde mí. Déjeme tranquilo, si yo lo necesito yo lo llamo. Venga, dígame, estoy a sus órdenes acá, cualquier cosa yo voy a estar por allí. Gracias. Ahora déjeme tranquilo que yo sé bien lo que estoy buscando.

Es decir, nosotros tenemos que predicar el Evangelio tranquilamente, con elegancia, con gracia, con confianza. A nadie le gusta un vendedor que desconfía de la mercancía que vende. Y yo creo que esa timidez que tiene tanto evangélico hoy en día en esta nación, queriendo justificarse, que la gente piense que somos buena gente, quitando todos los distintivos del Evangelio, eso es más contraproducente que cualquier otra cosa.

La gente quiere que usted le presente un Evangelio claro, firme, contundente y que usted lo predique con seguridad y eso tiene mucho poder para convencer. No predique el Evangelio con ansiedad, sintiéndose culpable. Hay partes que solo el Señor entiende y en última instancia él está en control.

Note aquí que hay una sola semilla que es predicada. No hay muchas diferentes semillas, una sola semilla. El Evangelio dice es la palabra una vez dada a los santos. Y la iglesia no tiene poder para cambiar la semilla. La semilla siempre es la misma. El Evangelio no cambia, es el mismo mensaje. La diferencia está en la tierra y el contexto. Y esa tierra es la persona, el corazón del individuo, la sensibilidad que recibe el mensaje. El contexto en que se predica la palabra.

Miremos la primera semilla. Esa primera semilla dice aquí que es recibida por una persona, un individuo que simplemente no entiende el carácter sublime o la importancia de vida o muerte del Evangelio. En otra versión de esta parábola que se encuentra en Mateo, el Señor explica eso de que esa primera persona que recibe el Evangelio no entiende el mensaje y por eso el enemigo quita el mensaje de ella.

Entonces esta persona, cuando usted le predica el Evangelio piensa que usted lo que le está predicando es una denominación, una congregación, que lo que usted quiere es su dinero, que ya ha escuchado lo mismo 20 mil veces, que usted es de ese grupo que se aparece por allí, esos evangélicos locos que están en la televisión, etc., no entiende que usted le está presentando la oportunidad de vida eterna, de un marco de referencia para su existencia, de un entendimiento de sus orígenes y todas estas cosas. No es iglesia, no es religión, es la salvación eterna de su alma.

Pero esta gente no entiende el mensaje del Evangelio. Pero se nos dice algo más y es que el diablo es quien quita la semilla de su entendimiento. Como que esta persona no valora, no entiende, su entendimiento está ciego, el enemigo puede entonces arrebatar la semilla del Evangelio. Aquí el Señor sugiere claramente oposición diabólica y demoníaca que yo me alegro que sea él mismo interpretando su propia parábola porque no hay duda de que lo que él quiso decir es que a veces hay interferencia.

Otro de los actores importantes en la proclamación del Evangelio es Satanás. Muchas veces la influencia demoníaca, diabólica impide que mucha gente reciba el Evangelio. ¿Sabía usted que en evangelismo hay guerra espiritual también? Y que el diablo tiene sumo interés en que nadie se convierta al Evangelio.

Búsquese en Segunda de Corintios capítulo 4, en el versículo 3 dice así: “Pero si nuestro Evangelio está aún encubierto entre los que se pierden está encubierto, en los cuales el dios de este siglo – ¿quién es el dios de este siglo? Satanás. Siglo no se refiere a este siglo de 100 años, se refiera a esta edad, esta época, este tiempo, esta dispensación, este sistema humano en el cual estamos involucrados – segó el entendimiento de los incrédulos…”

Es decir, cuando una persona se empecina en no creer es porque esa persona en alguna forma también está siendo afectada por una influencia demoníaca que le impide creer.

“… para que no les resplandezca la luz del Evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios. – es interesante el versículo 6 – Porque Dios que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo.”

¿Por qué tu llegaste a conocer a Cristo y a aceptar a Cristo? Porque la luz de Dios resplandeció sobre ti. No fue porque tu naturalmente de buena gente que eres decidiste creer en Cristo, Dios te alumbró, te iluminó para que tu pudieras ver. Mientras tanto el enemigo estaba tratando de cegar tu entendimiento para que tu no recibieras la palabra.

Tu tienes que preguntarte ¿habrá una lucha espiritual? ¿Por qué yo no acepto a Cristo? ¿Por qué yo no he entregado mi vida a Jesucristo? ¿Habrá una parte de lucha espiritual? Yo tengo que pedir, Señor, dame entendimiento, abre mis ojos para que yo pueda conocerte.

Entonces, vemos que Satanás muchas veces ciega el entendimiento de la gente para que no les resplandezca la luz del Evangelio. Él viene y quita la semilla, por una parte uno le está predicando el Evangelio y su mente está pensando en otras cosas, o viene una distracción, o viene un problema o lo que sea, y la gente sigue su camino y se olvida de lo que escuchó. Por eso es importante orar por las personas que queremos que conozcan a Jesucristo, para que el Señor quite el velo que cubre su entendimiento y puedan recibir al Señor.

Una iglesia que está buscando ser efectiva evangelísticamente tiene que orar, y por eso es que estos tiempos de oración, yo creo que el Señor soberanamente los ha impuesto sobre nosotros. Yo no me propuse tener tiempos de oración de esta manera insistente, una vez, el viernes, pero los demás es el Señor mismo quien los ha… y por eso es que uno tiene que aprender de las cosas. Dios te va enseñando. Y yo creo que vamos a seguir hasta que el Señor nos dé libertad, vamos a ver cómo. No lo queremos convertir en rutina tampoco pero si una iglesia quiere ser efectiva tiene que orar.

Si tu quieres ser efectivo en tu vida tienes que orar. Si tu quieres que personas conozcan a Cristo ponlas en una lista y ora insistentemente por ellas para que el diablo sea vencido en ellos y ellos puedan recibir neutralmente la palabra de Dios.

Sabe que dice la Biblia que primero hay que atar al hombre fuerte antes de que las personas puedan creer. Mire lo que dice Marcos capítulo 3, versículo 27 – estoy dando material pero usted puede escuchar la grabación después otra vez – dice aquí, “Ninguno puede entrar en la casa de un hombre fuerte – ¿quién es ese hombre fuerte? Satanás, los espíritus demoníacos – y saquear sus bienes si antes no le ata y entonces podrá saquear su casa.”

Y él está hablando específicamente en el contexto de la predicación del Evangelio y del reino demoníaco que se opone al Reino de Dios. Y primero hay que atar, a veces tenemos que orar en forma de guerra espiritual para que nuestros hijos conozcan al Señor. Y es importante que la gente entienda que hay una pelea por cada alma. Esto no es sencillo, esto no es fácil, hay guerra espiritual detrás bastidores por cada alma. Cada alma que se convierte es un milagro de Dios porque hay poderes que están dedicados a impedir, porque el diablo quiere causarle dolor al Señor en la pérdida de sus hijos. Y tenemos que clamar al Señor y tu mismo ayuda al Señor clamando para que Dios abra tus ojos y tu puedas entender la importancia del Evangelio.

A veces tenemos que despojar al diablo primeramente para que pueda haber una cosecha de almas. Tenemos que orar por esta ciudad de Boston para que el Señor abra el entendimiento de la gente y puedan recibir el Evangelio. Una iglesia que está involucrada en evangelismo tiene que ser fuerte en la oración y en la santidad, de otra manera no puede haber efectividad en la vida cristiana.

Es decir, que la primera semilla el diablo está involucrado en no permitir que prospere. La segunda semilla que cae se nos dice que cayó en pedregales, la porción de la semilla cayó en pedregales, donde no tenía mucha tierra y como no estaba profundamente arraigada no tenía forma de alimentarse ni recibir agua de la humedad que hay debajo de la tierra.

Esta porción de la semilla cae y prematuramente da fruto, o mejor dicho, simplemente brota una matita, pero no se ha tomado tiempo para esa semilla ir hacia abajo, meterse en la tierra, porque ¿qué pasa? Cuando una planta tiene raíces puede beber de la humedad que está debajo de la tierra, puede alimentarse de los nutrientes de la tierra, pero si no tiene raíces hondas se marchita fácilmente. Y paradójicamente hay personas así que creen en Cristo, reciben la palabra, se convierten, usted los ve que comienzan a venir a la iglesia, pero como no tienen buena formación, buena enseñanza, buena raíz, buenos hábitos espirituales, cuando vienen los problemas y las dificultades inmediatamente usted no los vuelve a ver en la iglesia.

Y aquí se desprenden dos o tres cosas bien importantes. Una de las cosas, mis hermanos que han conocido al Señor recientemente, tu que estás joven en la fe, aliméntate espiritualmente, lee la palabra, estudia la palabra, adquiere buenos hábitos devocionales. Por eso nosotros hacemos diferentes cosas. Una de las cosas que ofrecemos es después que la persona se convierte los animamos a tomar 3, 4 clases que ofrecemos siempre para que por lo menos tenga algo de conocimiento de lo que sucedió en su espíritu cuando aceptó a Cristo como Señor y salvador. Y los animamos que adquirir buenos hábitos de oración, lectura de la palabra, congregarse, servir al Señor y otros hábitos devocionales para que puedan ser gente saludable.

Si tu corazón no está educado en la palabra del Señor tu experiencia cristiana va a ser deficiente. Ofrecemos clases de discipulado también, todas estas cosas que ustedes escuchan de talleres y retiros, esto está diseñado para que esa mata, esa semilla que ha caído en la tierra pueda ir hacia abajo. Cultiva tu vida espiritual porque para tu ser una mata que pueda resistir los ataques de la vida es importante que eches raíces. Esta mata como no ha echado raíces es frágil y débil y por eso cuando sale el sol se quema fácilmente y muere. A los nuevos creyentes los animo a tomar la vida cristiana en serio y hacer todo lo posible por madurar en las cosas de la fe.

Ahora, dice que las pureabas, cuando una persona no tiene una vida cristiana sólida está a merced de cualquier prueba que pueda venir. Es como un bebé. Sabe que los bebés son frágiles y cualquier resfriado se puede convertir en una pulmonía, cualquier caída puede afectar su cerebro en una manera terminante, y por eso los bebés nosotros los cuidamos tanto y les damos tanto mantenimiento porque cualquier prueba, es decir, cualquier trauma sobre su sistema puede ser fatal o muy dañino.

Y cuando la gente está en esa parte inicial de la vida cristiana pueden venir pruebas. Dice que cuando viene la prueba se aparta del Evangelio. Y uno puede pensar, bueno, nosotros sabemos lo que son pruebas, pero hay dos tipos de pruebas que yo quiero decirles a ustedes que es muy importante que tengamos siempre en consideración. ¿Sabe cuál es la primera prueba que experimentan los nuevos creyentes? A veces es aquí en la iglesia. Una de las pruebas más peligrosas, irónicamente, es la misma vida de la iglesia para los nuevos creyentes.

En la iglesia hay mucha gente imperfecta, todavía están en formación y algunos no son muy maduros y cuando la gente recibe a Jesucristo y viene a la iglesia piensa que todos son unos santitos, que todo el mundo está santificado, que todo el mundo es un dechado de virtudes y cuando se dan cuenta que no es así, se escandalizan y cuando surge la persona chismosa, la persona que lo mira mal, la persona que lo critica, cuando ve a 2 cristianos que ella suponía que eran muy maduros peleándose uno con el otro, cuando ven que la iglesia está hecha de gente también enferma, que necesitan gracia del Señor, echan un pie y se van. Y el diablo a veces usa a los hermanitos dentro de la misma iglesia para hacer daño a los demás.

Y por eso yo digo, hermanos, que la iglesia tiene que ser un lugar donde los pequeñitos puedan encontrar un buen ambiente para educarse. Tenga cuidado, yo no tengo ya tolerancia para la gente chismosa en la iglesia, hermanos, cero tolerancia. Repréndelo en el en el nombre de Jesucristo toda murmuración, todo chisme, toda carnalidad en el en el nombre de Jesús. Si usted ve una persona chismosa denúnciemela que yo me voy a encargar de ella. Ahora no vengan todos al final del servicio, pero sinceramente, hermanos, eso me duele en el corazón, porque esa es una prueba diseñada por el diablo para escandalizar a los pequeñitos.

Y la Biblia dice bien claro, mira, mejor sería que te ates una piedra de molino y te tires al fondo del mar antes que escandalizar a uno de los pequeñitos. Y a veces nos escandalizamos unos a otros, hermanos. Yo creo que hay tantas pruebas que vienen. Mire, a veces usted dónde encuentra la mayor tentación? Dentro de la iglesia no allá afuera.

