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Hoy, yo termino esta serie sobre los dones del Espíritu Santo específicamente, los dones del Espíritu Santo. De paso, mañana salgo para Puerto Rico. Voy a estar predicando allá en la iglesia Barbara Anne Rossler. Es la segunda vez que voy. Estuve allá hace como un año, más o menos, un año y algo, fue de gran bendición. Me invitaron a predicar otra vez y de hecho algunos de los hermanos allá, los pastores han estado viendo esta serie sobre el bautismo del Espíritu Santo, los dones del Espíritu Santo y me pidieron que predique allá también sobre este tema.
Así que oren para Dios use estas enseñanzas y que puedan ser de bendición para nuestros hermanos en Puerto Rico. Y quiero terminar en esta mañana con estos dos últimos dones que se registran aquí en el Capítulo 12, versículo 10. Hemos hablando últimamente entre otros dones: el hacer milagros, profecía, la última vez hablamos del discernimiento de espíritus, diacriseis neumaton, como dice en el griego original, discernimiento, separación de espíritus.
Y finalmente el Apóstol Pablo cita dos otros dones que entre todos los dones, porque recuerden que no son solamente estos dones los que señala la Biblia. Hay muchos otros dones en diferentes textos bíblicos, pero de esta lista que el Apóstol Pablo señala, hay dos más que dice:
“... a otro diversos géneros de lenguas....”
Gene gloson. Gene quiere decir géneros o familias o clases de lenguas. A otro diversas clases, o tipos o géneros de lenguas
“..... y a otro interpretación de lenguas...”
Hermeneia gloson. La palabra hermeneia de donde viene la palabra hermenéutica, que es interpretar, interpretación de lenguas.
Estos dos dones van como juntos, por eso el Apóstol Pablo, porque uno es el hablar en lenguas y otro interpretar esas lenguas. De nuevo, para los hermanos que son nuevos en la iglesia, los que no han estado siendo parte de esta serie que yo he estado predicando. Yo estoy hablando de este texto donde el Apóstol Pablo dice que el Espíritu Santo da a la iglesia diferentes aptitudes o dones o destrezas espirituales, podríamos llamarlas, para que se desempeñe la vida espiritual de la iglesia.
Son provisiones de poder específicas que Dios da y distribuye entre su pueblo para que su pueblo pueda moverse en una dimensión sobrenatural y que la iglesia pueda llevar a cabo las tareas que Dios le encomienda, para que la iglesia de Jesucristo pueda moverse como un ejército poderoso, un ejército dotado con poder sobrenatural. Y para que la iglesia pueda dirigirse a ciertas situaciones que puedan encontrarse en el desarrollo de su vida corporativa. Que la iglesia pueda a veces en situaciones de crisis o de necesidad, tener estos recursos espirituales para poder salir exitosamente de ellos. Para que la iglesia pueda impactar el mundo con manifestaciones específicas del poder sobrenatural de Dios. Para que la iglesia pueda en un sentido dar muestras al mundo de que sí ella tiene el respaldo divino, de que sí el espíritu de Dios se mueve dentro de ella, de que sí ella hace cosas que humanamente, si la iglesia no tuviera a Cristo y su espíritu dentro de ella, de otra manera no podría hacer. Para que la iglesia pueda competir efectivamente en un mundo donde tantos otros grupos, otras iglesias, otras religiones, otros dioses reclaman ser ellos los verdaderos, y entonces Dios ha provisto este poder espiritual que se manifiesta en diferentes maneras: en milagros, sanidades, revelación, profecía, sabiduría, conocimiento, todas estas diferentes cosas, discernimiento espiritual o discernimiento de espíritus. Y todos los demás dones que se mueven en la vida de la iglesia.
El Señor Jesucristo dijo, ‘.... pero recibiréis poder cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo....”
Y estos dones no se manifiestan en una persona a menos que no haya poder del Espíritu Santo, eso es bien importante que lo entendamos. Que estos no son cosas simplemente que se dan así por así. Hay una unción que se necesita en nuestra vida. De esa abundancia de unción, de esa abundancia del poder de Dios en nosotros, afloran estos dones y se manifiestan estos diferentes dones.
Ahora bien, el Apóstol Pablo señala estos últimos dos dones que dice que son diversos géneros de lenguas, es decir hay personas, hay ocasiones en la vida de la iglesia en que el don de lenguas se puede manifestar.
¿Cuántos han estado, de nuestras propias reuniones o en otra congregación, donde en un momento dado de la adoración, generalmente al final de la alabanza, alguien puede ponerse de pie y dar un mensaje en una lengua extraña que nadie entiende, y a veces puede haber un silencia y entonces puede haber un tiempo de espera? Y en otra parte de la congregación alguien surge e interpreta lo que esa persona acaba de decir y habla el equivalente, no el equivalente exacto, pero sí el mensaje contenido en lo que esa persona declaró. Y esto se supone que tenga el efecto de bendecir a la congregación, de fortalecer su fe, de edificarla en alguna manera.
Yo recuerdo hace más años de los que quiero recordar, hace específicamente 30 años, guau, 30 años en París, Francia, yo era estudiante. Estaba viviendo allá por unos meses en una casa de una familia francesa y estaba buscando una iglesia allá en París a la cual asistir y era una iglesia pentecostal, Asamblea de Dios, y en esa iglesia, en esa ciudad ultra sofisticada como lo es París, yo fui el primer domingo y para mi sorpresa durante el tiempo después de adoración alguien se puso de pie y habló en otra lengua, no era francés, habló en otra lengua. Hubo silencio en la congregación y después de eso hubo un ratito de espera, y otra persona habló en francés citando el equivalente del mensaje que la otra persona había expresado.
