pastora valerie gonzalez

Sermón 27 de agosto 2016: Despierta y ve

Transcripción

El tema de esta mañana es “Despierta y ve” y hay cuatro cosas que quisiera compartir con ustedes que necesitamos despertar y ver, lo primero que quisiera hablar en esta mañana es que tenemos que despertar y ver que somos la Iglesia. En este día quiero hablarle un poco sobre una historia que es bastante conocida y por causa del tiempo no voy a leer todo el capítulo pero voy a estar hablando sobre el Libro de Jonás capítulo 1.

Muchos de nosotros conocemos la historia de Jonás, Jonás era un profeta, un profeta es alguien que escucha y obedece la Voz de Dios. El trabajo del profeta es conocer el corazón de Dios y ayudar a otros a entenderlo, el profeta vive y depende de los deseos de Dios. Cuando encontramos a Jonás en el capítulo 1 es importante conocer que Jonás no era un creyente nuevo, él no estaba tratando de ver qué era él en el Cuerpo de Cristo, en ese tiempo no conocían a Cristo, sino en la Iglesia, él conocía el propósito de su vida, él conocía su identidad, ya él había estado activo un tiempo, él venía y funcionaba con su relación con Dios como profeta.

Así como Jonás la Iglesia no es una institución nueva, nosotros conocemos nuestra identidad, somos la novia de Cristo, nos sometemos y obedecemos a nuestro esposo, somos el Cuerpo que físicamente realiza y demuestra los pensamientos de la Cabeza que es Cristo, nosotras también tenemos que conocer el corazón de Dios. La Iglesia vive y funciona, y depende de cada palabra que sale de la boca de Dios, Jesús es nuestra fundación. Cuando saben que Jesús es nuestra fundación estamos fundadas sobre la roca, y Jesús es el que nos dió Su sacrificio para que podamos vivir como Iglesia dependiendo de la Gracia de Dios, esa es la Iglesia, vivimos de la Palabra de Dios y dependemos de Su Gracia, y con mucho gozo aceptamos los cambios que la Gracia trae a nuestra vida.

La Gracia de Dios nos permite ser como Cristo, transforma nuestra imagen así como cuando Jesús transformó Su imagen para estar con nosotros, vivimos de acuerdo a la Voluntad de Dios por Su Gracia así como Jesús vivió de acuerdo a la Voluntad de Dios cuando estuvo aquí en la Tierra y después la Gracia nos torna en instrumentos para la transformación de otros así como cuando Cristo se apareció para decirle a los discípulos: Vayan y transformen a otros.

Pero en algún lugar de nuestra vida cristiana, y no estoy hablando en particular a las mujeres de León de Judá, hablo con ustedes de ustedes pero no solamente de ustedes porque nosotras somos partes del Cuerpo de Cristo y hay una gran preocupación por el Cuerpo de Cristo, porque en el Cuerpo de Cristo hay personas que se han enamorado tanto de la gracia, de lo lindo que hace la gracia para nosotras, nos da una nueva imagen y nos pone tan bonitas que nos quedamos en el espejo mirando y diciendo: wow, mira lo que hizo en mí, y nos hemos enamorado tanto de lo que la gracia hace por nosotras que el yo comienza a distraernos y comenzamos a tornarnos en personas que no están dispuestas a salir y a decirle a otros de la gracia que hemos recibido.

Cuando creemos en el poder de la gracia y comenzamos a pensar que la gracia es aplicada a nuestra vida selectivamente comenzamos a perder el poder activo y efectivo que hay en ser la Iglesia porque hemos sido llamadas a ser una Iglesia activa y efectiva llena de poder y yendo a través del mundo, y diciéndole a todos que Cristo vive, que Cristo cambia y que Cristo viene otra vez, ese es el poder que se encuentra en la Iglesia de Cristo.

Pero así como la obsesión de America con la cirugía plástica y con mantenernos todas súper jóvenes nos hacemos adictas de la gracia para que nos mantenga frescas y no queremos meternos en nada que nos vaya a desgastar o algo que cueste algún esfuerzo porque no queremos sudar para nada, pero la gracia no vino para que no sudaras, así como Jonás la Iglesia de hoy ha decidido correr de la seguridad de las cosas que conocemos.

La Biblia dice en Romanos 8:28 que esto es lo que conocemos, nos concentramos tanto en decir que oh, todo obra para bien para los que aman a Dios y han sido llamados de acuerdo a Su propósito, siempre decimos esa parte pero el verso comienza diciendo que: esto es lo que conocemos. Tenemos que estar fundados en lo que conocemos que somos pero mucha gente ha decidido correr hacia la incertidumbre de un mundo desconocido, aún la Iglesia ha comenzado a tornarse a una jornada donde la salvación está cerca pero las demandas están lejos.

Eso es lo que Jonás estaba tratando de hacer, él no quería correr de Dios, él quería mantener a su Dios pero quería alejarse de lo que Dios le pedía porque lo que Dios demandaba de él era algo que lo iba a hacer sudar, era algo que él no quería hacer, era algo que él no esperaba. ¿Sabías tú que había un tiempo en la historia donde la gente sabía que la Iglesia era el lugar donde si tenían dificultades y problemas podían venir? Si tú te encontrabas enfermo la gente no pensaba en los hospitales, pensaba en la Iglesia.

La Iglesia era un lugar de refugio, la Iglesia era el lugar que Cristo dijo que íbamos a ser, era la casa de oración y en la Iglesia habían guerreros que activaban efectivamente el Poder de Dios, allí existía la gente que sabía cómo comenzar conversaciones con Dios que terminaban con la manifestación del increíble Poder que hay en nuestro Jesús, la misericordia y la Gracia de Dios era como una fuente que se abría con las oraciones de los santos pero ¿qué ha sucedido? que hoy en día la Iglesia si tú miras está siendo criticada, está siendo atacada, no es un lugar presentado como un lugar donde podemos ir para hacerla nuestro refugio.

Yo creo que podemos echarle la culpa a muchas diferentes cosas pero es importante que entendamos que nosotras como el Cuerpo de Cristo hemos permitido que muchos de nuestros propios deseos entren a lo que es la Iglesia, hemos permitido que nuestro yo se ponga entre lo que es la Iglesia de verdad y lo que el mundo está viendo, y lo que sucede cuando la Tierra se pone entre medio del sol que es Jesús y la luna que es la Iglesia que se supone que tiene que dar luz en medio de las tinieblas. Cuando el yo que es la Tierra y mis deseos carnales se pone entre medio del sol y la luna, ahí es donde se causa un eclipse lunar donde hay obscuridad en todo lugar, por eso nosotras tenemos que asegurarnos que estamos fundadas sobre lo que en verdad somos, somos la luna y no reflejamos nuestra propia luz.

La luna refleja la luz de Cristo, la luz del sol es lo que vemos en la luna y no podemos permitir que el yo se meta en medio de ello. Jonás estaba reflejando la luz hasta que llegó algo que no parecía ya gustarle más, y lo segundo que creo que tenemos que despertar y ver es que tenemos que despertar y ver que nuestras prioridades tienen que cambiar, primero tenemos que despertar y ver que somos la Iglesia.

Lo lindo es ver que aunque haya un eclipse lunar el sol todavía es el sol, la luna todavía es la luna, la tierra todavía es la tierra, nuestro propósito todavía está, simplemente tenemos que ubicarnos donde tenemos que estar y podemos comenzar a hacer eso si despertamos y vemos que nuestras prioridades tienen que cambiar.

Fue el Dios de la tormenta que vino a demostrarle a Jonás que su fe estaba inestable y que sus prioridades estaban desordenadas. En algún momento en la vida de Jonás el profeta que vivía al servicio de Dios a lo mejor sin darse cuenta, Jonás terminó poniéndose a sí mismo como prioridad, los deseos de él comenzaron a ser más importantes que los deseos de Dios, pero desde el principio de la fundación del mundo Dios creó una separación entre el cielo y la tierra.

Hay un debate teológico muy grande sobre lo que sucedió en el verso 1 y el verso 2 del Génesis porque la Biblia dice que Dios creó todo en orden y de repente todo estaba desmoronado como decimos los puertorriqueños, estaba vacío, estaba sin forma, y no sé exactamente la respuesta, yo no vine a decirte que tengo la respuesta porque no la tengo y a lo mejor no lo vamos a saber hasta que lleguemos al cielo, y la verdad que eso no me importa tanto, lo que me importa es que suena a que hubo una tormenta que intercambió las cosas, vino y sacó las cosas de su lugar, las desordenó y cuando las cosas están desornenadas o pasa una tormenta después tú las ves y están como que casi no se pueden reconocer.

En el Génesis dice que la oscuridad que se suponía que habitara en la profundidad de la mar ahora está en la superficie de la mar, en otras palabras esas cosas estaban al revés. Dios había creado algo perfecto y bello pero ahora está al revés así como estaba Jonás, así como estamos algunas de nosotras que estamos al revés que casi ni nos reconocemos a nosotras mismas, no podemos ni siquiera señalar exactamente el punto donde las cosas comenzaron a cambiar, pero sabemos que no estamos alineadas ¿y cómo lo sabemos? porque no estamos siendo la luna que refleja la luz del sol, no estamos en un lugar donde la gente me puede mirar como miraban a Ana y decir: esa luz me está dejando saber que yo puedo brillar también.

Los sentimientos personales de Jonás hacia Nínive tuvieron mas prioridad que los deseos de Dios para esa ciudad pero eso es fácil, si no te gusta lo que quiere Dios pues vete para otro lugar y eso es lo que dijo Jonás, en ese tiempo ese era el fin del mundo, él quería irse ya para donde Dios no me pueda ni tocar decía él, pero si tú eres como yo, a mí me encanta viajar, y yo he ido a cruceros anteriormente, y cuando uno tiene que ir a un crucero tú comienzas a empacar tu maleta ¿verdad? y yo por lo menos necesito 15 pares de zapatos cuando voy a un crucero, y yo empiezo a empacar, pero cuando tú empacas, estás guardando toda tu ropa y haciendo tú no te puedes llevar el clóset completo, tú no te puedes llevar todos tus productos de belleza porque hoy en día necesitas 20 para hacer una cara normal (risas), y no te puedes llevar todos los lujos que tú tienes en casa, todas tus cosas preferidas no te las puedes llevar contigo.

Entonces tú comienzas a guardar tus cosas y cuando terminas ves: yo no puedo cerrar esta maleta y no me puedo llevar siete maletas, so yo empiezo a comparar las cosas y mirar a ver qué es lo más importante, y tú dices: mira yo pensé que podía llevarme esto y yo puedo vivir sin esto una semana así que yo la cambio y pongo otra cosa, así que cuando la maleta llega a la barca ya ha pasado por un proceso de escoger por prioridades y decir que lo que tú te estás llevando eso es lo más importante para el viaje que tú tienes.

Me imagino que todos los marineros en la barca que estaban con Jonás hicieron ese mismo proceso y dijeron: esto es lo más importante que va en la barca conmigo; pero cuando se levanta la tormenta y los vientos comienzan a soplar, y tú estás en medio de la barca los vientos comienzan a cambiar tus prioridades, porque la verdad es que la única manera de ayudar a la barca a sobrevivir es comenzar a echar las cosas que tú pusistes en la barca que dijistes que eran tan importantes, de repente te das cuenta que no necesitas tacos para nadar, que esa camisetita tan linda que tú tenías tú la intercambias rápido por ese bálsamo anaranjado que ni te pega con el pelo ni con nada tú rápido lo cambias, porque en el momento donde llega la tormenta uno comienza a evaluar y la cosa es que nosotras tenemos que saber que hemos estado cargando con pesos que no son tan importantes, hemos dado prioridades a cosas que no nos ayudan a actuar como lo que somos, la Iglesia de Cristo.

Por un momento en el tiempo Jonás creía que había encontrado su descanso en esa barca pero yo quiero que tú sepas en esta mañana que aún si te sientes calmadita con todas tus posesiones Dios siempre tiene un plan para que nosotras podamos llegar a las prioridades que nosotras tenemos para nuestras vidas y muy a menudo eso incluye una tormenta. Algunas de nosotras tenemos que evaluar y echar a la mar cosas que no debemos estar cargando.

Algunas nos hemos estado quejando de las tormentas en nuestras vidas pero Dios las envió para que tú te hagas una pregunta, la pregunta es: ¿cuánto en verdad yo necesito esto? ¿necesito esto para cumplir mi propósito o el valor de esto me va a hacer que si me aferro me hundo? Nuestras prioridades tienen que cambiar Iglesia, tenemos que concentrarnos en los valores que la Palabra dice que nos define como la Iglesia, tenemos que despertar y ver: somos la Iglesia de Cristo, tenemos que estar orgullosas de saber que somos la Iglesia de Cristo, tenemos que despertar y ver que nuestras prioridades tienen que cambiar.

Y por tercero despertar y ver que nuestro Dios es el Dios de la tormenta. Muy a menudo la Biblia nos enseña que el enemigo viene a robar, matar y destruir, y la tormenta cuando viene lo que hace es un desorden y trae desorden, trae muerte y destruye, y nosotras rápido le echamos la culpa al enemigo, le echamos la culpa al diablo por todo, el pobre diablo a veces me da pena (risas), porque él dice: yo ni pasé por allí y todo el mundo echándole la culpa al diablo.

Hoy tú necesitas saber que ese Dios lindo al que tú le estabas cantando que estaba entronado Él no solamente habla autoridad a tu vida pero los vientos y la mar también lo tienen que escuchar y Él es el Dios de la tormenta, y Él usa la tormenta para mostrar Su Poder y control sobre todas las cosas, las cosas a nuestra vista parecen estar fuera de control, pero Dios siempre está en control, Él es el que muestra Su Poder y autoridad.

En Génesis cuando se habla de que la Tierra estaba desordenada lo que me impactó a mí sobre el versículo 2 es que aunque no conocemos qué fue lo que causó el desorden y puede ser que mucha gente, mucha gente dice que puede ser el demonio y eso pero yo creo que Dios es el que tiene el control sobre todas las cosas, porque dice que aunque la oscuridad estaba sobre la faz de la mar, aún cuando las cosas estaban al revés el Espíritu de Dios se movía sobre las aguas porque los vientos pueden venir, las olas pueden atacarte y pueden mover todas las cosas pero tu Dios es un Dios inmovible, a tu Dios nada lo puede mover si Él no se quiere mover.

La verdad es que Dios es el Dios de la tormenta, por eso en las buenas yo le doy gloria y cuando vienen las malas yo le doy gloria porque Él es el Dios de la tormenta, así como es el Dios de los días soleados, en medio de esa tormenta Él las permite para mostrarnos verdades sobre nosotros mismos. Si la tormenta no llegara no conoceríamos cuáles son las cosas inmovibles y cuáles son las cosas que rápidamente se mueve, no sabemos cuáles son las cosas que pueden ser manipuladas por una tormenta y cuáles son las cosas eternas en nosotros, sin una tormenta no vas a saber si estás sobre la arena o sobre una roca, pero gracias a Dios por esas tormentas que no vienen para ahogarnos, vienen para dejarnos saber que hay un Dios misericordioso que está pendiente de cada una de nosotras y Él está dispuesto a rescatarnos y a hacernos darnos cuenta de la condición en la que estamos de verdad.

Dios en las Escrituras ha establecido que hay propósitos en la tormenta, con Noé Él reveló que Él puede usar una tormenta para separar la justicia del pecado. En Pedro Él pudo revelar que la realidad de la fe de Pedro, porque Pedro creía que ya había madurado todo lo que tenía que madurar en la fe, pero Dios le quiso enseñar a Pedro que sólo se necesita un poco de fe para que Dios sea glorificado. Jesús usó una tormenta para revelar la paz que trasciende todo entendimiento y con Pablo Él causó una tormenta para revelar su fidelidad, porque Pablo era un creyente en medio de muchos incrédulos y cuando él hablaba la Palabra de Dios nadie estaba escuchando pero cuando Dios envió una tormenta, todo el mundo quería saber de Pablo y todos salieron de ese lugar salvos.

Con Jonás Dios envió la tormenta para mostrarnos y revelar que Dios puede retornar la fe a aquéllos que la han perdido. Esta historia no es para que critiquemos a Jonás, esta historia es para que veamos el buen pastor, que cuando queramos irnos del redil Dios usa hasta a las tormentas para retornarnos al lugar donde tenemos que estar, donde Él nos cuida, donde Él nos sana, donde Él nos llena de gozo, Él nos llena de Su paz porque Él es el buen pastor, tenemos que despertar y ver que Dios es el Dios de la tormenta. ¿Cuántos pueden darle gloria a Dios por la tormenta presente que está en tu vida?

Y por último tenemos que despertar y ver que este mundo está desesperadamente pidiendo oración. Yo sé que dices: oh, no, no eso no es aquí en América porque la gente ya no quiere orar, están sacando la oración de todos los lugares, ¿sabías tú que tus buenas y malas decisiones afectan a otros?

Somos llamados a ser salvavidas, pescadores de hombres, entonces cuando nosotras caminamos fuera de la Voluntad de Dios y del llamado de Dios no solamente estamos poniendo nuestra vida en riesgo, estamos poniendo la vida de otros en riesgo porque somos llamados para ir y salvar a otros.

Jonás cuando se paró en esa barca puso sus pies sobre la barca, en ese momento fue cuando él puso en acción esa tormenta, pero esa tormenta no lo iba a afectar a él solamente, iba a afectar a todos los que estaban con él en esa barca, por eso tenemos que tener cuidado cuando tomamos decisiones basadas en nuestras emociones.