Yo les digo a mis hermanas, lo voy a repetir por integridad. Mis hermanas, ¿sabe una de las cosas que yo amo de la iglesia católica en sus mejores tiempos? Era cuando esas hermanas se vestían como para ir a la iglesia. Yo entiendo bien que… pero yo creo que la iglesia debe ser un lugar donde los hombres no tengamos distracciones innecesarias. Amén. Hermanas, por favor, entienda bien lo que les quiero decir. Yo no me considero un santurrón porque ni que quisiera serlo lo podría ser, es más, pero hermanas, este es lugar donde ustedes y los hombres también les digo lo mismo, si por casualidad Dios les ha dado un cuerpo que provoque malos pensamientos también, vístase como debe.

Yo creo que el cristiano debe vestirse de una forma apropiada pero por lo menos para venir a la casa del Señor. Es tan lindo cuando yo veo a mis hermanas que se visten con esa delicadeza, con esa consideración de que están en la casa de Dios. Eso es como que me hace sentir a mí bendecido. Allá afuera usted haga lo que quiera pero le suplico, y eso yo creo que va a ser de bendición para usted, le prometo, porque eso es un mensaje que usted le envía a su espíritu.

Yo quiero que usted haga lo que usted quiera con eso. Pero les hablo con mi corazón pastoral aquí en la mano, con todo el amor. No estoy hablando de que usted se compre un saco de harina y se lo ponga tipo musulmana con los [inaudible] solamente ahí, no, usted puede vestirse bien, pero órele al Señor, pregúntele al Señor acerca de eso. Eso es todo. Porque muchas veces eso es piedra de tropiezo, escandaliza a algunos hermanos y otros hermanitos que la carne está todavía fresquecita y nueva, y si usted juega un papel público en alguna manera, pregúntese, ¿estoy yo desempeñando mi tarea en una forma inspiradora en vez de tentadora? ¿Entienden lo que quiero decir? al buen entendedor pocas palabras bastan.

Porque es que la iglesia puede ser un lugar de problemas, puede ser un lugar de tentación y de complejidad y de complicaciones innecesarias. Y eso es todo, y tenemos que tener cuidado… cuidarnos unos a otros, tener misericordia unos de otros. La iglesia puede ser un lugar… y las pruebas pueden venir en otras maneras también, pueden venir a través de los sufrimientos.

Sabe que muchas veces cuando comenzamos a servir al Señor vienen los ataques del diablo a nuestra vida también y el diablo quiere ver si nosotros nos mandamos a huir porque vienen los problemas y las pruebas, las dificultades. Lo que tu tienes que hacer es resistir en el nombre del Señor. Párate firme, entiende y discierne que el diablo a veces quiere destruir tu vida y la Biblia dice que simplemente resistamos al diablo y él huirá de nosotros.

No te dejes escandalizar porque el domingo siguiente después de convertirte el carro se te dañó, o que el IRS te escribió una carta que hay un dinero ahí que hace 4 años que tu le debías y ahora lo sabes. Resiste, se fiel hasta la muerte. Dios te dará la corona de la vida.

El Evangelio es para los decididos, los fuertes y dice que es preciso que a veces a través de muchas pruebas y dificultades lleguemos al reino de los cielos. Pero yo te puedo prometer una cosa, es que en el nombre de Jesucristo si tu te mantienes firme, Dios te dará victoria en todas tus tribulaciones y Dios usará todas tus dolencias, todas tus pruebas para hacer un hombre, una mujer poderosa de Dios y un cristiano más efectivo.

El cristiano coge los lanzamientos del diablo y se los batea de jonrón ciento por ciento de las veces. Las pruebas, no permitas… echa tu raíz honda en una vida devocional, las prácticas de la vida devocional cristiana, congrégate, sirve, pégate a dos o tres personas maduras en la fe, lee la palabra, y el Señor te dará la corona de la vida.

La tercera semilla es la que cae entre espinos, que entonces crecen alrededor de la semilla, la ahogan y la dejan sin fruto. ¿A qué equivale esto? El Señor lo explica en el versículo 19, él dice que los afanes de este siglo, el engaño de la riqueza y la codicia de otras cosas – usted escriba ahí lo que usted quiera – entran y ahogan la palabra y esta se hace infructuosa, es decir, no da fruto.

Esos espinos son los afanes de la vida, la vanidad del mundo, el engaño de la riqueza, la codicia, la sensualidad. Es uno de los grandes obstáculos. Yo creo que es el número 1 en la lista de la gente cuando quiere entrar a los caminos del Señor.

Por ejemplo, la Biblia relata acerca del joven rico, vino ante el Señor con gran ansiedad, Señor, ¿qué debo hacer para heredar la vida eterna? Y el Señor al final le dice, “Mira, toma tu dinero, dalo a los pobres, distribúyelo y entonces ven y sígueme.” ¿Qué dice la Biblia? El hombre se fue triste porque tenía mucho dinero, mucha fama, mucha influencia social y el Señor dijo, guau, qué difícil es para los ricos entrar en el reino de los cielos.

Y ¿sabes qué? Usted no tiene que ser rico en dinero para tener dificultad de entrar en el Reino de Dios, a veces usted puede ser rico en apariencia, rico en amistad, rico en profesión, rico en influencia social, rico en prestigio, rico en juventud, rico en vitalidad y salud, y esas cosas usted tiene que estar dispuesto a todo entregárselo al Señor para que el Señor haga su obra en su vida.

Si usted ama cualquier cosa de este mundo más que a Cristo usted no merece ser un discípulo del Señor. Hay que despreciar nuestra vida hasta la muerte, dice la palabra. Y mucha gente cuando recibe la predicación les gusta el Evangelio pero cuando se ponen a contar el costo y se dan cuenta que esta práctica yo les robo a los clientes, yo les vendo carros que no sirven y les digo que son el mejor carro que se han comprado en su vida. Este joven con quien yo salgo y tengo una relación ilícita lo voy a tener que dejar por el Evangelio. Este hábito, esta boca, esta influencia social, me van a decir que soy un evangélico fanático, voy a perder prestigio, me van a decir que soy un santurrón, que soy un fariseo, que por qué yo rechazo a la gente, etc. y hay una cantidad de cosas que son obstáculos para que la gente entre al conocimiento de Jesucristo.

Y mucha gente como este joven rico dice, sabes qué, no esto no es para mí. Aman más la opinión de la gente y dicen no, no lo quiero. Mucha gente hace este tipo de transacción mental y se engañan pensando que como que Dios no se dio cuenta. Pero ¿sabes qué? Siempre que usted dice no al Evangelio ese es un no activo y hay como una cámara que retrata el momento en que usted dijo no al Evangelio. Y un día nosotros tenemos que dar cuenta, cuando vengamos ante el trono de Dios, dice la Biblia, cada uno tendrá que dar cuenta de sus decisiones. Y Dios te va a preguntar ¿por qué tu amaste más al mundo que a mí? Y tenemos que poder dar una respuesta.

Ojalá que nosotros a tiempo podamos decir, no, Señor, te entrego lo que tu quieras. Yo amo más la vida eterna que cualquier cosa de este mundo. Pero nosotros tenemos que predicarle a la gente simplemente, predicamos y cada uno tiene que hacer su decisión según la semilla que es.

Y eso me lleva a la última semilla, dice la Biblia que la cuarta porción de semilla cayó en buena tierra y nos dice la parábola que esta persona es la persona que oye el Evangelio, lo entiende, lo recibe y da fruto a diferentes niveles, a diferentes capacidades. No todo el mundo va a ser un Billy Graham que le habrá predicado a millones de personas, pero cuando tu entres al Evangelio Dios te llama para que lo sirvas, para que prosperes, para que des fruto, para que crezcas, para que hagas algo positivo y para que ayudes a otros a conocer a Jesucristo.

Dios tiene un plan para tu vida. ¿Qué tipo de tierra eres tu? De esas 4 porciones que hay allí, ¿a cuál de ellas perteneces tu? Quiera el Señor que tu seas como esa buena tierra.

Préstale tu barca al Señor

TRANSCRIPT

El capítulo 5 de Lucas dice: “Aconteció que estando Jesús junto al lago de Genesaret el gentío se agolpaba sobre él para oír la palabra de Dios. Y el Señor vio dos barcas que estaban cerca de la orilla del lago y los pescadores habiendo descendido de ellas lavaban sus redes. Y entrando en una de aquellas barcas la cual era de Simón, le rogó que la apartase de tierra un poco y sentándose enseñaba desde la barca a la multitud.

Cuando terminó de hablar dijo a Simón, “Boga mar adentro y echad vuestras redes para pescar.” Respondiendo Simón le dijo, “Maestro, toda la noche hemos estado trabajando y nada hemos pescado, más en tu palabra echaré la red.” Y habiéndolo hecho encerraron gran cantidad de peces y su red se rompía. Entonces hicieron señas a los compañeros que estaban en la otra barca para que viniesen a ayudarles y vinieron, y llenaron ambas barcas de tal manera que se hundían.

Viendo esto Simón Pedro cayó de rodillas ante Jesús diciendo, “Apártate de mí, Señor, porque soy hombre pecador.” Porque por la pesca que habían hecho el temor se había apoderado de él y de todos los que estaban con él y así mimso de Jacob y Juan, hijos de Sebedeo, que eran compañeros de Simón. Pero Jesús dijo a Simón, “No temas, desde ahora serás pescador de hombres.” Y cuando trajeron a tierra las barcas dejándolo todo le siguieron.”

Bendiga el Señor su palabra. Amén. Préstale tu barca al Señor. Dios nos ha escogido para que colaboremos con él en la evangelización del mundo. Y a nosotros nos toca decirle sí a esa invitación a través de nuestra vida. Como Cristo le rogó a Simón Pedro que le prestara su barca para llevar a cabo su tarea evangelística que estaba delante de él. Él también nos pide a nosotros que le entreguemos nuestra barca, nuestra vida, nuestros recursos para que él pueda expresarse a través de nosotros.

Este pasaje comienza describiendo una necesidad en el ministerio docente evangelístico de Jesús. Las multitudes lo seguían dondequiera que él iba y estaban desesperados, se agolpaban sobre él. ¿Por qué? Porque el Señor les daba comida, llenaba las necesidades de la gente y por eso lo perseguían. Jesús era muy diferente a los religiosos de su tiempo, a los fariseos, a los saduceos, a los establecidos de la religión. Él llenaba necesidades, si la multitud tenía hambre él proveían comida, si estaban endemoniados los liberaba, si estaban necesitados de una palabra de afirmación como Saqueo o la mujer con el flujo de sangre o sanidad, lo que fuera, el Señor proveía esa necesidad. Si necesitaban sanidad física, el Señor los sanaba físicamente, les daba esperanza.

Y yo creo que una iglesia que quiera ser efectiva evangelísticamente tiene también que llenar necesidades. Ahora no solamente las necesidades que la gente identifica, por si usted le dice a la gente simplemente qué ellos quieren, le van a decir queremos comida, queremos dinero, queremos fama, queremos que Dios nos diga que somos buenos, pero no van a estar dispuestos necesariamente a pagar el precio de esas cosas. Y la iglesia tiene también que llenar necesidades secretas que ellos mismos no conocen.

Tenemos que despertar esas necesidades y eso es parte también de la predicación de la iglesia. Pero es importante que esta gente se agolpaba sobre Jesús, lo perseguía, lo cual no sucedía con los fariseos y los saduceos. Una religiosidad muerta no tiene nada que enseñarle o darle a la gente. Hay que ofrecerle a esta cultura un enfoque del Evangelio que llene las necesidades de esta cultura.

¿Cuáles son algunas de las necesidades de la gente de este tiempo? Hace poco fui a comer con un pastor que me invitó en New Hampshire, un pastor amigo mío, John Foster, y me llevó a un sitio muy lindo, un restorán italiano muy bonito en un área muy próspera de New Hampshire y nos sentamos en un sitio precioso. Este hombre tiene dos restoranes, uno que queda bien cerca y este es como una especie de un grocery store, una bodega italiana con carnes exquisitas, curtidos de todo tipo, todos los vinagres habidos y por haber, todas las aceitunas. Es un sitio como de museo casi, precioso. Y dentro de ese sitio grande tiene también una cafetería, un pequeño restaurante, un café donde la gente puede tomarse sus lattes y sus capuchinos, un sitio muy lindo, muy escogido.

Y mientras estábamos ahí esperando que nos sirvieran yo miraba alrededor y veía toda esa gente de clase media y media alta, porque esa área de New Hampshire es así, es uno de los sitios más prósperos de toda la nación. Yo le decía a John, mirando esta gente ahí sentados tan contentos, tan sofisticados, en ese ambiente tan sofisticado, decía guau, venir a esta gente y decirle, ¿sabes qué? Cristo quiere sacarte de tu vida miserable. Él quiere calmar tu infelicidad, se reirían de nosotros. Porque esa gente está muy contenta, tienen dinero, tienen casas lujosas, tienen sitios como este para comer lo que les da la gana, leen periódicos muy sofisticados, tienen acceso a toda la cultura del mundo. Venir a decirles a ellos, el Señor quiere rescatarte de tu vida pobre y triste, no les hace sentido a ellos.