Yo recuerdo mi gran sentido de asombro y de sobrecogimiento cuando vi esto porque uno había crecido en un hogar cristiano, pero nunca había visto el don de lenguas manifestándose con esa elegancia, y con ese orden y en esa forma tan efectiva. Y eso me sirvió a mí de confirmación, porque hasta entonces yo en realidad no había visto las cosas de esa manera, manifestándose así. Recordaba sí, iglesias donde yo había ido y no era lengua tanto como lenguaraje. Había mucho ruido, mucho desorden a veces, muchas cosas pero esto fue algo diferente.
Yo, como conocía la Biblia, en mi mente hice una nota mental de que ¡ah! esto es lo que quiere decir el Apóstol Pablo cuando habla de las lenguas. Y yo fui tocado, fui impactado, fui bendecido. Mi espiritualidad fue fortalecida a través de esa experiencia en esa iglesia francesa. Y después seguí asistiendo allá mientras estuve en Francia con esos hermanos hermosos de esa congregación pentecostal.
Eso es lo que se supone que las lenguas tienen un propósito. Cuando se manifiestan como es debido, cuando se manifiestan en el contexto debido, en el orden adecuado, en la forma adecuada, hay una gran bendición. Y se supone que produzca un sentido en la congregación de que sí, Dios está con nosotros. Dios está en medio de nosotros y se ha manifestado la presencia de Dios y ha habido algo que resulta en edificación para su pueblo.
El Apóstol Pablo en el Capítulo 14 de Primera de Corintios habla bastante extensivamente acerca de cómo se deben manifestar los dones de lenguas en el contexto congregacional, en este contexto así, cuando la iglesia se reúne para adorar juntos. Y si usted nota en ese Capítulo 14 el Apóstol Pablo escribe más bien como para corregir ciertos excesos.
Uno nota que él no está escribiendo en una forma neutral, simplemente para instruir, sino que lo está haciendo para rectificar ciertos errores, para aclarar ciertas cosas que no están claras entre los hermanos concerniente al don de lenguas. Es como que había un poco de controversia y los hermanos quizás, le escribieron un email al Apóstol Pablo pidiéndole que les aclarara, ¿será esto así o no? Quizás el pastor de Corinto mismo quiso remitir su pregunta a alguien con más autoridad y más conocimiento y le preguntó al Apóstol Pablo cómo manejar esta situación en su iglesia. Y entonces el Apóstol Pablo escribe y es interesante, me gusta mucho a veces leer como el Apóstol Pablo escribe, no solamente para conocer lo que él está diciendo en sí, sino cómo él está razonando, porque según yo veo la forma en que él razona yo puedo aplicar entonces su razonamiento a otras situaciones de la vida cristiana también. Y eso es muy instructivo.
Pero antes de entrar directamente en este Capítulo 14 de Primera de corintios, que nos va a aclarar un poquito qué es en realidad el don de lenguas en el contexto de la vida de la iglesia, déjenme decir algo. Una pregunta sería, ¿por qué lenguas? ¿por qué ese fenómeno extraño de las lenguas? Y es más, antes que eso uno podría preguntar ¿qué es el fenómeno de las lenguas?
La Biblia nos habla, la primera manifestación de lenguas clara que nosotros tenemos en la Biblia se encuentra en Hechos, Capítulo 2, cuando el Espíritu Santo se derrama sobre los 120 que están en el aposento alto en el día de Pentecostés. Y dice que le fueron distribuidos lenguas como de fuego. Había como unas lenguas de fuego, pero también hubo lenguas, los discípulos fueron llenos del Espíritu Santo y de esa llenura, de esa sobreabundancia del Espíritu Santo dentro de ellos afloraron unas expresiones verbales que ellos mismos no entendían.
Pero como había en Jerusalén ese día judíos que venían de diferentes países, que habían llegado a Jerusalén para celebrar la fiesta de Pentecostés y que hablaban idiomas de los países donde ellos vivían, escucharon a estos cristianos por primera vez hablando lenguas, y descubrieron que los que venían de África podían entender a algunos de ellos, porque estaban hablando en ciertos idiomas africanos. Los que venían de otras partes del imperio Greco romano y tenían otros idiomas, descubrían que podían entender a algunos de ellos que estaban hablando su idioma. Y ellos decían, ¿pero cómo es esto, esta gente no ha salido jamás de Jerusalén, no son gente educada, y están hablando en nuestros idiomas? Y eso fue una gran señal de que el Reino de Dios había descendido con poder sobre la iglesia.
Ahora, fíjese, que eso fue una situación absolutamente excepcional, fue como para abrir las puertas de la comunicación divina a través de las lenguas. Y yo creo que eso requería como una señal muy especial, muy poderosa y por eso, yo creo, fue tan claro que lo que estaban hablando estos hombres eran lenguas humanas, porque Dios quería dar una señal en ese tiempo de que ‘Yo he venido a caer sobre toda carne, toda nación, toda nacionalidad, todo grupo étnico y por eso voy a dar mi mensaje en diferentes idiomas’.