Los marineros en ese lugar tenían temor de esa tormenta, ellos no eran marineros nuevos, ellos sabían lo que era ser un marinero en medio de una tormenta y tenían experiencia de qué hacer en medio de una tormenta, pero aún en medio de esa tormenta ellos pudieron discernir que esa tormenta no era una tormenta normal, hay algo diferente en esa tormenta, hay algo como que la matemática no está resultando bien, por eso ellos comenzaron a clamar a sus dioses y a orar, y cuando nadie respondía ellos dicen: esto no es normal y la culpa es de alguien aquí.

Ellos sabían que eso no tenía nada que ver con lo que estaba pasando afuera, tenía que ver con todo lo que estaba pasando dentro de la barca y comenzaron a decir: ¿quién tiene la culpa? Y cuando encontraron a Jonás estaba dormido no con el mismo sueño que tuvo Jesús porque Jesús dormía con la paz de que todo estaba bien, Jonás estaba dormido porque se tomó una pastillita para no saber qué es lo que estaba pasando con el mundo alrededor, y yo entiendo que necesitamos nuestros doctores y medicaciones pero hoy yo vengo a hablar en contra del espíritu de la depresión y de médicos que siguen haciendo a personas adictos para que se duerman a través de la vida, y Dios no te llamó a dormir a través de esta vida, Él quiere que estés despierta porque tiene vida y vida en abundancia para ti mujer.

Jonás quería olvidarse de su mundo y cuando los marineros lo encontraron, oh wow lo que dijeron debiera chocar a cada uno de nuestros corazones. Las preguntas que le hicieron las escucho el día de hoy, suenan diferente, es más, suenan como acusaciones; por eso nos miran y nos critican como Iglesia, pero nosotros tenemos que entender que la razón por la que están mirándonos y echándonos críticas es porque saben que tenemos las respuestas y no hay nada más frustrante que ver a algo que ha sido llamado a ser luz escondiéndose debajo de la mesa, tenemos un templo precioso pero no es para esconder la luz aquí, y ya ustedes vagan por todas estas luces bellas para que alumbren, pero hay un mundo de oscuridad que necesita que tú vayas y lo alumbres.

Y cuando el capitán le dice: ¿cómo es que tú puedes dormir? ¿cómo es que tú no te das cuenta lo que está sucediendo alrededor? Todo este terrorismo, toda esta violencia, todas esas cosas que están sucediendo ¿qué puedes hacer tú, qué puedo hacer yo? La Biblia dice que el amor es la respuesta, el amor de Dios nunca falla contra el terrorismo, el terrorismo no es más grande que el amor de Dios, la violencia no es más grande que el amor de Dios, tenemos la respuesta.

Y el capitán dice: ¿cómo es que tú puedes dormir? y el inconverso le da la respuesta a la Iglesia de cómo nosotros podemos sobrellevar esto, le dice: levántate y clama a tu Dios, despierta y clama a tu Dios, despierta mujer y clama a tu Dios. Yo ví un anuncio que decía que las mujeres iban a orar, es tiempo de despertar y clamar a nuestro Dios, los políticos no encuentran la respuesta, el mundo no encuentra la respuesta porque la respuesta está en que nosotras clamemos a nuestro Dios.

Dice: puede ser que si tú clamas Dios toma nota de nosotros y no perecemos. Toda esa violencia es un mundo tratando de llorar y decir: si tú clamas puede ser que Dios me rescate a mí también, porque nadie quiere morir, todos queremos vivir, pero si tú clamas puede ser que tu Dios tenga misericordia de otros.

La Iglesia es la mejor institución que hay en la faz de la Tierra, nosotros vivimos en contra del pecado, nosotros servimos al Dios que es el único que puede deshacerse del pecado pero no nos podemos volver un gigante durmiente, tenemos que levantarnos, ¿cómo podemos dormir en este tiempo? Es tiempo de despertar y ver que tenemos que clamar a Dios que tiene todas las respuestas para los tiempos en los que vivimos.

Después le dice: ¿quién es responsable por hacer todo este problema para nosotros? Y le preguntas a la Iglesia y la Iglesia te señala a tantos diferentes puntos en la historia y la gente, y que si esto, que si lo otro pero yo creo que es tiempo que la Iglesia tome ese dedo y se lo torne así (apuntándose a sí misma), ¿en qué hemos sido responsables, qué es lo que hemos hecho para dejar de hacerlo? Tenemos que dejar de hacer ciertas cosas para que el sol sea sol y nosotras seamos la luna.

Le preguntaron ¿de qué parentela tú eres? ¿saben por qué? porque a veces nos tenemos que enfrentar con una pregunta ¿de dónde tú eres? para que nos recordemos quiénes somos. Yo sé que Dios escogió que el capitán le haga esas preguntas a Jonás para que nosotras en este día podamos tener la iluminación de que Él es el que estaba preguntando a través del capitán estas cosas y las preguntas no las hizo porque las respuesta no las sabían, las preguntas nacieron porque Jonás se olvidó y decidió dormirse en un tiempo donde Dios quería salvar.

Hazte la pregunta: tu Dios ¿todavía está buscando restaurar y salvar? Tu Dios ¿quiere usarte a ti para restaurar y salvar? Tenemos que despertar y ver que somos la Iglesia de Cristo, pedirle a Dios que nos ayude a cambiar nuestras prioridades, entender que Dios es el Dios de mi tormenta y despertar, y ver que el mundo desesperadamente está pidiendo la oración.

Hay gente que dice que el avivamiento que ha sido prometido por muchos años a Nueva Inglaterra que nunca va a suceder aquí, porque la gente especialmente la gente de Boston son muy intelectuales, ustedes son demasiado intelectuales, ustedes tratan de entender a Dios con tanto detalle que se lo pierden, las escuelas I believes comenzaron con la fundación de Dios pero al tratar de entenderlo al final dijeron: parece que no hay Dios y ya la gente ha comenzado a decir que en Su avivamiento no va a pasar por aquí, porque ustedes no parecen gente que van a causar un avivamiento.

Y mientras alguien muy inteligente en su inteligencia y en su astucia me estaba tratando de explicar por qué Dios no va a traer un avivamiento a Nueva Inglaterra mientras él hablaba yo me empecé a emocionar, y él me estaba mirando y yo decía: oh my God, oh my God, y él me decía: es que como, tú sabes, tengo tanta mucha más inteligencia que tú, déjame ponerlo en palabras que tú puedas entender, entre más él decía yo: ay, no podía yo enojarme con su ignorancia, porque él no conocía lo que estaba pasando en mí, mientras él decía esas palabras yo recordaba que Él siempre se aparece en los lugares que menos esperamos, y yo decía: wow Él está confirmando que Dios en verdad va a cumplir Sus promesas, y yo lo espero; pero para que el avivamiento llegue tenemos que despertar, tenemos que despertar y ver, el avivamiento no sucede con sonámbulos.

Dios en esta mañana Dios me envió simplemente para ser tu alarma, y aquéllas que no les gusta la alarma (sonido de golpear la alarma) pero Dios quiere despertarnos y ver, nos hemos metido tanto en lo que no queremos hacer y en lo que las tormentas nos han causado que nos hemos perdido el enfoque real, y yo sé que vine en un día en que el corazón está un poco pesado, pero creo que esta Palabra es muy apropiada porque el dolor no puede quitarte el enfoque de lo que Dios ha querido hacer, de lo que la hermana Ana fue fiel en hacer.

Nosotras somos llamadas para ser la luz y tenemos que despertar a esa luz para que alumbremos donde quiera, para que Dios pueda lograr en cada una de nosotras que nos convirtamos en esa luz que salva a otras, porque la gracia no es sola para mí, la gracia llega a mí para que yo dé gratuitamente lo que yo he recibido. ¿Cuántas en esta mañana están listas para abrir sus ojos?

Ahí donde tú estás cierra tus ojos. Si en esta mañana, yo voy a orar por estos cuatro grupos y tú puedes, si tú no te has sentido como la Iglesia de Cristo, si tú nunca has conocido y has aceptado a Cristo como tu Señor y Salvador yo te voy a invitar a que vengas adelante en esta mañana, yo voy a orar contigo. Si mientras estaba hablando más temprano tú te diste cuenta que tus prioridades no están en su lugar, que hay ciertas maletas que tú tienes que echar del barco, no es fácil hacerlo, no es fácil decirle adiós a las cosas que tú pensabas que eran importantes, pero si esa eres tú queremos orar por tu vida en esta mañana, si tú eres aquélla que has estado echándole la culpa al diablo por la tormenta que Dios ha traído para traer tu atención a cosas importantes yo quiero orar contigo.

Y si tú eres esa persona que se ha dado de cuenta que el mundo sí quiere escuchar de Cristo, porque la mentira más grande que el enemigo tiene ahora es que la gente no quiere escuchar de Dios, por eso cuando llega la tormenta lo primero que hacen es: claman, claman, claman, en verdad ese vacío nunca se va, existe en cada creación, las huellas digitales de Dios están en cada una de nosotras, pero también están a través del mundo y esas huellas dejan un vacío si tú no tienes a Dios, que Dios nos dé la gracia para alcanzar a aquéllos que niegan querer conocer a Dios, esas son las oraciones que haremos en esta mañana, si esa eres tú, ven rápido al altar a orar.

Yo no sé si hay, quiénes son las ministras de la casa que nos ayuden a ministrar a las mujeres mientras vienen pero, mi oración es que entre todas las cosas que hemos aprendido hoy, este es el primer capítulo de una serie que estoy escribiendo sobre: la oración camina (prayer walks) porque creo que la gente que cree en Dios debe hablar con Él, y en la Iglesia uno de los errores ha sido que la gente se ha creído que la oración es opcional, pero nosotras dependemos de nuestras conversaciones con Dios, y esas oraciones nos van a ayudar a activar el poder efectivo de la oración, y por eso la oración es muy importante, no la tomemos en poco.

Si habrá alguien en esta mañana vamos a orar, si no hacemos una oración general. Levanta tus manos donde estás: Señor yo te doy gracias por estas mujeres, Señor Tú nos conoces y así como Jonás Tú nos persigues. Señor desde aquí hasta el asiento donde están o hasta donde se han ido sus mentes, la distancia Tú la puedes medir y tú las puedes alcanzar en cada lugar donde ellas están, Tú conoces sus necesidades, Tú conoces el destino que Tú tienes para cada una de estas mujeres.

Señor te damos gracias por no rendirte de cada una de nosotras, te damos gracias porque nuestros caprichos nos pueden desviar pero no nos pueden robar el destino que Tú tienes para cada una de nosotras porque Tú nos retornas a Tu Voluntad, Tú nos persigues Señor con Tus propósitos.

Yo te pido que en esta mañana estas mujeres puedan despertar y ver que Tú has querido llamar su atención, Tú las estás llamando a clamar a Tu Nombre porque hay un mundo que está recibiendo tormentas a causa de las decisiones que hemos tomado. Señor no podemos olvidarnos del Dios de la tormenta en estos tiempos, Señor que podamos despertar y clamar, y no solamente clamar por nuestra salvación pero Señor, que todos aquéllos que están atemorizados por lo que está sucediendo a nuestro alrededor puedan encontrar la salvación a través de estos pasos en este lugar, úsalas Señor para Tu gloria, Señor úsalas para que este lugar esté repleto de almas nuevas, Señor que dos cultos no sean suficientes, Señor que vengan como multitudes a Tu Casa conociendo que esta es la casa de oración, aquí hay poder, aquí hay respuestas, aquí hay sanidad, aquí hay libertad, está aquí y está en ellas mientras ellas caminan este mundo, ayúdalas a resistir la tentación de huír y mantenerse firmes Señor en Tu Palabra, gracias Padre, te bendecimos en el Nombre de Jesús, te bendecimos por estas mujeres Señor y te damos gracias.

Despierta y ve

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El tema de esta mañana es “Despierta y ve” y hay cuatro cosas que quisiera compartir con ustedes que necesitamos despertar y ver, lo primero que quisiera hablar en esta mañana es que tenemos que despertar y ver que somos la Iglesia. En este día quiero hablarle un poco sobre una historia que es bastante conocida y por causa del tiempo no voy a leer todo el capítulo pero voy a estar hablando sobre el Libro de Jonás capítulo 1.

Muchos de nosotros conocemos la historia de Jonás, Jonás era un profeta, un profeta es alguien que escucha y obedece la Voz de Dios. El trabajo del profeta es conocer el corazón de Dios y ayudar a otros a entenderlo, el profeta vive y depende de los deseos de Dios. Cuando encontramos a Jonás en el capítulo 1 es importante conocer que Jonás no era un creyente nuevo, él no estaba tratando de ver qué era él en el Cuerpo de Cristo, en ese tiempo no conocían a Cristo, sino en la Iglesia, él conocía el propósito de su vida, él conocía su identidad, ya él había estado activo un tiempo, él venía y funcionaba con su relación con Dios como profeta.

Así como Jonás la Iglesia no es una institución nueva, nosotros conocemos nuestra identidad, somos la novia de Cristo, nos sometemos y obedecemos a nuestro esposo, somos el Cuerpo que físicamente realiza y demuestra los pensamientos de la Cabeza que es Cristo, nosotras también tenemos que conocer el corazón de Dios. La Iglesia vive y funciona, y depende de cada palabra que sale de la boca de Dios, Jesús es nuestra fundación. Cuando saben que Jesús es nuestra fundación estamos fundadas sobre la roca, y Jesús es el que nos dió Su sacrificio para que podamos vivir como Iglesia dependiendo de la Gracia de Dios, esa es la Iglesia, vivimos de la Palabra de Dios y dependemos de Su Gracia, y con mucho gozo aceptamos los cambios que la Gracia trae a nuestra vida.

La Gracia de Dios nos permite ser como Cristo, transforma nuestra imagen así como cuando Jesús transformó Su imagen para estar con nosotros, vivimos de acuerdo a la Voluntad de Dios por Su Gracia así como Jesús vivió de acuerdo a la Voluntad de Dios cuando estuvo aquí en la Tierra y después la Gracia nos torna en instrumentos para la transformación de otros así como cuando Cristo se apareció para decirle a los discípulos: Vayan y transformen a otros.

Pero en algún lugar de nuestra vida cristiana, y no estoy hablando en particular a las mujeres de León de Judá, hablo con ustedes de ustedes pero no solamente de ustedes porque nosotras somos partes del Cuerpo de Cristo y hay una gran preocupación por el Cuerpo de Cristo, porque en el Cuerpo de Cristo hay personas que se han enamorado tanto de la gracia, de lo lindo que hace la gracia para nosotras, nos da una nueva imagen y nos pone tan bonitas que nos quedamos en el espejo mirando y diciendo: wow, mira lo que hizo en mí, y nos hemos enamorado tanto de lo que la gracia hace por nosotras que el yo comienza a distraernos y comenzamos a tornarnos en personas que no están dispuestas a salir y a decirle a otros de la gracia que hemos recibido.

Cuando creemos en el poder de la gracia y comenzamos a pensar que la gracia es aplicada a nuestra vida selectivamente comenzamos a perder el poder activo y efectivo que hay en ser la Iglesia porque hemos sido llamadas a ser una Iglesia activa y efectiva llena de poder y yendo a través del mundo, y diciéndole a todos que Cristo vive, que Cristo cambia y que Cristo viene otra vez, ese es el poder que se encuentra en la Iglesia de Cristo.

Pero así como la obsesión de America con la cirugía plástica y con mantenernos todas súper jóvenes nos hacemos adictas de la gracia para que nos mantenga frescas y no queremos meternos en nada que nos vaya a desgastar o algo que cueste algún esfuerzo porque no queremos sudar para nada, pero la gracia no vino para que no sudaras, así como Jonás la Iglesia de hoy ha decidido correr de la seguridad de las cosas que conocemos.

La Biblia dice en Romanos 8:28 que esto es lo que conocemos, nos concentramos tanto en decir que oh, todo obra para bien para los que aman a Dios y han sido llamados de acuerdo a Su propósito, siempre decimos esa parte pero el verso comienza diciendo que: esto es lo que conocemos. Tenemos que estar fundados en lo que conocemos que somos pero mucha gente ha decidido correr hacia la incertidumbre de un mundo desconocido, aún la Iglesia ha comenzado a tornarse a una jornada donde la salvación está cerca pero las demandas están lejos.

Eso es lo que Jonás estaba tratando de hacer, él no quería correr de Dios, él quería mantener a su Dios pero quería alejarse de lo que Dios le pedía porque lo que Dios demandaba de él era algo que lo iba a hacer sudar, era algo que él no quería hacer, era algo que él no esperaba. ¿Sabías tú que había un tiempo en la historia donde la gente sabía que la Iglesia era el lugar donde si tenían dificultades y problemas podían venir? Si tú te encontrabas enfermo la gente no pensaba en los hospitales, pensaba en la Iglesia.

La Iglesia era un lugar de refugio, la Iglesia era el lugar que Cristo dijo que íbamos a ser, era la casa de oración y en la Iglesia habían guerreros que activaban efectivamente el Poder de Dios, allí existía la gente que sabía cómo comenzar conversaciones con Dios que terminaban con la manifestación del increíble Poder que hay en nuestro Jesús, la misericordia y la Gracia de Dios era como una fuente que se abría con las oraciones de los santos pero ¿qué ha sucedido? que hoy en día la Iglesia si tú miras está siendo criticada, está siendo atacada, no es un lugar presentado como un lugar donde podemos ir para hacerla nuestro refugio.