Tenemos que ofrecerle un Evangelio que hable a lo que ellos necesitan. Porque hay necesidades en ellos, y nosotros tenemos que entonces presentarles el Evangelio de una manera contextualizada, como hizo Pablo, por ejemplo, en el areópago en Grecia. Les habló acerca de su apetito de conocimiento, de intelecto, de cultura y enmarcó el Evangelio en una forma que ellos pudieran entender, y aún lo rechazaron así, pero hubo cierto tipo de cosecha al final.

Pero nosotros tenemos que ser una iglesia que llene necesidades como Cristo llenó ciertas necesidades. Yo diría que algunas de las necesidades de la cultura de este siglo XXI que está alrededor de nosotros, Boston, una de las grandes, grandes ciudades del mundo, bueno la gente siempre necesita comunidad. La gente a pesar de todo su dinero está solitaria y necesita venir a un ambiente donde se sientan amados.

Una de las cosas que yo descubro, aún por ejemplo en el ministerio en inglés que ahora misma celebra su culto paralelo a nosotros, es que hay mucha gente de Europa, de Asia, quieren venir a donde estamos nosotros los latinos porque hay un calor que nosotros ofrecemos. Se sienten bienvenidos. Se sienten que están entre gente que tiene cierto grado de sanidad emocional, porque a veces el dinero y la cultura te da ciertas cosas pero también te esteriliza muchas veces y esta gente necesita calor humano, necesitan una sonrisa, necesitan estar con gente que tenga salud emocional, que se rían, que no tengan todas las pretensiones que tiene la gente sofisticada y muy estudiada.

Y nosotros podemos ofrecerles ese cariño. Cuando la gente viene a la iglesia salúdeles. Si usted no conoce a la persona, extienda su mano hacia ellos, cuando entren por la puerta, quien quiera que sea, si usted no le conoce, preséntese, quizás es miembro de la iglesia pero usted no lo conoce, ni él o ella a usted. Preséntese, salúdele, extiéndale la mano, en vez de salir apurado que vamos de acá de una vez para la casa, o ir a saludar a la gente que conocemos, tenga ese sentido ministerial de extenderse hacia a alguien y busque a alguien, dígale, mi nombre es… no tiene que darle un discurso, simplemente, hey, ¿cómo está? Mi nombre es tal y tal, Dios le bendiga, qué bueno que estamos acá ¿verdad? Y quien sabe si se puede entablar una amistad muy bonita.

Así que la gente necesita comunidad. Todo el dinero que tengan y la vida allá afuera la gente está solitaria. Una persona con mucho dinero no encuentra a veces sinceridad, no encuentra calor humano muchas veces y usted se va a sorprender de lo que puede hacer una sonrisa y un gesto de generosidad.

La gente también necesita un sentido de realización personal, se sienten inseguros acerca de sí mismos. A pesar de que tienen el título universitario o académico, a pesar de que tiene la posición en la corporación, todavía hay áreas en que se sienten inferiores, se sienten que no han llegado, se sienten que les falta algo todavía. Y por eso es que tratan de llenarlo con cosas materiales y con títulos y logros y posiciones, pero eso no llena la necesidad que hay en su alma de sentirse como conectados a algo que está más allá de ellos.

Y una iglesia tiene que ser un lugar que conecte a la gente con Dios, los conecte con un sentido de mayor propósito, de que hay algo más. Y por eso es que cuando nuestra gente viene a la iglesia y cuando la gente de afuera viene, necesitan un ambiente donde la vitalidad del Reino de Dios sea manifiesta, donde la adoración sea sentida, intensa.

Yo les insto, hermanos, a meterse en la alabanza y la adoración, a crear un ambiente, a suscitar un ambiente de alabanza. No vengamos como gente pasiva, a que nos manipulen como marionetas, no, usted venga bien orado, bien preparado para adorar al Señor y para suscitar un ambiente de alabanza. Usted es parte del milagro de la adoración, usted es parte del milagro de hacer vivía la presencia de Dios en medio del ambiente, así que yo sé que sobre todo para el servicio de las 9, es temprano en la mañana y como que la mañana invita a una quietud y a una suavidad, y por eso es que tenemos que ser doblemente insistentes en adorar al Señor con vitalidad para que la gente venga y sienta esa presencia de Dios en el espíritu.

Hay que ir más allá y a veces nos sorprendemos cuando hacemos un poquito de esfuerzo se calientan los motores y sentimos más fuertemente la presencia de Dios. Porque hay una parte que nosotros tenemos que hacer en nuestra vida y que la gente venga y sienta esa presencia de Dios. La gente necesita enseñanza práctica acerca de las relaciones humanas, el trabajo, la familia, tienen problemas interrelacionales y la iglesia tiene que ser un lugar que provea consejo, que provea enseñanza, que provea una predicación práctica, que los ayude a entender cómo relacionarse con los demás y cómo relacionarse también con su familia, esposos y esposas. Por eso, por ejemplo, estos talleres de matrimonio, son tan importantes.

Yo le pedí al Señor hace meses, muchos meses atrás, Señor, ayúdanos a ser una iglesia que le ministre más a la familia, a la juventud, a los matrimonios, esposas y esposos, padres e hijos, y hemos hecho esfuerzos y hemos visto gracias al Señor, que hay cosas, pero desgraciadamente muchos de nosotros a veces que necesitamos esa enseñanza no venimos.

¿Sabe quiénes vienen muchas veces a los talleres de matrimonios? Los que no necesitan, porque tienen familias y matrimonios sólidos. Digo no necesitan, todos necesitamos, pero muchas veces los que vienen a estos talleres son las personas que tienen ya matrimonios que están funcionando muy bien. Por eso tienen buenos matrimonios, porque le dedican tiempo a ello.

Muchas veces las parejas que necesitan fortalecerse no vienen. Y esto no es un regaño, o sí, quizás sea un regaño. Pero les animo a participar de estos recursos porque la iglesia quiere ser una iglesia que supla necesidades y esa es una de las áreas que más necesita el siglo XXI, familias y matrimonios saludables.

Entonces, hay muchas otras cosas que diría. No quiero perderme en ese punto solamente, pero es importante que nosotros, la iglesia de Cristo, como Jesús provea para las necesidades del hombre, de la humanidad. Y si una iglesia, si un cristiano, si un creyente es un indicio de la presencia de Dios en el mundo, va a ser contagioso y la gente va a venir a donde él, a donde ella, o va a venir a la iglesia porque está supliendo necesidades.

Y el Señor de momento se encuentra que hay una multitud que lo está persiguiendo, quiere escucharlo, se pegan contra él y él está rodeado de la gente y no puede hablar, no puede predicar porque se requiere distancia entre el predicador y la gente a quien le va a predicar. Entonces él mira alrededor, uh, una barca sola, vacía. Hay unos pescadores cerca de ella que están limpiando sus redes, lavando las redes para que la sal no se las carcoma y están preparándolas para la próxima pesca.

El Señor decide resolver su dilema pidiéndole al dueño de la barca, Pedro, y va donde él y le dice, “Mira, ¿me quieres prestar tu barca porque necesito predicarle a esta multitud?” “Claro que sí, no la estoy usando, adelante.” Y el Señor me imagino que llamó a un par de personas, cogen la barca, la retiran de la orilla y la ponen más o menos cerca de la orilla pero ya en el agua. El Señor se sube sobre la barca y la multitud está un poquito más alejada y entonces el Señor, teniendo una plataforma adecuada puede predicarle a la multitud el mensaje con más detenimiento.

Y es interesante que Pedro, veremos más adelante, ha estado toda la noche tratando de pescar y no ha cogido ni un solo pez. Pedro en un sentido es ahora una imagen hasta cierto punto de derrota financiera. Tiene problemas financieros porque si usted no pesca va a tener problemas, pero eso es para más adelante. Hay un drama también paralelo que se está desarrollando allí.

Pero ahora Pedro puede ser útil prestándole su barca al Señor. Y aquí yo veo un simbolismo muy interesante y es que nuestras vidas, como dije al inicio, nuestras vidas son como la barca de Pedro. El Señor necesita su palabra proclamada a una multitud necesitada que urge de la palabra del Señor y nosotros, como Pedro, como la barca de Pedro, somos la respuesta a la necesidad del Señor.

Ahora Jesucristo hubiera podido buscar otra solución a su dilema, como Dios que él era y como un ser totalmente milagroso. Vemos a Jesús haciendo milagros tremendamente creativos en otro momento, calmando una tormenta, haciendo que aparezcan monedas en un pez. Para él no hubiera sido ningún problema magnificar su voz. ¿Usted cree que él no podía hacer eso? claro que sí, magnificar su voz y que toda la gente le escuchara. No hubiera necesitado de la barca de Pedro.

Pero Dios en sus esfuerzos por la redención del mundo Dios siempre trabaja en asociación con el hombre, siempre. Dios no trabaja unilateralmente, a él le gusta trabajar en comunidad y nos ha escogido a nosotros para que seamos parte del milagro de la evangelización del mundo.

Eso es un misterio para mí porque Dios podría coger un arcángel poderoso, fuerte, no le da problemas al Señor, no necesita comida, no tiene mujer que sostener, no tiene un hogar, hijos que le causan problemas, no tiene que dormir, puede viajar con alas muy poderosas de un país a otro y predicar el Evangelio, no necesita mantenimiento, no hay peligro de que cometa errores. Él podría usar ángeles pero no, él ha querido usarnos a nosotros, su creación. Y nosotros somos parte del milagro de la evangelización.

El plan evangelístico de Dios es usar a hombres y mujeres como nosotros para proclamar su Evangelio. No tiene ningún otro plan. Aunque es un plan un poquito difícil, pero le trae gran satisfacción al Señor y si nosotros no predicamos el Evangelio no hay quién lo predique.

La palabra dice, cómo escucharan el Evangelio si no hay quién les predique. Qué misterio tan grande es ese. Entonces, el Señor dice, “Pedro, préstame tu barca,” y Pedro accede a la petición de Jesús y desde ese momento se inicia un proceso que llevará a un cambio radical, dramático en su propia vida también. A veces los cambios pequeños, las decisiones pequeñas que nosotros hacemos son tremendamente significativos y cambian nuestro destino.

Pedro dice, no estoy usando mi barca, claro que sí, Señor, adelante, úsala. Esa decisión que él hizo cambia su vida radicalmente. Y así con nosotros también. Asistir a la iglesia, aparte del domingo, un día usted decide, voy a dejar de venir a la iglesia solamente el domingo, voy a ir un miércoles en la noche y quizás Dios le encuentre en un servicio de oración humilde, sencillo, usted vea otra dimensión del plan de Dios para su vida.

Registrarse para una clase de discipulado puede cambiar su vida. Cuántos de nuestros hermanos han sido impactados grandemente por su estudio en las clases de discipulado. Invitar a alguien a nuestra casa a una cena para hablarle del Evangelio. Acercarse a ese vecino que usted todos los días ve y que baja la cabeza. Ambos bajan la cabeza para no mirarse cuando se van para el trabajo por la mañana. Acérquese un día, preséntese y quién sabe lo que Dios puede hacer a través de ese encuentro pequeño.

Hacer una lista de oración para orar por 5 personas, meterla ahí en su Biblia y cuando usted está en el autobús o en el tren sacarla y 5 minutos orar por cada uno de esas personas para que conozcan al Señor, para que Dios cambie sus vidas. Apuntarse para servir en algún ministerio de la iglesia. Venir al taller de parejas. Son cosas sencillas pero esas son las cosas que llevan a una vitalidad espiritual que le permite entonces ser útil al Señor.

Y cuando usted comienza y es fiel en lo poco en lo mucho entonces Dios le pondrá. Amén. Tenemos que salir de la rutina, de ser domingueros, perdóneme si eso le ofende un poco, pero la vida cristiana es mucho más que venir a la iglesia los domingos. Hemos retenido esa tradición católica de ir a la misa, pero la vida cristiana es mucho más que eso. El domingo es simplemente como la culminación de una vida de toda la semana vivida ante la presencia del Señor. Y no es sustituto para una vitalidad, para una entrega, la vida de un verdadero discípulo, consagrado, sirviendo al Señor militantemente, entregando todo lo que tiene, todo lo que es para el servicio al Señor.