De momento se dio allí unas Naciones Unidas donde toda la gente estaba hablando el mismo idioma. Es interesante, eso nos recuerda una cosa, ¿saben ustedes que en la torre de Babel, cuando Dios quiso confundir el orgullo del hombres, qué pasó? Antes los hombres hablaban un solo idioma y Dios confundió los idiomas, dice la Biblia, para que no se comunicaran entre sí bien.
Ahora, cuando viene Pentecostés, cuando el Espíritu Santo cae iniciando una nueva era, una nueva época en la historia de la humanidad, Dios hace lo contrario, como que unifica a los hombres para que puedan entenderse todos bien.
Entonces yo creo que hay lenguas que Dios da sobrenaturalmente a una persona o a personas que pueden ser lenguas de algún país de la tierra. El Apóstol Pablo habla de lenguas humanas y lenguas angélicas. En Primera de Corintios, Capítulo 3, él dice “.. si yo hablase lenguas humanas y angélicas y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena o címbalo que retiñe...”
Entonces, yo diría que entre otras cosas las lenguas son como una señal de parte de Dios de que él está comunicando algo en un idioma especial, está comunicando un mensaje especial sobrenatural, en un envase sobrenatural. Y Dios puede escoger hablar a través de una persona en un idioma reconocido humano, de una nación o puede ser un idioma sobrenatural, un idioma inventado por Dios en ese mismo momento.
¿Cuántos saben que Dios no tiene límite acerca de los idiomas que él puede inventarse? Y muchas veces Dios escoge como un idioma sacado de la caja, sacado del paquete, recién estrenado para comunicar un mensaje divino, un mensaje espiritual y Dios decide, ‘Yo no quiero usar un idioma ya usado, sino que voy a usar un idioma nuevecito’.
Cuando Cristo entra a Jerusalén él le dice a sus discípulos que consigan un pollino, ¿recuerdan ese pasaje? ¿Y cuál era uno de los distintivos de ese pollino? Que nadie lo había montado antes porque era especial. Ese pollino iba a tener al Hijo de Dios encima de él, y ese pollino iba a quedar retratado para el resto de los siglos, como que sobre ese pollino, ese asno había montado el Hijo de Dios y para tal jinete se necesitaba un caballito especial, no estrenado, ¿Verdad que sí? Porque donde Dios se monta tiene que ser nuevo. Dios no le gustan los carros usados.
Ahora, si usted tiene un carro usado, dele gloria a Dios por ello. Y si no lo quiere, regálemelo a mí que yo lo voy a coger. Pero algo tan importante como es Dios yo creo que a veces requiere un envase nuevo. Y yo creo que una de las cosas acerca de las lenguas es que cuando Dios quiere comunicar un mensaje espiritual, dice ¿saben qué? ‘Voy a usar un idioma que no sea el que tú usas vernacularmente, comúnmente’. Ese idioma que muchas veces, de vez en cuando de pillaste un dedito ahí con un martillo y se te salió algo, ¿te acuerdas? Así que no quiero que uses ese idioma, ahora quiero que uses algo que yo te voy a dar.
Entonces yo creo que muchas veces una lengua angelical, una lengua espiritual puede ser una manera en que Dios escoge una vasija nueva, única, consagrada para llevar a cabo su comunicación con un ser humano.
En segundo lugar, esto es bien importante, hay experiencias del corazón humano y del espíritu humano, hay sentimientos, hay impulsos y necesidades y sentimientos que son tan complejos que tratar de envasarlos en el idioma humano los empobrecería y los limitaría y se requiere un idioma que no esté atado a la razón, a la mente y a los vocablos que existen, que tienen sus propias limitaciones.
Yo quisiera que ustedes entendieran un poquito más, quizás algunos de ustedes, en términos de la lingüística, el estudio de los idiomas, y los que han estudiado lingüística, y los que han estudiado la naturaleza del idioma humano, de los idiomas humanos, y los que han estudiado por ejemplo poesía o literatura, pueden entender esto un poquito mejor y es que los poetas y los estudiosos de las lenguas, y hoy en día de hecho, el estudio de los idioma y de su naturaleza misma ha llegado a un nivel muy alto de sofisticación. Hay toda una rama de la filosofía hoy en día, es más, mucha de la filosofía moderna, por eso les digo, uno puede entrar tanto en estas cosas. A mí me fascinan porque ese es mi doctorado en literatura hispanoamericana y todo esto, y he tenido que estudiar mucha acerca de las lenguas y todo esto.
Pero hoy en día una buena rama, una buena parte de la filosofía moderna tiene que ver específicamente con lenguaje, con la naturaleza del lenguaje. De hecho, que eso hace que mucha de la filosofía moderna sea bastante estéril hasta técnica porque tiene que ver mucho con la naturaleza del lenguaje, simplemente cuáles son los términos, cuáles son las palabras, cómo se definen, y si el lenguaje es adecuado para decir las cosas o no. Y hay mucha duda, hoy en día, acerca de la capacidad del lenguaje para expresar verdaderamente la naturaleza de la vivencia humana.
Y por ejemplo, los grandes místicos también, los grandes místicos del pensamiento oriental, dicen que si tu puedes nombrar algo, ese algo no es lo absoluto. Si tu puedes nombrar a Dios, si tu puedes decir algo acerca de Dios, ya perdiste a Dios porque Dios es innombrable, Dios no puede ser expresado. Según algunos de los místicos lo único que cabe ante la presencia de lo divino es el silencio, porque el lenguaje humano no puede hacerle mella a la inmensidad de lo que es Dios.