Yo creo que podemos echarle la culpa a muchas diferentes cosas pero es importante que entendamos que nosotras como el Cuerpo de Cristo hemos permitido que muchos de nuestros propios deseos entren a lo que es la Iglesia, hemos permitido que nuestro yo se ponga entre lo que es la Iglesia de verdad y lo que el mundo está viendo, y lo que sucede cuando la Tierra se pone entre medio del sol que es Jesús y la luna que es la Iglesia que se supone que tiene que dar luz en medio de las tinieblas. Cuando el yo que es la Tierra y mis deseos carnales se pone entre medio del sol y la luna, ahí es donde se causa un eclipse lunar donde hay obscuridad en todo lugar, por eso nosotras tenemos que asegurarnos que estamos fundadas sobre lo que en verdad somos, somos la luna y no reflejamos nuestra propia luz.

La luna refleja la luz de Cristo, la luz del sol es lo que vemos en la luna y no podemos permitir que el yo se meta en medio de ello. Jonás estaba reflejando la luz hasta que llegó algo que no parecía ya gustarle más, y lo segundo que creo que tenemos que despertar y ver es que tenemos que despertar y ver que nuestras prioridades tienen que cambiar, primero tenemos que despertar y ver que somos la Iglesia.

Lo lindo es ver que aunque haya un eclipse lunar el sol todavía es el sol, la luna todavía es la luna, la tierra todavía es la tierra, nuestro propósito todavía está, simplemente tenemos que ubicarnos donde tenemos que estar y podemos comenzar a hacer eso si despertamos y vemos que nuestras prioridades tienen que cambiar.

Fue el Dios de la tormenta que vino a demostrarle a Jonás que su fe estaba inestable y que sus prioridades estaban desordenadas. En algún momento en la vida de Jonás el profeta que vivía al servicio de Dios a lo mejor sin darse cuenta, Jonás terminó poniéndose a sí mismo como prioridad, los deseos de él comenzaron a ser más importantes que los deseos de Dios, pero desde el principio de la fundación del mundo Dios creó una separación entre el cielo y la tierra.

Hay un debate teológico muy grande sobre lo que sucedió en el verso 1 y el verso 2 del Génesis porque la Biblia dice que Dios creó todo en orden y de repente todo estaba desmoronado como decimos los puertorriqueños, estaba vacío, estaba sin forma, y no sé exactamente la respuesta, yo no vine a decirte que tengo la respuesta porque no la tengo y a lo mejor no lo vamos a saber hasta que lleguemos al cielo, y la verdad que eso no me importa tanto, lo que me importa es que suena a que hubo una tormenta que intercambió las cosas, vino y sacó las cosas de su lugar, las desordenó y cuando las cosas están desornenadas o pasa una tormenta después tú las ves y están como que casi no se pueden reconocer.

En el Génesis dice que la oscuridad que se suponía que habitara en la profundidad de la mar ahora está en la superficie de la mar, en otras palabras esas cosas estaban al revés. Dios había creado algo perfecto y bello pero ahora está al revés así como estaba Jonás, así como estamos algunas de nosotras que estamos al revés que casi ni nos reconocemos a nosotras mismas, no podemos ni siquiera señalar exactamente el punto donde las cosas comenzaron a cambiar, pero sabemos que no estamos alineadas ¿y cómo lo sabemos? porque no estamos siendo la luna que refleja la luz del sol, no estamos en un lugar donde la gente me puede mirar como miraban a Ana y decir: esa luz me está dejando saber que yo puedo brillar también.

Los sentimientos personales de Jonás hacia Nínive tuvieron mas prioridad que los deseos de Dios para esa ciudad pero eso es fácil, si no te gusta lo que quiere Dios pues vete para otro lugar y eso es lo que dijo Jonás, en ese tiempo ese era el fin del mundo, él quería irse ya para donde Dios no me pueda ni tocar decía él, pero si tú eres como yo, a mí me encanta viajar, y yo he ido a cruceros anteriormente, y cuando uno tiene que ir a un crucero tú comienzas a empacar tu maleta ¿verdad? y yo por lo menos necesito 15 pares de zapatos cuando voy a un crucero, y yo empiezo a empacar, pero cuando tú empacas, estás guardando toda tu ropa y haciendo tú no te puedes llevar el clóset completo, tú no te puedes llevar todos tus productos de belleza porque hoy en día necesitas 20 para hacer una cara normal (risas), y no te puedes llevar todos los lujos que tú tienes en casa, todas tus cosas preferidas no te las puedes llevar contigo.

Entonces tú comienzas a guardar tus cosas y cuando terminas ves: yo no puedo cerrar esta maleta y no me puedo llevar siete maletas, so yo empiezo a comparar las cosas y mirar a ver qué es lo más importante, y tú dices: mira yo pensé que podía llevarme esto y yo puedo vivir sin esto una semana así que yo la cambio y pongo otra cosa, así que cuando la maleta llega a la barca ya ha pasado por un proceso de escoger por prioridades y decir que lo que tú te estás llevando eso es lo más importante para el viaje que tú tienes.

Me imagino que todos los marineros en la barca que estaban con Jonás hicieron ese mismo proceso y dijeron: esto es lo más importante que va en la barca conmigo; pero cuando se levanta la tormenta y los vientos comienzan a soplar, y tú estás en medio de la barca los vientos comienzan a cambiar tus prioridades, porque la verdad es que la única manera de ayudar a la barca a sobrevivir es comenzar a echar las cosas que tú pusistes en la barca que dijistes que eran tan importantes, de repente te das cuenta que no necesitas tacos para nadar, que esa camisetita tan linda que tú tenías tú la intercambias rápido por ese bálsamo anaranjado que ni te pega con el pelo ni con nada tú rápido lo cambias, porque en el momento donde llega la tormenta uno comienza a evaluar y la cosa es que nosotras tenemos que saber que hemos estado cargando con pesos que no son tan importantes, hemos dado prioridades a cosas que no nos ayudan a actuar como lo que somos, la Iglesia de Cristo.

Por un momento en el tiempo Jonás creía que había encontrado su descanso en esa barca pero yo quiero que tú sepas en esta mañana que aún si te sientes calmadita con todas tus posesiones Dios siempre tiene un plan para que nosotras podamos llegar a las prioridades que nosotras tenemos para nuestras vidas y muy a menudo eso incluye una tormenta. Algunas de nosotras tenemos que evaluar y echar a la mar cosas que no debemos estar cargando.

Algunas nos hemos estado quejando de las tormentas en nuestras vidas pero Dios las envió para que tú te hagas una pregunta, la pregunta es: ¿cuánto en verdad yo necesito esto? ¿necesito esto para cumplir mi propósito o el valor de esto me va a hacer que si me aferro me hundo? Nuestras prioridades tienen que cambiar Iglesia, tenemos que concentrarnos en los valores que la Palabra dice que nos define como la Iglesia, tenemos que despertar y ver: somos la Iglesia de Cristo, tenemos que estar orgullosas de saber que somos la Iglesia de Cristo, tenemos que despertar y ver que nuestras prioridades tienen que cambiar.

Y por tercero despertar y ver que nuestro Dios es el Dios de la tormenta. Muy a menudo la Biblia nos enseña que el enemigo viene a robar, matar y destruir, y la tormenta cuando viene lo que hace es un desorden y trae desorden, trae muerte y destruye, y nosotras rápido le echamos la culpa al enemigo, le echamos la culpa al diablo por todo, el pobre diablo a veces me da pena (risas), porque él dice: yo ni pasé por allí y todo el mundo echándole la culpa al diablo.

Hoy tú necesitas saber que ese Dios lindo al que tú le estabas cantando que estaba entronado Él no solamente habla autoridad a tu vida pero los vientos y la mar también lo tienen que escuchar y Él es el Dios de la tormenta, y Él usa la tormenta para mostrar Su Poder y control sobre todas las cosas, las cosas a nuestra vista parecen estar fuera de control, pero Dios siempre está en control, Él es el que muestra Su Poder y autoridad.

En Génesis cuando se habla de que la Tierra estaba desordenada lo que me impactó a mí sobre el versículo 2 es que aunque no conocemos qué fue lo que causó el desorden y puede ser que mucha gente, mucha gente dice que puede ser el demonio y eso pero yo creo que Dios es el que tiene el control sobre todas las cosas, porque dice que aunque la oscuridad estaba sobre la faz de la mar, aún cuando las cosas estaban al revés el Espíritu de Dios se movía sobre las aguas porque los vientos pueden venir, las olas pueden atacarte y pueden mover todas las cosas pero tu Dios es un Dios inmovible, a tu Dios nada lo puede mover si Él no se quiere mover.

La verdad es que Dios es el Dios de la tormenta, por eso en las buenas yo le doy gloria y cuando vienen las malas yo le doy gloria porque Él es el Dios de la tormenta, así como es el Dios de los días soleados, en medio de esa tormenta Él las permite para mostrarnos verdades sobre nosotros mismos. Si la tormenta no llegara no conoceríamos cuáles son las cosas inmovibles y cuáles son las cosas que rápidamente se mueve, no sabemos cuáles son las cosas que pueden ser manipuladas por una tormenta y cuáles son las cosas eternas en nosotros, sin una tormenta no vas a saber si estás sobre la arena o sobre una roca, pero gracias a Dios por esas tormentas que no vienen para ahogarnos, vienen para dejarnos saber que hay un Dios misericordioso que está pendiente de cada una de nosotras y Él está dispuesto a rescatarnos y a hacernos darnos cuenta de la condición en la que estamos de verdad.

Dios en las Escrituras ha establecido que hay propósitos en la tormenta, con Noé Él reveló que Él puede usar una tormenta para separar la justicia del pecado. En Pedro Él pudo revelar que la realidad de la fe de Pedro, porque Pedro creía que ya había madurado todo lo que tenía que madurar en la fe, pero Dios le quiso enseñar a Pedro que sólo se necesita un poco de fe para que Dios sea glorificado. Jesús usó una tormenta para revelar la paz que trasciende todo entendimiento y con Pablo Él causó una tormenta para revelar su fidelidad, porque Pablo era un creyente en medio de muchos incrédulos y cuando él hablaba la Palabra de Dios nadie estaba escuchando pero cuando Dios envió una tormenta, todo el mundo quería saber de Pablo y todos salieron de ese lugar salvos.

Con Jonás Dios envió la tormenta para mostrarnos y revelar que Dios puede retornar la fe a aquéllos que la han perdido. Esta historia no es para que critiquemos a Jonás, esta historia es para que veamos el buen pastor, que cuando queramos irnos del redil Dios usa hasta a las tormentas para retornarnos al lugar donde tenemos que estar, donde Él nos cuida, donde Él nos sana, donde Él nos llena de gozo, Él nos llena de Su paz porque Él es el buen pastor, tenemos que despertar y ver que Dios es el Dios de la tormenta. ¿Cuántos pueden darle gloria a Dios por la tormenta presente que está en tu vida?

Y por último tenemos que despertar y ver que este mundo está desesperadamente pidiendo oración. Yo sé que dices: oh, no, no eso no es aquí en América porque la gente ya no quiere orar, están sacando la oración de todos los lugares, ¿sabías tú que tus buenas y malas decisiones afectan a otros?

Somos llamados a ser salvavidas, pescadores de hombres, entonces cuando nosotras caminamos fuera de la Voluntad de Dios y del llamado de Dios no solamente estamos poniendo nuestra vida en riesgo, estamos poniendo la vida de otros en riesgo porque somos llamados para ir y salvar a otros.

Jonás cuando se paró en esa barca puso sus pies sobre la barca, en ese momento fue cuando él puso en acción esa tormenta, pero esa tormenta no lo iba a afectar a él solamente, iba a afectar a todos los que estaban con él en esa barca, por eso tenemos que tener cuidado cuando tomamos decisiones basadas en nuestras emociones.

Los marineros en ese lugar tenían temor de esa tormenta, ellos no eran marineros nuevos, ellos sabían lo que era ser un marinero en medio de una tormenta y tenían experiencia de qué hacer en medio de una tormenta, pero aún en medio de esa tormenta ellos pudieron discernir que esa tormenta no era una tormenta normal, hay algo diferente en esa tormenta, hay algo como que la matemática no está resultando bien, por eso ellos comenzaron a clamar a sus dioses y a orar, y cuando nadie respondía ellos dicen: esto no es normal y la culpa es de alguien aquí.

Ellos sabían que eso no tenía nada que ver con lo que estaba pasando afuera, tenía que ver con todo lo que estaba pasando dentro de la barca y comenzaron a decir: ¿quién tiene la culpa? Y cuando encontraron a Jonás estaba dormido no con el mismo sueño que tuvo Jesús porque Jesús dormía con la paz de que todo estaba bien, Jonás estaba dormido porque se tomó una pastillita para no saber qué es lo que estaba pasando con el mundo alrededor, y yo entiendo que necesitamos nuestros doctores y medicaciones pero hoy yo vengo a hablar en contra del espíritu de la depresión y de médicos que siguen haciendo a personas adictos para que se duerman a través de la vida, y Dios no te llamó a dormir a través de esta vida, Él quiere que estés despierta porque tiene vida y vida en abundancia para ti mujer.

Jonás quería olvidarse de su mundo y cuando los marineros lo encontraron, oh wow lo que dijeron debiera chocar a cada uno de nuestros corazones. Las preguntas que le hicieron las escucho el día de hoy, suenan diferente, es más, suenan como acusaciones; por eso nos miran y nos critican como Iglesia, pero nosotros tenemos que entender que la razón por la que están mirándonos y echándonos críticas es porque saben que tenemos las respuestas y no hay nada más frustrante que ver a algo que ha sido llamado a ser luz escondiéndose debajo de la mesa, tenemos un templo precioso pero no es para esconder la luz aquí, y ya ustedes vagan por todas estas luces bellas para que alumbren, pero hay un mundo de oscuridad que necesita que tú vayas y lo alumbres.

Y cuando el capitán le dice: ¿cómo es que tú puedes dormir? ¿cómo es que tú no te das cuenta lo que está sucediendo alrededor? Todo este terrorismo, toda esta violencia, todas esas cosas que están sucediendo ¿qué puedes hacer tú, qué puedo hacer yo? La Biblia dice que el amor es la respuesta, el amor de Dios nunca falla contra el terrorismo, el terrorismo no es más grande que el amor de Dios, la violencia no es más grande que el amor de Dios, tenemos la respuesta.

Y el capitán dice: ¿cómo es que tú puedes dormir? y el inconverso le da la respuesta a la Iglesia de cómo nosotros podemos sobrellevar esto, le dice: levántate y clama a tu Dios, despierta y clama a tu Dios, despierta mujer y clama a tu Dios. Yo ví un anuncio que decía que las mujeres iban a orar, es tiempo de despertar y clamar a nuestro Dios, los políticos no encuentran la respuesta, el mundo no encuentra la respuesta porque la respuesta está en que nosotras clamemos a nuestro Dios.

Dice: puede ser que si tú clamas Dios toma nota de nosotros y no perecemos. Toda esa violencia es un mundo tratando de llorar y decir: si tú clamas puede ser que Dios me rescate a mí también, porque nadie quiere morir, todos queremos vivir, pero si tú clamas puede ser que tu Dios tenga misericordia de otros.

La Iglesia es la mejor institución que hay en la faz de la Tierra, nosotros vivimos en contra del pecado, nosotros servimos al Dios que es el único que puede deshacerse del pecado pero no nos podemos volver un gigante durmiente, tenemos que levantarnos, ¿cómo podemos dormir en este tiempo? Es tiempo de despertar y ver que tenemos que clamar a Dios que tiene todas las respuestas para los tiempos en los que vivimos.

Después le dice: ¿quién es responsable por hacer todo este problema para nosotros? Y le preguntas a la Iglesia y la Iglesia te señala a tantos diferentes puntos en la historia y la gente, y que si esto, que si lo otro pero yo creo que es tiempo que la Iglesia tome ese dedo y se lo torne así (apuntándose a sí misma), ¿en qué hemos sido responsables, qué es lo que hemos hecho para dejar de hacerlo? Tenemos que dejar de hacer ciertas cosas para que el sol sea sol y nosotras seamos la luna.

Le preguntaron ¿de qué parentela tú eres? ¿saben por qué? porque a veces nos tenemos que enfrentar con una pregunta ¿de dónde tú eres? para que nos recordemos quiénes somos. Yo sé que Dios escogió que el capitán le haga esas preguntas a Jonás para que nosotras en este día podamos tener la iluminación de que Él es el que estaba preguntando a través del capitán estas cosas y las preguntas no las hizo porque las respuesta no las sabían, las preguntas nacieron porque Jonás se olvidó y decidió dormirse en un tiempo donde Dios quería salvar.

Hazte la pregunta: tu Dios ¿todavía está buscando restaurar y salvar? Tu Dios ¿quiere usarte a ti para restaurar y salvar? Tenemos que despertar y ver que somos la Iglesia de Cristo, pedirle a Dios que nos ayude a cambiar nuestras prioridades, entender que Dios es el Dios de mi tormenta y despertar, y ver que el mundo desesperadamente está pidiendo la oración.

Hay gente que dice que el avivamiento que ha sido prometido por muchos años a Nueva Inglaterra que nunca va a suceder aquí, porque la gente especialmente la gente de Boston son muy intelectuales, ustedes son demasiado intelectuales, ustedes tratan de entender a Dios con tanto detalle que se lo pierden, las escuelas I believes comenzaron con la fundación de Dios pero al tratar de entenderlo al final dijeron: parece que no hay Dios y ya la gente ha comenzado a decir que en Su avivamiento no va a pasar por aquí, porque ustedes no parecen gente que van a causar un avivamiento.