Es allí donde se dan los encuentros con el Señor. Es en esos momentos donde Dios te habla y cambia tu vida y te provee también para tus necesidades. Pedro hace un gesto pequeño, accede a que Cristo use su barca y eso cambia su vida totalmente. Y entonces el Señor puede montarse sobre la barca de Pedro, cumplir su propósito predicándole a la multitud y aquí yo creo que verdaderamente se inicia el verdadero drama de este texto, de Lucas 5 1 al 11.

Porque a mí siempre me encantan esos momentos de encuentro dramático entre el drama de un hombre y Jesucristo. Y aquí está este caso, porque ahora Pedro es invitado por Jesús a tomar la barca y bogar mar adentro. Dice aquí que cuando él terminó de hablar, “le dijo a Simón, “Boga mar adentro y echad vuestras redes para pescar.”

Guau, parece que el Señor tenía otra agenda secreta y ahora esa agenda va a comenzar a desarrollarse. Y aquí yo veo otro simbolismo bien importante. Primero señalamos la barca en su simbolismo de nosotros, nuestras vidas que pueden ser usadas como plataforma para la proclamación del Evangelio. Pero aquí yo veo un simbolismo rico que a mí me abrió mucho acerca de este texto, y es que este texto nos habla de 3 posiciones diferentes que ocupa la barca a través de esta narrativa.

Y así puede ser también nuestras vidas, nuestros niveles de acercamiento al Señor. 3 diferentes niveles de acercamiento al Señor, y también 3 niveles de utilidad y de compenetración con el espíritu de Dios. Porque esta barca, primero cuando la vemos retratada en Lucas 5, está cerca de la orilla dice el versículo 2, “vio dos barcas que estaban cerca de la orilla del lago.”

La primera posición es cerca de la orilla. La segunda posición de la barca es apartada de tierra un poco, versículo 3, “le rogó que la apartase de tierra un poco.” Esta barca pasa de estar a la orilla, pasa a estar apartada de la tierra un poco. Y finalmente vemos que la barca es llevada mar adentro, “boga mar adentro.”

Esta barca va como a través de diferentes niveles posicionales, pero yo creo que así también nuestra vida es igual. Y también así como esa barca sirve en 3 maneras diferentes y tiene como 3 niveles de utilidad, también nosotros en la medida en que vamos a través de las 3 posiciones también nuestra vida adquiere diferentes niveles de utilidad y de riqueza espiritual.

Porque se trata de 3 posiciones con respecto al mundo. Para mí la orilla es el mundo. Ustedes recuerdan la historia de la semilla que cae en 3 ó 4 diferentes lugares. Una dice que cae junto al camino y en el camino la gente la pisotea y queda infructuosa. El camino, la orilla, es el lugar donde estar el ir y venir de la vida, es el mercadeo, es el afán humano, es el lugar donde están las multitudes, donde la gente va y viene y trafica y todas estas cosas. Y esa barca se encuentra allí cerca de la orilla cuando la vemos.

Y muchos cristianos son como la barca de Pedro que está cerca de la orilla. Su mente todavía está en las cosas del mundo. Sí, han hecho un gesto de acercamiento al Señor pero todavía están en la orilla, tienen interés en las cosas espirituales, es cierto, visitan la iglesia de vez en cuando, evitan los pecados más gruesos, más escandalosos, pero no se han entregado al Señor completamente, no son discípulos todavía, no son verdaderamente seguidores de Jesucristo. Son gente religiosa, más o menos, y a veces ni siquiera eso. son quizás como Nicodemo. Nicodemo sabía que Jesús era un hombre importante, religiosamente hablando y viene a donde Jesús de noche para que no lo vean. Cuántos de nosotros así somos, ¿verdad? No cargamos nuestra Biblia porque no queremos que nos identifiquen como religiosos, evangélicos. Eso no quiere decir nada, quizás su Biblia la tiene en un Ipod o en un Iphone o lo que sea. Pero la verdad es que muchas veces nosotros tenemos hasta vergüenza de que en nuestro vecindario nos identifiquen como uno de esos pentecostales rajatablas que van con la Biblia en el brazo.

Muchas de estas personas todavía no han tenido ese encuentro. Nicodemo era así. Vino de noche, Señor, sabemos que tu eres un hombre de Dios porque haces esto y lo otro. Y el Señor lo paró y dijo, Nicodemo, no me vengas con esas cosas. Si tu no naces de nuevo no puedes ver el Reino de Dios. El Señor era directo, identificó de qué pie cojeaba. Es como el joven rico, ¿qué debo hacer para tener la vida eterna? Bueno, entrega tus bienes a mí, sígueme. No puedo, Señor, estoy demasiado apegado a mi dinero.

Hay gente que está cerca de la orilla. En León de Judá puedo decir que hay unos cuantos, me perdonarían si soy así directo, pero los hay. Debes tu preguntarte, ¿Dónde estoy yo con respeto a estas posiciones espirituales? Y Dios nos recibe allí pero él quiere que vayamos más hondo, que vayamos más a fondo. Dios no nos puede usar. La barca está allí vacía, infructuosa, simplemente inerte. Y cuando un cristiano no se ha consagrado al Señor, no ha entregado su vida al Señor, no ha habido ese quebrarse de la vara de la voluntad bajo el dominio de Cristo, ese cristiano tarde o temprano va a estar vacío como la barca, va a estar inútil como la barca, no va a experimentar las revelaciones más profundas del Evangelio, no va a experimentar el gozo del Señor como Dios lo quiere. Va a tener cierto grado de beneficio porque el Evangelio tiene beneficios.

Cuando tu pones el dedo sobre el Evangelio se transmite energía y vida, pero qué bueno sería si metes toda la mano para que traspase todo tu ser, sería mucho más poderosa esa experiencia.

La segunda posición de la barca es cuando se aparta de tierra un poco. El Señor le dice, sácame la barca un poquito para yo poder anunciar la palabra a la multitud. Muchos creyentes pasan a veces de ser seguidores casuales, como los que acabo de describir, permitiéndose escapadas a la carne de vez en cuando, una vacacioncita después de toda la santidad es tan difícil que de vez en cuando hay que sacar un día libre. Manteniendo su tiempo y sus finanzas y sus placeres separados de su fe hasta cierto punto, evitando todo lo posible ser cristianos radicalmente comprometidos, vienen a la iglesia, dan su ofrenda, alaban, leen la Biblia de vez en cuando, se identifican hasta cierto punto como evangélicos, pero todavía no han tenido esa entrega radical. No viven esa posición desesperada, clamando al Señor, Señor, quiero más de ti. Quiero conocerte.

Hay una posición donde Dios nos llama a muchos de nosotros y ya hemos entrado a cierto nivel en la vida de la iglesia. Y yo quiero animarles a ir más allá de esa posición, quizás usted hace ciertas cosas, quizás es miembro del grupo de ujieres o ayuda en I wanna u otras cosas. Usted ha entrado a cierta posición, pero yo creo que hay una posición todavía más poderosa de la vida cristiana y yo soy un poco místico en ese sentido, en el sentido bueno de la palabra, porque Dios quiere algo más de nosotros y hasta que no llegamos a la tercera posición vamos a estar a medias en la vida espiritual. Dios quiere algo más profundo que simplemente venir a la iglesia todos los domingos y aún a veces algunos miércoles.

Yo veo mucho cristiano que le da al Señor lo externo y le da al Señor las cosas más grandes, más feas y más notorias de la vida cristiana, pero no le dan su interioridad. Yo veo cristianos que los he conocido durante tantos años y son, hasta cierto punto su carácter no ha cambiado mucho, tienen los mismos defectos personales, uno predica a veces sermones que uno dice, guau, finalmente la flecha se metió en el corazón, y al otro día usted lo ve haciendo exactamente lo que han estado haciendo todos los días de su vida.

¿Por qué? Porque han cerrado ciertas partes de su ser a la penetración de la palabra del Señor. Sabe que para mí la frontera más fuerte del Evangelio es cuando usted le da su interioridad al Señor, su carácter, su temperamento, sus defectos, sus relaciones humanas, su forma de hablar, su forma de tratar a los demás, su orgullo. Hay gente que Dios tiene que convertirles la lengua, tiene que convertirles el bolsillo, tiene que convertirles su cerebro, tiene que convertirles su pasado, sus recuerdos del pasado. No han permitido que el Señor entre en esas áreas de su vida y vienen a la iglesia a hacer muchas cosas pero no le han entregado al Señor su interioridad, esa segunda etapa de la barca, cuando hay un nivel de consagración que nos separamos.

Mejor dicho, es el segundo nivel en el sentido de externo. Pero el tercer nivel, no quiero confundir las imágenes. Primero, casualidad más bien en el Evangelio; segundo, una entrega mediana y Dios hace ciertas cosas a través de nuestra vida. Pero a mí la que más me interesa de todos es la tercera posición. El Señor le dice a Pedro, “ahora boga en mar adentro. Lleven la barca bien afuera.” Es cuando la barca está totalmente separada de la orilla, hasta el punto de que casi no se puede ver la orilla.

Esa es la posición que yo llamaría la posición de la consagración del yo, la entrega total a Dios. Es ahí en esa posición radical donde Dios puede obrar en nosotros y a través de nosotros, y hacernos verdaderos ganadores de almas, efectivos. Es allí donde Dios comienza a contestar nuestras oraciones dramáticamente, donde vemos los milagros de Dios, donde comenzamos a vivir una vida sobrenatural, donde le conocemos a él profundamente y él a nosotros.

Yo hablaba con un hombre muy exitoso esta semana en unas reuniones que tuve y me sorprendí de su profundidad espiritual. Estábamos sentados almorzando en unas reuniones – ustedes pensarán, el pastor se pasa la vida almorzando todo el tiempo. Estábamos en una junta directiva y este señor, un inversionista muy exitoso, me sorprendió con su profundidad espiritual. Yo lo he visto, lo conozco ya varios años porque siempre que vamos a las mismas reuniones ahí nos vemos, pero nunca había tenido ocasión de hablar. Y descubrí un hombre muy profundo, muy conocido en las cosas del Evangelio, los misterios del Evangelio, muy consagrado al Señor.

Y él me hablaba de conocer a Cristo y de ser conocido por él. Y él me hablaba de que él quiere ser conocido por Dios. Él dice que cuando Dios nos conoce, y es cierto, la Biblia habla de eso de ser conocido por Dios y de conocer a Dios. Conocer es algo activo, no solamente algo pasivo. La Biblia dice que Adán conoció a Eva. En el Antiguo Testamento conocer quiere decir tener intimidad física.

Y yo creo que esa es la idea de conocer a Dios y ser conocido por él. Esa es el bogar mar adentro. Pablo dice, quiero conocerle, hablando de Jesucristo. Y quiero conocerle en su poder y en sus padecimientos. Moisés le dijo al Señor, muéstrame tu rostro. Si tu me amas, si quieres verdaderamente usarme, quiero verte, quiero conocerte. Ese es el lugar donde verdaderamente Dios quiere que lleguemos. Es allí donde tenemos encuentros con Dios, donde él se abre a nosotros, nos enseña quién él es verdaderamente.

Mar adentro Pedro conoce quién es Jesús. La multitud escuchó solamente una dimensión de Jesús pero en mar adentro Pedro conoció la deidad de Jesús, tanto así que se llenó de temor. Cuando vio esa pesca milagrosa, todos esos peces y entendió, este ser con quien yo estoy aquí en tanta intimidad y cercanía en esta barca acaba de mandar cientos y cientos de peces que acudieran de todas partes y que se metieran en nuestra red. La peor de las situaciones, durante el día cuando los peces están asustados y hay ruido y no quieren estar cerca y se van bien lejos, Cristo hace este tremendo milagro. Y Pedro se llena de temor, como se llenó Isaías cuando vio la divinidad de Dios, como los profetas cuando vieron a Dios muy cerca, sentían que iban a morir porque vieron la deidad de Dios.

Pedro se llena de temor y dice, “Apártate de mí, Señor, porque soy hombre pecador.” Mar adentro Cristo le revela su divinidad, le revela su verdadera identidad a Pedro. Es mar adentro donde tu conoces al Señor, es en oración, buscando de Dios, entregando tu vida, clamando a él, deseándolo de una manera desesperada, es allí donde Dios quiere mostrarte lo que él quiere para tu vida.

Hasta que no tenemos mucha hambre Dios no nos da mucha comida. La Biblia dice, buscad primeramente el Reino de Dios y su justicia y las demás cosas vendrán por añadidura. Pedro le cede su barca a Jesús y el Señor le dice, “Ahora te voy a mostrar algo que tu no has visto jamás.”

Cuando servimos a Dios primero y le damos todo lo que tenemos y somos para sus propósitos entonces él nos da cosas que ni siquiera esperábamos. Una de las cosas que Cristo le da a Pedro es que le suple sus necesidades físicas, materiales. Pedro está en la orilla lavando redes que no han pescado ni un solo pez y ahora el Señor le dice, “Boga mar adentro, echa tu red para pescar.”