Entonces, yo creo que hay experiencias, hay comunicaciones, hay interacciones del espíritu que para uno poder expresarlas plenamente entre yo y Dios, lo único que puede servir de intermediario es un lenguaje que pase por encima de la razón y que comunique directamente lo que está uno sintiendo. Y la mente no puede entender eso, ni el lenguaje lo puede hacer caber dentro de él.
Cada vocablo es simplemente una aproximación, es una vasija con una forma específica. La palabra casa es una palabra que dentro de esa palabra caben ciertas cosas, ciertas imágenes, ciertos objetos que se asemejan a una casa. Pero hay cosas que puede que sean parecidas a una casa, pero no son una casa, y entonces hay que usar otra palabra: hogar u otras palabras así por el estilo. Pero son vasijas que ya tienen una forma pero hay otros objetos que quizás son diferentes y no tenemos la palabra adecuado.
Hay sentimientos que quisiéramos expresarlos y no podemos. Vemos una puesta de sol con una belleza extraordinaria o una caída de agua en medio del bosque y quisiéramos.... ¿Cuántos han experimentado....? Yo quisiera tener la lengua de un poeta para expresar esto que estoy sintiendo, ¿no? Esto que estoy viendo, esto que estoy experimentando. Pero usted no lo tiene. ¿Saben qué? Ahí es donde las lenguas pueden, usted no tiene que preocuparse de qué palabras usar, usted simplemente abre su boca y deja que una cascada de sonidos exprese lo que usted está sintiendo por dentro.
Y esos sonidos expresan lo que su corazón siente. Desgraciadamente ese sonido es para usted solamente porque es un lenguaje privado. Desgraciadamente, es más, es tan privado ni su mente misma lo entiende, pero su corazón lo entiende, sus emociones lo entienden, su espíritu lo entiende. Facultades que usted ni siquiera conoce de usted mismo, lo entienden. Usted está verbalizando. Porque el lenguaje es eso, es simplemente sentimiento vertido en sonido, eso es, con la conveniencia adicional que con el paso de los siglos se ha hecho ya entendible a otros porque se han hecho ciertas equivalencias, se ha establecido una moneda que todos podemos usar y por lo tanto todos estamos de acuerdo en el valor de esa moneda.
Pero cuando uno quiere hablar en un lenguaje solamente puro, uno pone a un lado la moneda y simplemente suelta el sentimiento que está adentro a través de palabras. Eso, en mi opinión, es las lenguas. Son sentimientos y experiencias interiores expresados en un lenguaje privado, recién estrenado, sacado de la caja por el Espíritu Santo y todos nosotros podemos hacer eso en nuestra adoración.
Cuando usted esté ahí en su asiento y usted sienta algo que usted no quiere tener que estar buscando una palabra en español, mire, suelte su boca y hable en el idioma de Dios, hable en el idioma del espíritu y no se preocupe de que el hermano al lado suyo piense que va a llamar una ambulancia para que se lo lleven en una camisa de fuerza. Suéltelo en el nombre de Jesús. El que está loco es él o ella si duda que eso es de Dios.
Si usted tiene el Espíritu Santo dentro de su vida, y si usted ha recibido el toque del espíritu de Dios en su vida, usted tiene esa capacidad, lo que pasa es que tiene que simplemente dejar la vergüenza a un lado.
¿Sabe mucha gente dice, oh, yo no puedo hablar en lenguas? No es que usted no pueda hablar en lenguas, es que no puede soltarse. Ese es el problema. Pídale al Señor que usted pueda soltarse, es más, simplemente suéltese, tírese al agua. Hay mucha gente que está mirando el agua allí, ¿me tiro, no me tiro? Ojalá que viniera alguien y le diera un empujón y que se metiera de todas maneras. Yo quisiera darle un empujón a muchos de ustedes para que se soltaran y aprendieran lo que es soltarse y adorar al Señor. Abra su boca.
Yo veo a tantas personas a veces allí trinco, como decimos nosotros en buen dominicano, tan... no pueden ni siquiera alabar al Señor. Suelta tu boca. Glorifica al Señor, cántale al Señor pero también tu puedes hablar, tienes que ser como un niño y eso es lo más difícil para nosotros, comenzar a hablar en un lenguaje que no sabemos, no conocemos, no tenemos control.
Eso es otra cosa, yo creo que las lenguas ayudan porque nos obligan a soltar el control mental. Nosotros dependemos demasiado de la mente y las lenguas yo creo que son un ejercicio ideado por Dios para que el cristiano se ejercite en el uso de otras facultades, que no son la facultad mental. Y cuando usted aprende hablar en otro idioma espiritual, eso le hace también más ágil, es como un ejercicio espiritual que le estira un poco los músculos para que usted no sea tan rígido y que aprenda a fluir en el espíritu.
Se necesita un espíritu lúdico. Esa palabra quiere decir, es latina y quiere decir un espíritu de juego. Usted sabe que para moverse uno adecuadamente en la zona del espíritu uno tiene que tener un espíritu de juego, uno tiene que ser.... Cristo dijo, “... sin no os hacéis como niños no entraréis al Reino de los Cielos...”
El que no se hace como un niño no puede entrar en las grandes experiencias del Señor. ¿Quién puede danzar en el espíritu si no es una persona que tiene un espíritu de niño? Porque el que no tiene un espíritu de niño, el que tiene un espíritu demasiado adulto va a decir, ‘oh, me están mirando y estoy haciendo el ridículo, y qué van a decir; y ¿el Internet estará poniendo mi foto por ahí?’ O algo por el estilo ¿no? Usted tiene que ser como un niño, tiene que soltarse en el espíritu.