Y mientras alguien muy inteligente en su inteligencia y en su astucia me estaba tratando de explicar por qué Dios no va a traer un avivamiento a Nueva Inglaterra mientras él hablaba yo me empecé a emocionar, y él me estaba mirando y yo decía: oh my God, oh my God, y él me decía: es que como, tú sabes, tengo tanta mucha más inteligencia que tú, déjame ponerlo en palabras que tú puedas entender, entre más él decía yo: ay, no podía yo enojarme con su ignorancia, porque él no conocía lo que estaba pasando en mí, mientras él decía esas palabras yo recordaba que Él siempre se aparece en los lugares que menos esperamos, y yo decía: wow Él está confirmando que Dios en verdad va a cumplir Sus promesas, y yo lo espero; pero para que el avivamiento llegue tenemos que despertar, tenemos que despertar y ver, el avivamiento no sucede con sonámbulos.

Dios en esta mañana Dios me envió simplemente para ser tu alarma, y aquéllas que no les gusta la alarma (sonido de golpear la alarma) pero Dios quiere despertarnos y ver, nos hemos metido tanto en lo que no queremos hacer y en lo que las tormentas nos han causado que nos hemos perdido el enfoque real, y yo sé que vine en un día en que el corazón está un poco pesado, pero creo que esta Palabra es muy apropiada porque el dolor no puede quitarte el enfoque de lo que Dios ha querido hacer, de lo que la hermana Ana fue fiel en hacer.

Nosotras somos llamadas para ser la luz y tenemos que despertar a esa luz para que alumbremos donde quiera, para que Dios pueda lograr en cada una de nosotras que nos convirtamos en esa luz que salva a otras, porque la gracia no es sola para mí, la gracia llega a mí para que yo dé gratuitamente lo que yo he recibido. ¿Cuántas en esta mañana están listas para abrir sus ojos?

Ahí donde tú estás cierra tus ojos. Si en esta mañana, yo voy a orar por estos cuatro grupos y tú puedes, si tú no te has sentido como la Iglesia de Cristo, si tú nunca has conocido y has aceptado a Cristo como tu Señor y Salvador yo te voy a invitar a que vengas adelante en esta mañana, yo voy a orar contigo. Si mientras estaba hablando más temprano tú te diste cuenta que tus prioridades no están en su lugar, que hay ciertas maletas que tú tienes que echar del barco, no es fácil hacerlo, no es fácil decirle adiós a las cosas que tú pensabas que eran importantes, pero si esa eres tú queremos orar por tu vida en esta mañana, si tú eres aquélla que has estado echándole la culpa al diablo por la tormenta que Dios ha traído para traer tu atención a cosas importantes yo quiero orar contigo.

Y si tú eres esa persona que se ha dado de cuenta que el mundo sí quiere escuchar de Cristo, porque la mentira más grande que el enemigo tiene ahora es que la gente no quiere escuchar de Dios, por eso cuando llega la tormenta lo primero que hacen es: claman, claman, claman, en verdad ese vacío nunca se va, existe en cada creación, las huellas digitales de Dios están en cada una de nosotras, pero también están a través del mundo y esas huellas dejan un vacío si tú no tienes a Dios, que Dios nos dé la gracia para alcanzar a aquéllos que niegan querer conocer a Dios, esas son las oraciones que haremos en esta mañana, si esa eres tú, ven rápido al altar a orar.

Yo no sé si hay, quiénes son las ministras de la casa que nos ayuden a ministrar a las mujeres mientras vienen pero, mi oración es que entre todas las cosas que hemos aprendido hoy, este es el primer capítulo de una serie que estoy escribiendo sobre: la oración camina (prayer walks) porque creo que la gente que cree en Dios debe hablar con Él, y en la Iglesia uno de los errores ha sido que la gente se ha creído que la oración es opcional, pero nosotras dependemos de nuestras conversaciones con Dios, y esas oraciones nos van a ayudar a activar el poder efectivo de la oración, y por eso la oración es muy importante, no la tomemos en poco.

Si habrá alguien en esta mañana vamos a orar, si no hacemos una oración general. Levanta tus manos donde estás: Señor yo te doy gracias por estas mujeres, Señor Tú nos conoces y así como Jonás Tú nos persigues. Señor desde aquí hasta el asiento donde están o hasta donde se han ido sus mentes, la distancia Tú la puedes medir y tú las puedes alcanzar en cada lugar donde ellas están, Tú conoces sus necesidades, Tú conoces el destino que Tú tienes para cada una de estas mujeres.

Señor te damos gracias por no rendirte de cada una de nosotras, te damos gracias porque nuestros caprichos nos pueden desviar pero no nos pueden robar el destino que Tú tienes para cada una de nosotras porque Tú nos retornas a Tu Voluntad, Tú nos persigues Señor con Tus propósitos.

Yo te pido que en esta mañana estas mujeres puedan despertar y ver que Tú has querido llamar su atención, Tú las estás llamando a clamar a Tu Nombre porque hay un mundo que está recibiendo tormentas a causa de las decisiones que hemos tomado. Señor no podemos olvidarnos del Dios de la tormenta en estos tiempos, Señor que podamos despertar y clamar, y no solamente clamar por nuestra salvación pero Señor, que todos aquéllos que están atemorizados por lo que está sucediendo a nuestro alrededor puedan encontrar la salvación a través de estos pasos en este lugar, úsalas Señor para Tu gloria, Señor úsalas para que este lugar esté repleto de almas nuevas, Señor que dos cultos no sean suficientes, Señor que vengan como multitudes a Tu Casa conociendo que esta es la casa de oración, aquí hay poder, aquí hay respuestas, aquí hay sanidad, aquí hay libertad, está aquí y está en ellas mientras ellas caminan este mundo, ayúdalas a resistir la tentación de huír y mantenerse firmes Señor en Tu Palabra, gracias Padre, te bendecimos en el Nombre de Jesús, te bendecimos por estas mujeres Señor y te damos gracias.

Entrega completa

Transcripción

Vamos a la Palabra, el tema de hoy es "Entrega Completa" y lo trae Valerie González. Ella pastorea junto a su esposo Gerson González en dos lugares, no en uno sino en dos lugares imagínense eso en el Centro de Adoración Calvario en Woonsocket - Rhode Island y en la Congregación Cristo Rey en Dorchester - Massachussets aquí muy cerca de nosotros.

Algo que caracteriza a Valerie es que es dinámica en todos los sentidos, Dios la ha dotado de muchísimos dones; no solamente predica con la unción del Señor y con entendimiento sino también tiene dones de canto, de actuación, de planificación y sigue añadiendo tiene muchos otros dones. Además es una excelente esposa, la mamá de dos teenagers ¿verdad? pre-teens, distribuye su tiempo en muchas actividades y es una mujer apasionada por ministrar a la mujer como lo somos todas nosotras también. Así que vamos a recibir a Valerie con un caluroso aplauso.

Valerie: Bendecidas. Tengo que decirles que mientras estaba ahí en adoración tuve un momento ¡argh! y yo no soy, bueno tengo que decir: antes no era tan llorona, ahora después de que conocí a Meche (risas) y les explico en un minuto porque lo digo así. Este, tuve un momento donde miré alrededor y sabiendo que el tema es Entrega Completa, hemos estudiado ese tema a través de las hijas Condesino que allá simplemente decimos hijas porque hemos cruzado con muchos americanos y vienen y siempre se les hace un poco difícil, pues lo que nos une a todos es que somos todas hijas.

No importa cuál es tu pasado, no importa cuál es tu futuro si tú eres mujer aquí en la Tierra tú tienes que ser una hija pero lo que nos une a nosotras en nuestra sangre y en nuestro espíritu es que somos hijas del mismo Padre. Y cuando yo llegué a la ciudad o al área de Nueva Inglaterra yo vine porque me casé con mi esposo Gerson González un hombre muy guapo gracias a Dios por sus beneficios, considera todos nuestros deseos y bueno, al casarnos nos casamos con la mentalidad que muchos tienen que el matrimonio tan perfecto, todo va a estar, todo lo que está quebrado se arregla cuando tú te casas ¿verdad?

Pero nos encontramos en momentos muy difíciles y para mí es muy especial hablar este tema acá porque yo sé que parte de mi experiencia como mujer, como Pastora; yo no era Pastora cuando yo primero caminé por esas puertas pero era una mujer que necesitaba entregarse, era una mujer que creía que todo lo tenía en su lugar, en orden porque desde joven he vivido sola tengo tremendos padres pero mis padres decidieron mudarse y llevarse mi casa con ellos para Florida y yo no me quería ir y estaba en la ciudad de Pennsylvania y tuve que aprender a vivir sola, y uno cuando joven se pone a vivir sola se cree que entonces todo lo puede y todo lo puede poner en control y no hay necesidad de entregarlo porque: Dios no te preocupes ¿no? yo a Ti te voy a dar el día libre porque yo hoy tengo todo en control.

Y tomamos esa actitud de que en verdad no tenemos que rendir y es importante no solamente concentrarnos en la palabra entrega pero es una entrega completa, no podemos quedarnos con nada tenemos que rendir lo bueno, lo malo tenemos que totalmente derramarlo ante la Presencia de Dios porque a veces aún lo bueno y que creemos que es tan bueno nos enteramos que no es tan bueno como lo bueno que Dios en verdad nos quiere dar y por quedarnos con ello nos perdemos lo en verdad bueno, no sé si entendieron eso pero yo lo he vivido y lo entiendo muy bien.

Pero en un momento de un corazón quebrantado, en un momento de que la naturaleza mía lo que quiere hacer es pelear para atrás, cuando uno es herido, cuando uno es maltratado y cuando uno encuentra que es injusto uno quiere; yo nací en Brooklyn y yo soy chiquita pero brava you know? y a mi esposo yo le decía a él desde el principio porque nosotros avisamos antes de que suceda para que todo esté clarísimo, yo le decía: número uno, esto no es juego de béisbol, a ti no te dan tres strikes y estás out, uno y ya tú estás fuera ok? 'tá avisado ¿verdad?

Y número dos, si tú pones tus manos sobre mí que no sea para hacerme una caricia o amor tú eres mucho más grande que yo, tú puedes más que yo pero al fin de esto va a haber un área de tu cuerpo que va a decir: Valeria estuvo aquí. Y esa era mi manera de pensar, mi manera de vivir, yo peleando por lo mío queriendo más y sabiendo que lo podía lograr pero cuando llegué a un momento en mi matrimonio en que las cosas no estaban como debían estar por causa del esfuerzo que había puesto el Señor me trajo a estar puertas; ahí conocimos al Pastor Miranda y su Pastora Meche.

Y recuerdo una de nuestras primeras conversaciones. Ella comenzó porque en las conversaciones que ellos estaban teniendo con mi esposo no me estaban gustando mucho porque estaban hablando mucho de la Gracia, mucho del amor de esas cosas cuando lo que él lo que necesitaba era una buena "salpiza" para que despertara y decía: Señor si Tú quieres yo te ayudo, en esta sí pero no, todo mundo hablando de Gracia y que si esto y yo: ¿cómo ese hombre se va a arreglar si no le dicen en verdad cómo él tiene que vivir?

Y después cuando finalmente tengo tiempo para sentarme con su Pastora, ella yo sé que me va a entender ella es mujer y ella va a tomar finalmente alguien mi lado y cuando ella comienza a hablarme de la compasión ¿qué, ahora yo también tengo que sentarme a escuchar de la compasión? pero lo que me enseñaron fue cómo entregarme, cómo rendirme. Ella me enseñó a pelear sin palabras, ella me enseñó a pelear con acciones, a pelear con amor, a pelear con gracia porque el amor de Dios puede mucho más que lo que nosotros podemos.

Yo no sé cuál es la circunstancia que tú estás enfrentando en esta mañana y por qué razón el Señor trajo este tema de Entrega Completa pero yo quiero decirte de una experiencia personal que los momentos ahora en los cuales yo vivo las cosas no están perfectas pero en este rendimiento, en esta entrega total yo sé que todo va a estar bien; tengo una paz que nunca había tenido, tengo una seguridad que nunca había tenido y cuando las cosas y aún este año en entrega completa el médico viene a decirme: ay Pastora usted tiene tal y tal y tal y yo: oh sí bien ok y él me dice: no es que tú no entiendes y me diagnosticaron con esclerosis múltiple.

"Es que tú no entiendes" no yo sí entiendo pero más que entender esta enfermedad yo entiendo que Dios me dijo que si yo me entrego Él está en control. Yo entiendo que ya yo no tengo que seguirle dando crédito al enemigo por cosas que él no está a lo mejor en la misma ciudad ni en el mismo vecindario y nosotras echándole la culpa sin saber que es que Dios está tratando de llevarnos a un momento donde estamos de rodillas completamente entregadas a Él.

Y lo que pasemos lo pasamos en esta vida porque tenemos que vivir en este mundo pero Dios quiere mostrar al mundo cómo Sus hijas pueden caminar a través de este mundo, pasar por lo que pasan otros pero no es la misma experiencia porque años antes de que tú llegaras aquí, años antes de que hijas con destino pudieran existir Dios había levantado un Ministerio de mujeres edificando destinos porque si no hay destinos edificados no pueden haber hijas con destino.

Para que tú puedas ver cómo la Pastora habla y dice que estamos: sí estamos enlazadas, esto se trata de un cuerpo. Hablamos este año de entrega completa pero ¿sabes dónde estamos entregadas? en Sus Manos, estamos enlazadas cuando vivimos a través del Espíritu ¿no es una experiencia totalmente diferente la que tú tienes conmigo? estamos en una jornada juntas donde Dios al fin de todo lo único que quiere comprobar es que somos Suyas. Estamos en Sus Manos, Él nos protege, Él nos ama, Él nos cuida, Él nos perdona, Él nos restaura que todo lo que necesitamos esté en Él. Aleluya.

Y por eso yo vivo una vida tratando de encontrar en todo a Dios. Aún ¿ustedes ven la pulserita ésta? esta pulserita nace del mensaje que queremos que nosotras las mujeres podamos entender. El número 7 es el número de perfección, es el número de plenitud, el círculo, la semana es completa en el número 7; pues aquí cada piedrita hay 7 de cada una porque estamos entregadas completamente. Las vasijas significan: nosotras somos cada una de esas vasijas y yo me entrego completamente 7 veces, estoy completamente entregada a Él.

El rojo es: yo estoy completamente amada, el púrpura es: yo estoy completamente apoderada, el claro así es: yo estoy perdonada porque Él toma mis pecados y los hace tan claritos que cuando yo miro mi pecado yo no puedo ver el pecado si no veo la Gracia de Dios, yo veo cómo Él me pudo lavar y cambiar y limpiar; la mujer que soy hoy no se llevaría con la mujer de veinte años atrás porque no eran pero Dios nos ha llevado a través de una jornada y es una entrega constante.

Porque no es entregarnos por este momento, no es entregarnos por este sábado sino hacer una decisión: Señor yo estoy entregada a Ti completamente, mi cuerpo, mi espíritu están completamente entregados a Ti, que cuando se levantan mis emociones y dicen: hoy no quiero alabarte ya no tienen otro remedio porque hay una ley en mi vida que dice: yo estoy entregada y yo vivo de acuerdo a la ley del Espíritu y no de acuerdo a la ley de la carne.

En esta mañana quiero traerle un pensamiento sobre una historia que este año me ha estado ministrando a través de todo el año. Mientras hablamos de Entrega Completa voy a estar hablando acerca de una historia que se encuentra en Segunda de Reyes capítulo 4, una historia bastante conocida y yo creo que en esta mañana si puedo tratar de ver el propósito mayor, yo sé que Dios siempre tiene múltiples propósitos, Él hace con una cosa, Él es tan. Él nos dice: sean fructíferas, multipliquen pero Él no nos dice que hagamos algo que Él no puede hacer así que en Sus planes a veces creemos: oh esto es lo que Dios quería hacer y después hablamos con otras hermanas y vemos que la misma Palabra ha causado multiplicación en diferentes áreas porque todas nuestras necesidades en esta mañana serán saciadas.

Aunque son diferentes todas las necesidades serán saciadas y quiero ir aún más a que este es un preámbulo a las necesidades que serán saciadas Noviembre 9. Yo creo que Dios me trajo aquí para inspirarte a ti mujer para que no pienses este año solamente en ti sino que comiences a pensar o que hagas que tu necesidad te cause causar un milagro aún mayor de lo que tú estabas esperando. Tenemos que dejar de pedir y pensar que Dios solamente nos cuide y sacie hasta nuestra necesidad pero tenemos que entender que servimos un Dios que no te va a pedir una entrega completa sin Él tener el deseo de entregarse completo.

Y cuando por eso decimos: cambiaré mi tristeza porque si tú tomas lo que tú tienes y tú lo vacías ante la Presencia de Dios Dios se siente tan motivado para llenarte con algo mejor, algo mayor; nunca te va a dejar vacía, nunca te va a dejar en falta sino que te va a llenar hasta que sobreabunde y aquí hay una historia sobre la sobreabundancia y yo no sé de ti pero yo quiero y estoy viviendo este momento de sobreabundancia en mi vida.

Pero no toda abundancia comienza con un momento de abundancia sino que dice aquí que esta mujer en Segunda de Reyes capítulo 4 dice que: "Había una mujer de las mujeres de los hijos de los profetas y ella clamó a Eliseo" ella fue al profeta, ella fue al lugar donde sabía que iba a recibir no palabra de hombre sino Palabra de Dios. Es importante que en tu necesidad tú dejes de buscar recursos que no tienen nada que ver con lo que Dios dice para tu vida sino tú tienes que ser sabia e ir al lugar donde tú sabes que Dios va a hablar, donde está la portavoz de Dios.