Tu sabes, cuando tu sirves a Dios y dejas que Dios use tu vida primeramente sabes que el Señor vela por toda tus demás necesidades. Yo no tengo temor de decirle a la gente, sirve a Dios, sirve a Dios radicalmente en tu vida y el Señor siempre te bendecirá. Esto no es prosperidad barata. Esto es gente que sabe. Yo le puedo decir que yo hablo porque he experimentado la generosidad de Dios en la vida.

Cuando tu sirves a Dios, Dios te bendice, bendice a tus hijos, bendice a tus finanzas, bendice tu matrimonio, bendice tu familia, bendice tus emociones, pero tienes que amarlo desesperadamente y darle la mejor parte a él. Muchos de nosotros le damos al Señor el ala para quedarnos nosotros con la pechuga. Tiene que ser de la otra manera, dale la pechuga y él te va a dar el pollo entero.

Esa es la clave de una vida bendecida. Yo les digo sin temor a equivocarme, dejen que Dios les use primeramente, denle y dense al Señor y ustedes verán que su vida…, Dios va a velar por los suyos, Dios va a defender sus intereses, Dios va a multiplicar sus panes y sus peces, pero tienes que comenzar así.

Pedro le dio a Jesús su barca y el Señor le dijo, “Ahora, Pedro, te voy a enseñar algo, ven, vamos mar adentro.” Y Pedro, que no pudo pescar un solo pez en la noche en condiciones óptimas, ahora pesca una gran multitud de peces, porque atendió primero a las necesidades del Señor.

Cuando ustedes me escuchan aquí animándolos, denle al Señor para que su iglesia tenga lo que necesita para su trabajo misioneros, los pastores no deberíamos tener que estarle rogando a la gente, inventándonos cada domingo una forma nueva y creativa de que den, eso debe ser la ética del creyente, del hijos de Dios, deseo de darle al Señor. Usted no necesita que le rueguen ni que le convenzan, dele al Señor generosamente y olvídese de todo lo demás y usted verá que Dios se encargará de sus necesidades. Tan sencillo como eso.

Otra cosa que yo veo mar adentro es que la fe de Pedro es probada. El Señor le pide que pesque en condiciones menos que ventajosas y esto requería fe de parte de Pedro. Hoy en día, la posibilidad de una pesca milagrosa de almas parecería imposible. El mundo está tan indiferente a las cosas del espíritu. Yo pienso en esta jornada que estamos emprendiendo al evangelismo y a traer vidas a Cristo y de hacer de nuestra iglesia una iglesia con una orientación primordialmente evangelística, en esta ciudad tan cerrada, tan sofisticada, tan siglo XXI, como es Boston, y pienso en tanta gente, no solamente los latinos. Los latinos somos hasta cierto punto fáciles de evangelizar, aunque también tenemos nuestra propias complejidades, pero pienso también en otras personas, otras nacionalidades, otros grupos. Porque Dios ha puesto a León de Judá para pescar en muchas aguas diferentes.

Pero cuando usted contempla la gente hoy en día parecen muy difíciles de pescar, y el Señor nos dice, no, echa la red para pescar. Pedro dice, “pero Señor, si hemos tratado toda la noche y no hemos cogido ni un solo pez.” Gracias a Dios que él tuvo la sagacidad de decir, “Pero en tu palabra yo echaré la red.”

Nosotros tenemos que echar la red la palabra de Dios. Es su responsabilidad no es nuestra. Echa tu red en el en el nombre de Jesús, echemos las redes en el en el nombre de Jesús. Si estamos en la voluntad de Dios él se encargará de darnos la tecnología y de darnos la estrategia y los medios. Yo sé que Dios va a bendecirnos con una gran pesca milagrosa porque lo vamos a hacer en el poder sobrenatural de Dios.

Cuando el poder de Dios está en nuestras vidas ningún obstáculo puede frenarnos o empobrecernos. Dios siempre proveerá su poder para sacarnos victoriosos. Lo importante es tenerlo a nuestro lado y ponerlo a él en el primer lugar y obedecerlo en todo. La obediencia a la palabra de Dios siempre trae recompensa y victoria.

Yo veo mucha gente cambiando la metodología y queriendo irse a formas que no escandalicen a la gente, opacan el Evangelio, le quitan sus demandas radicales. Tratan de hacer el Evangelio tipo vainilla, básico, quitan el nombre que puede inquietar a la gente, omiten todos los temas que puedan resultar desagradables y escandalosos, y tratan de buscar un Evangelio término medio para que la gente… abren un poco más la puerta para que la gente pueda entrar.

Pero a la misma vez empobrecen el Evangelio porque la cosecha de almas, la pesca milagrosa no se da nosotros mejorando los medios del Evangelio, sino buscando el poder de Dios. Y por más escandaloso que sea, por más contra intuitivo que sea, si lo estamos haciendo en el espíritu de Dios y en la palabra de Dios, tendremos resultados positivos en nuestra vida. Llenémonos del poder de Dios, busquemos vidas más entregadas al Señor.

Estos tiempos de oración que hemos tenido los viernes… De paso este viernes no vamos a tenerlo por diferentes razones, pero el otro viernes sí vamos a tener tiempo de oración, como lo hemos tenido. Dios ha bendecido grandemente esos tiempos, hemos tenido una asistencia maravillosa, unas visitaciones del poder de Dios espectaculares, muy bellos tiempos de oración.

¿Por qué estamos haciendo eso? porque queremos el poder de Dios, queremos una iglesia bien cerca al Señor y a su palabra, queremos llenarnos del Espíritu Santo, queremos que esa vitalidad cunda en todas las áreas de nuestra vida congregacional, porque si estamos llenos del poder de Dios, si estamos mar adentro, si tenemos un entendimiento de la deidad de Cristo y de su poder, no hay obstáculo que no podamos vencer.

Por qué no bogar mar adentro en tu vida, en mí vida. Eso es lo que Cristo quiere que nosotros hagamos, que tengamos una visión de él como Señor, como salvador, como Dios. Eso es lo que tenemos que hacer en nuestra vida espiritual. Dios te está llamando a un encuentro con él.

Y yo quiero llamarles a todos ustedes y a mí mismo a buscar una consagración mayor en nuestras vidas. Tómese un momento en su espíritu y ingiera este mensaje y reciba este llamado del Señor en su vida. Si hay alguien que siente de Dios buscar más hondo, buscar más profundo en esa vida espiritual, en ese acercamiento al Señor, yo le invito ahora a entregarse completamente al Señor, consagrarse a él. Adopte una vida más radical para con Cristo. Pídale al Señor que lo inquiete a buscar más hondo en la vida cristiana. Comprométase a leer más de la palabra, una vida de oración más profunda.

Pídale al Señor que esas áreas de su vida que le impiden ser todo lo que Dios quiere para usted, sean quitadas. Saque tiempos de ayuno, santifíquese más, clame más al Señor. Santiago dice que doblemos las rodillas, que lloremos delante de Dios, que le pidamos al Señor que nos fecunde. Entrega tu vida al Señor. Consagra tus recursos al Señor cada día más y más. Eso es lo que Dios quiere para tu vida.

Si hay alguien en este día que quiera entregar su vida al Señor Jesucristo inclusive también abrimos ese espacio. Puede levantar su mano, pasar aquí al frente. Queremos orar por usted también, es una manera que usted puede ir, salir de la orilla y entrar más hondo, apartarse de la tierra un poco, comenzar esa jornada con el Señor. Si no lo ha hecho, le invito a hacerlo en esta mañana, levantar su mano, si no quiere pasar al frente, yo puedo orar desde donde usted está también, pero no se quede pasivo. Participe con el propósito de Dios en su vida también.

Y como congregación le pido, hermanos vamos a entregarnos más. Dios quiere una congregación radicalmente comprometida con el Reino de Dios. Invito a todos nuestros hermanos a buscar más hondo el propósito de Dios en su vida. Padre, en el en el nombre de Jesús te pedimos, Señor, éntranos más hondo en la vida espiritual. Éntranos más hondo, Señor, en la vida del espíritu. Queremos más de ti, Señor. Queremos que tu gloria, Padre, llena esta congregación. Y te pedimos, úsanos, sácanos de la orilla, Padre, éntranos mar adentro donde podamos tener una visión de lo que tu tienes para nosotros, que pasemos a ser verdaderos pescadores de hombres, Padre. Queremos más de ti, Señor, te necesitamos.

Gracias por este día. Entregamos este servicio a ti con acción de gracias en el en el nombre de Jesús. Amén.

Cuando lo pierdas todo, lo ganas todo

TRANSCRIPT

Quiero invitarles a ir al Libro de Génesis capítulo 2 y este sermón lo voy a titular: “Cuando lo pierdes todo lo ganas todo”, cuando lo pierdes todo lo ganas todo. Recuerda las palabras de Jesucristo que dijo que el que pierda su vida la ganara y ese es un principio que está por toda la Escritura, cuando usted le entrega todo al Señor y lo pierde todo el Señor entonces se lo devuelve con creces.

Y esta es la conocida historia de Abraham y ese momento en su vida en que Dios le pide que entregue a su hijo Isaac y que se lo sacrifique, y encierra unas lecciones muy especiales para este día de las madres, lo escogí aunque presenta un hombre, un padre, pero el espíritu que contiene este mensaje es absolutamente propicio para meditar en la paternidad y en la maternidad del Espíritu maternal-paternal de Dios, y el espíritu al cual nosotros somos llamados por la Palabra con respecto a nuestros hijos, a nuestra maternidad, a nuestra paternidad. Este texto tiene lecciones para padres y para madres también pero lo dedico y su origen inicial es precisamente el día de las madres así que esa es mi inspiración de parte del Señor.

Dice el capítulo 22 de Génesis comenzando en el versículo 1: “Aconteció después de estas cosas que probó Dios a Abraham” una prueba, lo examinó, examinó lo que había dentro de su corazón, ¿cuántos saben que las acciones revelan lo que está en el corazón verdad? probó Dios su corazón y le dijo: Abraham, y él respondió: heme aquí.

Yo creo que todo creyente debe firmar un papel en blanco al final y ese papel lo que expresa es: heme aquí lo que Tú quieras de mi vida Señor, lo que Tú quieras escribir en la página de mi vida heme aquí, estoy dispuesto, estoy disponible, cuando hay esa disposición de parte de la mujer, del hombre entonces Dios puede hacer y escribir en el texto de nuestra vida cosas maravillosas.

Abraham le dijo: heme aquí, él no sabía lo que Dios le iba a pedir pero Dios le dijo: “Toma ahora tu hijo, tu único, Isaac a quien amas, y vete a tierra de Moria, y ofrécelo allí en holocausto sobre uno de los montes que Yo te diré.”

“Y Abraham se levantó muy de mañana, y enalbardó su asno” quiere decir lo preparó, lo ciñó, y tomó consigo dos siervos suyos, y a Isaac su hijo, y corto leña para el holocausto, y se levantó, y fue al lugar que Dios le dijo.”

“Al tercer día alzó Abraham sus ojos y vió el lugar de lejos, entonces dijo Abraham a sus siervos: esperad aquí con el asno y yo y el muchacho iremos hasta allí, y adoraremos, y volveremos a vosotros”

“Y tomó Abraham la leña del holocausto y la puso sobre Isaac su hijo, y él tomó en su mano el fuego y el cuchillo, y fueron ambos juntos, entonces habló Isaac a Abraham su padre y dijo: padre mío, y él respondió: heme aquí, mi hijo, y él dijo: he aquí el fuego y la leña mas ¿dónde está el cordero para el holocausto? Y respondió Abraham: Dios se proveerá de cordero para el holocausto hijo mío, e iban juntos.”

“Y cuando llegaron al lugar que Dios le había dicho edificó allí Abraham un altar y compuso la leña, y ató a Isaac su hijo, y lo puso en el altar sobre la leña, y extendió Abraham su mano, y tomó el cuchillo para degollar a su hijo, entonces el ángel de Jehová le dió voces desde el cielo y dijo: Abraham, Abraham, y él respondió: heme aquí, y dijo: no extiendas tu mano sobre el muchacho ni le hagas nada porque ya conozco que temes a Dios por cuanto no rehusaste tu hijo, tu único”

“Entonces alzó Abraham sus ojos y miró, y he aquí a sus espaldas había un carnero trabado en un zarzal por sus cuernos, y fue Abraham y tomó el carnero, y lo ofreció en holocausto en lugar de su hijo, y llamó Abraham el nombre de aquel lugar “Jehová proveerá, por tanto se dice hoy en el monte de Jehová será provisto” bendiga el Señor Su Palabra.