Mire, para cantar hay que ser como un niño, para pensar a un ser amado hay que ser como un niño. ¿Qué cosa más extraña que un beso? Dígame sí o no. Piense en eso. ¿Sabe cómo de dice, de hecho, beso en árabe? Mójame la bemba. Un beso es la cosa más extraña. De paso, en Iraquí, beso es, saliva va saliva viene.
Hermanos, hay tantas cosas que nosotros hacemos que si usted mira no tienen sentido y sin embargo cuánto placer deparan al ser humano. Mire el reírse, mire el llorar y verter lágrimas, qué cosa menos lógica que eso y sin embargo cuánto descanso le da al alma humana estas cosas. Mire el baile, la danza. Usted ha visto dos personas digamos, si usted las ve a través de una vitrina y no oye la música, bailando, qué cosa más ridícula: dos personas allí a todo lo que da, usted no escucha la música. Sin embargo la raza humana continuamente ha declarado la danza como uno de sus relajamientos más hermosos, más importantes. Hay millones y billones de dólares que se dedican a la danza de tantas maneras, al baile.
Son cosas que requieren un espíritu suelto, un espíritu juguetón, un espíritu de niño, y asimismo pasa con las lenguas. Dios quiere que tu sueltes tu espíritu interno y que tu hables en ese idioma. Eso está dentro de ti. El Apóstol Pablo dice que todos podemos profetizar, y yo diría también que todos podemos hablar en lenguas, eso está dentro de ti, pero tienes que soltarla. Hay gente que cree que para hablar en lenguas dicen, bueno, yo sí, yo estoy dispuesto a hablar en lenguas pero esperan como que venga un angelito chiquitito y le mueva la lengua y ellos puedan hablar en lenguas de esa manera. Y eso no es así.
Si yo quiero hablar en francés yo ahora mismo puedo comenzar a hablar en francés, o en español o en inglés. Yo no necesito una emoción para ponerme a hablar en esos idiomas. Simplemente en un acto de mi voluntad, una decisión que yo hago y asimismo es con las lenguas. A veces la gente cree que para hablar en lenguas uno tiene que estar en una especie de éxtasis y no es así.
La lengua es un recurso que Dios ha puesto en tu disposición para que tu puedas hablar y comunicarte con él en un idioma diferente, en una forma diferente, en una forma más suelta, más espontánea, más fluida, sin los límites de la razón y del lenguaje humano, y que tu puedas expresarle a él tu adoración, tu alabanza, y que en medio de una reunión congregacional si tu sientes que el Señor te está dando un mensaje espiritual o una expresión para él, que haya el espacio en la congregación y que esa persona pueda ponerse de pie y en orden y en control, porque la Biblia dice que el espíritu de los profetas está bajo el control de los profetas, esa persona pueda expresar claramente, y esa persona quizás no entenderá lo que está expresando.
Ahora, dice que si se habla en esa forma pública y deliberada entonces debe esperarse a que alguien interprete. Interpretación de lenguas quiere decir, la capacidad espiritualmente dada por Dios para interpretar, no traducir, palabra por palabra, pero interpretar lo que esa otra persona ha dicho en el espíritu.
Ni la persona que habla en el espíritu posiblemente entienda lo que está diciendo, ni la persona que interpreta en el espíritu posiblemente entienda racionalmente lo que está diciendo el otro, tiende espiritualmente.
Déjenme ponerlo de esta manera, cómo es esto de una interpretación que no es lo mismo. Muchas de las piezas de la música clásica expresan sentimientos y fenómenos específicos. Por ejemplo, hay piezas de la música que expresan la primavera, digamos ‘Las 4 estaciones’ de Vivaldi, que es una de las piezas preciosas de la música clásica mundial. Esa pieza de Vivaldi que es famosísima expresa primavera, verano, otoño e invierno. Cada uno de los 4 movimientos de esa pieza expresan cada uno una de las estaciones.
Ahora, usted escucha esa pieza y Vivaldi lo que hizo fue tomar lo que él entiende, por ejemplo, como el invierno, una nevada, y un viento fuerte y musicalmente él trata de poner en sonido musical lo que es el invierno.
¿Cómo expresa usted por medio de la música lo que es el invierno? Bueno, se puede hacer, es una interpretación del invierno vertida a la música. Y así es con la interpretación de lenguas. Lo que la persona está intuyendo cuando escucha la lengua es un sentimiento, es una impresión, es una energía que está emanando de la persona que está hablando en lenguas. Y esta persona que está interpretando está tratando de poner el equivalente de ese sentimiento que está siendo expresado entre Dios y esa persona a palabras humanas que la congregación entonces pueda atestiguar y ser edificada por ella.
¿Me estoy dando a entender? No es que esa persona está traduciendo palabra por palabra, está interpretando el sentimiento, está interpretando la esencia de la comunicación que se está dando entre Dios y ese individuo. Eso es lo que el Apóstol Pablo habla de que algunas personas reciben la capacidad para interpretar las lenguas, otros reciben la capacidad para hablar en lenguas.
Y, hermanos, yo les digo de nuevo, yo me he beneficiado a través de mi vida del don de lenguas. Ahora, yo comparto con el Apóstol Pablo, ni siquiera tuve tiempo de entrar en lo de Primera de Corintios, Capítulo 14, quizás en otro momento. Hay tanta tela que cortar de estas cosas, hermanos.