Tenemos que dejar de escuchar lo que dice la sociedad, lo que dicen todos a través de tu condición sino busca la Palabra de Dios, busca dónde es que tú sabes que Dios te va a hablar. Y esta mujer fue a este lugar y le dice: "Tu siervo, mi marido" ella lo conoce íntimamente, ella no está hablando de alguien que ella no conoce. Ella dice: él era tu siervo pero él era mi marido yo lo conocía con intimidad y él era hombre temeroso de Dios, ella le dice ya ha muerto aleluya.

Y ella le dice: "Y han venido los acreedores para tomarse mis dos hijos, para llevarse a mis dos hijos." Lo que ella tenía es que perdió a su marido y en esos días las mujeres eran sostenidas básicamente por los hombres; tú eras, tu estado en la sociedad tenía que ver con quién estabas casada, eso todo tenía que ver con generación y esta mujer estaba sintiendo que ella estaba a punto de perder quien ella es porque ella sabe que ella no es solamente hija de los profetas pero ella es esposa del siervo del profeta y ella tiene hijos que están para continuar con una herencia pero ahora al su esposo morir hubo algo, una deuda del pasado algo que debe haber estado en el ayer pero ese ayer ahora se ha aparecido en el hoy y quiere robarle su futuro.

No estaba allí simplemente para robarle un día pero quería llevarse a sus hijos y ella fue al Señor y ella dijo: yo sé como yo he vivido con profetas, yo he vivido con siervos de Dios yo entiendo que el plan de Dios para mí no está sin futuro, yo sé que Dios tiene un futuro, un destino para mí y mi futuro y mi destino está en Sus Manos pues yo no puedo ir a ningún otro lugar sino a Sus Manos para que Dios me de Palabra a mí y me enseñe cómo yo voy a llegar a ese destino.

Ella se presentó como hija "yo soy hija de los profetas" y me gusta la respuesta del profeta, el profeta le dice: ¿y qué voy yo a hacer por ti, qué haré yo por ti? A veces nos presentamos ante Dios con nuestras quejas y decimos: Señor este es el problema y esto es aquéllo pero no tenemos ni definido en nuestra mente qué es lo que deseamos en verdad de Dios. A veces he conocido mujeres que están tan aferradas a su dolor que ellas vienen llorando ante la Presencia de Dios pero no quieren que Dios las sane.

Yo sé que suena ridículo pero hay algunas mujeres que viven su vida y se han dejado ser conocidas por su amargura. Su fama es su amargura, su atención es su amargura. Pues he venido ante Ti oh Dios para que cambies lo que yo soy por lo que Tú me quieres dar pero no me toques el dolor, lo que Tú quieras Señor totalmente entregada pero Tú sabes que esa cicatriz, por lo menos déjame esa cicatriz para yo decirle a la gente lo que yo he pasado.

Y él le dice: "¿Qué voy yo a hacer por ti?" y no dice cuál es la respuesta pero yo creo que Dios tiene que llevarnos a un lugar donde nosotras tenemos que comenzar a pensar ¿qué es lo que yo quiero? y aún si lo que tú deseas no es lo que Dios te quiere dar por lo menos tus intenciones te son reveladas a ti misma porque a veces no nos damos cuenta de nuestras propias intenciones y para poder tener una entrega completa tú tienes que rendir tus intenciones, tú tienes que rendirlo completamente y él le dice: "Declárame lo que está en tu casa."

Yo sé que cuando vamos ante la Presencia de Dios especialmente en momentos de adoración como esta mañana nos perdemos en ese momento espiritual, en ese momento donde la Presencia de Dios es tan poderosa, nos llena tanto, nos lleva a un quinto cielo pero para que Dios trate con nosotras tenemos que volver a bajar y ver lo que está en nuestra casa. Tú no puedes pensar que Dios va a hacer algo aquí que se va a mantener sin que afecte tu casa. Tú tienes que comenzar del lugar donde tú vives, el lugar donde tú estás comprometida, si hay un lugar.

Tu trabajo es temporario. Tu trabajo cualquier cosa puede hacer pero después del trabajo tú puedes perder el trabajo y ¿para dónde vas a regresar? a tu casa a donde tú vives y todas vamos a regresar y ahí el Señor tiene que comenzar la obra porque ahí tú te vas a acostar y ahí tú te vas a levantar y para ser totalmente entregada tú tienes que rendir tu despertar y tu acostar. No puedes buscar solamente momentos en tu vida.

Y ella tuvo que pensar: ¿qué es lo que tengo en mi casa? y ella dijo: "Tu sierva no tiene nada en su casa sino una vasija de aceite" y a veces no nos damos de cuenta quiénes de verdad somos. Sí ella entendió que ella era sierva, sí ella entendió que en su casa había aceite pero no entendía el poder del aceite que estaba en su casa, no entendía el poder de la vasija que ya estaba en su casa. Ella tenía en poco lo poco que tenía pero no sabía que el profeta estaba a punto de decirle: tú sabes tú no eres la única que tienes en poco lo que está en tu casa.

Yo quiero que tú vayas donde las vecinas y toques sus puertas y tú te vas a dar cuenta que tú no eres la única que tienes necesidad porque esa mujer no estaba pidiendo la abundancia que había en esos hogares. Él dijo: "Vete y busca vasija vacía" y yo quiero que tú sepas que en tu vecindario, en tu trabajo, en tu escuela hay muchas mujeres que tienen vasijas vacías en su casa y tienen necesidad de ser llenadas del aceite fresco de Dios. Él dice: te voy a mostrar que Yo soy un Dios tan grande que no solamente voy a saciar tu necesidad pero yo voy a saciar la necesidad de cada vasija vacía que esté a tu alrededor.

En Sus Manos no es solamente una conferencia, en Sus Manos es el lugar donde van a traer las vasijas y hacer como dice el profeta, van a cerrar las puertas; van a haber algunas que no van a poder llegar, hay algunas que no van a poder entrar pero las que lleguen a ese lugar hay una promesa: que mientras más vasijas más unción descenderá y no habrá necesidad. El aceite se detuvo cuando se detuvieron las vasijas pero Dios está encargando a este grupo de mujeres a pensar más allá de su necesidad.

Esto no es como los días de hoy que yo me puedo rentar un lujo e ir casa por casa y tomar tu vasija y ponerla en mi carro, después ir a otra casa. Esta mujer tuvo que ir y tocar y agarrar una vasija y después el peso de esa vasija ella la tuvo que llevar a su casa, la depositaba, después salía otra vez porque solamente tiene dos manos y no hay suficiente para todas las vasijas pero hay un esfuerzo, una labor que toma para cuando tú puedes oir la Palabra de Dios y tú puedes creer que Dios en verdad dijo que en ese lugar va a haber unción si en verdad entiendes el poder de la unción que Dios va a derramar en ese lugar tú irías puerta por puerta diciendo: no quiero de tu abundancia pero trae tu necesidad, dame las vasijas vacías porque yo sé dónde serán saciadas, yo sé dónde pueden ser llenas. Hay tanta necesidad a nuestro alrededor.

Me encanta porque cuando hicimos la conferencia de las hijas la semana pasada le pedimos a las mujeres que trajeran vasijas y todas trajeron vasijas y después las pusimos en el altar, estaba el altar lleno de muchas vasijas y si tú vas a una tienda te lo acomodan todo para que todo se vea bien con el color y unos colores aquí, otros así y todas eran de diferentes tamaños de diferentes colores y se veía como que no deben estar en la misma mesa pero la diferencia atraía tanta belleza a ese altar. Todas se veían como que cabían juntas, como que un retrato tan y tan precioso de lo diferente porque las necesidades no todas son iguales pero cuando unimos nuestras necesidades ante la Presencia de Dios lo que antes pensábamos que era necesidad se torna en belleza.

Y podemos dar gracias a Dios por nuestras necesidades porque sin nuestras necesidades no conociéramos la plenitud de Dios, el poder que hay en Dios. Yo sé que ahora no la pueden ver pero yo tengo una misión hoy día. Yo estoy en Boston no solamente para esta conferencia pero algo que aún cuando lo pienso ahora mismo me mueve el corazón. Hablamos de Entrega Completa, de momentos donde debemos de rendirlo todo pero mi pregunta es: hemos llegado al momento donde para estar aquí ¿tú estás dispuesta a arriesgar tu vida? porque eso es Entrega Total.

Y yo sé que suena como algo drástico pero yo pude ver con mis propios ojos a alguien arriesgar su vida porque escuchó la Palabra de Dios. Ahora mismo está en el Bring on the women aquí en Boston, tiene como unos 35 años madre soltera, la diagnosticaron con cáncer. Ella está en un punto donde está tan frágil y tan débil que estaba caminando con un bastón pero ella escuchó que Dios dijo que ahí Él la iba a llenar. Y yo veía a las mujeres viniendo y yo sé que muchas tuvieron muchas dificultades para llegar.

Y nosotras hacemos lo más para tratar de que las mujeres lleguen tanto que, Pastora necesito sentarme con usted a hablar porque creo que necesitamos un plan nuevo, porque como lo hacemos de gratis es un paquete opcional, so tú tienes la opción que si tú quieres comprar el paquete, no tienes la excusa de que dinero es una razón para llegar pero la gente toma ventaja. Cuando ve que: ah es gratis no me tengo que registrar y uno quiere hacer lo mejor para preparar el lugar y las mujeres esperan hasta el último minuto o dicen: pero como no hay un compromiso.

Y hay que hacer compromiso. Tú no puedes entregarte completamente sin tener un compromiso. Esta mujer entregó en su corazón: a mí no me importa que los doctores dicen que yo no tengo que estar allí pero si yo tengo que arriesgar mi vida yo la voy a arriesgar. Y ella se apareció en ese lugar y yo sé que habían otras dificultades pero ella se entregó por completo.

Y yo voy a verla en el hospital y le hemos hecho un cuadro porque el Señor puso, cuando yo la ví a ella me tocó tanto que yo dije: hay mucha gente orando y yo sé que Dios tiene el poder para sanarla y en esta tarde nosotras también vamos a orar pero el Señor me dijo: Yo no las traje aquí para que oren por ella, Yo las traje porque Yo quiero cantar un cántico sobre ella. Y ella en su silla de ruedas la trajimos al frente y vino Ingrid Rosario que estaba con nosotros y es tremenda mujer de Dios y ella comienza a cantar: Él nos ama, cuánto Él nos ama y las danzarinas empiezan con sus abanicos a abanicar a esta mujer y esta mujer si el Señor se la llevara hoy me dice que Dios le dió el momento mejor de su vida en ese lugar.

Porque ella dijo: yo no puedo permitir que nada, tengo que entregarlo todo y tanto fue que yo vine y yo la abracé y yo quise ministrarla y ella comienza a gritarme a mí, a hablar Palabra profética sobre mi vida y yo dije: Señor a veces nos miramos y vemos los que están bien, los que están saludables y están de aquí para allá y decimos: wow eso es entrega completa pero yo veo una mujer que parece frágil, una mujer que parece estar quebrantada, una mujer que parece estar que no debe tener esperanza, una mujer que debe estar llorando, una mujer que debe estar encerrada en su cuarto pero ella dice: yo rehuso ser lo que el cuerpo mío dice que yo debo de ser, yo rehuso ser lo que otros tratan de definir porque yo me entregado completamente a Dios; yo creo en Su Palabra y nada me va a detener de estar en la Presencia de Dios, de estar en Sus Manos.

¿Cuál es tu dificultad en esta mañana? el Señor te ha traído a este lugar simplemente para decirte que tú puedes confiar tu vida en Él, que Él en verdad tiene planes maravillosos para tu vida y aunque Entrega Total no es fácil porque en verdad, cuando yo digo que el Señor nos hace vivir Él nos da temas y en Sus Manos suena tan lindo ¿verdad? suena como un lugar tan cómodo y a Él le gusta jugar con mis emociones porque me da temas que: wow y yo digo esto va a estar tremendo pero entonces tengo que vivir. Tengo que vivir momentos.

Yo no he hablado lo que la Pastora ha pasado este año pero yo sé que para ella estar allí y dirigir y dejarte saber que en Sus Manos es el lugar ella tuvo cosas que vinieron a su vida para tratar de moverla de las manos de Dios pero ella se puede parar hoy y decir: en Sus Manos es el lugar más seguro, en Sus Manos es donde debemos estar. Yo puedo pararme aquí y decir: entrégate completamente.

¿Por qué? porque sabemos que cuando tú te entregas completamente al final de todo sabemos que la última palabra la tiene Dios. Y mientras yo miro en Su Palabra, mientras yo miro en lo que Él ha hecho en mi vida no hay ni una Palabra que Él ha dicho para mal sino todo ha sido para bien así que yo confío en Su Palabra.

Ahora yo estuve todo el año mirando esta historia y tratando de ver a Dios, ver a Dios en todo y yo soy así, el Señor me habla una Palabra y cuando tengo que hacer una decisión de qué es lo que el Señor está diciendo y trato de medirlo porque si no mantengo esa Palabra en mi mente me pierdo. Yo tuve un momento, diría hace como unos seis o siete años atrás donde sentí que mi fe comenzó a flaquear, no se había ni perdido pero comenzó a flaquear y me puso en un estado de pánico tanto que miré a mi esposo y yo dije: yo me tengo que ir, ¿para dónde vas? yo no sé pero yo tengo que ir a un lugar a encontrar mi fe. ¿Perdiste tu fe? no, ¿pero cómo que vas a ir a encontrar tu fe?

Yo necesito irme a un lugar porque yo entiendo que mi fe está atada a todo quien yo soy, a todo lo que vivo y si yo pierdo esta fe lo pierdo todo. Pierdo mi identidad, pierdo mi destino y lo pierdo todo. Y el esposo mío que no es dramático nada, coge el teléfono: ¡Pastor Miranda, mi esposa me va a dejar! Yo Gerson ¿por qué llamaste al Pastor Miranda? ¡porque tú me vas a dejar! Yo no dije que te voy a dejar, yo dije que si pierdo mi fe te pierdo a ti, pierdo a mis hijos, pierdo todo.

Yo lo que necesito es un momento a solas con Dios porque no entiendo exactamente lo que anda mal pero sé que algo está mal y no sé vivir a menos que no esté completamente entregada y ahí es donde Dios nos quiere llevar, donde cuando sentimos no es llegar a la línea del pecado es que desde acá que yo sepa que está la línea de la presencia del pecado, que yo sepa que estoy tan entregada que yo no quiero ni verla ni que se hiciera.

Y el Pastor Miranda hizo arreglos y eso y yo terminé en un hotel cerca de aquí y yo recuerdo que al llegar a ese cuarto dije: tengo un fin de semana pero Tú me conoces yo no tengo ni una hora más porque Tu ausencia es mucho para mí. Sentirte tan cerca, cuando lo tienes tan cerca sentir que tomas un pasito para el lado es devastante para alguien que está totalmente entregado a Dios.

Y yo sé que Dios a veces permite momentos de ausencia en nuestra vida para que nos necesitemos unos a otros para que entendamos cuánto lo necesitamos a Él pero yo dije: Señor no resisto, no resisto no me reconozco a mí misma y recuerdo que en menos de horas yo pude llamar a mi esposo y le dije: papi buenas noticias, no te voy a dejar. Es más puedes traer a los niños, puedes venir tú y vamos a disfrutar el fin de semana juntos.

Porque Dios sabe tus necesidades, Dios promete que si tú te entregas totalmente a Él Él se va a entregar totalmente a ti y cuando tú estés en necesidad tú puedes decir como esta mujer, ella fue al profeta y le dijo: "Tú sabes." Yo puedo ir al Señor y decir: Tú sabes que hay mucho tiempo pero para Tu ausencia yo no tengo tiempo te necesito en mi vida, necesito estar totalmente entregada, rendida a Ti.

En esta mañana tenemos que entregarnos y lo bueno de Dios es que cuando nos entregamos Él nos dice: ¿Sabes? Yo te voy a saciar tu necesidad pero Él no pudo dejarme en ese cuarto saciada, Él dijo: llama a tu marido, llama a tus hijos y les dije: ven. Y en ese fin de semana fuimos llenados, mi familia fue llenada. Dios nunca, nunca te va a hacer cita para derramar Su aceite sin que hayan más vasijas porque tu vasija no es suficiente para Su unción. Él siempre va a preparar lugar para que tú puedas ir y tocar a las puertas y decir: en este día no vamos a pedir de Tu abundancia.

Yo quiero, yo quiero que tú conozcas, traigas tu necesidad porque después de esta historia, al seguir esta historia está la de Eliseo y la sunamita; ella no tenía necesidad ella tenía en abundancia es más, tenía tanto en abundancia que ella buscaba al hombre de Dios no para pedir sino para dar, ella quería darle al hombre de Dios pero en su abundancia no entendía que ella también tenía necesidad y el profeta le hizo las mismas preguntas a ella: ¿qué haré yo por ti? y ella: no nada, nada por mí yo estoy bien es más yo puedo hacer por ti, yo quiero hacer por ti.

Y hay algunas que a lo mejor están en este lugar y dicen: yo no tengo necesidad. Esa recesión que hay aquí en los Estados Unidos de America eso no tiene nada que ver conmigo, Dios a mí me ha bendecido y Dios ha permitido que yo esté en abundancia para bendecir a otros y gloria a Dios que tú estás bendiciendo a otros pero ¿sabes qué? en ti hay una necesidad porque hay un ruido de pasitos en tu casa que a lo mejor no estás corriendo y tú estás satisfecha con lo que tienes pero Dios no está satisfecho con lo que tú tienes, Él quiere darte más, Él quiere que tú tengas más.