Como decía dedico este sermón a mis hermanas madres. Este es uno de los pasajes más hermosos de la Escritura yo diría, el nivel de fe que muestra Abraham es sin precedentes, yo no creo que haya un momento mas preñado de espiritualidad y de lecciones morales que este momento y que refleje en una manera más poderosa los valores más profundos y más misteriosos del Evangelio que este momento de sublime y total desprendimiento de algo que amamos. El nivel de desprendimiento que muestra Abraham en este pasaje es único y nos inspira a nosotros a buscas ese mismo nivel de fe en nuestra vivencia personal.

La Biblia yo diría que establece este momento como una especie de marcador en las páginas de la Escritura, es un punto clave que nos invita a cada uno de nosotros a medir nuestra fe, nuestro nivel de entrega al Señor a la luz de ese acto sin precedentes ni imitaciones futuras de Abraham para que nos midamos nosotros mismos en nuestra disposición a cumplir la Voluntad de Dios en nuestras vidas y de hacer lo que Él nos pida no importa cuán escandaloso ni sacrificial pueda parecer.

Ciertamente hay otros pasajes que nos muestran la fe y la integridad de Abraham pero ninguno yo diría como este pasaje. El escritor de Hebreos siglos después de este evento ofrece a Abraham y este evento en su vida como ejemplo principal de lo que es la fe, como un paradigma de lo que es la fe.

En Hebreos capítulo 11 versículos del 17 al 19 el escritor dice: “Por la fe Abraham” y esto es cuando él está haciendo así, un recorrido de ejemplos de fe a través de la historia, “Por la fe Abraham cuando fue probado ofreció a Isaac, y el que había recibido las promesas” es decir Dios le había prometido a Abraham un hijo años antes, “ese que había recibido las promesas ahora ofrecía a su unigénito habiéndosele dicho: en Isaac te será llamada descendencia” es decir él está aclarando, este hombre que recibe la promesa de un hijo y ahora es su único hijo legítimo, ahora, y se le ha dicho esta es tu descendencia, ahora pensando que Dios era poderoso para levantar aún de entre los muertos de donde en sentido figurado también le volvió a recibir; en otras palabras cuando Dios le dice: no mates a tu hijo es casi como una resurrección porque ya él iba a meter el cuchillo en la garganta, y cuando el ángel le dice: deténte es como que su hijo resucita de nuevo porque en la mente de Abraham.

Yo creo que Dios esperó a que Abraham mentalmente pasara por el umbral de “lo hago o no lo hago”. Cuando el ángel le dice: deténte es porque ya Abraham ha hecho la transacción mental de degollar a su hijo. Quizás hasta ese momento él estuvo: lo hago o no lo hago, lo hago o no lo hago, pero cuando Abraham pasa y dice: sí y ya su voluntad se ha ceñido el ángel le dice: deténte, y en ese momento Dios se lo devuelve, entonces es una resurrección de donde también en sentido figurado le volvió a recibir.

Es decir: el escritor de Hebreos está señalando ese momento como algo muy, muy trascendental en la historia de la fe, y en Romanos el escritor de Romanos, el Apóstol Pablo dice que Abraham es el padre de todos los creyentes. Toda persona que le cree a Dios en la tradición judeo-cristiana, toda persona de fe en un sentido es descendiente de Abraham.

Dice el versículo 11 de Romanos 4 que Abraham recibió la circuncisión como señal, como sello de la justicia de la fe que tuvo estando incircunciso, eso es largo de explicar pero, para que fuese padre de todos los creyentes no circuncidados, esos somos nosotros los gentiles, para que también a ellos la fe les sea contada por justicia. Ese pueblo gentil del cual somos nosotros que no tenemos descendencia hebrea también estamos en esa tradición espiritual de que lo que le creemos a Dios nos es contado por justificación, creer en Cristo por ejemplo es nuestra justicia.

Y padre de la circuncisión, Abraham no es sólo padre de los gentiles que creen sino también padre de los hebreos que le creen a Dios, por lo que no solamente son de la circuncisión sino que también siguen las pisadas de la fe que tuvo nuestro padre Abraham antes de ser circuncidado. En otras palabras ese acto y esos actos de fe de Abraham lo constituyen en padre de la fe de otros que creen.

Ahora ¿por qué es tan excepcional ese acto de fe que registra este pasaje de Génesis? vamos a mirar eso un poquito más. Como sabemos Abraham había recibido la promesa de parte de Dios de tener un hijo ¿a qué edad, cuántos saben? a los 75 años así que si usted no ha tenido un hijo todavía, su hijo hay esperanza para usted no se desespere ¿sabe? madre y padre. A los 75 años este hombre no ha tenido hijos y Dios le dice: Vas a tener un hijo, Yo te lo voy a dar, ¿y sabe qué? Dios se tardó 25 años más para concederle, al Señor le gusta que se desazonen Sus milagros bien primero.

Se tardó 25 años más para cumplir esa promesa y Abraham y Sara, su esposa tuvieron a Isaac cuando Sara tenía 100 años ya de edad, esos espermatozoides creo que iban ya con bastón a fecundar a Sara, se me salió ese perdónenme (risas), Señor ten misericordia de este cerebro. Hermanos; sáquense eso de la mente por favor, imagínense cómo se sentiría una pareja en tener un hijo anhelado a los 100 años de edad, cuando ya ese sueño de paternidad y maternidad se ha abandonado, cómo amaría uno a ese hijo.

Uno piensa en el amor de los abuelos por ejemplo que es lo que yo creo que más se acerca a esa ternura que habrán sentido, Abraham era abuelo, bisabuelo y tatarabuelo, y padre yo creo a la misma vez, ahí está una mezcla de amores, y de hecho antes de Isaac Abraham sí había tenido un hijo que era Ismael aquí para los eruditos de la Biblia pero se trataba de un hijo ilegítimo, no era el hijo de su esposa y no era el hijo que Dios le había prometido porque Él le había dicho a Sara que ella iba a ser madre, no era el hijo nacido de la unión matrimonial entre Abraham y Sara; ese hijo fue hijo de un apresuramiento de parte de Sara mas bien porque Sara le dijo a Abraham: mira este Dios te ha prometido este hijo y ya van 20 años, y no lo has tenido así que llégate a la sierva esta, y Abraham muy humildemente y obedientemente pues ¿qué le quedaba al pobre? se allegó a Agar y tuvo un hijo con ella que se llamaba Ismael ¿no? y cuántos problemas le ha causado Ismael al mundo, es el padre de los árabes, los musulmanes.

Una cosa que a Dios le gusta es tomarse tiempo para darnos lo que Él nos ha prometido, en nuestro deseo de tenerlo a veces queremos ayudar a Dios y producimos artificialmente algo que no es de Dios, tenemos que tener cuidado. Cuando Dios promete algo Él tiene Su tiempo y Él lo cumple en su momento, espéralo y llegará, no se tardará dice la Palabra del Señor.

Pero ahora en Génesis 22 tenemos que ya ese hijo tan amado, tan esperado, tan deseado que ya está como sazonado en la cúspide de su belleza, 17, 18 años, un joven apuesto seguramente y lleno de vida y de energía, la esperanza de este padre-abuelo, ya gozando del amor y la preferencia de su papá encontramos que sorprendentemente Dios le pide a Abraham que le entregue su hijo y no solamente eso sino que él mismo se lo degolle en sacrificio.

Aquí no se nos dice que Abraham protestara, no hay nada de eso, pero usted y yo nos podemos imaginar cómo habrá sido la primera noche que Abraham pasó cuando Dios le dice sacrifícame a tu hijo, que zozobra, qué nivel de agonía habrá él experimentado, qué cuestionamiento de la Voluntad y la moralidad de Dios que te da un hijo, te pone a cultivar amor para él, te pone a amarlo desesperadamente, te dice que en él te será hecha descendencia y entonces te dice: ¿sabes qué? cancela todo eso, me arrepentí, cambié de opinión, mátamelo para Mi disfrute. No se nos habla de la agonía de Abraham pero uno se la puede imaginar, Dios le pide que entregara a su hijo.

Y sabemos algo interesante y es que en ese proceso en que Dios le está pidiendo a Abraham su hijo no solamente que está probando a Abraham sino que está ensayando Su drama venidero porque miles de años después Dios va a ejecutar exactamente lo que le está pidiendo a Abraham que haga y esta vez nadie le va a decir: no, no lo hagas, esta vez Él va a tener que ejecutar y en un sentido matar a Su propio Hijo Jesucristo.

El lenguaje que Dios usa cuando le ordena a Abraham sacrificar a Isaac anticipa el propio drama divino siglos después. Usted lee en el versículo 2 que dice: “Y Dios le dijo: Abraham toma ahora tu hijo, tu único” el Hijo unigénito de Dios que se sacrificó en la cruz del calvario, “toma tu hijo a quien amas” ese hijo amado, “tómalo y vete a la tierra de Moria y ofrécelo allá en holocausto” Dios ofreció a Su Hijo Jesucristo en holocausto por nosotros, el sacrificio pascual, el cordero inmolado. Interesantemente Dios le pide a Abraham que sacrifique a Isaac en un monte y el Señor fue también crucificado en el monte Gólgota.

Otro paralelo interesante es que Isaac carga su propia leña, la leña donde lo van a matar y degollar como Cristo cargó Su propia cruz. Y otra cosa: Isaac ya un joven con bastante fuerza hubiera podido imponerse sobre su papá cuando lo iba a degollar pero Isaac se tiende sobre la leña del sacrificio y deja que lo aten, y se somete a este acto misterioso de parte de Dios que parece totalmente caprichoso y arbitrario, como el Señor.

Le dijo: Padre si está en Ti pasa de Mí esta copa pero hágase Tu Voluntad y no la Mía y el Señor se subió a la cruz por nosotros también. Él dijo: Yo podría mandar una legión de ángeles que me librara pero si Tú me dices Yo lo haré y eso es lo que tenemos que hacer cuando Dios nos pide que hagamos algo escandaloso.

A pesar de lo terrible de la orden divina Abraham obedece con toda buena disposición, se levanta bien temprano, corta la leña, se dirige al lugar donde Dios le ha indicado, lo hace todo con excelencia, lleva fuego preparado para prender esa bendita leña donde su hijo va a estar degollado, ejecutó todo con perfección. Si hubiera sido yo, yo me levanto a las 3 de la tarde, él se levantó a las 5 de la madrugada para caminar. Se levantó temprano, fue directamente al lugar del sacrificio. Nosotros tenemos que abrazar la Voluntad de Dios en nuestra vida, tenemos que bendecir la mano del que nos abofetea y en eso hay grandeza espiritual y hay gran bendición.

La buena disposición de Abraham me recuerda lo importante que es que nosotros no solamente obedezcamos a Dios a regañadientes sino que lo obedezcamos con gusto y que entremos en el drama que Dios pone delante de nosotros.

Cuando Dios te pone algo no busques excusas para justificar tu renuencia o tu tardanza en obedecerlo sino obedécelo con todo tu corazón, con toda tu fuerza y dale más de lo que él te pide inclusive, y en eso serás grandemente bendecido y honrado.

Al estar dispuesto a sacrificar a su hijo Abraham muestra un elemento esencial de la fe y es esto que voy a decir: Dios es el origen de toda cosa buena que tú tienes y yo tengo, y a Él le pertenece en última instancia todo lo que nosotros llamamos nuestro. Lo que tenemos no es nuestro es de Dios, esa es la esencia de lo que se llama en la teología mayordomía, tú eres mayordomo de lo que tienes, tú no eres dueño. Si tu trabajo te presta un carro para que tú ejecutes las asignaciones de tu trabajo cuando tú manejas ese carro flamante y nuevo tú sabes que no es tuyo, es de tu compañía y te lo han prestado para que tú lleves a cabo las labores de la compañía, y tú tienes que cuidar ese carro porque no es tuyo, tú no puedes decir: oh mira qué bello carro yo tengo, tú lo tienes que cuidar y así es con las pertenencias de nuestra vida.

Nosotros siempre estamos apoderándonos de lo que es de Dios, todo lo que tú recibes es de Dios y tienes que administrarlo de esa manera, y si Dios nos pide o nos quita algo que Él nos ha dado en algún momento tenemos que bendecirlo, besar Su Mano y entregarle gustosamente lo que Él nos pide o nos quita, esa es la esencia misma de la vida de fe ¿y sabes qué? en esa disposición hay gran seguridad para tu vida.

¿Tú sabes cuál es el mejor seguro? cuando uno compra a veces un televisor le dicen: hey ¿usted quiere comprar un seguro? y a veces le cobran más que el televisor mismo a través de los años ¿sabes?