Pero, yo me he beneficiado a través de los años de hablar en lenguas y comparto con el Apóstol Pablo su entendimiento de que, sí, las lenguas son hermosas, son importantes, pero mire, no es que tampoco sean la última Coca Cola en el desierto. No es como que es absolutamente...., hay iglesias como que ponen las lenguas por allá, como que es lo último y lo más importante. Es algo bueno, hermoso, bello, útil, importante, pero hay otros dones también que son igualmente importantes.
El Apóstol Pablo dice que él prefiere hablar 5 palabras en español, entendible a nosotros que mil palabras que nadie pueda entenderlo. Fíjese, ¿por qué? Porque a Pablo lo que le interesaba era lo que edifica a la iglesia y yo creo que siempre, cualquier uso de cualquier don debe estar regido por eso: no es el guille de profeta que me da a mí, ni lo impresionante que yo sueno cuando estoy usando el don. No, es si eso redunda en bendición para el pueblo de Dios, si eso redunda en beneficio de alguna manera para alguien. Eso es lo que nosotros buscamos a través de los dones. Eso es lo que Dios quiere, no es simplemente uno hacer un show, es simplemente cómo bendice, cómo edifica.
La palabra edificación es bien importante con respecto a cualquiera de los dones. Dios ha dado los dones para edificación de la iglesia, y los dones tienen que edificar a la iglesia. Y los dones que más edifican deben ser los más valiosos de todos.
Por eso es que Pablo dice, si yo hablase lenguas humanas y angélicas y no tengo que amor, no me visto que no voy. Lo más importante es lo que bendice. ¿Qué bendice más que el amor? Dice Pablo.
Entonces, nosotros tenemos que ser.... por eso también ese pasaje, Primera de Corintios, Capítulo 14 dice, “....Hermanos, seamos niños para la malicia pero maduros en el entendimiento y en la sabiduría....”
Porque muchas veces la gente se come la cáscara del guineo y bota la carne del guineo, bota la fruta. Y hay iglesias que ponen tanto énfasis en lenguas y en esto y en lo otro que se olvidan de el carácter, del fruto del espíritu, de la edificación, de la doctrina, del crecimiento espiritual, de la transformación del yo, del evangelismo, de la belleza, de tantas otras áreas de la vida cristiana que son más importantes.
Pero las lenguas tienen su utilidad. Yo me he beneficiado. ¿Cómo me he beneficiado, cómo me he beneficiado y cómo se benefician? De nuevo, cuando hay expresiones en mi vida, hay momentos en que yo quiero hablarle a mi Dios libremente y simplemente él y yo estamos hablando. Yo no tengo que preocuparme de si suena bonito, de si no, simplemente suelto mi boca y suelto el hilo del lenguaje. Es como cuando uno se pone un pantalón ancho para estar en la casa y uno ruega que no entre visita ese día, ¿no? Y una camisa ancha porque uno quiere.... no voy a entrar en más detalles, uno quiere estar suelto completamente ¿verdad? Y simplemente uno está suelto.
Así pasa con el idioma. El idioma es una limitación y un día nosotros soltaremos nuestras alas y hablaremos con Dios directamente sin dificultades, sin limitaciones humanas y nada. Será un idioma angelical, divino sin ningún tipo de limitaciones. Mientras estamos aquí en la tierra podemos hacer eso mínimamente, sacando momentos para hablar con Dios en un idioma angelical, nuestro propio idioma. Nos ponemos una pantuflas lingüísticas y hablamos con el Señor libremente. Gloria a Dios.
Y eso usted lo puede hacer en su tiempo de adoración también, por fe, abra su boca. Quizás le saldrá una palabrita simplemente, pero poco a poco... ¿Cómo se desarrolla un idioma? ¿Cómo aprenden los niños a hablar? Comienzan, gu, gu, da, da y cuando usted viene a ver usted tiene que amarrarles la boca porque no quieren dejar de hablar. ¿Verdad? Y así pasa.
Nosotros tenemos que comenzar en el nombre del Señor dando balbuceos, solamente quizás saldrá un sonido, una palabrita, ratatata y cuando viene a ver estás hablando completamente, hasta hablando poemas en el espíritu porque Dios ha soltado tu lengua. Los dones se desarrollan usándolos.
Así que, comienza ahí en tu vida privada, pido a los músicos que pasen por favor.... en tu vida privada o simplemente ahí en tu tiempo de adoración, mientras la música está fluyendo y hay suficiente sonido alrededor que nadie se puede dar cuenta, en ese momento comienza a hablarle al Señor, comienza a desarrollar tu don, comienza a hablar palabras indecibles, dice el Apóstol Pablo, un lenguaje que solamente tu vas a entender, pero vas a encontrar gran beneficio de ello.
Yo he encontrado descanso para mi alma, he encontrado la capacidad para decirle a Dios cosas que de otra manera yo no podría decirle. He encontrado formas de orar por personas que a veces yo no sé si pedirle al Señor que le dé esto, le dé lo otro, lo saque de aquí, lo ponga allí, y lo que hago es simplemente, ‘bueno, Señor voy a orar en lengua y tu sabrás cómo interpretarlo.’
Muchas veces, la palabra dice que el espíritu ora con gemidos indecibles. En otras palabras, hay cosas que tu no sabes cómo expresarlas pero el Espíritu Santo dentro de ti va a expresar estas cosas en formas inusitadas, desacostumbradas. Y Dios que es el traductor por excelencia y el que conoce todos los idiomas va a poder interpretar lo que tu espíritu está orándole a él y podrá a entender.