"Y le dice el profeta a su siervo: vete y mira lo que está en su casa." Y al mirar lo que está en la casa tú o vas a encontrar lo que Dios ya ha puesto en el lugar para saciar tu necesidad o vas a encontrar la ausencia de donde Dios quiere crear una bendición. Pero donde quiera que tú estés eres una vasija que Dios quiere llenar en esta mañana y quiere causar que tú vayas y busques más mujeres que estén en la condición que tú estás, será peor, será mejor sea lo que sea Dios tiene suficiente unción para ti y para todas las demás.

Señor: en esta mañana te damos gracias porque Tu Palabra está en este lugar. Te damos gracias oh Dios porque Tú no te conformas con que nosotras seamos simplemente mujeres, seamos simplemente hijas pero somos hijas porque estamos entregadas a Tu destino. Somos hijas porque no solamente estamos buscando cumplir con nuestro propósito Señor pero Tú nos llamas a este lugar a edificar destinos.

Señor yo te pido que en el corazón de cada mujer que está en este lugar, en el corazón que ya Señor Tú estás conciente que ellas están aquí, Tú estás conciente de su necesidad, Tú estás conciente de lo que ellas han hecho, de lo que sus maridos han hecho, de lo que sus padres han hecho; Señor Tú tienes promesas generacionales Padre que Tú estás muy conciente Padre de lo que está sucediendo en su vida en su ahora pero hay Palabra Señor que Tú has depositado que no es viejo, no es de ayer Señor que Tu Palabra se mantiene fresca en nuestras vidas.

Y hoy Tú has venido con una Palabra fresca Señor para traer a nuestra memoria Señor que servimos a un Dios que podemos confiar con nuestras vidas, que podemos depositarnos en Tus Manos oh Dios y que Tú cuidarás de nosotras, si hay alguien que en este día necesita caricias de Tus Manos Señor Tú las tienes para ellas Señor, si hay alguien que necesita ser elevada en su estima Señor Tus Manos hoy pueden elevar su estima.

Señor si necesitan sanidad, hablamos de la mujer que tocó el borde de Tu manto Señor pero hoy Tú has venido porque quieres tocar las mujeres en este lugar, sanar su corazón, sanar su espíritu quebrantado Señor y levantar Señor una conciencia Padre de que no solamente somos sanadas por Ti pero como hijas Tuyas Señor hemos recibido la autoridad de tocar a otros y ser sanados, hemos recibido la autoridad de tocar la puerta de nuestro vecino, de entrar a sus lugares privados y decir: comparte tu necesidad conmigo porque yo sé dónde juntas podemos ir para recibir la unción fresca de Dios para ser saciadas hasta el punto en que nunca más habrá necesidad.

Señor Tú quieres depositar Tu aceite otra vez nunca más faltará Tu unción, derrama oh Dios hasta que sobreabunde en este lugar. Somos Tus hijas y nos rendimos ante Ti porque quien Tú eres oh Dios Tú eres nuestro Padre quien nos cuida, nos protege y nos sana. Gracias Señor por Tu amor y mientras nos rendimos a Ti declaramos.

Declaramos Primera de Juan capítulo 3:1 que dice: "Cuán grande es el amor del Padre que yo sea llamada hija de Dios." Declaramos Salmo 103:12 que dice: "Tan lejos como es el este del oeste así Tú has removido nuestras transgresiones de nosotros" y las has alejado de nosotras, somos redimidas por Ti oh Dios el pasado, nuestro pecado no nos pueden tocar. Declaramos Padre Segunda de Timoteo 1:7: "Porque el Espíritu no nos ha dado espíritu de temor sino de amor y de una mente sana."

Señor en este momento declaramos lo que el Padre ha declarado en cada una de nosotras. Remueve todo temor oh Dios, remueve toda inseguridad pero llénanos de Tu Poder, llénanos de Tu amor y danos una mente estable Padre donde podamos tener nuestros pensamientos en Ti totalmente rendidos y entregados a Ti en el Nombre de Jesús te lo pedimos amén, amén y aleluya.

Gracias por esta oportunidad. Yo sé que Dios, puedo ver en sus rostros que Dios está haciendo y Dios simplemente está comenzando algo. Hay cita para terminar la segunda porción esto es como la medicina, nosotros recetamos antibióticos, yo soy asistente dental y a veces damos la receta y la gente se va y dos semanas más tarde vienen con la cara peor que como llegaron, pero ¿qué pasó no te tomaste los antibióticos? sí me los tomé por los primeros tres días y me sentía tan bien que dejé de tomármelos pero el médico no dice que esta es la única dosis.

Para las servidoras son tres dosis, está hoy, Octubre 19 yo creo que es cuando van a recibir estar en una mente, en un espíritu. Es importante que si vas a servir sea en una mente y en un espíritu y está Noviembre 9 y yo sé que lo que la Pastora decía: este año va a ser, no es llenarse por los números es que entre más mujeres más unción y yo no sé de ti pero yo no quiero un poquito de aceite, si es mucho de aceite yo quiero ver la plenitud de Dios. Yo voy a estar allí, yo voy a estar en ese lugar y yo me uno a tocar las puertas.

Y tenemos que decirles a las mujeres: hay cita, hay cita con Dios pero toma tu dosis en este día y deja que el Señor te complete la ministración de hoy para que estés preparada sea para el 19 o sea para el 9 pero Dios está haciendo grandes cosas a través de este ministerio. Yo, el año que comienza nuestro calendario de hijas comienza de Octubre a Septiembre y empezamos nuestro tema nuevo que es: Realiza.

Porque lo que sucede es que después de que Dios nos vacía y nos llena y nos hace algo interiormente Dios comienza a expresar por fuera para que otros vean lo que ya sucedió por dentro y pudimos tomar, teníamos una vasija grande en medio del altar y pudimos transformarla en una mujer porque sí tú eres no literalmente iba a decir en spanish pero figurativamente tú eres la vasija y nos podemos ver figurativamente como mujeres y ver la definición de Dios de nosotras pero cuando llegas a ver lo literal tenemos dificultad.

Pero Dios en este año esta Palabra Realizar tiene este el comienzo y el fin en la vez. Cuando te das cuenta: ay entiendo ahora pero cuando tú has completado algo a la misma vez es realizar y Dios está haciendo el Alfa y el Omega en nosotras. Dios nos llama vasijas pero también nos llama mujer y Él va a realizar en nosotras y yo le doy gracias a Dios por esta oportunidad porque entré por estas puertas años atrás como vasija y me siento mujer realizada. Yo sé que hay mucho más que Dios va a hacer pero mi oración es que en mi vida yo pueda demostrar en mi exterior todo lo que Dios está haciendo en lo interior porque es lindo lo que Dios puede hacer cuando tú te entregas en Sus Manos. Dios te bendiga.

Como respuesta al mensaje que Valerie trajo hoy ella hablaba de vasijas, yo sé que muchas veces porque yo lo he experimentado en mi propia vida. A veces como decía Valerie queremos que la vasija siga llena de aquéllo que está dentro de ella. Muchas veces es tristeza que no hemos superado, otras veces es amargura, es falta de perdón, tristeza por cualquier razón; tantas emociones que podríamos decir que están dentro de esa vasija pero yo sé que muchas veces pasa que queremos mantener la vasija así porque se ve, por fuera se ve de lo más bonita, no se ve fea la vasija, está brillosa, tiene buen esmalte, buen color.

Pero cuando miramos adentro nos damos cuenta de que de ella sale mal olor y todas hemos estado ahí. Yo recuerdo hace muchos años que yo creía que había perdonado a todo el mundo, que tenía que ser perdonada y en un día que yo me aparté así como hizo Valerie para encontrarme conmigo misma me di cuenta, el Señor me mostró cosas que me asustaron, ví una de las imágenes que Él me presentó fue una manzana, una manzana preciosa con el lustre de una manzana perfecta no había nada y como yo ví en mi mente, el Señor me habla mucho con imágenes aquí adentro, no las veo afuera pero aquí adentro son muy vívidas y las recuerdo muy bien.

El Señor fue así, yo miraba la manzana y me admiraba de qué bonita es la manzana porque entendí que era mi vida y la fue dando vuelta, vuelta, vuelta hasta que por un lado de la manzana había una parte que le faltaba piel y estaba podrida esa parte de la manzana y yo le dije: uh oh eso no es lo que yo quiero ver y mi mente enseguida quiso cerrarse a esa posibilidad de que yo tuviera que bregar con algo más profundo todavía y el Señor fue tan claro y me retó y yo estuve ahí en ese asiento con lucha.

Señor: ¿qué hago? no, no puedo he sido herida ahí no puedo, no quiero, no quiero, no quiero y el Señor me dijo: pero ¿qué tú quieres? ¿quieres seguir la vida con ese pedazo podrido? ¿qué es lo que pasa cuando en una manzana hay una parte podrida? exacto se pudre todo ¿verdad que sí? hasta adentro y no sé si a ustedes les ha pasado en el supermercado a veces uno compra una manzana que puede parecer preciosa y tiene un puntito nada más ¿qué pasa? vas a tu casa, la cortas por el centro y te das cuenta que está podrida por dentro y huele mal y jamás te la comerías.

Pues muchos de nosotros somos así, esa vasija está llena de esas cosas que no deben estar ahí y muchas veces nos aferramos porque es lo que conocemos y lo que nos hace sentir seguras pero en un momento tenemos que decir: hasta aquí ya no más, yo voy a vaciar esa agua sucia que está dentro de mi vasija y voy a permitir que el Señor la llene de algo bueno porque como decía Valerie, si tú haces eso, si tú te tomas el trabajo de cargar la vasija, inclinarla y botar lo que está dentro y después echarle cloro del Espíritu el Señor se va a encargar de darte un agua cristalina, fresca, saludable que te va a refrescar por dentro.

Entonces el llamado que yo quiero hacer es fíjense bien: solamente pasa al frente para oración, les voy a pedir a las coordinadoras Valerie y todas aquéllas que saben que ustedes ministran aquí en la Iglesia, solamente aquéllas, no por nada más pero solamente aquéllas que saben que se han aferrado a algo que saben que les están carcomiendo por dentro, algo que les impide crecer más allá. Algo que se ha convertido en un Dios en su vida.

A veces una vez el Señor me dió una Palabra para una hermana muy querida que ha tenido luchas muy terribles en su vida y lo que el Señor me mostró es que la amargura se había convertido en su marido. Imagínese eso: usted estar casada con la armagura qué cosa tan terrible y ella estaba casada con la amargura y no quería divorciarse de la amargura.

Vamos así solamente otra vez, pasen al frente solamente esas las que saben que eso que está ahí tiene vida propia, tiene identidad y tú lo conoces y decides vivir con eso. Yo he entendido que hasta que uno no hace eso entregar esa basura que tenemos adentro que todos la tenemos en un grado o en otro el Señor no puede hacer Su propósito perfecto en nosotras, es imposible porque el espacio está ocupado por una entidad y no me refiero a entidades demoníacas, no estoy hablando de eso pero es algo que tiene vida propia y nos hace cojear en la vida.

En vez de correr así sigilosamente y livianamente eso nos hace cojear y yo he entendido también que es un acto de la voluntad. Si tú no quieres no va a pasar, Dios no va a venir con una varita mágica y ¡tin! ¡oh! agua limpia, no. Él no obra así ¿saben por qué no obra así? porque Él nos respeta demasiado, Él nos respeta demasiado para hacer eso en nuestra vida. Él quiere que nosotros colaboremos con Él en todo incluyendo eso que tenemos adentro que necesita ser limpiado.

Entrega completa

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Vamos a la Palabra, el tema de hoy es "Entrega Completa" y lo trae Valerie González. Ella pastorea junto a su esposo Gerson González en dos lugares, no en uno sino en dos lugares imagínense eso en el Centro de Adoración Calvario en Woonsocket - Rhode Island y en la Congregación Cristo Rey en Dorchester - Massachussets aquí muy cerca de nosotros.

Algo que caracteriza a Valerie es que es dinámica en todos los sentidos, Dios la ha dotado de muchísimos dones; no solamente predica con la unción del Señor y con entendimiento sino también tiene dones de canto, de actuación, de planificación y sigue añadiendo tiene muchos otros dones. Además es una excelente esposa, la mamá de dos teenagers ¿verdad? pre-teens, distribuye su tiempo en muchas actividades y es una mujer apasionada por ministrar a la mujer como lo somos todas nosotras también. Así que vamos a recibir a Valerie con un caluroso aplauso.

Valerie: Bendecidas. Tengo que decirles que mientras estaba ahí en adoración tuve un momento ¡argh! y yo no soy, bueno tengo que decir: antes no era tan llorona, ahora después de que conocí a Meche (risas) y les explico en un minuto porque lo digo así. Este, tuve un momento donde miré alrededor y sabiendo que el tema es Entrega Completa, hemos estudiado ese tema a través de las hijas Condesino que allá simplemente decimos hijas porque hemos cruzado con muchos americanos y vienen y siempre se les hace un poco difícil, pues lo que nos une a todos es que somos todas hijas.

No importa cuál es tu pasado, no importa cuál es tu futuro si tú eres mujer aquí en la Tierra tú tienes que ser una hija pero lo que nos une a nosotras en nuestra sangre y en nuestro espíritu es que somos hijas del mismo Padre. Y cuando yo llegué a la ciudad o al área de Nueva Inglaterra yo vine porque me casé con mi esposo Gerson González un hombre muy guapo gracias a Dios por sus beneficios, considera todos nuestros deseos y bueno, al casarnos nos casamos con la mentalidad que muchos tienen que el matrimonio tan perfecto, todo va a estar, todo lo que está quebrado se arregla cuando tú te casas ¿verdad?

Pero nos encontramos en momentos muy difíciles y para mí es muy especial hablar este tema acá porque yo sé que parte de mi experiencia como mujer, como Pastora; yo no era Pastora cuando yo primero caminé por esas puertas pero era una mujer que necesitaba entregarse, era una mujer que creía que todo lo tenía en su lugar, en orden porque desde joven he vivido sola tengo tremendos padres pero mis padres decidieron mudarse y llevarse mi casa con ellos para Florida y yo no me quería ir y estaba en la ciudad de Pennsylvania y tuve que aprender a vivir sola, y uno cuando joven se pone a vivir sola se cree que entonces todo lo puede y todo lo puede poner en control y no hay necesidad de entregarlo porque: Dios no te preocupes ¿no? yo a Ti te voy a dar el día libre porque yo hoy tengo todo en control.

Y tomamos esa actitud de que en verdad no tenemos que rendir y es importante no solamente concentrarnos en la palabra entrega pero es una entrega completa, no podemos quedarnos con nada tenemos que rendir lo bueno, lo malo tenemos que totalmente derramarlo ante la Presencia de Dios porque a veces aún lo bueno y que creemos que es tan bueno nos enteramos que no es tan bueno como lo bueno que Dios en verdad nos quiere dar y por quedarnos con ello nos perdemos lo en verdad bueno, no sé si entendieron eso pero yo lo he vivido y lo entiendo muy bien.

Pero en un momento de un corazón quebrantado, en un momento de que la naturaleza mía lo que quiere hacer es pelear para atrás, cuando uno es herido, cuando uno es maltratado y cuando uno encuentra que es injusto uno quiere; yo nací en Brooklyn y yo soy chiquita pero brava you know? y a mi esposo yo le decía a él desde el principio porque nosotros avisamos antes de que suceda para que todo esté clarísimo, yo le decía: número uno, esto no es juego de béisbol, a ti no te dan tres strikes y estás out, uno y ya tú estás fuera ok? 'tá avisado ¿verdad?

Y número dos, si tú pones tus manos sobre mí que no sea para hacerme una caricia o amor tú eres mucho más grande que yo, tú puedes más que yo pero al fin de esto va a haber un área de tu cuerpo que va a decir: Valeria estuvo aquí. Y esa era mi manera de pensar, mi manera de vivir, yo peleando por lo mío queriendo más y sabiendo que lo podía lograr pero cuando llegué a un momento en mi matrimonio en que las cosas no estaban como debían estar por causa del esfuerzo que había puesto el Señor me trajo a estar puertas; ahí conocimos al Pastor Miranda y su Pastora Meche.

Y recuerdo una de nuestras primeras conversaciones. Ella comenzó porque en las conversaciones que ellos estaban teniendo con mi esposo no me estaban gustando mucho porque estaban hablando mucho de la Gracia, mucho del amor de esas cosas cuando lo que él lo que necesitaba era una buena "salpiza" para que despertara y decía: Señor si Tú quieres yo te ayudo, en esta sí pero no, todo mundo hablando de Gracia y que si esto y yo: ¿cómo ese hombre se va a arreglar si no le dicen en verdad cómo él tiene que vivir?

Y después cuando finalmente tengo tiempo para sentarme con su Pastora, ella yo sé que me va a entender ella es mujer y ella va a tomar finalmente alguien mi lado y cuando ella comienza a hablarme de la compasión ¿qué, ahora yo también tengo que sentarme a escuchar de la compasión? pero lo que me enseñaron fue cómo entregarme, cómo rendirme. Ella me enseñó a pelear sin palabras, ella me enseñó a pelear con acciones, a pelear con amor, a pelear con gracia porque el amor de Dios puede mucho más que lo que nosotros podemos.