Pero ¿sabes cuál es la manera de tú asegurar mejor tu casa, tu matrimonio, tu carro, tus hijos? Entrégaselos al Señor, fírmale una carta y di: Señor esto es Tuyo y yo te lo voy a administrar por un tiempo, voy a hacer el mejor trabajo posible pero, y voy a hacer el mejor trabajo posible pero yo sé que eso te pertenece a Ti, yo no me voy a apoderar de él, no voy a querer apoderar de él, no voy a dominarlo, no voy a tratar de hacer lo que yo quiero con ello, yo voy a ser administrador Tuyo y siempre estaré mirando para preguntarte ¿qué quieres que yo haga con esas pertenencias hoy? es Tuya y las quiero administrar bien, esa es la esencia de una fe bíblica.

Todo es de Dios incluyendo nuestro dinero, nuestra profesión, nuestros hijos, nuestros sueños, todo lo que amamos todo es de Él. Si hay algo que amemos más que a Dios esto ya se ha convertido en un ídolo y es idolatría. Todo lo que tú pones por encima de la Voluntad y la administración de Dios es idolatría, todo lo que tú tienes debes tomarlo livianamente en tu mano. Correy ten Boom una famosa creyente decía que ella había aprendido a mantener en su mano todo lo que tenía livianamente para que si Dios se lo arrancaba no le doliera.

Al inicio mismo de la formación de la fe cristiana ahí en Moria vemos que Dios está estableciendo un precedente que sirve como fundamento de nuestra fe y en este día de las madres yo he pensado mucho en Abraham a pesar de que es hombre pero es la esencia de la maternidad también y de la paternidad, él es un buen ejemplo de cómo debemos considerar y amar, y tratar a nuestros hijos.

Nuestros hijos no nos pertenecen a nosotros. Madres entiendan, tu hijo no es tuyo es de Dios, no lo poseamos, no lo controlemos, dice la Biblia que no lo llevemos a ira queriendo meterlo como meterlo en un cajón chiquitito para que no se muevan queriendo evitarles dolores y mantenerlos ahí micromanejados, suelta a tus hijos a la Voluntad del Señor.

Hijos no se aprovechen tampoco de eso porque veo a unos ahí diciendo: ¿tú ves mamá lo que te está diciendo? Es una danza entre padres e hijos, el padre, la madre suelta según el hijo va madurando, el hijo y la hija se someten a su padre, y lo honran, bendicen a su madre y Dios bendice a ese hijo, a esa hija que bendice a su madre y a su padre, y entonces es una danza maravillosa que glorifica a Dios.

Nuestros hijos no nos pertenecen y son un misterioso instrumento de Dios para que se cumpla Su Voluntad en la Tierra, y Dios te honra trayendo un instrumento suyo a la Tierra para que tú se lo prepares y se lo afiles, y lo sueltes para que permitas que avance el Reino de Dios en la Tierra.

Dios nos da a nuestros hijos para que se los cuidemos y se los formemos, y tenemos que consagrarlos a Dios desde el principio, y hacer todo lo posible para formarlos y educarlos de manera que amen a Dios por sobre todas las cosas y que lleguen a ser instrumentos útiles para Su Reino en Sus Manos.

Dios te está dando una flecha cuando te da un hijo, una hija, Dios te está dando un proyectil amoroso que tú hagas explotar para bendición de la humanidad y en vez de quizás regalarle una pistola regálale un libro, en vez de comprarle audífonos para que escuche música que lo corrompa llévalo un día a un museo para que admire obras de arte y dale buena música y pon su creatividad a funcionar, háblale de cosas nobles, tráelo a la Iglesia, invierte en él.

Si tu hijo te dice: papá, mamá quiero ir a la Iglesia un viernes en la noche a I Wanna o a la escuela dominical mira, desvístete, pierde lo que tengas que perder, róbate el bocado de la boca pero si tú puedes hacer algo para enriquecer a esa criatura para que sea útil en las Manos de Dios hazlo. Cuando tú obtengas tus hijos di: Dios me ha dado un tesoro en la mano y yo tengo que crear algo precioso para que Dios lo pueda usar.

Me recuerda a la historia de Ana cuando Dios le dió a Samuel también así en una manera milagrosa ¿qué hizo Ana? Ana no dijo: wow este hijo lo he esperado tanto tiempo, me lo voy a comer hasta el último huesito, no, ella cogió ese hijo que Dios le había dado milagrosamente y lo lleva al templo, y le dice: se lo dedico a Dios ¿usted sabe lo que es eso? Y dijo: Samuel de ahora en adelante vivirá en el templo y será un sacerdote para Dios, y Samuel llegó a ser el gran profeta Samuel, abrió la dispensación profética en el Antiguo Testamento, un hombre poderoso de Dios.

Y entonces Dios le dió más hijos a Ana interesantemente, esta mujer de quien su matriz había estado cerrada durante décadas, cuando entrega a su hijo que Dios le ha dado como un sacrificio ahora Dios le da muchos hijos más y esa es la dinámica central de la fe, cuando tú le das al Señor Dios te da más, cuando tú te desprendes de las cosas Dios te dice: ahora te voy a dar hasta que me digas: ya es suficiente no me des más. Muchos de nosotros sabemos de lo que estamos hablando.

Tus hijos son instrumentos de Dios y tienen una misión que cumplir en la Tierra, alimenta esa misión con tu fe, no veas al diablo haciendo cosas malas a través de tus hijos, ve a Dios llevándolo a través de un proceso de formación y santifica lo que están viviendo, y di: no te voy a soltar hasta que no vea la grandeza de Dios realizada en tu vida. No dejes de orar por ellos, báñalos con agua con una preciosa matita y concibe en tu mente cosas grandes que ellos van a hacer para avance y gloria del Nombre de Dios. No le sueltes a tus hijos al diablo jamás, no te des por vencido, no dejes de orar, no dejes de clamar, no dejes de regarlo con tus oraciones y tu expectativa creativa de que Dios está haciendo algo glorioso en sus vidas, y hasta que no tengas un Samuel en tus manos no se lo sueltes, clama al Señor y cree por cosas grandes, invierte en ellos porque son instrumentos.

Y cuando suceda algo que tú no esperabas, algo misterioso, cuando parezca que se ha atorado la máquina y que ya no están progresando, cuando parezca que hicieron algo que es irremediable y que ha dañado sus vidas cree que en Dios no hay abortos, Dios siempre completa lo que Él comienza y sigue peleando, y esperando, y bendice, y cree por un final glorioso, no hay muertes prematuras de los sueños divinos.

Eso me hizo recordar las palabras de Dwight L. Moody yo estoy terminando ahora una biografía del gran evangelista del siglo XIX, un hombre de Dios muy poderoso, un hombre de fe. Moody perdió dos nietos ya cuando estaba en el cenit de su vida y estuve leyendo, me conmovió esta semana una carta que él le escribió a su hijo y a su yerna cuando murió una de sus nietas para consolarlos a ellos, Irene se llamaba ella, y voy a traducir las palabras de esa carta preciosa que Moody le escribe a sus hijos para consolarlos, dice, porque él estaba en otra parte, estaba evangelizando y estaba en otra ciudad, no pudo llegar a tiempo para enterrar a su nietecita.

Él escribió un telegrama y le dijo: “he estado pensando esta mañana en el viejo profeta esperando en el valle del Jordán hace tantos años atrás por el carruaje que habría de llevarlo a su hogar” estaba pensando en Elías. “El carruaje de Dios llegó al valle de Connecticut” donde ellos vivían, “llegó ayer en la mañana a las 6 y 30 de la mañana y se llevó a nuestra pequeña Irene al hogar celestial. El primero” es decir el profeta Elías “fue tomado al final de sus días de servicio activo, la otra, Irene fue tomada en el amanecer temprano de su juventud, pero el servicio del profeta no estuvo más completo” dice Moody “que el servicio de aquélla pequeña sierva del Señor, Irene, porque Dios los llamó a ambos y Dios nunca interrumpe el servicio de uno de los suyos.”

“Irene ha terminado su carrera, su trabajo ha sido bien empleado aquí en la Tierra y ella ha logrado más de lo que muchos en sus setenta años han logrado, y nosotros no la tomaríamos de nuevo, no la querríamos que se nos regresara. Aunque su voz fue la voz más dulce que yo jamás escuché en toda la Tierra nunca se acercó a mí desde que tenía tres meses de edad sin una sonrisa aún en los tiempos de dolor de su enfermedad, pero Cristo tenía algún otro servicio ahí arriba para ella.”

“Mi vida ha sido mucho mejor por su ministerio aquí en la Tierra, ella nos ha hecho a todos nosotros mejores, yo le doy gracias a Dios en esta mañana por la esperanza de la inmortalidad, yo sé que la veré en esa gloriosa mañana futura más bella en la gloria de su resurrección que cuando estaba aquí en la Tierra.” Esa es la actitud de resignación y de entrega de alguien que sabe que nuestros hijos tienen una misión que cumplir aquí en la Tierra y nada pasa en sus vidas que tronche el propósito de Dios, siempre Dios tiene algo y lo cumple, y el tiempo es perfecto, y nosotros tenemos que entregar nuestros hijos a la Voluntad del Señor una y otra vez, darles el mejor ejemplo posible, la mejor educación para que crezcan y sean hombres y mujeres de fe que amen al Señor por sobre todas las cosas.

Cuando invertimos nuestros hijos, cuando invertimos nuestro dinero, nuestro matrimonio en el Reino de Dios, cuando lo sujetamos a la Voluntad de Dios y le decimos: Señor cúmplase Tu Voluntad en esto que Tú has puesto bajo nuestra administración, cuando nos despegamos emocionalmente de ellos y se los consagramos al Señor entonces el Señor Dios los bendice y nos da mucho más de lo que le entregamos a Él.

La seguridad mayor para nuestros hijos es un padre que ora y dice: Señor cúmplase Tu Voluntad en la vida de mi hijo. Oh yo quería un gran cantante, yo quería un ingeniero pero Tú has querido otra cosa, cúmplase Tu Voluntad, no controles, no te adueñes, súeltale tus hijos al Señor y deja que el Señor los lleve a través de Su proceso.

Tenemos que desprendernos de las cosas que más amamos hermanos hasta el punto de que parezca que los aborrecemos de tan desprendidos. ¿Usted entiende cuando Cristo dice: El que no aborrezca a su padre y a su madre? no es que tú los aborrezcas en el sentido de detestarlos, es que tú te desprendas tanto de las cosas de este mundo: hijos, dinero, tiempo, holgura, comodidad, sueños, carrera, ilusiones, que te desprendas tanto hasta el punto de que tu desprendimiento se haga tan profundo de que roce con detestar y odiar, parece que odias porque estás tan desprendido de ello, es un desprendimiento activo no es un desprendimiento pasivo cuando decimos: Señor te entrego lo que más amo.

La Biblia dice que habían grandes multitudes que seguían a Jesús pero Él se volvió y les dijo: Si alguno viene a Mí y no aborrece a su padre y a su madre, a su esposa y a sus hijos, a sus hermanos y a sus hermanas, y aún su propia vida no puede ser Mi discípulo, y el que no carga su cruz y me sigue no puede ser mi discípulo.

¿Qué separa a uno del montón de la gran multitud que sigue a Jesucristo porque le han dicho que el Señor sana y provee, y prospera, y bendice, y da carros, y da casas, y da victorias, y lo siguen por la ganancia que hay, de un verdadero discípulo? El discípulo dice: Señor lo que Tú quieras darme eso es lo que yo recibo. Tú me has dado hijos, te los entrego a Ti, te los voy a cuidar, los voy a formar, cúmplase Tu Voluntad. Me diste una carrera, si Tú la quieres Señor es Tuya. Yo amo dormir pero si Tú quieres que me desvele orando y clamando, y sirviendo a otros gloria a Dios. Amo mi dinero y es bueno tenerlo pero si Tú me lo pides para el avance de Tu Reino tómalo Señor es Tuyo también.

Todo lo que tú tienes ponlo a disposición del Señor, si Dios te lo pide de la forma más escandalosa y agresiva dáselo y dale gracias por dejarte ser usado, no te agarres de nada de este mundo. Abraham muy bien pudiera haber dicho: Señor de ninguna manera ¿cómo Tú te atreves a pedirme lo que Tú mismo me has dado? Ese hijo es mío, yo lo he anhelado toda mi vida, Tú me lo entregaste, Tú no puedes volver atrás en Tu promesa, este hijo me pertenece, yo voy a disfrutar de él hasta que muera, no te lo puedo dar; Abraham se desprendió de lo que era legítimamente suyo para que la Voluntad de Dios se cumpliera en su vida.