Las lenguas hacen todas estas cosas. Es un ejercicio para el espíritu, es una forma de fortalecer nuestra mentalidad sobrenatural. Es una forma de deshacer esa dependencia que tenemos sobre la mente y la razón y es una forma de tener un pedacito del cielo cada uno de nosotros con nosotros, usando las lenguas.
Y si lo hacemos en contexto público, entonces debe pedirle al Señor la congregación que alguien pueda interpretar. Y de nuevo, esa interpretación será algo impresionista, que por fe también será ejercido.
¿Cuántos quieren que Dios manifieste ese don de lenguas en su vida? Eso es para ti, eso es para ti. Todo cristiano tiene derecho a usar el don de lenguas. Y yo les animo en el nombre de Jesús. Si usted ha recibido la llenura del Espíritu Santo en su vida, yo le pido en el nombre de Cristo, atrévase a usar su don y comience a fluir en ese don.
Vamos a ponernos de pie en el nombre de Jesús en esta mañana. Úselo en el contexto de la adoración. Eso es precioso. Cuando, por favor hermanos, comiencen allí un poquito a fluir, déjenme ustedes también. Vamos a ver si ustedes también pueden fluir ahora mismo, no practiquen nada, simplemente toquen ahí entre ustedes, todos, todos vamos a ver qué sale de ahí.
Porque también se puede hacer eso de muchas maneras. Sabe, los músicos hacen eso en el jazz, en la improvisación. Simplemente ellos se dejan llevar... eso lo entienden, todos los artistas saben lo que es esto de dejar hablar en un idioma que no está ensayado y simplemente seguir un guión, una cosita allí, un apoyito mínimo y entonces fluir y dejo. Eso es lo mismo, los hombres entienden, los artistas entienden eso de fluir, de hablar y soltarse. Nosotros podemos hacer lo mismo con nuestra boca ¿sabe? Usted puede cantar en el espíritu, usted puede hablar en el espíritu, usted puede orar en el espíritu, usted puede profetizar en el espíritu simplemente soltando, y usted puede escuchar, va a ser una melodía entre Dios y usted, como estos hermanos aquí están tocando así.
Si ellos lo hacen en fe, lo que ellos están tocando es una melodía que Dios y ellos entienden y que glorifica al Padre, ¿sabe? Cuando se consagran las cosas a Dios, y uno dice, ‘Padre, esto es para ti, este sonido es para ti, este cántico es para ti’, y cuando el alma dentro lo está consagrando al Señor, Dios sabe que está siendo consagrado a él y lo recibe como un incienso de olor suave ante su presencia.
Eso es lo que ellos están haciendo y tu pueden hacer lo mismo en tu propia lengua, calladito ahora mismo te pido, abre tu boca y pronuncia sonido, el sonido que te venga a la mente, conságraselo al Señor. Conságraselo ahora mismo al Señor.
Rabashanda aquí nia mosterebequirianantala. Oh, rebeshinia, Oh, querebe irrorronte terre bequí mashanala ra. Oh, requenderebe bequindia masu reantarabá. Uniala rayaba....
Quinamasó realcarabayínia macanda tara.
Pronuncia esas palabras en el idioma que te salga, los sonidos, dos, tres sonidos lo que te salga de tu boca. Atrévete en el nombre del Señor. Y cada dele la privacidad a cada cual que se merece, y suéltate en el nombre de Jesús y pruébalo ahí en tu casa mientras te estés bañando, mientras estés en tu cama antes de dormirte, cuando tengas un problema serio, cuando tengas una situación que no sabes cómo orarle al Señor, cuando haya una situación difícil en tu vida y no sabes qué pedirle al Señor, órale en una lengua especial.
“Abre tu boca, dice el Señor, y yo la llenaré.” Atrévete, just dare to pronounce the spirit. Let the spirit flow in you. Dare to flow in that spirit right now. And use those tongues in the name of Jesus. It is for you.
Puede que te sientas abochornado en un momento dado, pero eso es parte del proceso, porque si no eres como un niño, no puedes entrar en el Reino de los Cielos, si no te atreves a jugar como un niño no puedes recibir todo lo que Dios quiere.
Atrévete en el nombre del Señor. Pierde esa vergüenza y deja que el Espíritu Santo tome control de tu boca en esta mañana y practica esto hasta que te sueltes completamente. Y eso será un gran recurso para tu vida.
Oh Señor, te alabamos.
Arrabashalaco de raquírria a monte teirebe. Tenamashundere quereme sí corobajasorreante. Y na norea shalacaderrabacurria manta.
Oh, te adoramos, Señor. Glorifícate, Padre. Te bendecimos, Señor. Recibe este lenguaje, oh Dios. Recibe esta alabanza, Señor. Recibe esta adoración que te ofrecemos, Padre. Es para ti, Señor. Tu mereces lo mejor, tu mereces lo nuevo. Tu mereces lo no estrenado, Padre. Tu mereces las palabras de nuestra humillación. Tu mereces nuestro quebrantamiento, Señor, en esta mañana quitamos a un lado nuestra dignidad falsa, nuestro orgullo de hombres y mujeres y nos hacemos como niños delante de ti, Padre, y dejamos que tu espíritu nos inspire, y que tu espíritu nos dirija, Señor.