Yo no sé cuál es la circunstancia que tú estás enfrentando en esta mañana y por qué razón el Señor trajo este tema de Entrega Completa pero yo quiero decirte de una experiencia personal que los momentos ahora en los cuales yo vivo las cosas no están perfectas pero en este rendimiento, en esta entrega total yo sé que todo va a estar bien; tengo una paz que nunca había tenido, tengo una seguridad que nunca había tenido y cuando las cosas y aún este año en entrega completa el médico viene a decirme: ay Pastora usted tiene tal y tal y tal y yo: oh sí bien ok y él me dice: no es que tú no entiendes y me diagnosticaron con esclerosis múltiple.

"Es que tú no entiendes" no yo sí entiendo pero más que entender esta enfermedad yo entiendo que Dios me dijo que si yo me entrego Él está en control. Yo entiendo que ya yo no tengo que seguirle dando crédito al enemigo por cosas que él no está a lo mejor en la misma ciudad ni en el mismo vecindario y nosotras echándole la culpa sin saber que es que Dios está tratando de llevarnos a un momento donde estamos de rodillas completamente entregadas a Él.

Y lo que pasemos lo pasamos en esta vida porque tenemos que vivir en este mundo pero Dios quiere mostrar al mundo cómo Sus hijas pueden caminar a través de este mundo, pasar por lo que pasan otros pero no es la misma experiencia porque años antes de que tú llegaras aquí, años antes de que hijas con destino pudieran existir Dios había levantado un Ministerio de mujeres edificando destinos porque si no hay destinos edificados no pueden haber hijas con destino.

Para que tú puedas ver cómo la Pastora habla y dice que estamos: sí estamos enlazadas, esto se trata de un cuerpo. Hablamos este año de entrega completa pero ¿sabes dónde estamos entregadas? en Sus Manos, estamos enlazadas cuando vivimos a través del Espíritu ¿no es una experiencia totalmente diferente la que tú tienes conmigo? estamos en una jornada juntas donde Dios al fin de todo lo único que quiere comprobar es que somos Suyas. Estamos en Sus Manos, Él nos protege, Él nos ama, Él nos cuida, Él nos perdona, Él nos restaura que todo lo que necesitamos esté en Él. Aleluya.

Y por eso yo vivo una vida tratando de encontrar en todo a Dios. Aún ¿ustedes ven la pulserita ésta? esta pulserita nace del mensaje que queremos que nosotras las mujeres podamos entender. El número 7 es el número de perfección, es el número de plenitud, el círculo, la semana es completa en el número 7; pues aquí cada piedrita hay 7 de cada una porque estamos entregadas completamente. Las vasijas significan: nosotras somos cada una de esas vasijas y yo me entrego completamente 7 veces, estoy completamente entregada a Él.

El rojo es: yo estoy completamente amada, el púrpura es: yo estoy completamente apoderada, el claro así es: yo estoy perdonada porque Él toma mis pecados y los hace tan claritos que cuando yo miro mi pecado yo no puedo ver el pecado si no veo la Gracia de Dios, yo veo cómo Él me pudo lavar y cambiar y limpiar; la mujer que soy hoy no se llevaría con la mujer de veinte años atrás porque no eran pero Dios nos ha llevado a través de una jornada y es una entrega constante.

Porque no es entregarnos por este momento, no es entregarnos por este sábado sino hacer una decisión: Señor yo estoy entregada a Ti completamente, mi cuerpo, mi espíritu están completamente entregados a Ti, que cuando se levantan mis emociones y dicen: hoy no quiero alabarte ya no tienen otro remedio porque hay una ley en mi vida que dice: yo estoy entregada y yo vivo de acuerdo a la ley del Espíritu y no de acuerdo a la ley de la carne.

En esta mañana quiero traerle un pensamiento sobre una historia que este año me ha estado ministrando a través de todo el año. Mientras hablamos de Entrega Completa voy a estar hablando acerca de una historia que se encuentra en Segunda de Reyes capítulo 4, una historia bastante conocida y yo creo que en esta mañana si puedo tratar de ver el propósito mayor, yo sé que Dios siempre tiene múltiples propósitos, Él hace con una cosa, Él es tan. Él nos dice: sean fructíferas, multipliquen pero Él no nos dice que hagamos algo que Él no puede hacer así que en Sus planes a veces creemos: oh esto es lo que Dios quería hacer y después hablamos con otras hermanas y vemos que la misma Palabra ha causado multiplicación en diferentes áreas porque todas nuestras necesidades en esta mañana serán saciadas.

Aunque son diferentes todas las necesidades serán saciadas y quiero ir aún más a que este es un preámbulo a las necesidades que serán saciadas Noviembre 9. Yo creo que Dios me trajo aquí para inspirarte a ti mujer para que no pienses este año solamente en ti sino que comiences a pensar o que hagas que tu necesidad te cause causar un milagro aún mayor de lo que tú estabas esperando. Tenemos que dejar de pedir y pensar que Dios solamente nos cuide y sacie hasta nuestra necesidad pero tenemos que entender que servimos un Dios que no te va a pedir una entrega completa sin Él tener el deseo de entregarse completo.

Y cuando por eso decimos: cambiaré mi tristeza porque si tú tomas lo que tú tienes y tú lo vacías ante la Presencia de Dios Dios se siente tan motivado para llenarte con algo mejor, algo mayor; nunca te va a dejar vacía, nunca te va a dejar en falta sino que te va a llenar hasta que sobreabunde y aquí hay una historia sobre la sobreabundancia y yo no sé de ti pero yo quiero y estoy viviendo este momento de sobreabundancia en mi vida.

Pero no toda abundancia comienza con un momento de abundancia sino que dice aquí que esta mujer en Segunda de Reyes capítulo 4 dice que: "Había una mujer de las mujeres de los hijos de los profetas y ella clamó a Eliseo" ella fue al profeta, ella fue al lugar donde sabía que iba a recibir no palabra de hombre sino Palabra de Dios. Es importante que en tu necesidad tú dejes de buscar recursos que no tienen nada que ver con lo que Dios dice para tu vida sino tú tienes que ser sabia e ir al lugar donde tú sabes que Dios va a hablar, donde está la portavoz de Dios.

Tenemos que dejar de escuchar lo que dice la sociedad, lo que dicen todos a través de tu condición sino busca la Palabra de Dios, busca dónde es que tú sabes que Dios te va a hablar. Y esta mujer fue a este lugar y le dice: "Tu siervo, mi marido" ella lo conoce íntimamente, ella no está hablando de alguien que ella no conoce. Ella dice: él era tu siervo pero él era mi marido yo lo conocía con intimidad y él era hombre temeroso de Dios, ella le dice ya ha muerto aleluya.

Y ella le dice: "Y han venido los acreedores para tomarse mis dos hijos, para llevarse a mis dos hijos." Lo que ella tenía es que perdió a su marido y en esos días las mujeres eran sostenidas básicamente por los hombres; tú eras, tu estado en la sociedad tenía que ver con quién estabas casada, eso todo tenía que ver con generación y esta mujer estaba sintiendo que ella estaba a punto de perder quien ella es porque ella sabe que ella no es solamente hija de los profetas pero ella es esposa del siervo del profeta y ella tiene hijos que están para continuar con una herencia pero ahora al su esposo morir hubo algo, una deuda del pasado algo que debe haber estado en el ayer pero ese ayer ahora se ha aparecido en el hoy y quiere robarle su futuro.

No estaba allí simplemente para robarle un día pero quería llevarse a sus hijos y ella fue al Señor y ella dijo: yo sé como yo he vivido con profetas, yo he vivido con siervos de Dios yo entiendo que el plan de Dios para mí no está sin futuro, yo sé que Dios tiene un futuro, un destino para mí y mi futuro y mi destino está en Sus Manos pues yo no puedo ir a ningún otro lugar sino a Sus Manos para que Dios me de Palabra a mí y me enseñe cómo yo voy a llegar a ese destino.

Ella se presentó como hija "yo soy hija de los profetas" y me gusta la respuesta del profeta, el profeta le dice: ¿y qué voy yo a hacer por ti, qué haré yo por ti? A veces nos presentamos ante Dios con nuestras quejas y decimos: Señor este es el problema y esto es aquéllo pero no tenemos ni definido en nuestra mente qué es lo que deseamos en verdad de Dios. A veces he conocido mujeres que están tan aferradas a su dolor que ellas vienen llorando ante la Presencia de Dios pero no quieren que Dios las sane.

Yo sé que suena ridículo pero hay algunas mujeres que viven su vida y se han dejado ser conocidas por su amargura. Su fama es su amargura, su atención es su amargura. Pues he venido ante Ti oh Dios para que cambies lo que yo soy por lo que Tú me quieres dar pero no me toques el dolor, lo que Tú quieras Señor totalmente entregada pero Tú sabes que esa cicatriz, por lo menos déjame esa cicatriz para yo decirle a la gente lo que yo he pasado.

Y él le dice: "¿Qué voy yo a hacer por ti?" y no dice cuál es la respuesta pero yo creo que Dios tiene que llevarnos a un lugar donde nosotras tenemos que comenzar a pensar ¿qué es lo que yo quiero? y aún si lo que tú deseas no es lo que Dios te quiere dar por lo menos tus intenciones te son reveladas a ti misma porque a veces no nos damos cuenta de nuestras propias intenciones y para poder tener una entrega completa tú tienes que rendir tus intenciones, tú tienes que rendirlo completamente y él le dice: "Declárame lo que está en tu casa."

Yo sé que cuando vamos ante la Presencia de Dios especialmente en momentos de adoración como esta mañana nos perdemos en ese momento espiritual, en ese momento donde la Presencia de Dios es tan poderosa, nos llena tanto, nos lleva a un quinto cielo pero para que Dios trate con nosotras tenemos que volver a bajar y ver lo que está en nuestra casa. Tú no puedes pensar que Dios va a hacer algo aquí que se va a mantener sin que afecte tu casa. Tú tienes que comenzar del lugar donde tú vives, el lugar donde tú estás comprometida, si hay un lugar.

Tu trabajo es temporario. Tu trabajo cualquier cosa puede hacer pero después del trabajo tú puedes perder el trabajo y ¿para dónde vas a regresar? a tu casa a donde tú vives y todas vamos a regresar y ahí el Señor tiene que comenzar la obra porque ahí tú te vas a acostar y ahí tú te vas a levantar y para ser totalmente entregada tú tienes que rendir tu despertar y tu acostar. No puedes buscar solamente momentos en tu vida.

Y ella tuvo que pensar: ¿qué es lo que tengo en mi casa? y ella dijo: "Tu sierva no tiene nada en su casa sino una vasija de aceite" y a veces no nos damos de cuenta quiénes de verdad somos. Sí ella entendió que ella era sierva, sí ella entendió que en su casa había aceite pero no entendía el poder del aceite que estaba en su casa, no entendía el poder de la vasija que ya estaba en su casa. Ella tenía en poco lo poco que tenía pero no sabía que el profeta estaba a punto de decirle: tú sabes tú no eres la única que tienes en poco lo que está en tu casa.

Yo quiero que tú vayas donde las vecinas y toques sus puertas y tú te vas a dar cuenta que tú no eres la única que tienes necesidad porque esa mujer no estaba pidiendo la abundancia que había en esos hogares. Él dijo: "Vete y busca vasija vacía" y yo quiero que tú sepas que en tu vecindario, en tu trabajo, en tu escuela hay muchas mujeres que tienen vasijas vacías en su casa y tienen necesidad de ser llenadas del aceite fresco de Dios. Él dice: te voy a mostrar que Yo soy un Dios tan grande que no solamente voy a saciar tu necesidad pero yo voy a saciar la necesidad de cada vasija vacía que esté a tu alrededor.

En Sus Manos no es solamente una conferencia, en Sus Manos es el lugar donde van a traer las vasijas y hacer como dice el profeta, van a cerrar las puertas; van a haber algunas que no van a poder llegar, hay algunas que no van a poder entrar pero las que lleguen a ese lugar hay una promesa: que mientras más vasijas más unción descenderá y no habrá necesidad. El aceite se detuvo cuando se detuvieron las vasijas pero Dios está encargando a este grupo de mujeres a pensar más allá de su necesidad.

Esto no es como los días de hoy que yo me puedo rentar un lujo e ir casa por casa y tomar tu vasija y ponerla en mi carro, después ir a otra casa. Esta mujer tuvo que ir y tocar y agarrar una vasija y después el peso de esa vasija ella la tuvo que llevar a su casa, la depositaba, después salía otra vez porque solamente tiene dos manos y no hay suficiente para todas las vasijas pero hay un esfuerzo, una labor que toma para cuando tú puedes oir la Palabra de Dios y tú puedes creer que Dios en verdad dijo que en ese lugar va a haber unción si en verdad entiendes el poder de la unción que Dios va a derramar en ese lugar tú irías puerta por puerta diciendo: no quiero de tu abundancia pero trae tu necesidad, dame las vasijas vacías porque yo sé dónde serán saciadas, yo sé dónde pueden ser llenas. Hay tanta necesidad a nuestro alrededor.

Me encanta porque cuando hicimos la conferencia de las hijas la semana pasada le pedimos a las mujeres que trajeran vasijas y todas trajeron vasijas y después las pusimos en el altar, estaba el altar lleno de muchas vasijas y si tú vas a una tienda te lo acomodan todo para que todo se vea bien con el color y unos colores aquí, otros así y todas eran de diferentes tamaños de diferentes colores y se veía como que no deben estar en la misma mesa pero la diferencia atraía tanta belleza a ese altar. Todas se veían como que cabían juntas, como que un retrato tan y tan precioso de lo diferente porque las necesidades no todas son iguales pero cuando unimos nuestras necesidades ante la Presencia de Dios lo que antes pensábamos que era necesidad se torna en belleza.

Y podemos dar gracias a Dios por nuestras necesidades porque sin nuestras necesidades no conociéramos la plenitud de Dios, el poder que hay en Dios. Yo sé que ahora no la pueden ver pero yo tengo una misión hoy día. Yo estoy en Boston no solamente para esta conferencia pero algo que aún cuando lo pienso ahora mismo me mueve el corazón. Hablamos de Entrega Completa, de momentos donde debemos de rendirlo todo pero mi pregunta es: hemos llegado al momento donde para estar aquí ¿tú estás dispuesta a arriesgar tu vida? porque eso es Entrega Total.

Y yo sé que suena como algo drástico pero yo pude ver con mis propios ojos a alguien arriesgar su vida porque escuchó la Palabra de Dios. Ahora mismo está en el Bring on the women aquí en Boston, tiene como unos 35 años madre soltera, la diagnosticaron con cáncer. Ella está en un punto donde está tan frágil y tan débil que estaba caminando con un bastón pero ella escuchó que Dios dijo que ahí Él la iba a llenar. Y yo veía a las mujeres viniendo y yo sé que muchas tuvieron muchas dificultades para llegar.

Y nosotras hacemos lo más para tratar de que las mujeres lleguen tanto que, Pastora necesito sentarme con usted a hablar porque creo que necesitamos un plan nuevo, porque como lo hacemos de gratis es un paquete opcional, so tú tienes la opción que si tú quieres comprar el paquete, no tienes la excusa de que dinero es una razón para llegar pero la gente toma ventaja. Cuando ve que: ah es gratis no me tengo que registrar y uno quiere hacer lo mejor para preparar el lugar y las mujeres esperan hasta el último minuto o dicen: pero como no hay un compromiso.

Y hay que hacer compromiso. Tú no puedes entregarte completamente sin tener un compromiso. Esta mujer entregó en su corazón: a mí no me importa que los doctores dicen que yo no tengo que estar allí pero si yo tengo que arriesgar mi vida yo la voy a arriesgar. Y ella se apareció en ese lugar y yo sé que habían otras dificultades pero ella se entregó por completo.

Y yo voy a verla en el hospital y le hemos hecho un cuadro porque el Señor puso, cuando yo la ví a ella me tocó tanto que yo dije: hay mucha gente orando y yo sé que Dios tiene el poder para sanarla y en esta tarde nosotras también vamos a orar pero el Señor me dijo: Yo no las traje aquí para que oren por ella, Yo las traje porque Yo quiero cantar un cántico sobre ella. Y ella en su silla de ruedas la trajimos al frente y vino Ingrid Rosario que estaba con nosotros y es tremenda mujer de Dios y ella comienza a cantar: Él nos ama, cuánto Él nos ama y las danzarinas empiezan con sus abanicos a abanicar a esta mujer y esta mujer si el Señor se la llevara hoy me dice que Dios le dió el momento mejor de su vida en ese lugar.

Porque ella dijo: yo no puedo permitir que nada, tengo que entregarlo todo y tanto fue que yo vine y yo la abracé y yo quise ministrarla y ella comienza a gritarme a mí, a hablar Palabra profética sobre mi vida y yo dije: Señor a veces nos miramos y vemos los que están bien, los que están saludables y están de aquí para allá y decimos: wow eso es entrega completa pero yo veo una mujer que parece frágil, una mujer que parece estar quebrantada, una mujer que parece estar que no debe tener esperanza, una mujer que debe estar llorando, una mujer que debe estar encerrada en su cuarto pero ella dice: yo rehuso ser lo que el cuerpo mío dice que yo debo de ser, yo rehuso ser lo que otros tratan de definir porque yo me entregado completamente a Dios; yo creo en Su Palabra y nada me va a detener de estar en la Presencia de Dios, de estar en Sus Manos.