Si Dios le hubiera dicho: Señor no puedo hacer eso ¿usted cree que Dios no se lo hubiera dejado? Dios hubiera respetado la voluntad de Abraham. Cuando Dios nos pide algo y nosotros decidimos no dárselo entonces allá usted con su Dios, Dios no lo va a obligar. Ahora, se está perdiendo una gran bendición y al no entrar eso que usted tiene que ama más que a Dios dentro de la Voluntad de Dios ya eso está a la deriva, está en otra zona de contingencia y de accidente porque lo que es seguro es lo que está dentro de la Voluntad de Dios, por más tormentas que vengan si está dentro de la Voluntad de Dios nadie se lo puede arrebatar.

¿Cuál es el lugar más seguro de toda la historia de la humanidad sabe cuál es? La barca en medio de la tormenta con Jesús adentro de ella. Esa barca no se pudiera hundir jamás, ni una barca que estuviera metida en una montaña bien lejos del mar estaría más segura que esa barca porque el Señor estaba dentro de ella.

Sus hijos si están entregados al Señor están bajo la cobertura de Dios, su dinero, su tiempo, sus sueños, su profesión, todo si está en las Manos del Señor y usted le ha dicho: Padre haz lo que Tú quieras de ello está blindado, protegido por la buena Voluntad del Señor y si Dios te quita algo te va a devolver con creces en alguna forma dignificado, ennoblecido, embellecido porque se lo has puesto a Su disposición, y Filipenses 2 nos anima a tener el mismo sentir que hubo en Cristo Jesús.

Abraham legítimamente podría haberle negado su hijo al Señor pero no se aferró a él, se desprendió de él. Cristo se hubiera podido aferrar a Su deidad sin complicaciones perfecta en el cielo, pero cuando Dios le dijo: Hijo necesito que te adelgaces en un bebé y que en un momento dado te subas sobre una cruz y seas sacrificado por el bien de la humanidad, el Señor no le dijo: Padre ¿cómo Tú me pides eso? ¿Yo Rey de reyes y Señor de señores perfectamente divino, Yo convertirme en un bebé frágil y participar de todas las indignidades de un ser humano? No me pidas tal cosa, pero el Señor no se aferró a ello sino que se despojó dice la Palabra, se desvistió y bajó en la forma de un hombre, y se hizo obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. ¿Y sabe qué pasó? dice: “Por lo cual Dios lo exaltó hasta lo sumo y le dió un Nombre que es sobre todo nombre para que ante el Nombre de Jesús se doble toda rodilla de lo que está en el cielo, en la tierra y debajo de la tierra”.

Cuando tú te entregas a la Voluntad del Señor, cuando tú entregas todo lo que tú amas al Señor, cuando tú te desvistes de tu gloria y pones todo a disposición del Señor Dios entonces te exalta, te levanta, experimentas felicidad, experimentas gozo, experimentas el verdadero placer de tener algo que Dios bendice ahora con Su bendición.

Yo te pregunto terminando: ¿estás tú dispuesto, estamos nosotros como Congregación, estoy yo que predico este mensaje dispuesto a entregar todo lo que legítimamente nos pertenece incluyendo nuestros hijos, para que los propósitos de Dios se cumplan en nuestras vidas? Esto es lo que marca verdaderamente como gente de fe a un cristiano y no como un mero seguidor superficial de Jesucristo.

El motivo de los hijos es simplemente el inicio de algo mucho más profundo, lo que Dios quiere que le entregue es tu corazón, dice: Dame hijo mío tu corazón y miren tus ojos a través de Mis ojos, esa es la postura radical que Dios honra. Hasta que un hombre, una mujer creyente no ha llegado al punto de darle al Señor el asiento de su voluntad no es un verdadero seguidor de Cristo. Hasta que Dios no oye el ruido de una rama que se quiebra de la voluntad no está satisfecho y va a perseguirnos hasta que se dé ese momento, y que bajemos la cabeza como el caballo cuando el jinete lo doma, y se permite ser montado y usado, y eso es lo que Dios quiere de ti que tú mueras.

Yo te pregunto esta tarde ¿cuál es tu Isaac, cuál es tu Isaac, qué es lo que tú más amas? ¿qué es lo que tú dices: Señor yo te doy todo lo demás pero no me pidas eso? Hay compartimentos en nuestra vida, hay cajas blindadas cuya combinación solamente nosotros conocemos y Dios no las va a abrir a la fuerza, ahí guardamos nuestro tesoro. La Biblia dice que donde esté nuestro tesoro ahí estará nuestro corazón.

¿Hay algo que tú no le has entregado al Señor? ¿hay un hijo al cual amas desesperadamente y del cual tú dices: si me quitan esto me muero? ¿hay un hombre, una mujer a quien tú amas más que a la buena Voluntad de Dios y al aprecio de Dios en tu vida? ¿hay una cuenta de banco, hay una casa, hay una profesión que tú dices: Señor yo no puedo darte esto no me lo pidas? y no se lo has dicho con la boca se lo has dicho con el corazón, con la mente invisiblemente, inaudiblemente pero se lo has dicho y mientras tú haces eso la perfecta Voluntad de Dios no se va a cumplir en tu vida, pero cuando tú lo hagas Dios dice: Eso es lo que estaba esperando, ahora voy a entrar a tu vida, te voy a bendecir, te voy a multiplicar.

Dios le dijo a Abraham: Por cuanto no me negaste tu hijo, tu unico hijo Yo haré que tu descendencia sea como la arena del mar, como las estrellas del cielo, si se pueden contar la estrellas del cielo se podrá contar tu descendencia.

¿Cuántos hijos espirituales ha tenido Abraham desde esos miles de años en que tuvo un encuentro con Dios en el monte Moria? Incontables generaciones de hombres y mujeres que lo tienen a él como padre espiritual porque tuvo el valor de entregar al Señor lo que más amaba.

Yo te animo en esta tarde padre, madre, entrégale a tus hijos, persona próspera entrégale al Señor tu prosperidad, persona que tienes algún tesoro entrégaselo al Señor preventivamente. Baja tu cabeza allí donde tú estás y Dios te está hablando en esta tarde, el Señor te dice: yo quiero que tú salgas de aquí hoy habiéndome entregado todo lo que tú tienes, quiero que me firmes un papel en blanco y que me lo entregues y en ese papel tú estarás diciendo: Señor lo que tú quieras escribir en el programa de mi vida yo te digo: sí. Si tú te atreves a hacer eso tu vida será algo glorioso, una vida heróica, una vida épica, nunca te aburrirás, nunca serás mediocre, no te irás de este mundo sin haber dejado una marca, avanzarás el Reino de Dios y muy probablemente vas a tener grandes gozos, grandes disfrutes en tu vida porque el Señor nunca nos azota y nos saca todo el jugo sin bendecirnos también, Dios se encarga también de darte bendiciones y placeres que el diablo y el mundo no te pueden dar.

Entrégale al Señor tu corazón, entrégale tu vida, esta Iglesia tiene que entregarle al Señor esta Iglesia. Yo desde aquí le entrego al Señor nuestro programa, le entrego al Señor esos asientos, esta alfombra, esta plataforma, mi ministerio, se los entrego a ustedes, entrego los dos servicios y el servicio en inglés al Señor, entrego nuestros ingresos, entrego el futuro de esta Iglesia, entrego el llamado de esta Iglesia, entrego cualquier aspiración de grandeza ministerial al Señor, se lo entregamos todo, nada es nuestro, ni usted ni yo tenemos ningún derecho a determinar nada de esta Congregación porque todo es de Dios ¿puede usted decir amén a eso? porque todo es de Dios.

Y esta es una barca, León de Judá es una barca, este sitio es una barca y el Señor quiere predicar Su Evangelio a multitudes y dice: León de Judá ¿me prestas tu barca? para yo apartarme de tierra un poco y predicarle a este mundo perdido, y tú y yo tenemos que decir: Señor claro que sí toma la barca, los remos y también la red que está dentro te lo entrego todo.

Te invito a entregar tu vida al Señor en esta tarde ahora mismo y si hay alguien que quiere hacerlo no sólo en una manera espiritual, si tú quieres entregar tu vida a Jesucristo y no lo has hecho antes te invito a hacerlo ahora también, te invito a pasar aquí al frente, levantar tu mano, si hay alguien que quiere hacerlo, como Dios te indique, si hay alguien que quiere hacerlo abrimos este espacio, queremos orar por ti ¿sientes tú ese llamado de Dios?

Puedes levantar tu mano, puedes ponerte de pie, abro este espacio aquí mientras oro por los demás hermanos pregunto si hay alguien aquí que todavía no ha entregado su vida al Señor quizás un joven lleno de bríos, de futuro y talento, y tú le quieres entregar tu vida a Jesucristo, y tú le dices: Señor con temor y temblor te entrego mi vida, o quizás eres un anciano al final de sus años y dices: ¿sabes qué Padre? entiendo que he desperdiciado mi vida pero hoy te la entrego, y yo te invito a pasar aquí al frente, levantar tu mano como Dios te indique, si hay alguien que quiere hacerlo abrimos este espacio, queremos orar por ti

¿Sientes tú ese llamado de Dios? Mientras hacemos eso si alguien siente del Señor venir quiero también invitarte ahora mismo, si eres un hijo de Dios, sirves al Señor, caminas en Sus caminos, pasa por acá jovencito ¿tú estás levantando tu mano? Ven aquí, acompáñalo hermana, mientras; este chico yo lo conozco, yo creo que desde que tú naciste probablemente, qué bueno, hoy me siento realizado qué bendición, así en el comienzo de su juventud.

Si alguien más quiere pasar aquí al frente yo quiero que esto sea una entrega total de todos nosotros, posiblemente hay otras personas más yo creo que Dios puede bendecir, I declare God’s blessing in your life, I tell you God right now is looking at you and He’s examining every move of your heart and your emotions, and He is sanctifying, blessing, and releasing, and sealing every part of your being and as you walk this life walk knowing that you have the blessing and the favor of God in your life, He will enhance your intelligence, He will grant you great victories, He will bless you intellectually, professionally, physically, emotionally, He will be your partner in life, He will be your manager and your trainer and He will show you the way.

I’ve been where you are now as a young boy and I’ve seen the Lord bless me in extraordinary ways, and He has given me the desires of my heart and He will give them to you too if you obey Him and you follow Him so say: Jesus take over my life, just say that inside of yourself, give your life to the Lord as beautiful as you are, give your life to the Lord and say: Father I yield my life to You, my future I give it to You and I want You to walk with me every day of my life, there is no greater blessing than that I’m telling you, He will make you something extraordinary, He will make you into something great, powerful and beautiful.

And through you I bless many young people in our city, in our community, through you I bless countless students in high schools, in colleges, in middle schools, in kindergardens, and I bless this youth, and I declare that they belong to Jesus Christ and the Kingdom of God not to Satan, and through you I bless them as well, and I call them to come forward to be blessed and to be taught, and edified by the Spirit of Jesus Christ, you are a chosen generation and I bless you in the Name of Jesus Christ.

¿Hay alguien más ahora mismo que quiera entregar su vida a Jesús? yo abro este momento también para ti, no lo resistas, no pelees más, entrega a Isaac y Dios te lo va a devolver multiplicado y bendecido, y transformado en algo glorioso.

Y ahí Congregación León de Judá yo te invito a reconsagrar tu vida al Señor ahora mismo, a examinar todas las rendijas de tu vida, todos los cubículos, todos los espacios, todos los objetos y si no tienes la marca que dice Reino de Dios en ello aplícaselo ahora mismo, entrégaselo al Señor todo, todo, todo; tu cuerpo, tu intelecto, tus sueños, tu dinero, tu casa, tu familia, tu espíritu, tus emociones, tus recuerdos, todo entrégaselo al Señor y di: Señor yo soy Tuyo, Tuyo soy, aduéñate de mí, enséñame cómo llegar a otro nivel de vida, les bendigo en el Nombre del Señor, amén, amén, gracias Señor porque nos das una cosecha nueva, incipiente, te place tener estas criaturas nuevas Señor que tienen todo un camino largo para andar y bendecirlas, las entregamos a Ti Señor, gracias y así pedimos que nos des el gozo de ver cientos de ellos venir a Jesucristo Señor y a vivir vidas bendecidas y prosperadas, gracias Padre.

Esta Iglesia se somete a Ti Señor, te entregamos todo lo que tenemos, todo lo que somos, Tuyo es Padre, glorifícate en ello y recibe esta bendición que es Tuya Señor gracias, gracias Padre, te adoramos y te bendecimos. Pueblo de Dios ponte de pie y entrégaselo todo al Señor, si tú has hecho ese pacto allí, si tú has hecho ese pacto levanta tu mano y dale gracias al Señor, y sal de aquí una criatura que pertenece al Reino de Dios para servir al Señor y darle a Él todo lo que Él quiera de ti, te bendigo en el Nombre del Señor, gracias, amén, amén.