Se glorificado, se glorificado, se glorificado en nosotros, Señor, en esta mañana. Te adoramos. Eso es también, las lenguas ayudan mucho también a la sanidad emocional. Una persona que aprende a hablar en lenguas va a ser más sana emocionalmente. Si tu tienes problemas emocionales y tensiones en tus emociones, fluye en una lengua y háblale al Señor en una lengua desconocida y eso te va a traer sanidad también en el nombre de Jesús.
Gracias, Señor. Escucha esa melodía. Ellos están ahora mismo fluyendo en el espíritu y eso es para gloria del Señor. Ellos están tocando en su idioma musical y yo espero que nosotros hagamos más y más de eso, que haya música inspirada por el Espíritu Santo en medio de nosotros, que podamos fluir en el espíritu, que nuestros músicos, nuestros adoradores puedan fluir en el Espíritu Santo porque eso es lenguas, son lenguas musicales también que glorifican el nombre del Señor.
Oh, te adoramos, Señor. Te ofrecemos nuestra adoración. ¡Aleluya! Adora, profetízale al Señor, alaba el nombre del Señor, glorifícalo en cualquier idioma, incluyendo el español ahora mismo. Dale gloria a Dios. Démosle una alabanza al Señor, que fluya ese espíritu.
Let our spirit flow. Let the spirit of the Lord flow, right now, just express your words of blessing and praise and glory on to the Lord. We glorify you, Lord. We honor you, Jesus. We declare your lordship today. We declare that you are the King of our lives, that you are in control of all that we do and that we are, that you are the Master of every crisis, of every situation that we are facing, that you are in control, Father, that there is nothing in our life that happens out of your provision and your control and that we are secure in you, Jesus.
Te adoramos, Señor y te levantamos nuestra alabanza a ti, oh Dios, porque tu mereces toda la gloria y toda la honra, porque tu moriste en la cruz por nuestros pecados, y tu ganaste victoria para nosotros, y tu has muerto por las almas de este mundo y has puesto a tu iglesia para ser madre de las naciones y para proteger vida, y para sanar a los necesitados, y para proclamar la voluntad de Dios sobre la tierra, y nosotros hacemos eso, Padre en esta mañana. Y nos constituimos en tus portavoces.
Esta iglesia, Señor, se constituye en un instrumento para tu gloria. Nos convertimos, Señor, en herramientas que tu puedas usar para tu gloria en las naciones, en el nombre de Jesús declaramos que ningún poder humano, angelical, demoníaco está por encima del poder de Dios, que ninguna voluntad humana jamás podrá establecerse sobre lo que Dios ha declarado y que tú eres el Señor todavía y que tu avanzas irresistiblemente hasta llevar a cabo tus propósitos sobre la historia de la humanidad y te damos la gloria y la honra y te alabamos, y te bendecimos y declaramos que tu eres el Señor, que tu eres el Señor.
We declare that you are the Lord over all your creation. Alleluia! Yes.
Profetiza en el nombre del Señor y declara las grandezas de Dios. Dale gloria y honra al Señor. Profetiza delante de Dios en esta mañana. Profetiza delante del Altísimo y declara que él es, sobre toda autoridad, sobre todo nombre que se mueve en la tierra, sobre nombre que se nombra, él es el Señor, él es el Señor, él es el Señor. ¡Aleluya! ¡Aleluya!
Te glorificamos, Padre. Te alabamos, te bendecimos. Entregamos nuestras vidas a ti, Señor.
We yield our lives to you, Lord. We yield this church to you, Father in the name of Jesus. We declare that we are your property, oh Lord.
Somos tu propiedad, Señor. Somos tuyos, Señor para hacer de nosotros lo que tu quieras, oh Dios. Te rendimos nuestras vidas, Señor, las rendimos a tus pies, Padre, como un sacrificio vivo, nos entregamos a ti, Señor. Oh, te adoramos.
Bendito el que vive y reina para siempre. Gloria al nombre de Jesús. Pueblo de Dios, pueblo de Dios, muévete en el poder que Dios te ha dado, muévete en lo que Dios ha declarado, muévete en los dones, los recursos que Dios ha puesto a tu disposición. No desperdicies lo que Dios ha puesto en tu mano, no subestimes la importancia de ser un hombre, de ser una mujer llena del Espíritu Santo. No desperdicies esos regalos preciosos que Dios te ha dado, no dejes de usarlos, no dejes de moverte en ellos, no dejes de practicarlos por fe, no dependas de tu mente, no dependas de tus emociones, depende del espíritu que está dentro de ti, el espíritu de Dios siempre está dispuesto aunque tu carne quiera frenarte, recuerda que tu espíritu siempre desea estar en comunicación con Dios.
¡Aleluya! ¡Aleluya! Gracias, te adoramos, oh te bendecimos, Señor. Tú eres grande, tú eres digno de toda alabanza, de toda gloria. Oh gracias, gracias, Señor. Te alabamos, te glorificamos.
Oh, we worship you, Father. We revel in your presence, Lord. We cast ourselves into your waters, right now, Father and we swim like little babies, Father, like little children without any kind of restraints, with all abandon, Lord we submerge ourselves in your waters and we rejoice as we swim in your seas, Father, in your depths and we glory in your greatness, in your goodness. Heal us, Father. Heal us inside, heal us inside, Lord and we shall serve you always. Glory to the Lord. Alleluia!
Gloria al nombre del Señor. Santo es el Señor. ¡Aleluya! Denle un gran aplauso al Señor. Él es digno de toda alabanza, toda gloria, todo honor.