¿Cuál es tu dificultad en esta mañana? el Señor te ha traído a este lugar simplemente para decirte que tú puedes confiar tu vida en Él, que Él en verdad tiene planes maravillosos para tu vida y aunque Entrega Total no es fácil porque en verdad, cuando yo digo que el Señor nos hace vivir Él nos da temas y en Sus Manos suena tan lindo ¿verdad? suena como un lugar tan cómodo y a Él le gusta jugar con mis emociones porque me da temas que: wow y yo digo esto va a estar tremendo pero entonces tengo que vivir. Tengo que vivir momentos.

Yo no he hablado lo que la Pastora ha pasado este año pero yo sé que para ella estar allí y dirigir y dejarte saber que en Sus Manos es el lugar ella tuvo cosas que vinieron a su vida para tratar de moverla de las manos de Dios pero ella se puede parar hoy y decir: en Sus Manos es el lugar más seguro, en Sus Manos es donde debemos estar. Yo puedo pararme aquí y decir: entrégate completamente.

¿Por qué? porque sabemos que cuando tú te entregas completamente al final de todo sabemos que la última palabra la tiene Dios. Y mientras yo miro en Su Palabra, mientras yo miro en lo que Él ha hecho en mi vida no hay ni una Palabra que Él ha dicho para mal sino todo ha sido para bien así que yo confío en Su Palabra.

Ahora yo estuve todo el año mirando esta historia y tratando de ver a Dios, ver a Dios en todo y yo soy así, el Señor me habla una Palabra y cuando tengo que hacer una decisión de qué es lo que el Señor está diciendo y trato de medirlo porque si no mantengo esa Palabra en mi mente me pierdo. Yo tuve un momento, diría hace como unos seis o siete años atrás donde sentí que mi fe comenzó a flaquear, no se había ni perdido pero comenzó a flaquear y me puso en un estado de pánico tanto que miré a mi esposo y yo dije: yo me tengo que ir, ¿para dónde vas? yo no sé pero yo tengo que ir a un lugar a encontrar mi fe. ¿Perdiste tu fe? no, ¿pero cómo que vas a ir a encontrar tu fe?

Yo necesito irme a un lugar porque yo entiendo que mi fe está atada a todo quien yo soy, a todo lo que vivo y si yo pierdo esta fe lo pierdo todo. Pierdo mi identidad, pierdo mi destino y lo pierdo todo. Y el esposo mío que no es dramático nada, coge el teléfono: ¡Pastor Miranda, mi esposa me va a dejar! Yo Gerson ¿por qué llamaste al Pastor Miranda? ¡porque tú me vas a dejar! Yo no dije que te voy a dejar, yo dije que si pierdo mi fe te pierdo a ti, pierdo a mis hijos, pierdo todo.

Yo lo que necesito es un momento a solas con Dios porque no entiendo exactamente lo que anda mal pero sé que algo está mal y no sé vivir a menos que no esté completamente entregada y ahí es donde Dios nos quiere llevar, donde cuando sentimos no es llegar a la línea del pecado es que desde acá que yo sepa que está la línea de la presencia del pecado, que yo sepa que estoy tan entregada que yo no quiero ni verla ni que se hiciera.

Y el Pastor Miranda hizo arreglos y eso y yo terminé en un hotel cerca de aquí y yo recuerdo que al llegar a ese cuarto dije: tengo un fin de semana pero Tú me conoces yo no tengo ni una hora más porque Tu ausencia es mucho para mí. Sentirte tan cerca, cuando lo tienes tan cerca sentir que tomas un pasito para el lado es devastante para alguien que está totalmente entregado a Dios.

Y yo sé que Dios a veces permite momentos de ausencia en nuestra vida para que nos necesitemos unos a otros para que entendamos cuánto lo necesitamos a Él pero yo dije: Señor no resisto, no resisto no me reconozco a mí misma y recuerdo que en menos de horas yo pude llamar a mi esposo y le dije: papi buenas noticias, no te voy a dejar. Es más puedes traer a los niños, puedes venir tú y vamos a disfrutar el fin de semana juntos.

Porque Dios sabe tus necesidades, Dios promete que si tú te entregas totalmente a Él Él se va a entregar totalmente a ti y cuando tú estés en necesidad tú puedes decir como esta mujer, ella fue al profeta y le dijo: "Tú sabes." Yo puedo ir al Señor y decir: Tú sabes que hay mucho tiempo pero para Tu ausencia yo no tengo tiempo te necesito en mi vida, necesito estar totalmente entregada, rendida a Ti.

En esta mañana tenemos que entregarnos y lo bueno de Dios es que cuando nos entregamos Él nos dice: ¿Sabes? Yo te voy a saciar tu necesidad pero Él no pudo dejarme en ese cuarto saciada, Él dijo: llama a tu marido, llama a tus hijos y les dije: ven. Y en ese fin de semana fuimos llenados, mi familia fue llenada. Dios nunca, nunca te va a hacer cita para derramar Su aceite sin que hayan más vasijas porque tu vasija no es suficiente para Su unción. Él siempre va a preparar lugar para que tú puedas ir y tocar a las puertas y decir: en este día no vamos a pedir de Tu abundancia.

Yo quiero, yo quiero que tú conozcas, traigas tu necesidad porque después de esta historia, al seguir esta historia está la de Eliseo y la sunamita; ella no tenía necesidad ella tenía en abundancia es más, tenía tanto en abundancia que ella buscaba al hombre de Dios no para pedir sino para dar, ella quería darle al hombre de Dios pero en su abundancia no entendía que ella también tenía necesidad y el profeta le hizo las mismas preguntas a ella: ¿qué haré yo por ti? y ella: no nada, nada por mí yo estoy bien es más yo puedo hacer por ti, yo quiero hacer por ti.

Y hay algunas que a lo mejor están en este lugar y dicen: yo no tengo necesidad. Esa recesión que hay aquí en los Estados Unidos de America eso no tiene nada que ver conmigo, Dios a mí me ha bendecido y Dios ha permitido que yo esté en abundancia para bendecir a otros y gloria a Dios que tú estás bendiciendo a otros pero ¿sabes qué? en ti hay una necesidad porque hay un ruido de pasitos en tu casa que a lo mejor no estás corriendo y tú estás satisfecha con lo que tienes pero Dios no está satisfecho con lo que tú tienes, Él quiere darte más, Él quiere que tú tengas más.

"Y le dice el profeta a su siervo: vete y mira lo que está en su casa." Y al mirar lo que está en la casa tú o vas a encontrar lo que Dios ya ha puesto en el lugar para saciar tu necesidad o vas a encontrar la ausencia de donde Dios quiere crear una bendición. Pero donde quiera que tú estés eres una vasija que Dios quiere llenar en esta mañana y quiere causar que tú vayas y busques más mujeres que estén en la condición que tú estás, será peor, será mejor sea lo que sea Dios tiene suficiente unción para ti y para todas las demás.

Señor: en esta mañana te damos gracias porque Tu Palabra está en este lugar. Te damos gracias oh Dios porque Tú no te conformas con que nosotras seamos simplemente mujeres, seamos simplemente hijas pero somos hijas porque estamos entregadas a Tu destino. Somos hijas porque no solamente estamos buscando cumplir con nuestro propósito Señor pero Tú nos llamas a este lugar a edificar destinos.

Señor yo te pido que en el corazón de cada mujer que está en este lugar, en el corazón que ya Señor Tú estás conciente que ellas están aquí, Tú estás conciente de su necesidad, Tú estás conciente de lo que ellas han hecho, de lo que sus maridos han hecho, de lo que sus padres han hecho; Señor Tú tienes promesas generacionales Padre que Tú estás muy conciente Padre de lo que está sucediendo en su vida en su ahora pero hay Palabra Señor que Tú has depositado que no es viejo, no es de ayer Señor que Tu Palabra se mantiene fresca en nuestras vidas.

Y hoy Tú has venido con una Palabra fresca Señor para traer a nuestra memoria Señor que servimos a un Dios que podemos confiar con nuestras vidas, que podemos depositarnos en Tus Manos oh Dios y que Tú cuidarás de nosotras, si hay alguien que en este día necesita caricias de Tus Manos Señor Tú las tienes para ellas Señor, si hay alguien que necesita ser elevada en su estima Señor Tus Manos hoy pueden elevar su estima.

Señor si necesitan sanidad, hablamos de la mujer que tocó el borde de Tu manto Señor pero hoy Tú has venido porque quieres tocar las mujeres en este lugar, sanar su corazón, sanar su espíritu quebrantado Señor y levantar Señor una conciencia Padre de que no solamente somos sanadas por Ti pero como hijas Tuyas Señor hemos recibido la autoridad de tocar a otros y ser sanados, hemos recibido la autoridad de tocar la puerta de nuestro vecino, de entrar a sus lugares privados y decir: comparte tu necesidad conmigo porque yo sé dónde juntas podemos ir para recibir la unción fresca de Dios para ser saciadas hasta el punto en que nunca más habrá necesidad.

Señor Tú quieres depositar Tu aceite otra vez nunca más faltará Tu unción, derrama oh Dios hasta que sobreabunde en este lugar. Somos Tus hijas y nos rendimos ante Ti porque quien Tú eres oh Dios Tú eres nuestro Padre quien nos cuida, nos protege y nos sana. Gracias Señor por Tu amor y mientras nos rendimos a Ti declaramos.

Declaramos Primera de Juan capítulo 3:1 que dice: "Cuán grande es el amor del Padre que yo sea llamada hija de Dios." Declaramos Salmo 103:12 que dice: "Tan lejos como es el este del oeste así Tú has removido nuestras transgresiones de nosotros" y las has alejado de nosotras, somos redimidas por Ti oh Dios el pasado, nuestro pecado no nos pueden tocar. Declaramos Padre Segunda de Timoteo 1:7: "Porque el Espíritu no nos ha dado espíritu de temor sino de amor y de una mente sana."

Señor en este momento declaramos lo que el Padre ha declarado en cada una de nosotras. Remueve todo temor oh Dios, remueve toda inseguridad pero llénanos de Tu Poder, llénanos de Tu amor y danos una mente estable Padre donde podamos tener nuestros pensamientos en Ti totalmente rendidos y entregados a Ti en el Nombre de Jesús te lo pedimos amén, amén y aleluya.

Gracias por esta oportunidad. Yo sé que Dios, puedo ver en sus rostros que Dios está haciendo y Dios simplemente está comenzando algo. Hay cita para terminar la segunda porción esto es como la medicina, nosotros recetamos antibióticos, yo soy asistente dental y a veces damos la receta y la gente se va y dos semanas más tarde vienen con la cara peor que como llegaron, pero ¿qué pasó no te tomaste los antibióticos? sí me los tomé por los primeros tres días y me sentía tan bien que dejé de tomármelos pero el médico no dice que esta es la única dosis.

Para las servidoras son tres dosis, está hoy, Octubre 19 yo creo que es cuando van a recibir estar en una mente, en un espíritu. Es importante que si vas a servir sea en una mente y en un espíritu y está Noviembre 9 y yo sé que lo que la Pastora decía: este año va a ser, no es llenarse por los números es que entre más mujeres más unción y yo no sé de ti pero yo no quiero un poquito de aceite, si es mucho de aceite yo quiero ver la plenitud de Dios. Yo voy a estar allí, yo voy a estar en ese lugar y yo me uno a tocar las puertas.

Y tenemos que decirles a las mujeres: hay cita, hay cita con Dios pero toma tu dosis en este día y deja que el Señor te complete la ministración de hoy para que estés preparada sea para el 19 o sea para el 9 pero Dios está haciendo grandes cosas a través de este ministerio. Yo, el año que comienza nuestro calendario de hijas comienza de Octubre a Septiembre y empezamos nuestro tema nuevo que es: Realiza.

Porque lo que sucede es que después de que Dios nos vacía y nos llena y nos hace algo interiormente Dios comienza a expresar por fuera para que otros vean lo que ya sucedió por dentro y pudimos tomar, teníamos una vasija grande en medio del altar y pudimos transformarla en una mujer porque sí tú eres no literalmente iba a decir en spanish pero figurativamente tú eres la vasija y nos podemos ver figurativamente como mujeres y ver la definición de Dios de nosotras pero cuando llegas a ver lo literal tenemos dificultad.

Pero Dios en este año esta Palabra Realizar tiene este el comienzo y el fin en la vez. Cuando te das cuenta: ay entiendo ahora pero cuando tú has completado algo a la misma vez es realizar y Dios está haciendo el Alfa y el Omega en nosotras. Dios nos llama vasijas pero también nos llama mujer y Él va a realizar en nosotras y yo le doy gracias a Dios por esta oportunidad porque entré por estas puertas años atrás como vasija y me siento mujer realizada. Yo sé que hay mucho más que Dios va a hacer pero mi oración es que en mi vida yo pueda demostrar en mi exterior todo lo que Dios está haciendo en lo interior porque es lindo lo que Dios puede hacer cuando tú te entregas en Sus Manos. Dios te bendiga.

Como respuesta al mensaje que Valerie trajo hoy ella hablaba de vasijas, yo sé que muchas veces porque yo lo he experimentado en mi propia vida. A veces como decía Valerie queremos que la vasija siga llena de aquéllo que está dentro de ella. Muchas veces es tristeza que no hemos superado, otras veces es amargura, es falta de perdón, tristeza por cualquier razón; tantas emociones que podríamos decir que están dentro de esa vasija pero yo sé que muchas veces pasa que queremos mantener la vasija así porque se ve, por fuera se ve de lo más bonita, no se ve fea la vasija, está brillosa, tiene buen esmalte, buen color.

Pero cuando miramos adentro nos damos cuenta de que de ella sale mal olor y todas hemos estado ahí. Yo recuerdo hace muchos años que yo creía que había perdonado a todo el mundo, que tenía que ser perdonada y en un día que yo me aparté así como hizo Valerie para encontrarme conmigo misma me di cuenta, el Señor me mostró cosas que me asustaron, ví una de las imágenes que Él me presentó fue una manzana, una manzana preciosa con el lustre de una manzana perfecta no había nada y como yo ví en mi mente, el Señor me habla mucho con imágenes aquí adentro, no las veo afuera pero aquí adentro son muy vívidas y las recuerdo muy bien.

El Señor fue así, yo miraba la manzana y me admiraba de qué bonita es la manzana porque entendí que era mi vida y la fue dando vuelta, vuelta, vuelta hasta que por un lado de la manzana había una parte que le faltaba piel y estaba podrida esa parte de la manzana y yo le dije: uh oh eso no es lo que yo quiero ver y mi mente enseguida quiso cerrarse a esa posibilidad de que yo tuviera que bregar con algo más profundo todavía y el Señor fue tan claro y me retó y yo estuve ahí en ese asiento con lucha.

Señor: ¿qué hago? no, no puedo he sido herida ahí no puedo, no quiero, no quiero, no quiero y el Señor me dijo: pero ¿qué tú quieres? ¿quieres seguir la vida con ese pedazo podrido? ¿qué es lo que pasa cuando en una manzana hay una parte podrida? exacto se pudre todo ¿verdad que sí? hasta adentro y no sé si a ustedes les ha pasado en el supermercado a veces uno compra una manzana que puede parecer preciosa y tiene un puntito nada más ¿qué pasa? vas a tu casa, la cortas por el centro y te das cuenta que está podrida por dentro y huele mal y jamás te la comerías.

Pues muchos de nosotros somos así, esa vasija está llena de esas cosas que no deben estar ahí y muchas veces nos aferramos porque es lo que conocemos y lo que nos hace sentir seguras pero en un momento tenemos que decir: hasta aquí ya no más, yo voy a vaciar esa agua sucia que está dentro de mi vasija y voy a permitir que el Señor la llene de algo bueno porque como decía Valerie, si tú haces eso, si tú te tomas el trabajo de cargar la vasija, inclinarla y botar lo que está dentro y después echarle cloro del Espíritu el Señor se va a encargar de darte un agua cristalina, fresca, saludable que te va a refrescar por dentro.

Entonces el llamado que yo quiero hacer es fíjense bien: solamente pasa al frente para oración, les voy a pedir a las coordinadoras Valerie y todas aquéllas que saben que ustedes ministran aquí en la Iglesia, solamente aquéllas, no por nada más pero solamente aquéllas que saben que se han aferrado a algo que saben que les están carcomiendo por dentro, algo que les impide crecer más allá. Algo que se ha convertido en un Dios en su vida.

A veces una vez el Señor me dió una Palabra para una hermana muy querida que ha tenido luchas muy terribles en su vida y lo que el Señor me mostró es que la amargura se había convertido en su marido. Imagínese eso: usted estar casada con la armagura qué cosa tan terrible y ella estaba casada con la amargura y no quería divorciarse de la amargura.

Vamos así solamente otra vez, pasen al frente solamente esas las que saben que eso que está ahí tiene vida propia, tiene identidad y tú lo conoces y decides vivir con eso. Yo he entendido que hasta que uno no hace eso entregar esa basura que tenemos adentro que todos la tenemos en un grado o en otro el Señor no puede hacer Su propósito perfecto en nosotras, es imposible porque el espacio está ocupado por una entidad y no me refiero a entidades demoníacas, no estoy hablando de eso pero es algo que tiene vida propia y nos hace cojear en la vida.

En vez de correr así sigilosamente y livianamente eso nos hace cojear y yo he entendido también que es un acto de la voluntad. Si tú no quieres no va a pasar, Dios no va a venir con una varita mágica y ¡tin! ¡oh! agua limpia, no. Él no obra así ¿saben por qué no obra así? porque Él nos respeta demasiado, Él nos respeta demasiado para hacer eso en nuestra vida. Él quiere que nosotros colaboremos con Él en todo incluyendo eso que tenemos adentro que necesita ser limpiado.